El largo camino de la cultura en Elda
El camino de la cultura en Elda siempre ha sido largo y lleno de dificultades. La biblioteca municipal ejemplifica dicho camino. Hoy se cumplen 87 años desde que el ayuntamiento eldense tomase el acuerdo de creación de la biblioteca municipal. Proyecto que tardó la friolera de 20 años en verse materializado.
Ya desde 1918 y de la mano del mismísimo Rafael Altamira conocemos los primeros intentos de dotar a Elda de una Biblioteca Popular. Iniciativa que tardó ocho años en plasmarse y cuando fue concedida por la Dirección General de Bellas Artes en 1926, cayó en saco roto en nuestro ayuntamiento.
Mas tarde, los intentos del alcalde Joaquín Coronel Rico, en 1930, también fracasaron ante la falta de un verdadero interés, quedando todo en la adquisición de diversos lotes de libros. Sin embargo, la constitución de un nuevo ayuntamiento en abril de 1931 y los nuevos aires políticos volvieron a poner encima de la mesa de la necesidad de dotar a Elda de una Biblioteca Municipal al servicio de todos los eldenses. Proyecto que fue aprobado por el pleno municipal del Ayuntamiento de Elda en sesión de 21 de julio de 1932, bajo la presidencia del alcalde Aquilino Bañón Sáez. Hoy hace 87 años.
Biblioteca que, como templo de la cultura, se acordó quedaría instalada en el salón de actos de las Escuelas Graduadas “Emilio Castelar” (act. Biblioteca Municipal Alberto Navarro), que serían inauguradas por don Miguel de Unamuno en septiembre de ese mismo año de 1932.
Sin embargo, aquella resolución del pleno municipal eldense volvió a caer en el olvido. No sabemos si por desinterés de los promotores, por la inestabilidad política municipal derivada de las disensiones en el seno de la conjunción republicano-radical-socialista o por el desafortunado karma eldense para con los temas culturales.
Aquel acuerdo plenario quedaría pospuesto, olvidado o relegado durante veinte años. La guerra civil y la posterior dura posguerra, donde la urgencia era atender las necesidades básicas de trabajo y alimentación, poco espacio dejaron de maniobra para la cultura. Será en septiembre de 1952, bajo la alcaldía de José Martínez González, y gracias a la campaña pública emprendida por el grupo de personas agrupadas en la revista Dahellos, cuando se procedió a la inauguración de la Biblioteca Pública Municipal de Elda en las entonces Escuelas Nacionales Graduadas “Padre Manjón”.