Derribo inminente de un edificio protegido por el Catálogo de Bienes en la calle Pedrito Rico
La calle Pedrito Rico se ha cerrado a primera hora de la tarde al tráfico, desde la confluencia con Ortega y Gasset hasta la de Porvenir, a causa del peligro inminente de derrumbe de un inmueble. Además las brigadas municipales han vallado la zona para impedir que los ciudadanos puedan acercarse. Se trata del edificio nº 15, incluido en el Catálogo de Bienes y Espacios Protegidos de Elda. A pesar de ello, la reciente declaración de ruina inminente es prioritaria, permite su derribo. Desde la Concejalía de Urbanismo han anunciado que también se derribará la vivienda anexa, situada en el número 13.
Pese a que el edificio está situado en un punto neurálgico de la ciudad, desde el Ayuntamiento de Elda no han dudado en cortar la calle debido al peligro existente, por seguridad. Al parecer, las lluvias de la madrugada del pasado lunes han empeorado el estado ya ruinoso de este bien, así lo confirmó el aparejador municipal ayer, cuando valoró su estado y lo declaró como ruina inminente.
El inmueble, que fue construido entre los años 20 y 30, se incluye en el catálogo como "Patrimonio arquitectónico Civil. Edificios residenciales", debido al valor de su fachada. A lo largo de su historia ha acogido un almacén de curtido y una tienda de calzado, pues el interior de este edificio de tres plantas unifamiliar se transformó totalmente para acoger la actividad comercial.
La concejala de Urbanismo, Pilar Calpena, ha explicado a Valle de Elda que aunque no existe fecha exacta para su derribo, este es inminente y se realizará en breve.
Sorprende que el estado de conservación de este edificación fuese declarado como "bueno" en el Catálogo de Bienes que fue aprobado en agosto de 2014, cuando su situación ya era ruinosa. Los vecinos de la zona llevan mucho tiempo quejándose sobre su mal estado.
Cabe recordar que el pasado mes de febrero el Consistorio decidió vallar el edificio por seguridad, aunque el anterior edil de Urbanismo y Vivienda, Vicente Amat, aseguró que fue "por seguridad, para prevenir, pero no que no existía riesgo de derrumbe".