El continuo abandono de viviendas y comercios de La Purísima preocupa a los vecinos del barrio
Cada vez más casas del barrio La Purísima son abandonadas, por ello, desde la asociación de vecinos trabajan para intentar conservar el barrio y rejuvenecerlo. Actualmente son unas 30 las viviendas que o bien han sido derribadas o están deshabitadas y tapiadas en este barrio, ya que la marcha de vecinos ha provocado el cierre de muchos comercios en la zona. Esta es una cadena que la asociación de vecinos intenta frenar para que el barrio "vuelva a crecer y a ser lo que era", destaca el presidente de La Purísima, José Miguel Tornero.
Tornero ha afirmado a Valle de Elda que "el proceso de deterioro ha sido gradual, se han abandonado muchas viviendas de planta baja, estas han tenido que ser derribadas o tapiadas debido a su mal estado, otras han sido convertidas en cuartelillos. Esto provoca que los vecinos de alrededor se marchen, es un círculo vicioso que no sabemos cómo parar".
Además son muchos los negocios y fabricas que han cerrado: "Ahora solo quedan tres o cuatro negocios en las calles Colón y Nueva, cuando antes había muchísimos". El gran número de solares ha provocado que "tengamos numerosos problemas de insalubridad, hace cuatro años estaba plagado de ratas y cucarachas, ahora, debido a su abandono, tememos que esto vuelva a ocurrir, sobre todo en los terrenos colindantes con la calle La Purísima".
Este problema no es nuevo para La Purísima: "Desde hace más de 10 años venimos reclamando al Ayuntamiento de Elda que nos ayude de alguna forma, creo que no saben cómo porque es algo muy complicado". Si bien piden "comenzar por lo más sencillo, hay desperfectos que se pueden solucionar con más facilidad. Por ejemplo, la calle Rey San Fernando lleva a oscuras mucho tiempo, las vecinas, ya mayores, deben iluminarse con linternas; faltan papeleras; los ciudadanos no tenemos cuidado y hay mucha suciedad; los jardines de la plaza Rodolfo Guarinos están abandonados, es una vecina la que se encarga de regar y cuidar ese espacio... son situaciones incomprensibles", lamenta Tornero.
El equipo de gobierno actual, tras conocer los problemas que sufre esta asociación ya se ha comprometido a ayudar en lo posible así como a trasladar la actual sede de la asociación, sito en un semisotano de la calle Rey San Fernando, hasta un local en la plaza Rodolfo Guarinos para la comodidad de los vecinos. Este primer paso es valorado de forma muy positiva por los vecinos del barrio, quienes confían en que "poco a poco se vaya dando la vuelta a esta lamentable situación".