Un grupo de inversores de la presunta estafa piramidal denunciará los hechos
Un grupo de inversores de Elda de la Generación Zoe, empresa creada en Argentina con sede en Elda y que está siendo investigada como una presunta estafa piramidal, han anunciado hoy ante los medios de comunicación que van a denunciar por estafa a la empresa y a los presuntos responsables de este negocio en la ciudad. Aseguran que entre 12 personas han invertido 350.000 euros y ahora temen no recuperarlos. Además, calculan que habrá 700 afectados.
Aseguran que entre los responsables de este presunto engaño figura quien se presentaba como presidente de Generación Zoe en España y Europa, Daniel Paterna -que ahora afirma que fue un comercial externo y que “de forma cautelar", él y su equipo “han cesado en la labor comercial que les ocupaba con Generación Zoe”-, y a su hermano, Camilo Paterna. Al parecer, hoy los hermanos se encontraban en su negocio, situado muy cerca del Mercado Central, pero no han querido atender a la prensa ni a los inversores.
El portavoz de este grupo de inversores, Enrique Maestre, afirma que son “eldenses afectados por la presunta estafa piramidal” y admite sentirse “engañado y estafado” y que estiman que en Elda hay unos 700 afectados, “por lo que creemos que habrá una barbaridad de dinero invertido”.
Maestre denuncia que en Argentina la policía empezó a intervenir en noviembre, y lamentan que en Elda “lo sabían y siguieron recogiendo dinero presuntamente en B, lo tienen que tener, solo pedimos que nos den nuestro dinero”.
Aseguran que esta empresa "ha vendido humo, ayer 7 de marzo se supone que la gente tenía que cobrar, pero no fue así, había gente llorando, pegando puñetazos a las paredes; dicen que la semana que viene entregarán dinero, pero creemos que no es cierto, lo van alargando, nuestro temor es que se vayan hasta de Europa con nuestro dinero”.
Estos inversores fueron atraídos con la promesa un 7,5 de rentabilidad, pero ahora lamentan que llevan dos meses sin cobrar y que todo fue “un engaño para que picáramos”.
Las oficinas siguen abiertas, pero desde ayer cuentan con una persona en la puerta como seguridad extra que no permite entrar a casi nadie. Al parecer, algunas personas han cobrado, pero la mayoría no son recibidos por los hermanos Paterna, y comienzan a desesperarse.
Este grupo de 12 personas acudirá a denunciar los hechos a la Policía Nacional para que investigue lo sucedido, de hecho, han acudido al lugar dos agentes de la Policía Nacional que han tomado nota de los hechos.