La devoción a San Antón culmina unos brillantes Moros y Cristianos
Unas fiestas inolvidables han concluido. La ciudad dio por finalizados ayer los Moros y Cristianos con la Procesión y Traslado de San Antón, con cientos de voces interpretando a una voz el himno A San Antón. Las lágrimas se escapaban de numerosos rostros, reflejo de la emoción que sentían al cerrar unas fiestas para el recuerdo.
En la última tarde de Moros y Cristianos, la Procesión comenzó a las 18:30 horas con el repique de campanas de Santa Ana. Así se anunciaba la salida de San Antón.
Los Embajadores abrieron este acto, marcaron el paso de Cristianos, Piratas, Estudiantes, Zíngaros, Contrabandistas, Marroquíes, Huestes de Cadí, Musulmanes y Realistas, quienes portaban al patrón festero.
Los festeros, con maquillajes sutiles, desfilaron a paso de procesión antes de San Antón, que estuvo acompañado por la AMCE Santa Cecilia. Una gran palmera anunció el final de la Procesión y el inicio del Traslado del Santo anacoreta hasta la ermita, donde entró tras los fuegos artificiales y mientras los presentes cantaban su himno. El traslado del estandarte del santo a la Casa de la Viuda de Rosas, sede de la Junta Central de comparsas, fue el último acto oficial de la fiesta.
El presidente de la Junta Central, Pedro Serrano, hizo una valoración muy positiva de las fiestas, ”aunque han estado un poco salpicadas por la lluvia del sábado, ha habido una gran participación de festeros y de público. Han sido multitudinarias”. Las fiestas han recibido con los brazos abiertos al nuevo embajador, Juanjo Conejero, “la población ha visto cómo se han estrenado, tenemos a un gran Embajador y a un muy buen Centinela, Héctor Rojo, ambos han aprobado con sobresaliente”. Con alegría aseguró que “las fiestas han sido perfectas, puesto que la gente ha disfrutado. Eso es un gran orgullo para toda la Junta Central y para las comparsas”.
Ahora comienza la cuenta atrás para las próximas fiestas, que serán del 29 de mayo al 2 de junio de 2025. Quedan 345 días.