Elda y la Ciudad Vergel

Un 18 de agosto de 1932, hoy hace 92 años, el Ayuntamiento de Elda autorizaba la construcción del proyecto de viviendas conocido como “Ciudad Vergel”. Se iniciaba así una aventura urbanística que 92 años después se constituye en ejemplo español de urbanismo avanzado a nivel europeo.

Siguiendo el modelo inglés de “ciudad jardín” (Letchworth, 1903 y Welwyun Garden City, 1919), la Ciudad Vergel eldense vino a sumarse tempranamente al ejemplo de otras ciudades europeas y españolas, caso de Bilbao (1923), Burgos (1924), Vitoria (1924), Málaga (1925), Cartagena (1929), Santander, Torrelavega (1932), etc. Modelo urbanístico que perseguía la construcción de zonas urbanas diseñadas para una vida saludable, mediante el crecimiento urbanístico moderado, la baja densidad y la existencia de un entorno verde. Elda se sumaba así a esta iniciativa de vivienda de alto standing, acorde con las últimas tendencias europeas en vivienda de calidad.

Constituida inicialmente como Sociedad “Ciudad Jardín” en el año 1926 al amparo de la Ley de Casas Baratas (1921) que fomentaba el cooperativismo como forma de solventar el déficit crónico de vivienda en las ciudades industriales, pronto cambió a su denominación de “Ciudad Vergel”. Entre los eldenses implicados en aquel proyecto podemos encontrar a Eliso Verdú Sala, José Fernández Barranco, Eloy Catalán Cantó, Manuel Maestre Gras, José Joaquín Bañón Amat, Francisco Jiménez Martínez, Manuel González Vera, Enrique Payá Pastor, Luis Nieto García, Luis Cuenca Jiménez, Narciso Catalán Romero, Rafael Tordera Sampere y Miguel Vidal Vidal, que formaron parte de la primera junta directiva de la sociedad.

Desde su fundación se tardó seis años, con cambios políticos y adquisición de terrenos por en medio, en iniciarse la tramitación de la actuación urbanística municipal. Así en el año 1932, Manuel Pérez Gras, en representación de la sociedad, solicitó la preceptiva aprobación municipal, presentando el proyecto y memoria, para la construcción de una barriada de casas en los terrenos (unos 50.000 m² aprox.) que la sociedad había adquirido en las afueras de la población junto al término municipal de Petrer, al borde la carretera N-330 en la partida la Almafrá. En este sentido, recordar que en aquel momento (1932) el núcleo urbano terminaba en la actual intersección de la Avenida de Chapí con la calle Pablo Iglesias, que por entonces se situaba en la periferia de la población y no se encontraba definida tal cual la conocemos hoy en día.

El Ayuntamiento eldense, presidido por el lerrouxista Aquilino Bañón Sáez, a la vista del proyecto urbanístico, lo autorizó provisionalmente el 9 de junio de 1932 y de forma definitiva el 18 de agosto del mismo año.

Un año tardaría la sociedad en iniciar las obras de construcción de las viviendas, pues previamente hubo que ejecutar el proyecto de urbanización con la alineación, apertura de viales y reparcelación de los terrenos. Se definieron 10 grandes manzanas, subdivididas en parcelas de unos 485 metros cuadrados de media.

Las obras de construcción de los primeros 8 chalets o viviendas unifamiliares aisladas obtuvieron la licencia municipal el 3 de agosto de 1933. A los que se sumaron otros 9 chalets para los que se concedió licencia el 22 de enero de 1935. Y otras ocho viviendas más tarde, hasta alcanzar los 25 chalets construidos en las avenidas de los Eucaliputs y de las Magnolias antes del estallido de la guerra civil en julio de 1936. Finalizada ésta y ante el cambio radical de coyuntura económica se procedió a disolver la sociedad ante la imposibilidad de continuar con el objetivo inicial de promoción de las 79 viviendas proyectadas.

Historia, arquitectura, urbanismo y valor cultural acreditan a la Ciudad Vergel de Elda, tanto a nivel local como a nivel nacional, como una de las barriadas históricas y más singulares de nuestra ciudad.