El PP se hace eco de las críticas de los vecinos y comerciantes por el corte de la avenida Alfonso XIII
El corte al tráfico de la avenida Alfonso XIII del pasado sábado a iniciativa del área de Medio Ambiente gestionada por Compromís para hacer reflexionar a la ciudadanía sobre la calle como un espacio de todos, no solo de los coches, parece que no ha sentado bien a los comerciantes y vecinos de la zona. El edil popular Francisco Muñoz afirma que "no se ha pensado en la ciudadanía, imponen sus pensamientos sin valorar cómo les va a afectar esta medida a quienes a diario viven y trabajan aquí".
Francisco Muñoz visitó la zona durante la mañana y lamentó la decisión "de los miembros de Compromís, pues para que haya aquí tres bailando se ha atacado a los comerciantes de la zona, están muy enfadados con este experimento, el cual espero que no se vuelva a repetir". El popular va más allá y se pregunta "¿Cuanto le ha costado a los eldenses que los cuatro miembros de Compromís hayan querido desayunar un sábado por la mañana en una calle tan concurrida como esta?".
Tras conocer el disgusto de los comerciantes, Muñoz ha pedido a la edil responsable del área, Pilar Calpena, que "la próxima vez piense en todos y no en lo que ellos quieren, ya que representan a toda la ciudad y son muy pocos los que están a favor de este tipo de cortes". Los negocios de Alfonso XIII y de las calles cercanas que permanecían cortadas vieron reducidas sus ventas el fin de semana "pues apenas pasaron personas o vehículos y sus ingresos se fueron a pique", critica Muñoz.
Vecinos y comerciantes de la zona se han mostrado enfadados y afirman que durante la actividad "solo han entrado un par de clientes en toda la mañana, con esta idea han fastidiado a los pequeños comerciantes y no a los grandes, pues la manzana de Mercadona no se han atrevido a tocarla", lamenta uno de los afectados. Las quejas no se han referido solo al corte de calles durante la mañana del sábado, sino también a la tarde del viernes, pues la grúa tuvo que arrastrar los vehículos que permanecían en la calle. Ahora, tras lo que consideran "un fracaso", vecinos y comerciantes piden que "no se vuelva a repetir aquí este tipo de ideas, ya que además ha sido muy complicado sacar y entrar los coches a los garajes, nosotros también pagamos nuestros impuestos para poder hacerlo con normalidad".