Comienza la sustitución de los nombres franquistas de las calles y plazas de Elda
El Ayuntamiento de Elda ha comenzado el proceso del cambio de las placas con nombres ligados a la época franquista de su callejero para cumplir con la Ley de Memoria Histórica. La nueva nomenclatura ya se puede ver en las calles del casco antiguo de la ciudad y la próxima semana se culminará el cambio con el resto de calles. Esto tendrá un coste de 3.300 euros e incluye la creación de 40 placas de chapa y 11 de cerámica explicativas.
El cambio se está llevando a cabo en dos fases, primero las del casco antiguo que son de cerámica, mientras que el resto, que son de chapa, llegarán la semana que viene. De la misma forma también se han quitado elementos de simbología franquista como placas en la zona de Virgen de la Cabeza. Además, se están haciendo trámites con la Dirección General de Interior y con la empresa estatal de Correos y ya se está haciendo el cambio del padrón.
Ahora los ciudadanos, aunque no tienen que hacerlo de forma urgente, deben comunicar el cambio a sus empresas suministradoras y a todas aquellas que les mandan correos. La sustitución del nombre de su calle en el DNI puede esperar a que caduquen o renovarlo de forma gratuita.
El edil de Patrimonio Histórico, Amado Navalón, ha afirmado que el cambio se ha hecho de forma “aséptica, pues había más símbolos que habría que haber retirado pero el equipo de gobierno ha respetado la opinión de los expertos, se cumple con la normalidad democrática, así se cumple con la Ley de Memoria Democrática". Navalón ha afirmado que “personalmente quitaría la Cruz de los Caídos, no el monumento, la propia cruz porque representa el catolicismo y también tiene un cierto toque fascista, pero los expertos no lo consideran así y por ello no se plantea”.
Los nombres
Una de las calles que cambiará su nombre será la céntrica José María Pemán, que pasará a denominarse Elia Barceló Estevan, escritora eldense que reside actualmente en Austria, una novelista reconocida con numerosos premios. El resto de mujeres designadas para figurar próximamente en el callejero de la ciudad son: Natalia Tendero Gil, la primera mujer concejala en el Ayuntamiento de Elda, lo fue hasta 1939, y su nombre sustituirá a la calle Alcázar de Toledo, que rememora un lugar y acontecimiento históricos, situada en el barrio de La Purísima.
Magdalena Maestre Amat fue la primera mujer presidenta de la comparsa de Zíngaros y su nombre reemplazará en el callejero actual al de Andrés Amado. Asimismo, la empresaria y miembro de la Asociación de Industriales del Calzado de Elda, Lolita Miralles Esteve, tendrá su propia calle, ahora conocida como Eugenio Montes.
La comadrona María Perni Algarra, que ejerció su labor desde 1909 a 1954 en Elda, sustituirá a Federico García Sánchiz; la enfermera Manolita Candel Pérez dará nombre a la calle conocida como González Bueno; y Milagros Maestre, aparadora, fundadora y presidenta de Aulas de la Tercera Edad durante más de veinte años, dará nombre a la actual calle Juan Vázquez de Mella.
Completarán el callejero Antonia Maymón, maestra de la denominada Escuela Moderna desde 1918-1931, durante el reinado de Alfonso XII, que sustituirá a la calle Belchite; Aurita González González, pionera del Movimiento Vecinal y vinculada a Cáritas y la HOAC dará nombre a la actual Alféreces Provisionales; Maruja Ycardo Agulló, poeta y enfermera fallecida recientemente, reemplazará a Luis Batllés; Josefina Ferrándiz Casares, maestra del Colegio Emilio Castelar de 1932 a 1934, dará nombre a la calle Brunete; y la empresaria Otilia Cutillas Pastor dará su nombre de la actual calle Tropas Gallegas.
A estos nombres se suman los de dos reinas de Aragón y señoras de Elda: Doña Violante de Bar, en la actual Plaza del Santuario, y Sibila de Fortiá, que reemplazará el nombre de la calle Ricardo León. Ambas contribuyeron al desarrollo de obras e infraestructuras en Elda en la época medieval. A su vez, Beatriz de Corella, condesa de Elda, sustituirá la actual denominación del conocido como Plaza Santuario.
Por otro lado, el Ayuntamiento también ha decidido atajar la falta de placa en la calle Federico García Lorca, situada en el barrio La Estación. Los vecinos, hace años, hartos de esperar una placa pusieron el nombre con grafiti para que se supiese el nombre de esta pequeña vía dedicada al poeta de mayor influencia y popularidad de la literatura española del siglo XX.