Pedro Poveda, coleccionista de la historia de Elda
El eldense Pedro Poveda es un enamorado de la ciudad y prueba de ello es la gran colección de material que ha recopilado con el paso de los años y que constituye un auténtico museo. Su predilección son las fiestas de Moros y Cristianos, lo cual se nota nada más entrar a su museo en plena Plaza Mayor, donde se pueden encontrar sobre todo piezas relacionadas con las fiestas más multitudinarias de la ciudad y de su comparsa, los Moros Realistas, pero también joyas como publicaciones de El Seráfico o incluso uno de los cupones del sorteo que se celebró para costear la emblemática estatua del ilustre Emilio Castelar.
Poveda fue capitán de su comparsa en dos ocasiones, una en 1998 con su hija Conchi y otra en 2005 con su hija Reme. En esta segunda ocasión aprovechó para publicar el libro sobre el patrón festero San Antón y Elda, consistente en una recopilación de los textos de José Luis Bazán, que muestra a la entrada del museo, junto a un cuadro que plasma el famoso templete de la Plaza Castelar y un gran dibujo de la ciudad.
En las paredes de este espacio cuelgan decenas de cuadros, retratos y piezas museísticas de gran valor, desde el primer cartel de una corrida en la Plaza de Toros de Elda de 1946 pasando por una fotografía aérea de Elda en 1958 hasta llegar a todos los carteles de sus queridas fiestas.
También cuenta con todas las revistas de Moros y Cristianos que se han publicado, “la primera revista, la de 1945 es una maravilla, tiene un gran significado para mí, desde esa tengo todas las originales”. Otra de sus reliquias es un libro de Economía y Política de Sempere Guarinos de 1801, que guarda en perfectas condiciones. También muestra como tesoros sillas y un reloj del antiguo Cine Coliseo y algunas de las primeras sillas del Teatro Castelar. Otro de sus tesoros es el álbum de cromos de la reconstrucción de Santa Ana de 1954.
Aunque no ha contabilizado todo lo que tiene, sabe que son miles de objetos, algunos consisten en documentos o revistas y otros objetos diversos como un parchís de Moros y Cristianos. También conserva el dibujo original que realizó en 1972 el artista Serafín con el logo de las fiestas.
Otra de sus pasiones es la música y colecciona instrumentos musicales, de hecho toca el saxo alto, como no podía ser de otra forma, en la histórica agrupación de Elda, la AMCE Santa Cecilia.
También guarda las revistas de Fiestas Mayores de 1927 y 1928, y diarios como un ejemplar del Liberal de Elda de 1915, un Idella de 1927, otro de El Cronista, un Albor de 1935 o uno más actual del primer Vivir en Elda de 1981. Lejos de acabar aquí su pasión por el coleccionismo, también disfruta de la arqueología y guarda el material de sus rutas en el Casino que él mismo inició, reconvertidas ahora en rutas del Ayuntamiento.
A sus 72 años ha conseguido esta amplia colección que empezó en 1974 guardando cosas casi sin darse cuenta. Parecía predestinado a querer la cultura local, pues su padre nació en el mismísimo Teatro Castelar, ya que sus abuelos eran conserjes del espacio cultural más importante de Elda en la década memorable de 1920, desde donde ha mamado la pasión por su ciudad.
Pertenece a diversos colectivos culturales y festeros: al Casino Eldense y la comparsa Moros Realistas, también forma parte de La Tertulia, la Comisión de la Traca de Fiestas Mayores, y La Boquica, un grupo de amigos de las fiestas de Moros y Cristianos.
Afirma que seguirá coleccionando material durante el resto de su vida y espera que cuando toque pasar el testigo, que sus hijas y nietos sigan sus pasos, aunque está seguro de que cuidarán todo con gran cariño.
El museo en imágenes
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