Alma y otros poemas

Alma y otros poemas ~R~NCl~CO MOLL~ MONTE~INO~ ~~ffiCl~CO MOLL~ MONTE~INO~ íllma_ y otros p oemas Cen su via je ) Edit a: Ayuntami ento de P etr el (Alicante) Inscrito en la Sociedad de Autores Españoles y el Registro de la Propiedad Intelectual Portada, aguafuertes y dibujo: MANUEL KA YSER ZAPATA MENGIBAR / 78 l. S. B. N. : 84 -500 - 4125 -2 Dé pós ito Legal : A -1002 -1980 Impr eso en, Gráficas Vidal-Leuka Van Dyck, 3 ALICANTE «Con temblor: Os estoy eternamente agradecido, a cuantos habéis hecho posible este libro» . Francisco Mollá PALABRASPROLOGALES ¿ Pero todavía quedan en este desbocado planeta, tan embotado de ambi ciones y tan aturdido de ramalazos materialistas, todavía quedan almas sen cillas, sumidas en la inefable vivencia de la Poesia? Sí, afortunadamente quedan aún poetas. «Existirá sin fin la Poesía ... » nos dijo -y acertaba- uno de nuestros buenos románticos, y existirán sin fin, naturalmente, los poetas. Cada uno de estos seres privilegiados, tocados por la varita mágica de la inspiración, tiene un encanto especial. No hay -no puede haberlos- dos poetas que nos ofrezcan una misma panorámica de galanuras del verbo y del espíritu. Pero podíamos agrupar a estos «elegídos de los dioses» en dos gran des coros de amplitud ecuménica: los que prefieren la brillantez a la sinceridad rebuscadores de metáforas extrañas, de fulmíneos epítetos y de prosopopeya deslumbrantes; y los que nos dicen sus cosas sencillamente, sinceramente, reflejando en sus versos transparentes esa belleza natural, eterna, divina, que a cada hora se nos está ofreciendo en la sonrisa y en la lágrima, en la nube y en la estrella, en el amor y el dolor. Mollá está, por la gracia de Dios, en este segundo coro de poesía univer sal. Nos dice él mismo que solamente es: «una estrofa de Amor del Himno Eterno» y con eso se clasifica y autodefine. Pero que nadie confunda la poesía de Mollá con los versos charangueros de los bardos mendicantes. Sin desprenderse de su clara sencillez, Mollá escala las altas cimas de una poesía inspirada. donde el amor y el dolor se confunden en un suave panteismo que todo lo impregna de deliciosas claridades. «abrazo mi dolor como un derecho» o cuando reitera, escarbando en sus honduras íntimas: «De sentir tanto amor como ya siento ¡se me torna una estrella cada herida!» El amor y el dolor, fundidos en el crisol de una entrañable sensación de gozo eterno, «donde el mal es tan sólo un recuerdo,» son el ritornelo delicado y persistente de este manantial de poesía. No le atormenta a Mollá como atrozmente le atormentaba a Unamuno y nos atormenta a casi todos los mortales, el misterio del más allá, la terrible in certidumbre de lo que habrá tras el telón inquietante de la muerte. Francisco Mollá se goza y se revuelca en la certeza de una eternidad radiante y maravi llosa: «yo no soy, hermanos mios, más que un beso que se aleja por las ondas de la vida sin dejar ninguna huella». Y lo mismo que nuestros místicos anhelan con mortales ansias el gozo de la vida futura hasta exclamar aquello de: «que muero porque no muero», también en los versos de Mollá encontramos ese rotundo anhelo que acucia a las almas profundamente inmersas en la divinidad: «me muero de premura y de impaciencia» . Un mundo de belleza resaltando en las cosas humildes; una irisación de divinidad emplviendo la miseria humana de cada hora; una tibia inmersión en el gozo de una eternidad insoslayable; un regusto de amor universal asequible a todas las almas sencillas. Eso es, lector, lo que encontrarás en este libro de versos. Con su lectura adquirirás, como el autor te lo dice , la gozosa conciencia de que «Eres chispa salida de Dios que regresas a Dios a través del Espacio y el Tiempo» . Juan Madrona Ibáñez FRAGMENTO DE UN JUICIO CRITICO PUBLICADO EN LA REVISTA «LA TRIBUNA» DE MONTEVIDEO, POR FRANCISCO FERRANDIZ ALBORZ, EN 1947 ... A Francisco Mollá Mon/esinos, lo conocíamos pulsando la fibra cor dial, evocador, de esas zonas sentimentales tan gratas a Schiller, en su preocu pación metafísica interrogando el Destino y teorizando sobre la vida y la muerte. Lo conocíamos en la selva fabulosa de los mitos espirituales, descen diendo luego a la fábula donde los animales se reunen en comicio, aparentan do virtudes y defectos humanos. Todo armonioso, emotivo, claro, sencillo, como manantial que unas veces se desliza sobre cauces de césped y otras de tierra pedregosa, pero permaneciendo siempre él mismo, sin que el duro cho que con la realidad empañe la transparencia de su curso. Pero un día, más tímido que nunca, nos ofrece un poema, «Alma», y aún dura en la nuestra el asombro de su lectura. Técnicamente se reduce a siete estrofas de versos decasílabos asonantes, el último, el octavo se libera y escapa a dieciseis sílabas, sin perder el ritmo, como queriendo lanzarse al Infinito .. . El conjunto es sencillamente una anatomía y un biografía poética del al ma. Un poema moderno por el ritmo y clásico por su elevación simbólica. Tiene a veces un tono de ligera declamación, diciendo: «vas inerme y sublime en la vida que te vuelve en dolor cada beso ... » La adjetivación «inerme y sublime» se repite en las estrofas como lei motiv de una preocupación taladrante en la conciencia del poeta. Otras veces el tono de un arabesco impresionista adorna el final de la estrofa. El alma es: «Hipsipila que sigue una luz de inefables destellos». El simbolismo de sus imágenes tiene una evocación de elemental rusticidad que se convierte, por virtud del sentimiento, en gracia exaltadora de cuanto de divino encierran las cosas sencillas: «Como grano de trigo que aspira -entregando al martirio su cuerpo de la muela insensible que ignora a ser hostia sagrada en el templo ... » O diciendo: «Como larva en la hoja oscilante que fraguara en silencio su empeño de esplender en un prima de luces unas alas que lleven al cielo ... » Y en todo momento es el verbo másculo, vibrante, denso en el pensa miento, profundo en su anhelo, armonioso en el ritmo, con un lirismo de má xima elevación y tensión espiritual. El alma aparece como imagen de las cosas esencia/es. Es flor, es riachuelo, es semilla, es larva, es lucero, y al final síntesis, perla de abismos y llama de horizontes fundidos en la eternidad del ser: «Eres chispa salida de Dios que regresas a Dios a través del Espacio y el Tiempo» . Mollá Montesinos es un enamorado de su tierra nativa, el pueblo de Petrel -Valle de E/da- con sus sierras de «El Cid» y valle de «Cati», a los que canta en apasionadas estrofas líricas, que algún dia verán la luz. La prin cipal influencia de su estilo procede de los líricos portugueses a los que leyó en su propio idioma durante su emigración en Brasil. Son sus preferidos Anthero de Quenta/ , Teixeira de Pasc6aes, Eugenio de Castro, Joáo de Deus. De ellos ha recibido la inconfundible saudade, su melancolía, su emotividad solidaria con los dolores del hombre , la palpitación de horizontes y paisajes interiores, y por magisterio de Guerra Junqueiro su indignación. Su condición de autodi dacta se ha transformado rápidamente , y en cada nuevo poema se acentúa su selección de léxico y se aquilata su inspiración , que sin dejar la raíz del senti miento , se eleva a creaciones de tan egregia estirpe como «Alma», bello, tanto por su contenido como por la gradación temática de los motivos, elevándose de lo sencillo a lo complejo en el arpegiado de cada estrofa y en la síntesis final de/poema. ¿ Qué será de nosotros? No lo sabemos, pero al considerar cómo se pier den , por la injusticia del medio, fuertes espíritus que, alentados y bien en cauzados, podrian ser orgullo de la cultura patria, momentáneamente nos de jamos abatir por la amargura y la indignación. Pero no hay que indignarse . «La ira al necio mata», dice Job. Sigamos el ejemplo de este sencillo y profundo poeta que es Francisco Mollá Montesinos . Del dolor de su corazón saca luz lírica para alivio de los hombres . Y ese es, indudablemente, el motivo de su buena calidad poética ; que sus poemas le brotan del corazón . Lo dijo Alfredo de Musset: «Golpea sobre tu cora zón, que ahí está el genio». Francisco Ferrándiz Alborz (Este traba jo -fragmento- lo escribió el 12 de julio de 1943 , en el Reformato rio de Adultos de Alicante , y lo publicó en «La Tribu na » de Monte video en 1947 .) ALMA (EN SU VIAJE) Como flor de increible pureza que naciera en un campo de brezos destinada a aromar los espinos que te juren desdichas de infierno, vas inerme y sublime en la Vida que te vuelve en dolor cada beso y que paga el amor de tu índole de luz y saudade, en pozos de odio profundos y tétricos ... Como azul riachuelo que sueña refrescar los manzanos del huerto para ser en la boca del hombre el sustento y su caro venero, y lo arrojan a estepas ingratas su frescor y humedad maldiciendo, vas inerme y sublime en la Vida ... derramando en la tierra el amor y sufriendo en silencio. Como grano de trigo que aspira -entregando al martirio su cuerpo de la muela insensible que ignora a ser hostia sagrada en el templo y se pierde en la arena quemante de un letal y sombrío desierto, vas inerme y sublime en la Vida ... ¡Hipsipila que sigue una luz de inefables destellos ... Como larva en la hoja oscilante que fraguara en silencio su empeño de esplender en un prisma de luces unas alas que lleven al Cielo; mas pasando, infeliz, las premuras del más lóbrego y gélido invierno, vas inerme y sublime en la Vida ... Mas serás mariposa de luz en jardines de ensueño ... 1 /ma _r 01ro . poema . 9 Como el arpa divina que anula el dolor con sus dulces acentos, y se ve abandonada en el polvo matizando en silencio su empeño, vas inerme y sublime en la Vida -¡Alma cara que nimba el Misterio! acuñando armonía recóndita, ¡embebida en la luz que se deja entrever de lo Inmenso! Cual deslumbra en la tarde enigmática emergente y sereno el lucero rutilando en las calmas remotas armonías de luz y misterio ... así vas en la vida del hombre anulando lo fosco del piélago: y aunque nubes extrañas te eclipsen, ¡seguirás derramando la luz por las rutas del Cielo ... ! Perla inmersa en abismos ingentes que brillar a la luz es tu anhelo. Llama blanca en la noche insondable, pululante en el piélago negro por hallar el resquicio que lleve a fundirte a los Soles Inmensos ... Eres chispa salida de Dios, que regresas a Dios a través del Espacio y el Tiempo. 10 A /ma y otros poe mo ., PAN «El pan es sentimiento» (F. F; Alborz) Oh, ruta de voluntades en via-crucis del alma, que muestras al sol la trémula floración de tu esmeralda. Eres canción de presencia. Verde júbilo de cañas. Sustancia de pensamiento. Bíblica fuente de Gracia. Grito de sangre y de espíritu. Voz de luz idealizada ... ¡ Ascensión de la materia a la altura de las lágrimas! ¡Pan! Sacrificio de vidas por ser nota y ser palabra. Sinfonía de la norma. Sustanciación de la Gracia ... El grano deja de ser y, no siendo en sí ya nada, es entonces en el todo pensamiento y vida y alma. La simiente, como Cristo, perece sacrificada por nosotros, y a nosotros viene en pan y en Hostia sacra. El es la divina carne que en carne nuestra se encarna ... ¡ El dolor y el sacrificio en rutas de la Esperanza ... ! ¡Oh, pan! ¡Dolor de Belleza! ¡ Evaporación de lágrimas! ¡ Base de vida y progreso! ¡Mensaje de Amor y Gracia! ..J lma _r otros poemas 11 LADRON DE VERSOS Del pico de los pájaros caían esos versos silvestres que ahora digo. (Abajo maduraba en oro el trigo. Las rojas amapolas se encendían.) Mis dedos presurosos recogían enjambres armoniosos sin testigo ... (Lo mismo era ladrón que era mendigo de las gracias que tiernas se expandían.) Por eso son mis versos de aire verde, rumorosos de pinos asombrados de la miel de los pájaros -¡tan pura!Que olvidando la pena que me muerde declaro de una vez, que son robados del estro inagotable de Natura. 12 . -1/ ma y otros ¡wemas QUISIERA ... Quisiera aprisionar en un soneto el sueño mineral de una turquesa opresa en el abismo fosco, opresa en el granito duro, opaco y prieto; el del lozano y lujurioso abeto radiante al sol y al viento su belleza; y la gracia creciente en la viveza que en el seno materno acciona el feto. Quisiera remontar mi inquieta mente las fuentes del Amor en su sentido fluyendo en nuestro espíritu, inmanente; penetrar el porqué desconocido de todo lo que vive oscuramente; el goce y el dolor y el hondo olvido ... 1 lma y o/ ros poema . 13 QUISIERA ... Quisiera, remontando la corriente llegar a donde nace alumbradora perennemente la divina Aurora ... ¡Arribar al prodigio de la Fuente! Paladear el azul delicuescente y la voz de la luz consoladora; bañarme en la mirada redentora que de la Altura llueve dulcemente ... Quisiera ... ¡Yo qué sé lo que quisiera! Lanzarme al mar del viento sin barrera y enmudecer en la divina Calma ... No morir de mirar tanta grandeza o, morir ahogado de belleza en el seno de Dios, vida del alma. 14 Alma y 0 1r os poemas CAMINO DE LA AURORA A la Aurora se va por el sendero impreso de rocío y de sonrisa; por cristales alegres de la brisa, por ignotas escalas del jilguero ... Con el beso asombrado del lucero que se iriza en el lirio, que se eriza; con la fuga de sombras ... Con la prisa de dejar en sus mieles el romero, subirán nuestros pasos sin premura, entre bojas doradas y amarillas y la voz amorosa de la Altura ... Y, cuando aflore el corazón de la hora se abrirá a nuestros pechos, sin orillas el prodigio anhelado de la Aurora. . --I lma y o rr ns poema ., 1;; MITO A las niñas Raquel, Finita y Carmencita. La niña miró a la luna rielar en la mar sonante, y quiso aquel diamante para su cabeza bruna. Y al inundarse en la ola que glauca y sonora hervía, se llenó de pedrería su cutis de caracola. La niña palmoteaba aljófares en la onda . .. Su cabellera, ya blonda, de misterios se llenaba ... ¡Ay, quién pudiera -decía hasta el cielo azul llegar, o, en la arenita del mar coger a la luna mía! Se oía la catarata sempiterna de los mares, y los lejanos pinares eran dulzuras de plata. Entonces, vió entre la espuma que coronaba al coloso nadar un ser misterioso y grácil como una pluma . Quedó la niña admirada ante tal aparición . ¿Será -se dice- un tritón o una nereida encantada? De no saberlo se apena . . . De pronto rizóse el mar .. . Empieza el ser a cantar y ella exclama : «¡Es la sirena!» lfj -Hma y oíros poemas ~i Es la sirena!» Y se clava al conjuro de su canto extática en el encanto ... ¡Está del hechizo esclava! La sirena canta, canta ... Durmióse el mar de repente. Y, la niña, dulcemente por un rayo se levanta ... Por un rayito de luna va ascendiendo hacia la nube; ingrávida sube, sube la niña en la noche bruna ... ¿Dónde fué la niña bella en alas de la armonía? La buscaron noche y día ... ¡Nunca más se supo de ella! . .J lma y 01 ros poemas 17 CON EL NIÑO EN LA SIERRA Me llevé el niñ.o a la sierra y reía como el agua, y cantaba como el pájaro, y miraba como el alba. Después, jugó con el sol, con el pájaro y el agua ... y entonces se me durmió -por no apartarse del alba-. Mi corazón fué otro pájaro .que de repente cantaba, que de repente se hundía por el azul de la Gracia ... ¡ Oh, cuánta inocencia junta, Dios mío ! Es un vaso mi alma que hoy se llena de Tu altura, que se colma y se derrama. 18 Alma _1· otros poemas LLEGADA DEL NIÑO Del Azul me ha caído una gota de luna ... Botoncito de almendro. Encantada sonrisa. ¿Queréis verlo? Venid, el alma de rodillas ... De ropajes del mundo desnudad vuestra vista. Limpiad el corazón de las nieblas malignas: Sea como la estrella de las mañanas límpidas. Acercaos a su cuna -cáliz de margarita; botoncito de almendro; gota de sol dormida-. El Cielo está en sus ojos. La Gracia en él habita ... Acercaos, acercaos, el alma de puntillas ... Vereis de Dios un ampo ... ¡Un niño! ¡Maravilla! Veréis que un niño tiene a Dios en la sonrisa. Alma y o/ ros poemas 19 VENIA EL NIÑO CONMIGO Venía el niño conmigo por los tempranos senderos. -De arriba de la montaña, ¿se puede tocar el cielo? -Subiendo a lo más alto alto, no será difícil eso. Trepamos a lo más alto. Vimos la mar a lo lejos ... Y, en el profundo horizonte se juntaba con el cielo ... -¿ Y si fuera por el mar, con un barquito ligero? -Puede que sí...por el mar. .. puede que sí, mi pequeño. Se quedó muy pensativo. Al cabo exclamaba serio: -Creo que amando al Señor, y siendo bueno, muy bueno ... -Eso es ... ¡Sí, sí...! Tú lo aciertas, mi pequeño. El niño se me durmió ... ¡Qué feliz era su sueño! 20 Alma y otros poemas ¡ERES MI MADRE! Porque me diste espíritu del tuyo; porque me diste sangre de tu sangre; porque me diste leche de tu pecho, ¡ Eres mi madre! Porque me diste vida de tu vida -gastándola en esfuerzos por criarme; porque besos y lágrimas reías, ¡ Eres mi madre! Porque me arrancaste de tu grito -de tu grito más hondo y entrañable mostrándome a la Aurora milagrosa, ¡ Eres mi madre! Porque envuelto en la llama de tu espíritu empecé entre las zarzas a guiarme -saudade de los cielos en tus manos,- ¡ Eres mi madre! Madre mía, ¡qué mundo más hermoso lograste con tu amor mostrarme! Ya aunque te alejes, no te alejas: Dios ha querido en mi espíritu guardarte . . - 1/ma y otros poema ., 21 TU QUE MIRAS TANTO EL CIELO Tú que miras tanto el cielo me envuelves en tu mirada; tú que amasas el pan rubio -esa lágrima celesteme envuelves en tu mirada; tú que cantas en el tiempo -voz de madre, voz de hermana, voz de esposa en los senderos, me envuelves en tu mirada . .. Tú que desatas los sueños por los caminos del alba, por los vértices azules inocentes de distancias ... Tú que lloraste en mi hoguera y la fundiste en tu llama, y en las borrascas del tiempo me devolviste la infancia ... Tú, que encantas los caminos con mansedumbre de Gracia, con bondad de trigo mártir, con ternura de parábola . .. . . . Tú que miras tanto el cielo me envuelves en tu mirada ... ¡ Parece que el Cielo todo me vas metiendo en el alma! Vibración de eternidad en la tierna llamarada de las fugaces estrellas de tu pupíla enigmática . .. ! 22 .· lima .r o tr os poe mm HE LEIDO EN TU CARTA ... He leido en tu carta: «Está todo florido. La huertecita nuestra de novia se ha vestido. ¡Si vieras el naranjo que recuerda a tu hermano! ¡ Si vieras los almendros, si vieras el manzano! Da gozo verlo todo ... También la hierbabuena retoza como antes cerca de la colmena. Renacen ya las ramas del mirto, deliciosas. Revientan ya las dalias y esplenden ya las rosas. La balsa está llenita por tanto que ha llovido. El árbol que plantaste está desconocido ... Los verdes verderones que crían en el laurel ya cantan en las tardes con dulzuras de miel. .. Y todo te recuerda; está de tí impregnado; parece que te aspiro en nuestro huerto amado ... » Me dices en tu carta que huele a rododendro, a hierba remojada y a botones de almendro ... Escucha, Justa amada: No me escribas así... Calcula que es muy triste ... ¡Ten lástima de mí! Alma y or ros poema ., · JANDIRA J andira va silenciosa por la fronda de naranjos; es de pluma, rosa, lirio, la ternura de sus pasos Va descalza y misteriosa ... la gramilla está soñando la caricia de sus dedos mimosos y sonrosados. Va avanzando leve, ingrávida, silente de cielos altos; por fin se detiene plácida a mirarse en un remanso ... Suelta al viento la cascada negra de su pelo largo ... Ve agitarse dos palomas en su pecho de alabastro. Divina como la estrella, desnuda su cuerpo blanco; se inmerge en la linfa clara como Leda, palpitando ... (Como nenúfar arcano, las dos islas de su pecho tiemblan ternuras flotando.) (Oh, Jandira, dulce náyade por quien Silio, suspirando fina ya su triste vida ... ) ¡ Es un pétalo en el lago! Silente albor, va emergiendo -corno del azul el astro se inunda en el beso blondo de un sol lujurioso y casto. 21 A /ma y ni ros poem as ... Por entre frondas dormidas tornan sus alados pasos; lleva en el alma cadencias de los panales rimados. Muere la tarde. El paisaje se oscurece en un desmayo: aparece el gran silencio de las estrellas temblando ... (La madre de Silio, apena cielo y tierra con su llanto.) Y, cuando la luna, mansa, se derrama sobre el campo, Jandira hiende imposibles con sus ojos enigmáticos . • ..f lma y 01ros potmas 2 -,) ¡OH, JANDIRA! La alegría del alba se posaba en sus cándidos ojos de gacela; por su piel pigmentada de canela un inquietante enigma transitaba. Su cuerpo núbil de misterio en vela como botón primaveral brotaba ; y, por donde su vista se clavaba dejaba dulce una celeste estela ... ¡Oh , recuerdo sin tiempo ni distancia en sueño convertido en su constancia, que me acompaña igual que mi latido! ¡ Oh, sueño de mis sueños! ¡ Oh criatura entre ángel y mujer ... tenue figura que llevo en lo esencial de mi sentido! 26 . 4/ma y o tr os poemas DELIA Y o quisiera leer tu pensamiento cuando estás en la tarde ensimismada; viajar en la luz de tu mirada al punto que te da ese encantamiento. Más allá del venero azul del viento, ¿A qué estrella remota, a qué morada te alejas en la tarde sosegada que te siento a mi lado y no te siento? Un ángel me pareces. Otras veces sólo mujer; pero mujer cabal por lo que amas y anhelas y padeces ... Pero siempre sereno manantial de amor, pues lo que tocas embelleces .. ¿Por qué humana, te muestras celestial? - li ma r o/ ros rwe m(n 27 CON EL ALMA EN LA MANO Yo no soy hermano páj aro, el que te tira las pi edra s, el que destruye tu nid o sin reparar en tu pena ... Yo no soy, árbol hermano, el que graba en tu corteza su corazón y su nombre sin reparar en tu pena ... Yo no soy, hermanos míos, el que la máquina inventa para talar a los bosques, para matar en la guerra. Yo no soy de los que mand an. Yo no soy de los que vedan. Yo no soy de los que juzgan. Yo no soy de los que merman. Y o no soy de los que rigen las riquezas de la Tierra; y hacen códigos y leyes que a los demás encadenan. Las leyes que yo venero Natura las manifiesta: ellas emcman de Dios, pues armonizan y crean. Soy una andante ignorancia que trabaja, canta, reza ... me dejo guiar por Dios, y por eso soy poeta. Yo no soy, hermanos míos, mas que un beso que se aleja por las ondas de la Vida sin dejar ninguna huella. 28 : ll mo y o/ro, · r1oe mas CANCION PARA LLAMAR EL SUEÑO «La vida es una canción para llamar el sueño.» (Hebbel). Cada cual de nosotros es un punto centrado en un lugar del Universo; cada cual de nosotros es un verso del poema milagroso del conjunto. La vida es un cantar a contrapunto formando la Armonía lo diverso; y diverso es el ser, llevando inmerso su Yo particular al Todo adjunto. Nacer es estrenarse en Alborada, en la Luz asombrada de su empeño, en la Luz permanente y encantada .. . Y vivir es andar -no importa el ceño Ignorada canción, siempre ignorada ... «Una canción para llamar el sueño.» Alma y of ros poemas 29 A UNA ALONDRA Oíd sobre el trigal, allá en la altura la alondra diluyendo su cuidado; el Orto la retiene enamorado y oculta en un topacio su figura. Jamás oyó la humana criatura tal mundo de armonía concertado; parece que cayera desgranado el Cielo en cataratas de Hermosura , .. Un ángel debe ser; pues, ¿quién podría integrar armonía a la Armonía’ sumido en arrecifes fulgurantes? Al Cielo contará nuestra tristeza ... ¡ Y a la Tierra, parábolas constantes en cascadas de amor y de belleza ... ! 30 Alma _r mros po emas A UNA ALONDRA Alondra matinal que del espacio ebria de azul y claridad del día derramas en la tierra tu armonía (que ajeno ignora el hombre y vive lacio.) Envuelta en un recóndito topacio ¡Oh, espíritu del Alba! lanzas pía arpegios de la cósmica eufonía, sumida en los cristales del Espacio .. . También en lo más hondo de mi alma existe un vasto azul, un cielo en calma y una alondra sutil que el vuelo tiende ... Inmersa en onda y luz, sus almos trinos aflora de los centros cristalinos ... ¡mas nada que es del mundo, lo comprende! . ilm a _1· mros poe ma s 31 LAMENTOS Como el agua quejumbrosa que en las simas de la sierra llora por no ver la luz peregrina de la estrella; Como el viento fugitivo que en el roquedal se estrella y su aflicción misteriosa sobre los riscos expresa, Así la lira enterrada en el fondo de la celda llora el dolor de su noche sobre un silencio de piedra. 32 Alma y 0 1r os poemas YO SE EL MARTIRIO DEL AGUA Y o sé el martirio del agua en abismos imposibles de la tierra sepultada ... Cúantos eternos caminos en las tinieblas heladas soñando salir a luz ... ¡Ser ternura de fontana! Dejar de ser tinta negra, y ser miel y oración diáfana; y acaso ascender al sol tras su beso enamorada ... Y ser sinfonía, y ser en el azul nube blanca, y riente frescor de lluvia y amapola y trigo y lágrima ... Yo sé su martirio, hermanos, porque otro igual sufre mi alma . . · llma y o/ros poemas SIETE LLAVES Mi pena se extendió como un pañuelo a la sombra y al sol de mi camino; siete llaves guardaban el destino de cautiva, celoso de mi duelo. El mundo no entrevió mi desconsuelo: era igual que un tesoro peregrino que irradiara en un fondo cristalino sin asomar al ventanal del suelo ... Siete abismos formaron la guarida; siete llaves guardaron la salida al cansancio del mundo ... ¿Para qué aumentar la tristeza a tanto frío? Si el dolor de los hombres era mío no quise el mío dar y lo guardé. :H . · 1 lma y ofros ¡wemas ARGONAUTAS DEL ENSUEÑO De distintas regiones, con variados matices siete vates se juntan; poetas infelices en los negros abismos de una misma prisión. De Menorca es el uno: pescador y romántico; el segundo andaluz: alma y prisma del cántico, y los otros de tierras predilectas del sol. ¡ Qué dolor, ver sus almas de destino armonioso deambulando en el antro del averno espantoso ocultando en su espíritu su saudade de luz! ¡Oh, Virgilio, que viste con el Dante divino que el Poeta padece con su propio destino el sufrir de otros hombres que perecen en cruz! El primero está preso por soñar la armonía; el segundo lo está por querer la alegría de su pueblo -que llora injusticia y desdén-. Y los otros están por el mismo delito: levantaron el alma por su pueblo en un grito ¡y si el pueblo sucumbe, mueren ellos también! Da tristeza mirarlos pensativos y serios con los ojos lejanos ... ¡Qué profundos misterios guardarán esas urnas de armonía y de amor! Toda el alma del pueblo sintetizan sus almas: los vaivenes del mundo; tempestades o calmas hallan eco en sus mares de oleaje interior. Petrus, cuenta su vida de argonauta idealista que marchó por las olas elevada la vista entre el flérnito bravo de los vientos del mar. Que le vio el viejo albatros de volar cadencioso sondeando el abismo colosal, misterioso, y volver a la aurora dando al aire un cantar. Moya, dice que joven, escanció la armonía en la copa divina de andaluza alegría y en el fuego sagrado de unos ojos de amor ... Y, cantó a Andalucía con su ritmo de zambra; celebró el sortilegio oriental de la Alharnbra corno bardo vernáculo, cual natal ruiseñor. Alma y 01ros poemas a ;; Jorge Llopis, el joven poeta delicado; de Alicante -el paisaje- eterno enamorado; admirador profundo de Miró y Azorín. Deambula tristezas y lágrimas amargas ... En sus hombros sensibles lleva todas las cargas de tantos infelices que padecen sin fin . Y Manuel Arabid, el poeta más fuerte: impasible a su sino, desafía a la muerte; «lo esencial para el hombre es su limpio ideal.» El hombre ha de actuar con segura firmeza: el lamento es inútil, baladí la tristeza. La verdad, la justicia, es para él lo crucial. ¡Y Ferrándiz Alborz! Imaginad a Apolo cautivo en el Averno, confiándole a Eolo, libérrimo distienda su armónico raudal de versos cenitales en todas direcciones -deleite de las almas, maná en los corazones-. ¡ Las nieblas no ensombrecen la fuerza sideral! ¡Y, Miguel!, el pastor de cabritas y estrellas. De «rayos incesantes», cuyos versos, centellas son y fuego brotándole ... ¡Volcán, su corazón! ¡Ved qué suerte la suya, ved qué negra ironía! A este aeda sublime, a este dios de armonía le condenan, ¡le obligan! a morir en prisión! Y Mollá, que nos cuenta con cadencias de exótico sus viajes de ensueño, los misterios del Trópico y la selva armoniosa del inmenso Brasil, da dolor observarle ocultar su tristeza ... Aunque él diga que «el vate cambia el mal en belleza» muestra el pájaro lírico que solloza sutil. .. ¡Pararrayos celestes, atalayas del mundo, que auscultais de la Vida el sentido profundo y captais los mensajes del oculto Poder! A la espalda llevais el insólito peso de la historia del hombre ... Alumbrais el progreso. Buceais el mañana. Disecais el ayer. Argonautas de ensueño, que marchais a la Aurora por un mar de tifones y resaca traidora, ¡ no temais la borrasca ni el embate del mar! Si llevais en la frente la sublime locura y el temblor en el alma de inefable ternura, es misión ... ¡y seguidla, de sufrir y cantar! R. de A. de Alicante, enero, 1942. Alma y otros poema s RESOLUCION Inútil que os prestéis a maltratarme si el rencor os corroe y el despecho, templado en el sufrir está mi pecho y mi cruz servirá para elevarme. Sereno el corazón; sin un adarme del odio bajo que aprisiona estrecho , abrazo mi dolor. .. ¡ como un derecho ! ya que Dios me lo da para salvarme ... Metedme en la prisión, clavadme en cruz; dadme de la amargura el vaso lleno ; haced de mí cual se hizo con Jesús ... Me veréis resurgir del bajo cieno nimbado el corazón de eterna luz . .. ¡No podreis evitar que sea bueno! Alma y Ofros ¡memas :n LO MISMO QUE AQUEL ARBOL ... «La vida sea un acto de veneración a Dios» Lo mismo que aquel árbol de la loma que la tormenta sufre y los hachazos, y en cambio a tanto mal, abre los brazos y al heridor envuelve en dulce aroma; Y, vive, porque cándida paloma encuentra protección de los flechazos en su ramaje; y luego blandos lazos donde arrulla el amor en caro idioma, Así también se muestra el alma pura: sin proferir siquiera un leve grito soporta de la vida tanto mal... Y, vive enamorada de la Altura -Como el árbol- de cara al Infinito ... ¡ Absorta en la Liturgia Universal! 38 F. Mollá .4 lma y 01ros poemas LA VIDA ES SURCO ABIERTO Tan sólo lo que das es tuyo para siempre. La Vida es surco abierto: Cuidarás lo que siembres, pues será la cosecha según fué la simiente. Si te dió cien por una, es que el alma, luciente, se ofrendó con el trigo en la tierra caliente ... Y por eso sonríe. Y por eso florece ... Que sólo lo que das es tuyo para siempre . .4 lma _1 · otros poemas 39 ASCENSION Los labios invisibles de los vientos hoy traen suavidad de rosa fresca, perfumes de romero y del pinar, mensajes de la sierra ... Traen azul del mar, azul; espuma y voz profunda de tormenta; y frío del abismo, augurio tétrico de las regiones negras... . Lamentos apremiantes de cuitados autómatas de guerra que, al perecer, derraman en los vientos surtidores de penas que, agrándanse en palmeras incorpóreas por el hinchado vientre de la Esfera, formando torbellinos de ondas álgidas, de penetrantes flechas ... Hoy siento voces hondas de misterio. Oraciones secretas. Ignotos cuchicheos en idiomas que sólo mi otro Y o los interpreta ... Hoy noto que mi cuerpo se eteriza y anúlase en vorágines espesas, y el alma va encontrando su camino en planos armoniosos de la Senda ... Así llega la noche ... Y, en mi celda, a la par que inundando va la sombra creciendo lentamente negra, negra, las voces de otros tiempos se dilatan en ondas de ternura blanca, célica ... ¿Son cantos que ya fueron, o son música del devenir remoto, que me llega por inefab~es surtidores de alma cuando el día del alma ya clarea? lO A /ma y · or ros poemas De pronto, veo luces sin color y la noche del tiempo pierdo ... ... Vuelan figuras sin edad y errantes eclosiones de luciérnagas ... Me siento sólo fuerza. Fuerza mía inmersa en la total pujanza eterna: (Aspecto del conjunto con mi Yo, que vive en sí mas con el Todo alienta ... ) Entonces, soy amor, amor de espíritu templado en el crisol de las tormentas; y acláranse a mi vista las distancias del Tiempo, del Espacio y de la Senda. Soy sentimiento y júbilo radioso ... . . . Percibo la llamada de una estrella y salgo hacia el Azul... ¿En dónde el Norte? Timón de voluntad raudo me lleva ... Navego, subo, subo ... Asciendo por un mar de linfa negra ... Vorágines de sombras congeladas en espirales densas ... Asciendo ... Torpedo perforando las tinieblas, hendiendo las distancias nebulosas, que empañan las pupilas de la Tierra ... ¡ Cono de sombras lívidas! ¡Mar insondable y densa! ¡ Fermento misterioso de los soles futuros, que el Arcano esbatimenta en voluntad, en movimiento fosco, en torbellino algente ... ! ¡ Fuerza ciega bullente, en el camino de lo ignífero, de la luz, del color, de la materia radiosa del espíritu, que es voz consciente, pensamiento vivo, fuerza armoniosa y estrella de partida hacia la Luz de Beatitud Eterna ... ! .-U ma y o/ ros poe mas 11 Ahora desciendo ... Se ve en el horizonte la serena iniciación de un alba iridiscente y trémula ... Bajo -bajo ascendiendo siempre,- llego ... ¿Adónde, adónde? ¡Luz! ¡Luz! ¡ Deslumbramiento inenarrable ... ! ¡ ¡Alba nueva!! ¡¡¡LUZ!!! ¡Oh Fuentes de la Vida Sempiterna! Amor que nos creó y nos lleva a El... Bendito sea. Bel)dito sea. BENDITO SEA ... (De pronto me acordé que estaba muy enfermo allá en la Tierra, que no podía más con la pesada cruz y mis cadenas ... Y en Dios abandoné mi desvalido cuerpo ... (¡Que fué rompeolas de tragedias!) Ahora soy la chispa que busca el Mar de Luz como falena ... ) 12 Alma y arras poemas LA SIEMBRA Bajo el naciente sol, tras los cansinos bueyes que andan arando mansamente echando van al surco la simiente alegres, los sencillos campesinos. Sus sueños son remotos y divinos ... Ya ven la rubia mies; ven el presente del Cielo: la cosecha providente, miel de ternura y paz en sus destinos ... Mas, yo que sé de amargas odiseas, lanzo al aire mis sueños increíbles, mis ansias de Infinito, . mis ideas .. . Como soy sembrador de inmarcesibles simientes, no tendré rubias preseas ... ¡Ay , seré un cosechero de imposibles! .--lima y o tr os poema s BENDITOS SEAN LOS BOSQUES Benditos sean los bosques, porque cada madrugada se despojan de las sombras y desnudos se levantan. Abren sus vibrantes copas y el sol en ellas escancia toda la verdad en luz, en vida, en belleza, en gracia . .. Corno los peces, las hojas en el mar del aire nadan ... Y los pájaros son ángeles que descienden a las ramas, sus picos en la Armonía y el enigma en sus gargantas. El rocío escala el beso hasta las regiones áureas , y la alon dra raya el disco azul de la madrugada . .. Benditos sean los bosques, los bosques llenos de gracia. Al ma y orr os poem as OLIVOS DE MI TIERRA A D. Juan Madrona Olivos de mi tierra, redondos y enlutados abriendo hacia el Azul vuestros místicos vasos. Bendiciones vivientes cuajadas de silencios. Oraciones dormidas en los brazos del Tiempo. Vuestras ramas platean deleites del Estío, donde el sol cristaliza sus ósculos divinos ... y se abren vuestros brazos en fraternales gestos brindando beatitud al cuitado viajero ... Olivos envueltos en sudarios de luna, felices de ocultar la inocente ternura de los nidos dormidos -armonía latente- Y sentir el Misterio en la entraña de aceite. Vosotros sois mi infancia en la vejez del mundo ... ¡Oh, días apretados de emoción en tumulto ... ! Si el abuelo contaba el drama de su vida, entre olivos vernáculos mi mente lo veía. Si la Pasión, la abuela, empezaba a narrar, os veía entre inocentes humos de amor y paz ... ... Yendo a Jerusalén -¡Oh, añorante emoción! unidos con las pa lmas, simbolizando amor. Y en el huerto sedante donde oró Jesucristo, llorando silenciosos ... ¡Oh, místicos olivos cargados de añoranzas y nimbados de paz, vosotros sois mi cuna, mi ensueño, mi altar! -l l11w y orros poemm HERMANO ARBOL A mi padre que tanto amó a la Naturaleza El árbol es el más vivo y perenne ejemplo para el hombre. Aunque nace del suelo, se afirma en él, sus raíces buscan ávidas las riquezas para su nutrición, su copa se eleva siempre abierta hacia la serenidad azul del Infinito ... Sus brazos se abren como para abrazar a las criaturas. Proyecta una sombra, para cobijar a malos y a buenos. Da una fronda, para armonizarse de ternura de nidos y melodías de cantos. Sus hojas se mueven en el vacío, a la blanda caricia del Céfiro, como pececitos en las tersas linfas del mar. Como gotas de sol dormidas, cuajadas, encantadas, sus frutos aparecen incrustados en las extremidades de sus manos -sí, de sus manos- prontas a ofrecerlos, a ofrendarlos ... Redondos, angulosos, alargados, jugosos. Sabores que recorren la gama que Dios imaginó en el Universo. Aromas avivantes, recónditos, que recuerdan al ser su procedencia del Paraíso. Cerúleos, de ternura femenina. Dulces, con plenitud de cénit y de madre. Todos los colores del prisma en su cuerpo a través de las horas. Toda la escala, en la temática graduación armónica del pentágrama universal. Sus efluvios serán nuestro espíritu . Sus jugos, nuestra sangre y la de nuestros hijos. El árbol es hermano nuestro y Dios lo creó antes. Y, al contrario del hombre que maldice, él aroma cuando se le hiere. ¿Cuándo amaremos y veneraremos bien este presente del Cielo? El sufrió el martirio antes que el Redentor: ¿No hubo que cortarle para hacer la Cruz? Los clavos que traspasaban la inmarcesible carne del Señor, ¿no se hundían también en su cuerpo? Jesús y su padre ;terrenal, San José, le habían amado mucho. Eran carpinteros. -tG . ’i /ma y m ros [!O(’IIWS Si en sus ramas se aduerme el aire, como un pájaro, y se ensalman de ternuras de nidos, de su embalsamado cuerpo se hacen las cunas, donde se duerme y sueña la inocencia de los ángeles. De él se extraen las vigas y se construyen pilares de la morada de los hombres. Los lechos para el descanso, el amor, la nacencia y la muerte .. . De su cuerpo martirizado, se hacen naos , carabelas de la fantasía hecha realidad, como profecía, antelación de la verdad. Violines y vihuelas cuajadas de poesía, misterio y brujería ... El estuche de las ilusiones. El cofre de los recuerdos. Y el ataúd . .. que un día guardará el cuerpo del hombre en un hueco tibio de la madre tierra. . --l ima y mros poemas t7 AQUI ME QUEDAR/A ... Aquí me quedáría, porque hay árboles y pájaros sencillos, y silencios vibrantes y atardeceres místicos. Aquí me quedaría, porque hay juncos a la orilla del agua -espejo vivo y blando que las nubes retrata-. Aquí me quedaría como el pájaro. Me enamora esta tierra dulce y cálida -¡Oh, regazo entrañable!para vivir mis sueños, para dormir mi sueño hondo y amable .. . Aquí me quedaría enredado en las hojas como el aire. 48 Alma y mros poemas ME DORMI CON EL ARBOL Me dormí con el árbol y en su sueño remonté sus estrellas bien amadas; regiones inefables donde el Tiempo dormido en la Armonía no contaba. En esas correrías ideales también nos encontramos a otras almas de pájaros, de árboles, de poetas y niños maltratados que soñaban ... Almas puras y dulces y sensibles que las libera el sueño, y vuelan, vuelan . .. a veces penetrando la Armonía, ¡ Y siempre la Armonía las penetra! . --l ima y OErO. poema., · 49 CANTO AL HOGAR Piensa la esposa en el hogar sencillo en su hombre fuerte, que en el campo próvido labra la tierra, mientras canta alegre siguiendo el paso de su yunta mansa. Se ve bañado por el sol del Orto y entre una nube de gaviotas blancas, el pecho fuerte sobre el viento erguido, los ojos dulces por el sueño claro ... Vendrá a la noche -en su interior se dice, Y un beso puro engarzará en mi frente; al hijo nuestro elevará en sus brazos, como mostrándolo al Arcano Azul. .. Vendrá cansado del bregar del día, vendrá sediento del calor del nid9; y, yo, su esposa, con el alma trémula pondré en su pecho mi ternura casta. Trina la alondra bajo un haz de luces. Suena en los juncos el violín del Céfiro. Y el hombre sueña mientras labra y can.ta siguiendo el ritmo de los bueyes mansos. Van de su frente hacia la madre tierra gotas ardientes de sudor honrado; y hacia los cielos se levantan dulces las bendiciones de su noble pecho ... .. . «Vendrán los trigos como un mar dorado; vendrán los cantos en las eras blancas; serán las risas en el lar caliente el justo premio de mi esfuerzo noble.» ¡ Feliz el hombre a quien sorprende el Orto labrando libre en la llanura parda, mientras le esperan en el tibio hogar la casta esposa y el hijito amado! 50 .4 lma y 01 ros poemas PAZ Caminando va la paz ... El labriego está en el llano -surco fresco, fresca yerba, mansos bueyes, viejo arado-. Caminando va la paz. Pasa un jilguero cantando. Ríe el aire en la olivera. Gime el agua en el regato. El sol derrama su fuerza tornando los valles áureos. La niña canta en el río ... Linfa y alma: dos remansos. Una gran beatitud asciende al cielo temblando ... De arriba llueve la gracia y la paz, todo inundándolo. Alnw y otros ¡wemw ;;1 CON ALMA VAGABUNDA Al Padre F. Espinosa Con alma vagabunda salí por el sendero. El sol espumeaba los floridos almendros. El aire andaba loco de perfumados besos. Del árbol descendía un clamor de jilgueros. Sentía que el azul se adentraba en mi pecho. Era una sensación de respirar los cielos ... No pude contener el enjambre de adentro Que salió al colmenar que endulza el Universo ... Salió con alas dúctiles, con alas que eran versos Con medida en la forma, sin medida en el vuelo ... . . . Descendía la paz. Respiraba el silencio. Acallé el corazón. Ahuyenté el pensamiento De la vida y del mundo ... Entonces fue el momento De entrever la Belleza que es del hombre un misterio ... El tiempo que pasé -no importa nada el tiempoNo supe. Al despertar rezaba El Padre Nuestro ... . .. Regresaba en la tarde. Era malva el silencio. El jilguero cantaba en la paz del sendero. :;2 A /1110 y otros poemas LOM/0 Mío es el sol, pleno, hermoso, que dignifica mi cuerpo; lo envuelve en la gracia cósmica como un fruto verdadero. Mío el azul blando y riente de las estrellas del viento en mi sangre y en mi vida y en la carne de mis versos. Mía la sal de mis lágrimas; y el pan que me llega trémulo de oro, fatiga y dulzura por ley de mi propio esfuerzo. Mía el agua de mi boca; mía la cal de mis huesos; y las llagas de mis plantas; y el barro de mis deseos .. . Mío el peso de mi cruz .. . Mío el instante supremo de dejar lo que no es mío -que prestad .o me lo dieron para las pruebas del mundo y proseguir el sendero. Alm a y otros poe mas ESTOY CON EL QUE SIEMBRA ... Estoy con el que siembra y coge el trigo. Su esfuerzo es en la tierra alumbramiento. Sudor que se convierte en sacramento, Sacrificio de paz, labor de amigo. El hombre encuentra verdadero abrigo si a la tierra se da en florecimiento, y sigue el inmanente llamamiento de la divina voz que va consigo. Me voy con el que cuaja primaveras amasando el sudor en sol y lluvia y duerme encantamientos en las eras. Y deja tras de sí la firme huella de trocar el dolor en alba fulvia, con los ojos del niño y de la estrella. 5-t Alma y u rros poemas MIENTRAS LAMEN LA PLAYA ... Mientras lamen la playa las lenguas de la mar el tiempo fatigando, cansando el movimiento, observo de tus pies las conchas delicadas acariciando el beso, el oro iluminado. Tus ojos son de mar, estrellas apremiantes . .. Misteriosas fogatas que abrasan el espíritu . Que hielan el espíritu y lo abrasan ... Tus ojos son abismos y son dos faros verdes. Al aire tus cabellos donde florece el sol. Y el ritmo de onda plácida gritando en tus caderas ... Mis ojos se esclavizan detrás de tu armonía, como si fueses tú el alma de la mar. El mar y tú me fuerzan a estornudar el alma : (El flémito instintivo y el orbe de belleza me dan el equilibrio; las alas para el vuelo, el vuelo por la Tierra con rumbo al Infinito .) .--l l ma y orros poema ., DEL MISMO TRONCO SOMOS ... ¡Del mismo tronco somos, del mismo tronco antiguo; y más que piedra, encina; y más que encina, viento ; y más que viento, mente; pensamiento lumínico .. . ! Y todo en surtidor emanando del Verbo. Venimos de los tiempos, de la esencia sin pausa ... Por eso, hay en tus ojos divinos resplandores . Eléctricos milagros, simientes en tus besos; y el pan -estrella rubia -tu sangre floreciendo . .. ¡Mira si somos viejos! En corimbos floridos ven imos día a día , eslabón a eslabón, en cadenas eternas -mas efímeras cumbres lloviendo nuestra sangre los bosques de la Vida. Dame la dulce sal del botón de tu boca -solar escalofrío, marino fuego puro; subamos enlazados en armonía ardiente po r el antiguo tronco a la luz de la Vida. .-! /ma y 0 1ros poem as INVITACION AL CANTO «El poeta procede de lo humano, pero sirve a lo divino: su existencia es una misión.» Ya es hora de cantar, oh nuevos bardos, todos a coro en comunión fraterna. Que se oigan nuestras almas enlazadas por toda la cintura de la Tierra. No importa nuestra raza ni el color: la estrofa universal fluya serena de todos nuestros pechos. Nuestros brazos meridianos de amor, al vacuo extiendan ... De paz, nuestra mirada, en la que transparente el alma buena; nuestras palabras, palomas en lo azul volando sean ... Abiertas a la entrega nuestras manos; abiertas como el día en su pureza. España es voz del pueblo comprendiendo, y pide con amor se le comprenda. ¡Cantemos! Nuestra voz humana alcemos al viento, al mar, al sol y a las estrellas ... El Orbe saturemos de alma clara, de esta alma depurada en las tormentas. A través de los mares y los vientos, bajo el palio del cielo, en la presencia de Dios, juremos todos · no provocar ni secundar más guerras. Desterremos los mitos sanguinarios; destruyamos las trabas, las barreras y al himno del trabajo y el Amor unámonos los seres de la Tierra ... Stefan Zweig (Que Aquel que vino al mundo a dar ejemplo, y murió perdonando la ceguera, y a través de los siglos nos ha visto como Caín y Abel; por fin nos vea .--l ima _1· otros poemas ;;7 por la escala del tiempo y por el prisma armónico del bosque de la idea, discurrir como hermanos, por la luz, prendiendo corazón e inteligencia ... ) ¡ Cantemos el gran himno de la Paz al viento, al mar, al sol y a las estrellas! El efluvio de Amor invada toda la Rosa de los Vientos de la Tierra. Formemos corazón con corazón, alrededor del mundo una cadena: las de hierro y oprobio saltarán derretidas al fuego de las nuestras ... Pongamos luz del alma en nuestra voz. La Historia ante el futuro nos contempla. Si el Mensaje nos llega, derramémoslo por toda la cintura de la Tierra ... Que es hora de cantar, oh nuevos bardos, con la virgínea voz de la Nueva Era ... Que el progreso se incline hacia el Amor, ¡es la sacra misión de los Poetas! 58 .4 /ma y otros poemas EXCURSION A Osear Ortega La brisa matinal besó mi frente al salir del poblado; y en la brisa había efluvio y pluma y verso y risa y aliento divinal delicuescente . Florecía el almendro. Por Oriente la luz se columpiaba en la cornisa de la Silla del Cid. LLamando a misa tañía una campana tiernamente . .. Ascendí a lo más alto. El horizonte en brazos de la bruma se dormía ... Los valles eran juegos de arrebol. Un misterio flotaba por el monte ... La Gracia Sideral se derretía en cascadas olímpicas de sol. La distancia -cristal- se tornasola en la testa del Orto iridiscente. En el viento se oculta una vehemente acústica sutil de caracola. El alma se satura -Ola tras oladel alma del paisaje ... Hay un ambiente para morir de Azul... Pero se siente que el flémito del Tiempo se interpola ... Descendemos al llano. Nos invade -en crescendo cromático del planola sombra de la Vida abierta en Cruz ... Cual lágrima radiante de saudade asciende el alma con fer vor arcano del fondo del dolor hacia la lu z. Alma _1· otros poemas :rn BENDITO SEA ESTE VALLE Bendito una y mil veces el paisaje que encontraron mis ojos al abrirse en la cuna amorosa de este valle. La voz de cañ.a dulce en tibia aurora en el grito exaltado de mi madre; el sol de luz ardiente en cielo azul y el juego en un mosaico de bancales, con viñ.edos rientes de uva de ámbar y pomares dormidos en la tarde ... ¡Oh, canciones doradas .. . Los jilgueros volando en los paraísos de los árboles! Y los montes -el Verbo hecho granito sepultando los tiempos incesantesTodo nuevo a mis ojos cada día; todo nuevo en lo viejo, en lo inmutable ... Los peñ.ascos saliendo de la niebla en húmedas mañ.anas invernales, mostrando su desnudo azul purísimo distinto -en su firmeza- a cada instante. En noches de verano sosegadas, ascensiones a planos fulgurantes -escalas de silencios luminosos, del mínimo latido a lo Insondable ... (Y poniendo en dinámicas tareas estos mis brazos de hombre responsable de ganar, con el pan de cada día, batallas de progresos ideales ... ) . .. Bendita una y mil veces esta cuna nimbada de montañas entrañables. El azul desleído de este cielo. El sol incomparable ... Los frutos más sabrosos de la tierra. Los b esos y canciones de mi madre ... Aquí empezó mi vida: Aquí termine ¡ Bendito una y mil veces este valle! 60 Alma y o tros poemas COMO UN SA URJO Como un saurio ciclópeo se levantan acompañando al Cid, los Chaparrales. Desde allí se ve el mar en el confín envuelto en profusión de azulidades. El silencio se cae en las montañas como lluvia benéfica y sedante ... El espíritu flota en un remanso de beatitud y paz fuera del aire. Almendros familiares, amistosos, retorciendo sus cuerpos. Olivares amables y aceitosos, engrasando la aridez y secura del paisaje ... Y, allá abajo Petrel, pueblo de azúcar y acíbar, recostado en los mirajes de Saleres, Batex, Sierra El Caballo y el árabe castillo, rey del Valle. ¡ Petrel del galopante desarrollo! ¡ Petrel de tradiciones entrañables! .· llnw y otro · poema . 61 CREPUSCULO La hoguera del poniente descendía por detrás de Bolón serenamente; el celaje en el cielo del poniente como un lienzo divino se extendía Acababa el milagro de aquel día en euforia de luz, gloriosamente ... Entonces en el cielo de tu mente un rayo de otra luz aparecía ... Lo advertí en la dulzura de tus ojos absortos en las cimas encantadas atravesando los celajes rojos .. . Y a penetrabas la región luciente en que Dios, en ocasos y alboradas La belleza nos muestra sin poniente. 62 · Un w _¡ · o tr os poe mas CREPUSCULO Herida ya de muerte se caía la tarde en los puntales del poniente ... La sombra iba creciendo fatalmente: Como mancha de aceite se extendía. Entonces, en el cielo aparecía un silencio de estrellas dulcemente ... La grandeza de Dios se hacía patente: En ondas luminarias se expandía .. . Un divino temblor nos traspasaba .. . Era el momento místico, profundo en que el Silencio su clamor alzaba ... Y, en ese mar de la infinita Calma se oía el pulso medular del mundo y el vuelo blanco, angelical del alma . . - Uma r 01ros poema ., EL CID ES DE ORO VIEJO ... A Rafael Maestre El Cid es de oro viejo por la tarde cuando el adiós del sol es una hoguera rescoldando un tejido de celajes. La sierra se empavona del bronce de la noche, en la medida que el sol huye al poniente de las sombras. Entonces los roquedos, lagrimeando estrellas más solemnes elevan sus silencios ... Pero al llegar la aurora y el sol desde la mar lo alhaja y besa, ¡ Cuán hermoso después el Cid aflora desgarrando las nieblas de la noche, fluyendo hacia el Azul desde las sombras ... ! Alma y oír os poemas AL MONTE «SILLA DEL CID» Se levanta a los cielos como un grito De un ingente dolor petrificado, Entre brumas azules proyectado Cual si fuera a escalar el Infinito ... El sol en cataratas se derrama Sobre su hombro de siglos apretados ; Y en su entraña habitada por los Hados El misterio dormita en una llama. Sus laderas perfuman. Y su cumbre Sereniza el confín en un vislumbre Azul de cielo, tierra parda y mar. .. Y en su sima de tierra torturada Gime el agua en abismos sepultada Añorando los cielos reflejar. 1/1110 ’ U/rOS {W(’l}l(I . A LA SIERRA DEL CABALLO La Estrella del Pastor, luz de otros mundos, Su remota sonrisa te reserva En la noche oprimida de misterios Y profundos silencios luminosos. Entre tanto, en la hondura de tu entraña Los genios, en palacios fulgurantes Combinan las riquezas de la tierra En el encanto de los centros puros ... ¿Quién sabe esos secretos? Los que miran Los cuatro pinos en tu irsuta calva, Tus laderas de esparto y de tomillo, Tu silueta redonda ... ¡todo ignoran! Si lo cuenta el poeta ... es que, a la luna, Se lo contó un amigo, viejo gnomo . •tima _r o rr os poe ma s AMANECER DESDE LA MONTAÑA Me quedo en el tindel de la mañana a ver salir el sol por el Oriente. (Un jilguero se empeña tiernamente en despertar el alba a la montaña.) Poco a poco la luz los picos baña -una emoción alada el alma siente_:_; el confín se colora de repente al despuntar el sol; y, hasta la entraña Sumerge el mundo todo en su alegría ... Es más azul el cielo. El mar, hialino . Los pájaros controlan la poesía entera de este mundo cristalino ... Y, al adentrarse más y abrirse el día, más puro es el paisaje alicantino . .· 1 lma y o tr os poem a., 67 EN LAS CIMAS Crecer de noche se siente En la montaña el silencio Cuando en la compacta piedra Se adentra a dormir el eco ... En una infinita paz Se va todo sumergiendo ... La Eternidad aparece Visible en el Universo ... El alma navega entonces por la hondura del Misterio . 68 .-1 /ma _r otros poemas TODO CIRCULA LIBERRIMO Todo circula libérrimo por los canales del viento ... (El lenguaje de los mundos tiene colores de cielo.) El pasado y el futuro van formando un solo cuerpo, juntándose en el presente en tiempos fuera del Tiempo. Por las corrientes sutiles van también los pensamientos: Por los raudales azules de los canales del viento. Todo circula en las venas cristalinas de los vientos: La extrañeza de nacer, y el flémito decresciente de morir -los dos extremos-. La decepción, la esperanza, la alegría, el desconsuelo, el odio, la fe, el amor , el desencanto, el anhelo, el egoismo, la humildad, la pureza y el deseo, el orgullo, la violencia, la bondad del hombre recto. El alba maravillosa de los amores primeros; el ave madrugadora en alas del primer beso ... Los gemidos, los suspiros ¡ Todo circula en el viento! Y, en las arterias más puras transcurre eterno del grito del primer hombre el eco ... · 1 lma ’ 01r os poema s En lo más sutil y límpido la gracia pura del Verbo ... (Las almas más luminosas perciben ese misterio). (Irá este humilde poema lat iendo en lo azul del Viento desafiando la clépsidra del Tiempo). 70 . 4. lma y a fr os poe ma s NUNCA LA FUERCES I La poesía, es como la mujer. Nunca la fuerces en tu demanda: pierde frescura la flor tronchada .. . Trabaja ... espera .. . ¡ Qué apoteosis si se te entrega! II No la persigas más, no. Deja que ella venga a tí como de mañana el sol. No la persigas. Si la persigues, tal vez te huya, tal vez te esquive ... No te aceleres en ir tras ella .. . ¡ Nunca la fuerces! tú, espera, espera que ella te bese como la estrella. 4 lma y ot ros poemas 71 LA POESIA ~. · La poesía es el rocío errante todo el rocío en cósmica belleza; mas el poema es sólo gota, caída en el vaso del poeta ... ¡ Lágrima milagrosa que puede ser estrella! Beber en ese cáliz es recibir la sangre de pureza, el pan del Infinito en comunión etérea ... 72 .4 lma y otros poemas A Ulf POETA Tu huerto cuidarás. Es ley. Procura que no te quede ni un rincón baldío. Extirpa del renuevo el atavío inútil, que florece con premura. De las plagas del tiempo libra y cura tus canteros en flor. Evita el frío. Así tendrás su plenitud de estío con pomas de oro y ruiseñor de altura . Abónalo consciente. Y, cuando fulvia, en bendición veas caer la lluvia sobre su espalda, cual sidéreo tul, cobíjate en su fronda transparente ... Y te encuentre la noche, dulcemente durmiendo confundido en el Azul. .. 1/1110 y orro. poe nu11 POETA . Es ley que el elegido de los dioses, su túnica dejando entre espinares en ara posas tiras; el camino abrupto ensangrentado con sus plantas; la frente erguida en atracción de sol; los ojos, soñadores de estelares constelaciones de albicante luz, camine indiferente al bajo flémito de Ménades del odio -raso y húmedo Y pálidas envidias rastreantes, y siga su camino hacia las cumbres serenas, do el azul en espirales armónicas, esplenden en canción de ternidad. Es ley que el elegido, ungido de Infinito se extasíe ... Pues oye la canción de las Esferas y la voz de la luz en ruta siempre, hendiendo las tinieblas (contrapeso seguro de la marcha del Gran Cosmos y origen de la vida sensitiva ... ) Su cuerpo se hace luz al soplo alado del estelar contacto. Su mirada, geométrica oración de lejanías y vértigos eternos de infinito ... Entonces, su cerebro es receptora estación de lo Ignoto, que recibe mensajes del amor que no principia, ni sábese en la vida que perece ... Y, su alma es una estrella en ruta blanca, prismática fulgencia de los tiempos, que hiende oscuridades imposibles llevando los mensajes de la Aurora. Y en planos luminosos ascendiendo ... 71 . ..tima y otros poemas ¡Oh, Poeta! Si en la noche mirífica de luz te arrastra, contrastando con la albura serena y silenciosa de los astros, la negra terquedad, hacia mefíticos y gélidos abismos de dolor ... , tú sabes que en tu pecho hay una estrella que guarda la saudade del Espacio, y puede, nuevo sol en cono lóbrego, mudar en alba luz la sombra muerta ... ¿Quién puede anonadarte, oh vaso etéreo, guardador de la esencia de principios, pebetero del fuego del origen, sagrado sacerdote de armonías, augurio del mañana? ¿Qué puede sojuzgarte, oh sacro aeda, si llevas en tu ser el sol que alumbra y crea; y el olvido, con esfuerzos transformas en montañas de armonía, y abismos en palacios encantados; y dueño del espacio y de los siglos eternidad conmueves a tu paso, y eres su hijo: eternidad tú mismo? Pase el Dolor su negro vuelo. Pase y fórmese el diamante del carbón, pues la luz es dolor de eternidades . . - 1/1110 r o rr o, ¡w em m TEIXEIRA DE PASCÓAES Para entrar en el templo de tu verso dejaré mis sandalias a la puerta; avanzaré después con planta incierta divino de sentir tu culto inmerso. El ara de tu númen, tan diverso, la eufonía estelar suma y concierta; y el cáliz de tu ser, en ala abierta asciende en la oración del Universo. ¡Oh, sacro sacerdote de armonía, dame el ázimo pan de poesía y el litúrgico vino de tu rito! · Anhelo comulgar con lo inefable; en tanto que tu verbo imponderable desgrana la canción del Infinito. 76 Alma y a fro s poemas RUBENDARIO La selva tropical de tu poesía se abrió de pronto ante los ojos míos; y un arpa sensorial de escalofríos vibró en la médula del alma mía. Sagrados ruiseñ.ores en la umbría cantaban el amor. Los claros ríos, azul del cielo gorgoteaban píos. El cristal de la bruma se dormía ... De pronto emergen las enhiestas cumbres -silencios glaucos de la edad dormida que rumbo al cielo permanentes van ... Y, en sus faldas, equinas muchedumbres escancian las delicias de la vida, mientras entona un himno el viejo Pan. lima 1 11/r1i, ¡1oe1J1(11 77 ENTIERRO DEL POETA MIGUEL HERNANDEZ (Falleció a las 5,30 del día 28-3-42) En filas el dolor se queda firme en la selva sin árboles del patio. La tarde va a morir. Sobre los cielos aparece un lucero sollozando ... La música es de lágrimas humanas, que en los pechos se van lentas filtrando ... ¡Miguel Hernández va entre cuatro tablas, la caja sin forrar de pino blanco ... Lo miro para siempre ... Va en los hombros de cuatro amigos que eligió callando ... «Nos duele hasta el aliento ... » en la raíz sin nombre y sin instante y sin espacio . La música agoniza y muere el día. El silencio aparece devorando ... ¡ La vida del Poeta ha concluído ! ¡ La vida del Poeta ha comenzado! 78 . ~/1110 ’ ()//’() f)()(:’11/{/ . SE NOS HA IDO UN ALMA Francisco Ferrándiz Alborz Más allá de los cándidos celajes que ocultan el azul de un cielo puro, bien sé que volará ; pero su paso, · más sutil que el ensueño de una alondra o el dulce despertar de una libélula al rayo de la luna, no será apenas percibido por los ángeles ... Bien pueden los arqueros invisibles el triunfo celebrar de su fortuna. El celeste reclamo de la Aurora festejar la conquista de su celo llevando al palomar tan alba presa. Se nos ha ido un alma. Mejor dicho: ha seguido su camino . .. (El, también como Orfeo fue a los infiernos; mas el odio infecundo, no manchó un ápice su veste de los tiempos .. . Sus alas eran fuertes para el vuelo y adoraban el cielo sin fronteras.) No derramaré sobre su tumba fresca las lágrimas amargas del que cree que la Muerte es castigo impenetrable. Pensamientos mojados de Alborada, impregnados de amor y de pureza; estrofas saturadas de los bosques mecidos de esperanzas armoniosas; palabras de los mares renovándose; palor de las estrellas y silencio después , hondo silencio ... (Sagrado, y ya sin t iempo para el Mar de Silencio Universal...) Para sus huesos, paz, paz . .. para su alma atracción pura de Dios . . ·lima y 0Ir o1 ¡i11 enw s 79 SE NOS HA IDO UN ANGE L: JACINTA ORTEGA En la noche silente, sale el alma por una voz dulcísima atraida hacia la mar de la Suprema Calma ... ¡Oh, gozo inenarrable! Va transida del Amor Uno, santo y verdadero hac ia el foco perenne de la Vida . ( No hay vacío . .. Hay divino reverbero de soles sempiternos, palpitantes centrados en armónico venero . .. ) Y , las almas -luciérnagas errantes se asemejan-, mas son las gemas puras ascendiendo a los Centros Fulgurantes ... ¡Ellas, las abnegadas criaturas que sufrieron la sombra en claro día, la ventura hallarán de las venturas! Todas explenden alas de alegría por marchar a la dicha sin inciso en el Centro Motor de la Armonía ... Rayo incesante es el divino aviso todo amoroso, entero de clemencia ... ¡Estrella que nos guía al Paraís o! Llamarada celeste, pura esencia sin principio ni fin que al alma en sal m a ... ¿La gloria nos darás de Tu Presenci a? ¡ Ya no cabe más dicha para el a lma! Y, tú, que la barrera traspasaste de la honda mar de la Suprema Calma, y en su gozo sin tiempo te quedaste, ayuda a superar dudas, desvelos , a los que tanto en este mundo amaste. En Dios se ca lmarán tantos anhelos. En Dios se borrarán tantos d olores , en eterno aur orar de resplandores, e n Su infinit a placidez de Cielos ... 80 .~l ma _1· otro., ¡}()emas ¡SERA UN PASO TAN BREVE! Su vida fue flor de un día, espuma que se deshace, suspiro que se levanta en busca de lo Inefable ... En su paso por la tierra deja un reguero entrañable ... ¡ Y más la quieren los Cielos, pues se la llevan los ángeles! Será su paso tan leve Cariñosamente a Kiki que no se enterará el aire ... Como el aliento de un lirio cuando a la Aurora se abre ... O el vuelo de una ilusión por los dorados celajes; o el sueño de una camelia adormeciendo la tarde ... Leve, leve, paso, paso ... Pero nos deja indeleble un venero de saudades ... . ·lima y ot ros (}Oemw 111 DAMASO VINO A ESTA CASA Dámaso vino a esta casa con su juventud radiante, con sus ojos de alborada y con su sonrisa de ángel. Y, me habló de muchas cosas que guarda la tierra madre, que volatizan el Eter, que circulaJ! por los árboles, que los pájaros pregonan y es espíritu en el aire, y es armonía en el Todo ... ¡Honda luz de nuestra sangre! Me habló de ciertos estratos de ciertas formas y fósiles; de los lenguajes telúricos y, del eterno lenguaje ... El cielo de su sonrisa quedó flotando en el aire como el vuelo de un jilguero que hace el sol reverberante, y queda luego en el alma como gloria de saudade ... ... El seguirá su camino por los áureos celajes, por los azules silencios y por planos fulgurantes ... ¡Cuánto, cuánto padeció! ¡Cuánta luz debe alumbrarle! ¡Oh, libertad sin fronteras! ¡Oh, belleza inenarrable, ábrele tus horizontes para sumirle en los mares donde moran los poetas y las almas estelares! tt2 .·Uma _’ otros poemas MUERTE DEL VIEJO ZAPATERO Cuando mayo más bello florecía y renacía el Valle, placentero, el viejo zap~tero se moría ... ¡ Piedad para el artista zapatero! Zapatero ... ¡Y artista verdadero! Que es artista el que tiene la armonía superior en el alma ... Siendo obrero, su labor vibrará de poesía. -Oíd mi voz, que se apaga- dijo lento: hice bellos zapatos y chapines, y ya no puedo más. .. ¡ Mas no lo siento! Pues ya avisan del Cielo, ¡que me eligen para ángeles calzar y serafines al gusto excelso de la Santa Virgen! .-t lma y o tro s poema s 8:1 AL PINTOR LUIS VIDAL En tu Monóvar, oh pintor, exploras la increíble galaxia que te habita ... Jamás tu vuelo en el azul limita, ni en el prisma estelar de las auroras. La sorpresa constante de las horas te asalta en el hallazgo que gravita buscando hallar su forma en la infinita materia luminosa que laboras. En tu rincón silente -abeja aparte remontas los ensueños sin medida, milagroso elevándolos al Arte. Aprisionas la luz acontecida desdoblándola en colores; te haces parte del designio amoroso de la Vida. 81 .4 /mn y otros poemas OYENDO A .MARIA CASARES Empieza con el Génesis, María. Se inmerge en el Cantar de los Cantares. Remonta los poetas estelares en su vuelo genial de poesía. Su voz todo el encanto plastifica -Que Dios manda a la tierra sutílmente Lo cuaja en alma, nos lo da en torrente que, al penetrar, su luz nos purifica ... Santa la inspiración que al oprimido en la sombra, le da luz de salida. Emana de las Fuentes de La Vida para alumbrar al mundo enceguecido. Arriban los mensajes a la interna antena del poeta en una llama: La llena de armonía y la derrama como lluvia del mar de la Belleza Eterna ... Y, de pronto, esa voz arrebatada brotando de misterios de la hondura, estallando en palmeras de hermosura como el sol al llegar la madrugada ... (Como una madrugada luminosa en que el sol desde el mar pinta el celaje. Y por primera vez vemos la rosa goteada de luz sobre el paisaje.) Su voz es la nostálgica palmera que asciende hacia los cielos, siempre en pos de un ideal eterno, una quimera ... (Y el sol dora la orilla de esa voz.) Gracias por la inmersión en esa mar de belleza sin pausa ... Ya María, en él podré por siempre navegar opreso en la recóndita Armonía. - 1/nw y o/ro ., poema ., SI DICE A ZARPAR MI BARCA Si dice a zarpar mi barca hacia el mar sin horizontes, a mí no me digáis nada; que por mucho que navegue por las tenebrosas aguas, tendrá bauprés de saudades y timón en rumbo al Alba ... Si la véis partir silente hacia brumas ignoradas, pensad que seré en lo fosco la más humilde luciérnaga alumbrándome la ruta de esperanzas ... No saquéis blancos pañuelos de despedida y de lágrimas; que llevo, sobre la proa, ilusión rielando el agua, 86 y dos canciones profundas en el sueño de las anclas. Arriba, besando alisios, albo velamen y jarcias, y una brújula vibrátil hacia la estrella del Alba, en el centro de la nave ... - Si dice a zarpar mi barca hacia el mar sin horizontes, a mí no me digáis nada. . --lima y otros poenul MAS ALLA DEL RECUERDO ... 1 Un día la campana dará sus notas de cristal rosado a través de los peplos de la Aurora y en el oro mutable de los bosques -como ayer y como hoy y como siempre; mas yo ya habré cruzado en ese día la mística barrera ... Y no percibiré la tenue música mojada en el misterio de ternuras ... En vano los rumores poblarán todo el mundo -mar y tierra; y, oculta en su palacio de cristal la alondra llevará a los aires todos la impar modulación de sus baladas en amplias cataratas de armonía . .. En vano todo, en vano ... Las ondas infinitas del Silencio me harán impenetrables los latidos venidos de la Vida ... Que yo me dormiré sobre los tiempos, más allá del recuerdo y la saudade ... 11 Falena enamorada de la luz, ¡ Qué júbilos intactos se abrirán en las Fuentes perennes del Amor, en el Mar del Origen Infinito, en el sol sin confines de la Vida ... ! «El Amor, el Dolor y la Humildad, ya te habrán despojado de tu Yo.» (Igual que hace la muela con el grano que en la vida ha de ser sagrado pan ... ) ¡Ya te habrás de tí mismo liberado! lima y otros ¡wema ., 117 YA TE QUEDA POCO TIEMPO ... Ya te queda poco tiempo -dice una escondida voz de envolverte en el Azul, de paladear el sol; De visitar la fontana escondida en el verdor donde está el lagarto verde, el sapo y el ruisefior; De encaramarte en las dulces espirales de una voz, encantándote sus giros hebetado en su inflexión ... Ya te queda poco tiempo de poner tu vaso al sol a · reflejar las estrellas del poemario de Dios. Cuando el tiempo se te acabe -dice la escondida voztú serás de verde estrella, y esencia de corazón . Y subirás las riberas de los jardínes de Dios a sumirte en el Silencio de la pura adoración. 1111 .- lima y otr os poema s PROCESO INEXORABLE A medida que el cuerpo se oscurece porque la madre Tierra llama y llama, en claridad el alma crece y crece porque también el Cielo la reclama. ¡Proceso inexorable! El que nos ama con el Unico Amor que prevalece, y en ondas de armonía se derrama, y todo lo que mira lo embellece; dispone nuestra marcha; y pone en ella el Amor y el Dolor y la Esperanza; lo que la hace inquietante, oscura y bella. Y da Su Luz al alma la confianza -por lo que pura en nuestro azul destella en cósmicos confines de bonanza. .- 1/1110 ’ otro., poema ., 89 YA SIENTO DESLIZARSE EN LA PENDIENTE ... Ya siento deslizarse en la pendiente este cansado y viejo cuerp0 mío; espero ya sepulte tanto frío y el seno de la tierra lo caliente ... Subiré en la mañana dulcemente a asomarme a las gotas de rocío y con su beso el sol, hacia el vacío me llevará al azul piadosamente ... Siguiendo el puro, celestial anhelo regresaré en la lágrima argentada a la tierra, a la rosa, al asfodelo ... ¡ Será mi cuerpo en la aventura alada · gozo en el Todo, vida enamorada ... ! Y el alma logre el prometido Cielo. 90 . --1 lma y otros [Wi111as MICANTARO Mi cántaro está lleno de silencio ... Antes bullía en él el llanto, el canto; ahora sólo oquedades hay adentro, donde la nada dilató el espacio, donde la nada se adentró en el tiempo ... Aún quedan restos de la sal del llanto adentro, muy adentro, muy adentro ... Restos de puros, desvaídos líquenes -que añoran de la estrella los reflejos-, migajas apagadas de una aurora de la que riente rebosaba lleno ... Todo el bullicio se llevó el crepúsculo ... Ahora sueña el alba de un sol nuevo: latentes, áureas sinfonías en el clamor profundo del Silencio ... . --l lma _1· ot ros ¡JOe111a s 91 MOMENTO UNICO «De cierto, de cierto te digo, que quien no naciera otra vez, no puede ver el Reino del Cielo.» Cuando llegue el momento crucial -ese enigma escondido en el Tiempo y entrevisto en el cénit azul de algún alto lumínico sueño-. ¡Qué sorpresa hallará nuestro espíritu! se verá en las entrañas del viento transcurrir en las horas constantes con sus juegos de sombras y espejos ... ¡ Suspendida la vida ... ! (Se para el reloj sin descanso del Tiempo .. . Nos penetra una luz sin medida .. . ¡Realidad entrevista del Sueño!) Ya no somos nosotros. Y, somos Uno en todo . .. ¡Latido en lo Inmenso! Poco a poco en la rítmica paz penetramos la luz del Silencio ... Penetramos la mar de bonanzas donde el Mal es tan sólo un recuerdo. Es el cénit. .. ¡ Momento crucial! Dios descorre piadoso sus velos. ¡Apoteosis! ¡ Momento sideral! . (La Verdad es conquista del Sueño.) Se han cegado los ojos del mundo ... Aparecen radiantes y armónicas luminarias sin nombre del Cielo. 92 S. Juan: 3-1-12 A /ma y 01r ns poemas DOBLE’ DESEO Cuando vaya a morir -¡Oh, momento, momento! y me vaya a esparcir en los brazos azules del viento ... Cuando tenga conciencia de que voy a dejar de ser cruz, y, quizás recobrar la inocencia inicial de la luz ... Cuando llegue el supremo momento de dos mundos mirar a la vez: aún dejando en el uno un lamento y en el otro empezando a ascender.,. Cuando vaya a saber el misterio de la Vida o la Muerte, y de luz o de sombra, el imperio desentrañe ... ¡ Quisiera tenerte a mi lado, tremante, embebida en mi doble deseo final: despedir en tus ojos la vida, y en los míos mostrarte de huida la ruta inefable de un mundo ideal! .·lima y otnJ_, · poema., A tí, única. ULTIMO DESEO Aquí nací, y aquí morir quisiera en un día de sol y cielo azul, cuando la vida más hermosa fuera ... ¡Oh, sumirme en océanos de luz! Ser como el grano, rútilo del trigo quisiera ... que se da para ser pan y lágrima y espíritu de vida en la armonía universal. Aquí nací y aquí morir quisiera ... Sumirme en el Océano de Luz.! Trocar en flores cada primavera los vértices agudos de mi cruz. Alma y 01 ros poema s PIEDRAS DEL CAMINO Se han secado los vientos que mordían las hojas ruidosos y hambrientos. Pero dentro del aire una voz apremiosa no cesa de llamarme ... Navego en el silencio, sintiendo en sus honduras el eco de sus ecos. En el esparto del monte, · vib:rante el arco del aire lanza cantos misteriosos, pulsa solos de saudade ... Sólo el alma en su pureza desentraña su mensaje. Un alma superior me ha visitado; en dominios de paz dejó la mía, mi noche transformando en claro día ... Y, un reguero de estrellas me ha dejado al irse -sin dejarme abandonado-. ¡Tan sólo en apariencia la perdía ... ! Mirándome no me ves, no te veo si te miro; mirándonos no nos vemos ¡aún siendo tan conocidos! Nos conocemos por fuera: no en el último recinto donde cada cual se pierde en su propio laberinto, y se oculta cada cual en misterios de sí mismo. Nadie me podrá quitar la agonía de mi muerte; ese momento crucial de perderme y de perderte ... (O, de ganarme y ganarte para siempre.) · //1110 y 01ros poema ., 95 ¿Qué canta en tí cuando lloras? Una planicie de calma va subiendo desde adentro hasta la luz de las lágrimas ... ¿ Qué pasa en tí en los remansos captados de las distancias, sonorizándote auroras en los parajes del alma? U na música estelar llega en ondas de esperanza por los ignotos caminos del Amor que no se acaba ... (Es que nuestra alma no ve por el don de la mirada, sino a través de los lentes de las lágrimas ... ) 96 Alma y otros poemas SI YO NO FUERA ETERNO A Alejandro Guillén Si yo no fuera eterno, no tendría este amor de sumirme en el silencio, este afán de encontrarme en sus caminos preguntando quién soy ante el Misterio ... No sería traido ni llevado por las rutas sin fin que van adentro, ni oiría la voz entre la niebla separando verdades de los sueños. Si yo no fuera eterno, no andaría con los ojos clavados en el cielo, ajeno a las punzadas del camino enamorado loco de un lucero ... De la Muerte, no hablaría jamás -es como un viento de fuerza ensombrecida y misteriosa derrotado mil veces en el Tiempo.Si yo no fuera eterno. ¡Qué vacío, qué honduras en la nada del silencio! Sería al «nunca más» que puso Poe en el negro graznido de su cuervo ... Pero hay mucho que andar y que sufrir, que aprender en la Rosa de los Vientos: encontrar nuestra estrada y encender la lámpara que Dios nos puso dentro ... Si yo no fuera eterno, no estaría vibrante de ascensiones y progreso, no sería verdad la Gran Verdad ni el armonioso Plan del Universo ... (Ni tú ni yo seríamos, -¡ Y somos! una estrofa de amor del Himno Eterno.) i /ma y or ro s poema ., 9 7 Hojas de rni liuerto / . mistico ORACION MATINAL (En ti, ¡oh Schenk! alumbró este poema . El quede y sea -Dios lo quiera- en el aliento lumínico de los hombres .) Señor, en la quietud de esta hora matinal, vengo a Vos en busca de paz, sabiduria y poder para ver el mundo con ojos compasivos; para ser paciente, comprensivo, bondadoso, sabio; y ver más allá de la apariencia a vuestros hijos, tal como Vos los véis, así sólo lo bueno encontraré en ellos; Haced mi oído sórdo a la murmuración y a la mentira; mi lengua muda a la maledicencia; Llenad mi mente de pensamientos que bendigan sólo; hacedme tan bondadoso, tan lleno de alegría, que todo el que se acerque sienta de Vuestra presencia la armonia ... ¡Envolvedme en Vuestro manto de belleza! Esto os ruego, de suerte que revele Vuestra presencia a través de mi alma, Señor, todo este día . Amén. Alma y 01ros poemas Wl SEÑOR ... Señor, Te he conocido en la quietud del campo, en la más ignorada florecilla del páramo; en la dulce fontana, en los giros del pájaro, en los ojos del niño, en el brillo del astro, en el mar, en el sol, en el aire, en el árbol, en la nube, en la luz, en el cielo estrellado ... Todo en mi corazón por Tí se ha hecho claro ... ¡ Vienes, Señor, a mí por todo lo creado! l02 .4 /ma y otros poemas ¿ QUIEN ME LLAMA, SEÑOR? ¿ Quién me llama desde dentro del aire asomándose a mi alma? ¿ Quién me envuelve en la luz de tan finos cristales desde el ósculo azul de los ríos del aire? ¿ Quién emite esa voz desde dentro del aire? ¿Es la tuya, Señor? ¡ Es tan pura y constante! Cristalina me llama .. . y yo siento un dulzor inefable en el alma ... ¿Tú, me amas, Señor? Se me enciende una llama en el alma, inefable ... ¿ Quién me llama, me llama desde el fondo del aire? .i íma y 01 ros poemas 10:J ¡TU FUISTE! ¿No fuiste Tú, el que me dijo que la vida es toda instante? ¿No fuiste Tú, el que me hizo entender la voz del aire? ¿No abriste Tú, galerías recónditas de mi espíritu, y fuiste mi estrella guía por esos cielos y abismos? ¿No fuiste Tú, el Alfarero que mi barro modelaste, y de tu luz fulgurante me dejaste un rayo adentro? ¡ Tú fuiste! (Y aún sigues Tú modelándome ... Del limo me levantas al Azul, ¡látido en alas libérrimo!) Eres Tú el demiurgo encantador que chorreante de luz a Sí mismo se creó ... Y al crearte , la Armonía surgía del Universo ... y el Amor también surgía renovándose en lo Eterno . . . . Constantemente me llamas desde el Azul infinito, (desde dentro de mi alma ... ) Siendo Tú, el Todo. ¡Todo! no te olvidas de mi Nada. I0 -1 .i /ma y otros poemas EVOCACION BIBLICA El Niño duerme en la cuna ... Parece un botón de almendro al albo palor de luna ... ( Más débil que un rododendro y todo el poder aúna. ) María lava pañales con el agua del aljibe; y mientras lava, percibe los cánticos celestiales que el Niño Jesús recibe ... Somnolientos dromedarios beben sombra en la palmera; otros andan solitarios por eriales y calvarios de la rojiza pradera. ¡Oh, poesía saudosa del bíblico Nazaret! Mientras el Niño reposa, María lava y José labra madera olorosa. El Niño duerme. Su cara es miel del cielo y es luz, que a ninguna se compara ... , • • 1 ¡que mocenc1a .... ¿ Quién pensara la tragedia de la Cruz? - U ma y ot ros poe mw 105 DULCE POLLINO Dulce pollino que llevas La Virgen embarazada, ¡Si tú supieras, pollino, lo que llevas a la espalda! ¡ Si tú supieras que el cielo Es lo que llevas por carga! ¡Qué azul el sendero fuera! ¡ Cuán levemente pisaras ... ! (¡Tal vez bajara una estrella a enredársete en el alma!). Afortunado burrito, ¿ Cómo vio tu vista mansa Irradiar desde el pesebre Toda la gloria del Alba? ¡Cómo te envidio, burrito, Por llevar tan noble carga! Y, porque luego, el pesebre No fue mesa de viandas, Sino centro de Universos Armonía concentrada ... ¡Todos los soles en haz Brillando en una Alborada! ¡Cómo te envidio, elegido Pollino de vida mansa ... ! ¡ (Afortunada criatura Que llevas la Luz por carga!) I06 .· lim a y otr os poem as ¡MADRE! La Madre miraba al Niño mientras el Niño dormía; mientras el Niño subía constelaciones de armiño .. . La Madre miraba al Niño .. . La Madre seguía al Niño cuando el Niño predicaba; cuando el Niño derramaba universos de cariño ... La Madre seguía al Niño. La Madre se desvelaba, la Madre se desvivía porque el Niño discutía con los sabios ... ¡y ganaba!. .. La Madre se desvelaba. La Madre estaba presente en Caná cuando, divino, el agua trocaba en vino entre el pasmo de la gente ... La Madre estaba presente. Bendiciendo se quedaba cuando ingrávido, Jesús, como un nimbo hecho de luz, el Tiberiades cruzaba ... Bendiciendo se quedaba ... Madre de madres, subía la Montaña del Dolor, cuando el Hijo, todo amor, por la Humanidad moría ... Madre de madres, subía.-. Y, toda consolación cuando el Hijo aparecía -la esperanza nos traía-. Toda paz, amor, perdón ... ¡Madre de consolación! 1 /1110 y o rr os poem a. 107 SE DICE QUE MARIA ... Se dice que María vivía silenciosa en las dulces jornadas del galileo hogar. Mientras José labraba la madera olorosa, a Jesús, abstraido, no se le oía hablar. ¡María! La pureza de un pétalo mecido por el aire caliente, dulce de Nazaret. Jesús , era misterio del Orto amanecido ... Y , un cándido remanso de paz, era José , Después, más adelante, cuando el Niño salía a decir a los hombres lo que aún les asombra, María, a todas partes le seguía con panal de sonrisas, con frescura de sombra. Cuando ya en el pináculo del postrero martirio , al aire el lirio cárdeno, el cuerpo del Señor , a sus pies languidece como impoluto lirio el cáliz apurando del Amor y el Dolor . .. María era un refugio dormido de ternura. José sentía quejas en la madera herida . Y, Jesús en sus párpados -dulzura y amargura abría sin confines los soles de la Vida . .. ¡Al fin rompió el silencio! ... Llenando los caminos de parábolas santas, del Mensaje Estelar. .. Se abrumaban los vientos de Cristales divinos alumbrando las almas, aquietando la mar. . . ¡Al fin rompió el silencio! ... Para clamar sin trabas la Verdad a los hombres en las quiebras del Monte ... Y al marcharse a la luz, dijo SIETE PALABRAS como siete horizontes del único Horizonte. I08 1 11 110 _’ orr os poe mas DEJAME MADRE AL MENOS ADORARTE Me falta inspiración para cantarte. Mi mente un tema solamente toma ... (Te siento en el Azul como paloma sin hiel, cruzar el Orbe parte a parte.) Te sé la dueña del Amor y el Arte que embellece la Vida. Tu alma aroma ... (Si tengo tan pobrísimo el idioma, déjame, Madre, al menos adorarte ... ) Ahí en tus plantas santas quedaría vencido y silencioso como un ramo que te ofrendara algún devoto pío. Hasta que me dijeras, Madre mía, con voz de miel y celestial reclamo: «Ven a mis brazos, ven . .. Ven, hijo mío.» -1 /,na y orrw poema., 10 9 ME HAN CONTADO TANTAS COSAS MISTERIOSAS, DOLOROSAS ... Me dijeron -yo lo creo que piadosas golondrinas arrancaban las espinas a Jesús, el Galileo, cuando en la Cruz padecía ... Y, también que un ruiseñor, con trinos de luz y amor endulzaba su agonía ... Me han dicho que Magdalena, la de los ojos tan bellos, enjugaba en sus cabellos tibia sangre nazarena que goteaba divina ... Y, que María miraba llorando ... (Porque lloraba con amargura infinita ... ) Me han contado tantas cosas misteriosas, dolorosas de la trágica Pasión que me sigue a toda hora ... Me dijeron que un ladrón trocó su noche en aurora: Se arrepintió en el preciso momento de más dolor ... «Hoy serás, le habló el Señor, conmigo en el Paraíso.» Contaron también, que, un ciego pedía herir a Jesús: Le llevaron ... Pero luego, al herirle ... ¡Vió la Luz! Me contaron tantas cosas misteriosas, dolorosas de la Pasión del Señor ... 110 -1/ma y afros poemas IMPACTO Ahora estoy en Dios ... Ahora estoy relampagueado por un poder habitado que enamorando enamora. Estoy dentro de la Aurora de donde salir no espero ... Porque en ese reverbero más me adentraré al morir ... Y, si el morir es vivir, más vida espero si muero . .--lima y otros rwema., · 111 SI APARTARA DE MI TU PODER/O ... Si apartara de mí Tu poderío -Esa fuerza total que me afianza, ¿ Qué sería de mí sin confianza, perdido barquichuelo a su albedrío? Tanto barro en la vida, tanto frío en el alma del hombre, ¿qué esperanza podría ya tener, si se me alcanza que toda fuerza es tuya y nada es mío? Nada tengo sin Tí. Nada de nada. (O como hoja del árbol separada condenada a morir de cualquier modo ... ) Pero, sentirte en mí, amando ... ¡Y amarte! Formar un sólo cuerpo ... ¡ Realizarte ! Es en vida, Señor, lograrlo todo. 112 . --lima y orn i, ¡iot’HW S ¡OH SANTISIMO CRISTO! I ¡Oh, Santísimo Cristo! Hoy sólo pido ampares a los pueblos en esta hora; los que toman la noche por Aurora, los que sumen la Aurora en el olvido. Te pido por un mundo dolorido que del aire más fácil se enamora; siguiendo la corriente engañadora se cree ganando cuando más perdido. Te pido, Señor, por la inocencia que puede sucumbir por los errores de fríos corazones en violencia. Que lleguen los divinos resplandores a todos, de Tu Amor y Tu Clemencia ... ¡Del alma de los hombres broten flores! «De tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a Su Hijo Unigénito, para que todo aquel que en El cree, no se pierda, mas tenga Vida Eterna.» S. Juan: 3-16 Tanto amaste a los hombres -criaturas sumidas en pecados y desvelosque, dejando la gloria de los Cielos descendiste a curar sus desventuras. Pero, ¡cuántas, Señor! Tus amarguras al ver en nuestros ojos tantos velos, al ver en nuestras almas tantos hielos ... ¡Ingratitud pagando a Tus ternuras! Tu sangre derramaste herida a herida, (de Muerte rescatándonos a Vida.) Tu espíritu nos diste en miel y Luz ... Mas, ¿cómo a tanto bien no nos rendimos, y al fuego de Tu Amor no nos fundimos · para ser siempre en Tí, Cristo Jesús? . -1 lma y ot ros poema. 11:1 111 Héme a Tus pies, Señor, ... el alma abierta. El alma abierta, el corazón vencido. Penétrame la sangre y el latido que no tiene mi casa ni una puerta. No tiene ni una puerta ... ¡Toda abierta! Dormido el aire insomne del gemido, más allá del cordaje del sentido una paloma espera que Te acierta ... Te espera una paloma, toda aroma de amor, en alba flor d~ su contento. Ya siento que a Tu encuentro el vuelo toma ... Ya siento que mi ser pierde albedrío y lo gana en total deslumbramiento. ¡Oh, Dios del Universo! ¡Padre mío! 111 .· l /m a _r otr os poe ma s PROMESAS DEL SEÑOR (Sermón del Monte) Subía la montaña, dulce, lento ... Detrás la multitud en oleaje. Desde un rellano contempló el paisaje ... ¡ Que adquirió por sus ojos sentimiento! Cielo sereno. Azul. Cándido el viento ... Abrió el Señor la luz de s1,1 lenguaje irradiando a la Tierra el Gran Mensaje, como sol de perenne alumbramiento ... Decía el Señor: -Bienaventurados son los pobres de espíritu ... - Y, seguía derramándose en miel a los cuitados: -¡Oh, hambrientos de justicia! los destellos tendreis de un sempiterno mediodía ... ¡Iréis a un mundo bello entre los bellos!- : lima y o tr o. pot’IIIW 11;, GRACIAS TE DOY, SEÑOR ... (Renunciación) Gracias Te doy, Señor, por mi pobreza. Ella templó el espíritu en tu fuego. Me conquistó la paz, me dió un sosiego más allá de la vida y la tristeza. Bendita esta pobreza ... ¡mi riqueza! Los caudales de amor que ahora te entrego. Ya no andaré con estos ojos ciego ¡Ya es mía la recóndita Belleza! Gracias Te doy, Señor, por la armonía silenciosa que en mi alma despertaste al mostrar todo el bien de mi dolor ... Perdóname, Señor, esta alegría de pisar las espinas que dejaste en tu ruta de Amor, de puro Amor. 111; A /ma y otros poemw TODOS TE ABANDONARON EN LA CRUZ Todos Te abandonaron en la Cruz y apuraste hasta el fondo la amargura; tan sólo Te siguió la Madre Pura y unos cuantos afectos a Tu Luz. Y abandonado sigues, ¡Oh, Jesús! envuelto en la verdad de Tu ternura ... Desierto está el · caminó do fulgura el sol que cambia en vida tanto pus. Tú, enseñaste que todos los humanos vivamos en la tierra corno hermanos, en sana paz, fraternidad, unión. Y, ¿ Cómo no curarnos de fracasos, y a Tí, no dirigirnos nuestros pasos si sólo en Tu Camino hay salvación? . -tima y otros poemas 117 NO ME DEJES, SEÑOR, EN EL DESIERTO ... Dame el agua, Señor, de Tu pureza, que ando sucio del barro del camino; dame un · poco, Señor, del sacro vino que ando muerto, reseco de vileza . Sopla un ’poco, Señor, en mi cabeza, que ando turbio de tanto desatino . Dame un rayo de luz de Tu divino Imperio de bonanza y de belleza. No me dejes, Señor, en el desierto donde el agua de amor es tan escasa que se mustia mi vida de secura . .. Condúceme, mi Dios, al almo huerto, al tibio calorcillo de Tu casa ... ¡Quiero hundirme en Tus Fuentes de Ternura! 118 . --1./ma y orro s poema s ME HA MORDIDO LA PENA Me ha mordido la pena, me ha mordido de verte con heridas de azucena; y no puedo vivir con tanta pena siervo del mundo oscuro, malherido. Siervo del mundo oscuro ... oscurecido en plena Luz de Tu mirada plena. No puedo soportar noche y cadena cuando el Día, Tu Sangre ha amanecido ... Toda la Luz desde Tu Cruz destellas. Todo el Amor nos nace de Tu Fuente. ¡Oh, surtidor de las auroras bellas! Falenas, las espinas de Tu frente. La flor de Tu costado sangra estrellas, estrellas redentoras, sin poniente ... .·1 /ma y o/ros {’Oe 111as 119 CON HERIDAS DE LUNA MACERADA ... Con herídas de luna macerada el cuerpo del Señor, lirio doliente ... Su sangre es puro Amor hecho torrente de luz para la eterna Madrugada . ¡Mirada de los Tiempos! Su mirada se apagaba, ¡encendiéndose luciente! Alma suprema ... Luz omnipresente, expectante en la tarde desolada ... «Consúmat est». El drama se consuma. Lo injusto trueca el triunfo en su fracaso, y el Alma Universal rompe la bruma ... El cuerpo del Señor desciende, laso, para ascender a la Belleza suma. a la gloria sin nombre y sin ocaso 120 . i Jma _r otros poema s LLAMABAS A MI PUERTA ... Llamabas a mi puerta lastimero con Tu voz toda miel enamorada, con Tu voz toda luz en llamarada, con saudade inefable de venero. Llamabas a mi puerta ... ¡Tú, el Cordero de Dios ... ! Más, yo no oía nada, nada ... El eco se perdía en la hondonada o en la niebla tupida del otero ... Pero vino el dolor a visitarme: con su tenaz y brusca sacudida empezó lentamente a despertarme. El Dolor, al Amor me fué iniciando. (Como la Aurora al mundo, es en mi vida la luz que dulcemente me vas dando.) .- l/111a ,. 01ros poemas 12 1 CUANTA MISERICORDIA EN TI, SEÑOR ¡ Vivir siempre en la sombra era tan triste! El alma se tiznaba y atería ¡Cuán, lejos de mi noche amanecía! · Mas, Tú, piad(?samente a mí viniste. Aurora sin medida amaneciste. Tu luz me penetró serena y pía. ¡Oh, día sin confín, sin tiempo ... Oh, día que en mi cerrada noche, oh Dios, abriste! ... Contaste Tu rebañ.o: faltaba una oveja en la ternura de Tu aprisco ... Y saliste sin sendas y sin luna ... Con dolor de perderla ... Con amor de encontrarla abismada sobre el risco ... ¡Cuánta misericordia en Tí, Señ.or! 122 . -t /ma y ot ros poe mas SIN TI, SEÑOR ... Sin Tí, Señor, la vida es un desierto más vasto de lo que la mente alcanza . Un túnel sin salida a la esperanza. Un avanzar muriendo hacia lo muerto. Contigo, es jubiloso alumbramiento. Aurora sin nublado y lontananza. Serena orogragía de bonanza y entusiasmo de amor. .. ¡Deslumbramiento! Un día te cerré yo, vanidoso , la puerta enmohecida de mi casa, y fué mi casa un antro tenebroso ... Y abrí mis puertas todas ... Dije: ¡Pasa! Me alumbraste de nuevo esplendoroso con la luz eternal que ahora me abrasa . . -1/,,w _1· otros poema., TU PRESENCIA Tu presencia en mi noche es una estrella más inefable cuánto más remota, que en el espacio de mi vida flota como un eco de luz, como una huella de alma ... Llegas a mí, serena y bella en una etérea , fugitiva nota , en una estela celestial e ignota que, al alejarse , más sutil destella ... Quedas en mí como en el ave el canto: Vuelo de risas o violín de llanto , refléjate el cristal de mi conciencia. Te alejas en el Tiempo y el Espacio. Te acercas a mi pecho, triste, lacio , angélica presencia sin presencia ... 121 1 /ma _’ ulr o., poema s EN’LO PURO DEL ALMA Esa fuerza sin nombre, en el extremo del silencio vibrante y sin .testigo; esa llama sin llama en que me quemo y amorosa persigue ... ¡Y que persigo! Ese soplo de Tí, que busco y temo. Ese rayo vital que temo y· sigo. Esa luz sin ocasos... ¡ Sol supremo que siento bendecirme!... ¡ Y que bendigo! Ese grito silente que perfora estratos nebulosos, y me aflora a la luz, como savia enamorada, eres Tú, en lo profundo, sin ausencia ... Entrañable presencia sin presencia en lo puro del alma iluminada. · 1 lma ’ o tr os poemas 12;; ENTREGA TOTAL Señor, cuanto me diste, yo te entrego, no sé si por las penas depurado. Porque penas, Señor, también me has dado; mas si Tú me las das , son mi sosiego. Señor , escucha mi amoroso ruego : Perdona mi torpeza y mi pecado ... Por la herida que mana de tu lado , dame, Señor, de tu divino fuego. Todo lo que me diste , ya te doy. Y además de entregarte cuanto soy, doite amor y dolor de mi experiencia . Sobre todo el amor -Tú lo infundiste. Faro feliz en mi existencia triste ... ¡Acéptame, Señor, por tu clemencia .. . ! 126 .4 / m a y ot ros poemas · NI SIQUIERA SOY DIGNO DE ADORARTE Ni siquiera soy digno de adorarte. Perdóname Señor, esta osadía, pero siento en el pecho una alegría traspasándome todo, parte a parte. Porque dentro de mí todo es amarte. (A veces ya no soy ... Tú, el alma mía modelas, le das vida y armonía, como un barro que en luz quieres llevarte) Perdóname, Señor, este contento. Esta euforia saliendo incontenida, ¡ de no caberme más deslumbramiento! ¡En copa tan pequeña, tanta vida! De sentir tanto amor como ya siento, ¡se me torna una estrella cada herida! - 1 lma _r otros poema .1 127 AL POSTRARME A TUS PIES ... Al postrarme a Tus pies, -al Infinito deposito esta vida que me has dado; mi ardiente corazón atormentado hecho panal por Tu dolor, contrito . Mi espíritu anhelante deposito por entrever Tu albura, desluP1brado; todo mi ser vencido, enamorado quiere volver a Tí, Cristo bendito. Ir a Tí, como el agua pura al cielo -el agua que era sucia por el suelo por el beso atrayente de la luz ... Porque Tú me has llamado, ¡oh, casto lirio! Porqué Tú me has salvado en el martirio, al morir por los hombres en la Cruz. 1211 Alma y otros poema., FUENTE DEL TIEMPO Fuente del Tiempo y de la Vida fuente. Manantial, torrentera y mar de Vida. Imperio de la Luz. Alma encendida y abrasada de Amor omnipotente. ¡ Qué júbilo sentirme en la corriente de fuerza universal incontenida ... Sentirme en la agudeza amanecida de eterno sol y acontecer consciente! ¡Señor! Mira la frágil criatura. - Vibrátil criatura enamorada, desde su tosca planta, de la AlturaSomos Tus hijos en viviente Amor; Falenas que sacaste de la Nada ... ¡Y, aún nos levantas hacia Tí , Señor! .-1/ma y o tro s ¡10 e111a ., 12!1 RETORNO AMOROSO ¡Ah, cuánto tiempo el corazón Te llama Ternura de los Tiempos, y el quebranto de mis largos caminos hoy es llanto de gozo, que del alma se derrama! Inmensidad de luz el alma inflama. Inmensidad de Amor, Tu nombre santo . Cobíjame , Señor, bajo Tu manto . Fundirme quiero en Tu divina llama . .. Por los largos caminos de la vida ¡Cuántas veces el alma te buscaba, sin Norte, errante y en foscor perdida! ¡Cuántas veces, Señor, busqué Tu encuentro, hasta que oí Tu voz, que me llamaba, desde dentro del alma, desde adentro ... ! 1 :rn A /111a y o rr os po ema s YA LLE V AME CONTIGO ... Me muero por Tu Amor y Tu Sapiencia. Me muero si no muero por quererte. Si muriendo, Señor, yo puedo verte, me muero de premura y de impaciencia. Me muero por matar esta vehemencia pensando, pecador, no merecerte ... Me muero por sentirte y por tenerte constante en mi conciencia y mi vivencia. ¡Ya llévame contigo! Fortaleza ya tiene el alma mía para el vuelo que, a más Amor, volando menos pesa .. . ¡ Qué atrayente será volar al Cielo! Y más cuando se sabe con certeza que esperas con Tu anhelo nuestro anhelo . . ·Hma y o/ros poema ., PENETRAME SEÑOR Penétrame, Sefior, sentirme quiero inundado de Luz y de Armonía ... Transfórmame mi noche en claro día y la sed de mi espíritu en venero ... Penétrame, Sefior. . . Todo lo espero de Tu Amor -hecho gracia y poesía, derramado cual sol de fuerza pía fraguando vida el Universo entero.Penétrame de modo que mi ser suba siempre hacia Tí, como la gota del agua que evapora la calor ... Como gota, Sefior, quiero ascender hacia el azul de esa región ignota, sumiéndome en océanos de Amor. 1:12 , Alma y orros poema s EL TIEMPO SE HA DORMIDO EN LA DISTANCIA El Tiempo se ha dormido en la distancia al sentir en su seno Tu presencia y cargar -sin poder- tanta potencia eterna, conservando su fragancia. ¡Oh; el alba misteriosa de Tu infancia, las mieles de Tu ciencia y Tu querencia, el fuego medular de Tu clemencia, el cósmico poder de Tu constancia! El Tiempo se ha dormido ... ¡Enamorado! Perdiendo en la distancia su espesura, quedando tan delgado, tan delgado ... ... Que deja transparente Tu figura como un mar todo Amor, todo Hermosura. Como un sol luminoso ... ¡Iluminado! 1/1110 y 01ros poemas JESUS SOBRE LAS AGUAS «Y los discípulos, viéndole andar sobre la mar, se turbaron .» S . Juan: 14-26 Jesús, dulce Jesús de Galilea . .. Ingrávido en las olas, cual del cielo suspendida en amor la blanca estrella . Silueta blanca sobre inquieto azul. .. en la alba espuma y sobre viento de ámbar, y bajo la ternura de los cielos, Jesús avanza ... Mar, dichoso mar, suspendiendo la concha de sus dedos, el lirio de su frente retratando ... Mar, dichoso mar ... ¡Oh, cuánta miel en tu regazo amargo! ¡Ay, Pedro, Pedro ... ! No vaciles, Pedro, que eres el único en el instante único, con ese copo alado, con ese lampo místico, con esa miel etérea, con ese nimbo anímico que flota sobre el mar. . . ¡Ay, Pedro, Pedro ... ! ¿No ves la gracia cósmica total fluyendo en la humildad de Tu Maestro? El cielo es hermosura misteriosa, el viento es arpa azul, es miel y es nácar . La mar besa las plantas de Jesús dichosa de sentir tan dulce carga ... Jesús en el confín marino tórnase incorpórea blancura . .. Alma. Sólo Alma ... 1:JI .·l lma y otr os poema s EPITAFIO -EN EL AIREDEL POETA No existe muerte: morir es ciertamente nacer a la vida más sutil. Es la noche atravesar -duda a duda, hora en hora es en asombro llegar al júbilo de la Aurora y, sobre el Día ... ¡Volar! No existe muerte: morir es hacia Dios ... proseguir ... . ·l ima y otros {Wf!nw, HORA FINAL ME QUEDARE SIN HABLA. ME QUEDARE SIN VOZ ... PERO ENTONCES EL ALMA ASCENDERA HAC IA DIOS . 1:16 A /1110 y 01 ro s poemas INDICE Palabras prologales, por D. Juan Madrona lbáñez Fragmento de un juicio crítico, publicado en la revista «La Tribu na», de Montevideo, por Francisco Ferrándiz Alborz. Palabras preliminares del autor. Alma (En su viaje)............................... .... ....... .................. () Pan .............................................. ... ...... ....... .... ............ . 11 Ladrón de versos ................................. ..... ..................... ... 12 Quisiera . . . . . . . . . . . . . . . . . .. . . . .. . . . . . . .. .. . . . .. .. . .. .. . . . . . . . . . .. . . . . . .. . . . .. .. . . 1 .’3 Quisiera . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 1 4 Grabado Camino de la Aurora ........................ .............. ....... .. ..... .... .. 15 Mito ......................................... ....... ............ ........ ...... .... 16 Con el niño en la sierra ...................................................... . 18 Llegada del niño ........................... ............. ............... ........ 19 Venía el niño conmigo .................... ........ .................... ........ 20 ¡Eres mi madre! ....... ....................... .................. ........ ....... 21 Tú que miras tanto el cielo ....................... ..... .... .... ... .... ....... 22 Grabado He leído en tu carta .............. .......... ...................... ............ . 23 Jandira ................................................................ .......... 24 ¡Oh Jandira! ............................... ..... ... ...... ..... .... ....... .... .. 26 Delia ........................... .............. .... ... ..... .... ...... ....... ....... ’27 Con el alma en la mano............ ........... ....... ... ......... ...... ...... 28 Canción para llamar al sueño ......... ...... ........ ................. ....... 29 A una alondra ............... .......... ..... ........................... ...... .. . 30 A una alondra. ... ........................ ...... ......... .......... ............ . 31 Lamentos . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 32 Yo sé el martirio del agua .......... ...... ....... ......... ...... ... ....... .... 33 Siete llaves ...................... ....... ..... .... .... ......... ........ ........... 34 Argonautas del ensueño .................. .............. .. ........ ....... .... 35 Resolución ................................... ..... .... ..... .......... ........ ... 37 Lo mismo que aquel árbol de la loma... ........ ............ ..... .... .... . 38 La vida es surco abierto ........ .............. .............. ......... ... .... .. 39 Ascensión........... ................ ......... ...... ........ .... ..... ... ..... ... . 40 La siembra........................... ......... ... ...... ........ ........ ....... .. 43 Benditos sean los bosques ........................ .......... ........ ....... .. 44 Olivos de mi tierra ............... .............................................. 45 Hermano árbol. .... ........................ ... .. ........................... ... 46 Grabado Aquí me quedaría ............................. ....... ....... ... .... .. ......... 4 8 Me dormí con el árbol.. ........................ ............ .................. 4lJ Canto al hogar ................... .............. ..................... ........... 50 Paz .. ....... ..... ..... ............... ......... .... ............ .............. ... .... 51 Con alma vagabunda ................ ................ ......... ...... .... ... ... 52 Lo mío ......... ........ .... .... ...... ... ....... ............ .............. ... .. ... 53 Estoy con el que siembra .............. .... ..... ...... ......... .... ..... .... .. 54 Mientras lamen la playa ........................ ........ ............. ........ . 55 Del mismo tronco somos . ..... ........... ......... ............ ...... .... ... . 56 Invitación al canto ....... .................... ........................ ... ..... . 57 Excursión . ...... .... ......... .... ............ ........ ... .. .............. .... .... 59 Bendito sea este Valle ....... .... ...... .......... .......... .......... ....... ... 60 Como un saur io .. ........ ....... .... ....... ... .... ............... ...... .. ...... 61 Crepúsculo . ....... .......... .... ........... ............... .. .. . ..... ...... ... ... 62 Crepúsculo ............. ... ....... ...... ....... ........ ..... ... . ..... .......... .. 63 El Cid es de oro viejo ............ ....... ....... ..... ....... ......... ........ .. 64 Al monte «Silla del Cid » ........ ....... ....... ..... ...... ................. ... 65 A la Sierra del Caballo ........ .. ..... ........ ...... ..... ’. ... .. ... .. ...... .. .. 66 Amanecer desde la montaña . ......... .... ... ...... ...... ..... ...... ..... ... 67 En las cimas .......... ......... .......... ............ ............. ......... ..... 6 8 Todo circula libérrimo ....... ......... ............. ................ .......... 69 Nu{!ca la fuerces .. ......... ...... ........ ..... ........... ..... ... ... .......... . 71 La Poesía . ........ ................ .... ..... ....... ........ ........ ............... 72 A un Poeta . ......... ............................ ............. .... ............... 7 3 Grabado Poeta ......... ...... ..... ..... ..... ................. ............. ....... ...... .... 74 Teixeira de Pascoaes ...... ........ .......... .. .... ..... ... ...... .............. 76 Rubén Darío ....................... ...... .. ........... ................... ... .. .. 77 Entierro del poeta Miguel Hernández .............. ............ ...... ... .. 78 Se nos ha ido un alma .......... ... ... ..... ..... ..... ......................... 79 Se nos ha ido un ángel..... .......... .... ..... ..... ........ ............. ...... 80 ¡ Será su paso tan breve! . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 8 1 Dámaso vino a esta casa .. ..... ..... ..... ....................... ........ .... . 82 Muerte del viejo zapatero ... ........ .... ......... ........ .. .... ..... ..... .... 83 Al pintor Luis Vidal.. .......... ... .... .......... ......... ...... ....... .... .. . 84 Oyendo a María Casares ...... ...... .......... ........ ....... ..... ........... 85 Si dice a zarpar mi barca ... .... ...... ..... .... .... ..... ............ .......... 86 Más allá del recuerdo .... ...... .......... .... .................. .... .... ....... 87 Ya te queda poco tiempo .......... ...... ..... ....... ...... ................ .. 88 Proceso inexorable ....... ... ... ... .............. ... ...... ...... .............. .. 89 Ya siento deslizarse en la pendiente ...... ............. ...... ......... ... .. 9 0 Mi cántaro. .... .. .... ........ ........ ......... ......................... ......... 91 Grabado Momento único ... ... ... .. .. .. .. ... .. ..... ............. ...... .................. 92 Doble deseo . ... ... .... ... .. .. ... ... ... ........... ...... ......... ..... ....... .... 93 Ultimo deseo .... ... ........ ... ... ........ ... : .. .... .... ...... .............. ... . 94 Piedras del camino ......... ... .. ... ... ..... ....... ............. .. ........ ... .. 9 5 Si yo no fuera eterno ........ ... .... . , ........... ....... ......... .............. . 97 Hojas de mi huerto místico .............. ......... ...... ........... ...... . Grabado Oración matinal. ............ ...................... ...... ......... ........... .. 1 O 1 Señor ..................................................... ........ ......... ...... 10 2 ¿Qién me llama, Señor ............... ........ ................ ............... 103 ¡Tú, fuiste! ........................... ...... ..... ................... ... .. ... .... 1. 04 Evocación bíblica ..... .... ........... .............. ......... .................. 105 Dulce pollino ... ....... ......... ....... ......................................... 106 Madre ......... ...... ......... ...................... ...... ........ .. ... .... ....... 107 Se dice que María ............. ................................. .......... ...... 108 Déjame, Madre, al menos adorarte ................................ ....... ¡ 09 Me han contado tantas cosas ....... ...................................... .. ¡¡O Impacto ........................... ....... ........................ _. .......... .... 111 Si apartara de mi tu poderío............ .................................... ¡ 12 ¡ Oh Santísimo Cristo!.......................... .............................. ¡ 13 Promesas del Señor .................... ·................ ....... ... .... ..... .... 115 Gracias te doy, Señor... .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. . l ¡ 6 Grabado Todos te abandonaron en la Cruz .... ..................................... 11 7 No me dejes , Señor, en el desierto ...... ........................ ........... 118 Me ha mordido la pena ..................... ................................ . 119 Con heridas de luna ... ............ ................ .................. ......... ¡ 20 Llamabas a mi puerta ... .... ...... ..................... ... ............. ...... 12 1 ¡Cuanta misericordia en Ti, Señor! ............................ ........ ... 122 Sin Ti, Señor ..................... ..................... ........ ......... .... .... 123 Tu presencia ............................ ................. ....... ...... .......... 124 En lo puro del alma ................ ........................................... J 25 Entrega total ...... ..... ..... ... ............... ................................. 126 Ni siquiera soy digno de adorarte ............ ...... .......... ............ .. 127 Al postrarme a Tus pies ........ ........................................ ...... 128 Fuente del tiempo ....... ........................... ........................... 129 Retorno amoroso .. .............................. ............................ .. 1 :30 Ya llévame contigo ........... ........ .................. ..... .... .... .... ..... . 1: l l Penétrame, Señor ....................................................... ...... l: l’.2 El tiempo se ha dormido en la distancia .................................. I :l:i Jesús sobre las aguas .......... ............ .................. .................. l :l-1 Epitafio ........ ......... .......... .............................. ... .............. I ::¡ Hora final. ... ..................... ........ ....... ... ............ ....... ......... 1 :l(;

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