Cientos de personas disfrutaron del humor más eldense con el Tenorio
El Teatro Castelar volvió a acoger un año más, en dos sesiones, una de las citas más esperadas por los ciudadanos, la representación de El señor don Juan Tenorio o Dos tubos un real. Cientos de personas cumplieron con esta tradición eldense que se celebra cada 28 de diciembre para divertirse y dejarse sorprender por los numerosos guiños a la actualidad local y nacional gracias al equipo dirigido por Juan Sanchiz y Miguel Barcala. Los beneficios recaudados se destinarán a los afectados por la DANA. El alcalde, Rubén Alfaro, estuvo presente en la primera sesión así como diferentes ediles del equipo de gobierno.
Antes de iniciar la función se le mandó un mensaje de apoyo a unos de los directores de la obra, Miguel Barcala, que estaba en casa escayolado. Era la primera vez que faltaba al Tenorio Eldense desde 1972. Otro de los ausentes fue Juan Deltell por problemas de salud.
El momento de las críticas fue el más esperado por los presentes que no pudieron evitar soltar alguna carcajada provocando que los actores tuvieran que hacer una pausa en sus diálogos. En la parte local el tema más recurrente fue el retraso del Bulevar de la Mejor Calzada, pero también se abordaron temas como la tardanza del inicio de la obra de la Plaza de Toros, la peatonalización de diferentes calles, las largas listas de espera en el Hospital, la rehabilitación del Castillo o el 120 aniversario del propio Teatro Castelar.
A nivel nacional también se abordaron temas como la visita de Puigdemont, el programa de La Revuelta, la tragedia de Valencia por la DANA o la famosa forma de ligar en Mercadona con una piña en el carro. Además, la lucha final fue al estilo Dragon Ball haciendo un guiño a su creador, Akira Toriyama, que falleció este año.
Esta parodia, escrita por el eldense Emilio Rico Albert hace 105 años, no sufrió ningún cambio en el elenco principal respecto al año pasado. Esta famosa obra que parodia el Don Juan Tenorio de Zorrilla la representó un año más el Grupo de Teatro de la Junta Central de Comparsas de Moros y Cristianos. La música fue de la Big Band Idejazz dirigidos por Héctor Juan.
El fin de fiesta fue al más puro estilo Moulin Rouge y diferentes actores se enfundaron un cancán bailando algunos de los famosos temas de la conocida película.