El paisaje agrario aterrazado

El paisaje agrario aterrazado Dilogo entre el hombre y el medio en Petrer (Alicante) Sabina Asins Velis UniVerSitAt de VAlnciA reSeArcH centre On trAditiOnAl And lOcAl KnOWledGe - iPOGeA (itAliA) 2009 A Vicente y a Nacho. A mi familia. A M Carmen Rico, de Petrer Contenidos Agradecimientos 9 Prlogo 11 Presentacin 15 el diSeO del PAiSAJe ABAncAlAdO de Petrer 25 1. descripcin del rea de estudio 27 2. La variable cultural y la presin demogrca sobre el espacio a cultivar 39 PriMerA PArte AnliSiS HiStricO: OrGAniZAcin Y GeStin del eSPAciO AGrAriO 45 captulo 1. lOS VAlleS diSPOniBleS 1.1. Ocupacin del territorio del neoltico a la poca Visigoda 45 1.2. campesinos musulmanes: heredamientos de pan, e de riegos, e de huertos, de vias& 53 captulo 2. SERAN BONS, LLEALS, FIELS E OBEDIENTS VASALLS 65 2.1.- el seoro de Petrer: de los loaysa a los condes de cocentaina 65 2.2.- el seoro de los coloma: dinamismo de los moriscos de Petrer 73 captulo 3. lOS nUeVOS POBlAdOreS criStiAnOS 91 3.1. la expulsin de los moriscos y la repoblacin de Petrer con cristianos 91 3.2. el espacio agrcola en el siglo XVii 95 3.3. Ampliacin del sistema de riego: manantiales, azudes, acequias, boqueras, balsas y la construccin del pantano 102 3.4. Fluctuacin de las cosechas en el siglo XVii y sequas recurrentes 112 3.5. delimitacin del bovalar 114 captulo 4.- lOS eStABleciMientOS AUtOriZAdOS, lAS rOtUrAciOneS ileGAleS Y lA BSQUedA de MAnAntiAleS en el SiGlO XViii 117 4.1. las tierras cultivadas a principios de siglo 118 4.2. expansin de cultivos: los nuevos establecimientos de tierras incultas 120 4.2.1. establecimientos legales 122 4.2.2. roturaciones ilegales 127 4.3. nuevas construcciones para mejorar el aporte de agua 131 4.3.1. Partidas del riego de la balsa de la villa 131 4.3.2. infraestructuras de captacin, transporte y almacenamiento de agua en las partidas de secano para mejorar algunos cultivos 134 4.4. la tierra de las capellanas, Obras Pas y Fundaciones 137 captulo 5.- lAS rePercUSiOneS de lAS leYeS deSAMOrtiZAdOrAS 145 5.1. La abolicin del rgimen seorial: el nal del vasallaje 145 5.2. las desamortizaciones de los bienes eclesisticos 146 5.3. los Bienes de Propios de Petrer y los montes del estado 149 5.3.1. Montes subastados en el ao 1861, adquiridos por la Sociedad de los Montes Particulares de Petrel 150 5.3.2. Montes subastados en 1878-1879 y relacin de Bienes de Propios de 1880 155 5.3.3. Montes subastados en 1885-1886 y relacin de Bienes de Propios de 1887 156 5.3.4. Montes subastados en 1892-1893 160 5.3.5. Montes subastados en 1906 y 1919 162 5.3.6. evolucin de otros Montes del Ayuntamiento de los que no consta fecha de venta 164 5.4.- La supercie cultivada en el siglo XIX 167 5.4.1. las leyes que autorizaban nuevas roturaciones 167 5.4.2 las partidas cultivadas y los efectos de la desamortizacin 173 5.5.- Actuaciones para fomentar la ampliacin del regado 179 captulo 6.- lA ActiVidAd AGrcOlA ActUAl en el trMinO MUniciPAl: deBilidAdeS Y POtenciAlidAdeS 187 6.1.- La supercie cultivada 189 SeGUndA PArte riQUeZA cUltUrAl Y AGrO-AMBientAl del PAiSAJe ABAncAlAdO captulo 1.- cArActerSticAS tiPOlGicAS de lOS BAncAleS 219 1.1.- Clasicacin morfolgica de los sistemas de conservacin de suelo 219 1.2.- Sistemas de aprovechamiento del agua y de regularizacin de la escorrenta 252 1.3.- construcciones de piedra en seco asociadas al espacio agrario 274 1.4.- Estado de conservacin de las infraestructuras: Documentacin grca 278 captulo 2.- cOnSecUenciAS del ABAndOnO de lOS AterrAZAMientOS 307 2.1.- Proceso de colonizacin vegetal en los bancales tras el abandono agrcola 307 2.2.- trabajos de repoblacin forestal 318 cOnSiderAciOneS FinAleS 323 BiBliOGrAFA 329 ABreViAtUrAS 361 Agradecimientos el libro que presentamos es el fruto de la tesis doctoral defendida en 2007 en la Universitat de Valncia. en este volumen hemos tratado de incorporar las sugerencias que nos hicieron los miembros del tribu- nal, drs. Adolfo calvo, Jose M Garca-ruiz, Gabino Ponce, Antonio rodrguez y Josep torr, ocasin que aprovecho para darles las gracias por sus interesantes comentarios y por dedicarme su preciado tiempo. As como a los directores del trabajo, drs. carmen Antoln, Jos l. rubio y Juan Snchez, por su continuo apoyo a lo largo de estos aos y por la conanza y respeto que han mostrado hacia nuestro trabajo. A mis compaeros del Centro de Investigaciones sobre Deserticacin, tanto a los que me han ayudado materialmente, sobre todo Andrs Pastor y los miembros del departamento de Planicacin territorial, como a los de los departamentos de degradacin y conservacin de Suelos y de ecologa Vegetal, quienes me han solucionado todas las dudas que les he consultado y me han animado continua- mente (y especialmente mis amigas eli Barrachina y lola rius). del mismo modo, a mis compaeras de Administracin, por todo, y en particular a Puricacin Momparler. Ha sido tambin inestimable la colaboracin de Pablo Carrillos Francs en la parte grca, gracias a su contribucin puedo presentar los magncos mapas del trmino que se incluyen en la publicacin; as como la de los dres. Vicente Graullera, Javier Jover, Bernat Mart y toms V. Prez Medina, quienes me han ayudado resolviendo dudas bien en el trabajo de archivo, bien en las salidas al campo o corrigiendo partes del manuscrito. Por otra parte, este estudio es deudor del incansable trabajo que en las ltimas dcadas han realizado, entre otros, arquelogos como los dres. rafael Azuar, Mauro Hernndez, Javier Jover, concepcin navarro o Gabriel Segura, y gegrafos e historiadores como los dres. remedios Belando, Jos V. cabezuelo, M teresa Ferrer, toms V. Prez Medina, Gabino Ponce, M carmen rico o Glicerio Snchez. Mencin aparte al petrerense dr. Jos M Bernab [ ], a quien tuve de profesor, quien en su incansable trabajo de campo recogi las particularidades de la arquitectura del agua en la localidad, y a quien el instituto interuniversitario de desarrollo local ha querido recordar convocando un premio de investigacin en su nombre. esta obra, que incluye trabajo de archivo y de campo, ha necesitado de la inestimable colaboracin de numerosas personas. en los archivos, quisiera destacar a da. Alicia cerd, de Monvar, por su ex- celente disposicin y amabilidad; al personal del Archivo del Reino de Valencia, especialmente a Da. Adela Risueo; a Da. Consuelo Poveda, del Archivo Condal de Elda; as como al personal del Archivo de Protocolos del Patriarca, del Archivo General de Simancas, del Archivo de la corona de Aragn, del Archivo Municipal de castalla y del Archivo Municipal de Yecla. igualmente a d. Miguel Garca Bartual, Jefe de Servicio de Poltica Forestal de la conselleria de Medio Ambiente, Agua, Urbanismo y Vivienda en Alicante y a D. Juan Giner; a la Ocina del Catastro de Alicante; a la OCAPA de Novelda; y a las diferentes direcciones Generales de los servicios centrales de la conselleria de Agricultura, Pesca y Alimentacin (sobre todo a d. Julin esteban, Jefe de Seccin de Promocin comarcal, y a da. te- resa Velzquez, Jefa de Servicio de Gestin Agraria Sostenible) y de la conselleria de Medio Ambiente, Agua, Urbanismo y Vivienda de la Generalitat Valenciana. Al ex-registrador de la Propiedad de elda, d. Martn Jos Brotons rodrguez, quien no slo nos permiti la consulta de los documentos, sino muy amablemente nos explic cuantas dudas nos generaban estos. del Ayuntamiento de Petrer a M Jos Gil, Gloria Esteve, Jess Ramrez y Sara Snchez. De la Cooperativa Agrcola, a Carlos Pay; y a D. Rogelio Pay, Presidente de la comunidad de regantes. A todos les agradezco las facilidades y atenciones que me han dispensado. en el trabajo de campo hemos contando con la generosa ayuda de numerosos vecinos del pueblo de Petrer, quienes nos han acogido y nos han mostrado cada bancal, cada mina, balsa o alcav. entre ellos quisiera destacar en primer lugar a luis Villaplana, gran conocedor de los parajes del trmino, quien tambin nos facilit cuantos datos solicitamos de la Ocina del Catastro de Petrer, y a sus primos Anto- nio y carmen Herrero, quienes nos acompaaron en repetidas salidas. A remedios Maestre y luis Ber- nab, a Pedro Amat (de la Gurrama), a Francisco rico Avelln (Paco el de l Administraci), a Antoita Pay (de Salinetes), a Paco rico y sus hijos (dels cotxinets), a luis el de l Almadrava, a carlos cortes, Sabina Asins Velis a luis Pay y su familia, a los hermanos lola y Juan Pay, (de caprala), a Guia (de Pua), a Paco Pay, de Palomarets, y a Josele Montesinos (casa castalla). igualmente quiero agradecer la colaboracin del grupo de espelelogos (Javier y su familia) que inspeccion la mina de Pua. Y expresar mi sincero respeto a la labor de carmelo Beltrn, recientemente fallecido. Adems la realizacin de este trabajo no hubiera sido posible sin la cooperacin de las concejalas de educacin, de Medio Ambiente y de Urbanismo y del mismo Alcalde de la anterior corporacin muni- cipal. A cuyos titulares, el ex-Alcalde, d. Jos Antonio Hidalgo y los ex-concejales d. Vicente Brotons, da. Pilar Brotons y da. Yolanda cspedes, expreso mi gratitud y amistad. de igual modo, agradezco sinceramente la publicacin de este libro al inters mostrado por el actual Alcalde, d. Pascual daz Amat, por el concejal de educacin, d. Jos Miguel Pay y por d. Vicente Maestre navarro, director General de caixaPetrer. As como la gran ayuda prestada por d. Juan ramn Garca Azorn, director de Servicios culturales del Ayuntamiento de Petrer. Desde luego no olvidamos la conanza depositada en nosotros por el Dr. Joan Romero Gonzlez, al facilitarnos la edicin de la obra y mejorar su comprensin al lector gracias a su magnco Prlogo. de igual manera, al profesor Pietro laureano por su contribucin en la coedicin de este libro, al igual que la colaboracin y atenciones de d. lluis Mir i Grabuleda, Gerente del Servei de Publicacions de la Universitat de Valncia, y a Juan Prez Moreno, por su labor en la edicin del mismo. Pero sinceramente este trabajo no hubiera sido el mismo sin M carmen rico navarro, Archivera- Bibliotecaria de Petrer, y su familia. M carmen me lo ha brindado todo a nivel profesional, pero por encima de ello su amistad. Finalmente, agradecer a mi familia, a mis amigos y especialmente a mi ma- rido y mi hijo el gran apoyo prestado. 10 Prlogo Como arma acertadamente John Berger muchos territorios rurales europeos sern, bsicamente, paisaje. Ya no requieren necesariamente la presencia de agricultores (Berger, 2006). el nuevo contexto econmico post-productivo y los profundos cambios sociales y culturales aconsejan el desarrollo de nuevas polticas en relacin con los territorios rurales europeos. Gran parte de ellos ya no sern necesarios para producir alimentos, pero les seguimos atribuyendo un conjunto de valores que trascienden a las tradicionales funciones productivas. los ciudadanos europeos preferimos mantener estos territorios vivos y estamos dispuestos a dedicar recursos pblicos para hacerlo. Adems de su dimensin territorial y ambiental, los paisajes rurales europeos son tambin y en ocasiones sobre todo cultura, historia, memoria colectiva, referente identitario y legado. Por eso van cobrando paulatinamente mayor importancia las polticas pblicas que refuerzan la funcin territorial y paisajstica. Gran parte de los territorios rurales en europa occidental ganan poblacin. Asistimos a una especie de renacimiento rural de la mano de esos cambios econmicos, sociales y culturales en curso en los que las clases medias urbanas han tenido un papel protagonista. Un cambio de tendencia muy signicativo y que no parece transitorio que ha ido impregnando iniciativas y polticas desde nales de la dcada de los ochenta del siglo XX. desde numerosas instituciones europeas, diferentes entes locales y poderes pblicos nacionales y regionales, se ha ido aanzando el argumento de que el desarrollo rural es una cuestin territorial y no sectorial. Esto no signica que los sectores rurales tradicionales ya no sean importantes, ni que la poltica sectorial en los niveles comunitario y nacional vaya a perder su importancia. Ante todo signica que el desarrollo debe ser estimulado, organizado y basado en un nivel territorial pertinente para la poblacin en trminos de cultura, de identidad y de redes. los espacios rurales han ganado en diversidad, en pluralidad y en complejidad. As se ha entendido en las formulaciones recientes referidas al futuro de los territorios rurales en europa. desde que en 1988 se presentara el documento de la comisin El futuro del mundo rural , pasando por la reforma de la PAc de 1992, la declaracin de cork Por un paisaje rural vivo en 1996, la Agenda 2000, las ulteriores reformas de la PAc, hasta las directrices estratgicas de desarrollo rural para el periodo 2007-2013. de otra parte, la propia Estrategia Territorial Europea (1999) y el Convenio Europeo del Paisaje (Florencia 2000) muestran por su parte la emergencia de una nueva cultura del territorio y el paisaje que tambin se ha ido abriendo camino en el siempre difcil mbito de las polticas territoriales concretas a escala regional y local. tanto la ete como el Convenio Europeo del Paisaje simbolizan y sintetizan muy bien esta comunin entre tradiciones, emergencia de nuevos valores y posibles enfoques alternativos para las polticas. All quedan reejadas nuevas aspiraciones para hacer frente a viejas frustraciones y a transformaciones no deseadas. Por eso se incorporaron referencias a la necesidad de desarrollar instrumentos de proteccin, gestin y ordenacin de todos los paisajes. Pero, sobre todo, se pona en relacin naturaleza, cultura, patrimonio, identidad, al tiempo que se sugera la necesidad de establecer nuevas polticas y procedimientos para favorecer la participacin activa de los actores polticos y sociales en su formulacin y aplicacin. las reas rurales representan ms del 80% del territorio de la Ue y las nuevas polticas de desarrollo rural se asientan sobre pilares nuevos. de una parte apuestan por la multifuncionalidad de unos territorios que no se limitan a la produccin de alimentos. los agricultores prestan una amplia gama de servicios adicionales que deben ser fomentados en tanto representan un potencial para el desarrollo endgeno de las reas rurales. Se refuerza el inters por los valores paisajsticos, naturales y culturales, los retos ambientales de la agricultura, el mantenimiento de asentamientos rurales vivos y la seguridad alimentaria. de otra, se privilegia el enfoque territorial y ms horizontal que la nueva poltica da a la economa rural es multisectorial e integrado, con el objeto de proteger el patrimonio rural y diversicar las actividades de los territorios rurales que permitan crear nuevas fuentes de ingreso y de empleo (Romero; Farins, 2007). Las polticas han reforzado ms esta tendencia hacia una progresiva atencin en favor del desarrollo rural y de la introduccin de prcticas ms respetuosas con el medio natural y la conservacin del paisaje. Una evolucin que guarda coherencia tanto con la creciente multifuncionalidad Joan Romero territorial, como con la creciente contestacin ciudadana en relacin con prcticas agropecuarias poco saludables e insostenibles y el creciente aprecio por los valores culturales e identitarios del territorio y el paisaje. Antes se hablaba de rural como sinnimo de plural. Hoy ms bien cabe hacerlo como sinnimo de plural, multifuncional y cultural. es en este contexto en el que debe entenderse la frase de John Berger con la que se inician estas pginas. los territorios rurales de la llamada vieja europa presentan unas caractersticas indisociables de una historia de varios milenios. Han conocido el paso de varias culturas y formas de ocupacin del espacio y cuyo legado ms preciado por la sociedad actual es la gran variedad de paisajes culturales y de expresiones de diversas ruralidades. Por esa razn se deende, incluso en foros internacionales, la especicidad de un modelo rural europeo en el que los territorios tienen signicados y valores que trascienden la funcin estrictamente productiva. La agricultura representa en europa mucho ms que un sector productivo. los agricultores constituyen un colectivo que, aunque sea ya minoritario y poco representativo en el conjunto de la actividad econmica, es visto por amplios sectores de la sociedad como nexo con su propia historia, pasada o reciente. tambin como elemento fundamental para garantizar que muchos territorios, entendidos como producto social, como paisaje cultural o como lugares de expresin identitaria, se mantengan con la vitalidad suciente, aunque su funcin fundamental ya no sea, en algunos casos, la de producir alimentos. en este nuevo contexto, el conjunto de la sociedad sigue otorgando a la agricultura y a los agricultores un protagonismo fundamental. la agricultura seguir ocupando en europa el lugar central en el conjunto de polticas de desarrollo territorial que sean desplegadas desde diferentes escalas. los territorios rurales aumentarn su potencial de diversicacin. la agricultura seguir formando parte central de una economa rural crecientemente diversicada. Probablemente persistirn diversas agriculturas, pero todas sern importantes para la sociedad: una agricultura industrial, relacionada bsicamente con las exigencias de los mercados globales; una agricultura, tambin comercial, ms centrada en la produccin y elaboracin de productos de calidad para atender la demanda creciente de mercados locales y regionales, y una agricultura territorial , integrada por explotaciones familiares que poseen una dimensin econmica insuciente y se encuentran en reas con limitaciones fsicas o econmicas o tienen un especial valor medioambiental (regidor, 2000). Unas orientadas al mercado y otra, econmicamente marginal, a la que la sociedad asignar, como funcin prioritaria, mantener vivo el territorio, a partir de la consideracin de ste como bien pblico. el actual contexto de reduccin del nmero de explotaciones, va abandono o jubilacin sin sucesin, tal vez se incremente en los prximos aos. en especial este proceso de reestructuracin afectar ms intensamente a extensas reas de agricultura del Sur de europa. de ah la necesidad de reforzar los enfoques territoriales para mantener activas reas especialmente frgiles en ambientes mediterrneos como la que aqu se estudia. ello aconseja pensar en la necesidad de establecer un nuevo contrato social entre agricultores y sociedad que permita reconciliar la ruptura producida entre agricultura, territorio y paisaje mediterrneo. Una de las fortalezas que habr que saber aprovechar es que nuestras sociedades experimentan una fase de retorno a los lugares, al territorio y al paisaje (Mateu; Nieto, 2008). Es una de las consecuencias ms visibles de las dinmicas territoriales y de los procesos de cambio social y cultural en curso a los que antes se ha hecho referencia. este retorno al territorio y al paisaje sera probablemente inexplicable sin hacer referencia a condicionantes y compromisos polticos de la propia Unin europea y a la propia evolucin de las nuevas funciones de los territorios rurales. Pero sera an ms inexplicable de no haber existido diversas miradas y cultas tradiciones y escuelas que han dado continuidad y han proporcionado, en cada momento y con variaciones dependiendo de cada contexto cultural especco, distintos relatos sobre la relacin del hombre con la naturaleza. tambin han contribuido al proceso de construccin sobre un discurso cargado de simbolismo en torno a la relacin entre territorio, paisaje y (re)construccin identitaria. Una culta tradicin secular que en los ltimos veinte aos ha adquirido una recobrada intensidad y ahora, afortunadamente, nos desborda desde mbitos acadmicos, cvicos, profesionales y culturales (Mata; Tarroja, 2006) (Nogu, 2007; Martnez de Pisn, 2009). La diferencia con relacin a momentos 12 Prlogo precedentes es que ahora estas miradas acadmicamente se han generalizado y socialmente se han democratizado. la sociedad y la academia lo ha hecho suyo y ya no se trata de proteger y conservar determinados hitos simblicos, sino de entender el valor y las funciones del territorio y del paisaje de otra forma. Es en este nuevo contexto en el que con dicultad se va abriendo camino una nueva cultura del territorio y del paisaje. lentamente, cultura, identidad, patrimonio colectivo y paisaje emergen y acaban impregnando directrices y normativas, desde la escala comunitaria a la local. como consecuencia de ese cambio de valores y del mejor conocimiento de territorios y paisajes tambin se abre camino una interesante experiencia de buenas prcticas en el campo de las polticas de ordenacin y gestin de los paisajes en Europa (Llop (Coord.), 2009); Nogu; Puigbert; Bretcha (Eds.), 2009). de donde cabe colegir que es imprescindible disponer de estudios de casos que permitan disear polticas de ordenacin y gestin. estudios que desgraciadamente hoy son todava escasos en espaa. Por esa razn an cobra ms importancia el estudio de Sabina Asins que el lector o lectora tiene en sus manos y que se inscribe en lo mejor de tradicin acadmica de estudios sobre historia del paisaje que ahora se impulsan en muchas universidades y centros de investigacin europeos. Un estudio diacrnico del paisaje agrario mediterrneo (desde el siglo XV hasta la actualidad) de enorme importancia en el que queda muy bien denido ese dilogo permanente entre el hombre con un medio natural frgil. Donde se evidencia aquella armacin tan contundente y acertada del maestro Vidal de La Blache: ningn territorio civilizado ha sido artesano exclusivo de su propia civilizacin . Un estudio que adems desborda el mbito especco de estudio. Porque aunque pareciera concretado en el rea de Petrer, informa de dinmicas, prcticas y culturas sobre un ambiente mediterrneo que bien puede servir como referente para espacios similares proporcionando valiossima informacin para disear futuros planes de ordenacin y gestin. Muchos ciudadanos europeos participamos de la idea de que el futuro del territorio y del paisaje depende en gran parte de la existencia de una vigorosa sociedad civil que sea capaz de mirar con respeto, con sensibilidad y con cultura, con civilidad en denitiva, hacia atrs y hacia delante. Sabiendo que el territorio y el paisaje no son patrimonio exclusivo de nadie, que no somos los nicos, tampoco los primeros ni los ltimos. Que no somos el centro de la naturaleza. Pero previamente hemos de disponer de estudios de base que informen acerca de buenas prcticas tradicionales (en este caso la tradicin es expresin de modernidad) sobre los que poder desarrollar planes. de ah nuestro agradecimiento, en primer lugar, a la autora, por su valiosa investigacin desarrollada desde el cSic aunque siempre contando con las relaciones mantenidas con otros centro de investigacin nacionales y extranjeros, como el Research Centre on Traditional and Local Knowledge (iPOGeA) que coedita esta publicacin con la Universitat de Valncia en la coleccin del iidl. Mencin especial merece la sensibilidad demostrada por el ayuntamiento de Petrer, de caixapetrer y de la diputacin de Alicante a la hora de hacer posible la edicin de este trabajo. en este caso el agradecimiento es doble, porque adems de garantizar la publicacin, permite que aoren emociones compartidas por muchos profesores e investigadores unidos por la gura del profesor Josep Mara Bernab. Porque Petrer fue el lugar que vio nacer a uno de nuestros mejores maestros y amigos y uno de esos escasos profesores universitarios que dejan huella personal y acadmica. Por ese motivo podra decirse que esta publicacin es mucho ms que un libro. Joan Romero Ctedra de Geografa Humana e Instituto Interuniversitario de Desarrollo Local Universitat de Valncia Referencias citadas en el texto Berger, J. (2006): Puerca tierra, Madrid, Alfaguara. llop, c. (coord.) (2009): Paisatges en transformaci. Intervenci i gesti paisagstiques, Barcelona, diputaci de Barcelona, collecci estudis, num. 6. Martnez de Pisn, e. (2009): Miradas sobre el paisaje, Madrid, Biblioteca nueva. 13 Joan Romero Mata, R.; Tarroja, A. (2006): El paisaje y la gestin del territorio. Criterios paisajsticos en la ordenacin del territorio y el urbanismo, Barcelona, diputacin de Barcelona, serie territorio y Gobierno, nm. 5. Mateu, J.; Nieto, M. (Eds.) (2008): Retorno al paisaje. El saber losco, cultural y cientco del pai- saje en Espaa, Valencia, eVren. nogu, J. (2007): La construccin social del paisaje, Madrid, Biblioteca nueva. Nogu, J.; Puigbert, L.; Bretcha, G. (Eds.) (2009): Ordenaci i gesti del paisatge a Europa, Olot, Observatori del Paisatge de catalunya. regidor, J. (2000): El futuro del medio rural en Espaa. Agricultura y desarrollo econmico, Madrid, consejo econmico y Social. 14 Presentacin Sense conixer ni comprendre els canvis que els nostres avanpassats imprimiren al territori, com podrem ordenar-lo ara de forma sostenible 1 (e. tello) el libro que presentamos se centra en el estudio de la historia de usos del territorio de Petrer y en la valorizacin de sus recursos naturales, agrcolas y culturales, acorde con los requerimientos de las ac- tuales directrices de ordenacin territorial. en este sentido, los objetivos de la Unin europea se diri- gen principalmente a denir una nueva poltica de cohesin territorial, social y econmica, con el n 2 de gestionar de forma prudente el patrimonio natural y cultural de las distintas regiones europeas . el anlisis detallado de la dinmica del paisaje se convierte de este modo en una herramienta ecaz para 3 la planicacin estratgica de actuaciones en el municipio , que favorezcan la aplicacin, entre otros, 4 5 6 del convenio europeo del Paisaje , de la ley del Suelo , de la directiva Marco del Agua , de la ley de 7 evaluacin de impacto Ambiental de Proyectos y de la ley de Ordenacin del territorio y Proteccin 8 del Paisaje de la Generalitat Valenciana . 1 e. tellO, la petjada ecolgica del metabolisme social: una proposta metodolgica per analitzar el paisatge com a humanit- zaci del territori. Manuscrits 22, 2004, p. 76. 2 cOMiSin eUrOPeA, 1999, estrategia territorial europea: Hacia un desarrollo equilibrado y sostenible del territorio de la Unin Europea. Elaborada por el Comit de Desarrollo Territorial, parte A-3, pp. 33-37; COMISIN EUROPEA, 2007, Agenda territorial de la Unin europea: Hacia una europa ms competitiva y sostenible de regiones diversas. leipzig, 24-25 de mayo de 2007, punto III; A. TARROJA, R. CAMAGNI (Coords.), Una nueva cultura del territorio: criterios sociales y ambientales en las polticas y el gobierno del territorio. coleccin territorio y Gobierno: Visiones , nm 4. Barcelona: di- putacin de Barcelona, 2006; R. MATA, A. TARROJA (Coords.), El paisaje y la gestin del territorio. coleccin territorio y Gobierno: Visiones , nm 5. Barcelona: Diputacin de Barcelona, 2006; J. ROMERO, J. FARINS (Eds.), Gobernanza territorial en Espaa: Claroscuros de un proceso a partir del estudio de casos. Valencia: Universitat de Valncia, 2006; J. FArinS, J. rOMerO (eds.), Territorialidad y buen gobierno para el desarrollo sostenible: Nuevos principios y nuevas polticas en el espacio europeo. Valencia: Universitat de Valncia, 2007. 3 F. ZOidO nArAnJO, el paisaje y su utilidad para la ordenacin del territorio. en: F. Zoido, c. Venegas (coords.), Paisaje y ordenacin del territorio. Sevilla: Consejera de Obras Pblicas y Transportes de la Junta de Andaluca, 2002, pp. 21-32; R. MAtA, et al., Atlas de los Paisajes de Espaa. Madrid: Centro de Publicaciones, Ministerio de Medio Ambiente, 2004, 683 p.; J.F. MAteU BellS, el patrimoni paisatgstic en l ordenaci del territori valenci. Braal 28-29, 2004, pp. 61-71; J. OBART SEGRERA, El paisaje: desde la ciencia a la planicacin territorial. En: J.F. Mateu Bells, M. Nieto Salvatierra (Eds.), Retorno al paisaje. El saber losco, cultural y cientco del paisaje en Espaa. Valencia: eVren, evaluacin de recursos naturales, S.A., 2008, pp. 545-584; R. GARRABOU, J.M. NAREDO (Eds.), El paisaje en perspectiva histrica: formacin y transforma- cin del paisaje en el mundo mediterrneo. Monografas de Historia rural 6. Zaragoza: Sociedad espaola de Historia Agra- ria; Prensas Universitarias de Zaragoza, 2008; R. MATA OLMO, El paisaje, patrimonio y recurso para el desarrollo territorial sostenible. conocimiento y accin pblica. Arbor 729, 2008, pp. 155-172; OBSERVATORIO DE LA SOSTENIBILIDAD en eSPAA, Patrimonio natural, cultural y paisajstico. Claves para la sostenibilidad territorial. Madrid: Observatorio de la Sostenibilidad en Espaa, 2009, pp. 23-65; J. BUSQUETS FBREGAS, A. CORTINA RAMOS (Coords.), Gestin del paisaje. Manual de proteccin, gestin y ordenacin del paisaje. coleccin Ariel Patrimonio. Madrid: Ariel, 2009. 4 en su artculo 5, las partes se comprometen a integrar el paisaje en las polticas de ordenacin territorial, BOletn OFiciAl del eStAdO, 2008a, Jefatura del Estado, Instrumento de Raticacin del Convenio Europeo del Paisaje (nmero 176 del consejo de europa), hecho en Florencia el 20 de octubre de 2000. BOe nm. 31 de 5 de febrero de 2008. 5 Artculo 2-2a: MiniSteriO de ViViendA, real decreto legislativo 2/2008, de 20 de junio, por el que se aprueba el texto refundido de la ley de suelo. BOe nm. 154 de 26 de junio 2008. 6 Sobre todo para Petrer en sus referencias a los cauces intermitentes y a las captaciones subterrneas de agua. PArlAMentO EUROPEO Y CONSEJO DE LA UNIN EUROPEA. Directiva 2000/60/CE. Diario Ocial de las Comunidades Europeas L327/1 de 22 de diciembre de 2000; EUROPEAN COMMISSION, 2009a, Common implementation strategy for the water framework directive. Technical Report 2009-027. Luxembourg: Ofce for Ofcial Publications of the European Communities. 7 Especialmente en lo que concierne a su apartado paisajes con signicacin histrica, cultural y/o arqueolgica : BOletn OFiciAl del eStAdO, 2008b, real decreto legislativo 1/2008, de 11 de enero, por el que se aprueba el texto refundido de la ley de evaluacin de impacto Ambiental de Proyectos, BOe nm. 23 de 26 de enero de 2008. 8 GenerAlitAt VAlenciAnA, 2004a, ley 4/2004 de 30 de junio, de la Generalitat, de Ordenacin del territorio y Protec- cin del Paisaje. DOGV, nm. 4788, de 2 de julio de 2004; GENERALITAT VALENCIANA, 2006, Conselleria de Territorio Sabina Asins Velis esta lnea de trabajo acerca de la historia de los paisajes agrarios cuenta con una intensa actividad cientca y una rica bibliografa en Europa, especialmente en Inglaterra, Francia, Espaa e Italia. A pesar de ello, y de disponer de suciente proteccin legislativa, los rasgos histricos denitorios del paisaje agrario no siempre se tienen en consideracin en espaa a la hora de redactar los planes generales de ordenacin ni se reconocen como caracterstica en las actuaciones municipales, como recientemente ha 9 recordado Almudena Orejas , prevaleciendo en general en su elaboracin y ejecucin otras variables, como la econmica. esta circunstancia se produce especialmente en reas agrcolas peri-urbanas, como es el caso de las huertas de numerosos municipios, y en aquellas otras zonas que, a la vez que produc- tivas, han favorecido la conservacin de los recursos suelo y agua y generado entornos de gran belleza, como los denominados paisajes aterrazados, en los que se centra el estudio que presentamos. estos paisajes, entre los que se incluyen los del trmino de Petrer cuyo espacio agrario se dispone en un 100% en bancales, se encuentran muy extendidos en la montaa europea, hasta el punto de que un 10 reciente informe cifra la extensin de las estructuras lineales en los quince pases de la Unin europea, antes de su ampliacin, en ms de 1.700.000 Km. en espaa, son caractersticos en Mallorca, el Sis- tema Ibrico, los Pirineos, Gran Canaria, Catalua y, especialmente signicativos por su extensin, en la comunidad Valenciana. Sin embargo, pese a su destacada presencia en europa, los estudios sobre el origen histrico de los aterrazamientos, su funcin, sus caractersticas constructivas, su comportamiento en procesos de abandono o su inters en polticas de paisaje, entre otros, son relativamente recientes. Ya 11 que, si bien en los aos 50 y 60 del siglo XX diversos investigadores se interesaron por estos sistemas , fue a partir de la dcada de los 80 cuando se ampli el nmero de edaflogos, gegrafos e historiadores que trabajaron en este campo, y desde los 90 cuando los distintos especialistas intercambiaron sus ex- 12 periencias y conocimientos en reuniones y congresos internacionales . en estos encuentros se puso de maniesto la diversidad de objetivos, enfoques y metodologa seguida ante la gran variedad de tcnicas y adaptaciones de las estructuras de conservacin de suelo y agua. en la ltima dcada, a nivel europeo, ha aumentado considerablemente la labor de los grupos de in- vestigacin, como se deduce, por ejemplo, del incremento en el nmero de publicaciones, de proyectos 13 concedidos y de seminarios nanciados por la Unin Europea y los distintos gobiernos . igualmente, y Vivienda. decreto 120/2006, de 11 de agosto, del consell, por el que se aprueba el reglamento de Paisaje de la comunitat Valenciana. dOGV, nm. 5325, de 16 de agosto de 2006. en su Artculo 11 incluye la aprobacin de un Plan de Accin territorial del Paisaje. 9 A. OreJAS SAcO del VAlle, Arqueologa de los paisajes agrarios e historia rural. en: Arqueologa espacial: espacios Agrarios. Arqueologa Espacial 26. teruel: Seminario de Arqueologa y etnologa turolense, 2006, p. 15. 10 eUrOPeAn cOMMiSSiOn, 2005a, Trends of some agri-environmental indicators in the European Union. report eUr 21565, p. 192. concretamente, 1.612.533 km (1-3 m ancho) y 104.921 km (3m ancho). 11 c. rOQUerO de lABUrU, estudio sobre la conservacin y mejora del suelo en espaa. Anales del Instituto Nacional de Investigaciones Agrnomas, Vol. XIII, 1964, Nums. 1-2-3-4; M. MAGiSter, Obras de conservacin de Suelos. en: Hidro- loga Forestal y Proteccin de Suelos: Tcnicas y Experiencias en Direccin de Obras. Madrid, 1992, pp. 367-388; J. DES- POiS, Pour un tude de la culture en terrasses dans les pays mditerranens. Annales de l Est, Mm. 21, 1959, pp. 105-117; J.l. SPencer, G. HAle, the origin, nature, and distribution of agricultural terracing. Pacic Viewpoint 2, 1961, pp. 1-40; P. 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Mallorca: Consell Insular de Mallorca, Leader Serra Tramuntana, 1997; COMUNIDAD EUROPEA, Actas del Seminario: Sistemas tradicionales de conservacin de suelo y agua y de captacin de aguas. Chania, Creta 30-XI al 3-XII, 1991; XVIe cOnGrS MOndiAl de Science dU SOl, Symposium 45, Attitudes to soil care and land use through human history. Montpellier (Francia), 1998. 13 Algunas publicaciones sobre aterrazamientos histricos: H.c. cOnKlin, Ethnographic Atlas of Ifugao: A study of environ- ment culture and society in Northern Luzon. New York: Yale University Press, 1980; G. EDELSTEIN, M. KISLEY, Mevasseret Yerushalayi. The biblical Archaeologist Winter, 1981; E.G. HALLSWORTH, Traditional methods of soil conservation. En: I. 16 Presentacin en la actualidad, se estn interesando diferentes instituciones, entre las que destacamos: el convenio de Naciones Unidas de Lucha contra la Deserticacin, cuyo Comit de Ciencia y Tecnologa est desa- rrollando una activa tarea de divulgacin de los conocimientos tradicionales, que incluye informacin 14 sobre los aterrazamientos en los paisajes agrarios alrededor del mundo , la convencin Marco de na- ciones Unidas sobre el cambio climtico y el Panel intergubernamental de cambio climtico (UneP- 15 16 WMO) , el convenio sobre la diversidad Biolgica y la FAO (Globally Important Agricultural Heri- 17 tage Systems -GiAHS) . Adems, iPOGeA, bajo la direccin de Pietro laureano, est organizando en Florencia (italia) la creacin del International Centre on Traditional Knowledge and Living Heritage, que entre otras funciones se encargar de implementar el Traditional Knowledge World Bank, un sistema de clasicacin a nivel global que recoge las distintas tcnicas histricas relacionadas con las prcticas Pla Sentis (ed.), Soil Conservation and Productivity. Proceedings iV international conference on Soil conservation. Venezue- la: Sociedad Venezolana de la Ciencia del Suelo, 1985, pp. 559-584; H. VOGEL, Terrace farming in the Yemen Arab Republic. Traditional forms of soil and water conservation and their present degradation: a case study of the Manakhah region. En: I. Pla Sentis (ed.), Soil Conservation and Productivity... op. cit., pp. 585-607; E.G. HALLSWORTH, Traditional methods of soil conservation. en: Anatomy, physiology and psychology of erosion. Great Britain: John Wiley & Sons, 1987, pp. 64-88; T.H. 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Ljubljana, Slovenia, 2008. http://www.alpter.net/; G. QUARANTA (Ed.), Montagna e sviluppo: Le politiche, la governance e il management per la valorizzacione delle risorce. Miln (italia): Franco Angeli ediciones, 2008. la aplicacin de los Sistemas de Informacin Geogrca a los paisajes aterrazados en: I. GRAU MIRA (Ed.), La aplicacin de los SIG en la arqueologa del paisaje. Anejo de la revista lucentum 15. Alicante: Universidad de Alicante, 2006. 14 United nAtiOnS cOnVentiOn tO cOMBAt deSertiFicAtiOn, Promotion of Traditional Knowledge. A Com- pilation of UNCCD Documents and Reports from 1997 2003. http://www.unccd.int//publicinfo/publications/docs/traditional_ knowledge.pdf 15 iPcc, Fourth Assessment report: climate change 2007, Working Group ii, impacts, Adaptation and Vulnerability , espe- cialmente Box 20.1 (Captulo 20), p. 833, http://www.ipcc.ch/pdf/assessment-report/ar4/wg2/ar4-wg2-chapter20.pdf 16 cOnVeniO SOBre lA diVerSidAd BiOlGicA, especialmente pp. 2, 7 , 12, 19: http://www.cbd.int/doc/legal/cbd-es. pdf 17 http://www.fao.org/sd/giahs/index.asp 17 Sabina Asins Velis agrcolas, la gestin del agua, la proteccin del suelo y el medio ambiente, etc. y que cuenta con el apoyo 18 de la UneScO y del gobierno italiano . En cuanto a Espaa se reere, el inters por los paisajes agrarios aterrazados se ha acrecentado notablemente, tanto desde el punto de vista histrico como ambiental, debido principalmente al reco- nocimiento del estado de deterioro que experimentan estas estructuras por el importante proceso de abandono agrcola que comenz en la segunda mitad del siglo XX y que ha implicado, adems del desmoronamiento de muros de mampostera de piedra en seco y de las construcciones hidrulicas aso- ciadas, la desorganizacin de parte del paisaje de la montaa media. Por su mayor tradicin, destacan los estudios realizados en los Pirineos, si bien recientemente se han incorporado otras zonas como canarias 19 o catalua . entre los trabajos de catalogacin, caracterizacin y cartografa de los abancalamientos 20 sealamos la labor llevada a cabo en la isla de Mallorca . en la comunidad Valenciana contamos con escasas publicaciones sobre el tema; aspecto que sorprende dada la extensin del rea aterrazada y la magnitud del proceso de abandono agrcola. la difusin de los resultados de los proyectos de investigacin ha incrementado el conocimiento his- trico y destacado el papel signicativo que de cara a su gestin futura desempean las funciones agr- cola, ambiental y cultural de los espacios aterrazados del Mediterrneo europeo, as como enfatizado los riesgos asociados a esas funciones como consecuencia de los rpidos procesos de cambio producidos en 21 el paisaje en la ltima mitad del siglo XX . estos riesgos son notables tanto a nivel agrcola (prdida de variedades,& ) como ambiental (disminucin de la diversidad biolgica y de la capacidad de regulacin hidrolgica, erosin, riesgo de incendios forestales,...), cultural (abandono de estructuras, de usos y cos- 22 tumbres, uniformidad,...) y econmico (desempleo, costos de accin-no accin,& ) . Debido a estos rpidos cambios, y con el n de preservar la variedad de los sistemas de cultivo, la Comisin Europea ha denido en los ltimos veinte aos el modelo agrcola europeo, basado en la 23 multifuncionalidad histrica de su paisaje agrario . los contenidos de la nueva poltica se han orien- tado a una produccin ms orientada al mercado, incrementando su competitividad y la calidad de los productos, combinado con la integracin de los aspectos ambientales y culturales y el desarrollo de las 24 reas rurales . Siguiendo las recomendaciones de los consejos europeos de cardiff y Viena, una de las 18 TRADITIONAL KNOWLEDGE WORLD BANK, http://www.ipogea.org 19 dada la magnitud de los trabajos publicados por J.M. GArcA rUiZ, t. lASAntA, l. OrtiGOSA, P. rUiZ y F. GA- LLART, entre otros investigadores destacados, remitimos a las recopilaciones bibliogrcas publicadas en: J. RODRIGUEZ AIZPEOLEA, T. LASANTA MARTINEZ, Los bancales abandonados en la montaa mediterrnea: una revisin bibliogrca. Pirineos 139, 1992, pp. 105-123; A. COLOMAR MARI, (Dir.), Patrimoni de marjades a la Mediterrnia Occidental. Una proposta de catalogaci. Consell de Mallorca. Departament de Promoci i Ocupaci. FODESMA, 2002; S. ASINS VELIS, J. SncHeZ dAZ, los aterrazamientos en la comunidad Valenciana (espaa). en: La Cultura dei Terrazzamenti... op. cit., pp. 28-54. 20 G. AlOMAr et al., La pedra en sec: Materials, eines i tcniques tradicionals a les illes mediterrnies. Vol. 2. Mallorca. Palermo: Ofcine Grache Riunite, 2002; A. COLOMAR MAR, (Dir.), Patrimoni de marjades... op. cit. 21 J. BrAndt, et al., rural land-use and dynamic forces analysis of driving forces in space and time. en: r. Krnert, et al. (eds.), Land-use changes and their environmental impact in rural areas in Europe. Paris: UNESCO, 1999, pp. 81-102; M. BrGi, et al., Driving forces of landscape change current and new directions. Landscape Ecology 19, 2004, pp. 857-868; G. FAirclOUGH, A. 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NAVEH, Ten major premises for a holistic conception of multifunctional landscapes. Landscape and Urban Planning 57, 2001, pp. 269-284; AA.VV. Actes de les Jornades sobre Terrasses i Prevenci de Riscos Naturals. Mallorca: consell de Mallorca, 2007. 23 cOUncil OF eUrOPe, PArliAMentArY ASSeMBlY, 2003, Challenges for Mediterranean agriculture. report Committee on the Environment, Agriculture and Local and Regional Affairs, Doc. 9807; EUROPEAN COMMISSION, 2004a, the common Agricultural Policy explained. directorate General for Agriculture. 24 COMMISSION OF THE EUROPEAN COMMUNITIES, 2003, Brussels, 21.1.2003. COM(2003) 23 nal, Explanatory 18 Presentacin herramientas que est utilizando la comisin europea para integrar los aspectos ambientales en la Pol- tica Agraria comunitaria (PAc) es el desarrollo de indicadores. los objetivos, entre otros, se centran en generar informacin sobre los cambios experimentados por los agroecosistemas y en evaluar los efectos de las polticas agrcolas, medioambientales y de desarrollo rural, con el n de facilitar la labor de los gestores y polticos y de acercar las propuestas relacionadas con la agricultura y el medio ambiente a los 25 ciudadanos . las nuevas medidas acordadas en el seno de la comisin se engloban bajo las controvertidas de- 26 nominaciones de agricultura multifuncional, post-productivista o no-productivista , que entiende las externalidades del campo europeo por los servicios que presta al ecosistema, como seran, adems de la produccin de alimentos, la diversidad biolgica, los valores culturales y estticos, el mantenimiento 27 del paisaje , o aproximaciones que destacan el papel de las polticas ambientales como un necesario 28 agente conductor y aquellas otras, de carcter holstico, que consideran componentes clave de la mul- tifuncionalidad el cambio de percepcin de la sociedad respecto al campo o la demanda social de tales 29 funciones . en este complejo escenario, las disposiciones y reglamentos a aplicar en los paisajes aterrazados 30 europeos se incluyen en el Plan de Accin de Biodiversidad para la Agricultura , en la estrategia de Memorandum; T.W. 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Working document. 19 Sabina Asins Velis 31 32 desarrollo Sostenible , en la estrategia temtica de Proteccin del Suelo y en las medidas incluidas 33 en el Plan de desarrollo rural 2007-2013 . entre los proyectos sobre indicadores que reconocen la sin- gularidad de los espacios aterrazados, sobre todo en los pases mediterrneos, destacan eliSA, lUcAS, 34 irenA, enriSK y los desarrollados por eUrOStAt y la Ocde . 35 la comisin europea tambin ha considerado importante el apoyo a las reas Menos Favorecidas 36 y a los espacios Agrarios de Alto Valor natural , que en la europa Mediterrnea se encuentran en nume- rosas ocasiones aterrazados. Las supercies todava dedicadas al cultivo se benecian de la potenciacin 37 de los contratos Agro-ambientales, de lenta introduccin en el mbito mediterrneo , a la vez que se han extendido las ayudas para prevenir riesgos en los campos de cultivo recientemente abandonados, subvencionando la primera forestacin de estas reas con especies adaptadas a las condiciones ambien- 38 tales locales . en concreto en la Unin europea entre los aos 2000-2006, en el marco de la poltica de desarrollo rural, se destinaron 4.800 millones de euros a medidas forestales, de los cuales la mitad se dedicaron a la forestacin de tierras agrcolas, estimndose que la supercie forestal europea aumenta 31 COUNCIL OF THE EUROPEAN UNION, 2006, Renewed EU Sustainable Development Strategy (EU SDS), Brussels, 9 June 2006, 10117/06; COMMISSION OF THE EUROPEAN COMMUNITIES, 2005a, The 2005 Review of the EU Sustain- able Development Strategy: Initial Stocktaking and Future Orientations. COM(2005) 37 nal. 32 COMMISSION OF THE EUROPEAN COMMUNITIES, 2006, Brussels, 22.9.2006, COM(2006)231 nal. Thematic Strat- egy for Soil Protection. [Sec(2006)620], [Sec(2006)1165]. 33 eUrOPeAn cOMMiSSiOn, 2005b, council regulation (ec) 1698, On support for rural development by the eAFrd, 20-IX-2005; COMISIN DE LAS COMUNIDADES EUROPEAS, 2006b, Decisin del Consejo de 20 de febrero de 2006 sobre las directrices estratgicas comunitarias de desarrollo rural (perodo de programacin 2007-2013), (2006/144/ce), l 55/20 Diario Ocial de la Unin Europea 25.2.2006. La asignacin de partidas para Espaa del Fondo Europeo Agrcola de desarrollo rural puede verse en: eUrOPeAn UniOn, directOrAte-GenerAl FOr AGricUltUre And rUrAl deVelOPMent, 2008, rural development in the european Union. Statistical and economic information. report 2008, p. 321. http://ec.europa.eu/agriculture/agrista/rurdev2008/RD_Report_2008.pdf 34 d.M. WAScHer (ed.), 2000, Agri-Environmental Indicators for Sustainable Agriculture in Europe. tilburg: european centre for Nature Conservation; EUROPEAN COMMISSION, 2005a, Trends of some agri-environmental indicators& op. cit., p. 192; eUrOPeAn enVirOnMent AGencY, 2005a, Agriculture and Environment in EU-15 the IRENA Indicator Report. eeA Report 6/2005; EUROPEAN ENVIRONMENT AGENCY, 2006a, Integration of Environment into EU Agriculture Policy - the IRENA Indicator-based Assessment Report. Report No 2/2006; COMISIN DE LAS COMUNIDADES EUROPEAS, 2006a, comunicacin de la& op. cit., p. 7; B. DELBAERE; A. NIETO SERRADILLA (Eds.), Environmental risks from agriculture in Europe: Locating environmental risk zones in Europe using agri-environmental indicators. tilburg, ecnc-european centre for Nature Conservation, 2004, pp. 81, 88; H.P. PIORR, et. al., 2004, Indicators related to agricultural practices: intermediate results of Eurostat s PAIS project. Oecd expert Meeting on Farm Management indicators and the environment, 8-12 March 2004, Palmerston North, New Zealand; EUROSTAT, 1999, Towards Environmental Pressure Indicators for the EU: Indicator Denition. P.E.M. Lammers, A.J. Gilbert (Eds.), European Commission; EUROSTAT, 2004, EU Member State Experiences with Sustainable Development Indicators. european commission, theme 8, environment and energy. Working Paper. luxembourg: Ofce for Ofcial Publications of the European Communities; OCDE, 2001a, Indicadores medioambientales para la agricul- tura. Mtodos y resultados Vol. 3; OCDE, 2001b, Agriculture and Biodiversity: Developing Indicators for Policy Analysis. Proceedings from an OECD Expert Meeting, Zurich, Switzerland; OCDE, 2003a, Agricultural Impacts on Soil Erosion and Soil Biodiversity: Developing Indicators for Policy Analysis. Proceedings from an OECD Expert Meeting, Rome, Italy; OCDE, 2003b, Agriculture and Land Conservation: Developing Indicators for Policy Analysis. Proceedings from and Oecd expert Meeting, Kioto, Japan; OCDE, 2003c, Agricultural Landscape Indicators. Proceedings of the niJOS/Oecd expert Meeting, Oslo, Norway; OCDE, 2004, Management Indicators and the Environment. Proceedings from an Oecd expert Meeting, Palm- erston, New Zealand; M. FUENTES, Farm management indicators related to the policy dimension in the European Union. OECD Expert Meeting on Farm Management Indicators for Agriculture and the Environment; Palmerston North, New Zealand, 2004; OCDE, 2008, Environmental Performance of Agriculture in OECD Countries since 1990: Main Report. Pars, Francia. el comentario sobre las terrazas espaolas en la p. 13 de la traduccin: Seccin por pas de Espaa; S. ASINS VELIS, Los ater- razamientos mediterrneos. Paradigma ambiental-agro-cultural. en: El paisaje mediterrneo. Opciones de multifuncionalidad. cuadernos de Sostenibilidad y Patrimonio natural 11. Madrid: Fundacin Santander central Hispano, 2007, pp. 81-91. 35 eUrOPeAn cOMMiSSiOn, 2003a, Agriculture and the environment. directorate-General for Agriculture, pp. 3, 4, box 2. 36 eUrOPeAn enVirOnMent AGencY, UneP reGiOnAl OFFice FOr eUrOPe, 2004. High Nature Value Farm- land: Characteristics, trends and policy challenges. EEA report, n 1, 2004. Luxembourg: Ofce for Ofcial Publications of the european communities. 37 EUROPEAN COMMISSION, 2005c, Agri-environment Measures: Overview on General Principles, Types of Measures, and Application, pp. 3-7, 13, 20. 38 eUrOPeAn cOMMiSSiOn, 2005b, council regulation (ec) 1698, On support for rural... op. cit. p. 5 y artculo 45-1. 20 Presentacin 39 a un ritmo de 450.000 hectreas al ao ; no obstante se calcula que alrededor de 500.000 hectreas de 40 bosques y matorral se queman cada ao, principalmente en los pases mediterrneos . en espaa, las 41 distintas medidas aprobadas han implicado que la extensin de la forestacin de suelo agrcola, entre 42 los aos 1994 y 2007, haya alcanzado las 685.345 hectreas . en ese mismo periodo, en la comunidad Valencia se han forestado 5.155 hectreas de tierras agrcolas abandonadas, lo que supone nicamente 43 un 0,75% del total nacional , debido, por un lado, a que son numerosas las parcelas en el interior de la comunidad que no alcanzan el tamao exigido para optar a las subvenciones y, por otro, al alto grado de 44 fragmentacin de las propiedades . 45 A pesar de estas disposiciones impulsadas desde 1988 , las ayudas especcas destinadas a los cam- pos de cultivo que se han ido abandonando desde los aos 60 del siglo XX no han surtido todos los efec- 46 tos esperados , ya que stos son los que presentan mayores tasas de erosin y los que estn provocando la desorganizacin de parte del paisaje mediterrneo. en la comunidad Valenciana, si bien la proteccin 47 de los bancales se encuentra recogida en la legislacin vigente , los motivos principales que pueden aducirse para explicar el deterioro de la calidad paisajstica de las reas aterrazadas son consecuencia del abandono de la actividad agrcola y del alto costo econmico que implica su mantenimiento. no ol- videmos que los trabajos de conservacin de los muros de mampostera recaen en los propietarios de los terrenos, a excepcin de una mnima subvencin que puede obtenerse en algunas localidades (entre las que no se incluye Petrer) gracias a determinadas lneas de las Medidas de Acompaamiento de la PAc, 48 destinadas a la lucha contra la erosin en terrenos agrcolas y en zonas con dicultades naturales . Otras 39 PArlAMentO eUrOPeO, 2006, Informe sobre la ejecucin de la Estrategia Forestal de la UE, Final A6-0015/2006, comisin de Agricultura y desarrollo rural, pp. 5-K, 14. 40 cOMiSin de lAS cOMUnidAdeS eUrOPeAS, 2005, comunicacin de la comisin al consejo y al Parlamento Europeo, Informe sobre la ejecucin de la Estrategia Forestal de la UE, COM(2005) 84 nal, p. 3. 41 reAl decretO 6/2001, sobre fomento de la forestacin de tierras agrcolas. BOe nm. 12 de 13 de enero de 2001. c. MOntiel MOlinA, Forestacin y paisaje agrario. en: Forestacin en paisajes agrarios. Granada: Junta de Andaluca, con- sejera de Agricultura y Pesca, 2004, pp. 15-37. 42 MiniSteriO de MediO AMBiente Y MediO rUrAl Y MArinO, 2009, Anuario de Estadstica. Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino 2008. Madrid: Subdireccin General de Estadstica, p. 371; los antecedentes en: MI- niSteriO de AGricUltUrA, PeScA Y AliMentAcin. Forestacin de Tierras Agrcolas. Anlisis de su evolucin y contribucin a la jacin de carbono y al uso racional de la tierra. Madrid: Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentacin. direccin General de desarrollo rural, 2006. 43 MiniSteriO de MediO AMBiente Y MediO rUrAl Y MArinO, 2009, Anuario de Estadstica& op. cit., p. 371. 44 c. MOntiel MOlinA, Forestacin y paisaje agrario& op. cit., pp. 26-27. 45 cOMiSin de lAS cOMUnidAdeS eUrOPeAS, 1988a, estrategia y accin de la comunidad en el sector forestal. COM(1988) 255-1; COMISIN DE LAS COMUNIDADES EUROPEAS, 1988b, Propuesta de Reglamento (CEE) del Con- sejo por el que se modica el Reglamento (CEE) nm. 797/85 relativo a la mejora de la ecacia de las estructuras agrarias en materia de repoblacin forestal de las supercies agrarias. COM (1988) 255-2; COMISIN DE LAS COMUNIDADES EUROPEAS, 1998, Estrategia Forestal de la Unin Europea. COM (1998) 649 nal; REGLAMENTO DEL CONSEJO (CEE) Nm. 2078/92, Diario Ocial L 215 de 30.7.1992; REGLAMENTO DEL CONSEJO (CEE) Nm. 2079/92, Diario Ocial L 215 de 30.7.1992; REGLAMENTO DEL CONSEJO (CEE) Nm. 2080/92, Diario Ocial L 215 de 30.7.1992; PARLAMEN- tO eUrOPeO, 2002, decisin n 1600/2002/ce del Parlamento europeo y del consejo, de 22 de julio de 2002, por la que se establece el Sexto Programa de Accin Comunitario en Materia de Medio Ambiente; COMISIN DE LAS COMUNIDADES eUrOPeAS, 2005, comunicacin de la& op. cit.; COMISIN DE LAS COMUNIDADES EUROPEAS, 2006c, Comuni- cacin de la comisin al consejo y al Parlamento europeo relativa a un Plan de Accin de la Ue para los bosques. Bruselas, 15.6.2006. COM(2006) 302 nal; PARLAMENTO EUROPEO, 2006, Informe sobre la ejecucin de la Estrategia Forestal& op. cit. 46 J. PriMdAHl, et al., environmental effects of agri-environmental schemes in Western europe. Journal of Environmental Management 67, 2003, p. 137. 47 Artculos 20-3, 33c, 33f, de la ley de Ordenacin del territorio y Proteccin del Paisaje de la Generalitat Valenciana y el Reglamento que la desarrolla: GENERALITAT VALENCIANA, 2004a, Ley 4/2004 de 30 de junio; GENERALITAT VALEN- CIANA, 2006, Decreto 120/2006; GENERALITAT VALENCIANA, 1998, Ley 4/1998 de 11 de junio, Ley del Patrimonio cultural Valenciano. 48 GenerAlitAt VAlenciAnA, 2008a, Orden de 21 de enero de 2008, de la conselleria de Agricultura, Pesca y Alimen- tacin, por la que se regulan las bases de las ayudas agroambientales y para el periodo 2008-2013. dOcV, nm. 5.696, de 5 de febrero de 2008; GENERALITAT VALENCIANA, 2008b, Orden de 21 de enero de 2008, de la Conselleria de Agricultura, Pesca y Alimentacin, por la que se establecen las bases reguladoras de las ayudas de indemnizacin compensatoria para los agricultores de zonas con dicultades naturales de la Comunitat Valenciana. DOCV, nm. 5.696, de 5 de febrero de 2008. 21 Sabina Asins Velis ayudas son las que concede la conselleria de cultura y deporte a los Ayuntamientos y entidades sin ni- mo de lucro para la preservacin del patrimonio de la piedra en seco, que requieren de la conanciacin 49 de estos organismos con al menos un 25% del importe de la actuacin , y aquellas otras destinadas a la reconstruccin de muros de mampostera en terrenos forestales y en una franja de seguridad de 500 metros alrededor de los mismos, que se subvencionan con 170 euros/m, hasta un mximo de 17.000 50 euros . recientemente, se han incorporado tambin las destinadas a empresas dedicadas al mantenimiento y recuperacin de muros de piedra seca, y a los Ayuntamientos y personas jurdicas privadas sin nimo de lucro, para la restauracin de construcciones emblemticas de piedra seca, incluidas en las ayudas 51 52 rUrAlter-Paisaje . A diferencia de las ayudas rUrAlter-leader , en la de Paisaje s que se incorpora el territorio de Petrer, ya que se incluyen los municipios de hasta 40.000 habitantes. Por otra parte, estas reas podran igualmente acogerse a la lnea de ayudas destinadas a competitividad y empleo 53 del Fondo europeo de desarrollo regional . estos fondos incluyen el estmulo de las inversiones para la rehabilitacin del medio ambiente fsico y la elaboracin de planes y medidas de prevencin y la gestin de los riesgos naturales y culturales, entre los cuales tienen cabida los graves problemas asociados al abandono de cultivos en litologas fcilmente erosionables, como los bancales en terrenos margosos de Petrer, y la prdida del rico patrimonio cultural asociado a la construccin de esas terrazas de cultivo. en trminos generales, la complejidad de la poltica agrcola y de desarrollo rural exige una visin integrada en relacin con los nuevos requerimientos que se le hacen al agricultor valenciano y europeo, y cabe preguntarse tanto si el sector est sucientemente preparado para afrontar el proceso de tercia- rizacin de la agricultura, como productora de bienes y servicios, a la vez que responder a la demanda 54 como abastecedor de bienes primarios , como si efectivamente las directrices polticas regionales se adecuan a las caractersticas fsicas, sociales y econmicas de las reas de montaa, pues como hemos constatado en Petrer las lneas de ayuda priorizadas o bien no incluyen al municipio o bien, en general, no han resultado de inters para sus agricultores, ni tan siquiera la lnea de primera forestacin de tierras 55 agrcolas . A todos estos aspectos hay que sumar los derivados de la actual grave crisis econmica y nanciera, cuya incidencia a corto plazo en el sector agrcola ha sido evaluada recientemente por la comisin eu- ropea. Si bien la Comisin especica que el sector agrcola es en general ms resiliente a las crisis eco- nmicas que otros sectores, se enfrenta a grandes retos, sobre todo en cuanto concierne al crecimiento de 56 la demanda y a la renta agraria . de todas formas, y teniendo en cuenta el umbral de incertidumbre, su 49 GenerAlitAt VAlenciAnA, 2008c, Orden de 10 de marzo de 2008, de la conselleria de cultura y deporte, por la que se convocan ayudas para la preservacin del patrimonio de la piedra en seco de la comunitat Valenciana. dOcV, nm. 5.741, de 14 de abril de 2008. 50 GenerAlitAt VAlenciAnA, 2008d, Orden de 15 de diciembre de 2008 de la conselleria de Medio Ambiente, Agua, Urbanis- mo y Vivienda por la que se convocan y se aprueban las ayudas gestionadas por la direccin General de Gestin del Medio natural, destinadas a la gestin sostenible en materia forestal, para el ejercicio 2009. dOcV, nm. 5.922, de 29 de diciembre de 2008. 51 GenerAlitAt VAlenciA, 2008e, Orden de 24 de octubre de 2008, de la conselleria de Agricultura, Pesca y Alimenta- cin, por la que se aprueban las bases de las ayudas rUrAlter-Paisaje. dOcV, nm. 5.885, de 4 de noviembre de 2008. 52 GenerAlitAt VAlenciAnA, 2009a, Orden de 23 de octubre de 2009, de la conselleria de Agricultura, Pesca y Alimen- tacin, por la que se refunden las rdenes de 27 de junio de 2008 y de 15 de mayo de 2009, relativas a las bases de las ayudas rUrAlter-leader. dOcV, nm. 6.134, de 10 de octubre de 2009. 53 reGlAMentO (ce) nm. 1080/2006 del Parlamento europeo y del consejo de 5 de julio de 2006 relativo al Fondo euro- peo de desarrollo regional y por el que se deroga el reglamento (ce) no 1783/1999. 54 J. BAUdrY, c. lAUrent. Paysages ruraux et activits agricoles. colloque international Agriculture et socit , Paris 8-10 fvrier 1993. Le Courrier de l Environnement de l INRA 20, 1993, pp. 5-10. http://www.inra.fr/dpenv/; J. BARRIO, E. VOUnOUKi, les enjeux de la multifonctionnalit dans l espace rural mditerranen: comparaison des cas grec et espagnol. Le Courrier de l Environnement de l INRA 47, 2002, pp. 86-93. http://www.inra.fr/dpenv/; J. GONZLEZ REGIDOR, Desarrollo rural sostenible: un nuevo desafo. Madrid: Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentacin, 2008. 55 S. ASinS VeliS, campos de Petrer: los rpidos cambios de la ltima centuria. en: X. Amat Montesinos (coord.), Tierra, crditos y agua. El cooperativismo agrario en Petrer 1908-2008. Petrer (Alicante): cooperativa Agrcola de Petrer, 2008, pp. 112-115. 56 eUrOPeAn cOMMiSSiOn, 2009b, Prospects for agricultural markets and income in the European Union 2008-2015. direc- torate-General for Agriculture and Rural Development. http://ec.europa.eu/agriculture/publi/caprep/prospects2008/fullrep_en.pdf 22 incidencia ser diferente para los pases de la eU-15 y los de nueva incorporacin (eU-12), ya que estos ltimos se vern beneciados por el continuo incremento de los subsidios. Adems, en este contexto, a partir del ao 2013 con la reforma prevista de la Poltica Agrcola comn, los agricultores europeos van a tener que introducir otros conceptos para dar respuesta a lo que la Unin Europea dene como nuevos retos y oportunidades: el cambio climtico, la necesidad de una mejor gestin de los recursos de agua, 57 la proteccin de la biodiversidad y la produccin de energa verde . dada la fragilidad de los espacios aterrazados, las medidas que se desarrollen debern adaptarse a las especicidades regionales, contemplando la evaluacin de los riesgos actuales y potenciales. Para ello, son necesarios estudios previos en estas zonas que pueden desarrollarse siguiendo las fases de Anlisis, 58 diagnstico, evaluacin, Gestin y Pronstico del Paisaje . en el caso de Petrer, el anlisis del paisaje urge ms, si cabe, ya que las particularidades de su caracterizacin se debern considerar en las acciones que se deriven de la reciente declaracin de Paisaje Protegido Serra del Maigm i Serra del Sit, que incluye 6.500 hectreas de las 10.420 con que cuenta el trmino. Esta gura prioriza entre sus objeti- vos la proteccin y ordenacin de estos parajes, en donde continuarn desarrollndose las actividades agrcolas a la vez que se promover la conservacin y mejora de los paisajes armnicos generados por la interaccin histrica entre el medio natural y la actividad humana, incluyendo el patrimonio cultural 59 constituido por los elementos arqueolgicos, arquitectnicos y etnolgicos existentes en la zona . Por ello, nuestro objetivo es presentar un material de base que pueda ser de inters para futuros pla- neamientos. dado que son muy diversas las disciplinas que intervienen en el anlisis histrico del paisa- je, tanto desde una perspectiva agro-ecolgica como socio-econmica, y siendo conscientes de la misma complejidad de la nocin de paisaje, nuestra contribucin se centra fundamentalmente en intentar: establecer la secuencia temporal de la utilizacin y el abandono del espacio agrcola de Petrer, en tanto espacio productivo, y denir los procesos clave que signicaron puntos de inexin en 60 la dinmica territorial; describir la caracterizacin tipolgica de los elementos con que ste se construy y valorar su funcionalidad actual; analizar las relaciones agro-ambientales que actualmente conguran la diversidad biolgica de su territorio; evaluar los efectos del cambio de uso del suelo en la estructura del paisaje y proponer estrategias de gestin de su paisaje abancalado y del rico patrimonio cultural asociado, que hoy representan uno de los mayores valores del municipio. El estudio se ha organizado en trabajo de archivo, de campo y de diseo cartogrco. Para la elaboracin de la Primera Parte, en la que se presenta el anlisis histrico del uso del suelo en Petrer, se consultaron los excelentes fondos documentales que se encuentran en el Archivo Municipal de Petrer, el Archivo del reino de Valencia, el Archivo de Protocolos del Patriarca, el Archivo de Protocolos de Monvar, el Ar- chivo condal de elda, el Archivo Municipal de Yecla, el Archivo Municipal de castalla, el Archivo de la corona de Aragn, el Archivo General de Simancas, el Archivo del registro de la Propiedad de elda, el Archivo de Montes de los Servicios territoriales de la conselleria de Agricultura, Pesca y Alimentacin en Alicante, as como en las diferentes direcciones Generales de los servicios centrales de la conselleria 57 cOMiSin de lAS cOMUnidAdeS eUrOPeAS, 2007, Preparndose para el chequeo de la reforma de la PAc. COM(2007) 722 nal; EUROPEAN COMMISSION, 2009c, Health Check of the CAP: current situation, Commission pro- posal and Council outcome. D.G. Agriculture and Rural Development. http://ec.europa.eu/agriculture/healthcheck/before_af- ter_en.pdf ; A. MASSOT i MART. La PAC tras el Health Check . Papeles de Economa Espaola, 117, 2008, pp. 210-226; A. MASSOt i MArt, Espaa ante la refundacin de la Poltica Agrcola Comn de 2013. documento de trabajo. real instituto el cano, 2009. 58 O. BAStiAn, et al., landscape diagnosis on different space and time scales& op. cit. 59 GenerAlitAt VAlenciAnA, 2007a, conselleria de territorio y Vivienda. decreto 25/2007, de 23 de febrero, del consell, de declaracin del Paisaje Protegido de la Serra del Maigm y Serra del Sit. dOcV, nm. 5.459, de 27 de febrero de 2007. 60 d.J. MArcUcci, landscape history as a planning tool. Landscape and Urban Planning 49, 2000, pp. 71-73. Sabina Asins Velis de Agricultura, Pesca y Alimentacin y de la conselleria de Medio Ambiente, Agua, Urbanismo y Vi- vienda de la Generalitat Valenciana. la informacin obtenida, indita en su mayor parte, nos ha permitido trazar la evolucin histrica del espacio agrario y la implicacin social en su diseo y construccin. en el trabajo de campo se procedi a evaluar, inventariar y describir los distintos elementos que con- forman las reas agrcolas, prestando especial inters a la tipologa de los aterrazamientos y al diseo de los sistemas de irrigacin en su contexto ambiental. Para facilitar su comprensin, e intentar uniformizar su catalogacin, hemos incorporado los iconos del sistema iconogrco SITTI (Systems of Traditional and Innovative Techniques) del Banco de datos Mundial de conocimientos tradicionales (Traditional 61 Knowledge World Bank), desarrollado por iPOGeA bajo el patrocinio de UneScO . la estimacin del estado actual de conservacin de los abancalamientos nos ha facilitado la valoracin de las consecuen- cias que su abandono conlleva en numerosas laderas de sus sierras, como la revegetacin del territorio, por un lado, y el incremento de los procesos erosivos, por otro. tambin se han estudiado las estructuras hidrulicas, que se encuentran en su mayora abandonadas, si bien todava podran recuperarse con una mnima inversin de capital, preferentemente con nes patrimoniales, ya que no son funcionales debido al reciente agotamiento de la gran mayora de los acuferos de los que se aprovisionaban. la elaboracin de los mapas de uso actual del territorio se ha realizado mediante la superposicin de las capas de cultivo, proporcionadas por la Ocina del Catastro de Alicante, a la ortofoto 1:5.000, elaborada por el Instituto Cartogrco Valenciano. Este procedimiento nos aport informacin sobre la ubicacin y la dedicacin de las reas aterrazadas todava en cultivo, a nivel de polgono y parcela. Al mismo tiempo nos permiti identicar las zonas histricamente abancaladas y ahora abandonadas, en las que se procedi a evaluar las reas crticas en las que se evidencian los riesgos actuales que implica este abandono y a estimar los riesgos potenciales. Gracias a la utilizacin de una herramienta SiG (Sistema de Informacin Geogrca) se han confeccionado mapas en los que se han documentado las altitudes de los sistemas aterrazados, la preferencia de implantacin de cultivos segn la pendiente y la discrimina- cin por caractersticas geolgicas y edcas de los campos en uso y abandonados. Documentar la construccin e historia del paisaje agrario no es suciente; es, adems, necesario explicar las consecuencias del actual abandono agrcola en trminos ambientales y culturales y pro- porcionar a los ciudadanos y a la administracin una contribucin cientca que les facilite la toma de decisiones, considerando siempre la identidad local, la diversidad de escenarios y la calidad del patrimonio que se quiere transmitir a las generaciones futuras. Por otro lado, sera necesario hacer un estudio que integrara los aspectos econmicos de este abandono, sobre todo en lo referido a un anlisis de costes-benecios, de las consecuencias de la accin y no-accin o de sus impactos a nivel sectorial, 62 etc., incluyendo incluso otros conceptos, como el denominado valor de legado . An reconociendo las limitaciones de nuestro estudio, consideramos que sus resultados pueden ser tiles a los ciudadanos, que conocern detalles inditos de cmo evolucion su territorio; a los agricultores, para quienes el campo es a la vez un medio de produccin y de tradicin, que dispondrn de mayor informacin sobre las distintas polticas relativas al desarrollo rural; a los empresarios, por las perspectivas de inversin econmica; a los estudiantes, a quienes se est formando en el respeto al medio ambiente; y a los ges- tores y polticos municipales, de cara a actuaciones urgentes y a futuras acciones de planeamiento. de este modo, el paisaje de Petrer se congura como un punto de encuentro entre los diversos sectores de la sociedad local y de la administracin pblica en la bsqueda de soluciones ambientales, culturales, 63 sociales y econmicas, que constituyen los elementos fundamentales del desarrollo sostenible . 61 la versin de los iconos en castellano en: P. lAUreAnO, Atlas de Agua. Los conocimientos tradicionales para combatir la deserticacin. Barcelona: Laia Libros Ed.; UNESCO, 2005. 62 COMISIN EUROPEA, 2008, La economa de los ecosistemas y la biodiversidad. Informe preliminar. Luxemburgo: Ocina de Publicaciones Ociales de las Comunidades Europeas. 63 COMMISSION OF THE EUROPEAN COMMUNITIES, 2005a, The 2005 Review of the EU Sustainable... op. cit.; EUROSTAT, 2007, Measuring progress towards a more sustainable Europe. 2007 monitoring report of the EU Sustainable Development Strategy. Collection: Statistical books. Luxembourg: Ofce for Ofcial Publications of the European Communities; MiniSteriO de lA PreSidenciA, 2007, estrategia espaola de desarrollo Sostenible 2007. Madrid: Ministerio de la Presidencia; COMISIN DE LAS COMUNIDADES EUROPEAS, 2009, Incorporacin del desarrollo sostenible en las polticas de la UE: Informe de 2009 sobre la estrategia de la Unin Europea para el desarrollo sostenible. COM(2009) 400 nal. 24 El diseo del paisaje abancalado de Petrer El diseo del paisaje abancalado de Petrer 2 Si bien la extensin del trmino municipal de Petrer (104,2 Km ) ha permitido la ampliacin de cultivos en pocas de notable crecimiento demogrco, las prcticas culturales y la conguracin montaosa del mismo llevaron a sus agricultores a disear el espacio agrcola escalonndolo por las laderas de las sierras, siguiendo las curvas de nivel. La paulatina roturacin de los montes implic importantes modi- caciones en el medio debido a la eliminacin de la cubierta vegetal, la traslocacin de los horizontes ed- cos, el acarreo de material no consolidado, la sustitucin de vegetacin natural por especies cultivadas alctonas o la alteracin y prdida de hbitat de la fauna. Pese a todo ello, las prcticas de conservacin del suelo que realizaron, como la construccin de terrazas en las laderas de pendientes pronunciadas, evitaron altas tasas de erosin tras la deforestacin, reduciendo las prdidas que se hubieran producido por escorrenta, contribuyendo a mejorar la inltracin del agua en los campos de cultivo y enriquecien- do su composicin bitica. la aplicacin de tcnicas de cultivo de bajo impacto contribuy a que la funcin ambiental que an- teriormente desarrollaban esas reas de bosque y matorral fuera sustituida por la diversidad agrolgica aportada por los campos de cultivo, ya que, si es compleja la relacin entre la agricultura y la biodiversi- 64 dad , las buenas prcticas agrcolas pueden contribuir a la conservacin de la ora y la fauna asociadas 65 a la agricultura , considerndose que en la actualidad aproximadamente el 50% de las especies euro- 66 peas dependen de los hbitats agrcolas . recientemente, tambin se estn evaluando los servicios de los ecosistemas que pueden verse favorecidos por una buena gestin del espacio agrario a escala terri- torial o de paisaje, como el secuestro de carbono (destacndose incluso la importancia de los estanques 67 y las balsas de riego ), el mantenimiento de la fertilidad del suelo, la regulacin de la dinmica de los 68 insectos polinizadores, etctera . en el caso de Petrer, debemos destacar adems, dada su extensin, la importancia que tienen los lomos de las terrazas agrcolas cubiertos con vegetacin en la conectividad de las distintas unidades de paisaje, ya que facilitan cobijo a numerosas especies y funcionan a pequea 69 escala como corredores ecolgicos . A lo que se debera aadir, dependiendo de la escala de trabajo, la 64 Vase la revisin histrica en: J. lABrAdOr, S. SArAndn, Aproximacin a las bases del pensamiento agroecolgico. en: J. labrador y M.A. Altieri (coords.), Agroecologa y desarrollo: Aproximacin a los fundamentos agroecolgicos para la gestin sustentable de agrosistemas mediterrneos. Cceres-Madrid: Universidad de Extremadura; Ediciones Mundi-Prensa, 2001, pp. 21-48. 65 eUrOPeAn cOMMiSSiOn, 2001, Biodiversity Action Plan& op. cit.; EUROPEAN COMMISSION, 2003a, Agriculture and the environment... op. cit.; EUROPEAN COMMISSION, 2004b, Environment and forestry& op. cit.; L.E. JACKSON, et al., Utilizing and conserving agrobiodiversity in agricultural landscapes. Agriculture, Ecosystems and Environment 121, 2007, pp. 196-210; M.J. WHITTINGHAM, Will agri-environment schemes deliver substantial biodiversity gain, and if not why not, Journal of Applied Ecology 44, 2007, pp. 1-5; E.D. CONCEPCIN, et al., effects of landscape complexity on the ecological effectiveness of agri-environment schemes. Landscape Ecology 23, 2008, pp.135-148. 66 EUROPEAN ENVIRONMENT AGENCY, 2006b, Progress towards halting the loss of biodiversity by 2010. EEA Report no 5/2006, p. 34, citando a P. Kristensen, 2003, eeA core set of indicators: revised version April 2003. technical report. eeA, copenhagen. 67 J.A. dOWninG, et al., Sediment organic carbon burial in agriculturally eutrophic impoundments over the last century. Global Biogeochemical Cycles 22, 2008, GB1018. 68 MillenniUM ecOSYSteM ASSeSSMent, 2005. ecosystems and Human Well- being... op. cit., p. 13; S.M. SWINTON, et. al., ecosystem services and agriculture... op. cit., pp. 245-252; W. ZHANG, et. al., ecosystem services and dis-services... op. cit., pp. 253- 260; E. BARRIOS, Soil biota, ecosystem services and land productivity. Ecological Economics 64, 2007, pp. 269-285; V.H. DALE, S. POlASKY, Measures of the effects... op. cit., pp. 286-296; R.L. GOLDMAN, et al., institutional incentives... op. cit., pp. 333-343. 69 W.W. HArGrOVe, et al., A practical map-analysis tool for detecting potential dispersal corridors. Landscape Ecology 20, 2004, pp. 361-373; C.J. GRASHOF-BOKDAM, F. van LANGEVELDE, Green veining: landscape determinants of biodiversity in european agricultural landscapes. Landscape Ecology 20, 2005, pp. 417-439; P.F. DONALD, A.D. EVANS, Habitat con- nectivity and matrix restoration: the wider implications of agri-environment schemes. Journal of Applied Ecology 43, 2006, 209-218; A.M. HERSPERGER, Spatial adjacencies and interactions: Neighborhood mosaics for landscape ecological planning. Landscape and Urban Planning 77, 2006, pp. 227 239; BOletn OFiciAl del eStAdO, 2007, Jefatura del estado, ley 42/2007, de 13 de diciembre, del Patrimonio natural y de la Biodiversidad, BOe, nm. 299 de 14 de diciembre de 2007, ttulo I, artculo 20; P. KINDLMANN, F. BUREL, Connectivity measures: a review. Landscape Ecology 23, 2008, pp. 879-890. 25 Sabina Asins Velis 70 evaluacin del papel de los lmites de hbitat (ecotono) como modicadores de la diversidad . Por lo que concierne a nuestro territorio, los municipios deben contemplar la inclusin de estas terrazas en la 71 red Bsica de la infraestructura Verde de la comunitat Valenciana . el diseo de los espacios hidrulicos en el trmino municipal (la captacin, el trazado de los canales de transporte y derivacin y la ubicacin de las balsas de distribucin) mantuvo en gran medida su estructura a lo largo de los siglos en los manantiales ms caudalosos, como el de Pua, dotndose con el tiempo de nuevas construcciones de pequeo tamao, a excepcin del pantano que se construy en 1679, que mejoraban el aporte hdrico a los campos de cultivo en este medio semirido. la competencia entre los diversos sectores productivos fue notable, pues el agua obtenida deba servir al mismo tiempo para el aprovisionamiento huma- no y animal, para el regado y para mover las ruedas de los molinos harineros y de plvora, establecindose 72 prioridades entre ellos en momentos de sequa . el mayor impacto ecolgico, con el tiempo, ser preci- samente la sobre-explotacin de estos acuferos y el agotamiento del caudal de casi todos los manantiales durante el siglo XX, como los de Pua, la Bienvenida, la Administracin, el cid y lamentablemente un largo 73 etctera . A este impacto se suma, desde mediados de ese mismo siglo, el producido por el abandono de numerosos campos de cultivo y el cambio de estilo de vida, que han implicado transformaciones relevantes en el uso de su territorio, calculndose que en la actualidad el rea afectada por el abandono agrcola supone el 44,49% del espacio cultivado en 1900. este espacio, que se escalonaba en bancales entre las cotas de 400-900 metros de altitud, experimenta hoy en da importantes riesgos naturales (sobre todo una signicativa prdida de suelo por erosin hdrica) y culturales e implicaciones a nivel social, como la prdida de identidad rural. Por ello, en paralelo al desarrollo de los sectores secundario y terciario que se ha producido en la localidad, desde diversos mbitos municipales se intenta salvaguardar los caracteres que han denido sus rasgos distintivos asociados al sector primario, en un marco de sostenibilidad econmica, agrcola, ambiental y cultural, sin olvidar, a su 74 vez, el dinamismo y cambio del paisaje y la continuacin de los procesos histricos . transformacin y conservacin que pueden interpretarse como parmetros antagnicos, pero que for- man parte de una misma poltica: la gestin del paisaje y su adecuacin a las necesidades y expectativas de 75 la poblacin . A ello habra que aadir tanto la variada gama de intereses que distingue a la administracin pblica, los empresarios, los propietarios particulares, los agricultores, los ciudadanos o las distintas asocia- ciones que actan en el municipio, como la no coincidencia entre aqullos para quienes la conservacin de determinadas caractersticas de su paisaje supone un coste o un benecio. Como ocurre, por ejemplo, con la riqueza patrimonial: la preservacin de aterrazamientos, minas de agua, cisternas, alcavons, acequias, parats, etc., que implica un alto costo de mantenimiento para los agricultores puede convertirse en ganancia para el sector turstico de la localidad. en la prctica, cooperacin, participacin pblica y coordinacin poltica son 76 conceptos considerados clave en la nueva gobernanza del territorio europeo , incluido el de gobernanza 77 ambiental . 70 t. SiSK, n.M. HAdAd, incorporating the effects of habitat edges into landscape models: effective area models for cross- boundary management. en: J. liu, W.W. taylor (eds.), Integration landscape ecology into natural resource management. United Kingdom: cambridge University Press, 2002. 71 direccin General del Paisaje de la conselleria de Medi Ambient, Aigua, Urbanisme i Habitatge (Generalitat Valenciana). el Pas Vasco destaca entre los pioneros en este tipo de trabajos: M. GUrrUtXAGA SAn Vicent, Red de Corredores Ecolgi- cos de la Comunidad Autnoma de Euskadi. Gobierno Vasco: Departamento de Medio Ambiente y Ordenacin del Territorio; direccin de Biodiversidad y Participacin Ambiental, 2005. 72 t.V. PreZ MedinA, Los molinos de agua en las comarcas del Vinalop (1500-1840). Petrer, Alicante, 1999, p. 24. 73 J. OlcinA cAntOS, et al., Un medio fsico de aridez y contrastes con un ro-rambla que otorga personalidad geogrca. en: J. Hermosilla Pla (dir.), Los regados tradicionales del Vinalop (Alto y Medio). Valencia: Generalitat Valenciana, Univer- sitat de Valncia. coleccin regados Histricos Valencianos, 2007, pp. 21-30. 74 M. BrGi, et al., driving forces of landscape change... op. cit, pp. 857-868; G. FAIRCLOUGH, A. WIGLEY, Historic landscape characterisation... op. cit, pp. 87-106; M. ANTROP, Sustainable landscapes... op. cit, pp. 187-197; O. BASTIAN, et al., landscape diagnosis... op. cit, pp. 359-374. 75 J. ROMERO GONZLEZ; J. FARINS DAS, Los territorios rurales... op. cit, pp. 333-394. 76 J. FArinS dAS, la estrategia territorial europea en el nuevo paradigma de la territorialidad. en: A. tarroja, r. camagni (coords.), Una nueva cultura del territorio... op. cit., pp. 46-48. 77 J. PAAVOlA, institutions and environmental governance: A reconceptualization. Ecological Economics 63, 2007, pp. 93-103. 26 El diseo del paisaje abancalado de Petrer 1. Descripcin del rea de estudio el municipio de Petrer se encuentra situado en la comunidad Valenciana, en el interior de la provincia de Alicante, comarca del Vinalop Medio, concretamente a 38 29 de latitud norte y 0 46 de longitud oeste (Mapa 1, Figura 1). el territorio, distante unos 30 kilmetros del mar Mediterrneo, se encuadra 78 en el dominio del clima mediterrneo . el Ayuntamiento cuenta desde 1993 con una estacin meteoro- lgica propia en la nca Ferrusa, ubicada a 550 m s.n.m., en la que se recogen a diario mediciones de temperatura, humedad, precipitaciones, direccin y fuerza del viento y horas de sol. el clima se carac- teriza por un verano muy clido, con medias en agosto de 24,9c, y un invierno relativamente suave con temperaturas medias de 9,4c a 10,5c y mnimas que difcilmente bajan de 0c, siendo las heladas 79 poco habituales. En cuanto se reere a las precipitaciones , entre los aos 1993-2003 destaca como ao 2 2 menos lluvioso el 2000, con 158,2 l/m , y ms lluvioso el 2001, con 414,9 l/m . la media de estos diez 2 aos es de 257,2 l/m . Por estaciones, es en otoo cuando se registra el mximo de media con 107,5 l/ 2 2 m , con un pico culminante en el mes de septiembre (35,1 l/m ), siendo el verano la estacin ms seca, 2 2 con 34 l/m de media, en la que destaca el mes de julio con slo 6,5 l/m . Segn el ndice de Thornthwaite, el clima de Petrer se clasicara como tipo semi-rido, mesotrmi- co, con gran falta de agua en verano (cdigo d B s b ). Atendiendo a la clasicacin agroecolgica 2 2 4 de Papadakis, el tipo y unidad climtica es Mediterrneo Semirido Subtropical. clima al que se adaptan bien las hortalizas, la vid, el olivo, el almendro y algunos frutales no climatricos, como el cerezo. los cereales y los frutales de invierno se pueden cultivar en zonas umbras. Por lo que respecta a otro tipo de cultivos, en Petrer se debe tener en cuenta la escasez de agua, que diculta por ejemplo el desarrollo de los ctricos, o la temperatura, que afecta al algarrobo por encima de la cota de los 500 m de altitud. como caracterstica asociada al clima mediterrneo, las sequas e inundaciones han sido una cons- tante en Petrer a lo largo de los siglos, lo que ha quedado debidamente reejado en la documentacin escrita que se conserva en su Archivo Municipal. como ejemplo, destacamos las continuas referencias a eventos de sequa durante el siglo XVii, con un efecto importante en la productividad de los cultivos, como las que se produjeron en los aos 1592, 1608, 1631, 1632, 1634, 1635, 1655, 1657, 1658, 1668 y 1696. Adems hubo caresta de simiente en 1603, 1604, 1607, 1646, 1647, 1651 y 1652 e inundaciones 80 importantes en 1672 y 1692 . estos episodios documentados se asemejan a la dinmica sealada para otras zonas espaolas y del Mediterrneo europeo en el siglo XVII, coincidiendo con el nal de la deno- 81 minada Pequea edad del Hielo . entre las sequas e inundaciones documentadas posteriormente, sern 78 datos climticos en: S. SncHeZ MArtneZ, et al., Petrer: 10 aos de observaciones climticas. Petrer: excm. Ajunta- ment de Petrer; Generalitat Valenciana: CAPA, 2004, pp. 15-20; E. MARTNEZ IBORRA, P. GIMNEZ FONT, Aportaciones al conocimiento del clima de Petrer y elda. Revista del Vinalop 9, 2006, pp. 145-167; J. OLCINA CANTOS, et al., Un medio fsico de aridez& op. cit., pp. 23-26. 79 A.J. PreZ cUeVA (coord.), Atlas climtic de la Comunitat Valenciana. Valncia: conselleria d Obres Pbliques, Urbanis- me i transports, Publicacions de divulgaci tcnica. col.lecci territori 4, 1994, pp. 168, 170, 171: los datos proporcionados para Petrer parecen indicar que se ha producido un descenso en las medias de las precipitaciones, entre los perodos 1961-1972 y 1994-2004, de unos 158 l/m 2 , dato nada despreciable ya que representara un 38% de lluvia menos, y ms importante todava si tenemos en cuenta el bajo ndice de precipitaciones en la localidad. Vista la diferencia, solicitamos informacin en la estacin meteorolgica de Monvar, instalada a 560 m de altitud. en esta localidad entre 1968-1990 la media anual fue de 308,9 l/m 2 ; entre los aos 1996-2006 la media ha sido de 290,5 l/m 2 , cantidad inferior en 18,4 l/m 2 , es decir un 5,9% menos (los datos de 1968-1990 en: A.J. PreZ cUeVA, A.J. (coord.), Atlas climtic... op. cit., pp. 169, 170. los datos de 1996-2006 facilitados por don isidre Molina, responsable del Servicio Meteorolgico del colegio Pblico escritor canys de Monvar). dado que en Petrer tanto la estacin meteorolgica antigua como la nueva se encontraban a una misma altitud y muy cercanas, nos in- clinamos a pensar que la diferencia pueda deberse a cierta imprecisin en la estacin antigua, ya que la actual est totalmente automatizada. 80 la sequa de 1592 en: AAM, notario cosme Alamora, 21 de marzo de 1592. la referencia documental de las sequas en el siglo XVii en captulo 3, punto 4. 81 M. BARRIENDOS VALLVE, J. MARTN-VIDE, Secular climatic oscillations as indicated by catastrophic oods in the Spanish Mediterranean coastal area (14th-19th centuries). Climatic Change 38, 1998, pp. 473-491; F.S. RODRIGO, et. al., rainfall variability in Southern Spain on decadal to centenal time scales. International Journal of Climatology 20, 2000, pp. 721-732; A.T. GROVE, The Little Ice Age and its geomorphological consequences in Mediterranean Europe. Climatic Change 48, 2001, pp. 121-136. 27 Sabina Asins Velis 82 las sequas de 1708, 1719, 1739, 1758, 1878 y 1881 y las inundaciones de 1793 y 1884 las considera- 83 84 das entre las ms catastrcas , as como ya en el siglo XX las de 1902, 1906, 1913, 1966 y 1982 . Mapa 1. localizacin del trmino municipal de Petrer, Alicante (Elaboracin: P. carrillos) Fig. 1. Vista area de los trminos municipales de Petrer y elda (Fuen- te: Instituto Cartogrco Valenciano) 82 La sequa de1708 en AMP, caja 48 (4-6), libro 48(5); la de 1719 en APM, Escrituras Pblicas de 1713 a 1721, ao 1719, f. 38; la de 1739 en: AMP, 48/3. Veredas desde 1737 hasta 1741. 4 de septiembre de 1739; la de 1758 en: AMP, libro 48/6, cartas de 25 de julio, de 3 y 4 de agosto de 1758 ( por la falta universal de Agua, se hallan tan perdidas las tierras que ni aun donde dar bo- cado tienen las Cavallerias ); la de 1878 y 1881 en: AMP/L-47, carpeta 1 Gobierno, subcarpeta 3, Estadstica de Poblacin. 83 las inundaciones de 1793 podran incluirse en la denominada anomala Mald : M. BArriendOS, M.c. llASAt, the case of the Mald anomaly in the Western Mediterranean basin (ad 1760 1800): an example of a strong climatic variability. Climatic Change 61, 2003, pp. 191-216. 84 AMP, carta del alcalde de Petrer al Gobernador Civil, 20 de septiembre de 1884; A. GIL OLCINA, El rgimen de los ros alicantinos. Estudios Geogrcos 33, 1972, pp. 128; A. MORALES GIL, Las crecidas de los barrancos de las Ovejas y Agua Amarga. Octubre 1982. Estudios Geogrcos 170-171, 1983, pp. 143-170; A.P. PREZ GARCA-TORRES, Avenidas u- viales e inundaciones en el Medio Vinalop en el trnsito de los siglos XiX y XX. Investigaciones Geogrcas 26, 2001, pp. 169-179. 28 El diseo del paisaje abancalado de Petrer Mapa 2. representacin esquemtica de los principales montes, valles y ramblas de Petrer (Fuente: Ayuntamiento de Petrer) Ubicada la cota ms baja a 400 metros de altitud, en el valle de elda, los restantes valles disponibles para el cultivo (Pua, caprala, navayol, la Administracin o la Almadrava) se localizan entre los 600 y 800 metros y quedan rodeados por sierras de altura media, como el cavall, cotxinets, el cid, los puntales del Ginebre, el Frare, el Alt del colegial, el Alt de Peret, las peas de las Montesas y del Senyor, Palomarets, 85 Xaparrals o la Lloma Rasa, por citar los ms signicativos (Mapa 2). estos montes, interrumpidos por ramblas y barrancos de distinto tamao y profundidad, constituyeron las reas a abancalar a lo largo de los siglos. Formados por diferente material litolgico, la desigual dureza de su composicin no fue impedimento para que los agricultores los roturaran, ampliando paulatinamente las reas de cultivo. de este modo, tanto los suelos desarrollados sobre materiales margosos como calizos vieron alterada su morfologa por la actuacin humana, antropizando el paisaje, pero a la vez convirtindolo en un espacio productivo y variado, alternando las masas arbustivas o arbreas con reas cultivadas, casas de campo o corrales de ganado, congurando un mosaico con una rica diversidad biolgica y paisajstica. 85 A. cUencA PAY, el cuaternario del valle de elda. Instituto de Estudios Alicantinos 6, 1971, pp. 23-56.; A. CUENCA PAY, M.J. WALKER, Pleistoceno nal y Holoceno en la cuenca del Vinalop (Alicante). Estudios Geolgicos 32, 1976, pp. 95-104; G. PONCE HERRERO, C. JUREZ, El medio Vinalop. Historia de la provincia de Alicante. Alicante: 1985; A. cUencA PAY, r. nAVAln GArcA, Paisaje y medio ecolgico en elda. Historia de Elda, tomo i. elda, Alicante: Ayuntamiento de elda, caja de Ahorros del Mediterrneo, 2006, pp. 15-27. 29 Sabina Asins Velis los barrancos y ramblas se utilizaron como puntos de articulacin, en torno a los cuales ubicar los campos de cultivo, sobre todo junto a las ramblas de Pua, caprala y l Almadrava y los barrancos de la Sarsa, de Fontanars, de l eixau, del cid, de Sento, etc., a veces dentro de su propio cajero e incluso escalonando sus mrgenes. las aguas espordicas que circulaban por estos barrancos y ramblas fueron, junto a las de los manantiales, el recurso utilizado para alimentar las balsas con que irrigar pequeas reas de huerta o mejorar el secano, en un territorio caracterizado por la irregularidad y escasez de las precipitaciones. los cauces intermitentes, que se dirigen hacia el oeste, son en su mayora tributarios del ro Vinalop, siendo los aportes escasos y discontinuos y desde luego insucientes para abastecer las necesidades de consumo de la conurbacin elda-Petrer, que cuenta con ms de 80.000 habitantes. Su recorrido es corto, entre 5 y 10 kms, y aqullos de menor entidad, que no llegan a desembocar en el Vinalop, se diluyen en la zona de glacis. la habilidad de los agricultores para utilizar las aguas de avenida se ha constatado en el trabajo de campo y de archivo, destacando la construccin de boqueras y otros elementos de captacin, distribucin y almacenamiento de agua, como minas, azudes, rafas, acequias, etc. la infraestructura de mayor envergadura que se construy en el municipio, para controlar y almacenar parte de las aguas de avenida del barranco del Badallet, fue el pantano. erigido en 1679, se aneg en 1704; procedindose por parte del Ayuntamiento en 1721 al arrendamiento del bancal de tierra que se haba generado. como comparacin, destacar que en el pantano de tibi, muy cercano a Petrer, 86 los fangos alcanzaban como promedio alturas de 10 a 12 metros cada 4 aos . el anlisis de la ubicacin de los asentamientos y de los campos de cultivo a lo largo de la historia 87 de Petrer, en relacin con los distintos tipos de suelo clasicados , nos ha permitido constatar que con el tiempo, y sobre todo a partir del siglo XVii, sus agricultores roturaron todos los tipos de suelo descri- tos en el territorio sin discriminar su capacidad de uso agrario (cuadro 1, Figura 2). cuando se trata de suelos poco evolucionados, desarrollados a partir de materiales no consolidados (regosoles gypsferos o calcricos, cambisoles clcicos o calcisoles hplicos) generalmente arcillosos, poco permeables y con tendencia a sufrir procesos erosivos, el abancalamiento se realizaba a partir de su propio material de origen como relleno de los bancales. Sin embargo, cuando la roca madre consolidada supona un escaso espesor del suelo, junto a una elevada pedregosidad (como en los denominados leptosoles lticos), las labores realizadas consistan en primer lugar en realizar muros de mampostera de piedra seca, asentada directamente sobre la roca, para permitir amontonar materiales de zonas adyacentes proveyendo al suelo de un espesor del que carecan para el desarrollo radicular. 88 los materiales ms antiguos , aoramientos de arcillas rojas y yesos del Keuper (Trisico), fueron objeto de aprovechamiento tanto para ubicar campos de cultivo (en el Altet de la costa, junto al Barranc del to Bonif, en la zona del calafate) como para explotar sus minas de yeso, como hizo el propietario Luis Villaplana, en los aos 1920-1930, en su nca de Navayol (Figuras 3 y 4); tambin fueron rotura- das las laderas de arcillas y margas arenosas rojas con intercalaciones de calizas dolomticas negras y yesos, de ese mismo perodo, en la zona de Aiguarrius, en el barranco de noguera (Figuras 5 y 6), en la rambla de Pua a los pies de la Sierra del caballo, en la colada del cid o desde el rebent hacia el sur hasta el trmino de novelda. los suelos que se desarrollan sobre este material geolgico se denominan regosoles gypsricos. Se caracterizan por su escasa evolucin, mostrando un horizonte chrico super- cial sobre el material de origen poco consolidado (horizonte C) de naturaleza yesfera que le conere al suelo una elevada concentracin de sales y, normalmente, una escasa permeabilidad y una elevada erosionabilidad. esta caracterstica explica las graves morfologas erosivas tipo crcavas y badlands que se desarrollan en el rea y que, si se quieren destinar al cultivo, demandan de una cuidada labor de 86 A. GIL OLCINA, Evolucin histrica del problema del agua en los regados decitarios alicantinos. En: A. Alberola (Ed.), Cuatro siglos de tcnica hidrulica en tierras alicantinas. Alicante, 1995, p. 25. 87 Para la descripcin de los suelos hemos contado con la inestimable ayuda de la dra. carmen Antoln. los suelos se han cla- sicado segn: IUSS Working Group WRB, 2006, World reference base for soil resources 2006. 2nd. edition. World Soil re- sources reports no. 103. FAO, rome. igualmente agradecemos al dr. Policarp Garay la revisin del apartado de Geologa. 88 Para la descripcin geolgica se utilizan los Mapas Geolgicos de espaa, 1:50.000: elda (871), inStitUtO GeOlGicO Y MINERO DE ESPAA. Servicio de Publicaciones del Ministerio de Industria, 1978; Castalla (846), INSTITUTO GEOL- GicO Y MinerO de eSPAA. Servicio de Publicaciones del Ministerio de industria, 1978. 30 El diseo del paisaje abancalado de Petrer abancalamiento y mantenimiento de los mismos para evitar el desplome de los muros que constituyen las terrazas. Son suelos bsicos, con escaso contenido en humus y baja fertilidad. Su capacidad de Uso se considera Baja o Muy Baja (clases d y e), y sus limitaciones son sobre todo los graves o muy graves problemas erosivos, en funcin de la pendiente, por lo que la prctica del abancalamiento se muestra altamente ecaz en la reduccin o ralentizacin de las manifestaciones de prdida de suelo. Los materiales de edad jursica (Dogger) se localizan nicamente en el aoramiento aislado de Les Ventetes. Se trata de materiales carbonatados, con sucesin de calizas gris oscuro, calizas oolticas y pseudo-oolticas grises, calizas micrticas grises y calizas gravelosas. los suelos, en general, no se desarrollan o se desarrollan escasamente, debido al alto grado de consolidacin del material y slo en- contramos pequeos horizontes superciales de menos de 10 cm de espesor, denominndose a este tipo de suelo leptosoles lticos. normalmente estos suelos no han sido, ni son, objeto de utilizacin agrcola por su escaso espesor. del cretcico inferior se distingue una amplia zona, en la partida de rabosa, caracterizada por mar- gas, margas arenosas verde-amarillentas y areniscas margosas donde aparecen suelos de mayor espesor, pero escasamente evolucionados, donde destaca el horizonte chrico supercial sobre la roca madre, en general escasamente consolidada, que permite el enraizamiento de la vegetacin a pesar de su incipiente estadio de desarrollo. estos suelos se conocen como regosoles calcricos, aludiendo a su naturaleza carbonatada. el cretcico superior, concretamente las calizas compactas blancas y grises con slex, est representado en la Solana del cid, en la Sierra del cid, en castellarets y en parte de los Puntales del Ginebre, con suelos clasicados como Leptosoles rndzicos o etricos, en funcin de su contenido en materia orgnica, ambos de escaso espesor. Los materiales de su ltima fase, el Senoniense, denidos por calizas margosas tableadas y margas blancas, han sido profusamente roturados para el cultivo en Salinetes (Figura 7), els Blanquizars, las casas y el rac del cid, en otro segmento de los Puntales del Ginebre y en las laderas del castell de Petrer. los suelos desarrollados sobre estos materiales cretcicos se clasican como Regosoles calcricos. En general, la profundidad no constituye limitacin a su utili- zacin para el cultivo, sin embargo, su textura na, procedente de una litologa susceptible a los proce- sos erosivos, ha requerido histricamente del abancalamiento de las laderas para su utilizacin agrcola, habindose demostrado esta tcnica de conservacin del suelo ecaz en estas reas. No obstante, como consecuencia del reciente proceso de abandono agrcola, con la consiguiente ausencia de mantenimien- to de los muros de mampostera, se estn produciendo importantes procesos erosivos, con una notable prdida de suelo. En cuanto se reere al Terciario, es mayoritario en el territorio de Petrer. La serie comienza con las arcillas verdes que aparecen a lo largo de casi todo el Palegeno, y encontramos restringidas al paraje del carabass, atravesado por el barranco de la Sarsa hasta el trmino de castalla. del eoceno son las calizas y dolomas del Alt de crdenes. la transicin del Palegeno al negeno se reconoce en les Saleres, con calizas pararrecifales con intercalaciones margosas; y el trnsito del Oligoceno al Mioceno inferior, ca- racterizado por calizas, margas y arenas tipo ysch, en el Morro Gros (el Bubo), el Puntal d enmig y la Sierra del Caballo. Del Mioceno inferior aoran calizas margosas ftidas y microconglomerados al oeste de la cordillera de Ferrer (lindando con Sax), en el monte del Arenal de Pruna, en la Ombra de Marcos, y en el Alt de Ponce hasta llegar al trmino de Castalla, rodeado por la nca de la Administracin. la transicin del Mioceno inferior al medio, caracterizada por margas blancas, se localiza entre el mon- te dels cotxinets y la rambla de caprala (en la casa del dols), en la partida del Poblet, en el polgono de les Pedreres junto a la autova, y en la Solana del Frare hacia castalla incluyendo la casa del nap y parte * c. AntOln tOMS, c. A VidAl, capacidad de Uso de los suelos de la comunidad Valenciana. en: c. AntOln tOMS (coord.), El suelo como recurso natural en la Comunidad Valenciana. Valencia, 1998, p. 112; C. A VIDAL, J. SNCHEZ DAZ, Los sistemas de evaluacin de suelos en la planicacin de los usos del territorio en el mbito mediterrneo. Aplicaciones en la comunidad Valenciana. en: J. lvarez rogel (coord.), Alternativas para la planicacin y manejo del suelo en condiciones de aridez climtica. Murcia: caja de Ahorros del Mediterrneo, 2005, pp. 131-146. ** J. SncHeZ, et. al., Metodologa de capacidad de Uso de los suelos para la cuenca mediterrnea. Madrid: Primer Congreso Nacional de la Ciencia del Suelo, 1984, pp. 937-948. 31 Sabina Asins Velis de la Administracin, todas ellas abancaladas y dedicadas histricamente al cultivo de olivos y almendros. el Mioceno medio, con calcarenitas bioclsticas, poco consolidadas, se aprecian en el Alto del colegial, el cerquillo, el Xocolate (atravesado por el barranco de escurina), el monte dels cotxinets (junto a la casa de Paco el dels cotxinets, Figura 8), y una lengua que baja desde castalla en paralelo a la Ombra dels canterers. en cuanto a las calcirruditas bioclsticas con cantos del Mioceno medio las encontramos en la casa de castalla. el trnsito del Mioceno medio al superior, con margas blancas, se delimita en Xinquera, Gurrama, parte del valle de Pua (zona del rancho Grande) y en les Pedreres Altes, partidas en donde, al igual que en otros dominios margosos, se ubicaron los campos de cultivo a lo largo de los aos. los materiales de todo este periodo son carbonatados y se diferencian, desde el punto de vista de los suelos a los que dan lugar, por su grado de consolidacin en funcin de que aparezcan margas blancas o calizas margosas, calizas o microconglomerados con carcter pararrecifal o incluso arenas tipo ysch. los suelos correspondientes se caracterizan por su naturaleza carbonatada, variando el espesor de los mismos en funcin de la dureza del material geolgico. Las margas blancas, que aoran en las laderas, se encuentran abancaladas en numerosos enclaves. en la actualidad se ha incrementado de forma muy evidente el desarrollo de los procesos erosivos en los regosoles calcricos que ocupan estas posiciones, debido a la ausencia de mantenimiento de las paredes de los bancales. en la Forad, coronando los re- lieves, se aprecia la presencia de materiales calizos y dolomticos que muestran la casi inexistencia de suelo (leptosoles lticos) o conducen a un escaso desarrollo de los mismos, que no alcanzan los 25 cm de espesor (leptosoles etricos). All donde la vegetacin natural ha conseguido incorporar mayores contenidos de materia orgnica, formando un horizonte mllico, igualmente de naturaleza carbonatada, los suelos se han clasicado como Leptosoles rndzicos. En algunas zonas se localizan muros de bancales levantados directamente sobre los aoramientos rocosos, en donde se evidencia el acarreo de materiales procedentes de las ramblas o de margas ms o menos cercanas. el suelo as formado posee las caractersticas del material alctono transportado. en 89 estos casos, el suelo se denomina regosol ntrico, aludiendo a su origen (Figura 9). en otras reas terciarias se ha llegado a desarrollar un horizonte de alteracin cmbico que hace que los suelos se clasiquen como Cambisoles calcricos o Calcisoles hplicos, si el carbonato clcico ha sido lavado y acumulado en las partes inferiores del perl. Ya del cuaternario, los glacis con cantos se delimitan en la casa del to Quinto dels Aiguarrius y en la rambla dels Aiguarrius; los conos de deyeccin y depsitos de pie de monte en el barranco del Llop y la casa del Llop; y los glacis cubiertos y encostrados en el barranco de Salinetes, el Ginebre, Terrosals, el Pl i Pito y la Almadrava. todas estas formaciones geomorfolgicas, caracterizadas por la existencia de horizontes clcicos fuertemente cementados (horizontes petroclcicos), limitan, en su origen, el espesor efectivo del suelo. Sin embargo, las costras son frecuentemente levantadas y utilizadas, tras las labores de desbastado, en la mampostera del bancal. estos suelos, que en principio eran calcisoles ptricos, se convierten por la accin antrpica en calcisoles hplicos, o incluso en regosoles ntricos si la transfor- macin ha sido muy profunda. los depsitos cuaternarios tambin se ubican desde la falda del castillo de Petrer hasta el lmite con elda. los depsitos del cuaternario indiferenciado, de gravas, arenas y arcillas, se localizan en el derra- mador de navayol (Figura 10) y el valle de caprala, junto a la casa de Paco el del cotxinet hasta el ba- rranco de la caada (Figura 11). los suelos a que dan lugar se denominan Fluvisoles calcricos, cuando estos depsitos recientes an no han evolucionado, o calcisoles hplicos, en aquellos casos en los que la permeabilidad del material ha permitido una movilizacin y posterior acumulacin del carbonato clcico predominante. estos suelos son los que se consideran con una capacidad ms alta para el cultivo en todo el trmino, que as y todo no sobrepasa la clase c, dadas las limitaciones debidas a su moderado espesor, en algunos casos, y a la abundante pedregosidad del perl. Han sido histricamente utilizados para cultivos como cereales, vid, olivo, almendro y productos hortcolas, donde la disponibilidad de 89 Estos suelos no los incluimos como Antrosoles al no cumplir las caractersticas para ser clasicados como horizontes de diagnstico hrtico, irrgrico, plgico, trrico, antrcuico o hidrrgico de iUSS Working Group WrB, 2006, World reference base for soil... op. cit., p. 53. 32 El diseo del paisaje abancalado de Petrer agua lo permita y el suave abancalamiento facilitaba un mayor espesor del suelo y una mayor inltra- cin del agua, entre otras ventajas. en la actualidad los cultivos han sido desplazados por la zona urbana y los polgonos industriales de la localidad, por lo que se han perdido los suelos considerados ms aptos para la agricultura en el rea de estudio (Figura 12). Cuadro 1. resumen de la caracterizacin de las clases de capacidad de Uso del Suelo cAPAcidAd de USO del SUelO en edafologa Aplicada la capacidad de Uso del Suelo expresa la matriz de acogida ante usos agrarios muy generales (agrcola, forestal y pastizal) atendiendo a las caractersticas intrnsecas y extrnsecas del suelo y del resto de variables biofsicas, evaluando que caractersticas ofrece el suelo de forma * natural y cules son las limitaciones que restringen su utilizacin. en la comunidad Valenciana el ** mtodo de evaluacin ms utilizado es el de Snchez et. al. (1984), con ligeras modicaciones pos- teriores (tabla 1). La metodologa establece Clases (A, B, C, D, E) y Subclases que se denen segn las propiedades del suelo. en Petrer las caractersticas que afectan en mayor grado la capacidad de usos de su territorio son la pendiente (p), el espesor efectivo (x), la erosin (e) y la pedregosidad (g). Tabla 1. caracterizacin de las clases de capacidad de Uso (Fuente: c. AntOln tOMS, c. A VidAl, 1998, p. 114) PROPIEDADES CLASES A B C D E Erosin (e) 7 tm/ha/ao 7-15 tm/ha/ao 15-40 tm/ha/ao 40-100 tm/ha/ao 100 tm/ha/ao o Fase ltica 45% Pendiente (p) 8 % 8-15 % 15-25 % 25-45 % 45 % Espesor efectivo (x) 80 cm 40-80 cm 30-40 cm 10-30 cm, variable 10 cm, variable Aoramientos (r) 2 % 2-10 % 10-25 % 25-50 % 50 % Pedregosidad (g) 20 % 20-40 % 40-80 % 80-100 % Pavimento pedregoso Salinidad (s) 2 dS/m 2-4 dS/m 4-8 dS/m 8-16 dS/m 16 dS/m Caractersticas fsicas (f) equilibradas Poco equilibradas inadecuadas desfavorables Muy desfavorables Caractersticas qumicas (q) Favorables Poco favorables inadecuadas desfavorables Muy desfavorables Hidromorfa (h) Ausencia Pequea Moderada Grave Muy grave CAPACIDAD DE USO Muy elevada elevada Moderada Baja Muy Baja 33 Sabina Asins Velis Fig. 2. Mapa de capacidad de uso actual del suelo de Petrer (Fuente: Antoln, c. (coord.) el suelo como recurso natural en la comunidad Valenciana. Valencia, 1998. Elaboracin para este estudio: e. carb, cide). leyenda en el cuadro 1 34 El diseo del paisaje abancalado de Petrer Figs. 3 y 4. cantera de yesos del Keuper en navayol. el horno para su explotacin, en excelente estado de conser- vacin, lo construy don luis Villaplana (1920-1930) Figs. 5 y 6. Arcillas y margas arenosas rojas del Keuper en el barranco de noguera y bancales abandonados en el mismo emplazamiento; el cultivo en esta zona est constatado documental- mente desde el siglo XVi. regosol gypsrico 35 Sabina Asins Velis Fig. 7. Bancales sobre margas blancas del cretcico superior en Salinetas, partida en cultivo con anterioridad al ao 1581. regosol calcrico Fig. 8. calcarenitas bioclsticas del Mioceno medio, fciles de tallar, en las que se excav una balsa y canaliza- ciones para recoger el agua de escorrenta. leptosol ltico. Monte dels cotxinets 36 El diseo del paisaje abancalado de Petrer Fig. 9. rea de leptosoles lticos sobre los que en el siglo XiX se construyeron bancales con muros de mampos- tera en seco directamente sobre la roca, que se rellenaron con materiales de acarreo, dando lugar a regosoles ntricos. Junto a la cueva del Murciano en el Xocolate Fig. 10. depsitos del cuaternario en el derramador de navayol. cultivos documentados en la zona con an- terioridad a 1583 37 Sabina Asins Velis Fig. 11. calcisol hplico desarrollado a partir de depsitos cuaternarios en cotxinets en los que se ubican los bancales de cultivo. el rea consta en cultivo al menos desde 1636 Fig. 12. Fluvisoles calcricos, en el valle de elda, que seran objeto de cultivo en la edad del Bronce, en poca Romana y, ya en regado, desde poca Islmica hasta mediados del siglo XX, conguran- do el rea de huerta histrica. en la actualidad estos suelos han sido ocupados por polgonos indus- triales y construcciones urbanas. (Foto: M.c. ricO nAVArrO, 2002, p. 27) 38 El diseo del paisaje abancalado de Petrer 2. La variable cultural y la presin demogrca sobre el espacio a cultivar los conceptos introducidos en los ltimos aos para interpretar y revalorizar el paisaje rural se han centrado en el reconocimiento de la diversidad cultural y en la necesidad de preservar la historia de usos del territorio y la caracterizacin histrica del paisaje, en conjuncin adems con su historia ambiental. todo ello promovido por disciplinas como la Geografa Histrica, la Historia y la Arqueologa, la Ar- 90 quitectura del Paisaje o la ecologa, entre otras . debemos destacar la labor realizada por la comisin europea y otras instituciones para impulsar las caractersticas culturales del paisaje rural, especialmente a travs de la convencin sobre la Proteccin del Patrimonio Mundial cultural y natural de la UneScO de 1972, del convenio para la Proteccin del Patrimonio Arquitectnico de europa del consejo de europa de 1985 (convencin de Granada), de los sucesivos informes Dobris Assessment de la Agencia europea del Medio Ambiente en 1995, 1998 y 2003, de la Pan-European Biological and Landscape Diversity Strategy y el Action Plan for European Landscapes, de la declaracin de cork, de la carta de cracovia, del convenio europeo del Paisaje, del comit del consejo de europa sobre la Herencia 91 cultural o de la Asamblea Parlamentaria del consejo de europa de 2006 . 90 M. 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Cultural Heritage Division; COUNCIL OF EUROPE, 2006, Parliamentary Assembly, Doc. 39 Sabina Asins Velis As, junto a las caractersticas lito-edcas, los componentes cultural y demogrco son otros fac- tores a considerar al estudiar la dinmica evolutiva del espacio abancalado. este tipo de paisaje se ha convertido en un referente importante al hablar de paisajes construidos, ya que si bien todos los enclaves agrarios lo han sido, el aterrazado especialmente, dado los conocimientos y dominio de tcnicas que se requieren para desarrollar estas prcticas. estos sistemas culturales de conservacin del suelo y aprovi- sionamiento de agua han sido incluidos en la denicin de conocimientos tradicionales por el comit de Ciencia y Tecnologa del Convenio de Naciones Unidas de Lucha contra la Deserticacin, que los describe como sigue: Los conocimientos tradicionales constan de conocimientos prcticos (operacionales) y normati- vos (facilitadores) acerca del entorno ecolgico, socioeconmico y cultural. Son sistmicos (in- tersectoriales y holsticos), experimentales (empricos y prcticos), se transmiten de una genera- cin a la siguiente y tienen un valor cultural. Este tipo de conocimientos promueve la diversidad; 92 asigna valor a los recursos locales (internos) y los reproduce . estas tcnicas y prcticas de manejo de suelo y agua fueron objeto de mantenimiento constante en las reas cultivadas de Petrer hasta los aos 60 del siglo XX. en la actualidad, con la nueva aproximacin hacia la agricultura mediterrnea, que considera que los espacios agrarios incluyen, adems de la pro- 93 duccin de alimentos, otros bienes pblicos, como el mantenimiento del paisaje , se estn reevaluando los valores culturales heredados. de este modo, se enfatiza la proteccin de aquellos sistemas que se han demostrado dinmicos y con capacidad para adaptarse a los requerimientos de la mecanizacin, como seran en Petrer los aterrazamientos de las partidas de l Almadrava, la Gurrama, caprala, navayol, cotxinets, castalla y en general todas las reas que actualmente permanecen en cultivo, hasta una exten- sin de 1.533 hectreas, pues no olvidemos que todos los cultivos del trmino se disponen en bancales. Sin embargo, donde incluso con estas prcticas culturales no se alcanza un rendimiento econmico 94 suciente, el agricultor, directamente, ha optado por el abandono , como en rac coloma, Pepiosa, el Figueralet o Fond del Feo. los conocimientos tradicionales, enriquecidos y adaptados generacin tras generacin, se han mos- trado en Petrer ecaces a lo largo de los siglos conformando un sistema cultural con nalidad mltiple. Ello ha permitido a los agricultores ampliar la supercie de cultivo, retener el suelo, administrar el agua con su almacenamiento en balsas y su regulacin mediante tandas de riego o adaptar las construcciones de piedra seca al entorno, creando una armona entre agricultura, medio ambiente y arquitectura y una simbiosis de todo ello con las tcnicas de organizacin del espacio, con la contrapartida de implicar una alta inversin en mano de obra de los mismos agricultores-propietarios. Una organizacin del espacio que ha estado sujeta a la evolucin del crecimiento de la poblacin y a la necesidad de nuevas reas de cultivo. los datos de poblacin de que disponemos nos permiten considerar que la relacin suelo/agua estuvo en equilibrio con las necesidades de la poblacin hasta el siglo XIX y fue suciente para generar 95 excedentes agrcolas con que comerciar (Grcas 1 y 2). 10928, Conservation and use of the landscape potential of Europe. report, committee on the environment, Agriculture and local and regional Affairs. 5 May 2006. 92 iccd/cOP(3)cSt/3 prrafos 10 y 11 e informe del Grupo especial de conocimientos tradicionales, cOP4, Bonn, prrafo 30. 93 eUrOPeAn cOMMiSSiOn, 2004b, environment and Forestry. Biodiversity Action Plan... op. cit., p. 4. 94 e. cArB VAlVerde, reas marginales de la provincia de Alicante. tesis doctoral. Valencia: Universitat de Valncia, 1993. 95 Ao 1431: 36 vecinos (c. 162 habitantes) (c. lPeZ rOdrGUeZ, Nobleza y poder poltico en el reino de Valencia (1416- 1446). Valencia, 2005, p. 101, nota 226). Ao 1488: 72 vecinos (c. 324 habitantes) (r. VAlldecABreS rOdriGO, El cens de 1510. Relaci dels focs valencians ordenada per les Corts de Monts. Valencia: Universitat de Valncia, 2002, p. 555). Ao 1510: 99 vecinos (c. 445 habitantes) (ArV, reAl 514, ter., ff. 57-61). Ao 1563: 133 vecinos (c. 598 habitantes) (ArV, reAl CANCILLERA, reg. 563, vol. III, ff. 1076 r.-1077 r.; ARV, REAL CANCILLERA, reg. 564, vol, III, 1264 r.-1272 v.). Ao 1608: 245 vecinos (c. 1.102 habitantes) (ARV, MANAMENTS Y EMPARES, Ao 1603, Libro 8, mano 80, folio 1 y siguientes; ARV, MANAMENTS Y EMPARES, Ao 1607, Libro 7, mano 69, ff. 1 y sig.; mano 70, f. 19-38v; ARV, MANAMENTS Y EMPARES, Ao 1608, Libro 6, Mano 67, ff. 8-28; ARV, MANAMENTS Y EMPARES, Ao 1608, Libro 8, Mano 93, ff. 1-28). Ao 1611: 100 vecinos (c. 450 habitantes) (t.V. PreZ MedinA, M.c. ricO nAVArrO, la carta pobla de Petrer del 1611. 40 El diseo del paisaje abancalado de Petrer la expulsin de los moriscos, y el proceso repoblador que comenz en 1611 con 100 familias cris- tianas, no implicaran en un momento inmediato grandes cambios en la estructuracin del espacio cul- tivado, dado que los importantes costes de reorganizacin del sistema de irrigacin y aterrazamiento no podran ser afrontados ni por la seora -don Antonio coloma, conde de elda- ni por los nuevos colonos que se desplazaron a Petrer desde localidades cercanas, como luego veremos. Sin embargo, a partir de las mejoras de 1616 ya se aprecia en la documentacin la introduccin de nuevos cultivos, como el al- mendro, y despus de 1622 la construccin de nuevas acequias. en 1611 el espacio agrcola trabajado por estas 100 familias ocupaba 144,12 hectreas; de ellas 24,02 se cultivaban en regado y 120,10 en 96 secano mejorado , as como una porcin importante del trmino, cercana a las 1.000 hectreas que se destin a cultivos de secano. A las demandas de tierra, en la primera mitad del siglo XVIII, se respondi con la intensicacin del trabajo, aumentando las roturaciones y el abancalamiento de parajes incultos o anteriormente cultivados y en ese momento abandonados. desde 1732 a 1760 se tiene constancia documental del establecimiento de campos aterrazados por un total de 3,66 hectreas en el regado y 105,20 hectreas en el secano, ms las parcelas que no especican la extensin y se asignan como pedazos, y otras licencias concedidas para ensanchar determinadas heredades; datos a los que hay que aadir el alto porcentaje de roturaciones ilegales. esta ampliacin del espacio cultivado fue pareja a la de la red hdrica, mediante la captacin de nuevos acuferos y la construccin de acequias y balsas de riego, incrementando la capacidad agrcola del territorio. en 1900 ya se cultivaban 2.762 hectreas, de las cuales 2.514 se dedicaban a productos de secano, 26 97 hectreas a regado, y 221 hectreas a riego eventual . A principios del siglo XX podemos seguir el resul- tado del proceso de venta de los bienes desamortizados y la porcin de ellos que se destin al cultivo o los que revertieron al patrimonio municipal o nacional. Hoy en da se trabaja casi la mitad de tierra que hace 100 aos: segn los datos del catastro, se cultivan unas 1.533 hectreas, de las que 1.252 son produccio- 98 nes de secano y 281 de riego eventual , todas ellas en espacios abancalados, y en un territorio en que la poblacin (en octubre de 2009 el censo era de 34.694 habitantes) vive preferentemente de los sectores se- cundario y terciario, dedicndose al cultivo de la tierra slo a tiempo parcial. Se da la circunstancia de que 99 Andrs Poveda Beltrn, ahora jubilado, era el nico petrerense inscrito hasta 2007 como agricultor . Los datos de explotacin agrcola de comienzos del siglo XXI, 1.533 hectreas, son en denitiva similares a las estimaciones de nales del siglo XVI, aproximadamente 1.144 hectreas. Por lo tanto, Una cpia del segle XViii. Revista del Vinalop 1, 1998, pp. 159-170). Ao 1650: 153 vecinos (c. 688 habitantes) (AMP 49/2, cOnSeJOS MUniciPAleS 1649-1660, ff. 71-76). Ao 1709: 170 vecinos (c. 765 habitantes) (AMP, 25 de octubre de 1709. Pago de los cuarteles de invierno). Ao 1787: 2.636 habitantes (censo de Floridablanca). Ao 1818: 446 vecinos (c. 2.007 habi- tantes) (AMP, caja 37, exp. 8. Padrn del 25 de abril de 1818). Ao 1840: 2.245 habitantes (BOPA, 6 de mayo de 1840, n 631). Ao 1841: 2.537 habitantes (BOPA, 9 de junio de 1841, n 749). Ao 1847: 2.615 (AMP, caja 5, exp. 40. Padrn de vecinos de 1847). Ao 1875: 3.180 habitantes (AMP 27/1, padrn de vecinos de 1875). Ao 1878: 3.143 habitantes (AMP, l-47-48). Ao 1879: 3.003 habitantes (AMP/l-47, carpeta 1 Gobierno, subcarpeta 3, estadstica de poblacin. entre 1878 y 1881: La causa de la emigracin de estos habitantes las posesiones del Africa francesa desde 1878 a 1881 es de la vorz sequia que desgra- ciadamente sufri esta poblacin ). Ao 1881: 2.992 habitantes (AMP, l-47-48. en el cuestionario para el establecimiento del crdito Agrcola de 1881 se indica que la agricultura empleaba normalmente a 300 jornaleros, de los que la tercera parte emigraban a Argelia cada ao durante seis meses y otra tercera parte se marchaba a la siega de las Castillas por tres meses, no quedando ningn jornalero sin trabajo al ao ni al da. AMP l-47 (subcarpeta 6 varia), ao 1881). Ao 1883: 3.170 habitantes [(AMP, L-47 subcarpeta 6 varia. AMP 51/1, 4 de abril de 1898. La diferencia entre los censos de 1887 y 1897 se justica en: 13 familias se van a Novelda, Monvar, Elda, Salinas y Villena con 65 individuos; 18 familias a diferentes pueblos de Espaa, con 90 individuos; al extranjero 33 con 198 individuos, y 100 individuos servan en el ejrcito (calculan entre 5 y 6 individuos por familia)]. Ao 1935: 6.291 habitantes (AMP, 27/3 Padrn de vecinos, quinquenio 1935-1940). Ao 1955: 7.693 habitantes (AMP 1309, Padrn de vecinos 1956-1960, 31 de diciembre de 1955). Ao 1965: 14.030 habitantes (AMP 1311. resumen Padrn 31 diciembre de 1965). Ao 1975: 20.424 habitantes (Ayuntamiento 1-i-1975). Ao 1985: 22.085 habitantes (Ayunta- miento 1-i-1985). Ao 1997: 26.926 habitantes (Ayuntamiento). Ao 2007: 34.155 habitantes (Ayuntamiento 6-Xi-2007). 96 t.V. PreZ MedinA, M.c. ricO nAVArrO, la carta pobla... op.cit. 97 r. BelAndO cArBOnell, Realengo y seoro en el Alto y Medio Vinalop. Alicante: Caja de Ahorros Provincial; Secre- tariado de Publicaciones de la Universidad de Alicante, 1990, pp. 207, 263. 98 Base de datos facilitada al Ayuntamiento de Petrer por la Ocina del Catastro de Alicante (octubre de 2006). 99 dato facilitado por d. carlos Pay de la cooperativa Agrcola de Petrer. 41 Sabina Asins Velis despus de ms de 400 aos, los suelos que continan en explotacin son aqullos ms aptos para el cul- tivo, que ya trabajaron los moriscos, a excepcin del espacio previamente ocupado por la zona de huerta, hoy sellada por la presin urbanstica. Se introducen aqu estudios interesantes a realizar. Por un lado, habra que analizar si esta capacidad ha encontrado el denominado punto de equilibrio en la gestin del 100 agroecosistema . Por otro, convendra acometer un anlisis de los denominados balances y ujos de 101 energa en los sistemas agrarios , sobre todo en lo referido a los condicionantes del crecimiento agrario en el territorio de Petrer en el siglo XX. Grca 1. resumen de la evolucin aproximada de la poblacin desde el ao 1431 hasta 2009 Grca 2. Variacin aproximada (%) de la supercie cultivada sobre el total del territorio de Petrer entre 1611 y 2006 100 Atendiendo al modelo de equilibrio en la gestin del ecosistema introducido por Lewis (J.K. LEWIS, The ecosystem concept in range management. Am. Soc. Range Management Abstr. 12, 1959, pp. 23-25). 101 J.M. nAredO, P. cAMPOS, los balances energticos de la agricultura espaola. Agricultura y Sociedad 15, 1980, pp. 163-255; R. GARRABOU, M. GONZLEZ DE MOLINA, Presentacin. Monogrco: Balances y ujos energticos en los sistemas agrarios. Historia Agraria 40, 2006, pp. 429-435. 42 PRIMERA PARTE ANLISIS HISTRICO: ORGANIZACIN Y GESTIN DEL ESPACIO AGRARIO Captulo 1. Los valles disponibles 1. Ocupacin del territorio del Neoltico a la poca Visigoda los diferentes grupos humanos que habitaron el actual territorio de Petrer, desde el neoltico hasta la poca Visigoda, siguieron pautas distintas de establecimiento, primando en principio en la elec- cin de sus asentamientos los puntos elevados o el llano, atendiendo a la necesidad o no de defensa o control visual. no obstante, teniendo en cuenta la informacin arqueolgica de que disponemos, parece que adems pudo haber una seleccin previa de los enclaves considerando la capacidad agraria de los suelos en funcin del tipo de aperos de que se dispona. en la zona de estudio no se han catalogado unidades de elevada o muy elevada capacidad actual de uso agrario (clases A y B); las reas clasicadas como C, D y E tienen una capacidad de uso moderada, baja o muy baja, limitadas por la escasez de espesor efectivo, pendiente, pedregosidad supercial, aoramientos rocosos o caractersticas fsicas o qumicas desfavorables. dado que los instrumentos de trabajo agrcola fueron variando con el tiempo, se observa que los asentamientos de la edad del Bronce se ubican en altura pero o bien cerca de pequeas vaguadas con suelos de capacidad moderada de uso, o bien cerca de suelos de capacidad de uso incluso muy baja (e) desarrollados sobre materiales consolidados, que fracturados originan una pedregosidad abundante, pero que no impide la prctica agrcola ya que se trata de suelos ligeros; constatndose, por el momento, slo un establecimiento de ese perodo, el denominado castell de Petrer, en suelos ms arcillosos y por tanto ms difciles de trabajar. Por el contrario, durante el Perodo ibrico y la poca romana se ubican en la hoya de Caprala o en el valle de Elda, en zonas de menor pendiente y mayor extensin supercial, que favorecen el desarrollo de suelos ms profundos, de texturas ms nas, que facilitan la retencin de agua y nutrientes, sin parecer importarles la compacidad de la tierra, ya que los arados de hierro y los distintos aperos de labranza les permitiran labrarlos sin dicultad. Por cuanto se reere al agua para aprovisionamiento domstico, los manantiales donde pudieron abastecerse se localizan en un radio cercano a todas las reas de habitacin (Figura i-1.1). las transformaciones en el ecosistema por la presin antrpica debieron de ser poco agresivas, teniendo en cuenta el bajsimo porcentaje de poblacin en cada momento de ocupacin, an ad- mitiendo, como ha sealado Butzer, que no hay una correlacin entre la densidad de poblacin y 1 el umbral de desequilibrios antropognicos , y que no se han hecho estudios palinolgicos, antra- colgicos o sedimentolgicos en el rea que nos informen sobre las distintas fases de vegetacin/ erosin/revegetacin-espontnea. el impacto de la actividad humana, en zonas puntuales y pero- 2 dos concretos, se centrara en el aclareo del bosque, afectando a la vegetacin preexistente , en la introduccin de nuevas plantas y animales y en las diferentes prcticas de gestin del suelo y el agua, ligadas a los conceptos culturales de los distintos pueblos que habitaron el territorio. cons- tatacin de prcticas que nos viene facilitada por la arqueologa hasta el siglo XiV, fecha a partir de la cual disponemos de abundante documentacin escrita en los archivos locales, autonmicos o nacionales. 1 K.W. BUTZER, Environmental history in the Mediterranean world: cross-disciplinary investigation of cause-and-effect for degradation and soil erosion. Journal of Archaeological Science 32, 2005, pp. 1794-1795. 2 e. BAdAl, Bosques, campos y pastos: el potencial econmico de la vegetacin mediterrnea. en: e. Badal, J. Bernabeu, B. Mart (eds.), Neolithic landscapes of the Mediterranean. Saguntum, extra 5. Valencia: Universitat de Valncia, departament de Prehistria i d Arqueologia, 2002, pp. 129-146; Y. CARRIN MARCO, La vegetacin mediterrnea y atlntica de la pennsula ibrica: nuevas secuencias antracolgicas. Servicio de investigacin Prehistrica, Serie de trabajos Varios, nm. 104. Valencia: Diputacin Provincial de Valencia, 2005; R. BUX, L explotaci dels recursos vegetals: noves dades per a l estudi de la agricultura prehistrica. En: S. Riera Mora; R. Juli Brugus (Eds.), Una aproximaci transdisciplinar a 8.000 anys d histria dels usos del sl. Barcelona: Seminari d Estudis i Recerques Prehistriques; Universitat de Barcelona, 2005, pp. 9-17. Sabina Asins Velis 3 la explotacin agrcola de las tierras del entorno de la zona de estudio comenz entre nales del V-IV milenio a.c. en las reas alrededor de los asentamientos denominados chorrillo-chopo (elda-Petrer), ledua (novelda), la cova Sant Mart (Agost) o la cova dels calderons (la romana) (tabla i-1.1). en el actual territorio de Petrer, el nico asentamiento de este periodo, al aire libre, l Almortx, se localiza en la orilla izquierda de la rambla de caprala, rodeado por suelos de moderada capacidad de uso actual. Se desconoce su carcter funcional, al disponerse nicamente de material recogido en supercie. A partir del 3.500 a.c. se inicia un proceso de ampliacin del nmero de establecimientos, mediante la ocupacin de los fondos de cubetas prximos al ro Vinalop y los mrgenes de zonas endorreicas, documentndose la presencia de fosas, silos y posibles fondos de cabaas y fosos de delimitacin de los poblados, como en la torreta-el Monastil (elda), en donde se han encontrado semillas de trigo, cebada y acebuche y varios fragmentos de molinos. A mediados del segundo milenio a.c. se produce un cambio en el patrn de ubicacin de los asentamientos, ocupando tanto las zonas cercanas al Vinalop, caso de las terrazas del Pantano (elda), como la cima de pequeas elevaciones, como el Monastil y el Canaln (Elda) o Pen de la Zorra y Puntal de los Carniceros (Villena). A nales del III milenio a.C. se detecta la fundacin de signicativos poblados estables, en los cerros ubicados a lo largo del ro, como terlinques (Villena), momento a partir del cual los arquelogos se plantean transformaciones en la gestin del territorio y en la ocupacin del curso del Vinalop. Fig. I-1.1. Ubicacin de los yacimientos desde el neoltico a poca romana, en relacin con la capacidad de usos del suelo y los recursos hdricos (Fuente: c. Antoln (coord.), 1998. Elaboracin para este estudio: e. carb y P. carrillos). leyenda en el cuadro 1. 3 G. SeGUrA HerrerO, F.J. JOVer MAeStre, El poblamiento prehistrico en el valle de Elda Alicante. Petrer: centre d Estudis Locals. Col.lecci Algoleja n 1, 1997, p. 35-40; F.J. JOVER MAESTRE, La ocupacin prehistrica en el valle de elda. Historia de Elda, tomo I. Elda: Ayuntamiento de Elda, Caja de Ahorros del Mediterrneo, 2006, pp. 29-43; F.J. JOVER MAeStre, F.J. MOlinA HernndeZ, el proceso de implantacin de las primeras comunidades agropecuarias en las tie- rras meridionales valencianas. Revista del Vinalop 8, 2005, pp. 11-28; M.C. MACHADO YANES, F.J. JOVER MAESTRE, J.A. lPeZ PAdillA, Antracologa y paleoecologa en el cuadrante suroriental de la Pennsula ibrica: las aportaciones del yacimiento de la edad del Bronce de terlinques (Villena, Alicante). Trabajos de Prehistoria 66 (1), 2009, pp. 75-97. 46 Los valles disponibles Tabla I-1.1. resumen de la ocupacin del territorio en Petrer y el rea del Vinalop desde el neoltico y cultivos documentados en las excavaciones arqueolgicas (Fuente: F.J. JOVER MAESTRE, 2006; G. SEGURA HERRERO, F.J. JOVER MAESTRE, 1997; A.M. POVEDA NAVARRO, 2006) CRONOLOGA RESTOS DE CULTIVOS/ PERODO ASENTAMIENTOS YACIMIENTOS UTENSILIOS AGRCOLAS cova de la Sarsa Bocairent dientes de hoz, molinos, formas NEOLTICO I entorno cermicas cerradas, instrumental de 5800/5600 a.c. piedra pulida NEOLTICO Chorrillo-Chopo (Elda-Petrer), ledua (novelda), la Hachas de piedra pulida ANTIGUO- desde 4800/4500 cova de Sant Mart (Agost), cova dels calderons (la ro- MEDIO a.c. mana), L Almortx (Petrer) Ocupacin de fondos de cubetas prximos al Vinalop y los Semillas de trigo, cebada y ace- NEOLTICO II del 3500 2500 mrgenes de zonas endorreicas, como la torreta-el Monas- buche. Fragmentos de molinos y a.c. til (elda) y otros 26 enclaves molederas, silos Zonas cercanas al Vinalop, como las terrazas del Pantano cultivo de cereales CALCOLTICO del 2500-2100 (elda), y cimas de pequeas elevaciones, como el Monastil a.c. y el canaln (elda), Pen de la Zorra y Puntal de los car- niceros (Villena) Poblados sobre cerros ubicados a lo largo del Vinalop, Hachas y azuelas, cebada. dientes como terlinques (Villena), enterramiento de la Cueva del de hoz, molinos de mano. Habas y Hacha, Cat-Forad, Alt del Perri, Mirabuenos, Lloma ajos en cabezo redondo y cabezo del Castell, Puntal del Ginebre (Petrer), Pen del trini- de la escoba (Villena), esparto tario y Pont de la Jaud (elda), Sambo (novelda-Monvar) Montagut i (novelda), Penn de la Zafra (Monvar), Pen de la Moneda (Villena), la Horna (Aspe). Hacia 1500 a.c.: del 2100-1100 abandono de asentamientos y concentracin de la pobla- EDAD DEL a.c. cin en poblados mayores: tabai (Aspe), cabezo redondo BRONCE (Villena), y otros ms pequeos: Pea de Sax, la llometa (Monvar), Monastil (elda) Abandono de los asentamientos del Bronce tardo excepto Presencia de nforas fenicias Hacia 1100-700 tabai (Aspe). Articulacin del poblamiento hacia zonas li- a.c. torales, la Alcudia (elche), o el piedemonte de la sierra de crevillente (la Fonteta del Sarso, el Bosch, Penya negra). es probable que a partir del siglo Vii a.c. se volviera a ocu- par el Monastil y sierra de cmara (elda) Monastil y Boln (elda), Algualeja-campet (Monforte, cereales, vid, olivo. Almacn de novelda), Puntal y Molinete (Salinas), Batoy-la torre grano en el Monastil, morteros Finales del siglo (Sax), castillo del ro (Aspe), charco (Monvar), Zaricejo POCA Vi-principios del y tejera (Villena), Chorrillo, Hoya de Caprala, Mirador IBERICA siglo V a.c. hasta de la Sierra del Caballo, Les Canyaetes de la Noguera siglo iii a.c. (Petrer) Finales del iii Sierra de San cristbal (Villena) a.c. torre (Sax), villa de Salinas, Monastil, toscar, derramador, Olivo, vid, cereales, contrapesos de Siglos ii a.c.-iii canyada roja, cases de Joan Blanc, Fond, Ma, Prado, almazara, balsa de opus signinum, d.c. Paredn, Malao, Queixal, casa color, Arco Sempere, hoces de hierro, azadas, morteros, Algualejas, Puente i y ii, Boln, Pen de la ta Gervasia pie de prensa, lino, esparto (elda), castillo (Monforte), castillo del ro (Aspe), charco (Monvar), Algualeja-campet (Monforte, novelda). Me- POCA diados del siglo I d.C.-siglo III d.C.: Caprala, El Chorri- ROMANA llo, Villa Petraria hasta siglo IV d.C. (Petrer) Siglo iV d.c. Monastil, casa color, Algualejas, Pen de la ta Gerva- sia, cmara (elda) Siglo iV d.c.- primera mitad Els Castellarets, Gurrama (Petrer) siglo V d.c. POCA Siglos V-Vii d.c. casa color, Arco Sempere, Monastil (elda) VISIGODA los habitantes de los cinco asentamientos conocidos en Petrer, fechados en la edad del Bronce (cat-Fo- rad, Alt del Perri, castell de Petrer, Mirabuenos y Puntal del Ginebre), complementaron el incipiente 47 Sabina Asins Velis desarrollo de la agricultura extensiva de secano y la cra de una pequea cabaa de ovicpridos, con la recoleccin de especies vegetales y el aprovechamiento de los recursos cinegticos que les proporciona- ban las reas boscosas, en un paisaje en que las surgencias de agua dulce les aseguraban la estabilidad. La intencionalidad de permanencia de estos pobladores en el territorio se pone de maniesto al analizar las caractersticas de sus ncleos de habitacin. Para su ubicacin eligieron emplazamientos en los que disponan de buenas condiciones de habitabilidad y de defensa, cercanos a los campos de cultivo y a las zonas de pasto. A ello se sum la construccin de las dependencias de los poblados mediante muros de mampostera, que escalonaron por las laderas de las montaas mediante la tcnica del aterrazamiento, 4 como en cat-Forad, Mirabuenos o Puntal del Ginebre . 2 el asentamiento de cat-Forad, con una extensin de 2.000 m , sera el de mayor tamao. Ubicado en altura, los suelos que lo rodean se han clasicado como Regosoles calcricos de muy baja capacidad de uso agrcola, no impidiendo sin embargo su aprovechamiento para la actividad ganadera. los restos de cebada carbonizada, los dientes de hoz y los fragmentos de instrumentos de molinos naviformes y rectangulares, encontrados en el yacimiento, indican la incipiente actividad agrcola en el territorio, que pudo realizarse en las zonas llanas ms cercanas conocidas actualmente como la Administracin, con suelos con capacidad agraria c. los habitantes del Alt del Perri explotaran las tierras del valle de Pua en el radio de un kilmetro del yacimiento, al tratarse de las mejores tierras de su entorno, pero an as de baja capacidad de uso agrario, buscando los suelos de mayor espesor, como regosoles calcricos o calcisoles hplicos. Al igual que haran los pobladores del asentamiento conocido como castell de Petrer, en las tierras del valle 4 Abundando en este sentido, durante la edad del Bronce se difundi ampliamente el uso de la piedra en la construccin, sien- do referentes importantes la complejidad de la cultura de el Argar y las Motillas, as como la cultura del Bronce Valenciano (M. del r. GArcA, J. MOrAleS, La pennsula Ibrica en el II milenio a.C.: poblados y forticaciones. ediciones de la Universidad de castilla la Mancha. cuenca, 2004). controlar la tcnica constructiva de mampostera de piedra en seco fue un pre-requisito imprescindible para aterrazar las laderas de las montaas mediterrneas en ese mismo perodo. A nivel social, la construccin de terrazas implicara la presencia de lderes capaces de movilizar la fuerza de trabajo para construirlas (J. Ber- nABeU, J.ll. PAScUAl, L expansi de l agricultura. La vall de l Alcoi fa 5.000 anys, Valencia, 1998, p. 29) y una nueva or- ganizacin para gestionar las necesidades ms complejas de mano de obra y un espacio agrcola ms diverso (c.M. BArtOn, et al., long-term socioecology and contingent landscapes. Journal of Archaeological Method and Theory 11, 2004, p. 286). La tcnica del aterrazamiento con nes agrcolas, en toda su extensin, es todava un tema de investigacin incipiente, debido sobre todo al escaso nmero de yacimientos aterrazados excavados hasta el momento. de entre estos, est bien documentado su uso en asentamientos de inicios del ii milenio a.c., en el norte de italia, como en Bric tana (A. del lUccHeSe, et al., il sito archeologico dell eta del Bronzo del Bric tana. en: Bric Tana e Valle dei Tre Re un parco tra natura e storia. Millesimo, Savona, 1995) y Monte tondo (l. BArField, Northern Italy before Rome. londres, 1971) lmnes, en el Peloponeso o el islote de Pseira en la creta Minica (A.t. GrOVe, the historical context: before 1850. en: c.J. Brandt, J.B. thornes (eds.), Mediterranean desertication and land use. London, 1996, pp.13-28; A.T. GROVE, O. RACKHAM, The Nature of Mediter- ranean Europe. An Ecological History. Yale University Press. New Haven and London, 2003, p. 112) y en Chipre (J.M. WAG- StAFF, Agricultural terrasses: the Vasilikos Valley, cyprus. en: M. Bell, J. Boardman (eds.), Past and Present Soil Erosion. Archaeological and Geographical Perspectives. Oxbow Monograph 22. Oxford, 1992, p. 155-162). Por lo que se reere al territorio valenciano, durante la edad del Bronce, al igual que en algunos poblados argricos del sureste peninsular, se domina a la perfeccin la tcnica del acondicionamiento de laderas mediante costosas obras de aterrazamiento, bien para ampliar el rea de habitacin de los poblados, bien para otros usos que no estn claramente determinados por el momento. entre los pri- meros ejemplos, y a falta en muchos de ellos de excavaciones sistemticas, destacan los yacimientos de Muntanya Assolada, Mola d Agres, les raboses, Pic dels corbs, Mas del corral, torrell d Onda, Orpesa la Vella, torrell del Boverot, Puntal de cambra, castillarejo de los Moros, castillarejo de cheste, cerro turche, Montrotn de Ytova, castellet de Montserrat, lloma reona, terlinques, cabezo redondo, tabai, la Horna, cat-Forad, Mirabuenos y Puntal del Ginebre, estos tres ltimos en Petrer (B. MARTI OLIVER, MJ. DE PEDRO MICH, Sobre el nal de la cultura del Bronce Valenciano: Problemas y pro- gresos. Sagvntvm (PLAV) 30, 1997, p. 59-91; MJ. DE PEDRO MICH, La Lloma de Betx (Paterna, Valencia) un poblado de la Edad del Bronce. Valencia, 1998, pp. 183-184; F.J. JOVER MAESTRE, G. SEGURA HERRERO, El poblamiento antiguo en Petrer: De la Prehistoria a la Romanidad tarda. Petrer, Alacant, 1995, pp. 37, 39 y 43). entre los segundos merece especial mencin el casero de la lloma de Betx (MJ. de PedrO MicH, La Lloma de Betx (Paterna, Valncia) un poblado de la Edad del Bronce. Valencia, 1998, pp. 176-179); S. ASINS VELIS, J. SNCHEZ DAZ, Los aterrazamientos en la Comunidad Valenciana& op. cit.; S. ASINS VELIS, Linking historical Mediterranean terraces with water catchment, harvesting and dis- tribution structures. en: J.P. Morel, J.J. tresserras Juan y J.c. Matamala (eds.). The Archaeology of crop elds and gardens. Bari, Italia: Edipuglia, 2006, pp. 21-40; I. GRAU MIRA, V. PREZ RODRGUEZ, Aproximacin arqueolgica al estudio de los paisajes aterrazados en el rea central valenciana. Lvcentvm XXVii, 2008, pp. 23-50. 48 Los valles disponibles del Vinalop, sobre Fluvisoles calcricos/Calcisoles hplicos, con condiciones edcas de moderada a baja capacidad de uso y con visualizacin directa sobre todo el valle. el asentamiento de Mirabuenos se ubica al norte del valle de Pua, donde existe un predominio de margas miocnicas; los suelos se han clasicado como Regosoles calcricos y Calcisoles hplicos, con moderada capacidad de uso agrario. en estos yacimientos se han encontrado igualmente dientes de hoz y molinos de mano, para la transfor- macin del cereal u otros productos primarios. 2 Sin embargo, el poblado del Puntal del Ginebre, de tan solo 200 m , se situ a unos 820 m de altitud, en un espoln rocoso de fuertes escarpes ocupando exclusivamente la cumbre, lo que le conere un ca- rcter de control del territorio desde donde se visualizan los asentamientos de sus mismas caractersticas que se escalonan en el valle del ro Vinalop: Montagut i (novelda), Pen de la Zafra (Monvar) y Pe- n de la Moneda (Villena). esta funcin de control se ve corroborada por la bajsima capacidad de uso agrcola de los suelos cercanos, clasicados como Leptosoles lticos o Leptosoles etricos. Solamente a un kilmetro de distancia en direccin oeste existen pequeas vaguadas que pudieron ser susceptibles de cultivo. con la informacin que nos proporcionan los restos arqueolgicos datados en la edad del Bronce po- demos considerar que en la eleccin de los asentamientos prim la defensa o el control del territorio en enclaves en altura, ubicados junto a pequeos valles aptos para el cultivo considerando el instrumental de que disponan. esos suelos tienen una capacidad de uso c y d, no detectndose su implantacin en extensas zonas del trmino actual de Petrer que si bien por su altura podran facilitar un excelente control visual, su capacidad agrcola se encuentra limitada sobre todo por la pendiente, como ocurre, por ejem- plo, en todo el sureste del municipio. nicamente un yacimiento de este perodo, el denominado castell de Petrer, se localiza en la pequea colina que domina el valle de elda, en la zona frtil ms extensa de todo el entorno (an as clasicada como C), tierras del valle que debieron roturar para sembrar cereales. Por otra parte, no obstante la cercana a los cursos de agua, no se ha detectado la utilizacin de tcnicas de regado, ni hay indicios en toda la zona del cultivo de olivo o vid. en cuanto al consumo de agua, los poblados se abasteceran mediante vasijas, recipientes hechos con piel, etc., pues por el momento la 5 nica cisterna identicada es la de La Horna (Aspe) . Hacia el 1.500 a.c. (Bronce tardo) se produjo el abandono de todos los poblados del actual territorio de Petrer, coincidiendo con la dinmica observada en la cubeta de Villena, novelda y posiblemente elda, con la excepcin del poblado de tabai (Aspe). la poblacin se concentr en un nmero ms reducido de asentamientos, pasando de ocupar ms de cien ncleos de habitacin a tan slo doce, algunos de ellos probablemente de nueva creacin, lo que gener una reorganizacin del modelo de explotacin territo- rial con los enclaves habitados separados por distancias entre once-quince kilmetros, destacando por su mayor tamao cabezo redondo (Villena). la explicacin a este cambio parece centrarse en el inters 6 por el control riguroso de los pasos y corredores . 5 M.S. HernndeZ PreZ, Agua, ro, camino y territorio. A propsito del Vinalop. en: Agua y Territorio. Actas del I Congreso de Estudios del Vinalop. Petrer y Villena, 1997, p. 24. 6 informacin arqueolgica de: F.J. JOVer MAeStre, G. SeGUrA HerrerO, la ocupacin humana del valle de elda durante la edad del Bronce. Alebus 4/5, 1994/1995, pp. 7-47; F.J. JOVER MAESTRE, G. SEGURA HERRERO, El pobla- miento antiguo en Petrer: De la Prehistoria a la Romanidad tarda. Petrer, Alacant, 1995, pp. 27-51; F.J. JOVER MAESTRE, J.A. lPeZ PAdillA, el Vinalop. Gestin del territorio y de los espacios hdricos durante el ii milenio Ane. en: Agua y Territorio... op. cit., pp. 163-187; B. MART OLIVER, M J. DE PEDRO MICH, Sobre el nal de la Cultura del Bronce Valenciano op. cit.; F.J. JOVER MAESTRE, J.A. LPEZ PADILLA, Campesinado e historia. Consideraciones sobre las co- munidades agropecuarias de la edad del Bronce en el corredor del Vinalop. Archivo de Prehistoria Levantina XXIII, 1999, pp. 233-255; F.J. JOVER MAESTRE, J.A. LPEZ PADILLA, 2.100-1200 B.C. Aportaciones al proceso histrico en la cuenca del ro Vinalop. en: l. Hernndez Alcaraz, M.S. Hernndez Prez (eds.), La Edad del Bronce en tierras valencianas y zonas limtrofes. Villena, 2004, pp. 285-302. Otros estudios sobre la prehistoria petrerense en: M.c. BrOtOnS GArcA, r. SeVA rOMn, notas sobre los suelos de utilidad agrcola en el Alto y Medio Vinalop durante la edad del Bronce. Alebus 2/3, 1992/1993, pp. 7-24; J.R. GARCA GANDA, S. FAIRN JIMNEZ, La evolucin del paisaje social entre el III y II milenio a.c. en las comarcas del Alto y Medio Vinalop. en: La Edad del Bronce en tierras valencianas... op. cit., pp. 302-310; F.J. JOVer MAeStre, J.A. lPeZ PAdillA, Barranco Tuerto y el proceso histrico durante el II milenio BC en el Corredor del Vinalop. Villena: Vestigivm 1, Monografas del Museo Arqueolgico de Villena, 2005; F.J. JOVER MAESTRE, La ocu- pacin prehistrica& op. cit., pp. 29-43. 49 Sabina Asins Velis tras un largo perodo de unos mil aos en que no se detecta poblamiento en la zona, ni por tanto antropizacin del medio natural dada la lejana de los principales ncleos de poblacin, el territorio actual de Petrer volvera a habitarse a nales del siglo VI-principios del siglo V a.C., ya en el Perodo 7 ibrico , en que se han identicado los yacimientos del Chorrillo, Hoya de Caprala, Mirador de la Sierra 8 del caballo y posiblemente les canyaetes de la noguera . los pobladores del chorrillo seleccionaron para asentarse las mrgenes del ro Vinalop, a escasos metros de su cauce, lo que les proporcionaba disponer de las mejores tierras del rea para el cultivo, con suelos del tipo Fluvisoles calcricos. el po- blado del chorrillo coincidira en sus ltimas etapas de habitacin con el pequeo casero conocido en la Hoya de Caprala, de nales del siglo V a.C. hasta nales del siglo IV a.C. Ubicado sobre un pequeo montculo, sus materiales se dispersan en un radio de 0,1 hectreas, bordeando las tierras de cultivo jun- to a la rambla de caprala. Su situacin en el fondo de un pequeo valle interior de montaa, junto a la alta representacin de nforas y lebes, recipientes de transporte y almacenamiento respectivamente, nos indica que pudo tratarse de una unidad de explotacin orientada a la produccin de cereales, vid y olivo, en suelos de moderada capacidad de uso, clasicados como Calcisoles hplicos/Calcisoles ptricos o regosoles calcricos. el poblado del Mirador de la Sierra del caballo se extiende alrededor de 0,3 hectreas, en altura, con fuertes pendientes y en un dominio de tierras de muy baja capacidad agraria, rodeado de leptosoles etricos o leptosoles lticos sobre los materiales consolidados y regosoles calcricos a partir de las reas margosas. cronolgicamente abarca los siglos iV-iii a.c., momento en el que se constata un am- plio poblamiento en todo el Vinalop. Su funcin pudo estar vinculada al control visual del territorio, 9 posiblemente en relacin con el Monastil (elda) . Por lo que se reere pues a la intencionalidad en la ubicacin de los poblados, nos atrevemos a sugerir que, a diferencia de la edad del Bronce, en poca ibrica s predomina su localizacin en zonas en que se poda dedicar mayor extensin para el cultivo, en suelos de mayor capacidad de uso agrcola, an as c como hemos visto, favorecido por el uso de arados de hierro que permitan trabajar 10 suelos ms arcillosos , como se desprende de la eleccin del amplio valle de elda, donde se asientan los habitantes del chorrillo y les canyaetes de la noguera, y del valle de caprala, donde se ubica el conocido como Hoya de caprala. Solamente el Mirador de la Sierra del caballo se aparta de este patrn, aunque sus habitantes bien pudieron explotar las tierras de la partida conocida actualmente 7 en el territorio valenciano, durante el perodo ibrico, est bien documentada la tcnica del aterrazamiento para ampliar el espacio de habitacin, como por ejemplo en el Monastil (elda), el tossal de Sant Miquel (llria), la Serreta (Alcoy) y tossal de la cala (Benidorm). entre los siglos Viii y Vii a.c. se introdujeron en nuestras tierras el cultivo de la via y el olivo (e. GrAU AlMerO, el Paisatge. en: H. Bonet, r. Albiach, M. Gozalbes (eds.), Romans i visigots a les terres valencianes. Va- lncia: Museu de Prehistria i de les Cultures de Valencia, 2003, p. 65); Gisbert considera que en el Alt del Benimaquia (Dnia, Alacant) estos productos pudieron cultivarse en terrazas, dada la orografa del terreno (J.A. GiSBert SAntOnJA, Muros y bancales de la Marina Alta en el Castell de Dnia. dnia, Alicante, 2001). Bazzana y Guichard indican que en poca ibrica se acondicionaran las pendientes con la construccin de muretes de piedra con la nalidad de retener el agua durante ms tiempo (A. BAZZAnA, P. GUicHArd, irrigation et socit dans l espagne orientale au Moyen Age. en: L Homme et l eau en Mditerane et au Proche Orient. lyon, 1981, pp. 115-140). Otros rboles frutales introducidos desde el siglo V a.c. fueron: higueras, almendras, granados, y posiblemente manzanos (e. GrAU AlMerO, el paisatge... op. cit, p. 65). 8 los datos de poca ibrica, a excepcin de los suelos, tomados de: F.J. JOVer MAeStre, G. SeGUrA HerrerO, El poblamiento antiguo en Petrer& op.cit, pp. 51-76; A.M. POVEDA NAVARRO, Iberos en el valle de Elda. Historia de Elda, tomo i. elda: Ayuntamiento de elda, caja de Ahorros del Mediterrneo, 2006, pp. 45-62. G. SeGUrA HerrerO, J.A. MAr- t ceBrin, les canyaetes de la noguera: un nuevo yacimiento arqueolgico. Festa 2007. Petrer (Alicante): Ajuntament de Petrer, 2007, pp. 120-123. 9 A. eSPinOSA rUiZ, el yacimiento ibrico de el Mirador de la Sierra del caballo Petrer, Alicante: las cermicas. Alebus 1, 1991, pp. 33-53. 10 el instrumental agrcola alcanz en poca ibrica un alto grado de especializacin. en las excavaciones arqueolgicas apa- recen el legn, la alcotana, el escardillo, las rejas de arado, las arrejadas, las gradas, el azadn, la azuela, las hoces de hierro, y las podaderas (e. PlA BAlleSter, el instrumental metlico de los obreros ibricos. en: Crnica del X Congreso Nacional de Arqueologa. Mahn, 1967, pp. 306-337; E. PLA BALLESTER, Instrumentos de trabajo ibricos en la regin valenciana. en: Estudios de Economa Antigua de la Pennsula Ibrica. Barcelona, 1968, pp. 143-190; E. PLA BALLESTER, Aportacio- nes al conocimiento de la agricultura antigua en la regin de Valencia. Rivista di Studi Liguri XXXIV (1968)-n1-3, 1973, pp. 318-354). 50 Los valles disponibles como Aiguarrius, clasicada tambin con capacidad moderada de uso agrcola. Tanto de los poblados de la edad del Bronce como de los de poca ibrica desconocemos el emplazamiento de las diversas actividades relacionadas con la produccin agrcola, debido a la ausencia de excavaciones en extensin hasta el momento. Alrededor de dos tercios de los asentamientos beros se abandonaron en una fecha no precisada del siglo iii a.c., proceso que seguira un patrn similar al que se dio en distintas reas levantinas. no obs- tante, el poblado de la Sierra de San Cristbal (Villena) comenz su actividad a nales del siglo III a.C. hasta el siglo i d.c. y la poblacin se concentr adems en campet-Algualeja y en el charco (Monvar), 11 en el castillo de Monforte, en el castillo del ro (Aspe) y en el Monastil (elda) . el abandono del ac- tual territorio de Petrer perdurara unos trescientos aos, hasta mediados del siglo i d.c., ya en poca romana, en que encontramos tres ncleos de habitacin en pleno funcionamiento: caprala, chorrillo, y Villa Petraria, siendo de cronologa algo ms tardos els castellarets (siglo iV d.c.) y Gurrama (segunda 12 mitad del siglo iV d.c.) . 13 la villa de caprala se dedicara durante los siglos i-ii d.c. a la explotacin agraria de los suelos ubicados al sur y suroeste del asentamiento, como se conrma por los hallazgos de balsas de opus signi- num, prensas para la obtencin de aceite, y nforas para el transporte del vino y salsas. igual dedicacin tendran los habitantes del chorrillo, dada su situacin privilegiada en las mejores tierras del valle, junto al ro Vinalop. Por cuanto se reere a Villa Petraria, se encontraba bajo el actual centro urbano de 11 F.J. JOVer MAeStre, G. SeGUrA HerrerO, El poblamiento antiguo en Petrer& op.cit, pp. 119. 12 Por cuanto se reere al aterrazamiento con nes agrcolas, en la Pennsula Ibrica no se puede armar su uso con seguridad hasta poca romana, y an de este perodo contamos nicamente con los datos aportados por las recientes y exhaustivas ex- cavaciones realizadas en el cavaco, Salamanca (F.J. SncHeZ-PAlenciA, M. rUiZ del rBOl, estructuras agrarias y explotacin minera en lusitania nororiental: la Zona Arqueolgica de las cavenes (el cabaco, Salamanca). en: J.G. Gorges, t. nogales Basarrate (coords.), Sociedad y cultura en Lusitania romana. IV Mesa Redonda Internacional. Mrida, cceres, 2000, pp. 343-360; M. RUIZ DEL RBOL, et al. A geoarchaeological approach to the study of roman terraces: landscape trans- formations in a mining area in the north-western Iberian Peninsula. En: E. Fouache (Ed.), The Mediterranean World Environment and History. Elsevier, 2003; M. RUIZ DEL RBOL MORO, La arqueologa de los espacios cultivados: terrazas y explotacin agraria Romana en un rea de montaa: La Sierra de Francia (Salamanca). Serie: Anejos de Archivo espaol de Arqueologa, 36. Madrid: Instituto de Historia, 2005; M. RUIZ DEL RBOL MORO, Los paisajes agrarios del NE de Lusitania: terrazas y explotacin agraria romanas en la Sierra de Francia. en: Arqueologa espacial: espacios Agrarios. Arqueologa Espacial 26. teruel: Seminario de Arqueologa y etnologa turolense, 2006, pp. 115-142). en el territorio valenciano se documenta perfec- tamente esta tcnica en los espacios urbanos, al igual que ocurra durante la poca ibrica. Un buen ejemplo lo constituye la ciudad de Sagunto, donde se aterraza parte de la ladera para construir el foro y el teatro. Sin embargo, hay escasas evidencias de su utilizacin con nes agrcolas. Las nicas referencias a espacios agrcolas aterrazados reseados hasta el momento son, en Alicante, las de elda (G. MOlinA, M.A. eSQUeMBre, Plan de actuacin 26 del P.G.O.U. Finca Molino de Flix, cd Actuaciones arqueolgicas en la provincia de Alicante 2001, Alicante; J.C. MRQUEZ VILLORA, El Valle de Elda en la poca romana: el mundo rural. Historia de Elda,& op. cit., p. 83; I. AGULL MARCOS, J. PEIDRO BLANES, Los musul- manes en las tierras de elda. ii. islamizacin del territorio. Historia de Elda,& op. cit., p. 137) y Villajoyosa (Antonio espinosa ruiz, Museo Arqueolgico de Villajoyosa, Alicante, comunicacin personal). en Galicia la aplicacin de mtodos basados en la radiometra de sedimentos ha permitido fechar en los siglos V al Xiii una ampla serie de espacios aterrazados (F. criA- dO BOAdO, P. BAlleSterOS AriAS, la arqueologa rural: contribucin al estudio de la gnesis y evolucin del paisaje tradicional. en: I Congreso de Ingeniera Civil, Territorio y Medio Ambiente, 2001, pp. 471-477; P. BALLESTEROS ARIAS, A paisaxe agraria de elvia: os elementos e as formas. CAPA Cadernos de Arqueoloxa e Patrimonio 15, 2002, pp. 24-32; P. BALLESTEROS ARIAS, La Arqueologa en la gasicacin de Galicia 17: el paisaje agrario. CAPA Cadernos de Arqueoloxa e Patrimonio 18, 2003, pp. 33-48; J.L. JIMNEZ SALVADOR, La cultura del agua en Hispania romana. En: L. Abad (Ed.), De Iberia in Hispaniam. La adaptacin de las sociedades ibricas a los modelos romanos. Alicante: Universidad de Alicante, 2003, pp. 317-347; P. BALLESTEROS ARIAS, et al., Formas y fechas de un paisaje agrario de poca medieval: A Cidade da Cultura en Santiago de compostela. en: Arqueologa espacial: espacios Agrarios. Arqueologa Espacial 26. teruel: Seminario de Arqueologa y etnologa turolense, 2006, pp. 193-225). de igual modo, la realizacin de anlisis palinolgicos, estratigr- cos, arqueomorfolgicos e histricos han permitido establecer la secuencia cronolgica y los cultivos de reas aterrazadas cercanas a Barcelona (S. rierA, J.M. PAlet, Aportaciones de la Palinologa a la historia del paisaje mediterrneo: estudio de los sistemas de terrazas en las Sierras litorales catalanas desde la perspectiva de la Arqueologa Ambiental y del Paisaje. en: S. Riera Mora; R. Juli Brugus (Eds.), Una aproximaci transdisciplinar& op. cit., pp. 68-72). durante el perodo visigodo no disponemos en tierras valencianas de ejemplos de la utilizacin de la tcnica del aterrazamiento, ni con nes urbanos ni agrcolas. 13 F.J. JOVer MAeStre, G. SeGUrA HerrerO, El poblamiento antiguo en Petrer& op.cit, pp. 76-107 y 119-124. 51 Sabina Asins Velis 14 Petrer , en las tierras cuaternarias de capacidad agrcola ms elevada ubicadas al suroeste, clasicadas como Fluvisoles calcricos/ calcisoles hplicos, y junto a la rambla de Pua. la actividad en esta villa comenz en el siglo i d.c., alcanzando su mximo desarrollo a partir del siglo iii-iV d.c. del dinamismo que se registrara durante estos primeros siglos de nuestra era en el territorio del Vi- nalop Medio se han detectado numerosas villas y trazos de las centuriaciones del parcelario agrcola, 15 como los estudiados entre Sax y Petrer y entre Petrer y elda . Parece bastante probable que estas villas comercializaran los productos derivados de su actividad bien en el Monastil (elda) bien en municipios como illici (elche) o el tossal de Manises (Alicante), e incluso los destinaran a la exportacin va mar- tima a travs del Portus illicitanus (Santa Pola), utilizando como ruta principal de transporte el ramal de 16 la va Augusta que pasaba por estas tierras . A partir de mediados del siglo iii d.c. comenz un paulatino proceso de abandono de las villas al- toimperiales en el Alto y Medio Vinalop, de tal modo que de las veinticuatro que se conocen para este perodo perdurarn en el siglo iV d.c. Villa Petraria en Petrer y Algualejas en elda. en la segunda mitad del siglo iV d.c.-primera mitad del siglo V d.c. se ocupar el pequeo ncleo de habitacin de Gurra- ma, junto a la rambla del mismo nombre. el asentamiento se desarrollara en funcin de la explotacin en rgimen de secano de los suelos situados en el entorno ms inmediato, clasicados como Regosoles calcricos. en esta misma cronologa, la funcin de punto estratgico en el control del territorio pudo implicar la instalacin de els castellarets en una zona de elevadas pendientes a unos 900 m de altura, rodeada de tierras de baja capacidad para el cultivo. de reducidas dimensiones, unas 0,15 hectreas, 17 pudo dedicarse a la vigilancia del entorno del Monastil (elda) . durante los siglos iV-Vii estarn ade- ms activas las villas de la casa color, el Arco Sempere y el Monastil en elda, prolongando todas ellas su actividad hasta la poca paleoandalus. en resumen, los datos de que disponemos sobre la ubicacin de los asentamientos desde el neo- ltico hasta el Bajo imperio romano, como hemos ido comentando, nos informan de una explotacin agrcola discontinua en el tiempo y con un dinamismo notorio en las pautas de establecimiento de los asentamientos, destacando nicamente los suelos del valle de elda por ser objeto de cultivo en diferen- tes momentos de ocupacin (en las actuales partidas de chorrillo y en las zonas cercanas al castell), espacio que volver a ocuparse en poca islmica y ya no se abandonar hasta el da de hoy. de otros emplazamientos, como caprala o cat, no tendremos noticias de su posterior dedicacin al cultivo hasta nales del siglo XVI. La reducida extensin de los asentamientos desde el Neoltico implicara que las explotaciones agrcolas fueran de pequeo tamao, incluso en poca romana, junto a terrenos aptos para el pastoreo, dedicando al cultivo los suelos de los valles cercanos a los poblados. Por otra parte, no hay ningn indicio de que los habitantes del territorio de Petrer utilizaran el agua del ro Vinalop o de sus ramblas tributarias para desarrollar sistemas de captacin que permitieran poner en regado las reas circundantes. Como seal M. Hernndez las aguas uyentes de este ro 18 pudieron utilizarse de modo ocasional, pero no hay constancia de su control en la antigedad . de hecho, cuando se tienen noticias escritas de la prctica del regado en los municipios de elda y Petrer, ya en el siglo XIV, se especica claramente que el agua para regar este valle procede bien de las fuentes de 14 c. nAVArrO POVedA, la villa romana de Petrer. Bitrir II, 1993, pp. 14-43. 15 G. POnce HerrerO, residuos de catastro romano en Sax. Investigaciones Geogrcas 1, 1983, pp. 199 y ss; J.M. PAY POVedA, Posibles orgenes romanos del catastro petrerense. Festa 90, Petrer (Alicante): Ajuntament de Petrer, 1990; J.C. MrQUeZ VillOrA, el Valle de elda en la poca romana& op. cit., pp. 75-97. 16 A.M. POVedA nAVArrO, transformacin y romanizacin del hbitat ibrico contestano de las cuencas alta y media del Vinalop provincia de Alicante. Del nal de la Repblica al Alto Imperio. Alebus 1, 1991, pp. 68-69. 17 r. AZUAr rUiZ, Panorama de la arqueologa medieval de los valles alto y medio del Vinalop Alicante. Lucentum II, 1983, p. 350; A.M. POVEDA NAVARRO, La estructura territorial en el valle medio del Vinalop durante los ss. V-VII. Alebus 2/2, 1992/1993; A.M. POVEDA NAVARRO, La creacin de la sede de Elo en la frontera visigodo-bizantina. Alebus 6, 1996, pp. 113-136; P. REYNOLDS, Cermicas de carcter local, regional y de importacin en el valle del Vinalop Alicante. Contribu- cin al estudio del comercio en la tardo-antigedad en la zona sureste de espaa durante los siglos V al Vii. Alebus 6, 1996, pp. 218-252; S. GUTIRREZ LLORET, La formacin de al-Andalus en las tierras meridionales valencianas. En: F.J. Jover Maes- tre, c. navarro Poveda (coords.), De la medina a la vila. II Jornadas de Arqueologa Medieval. Petrer-novelda, 2004, p. 25. 18 M.S. HernndeZ PreZ, Agua, ro, camino y... op. cit. p. 20. 52 Los valles disponibles Villena, bien de manantiales de Petrer. la importancia del ro Vinalop se hallara en su funcin como corredor y va de transmisin de informacin, que necesariamente repercutira en los patrones de asen- tamiento y en la organizacin territorial. 2. Campesinos musulmanes: heredamientos de pan, e de riegos, e de huertos, de vias& 19 20 los restos arqueolgicos de els castellarets , y los encontrados bajo el actual ncleo urbano , do- cumentan cmo el territorio del actual Petrer fue habitado nuevamente a partir de nales del siglo X- principios del Xi, en poca califal islmica, tras un hiato de unos quinientos aos en que no se reconocen indicios de poblamiento. la reocupacin de els castellarets tal vez se debi a la necesidad de asegurar la va de comunicacin del Vinalop, ya que desde all se visualiza todo su valle medio y la llanura de Ali- 21 cante. Por otro lado, las estructuras localizadas bajo el casco urbano de Petrer corresponderan al esta- blecimiento de poblacin en la ladera de la loma donde se levant el castillo, y en cuyo lugar haba en el siglo Xi una torre que facilitara el avistamiento de els castellarets. en el segundo tercio del siglo Xii se produjo un proceso de concentracin de la poblacin en asentamientos forticados, caso del castillo del 22 ro de Aspe, elda, Agost y posiblemente Monvar , en donde se instalaron comunidades musulmanas que explotaban las tierras circundantes y las zonas de pastos del entorno. Ya por contingentes almoha- des, se reforticara la antigua fortaleza de la Mola de Novelda y se levantara la Atalaya de Villena y, en la segunda mitad del siglo XII-primera mitad del siglo XIII, se edicara nalmente el castillo de Batrr 23 (Petrer) sobre una pequea colina a 512 m de altura desde la que se divisa todo el valle . Por la informacin facilitada por los hallazgos arqueolgicos, en el territorio de Petrer podemos dis- tinguir dos tipos de ncleos de habitacin, con la caracterstica comn de ocupar los valles ms extensos de la zona de estudio: el valle de elda, atravesado por el ro Vinalop, y el valle de Pua, por la rambla del mismo nombre. en el valle de elda se evidencia tanto la agrupacin de poblacin en la ladera de la loma del castillo como la construccin de dos alqueras en sus alrededores, las conocidas como calle 24 25 nueva 9-11 y les canyaetes de la noguera, pendientes de estudio , si bien es posible que el nmero de alqueras fuera superior, como podran indicar los topnimos de dos partidas de la huerta llamadas la 26 daya y alqiubla . Este modelo de poblamiento respondera al esquema forticaciones-alqueras depen- 27 dientes, que se describe para al-Andalus en general, con la excepcin de Mallorca . Por otro lado, en el valle de Pua, distante unos seis kilmetros del ncleo anterior, se edicaron tam- bin las distintas dependencias de dos alqueras, en los parajes de Pua y Gurrama. Adems, se debera 19 r. AZUAr rUiZ, Panorama de la arqueologa medieval& op.cit, p. 378; P. REYNOLDS, Cermica tardorromana modelada a mano de carcter local, regional y de importacin en la provincia de Alicante. Lucentum IV, 1985, p. 264-265; C. NAVARRO POVedA, Petrer islmico. Petrer, 1988, pp. 13-15; R. AZUAR RUIZ, Una interpretacin del hisn musulmn en el mbito rural. Revista del Instituto de Estudios Alicantinos 37, 1991, pp. 33-41. 20 c. nAVArrO POVedA, estudio del material cermico islmico bajo medieval de Petrer. Ayudas a la investigacin. Vol. II. Alicante: instituto de estudios Juan Gil-Albert, 1984-1985, pp. 85. 21 M.c. ricO nAVArrO, Las calles de Petrer. Petrer: Ayuntamiento de Petrer, CaixaPetrer; Alicante: Universidad de Ali- cante, 2002, pp. 22-23. 22 R. AZUAR RUIZ, Campesinos forticados frente a conquistadores feudales en los valles del Vinalop. En: Jover Maestre, F.J.; Navarro Poveda C. (Coords.), De la medina a la vila... op. cit., pp. 267-270; L.F. BERNAB PONS, Los musulmanes en las tierras de elda. Historia de Elda... op. cit., pp. 119-139. 23 Si bien su torre puede ser ya de poca de la conquista cristiana, r. AZUAr rUiZ, Castellologa medieval alicantina: rea meridional. Instituto de Estudios Alicantinos. Serie I, nm. 60. Alicante, 1981, pp. 159-163; C. NAVARRO POVEDA, Petrer islmico... op. cit, pp. 22-32. R. AZUAR RUIZ, Campesinos forticados frente a... op. cit., pp. 274, 276, 278 y 281. 24 Francisco Javier Jover Maestre, Arquelogo Municipal de Petrer hasta 2007, comunicacin personal. 25 G. SeGUrA HerrerO, J.A. MArt ceBrin, les canyaetes de la noguera& op. cit. 26 ArV, PrOtOcOlOS nOtAriAleS, Gonzalo Fernndez, n reg. 862, 27 de abril y 1 de mayo de 1583. Si tomamos estos topnimos como signicado de aldea, ncleo habitado o reunin de gente. 27 M. BArcel, Vespres de feudals. la societat de sharq al-Andalus just abans de la conquesta catalana. Estudi General 5-6, 1985-1986, pp. 247-249; H. KIRCHNER, Redes de alqueras sin husn. Una reconsideracin a partir de los asentamientos campesinos andaluses de las islas orientales. en: A. Malpica (coord.), Castillos y territorio en Al-Andalus. Granada: Athos- Prgamos, 1998, pp. 450-469; T.F. GLICK, Paisajes de conquista: cambio cultural y geogrco en la Espaa medieval. Valen- cia: Publicacions de la Universitat de Valncia, 2007, pp. 41-53. 53 Sabina Asins Velis intensicar la prospeccin arqueolgica en las partidas de Catxuli y Benissa, por si hubiera habido all alguna alquera (tabla i-1.2, Figura i-1.2). en el perodo islmico, las aljamas podan ceder tierras para nuevas roturaciones sobre las cuales 28 adquiran derechos las personas que las vivicaban , cultivando sus parcelas de forma directa o me- 29 diante contratos de asociacin, libres de cualquier tipo de dependencia seorial . en Petrer, como se indica para otros territorios de Al-Andalus, la explotacin de las tierras de cultivo sera en rgimen de 30 propiedad privada, tierras mamlkka, las cules podan venderse, alquilarse, dejarse en herencia, etc. . ello vendra sustentado por un documento de 1309 en el que se expone que su poblacin musulmana, que como veremos se mantuvo en su territorio tras la conquista cristiana, descontenta con el trato que reciba por parte de la seora, Joan Garca de loaysa, envi quejas a Jaime ii incidiendo en que loaysa no cumpla con lo acordado por sus antepasados y por l mismo, solicitando permiso para vendre lurs 31 heretaments, segons que u an acostumat y pasarse a dominios de realengo . las tierras no apropiadas por los campesinos se subdividan a su vez en muertas y comunales. estas ltimas, denominadas har+m, se destinaban al aprovechamiento comn de pastos, lea, madera, frutos 32 silvestres, etc. . en Petrer, no creemos que sea casualidad, los topnimos islmicos ms alejados del castillo que se localizan, como Gurrama, catxuli, Benissa, la Maaba (actualmente la Almadrava) y 33 Sit , se ubican en las lneas que delimitan las coladas de ganado conocidas por la documentacin pos- terior (Figura i-1.3). estas zonas pudieron ser ya frecuentadas como lugares de pasto comunal en poca islmica, pues adems distan entre 3 y 6 kilmetros del ncleo del castillo y de las alqueras, distancia que el ganado podra recorrer en un da sin necesidad de pernoctar fuera del trmino, lo que estara 34 en concordancia con la escuela mliqu . estas zonas de aprovechamiento comn, en poca islmica, deban ser tambin utilizadas por los habitantes de alqueras vecinas, pues en el ao 1315 Arnau de to- rrelles (Procurador de Valencia dell Xixona) dict unas rdenes por las que los musulmanes no podan pasar a otro trmino a cazar o a recoger lea o esparto; disposiciones que no se aprobaron hasta 1375 por 35 las protestas que se originaron, incluida las de Garca Jofr de loaysa, seor de Petrer . Por otro lado, las tierras muertas (mawt) eran las ms alejadas de los ncleos poblados, no apropia- das pero pertenecientes a la comunidad musulmana. con la conquista del territorio por Alfonso X, estas tierras pasaron a Jofr de loaysa: 28 c. trillO SAn JOS, contribucin al estudio de la propiedad en poca nazar. en: c. trillo (ed.), Asentamientos rurales y territorio en el Mediterrneo Medieval. Granada, 2002a, pp. 504-507; C. TRILLO SAN JOS, La alquera y su territorio en Al-Andalus: estrategias sociales de organizacin y conservacin. en: Arqueologa espacial: espacios Agrarios. Arqueologa Espacial 26. teruel: Seminario de Arqueologa y etnologa turolense, 2006, pp. 244-251. 29 A. BAZZAnA, P. GUicHArd, irrigation et socit dans l espagne& op. cit., p. 126; M. BARCEL, Vespres de feudals l espagne& op. cit., p. 245; C. TRILLO SAN JOS, Contribucin al estudio de la propiedad... op. cit., p. 508 ; F. VIDAL CAS- TRO, La Musq t : un contrato de riego en la agricultura de al-Andalus y el Magreb. teora y prctica jurdicas. en: Agricultura y regado en al-Andalus: sntesis y problemas. Almera-Granada, 1996, pp. 429-451. 30 c. trillO SAn JOS, Agua, tierra y hombres en Al-Andalus. La dimensin agrcola del mundo nazar. Granada: AJBAr coleccin de Historia, 2004, pp. 74-77, citando a Y. linAnt de BelleFOndS, Un problme de sociologie juridique. les terres comunes en pays d islam, Studia Islamica X, 1959, pp. 111-136; C. TRILLO SAN JOS, La alquera y su territorio en Al-Andalus& op.cit., pp. 244. 31 que ls dits moros vos trameten clamar merc que com en Johan Garcia, senyor de Petrer, los pas contra algunes gracies e cartes que an dels seus anteessor e d ell, que sia vostra merce, senyor, que ls manets donar vostra carta per a ell d aquesta rah, per o que ells pusquen vendre lurs heretaments, segons que u an acostumat e venir a viure e estar a la vostra senyoria& sembla a mi que tot o que ells vos demanen s vostre servey e que les vostres rendes ne valran ms& carta de Ferrer descor- tell, baile general dell Xixona al rey Jaime ii, elche el 3 de enero de 1309 (M.t. Ferrer i MAllOl, Les aljames sarranes de la Governaci d Oriola en el segle XIV. Barcelona, 1988, p. 205, doc. 36; ACA, C, cr. Jaume II, caixa 25, nm 3147). 32 A. MAlPicA cUellO, c. trillO SAn JOS, la hidrulica rural nazar. Anlisis de una agricultura irrigada de origen andalus. en: Asentamientos rurales y territorio en el Mediterrneo medieval. Granada: Athos-Prgamos, 2002, pp. 221-261; c. trillO SAn JOS, Agua, tierra y hombres& op. cit., pp. 76-97. 33 V.M. ROSSELL i VERGER, Toponmia, Geograa i Cartograa. Valencia: Universitat de Valncia, 2004. 34 c. trillO SAn JOS, el tiempo del agua. el regado y su organizacin en la Granada islmica. Acta Historica et Archae- logica Mediaevalia 23, 2002, p. 241. 35 ACA, reg. 927, ff. 81 v.-82 r.; M.T. FERRER i MALLOL, Els sarrans de la Corona Catalano-Aragonesa en el segle XIV: segregaci i discriminaci. Barcelona, 1987, p. 107. 54 Los valles disponibles toda la villa, y todo el castillo que dizen Pedrs con todos los vasallos... con todos los derechos... de pasturas, y de montes,& , con todas sus pertenencias derechuras labradas y por labrar, nom- 36 bradas y por nombrar,... . 37 Y si en poca islmica la apropiacin por vivicacin sobre terrenos mawt era una prctica conocida , en Petrer ser usual en siglos posteriores, bien mediante establecimientos legales concedidos por la seora, bien mediante roturaciones ilegales en estas tierras, como veremos en los captulos siguientes. estos terrenos har+m y mawt fueron tambin posteriormente muy importantes para la economa de la villa, sobre los que no debi adquirir derecho de propiedad plena la seora, pues durante el proceso de abolicin de los seoros en 1837, Felipe M Osorio y de la cueva, conde de cervelln, XiV conde de elda y Xiii de Anna, nicamente pudo conservar en Petrer las propiedades rsticas sobre las que tena 38 dominio pleno, en total la insignicante cantidad de 1,8 hectreas . Tabla I-1.2. resumen de la ocupacin del territorio en poca islmica PERODO CRONOLOGA ASENTAMIENTOS CULTIVOS YACIMIENTOS Siglo Viii-comienzos del s. X el Monastil (elda), Zambo (Monvar-novelda) * Siglo X Puente ii, Agualejas, Arco Sempere, la Melva (elda) Finales del siglo X-principios del Els Castellarets, y bajo el actual ncleo urbano Xi (Petrer) Siglo Xi Arco Sempere, Agualejas, la Melva, Puente ii (elda), Torre (Petrer) Segundo tercio del siglo Xii concentracin de poblacin en asentamientos forticados (Aspe, Elda, Agost) poca Islmica Segunda mitad del siglo Xii- Puente ii, Agualejas (elda) cereales, hortalizas, vid primera mitad del siglo Xiii Castillo de Batrr (Petrer) Petrer: cereales, olivos, Finales del siglo Xii o principios Alquera de Pua hortalizas, vid del siglo Xiii Posible alquera de la Calle Nueva 9-11 Posible alquera de Les Canyaetes de la Noguera Posible alquera en Gurrama Topnimos de parajes: Catxuli, Xinquera, Sit, Benissa, Gurrama, Maaba (actualmente Almadrava) 36 Segovia, 6 de agosto de 1258, ACE, nm. 577, 939 y 940. En pg. 20 el rey Alfonso la conrm el 27 de agosto. Traslado del documento de 1424 a peticin de Alfonso Snchez de calataiubio, quien interviene en el proceso de venta de Petrer a los corella. 37 c. trillO SAn JOS, Agua, tierra y hombres& op. cit., pp. 84-88. 38 r. BelAndO cArBOnell, Realengo y seoro... op. cit., pp. 110, 112. * los asentamientos de elda y el Zambo en: i. AGUll MArcOS, J. PeidrO BlAneS, los musulmanes en las tierras de elda... op. cit., pp. 128-139. 55 Sabina Asins Velis Fig. I-1.2. Ubicacin de los yacimientos de poca islmica, en relacin con la capacidad de usos del suelo y los recursos hdricos (Fuente: c. Antoln (coord.), 1998. Elaboracin para este estudio, e. carb y P. carrillos). leyenda en el cuadro 1. Fig. I-1.3. Ubicacin de topnimos de parajes de raz islmica y de las vas pecuarias conservadas histricamente (elaboracin: P. carrillos). 56 Los valles disponibles Partidas en cultivo en el entorno del castillo y en el valle de Pua como hemos comentado, la explotacin del territorio durante poca romana haba quedado restringida a las zonas que cultivaron los habitantes de las cinco villas localizadas hasta el momento, a lo que seguira un perodo de recuperacin de la vegetacin natural de unos quinientos aos, tiempo ms que suciente para que los musulmanes encontraran un espacio virgen que organizar acorde a sus prcticas culturales, 39 como tambin se especica para otras reas . en este sentido, la principal innovacin en el cultivo de las 40 parcelas la aportara la introduccin de nuevas especies vegetales que requeran del regado , lo que a su vez repercuta en la forma de organizacin del espacio, incluso su aterrazamiento, debido a la necesidad 41 de imbricar el trazado de las parcelas y la red hidrulica . los campesinos asentados en el valle de elda, en torno al castillo, explotaron los suelos ms frtiles del territorio, en la cota de 400-500 metros, clasicados como Fluvisoles calcricos en la zona oeste has- ta el ro Vinalop. Su capacidad de uso agrario se ha denido como C, con condiciones aptas-moderadas para el cultivo de cereales, vid y productos hortcolas, que por lo dems se citan en el documento de mayorazgo que se redact en 1258, tras la conquista cristiana, recin concedido el donado de Petrer a Jofr de loaysa. en el documento se incluyen: todos los derechos& de heredamientos de pan, e de riegos, e de huertos, de vias y de prados, 42 y de pasturas, y de montes, y de fuentes y de aguas . 39 e. GUinOt rOdrGUeZ, el paisaje de la huerta de Valencia. elementos de interpretacin de su morfologa espacial de ori- gen medieval. en: Historia de la ciudad V: Tradicin y progreso , Valencia: colegio territorial de Arquitectos, 2008, p. 110. 40 M. BArcel, M.A. cArBOnerO, terrasses per al cultiu irrigat i distribuci social de l aigua a Banyalbufar (Mallorca). Document d Anlisi Geogrca 4, 1984, pp. 31-68; M. BARCEL, El diseo de espacios irrigados en al-Andalus: un enun- ciado de principios generales. en: El agua en las zonas ridas: Arqueologa e Historia. i coloquio de Historia y Medio Fsico. Almeria, 1989, vol I, pp XV-XLXI; S. SELMA, Evoluci des de l poca andalus de l espai agrari irrigat a la Vall de Veo (Serra d espad, castell). IV Congreso de Arqueologa Medieval Espaola. Volumen III. Alicante: diputacin de Alicante, 1994, pp. 567-574; M. BARCEL, De la congruencia y la homogeneidad de los espacios hidrulicos en al-Andalus. En: El agua en la agricultura de al-Andalus. Barcelona, 1995, pp. 25-38; A. MALPICA, El agua en al-Andalus: un debate historiogrco y una propuesta de anlisis. V Semana de Estudios Medievales. Njera, 1994. logroo: instituto de estudios riojanos, 1995, pp. 65-85; M. BArcel et al., el agua que no duerme: fundamentos de la arqueologa hidrulica andalus. Granada: Sierra Nevada 95; El Legado Andalus, D. L. 1996; E. 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El medi ambient a l Edat Mitjana. lleida: Pags editor, 2008. 41 Gracias a la larga tradicin de estudios sobre las prcticas de irrigacin desarrollada por los andaluses en el territorio valenciano (siglos Viii-Xiii), la construccin de terrazas est bien documentada a nivel arqueolgico. A partir de inicios del siglo Viii, el asentamiento de contingentes sirios, yemenes y berberes propici la introduccin de sistemas agrcolas y recursos hidrulicos usados en su pas de origen (t.F. GlicK, Regado y sociedad en la Valencia medieval. Valencia, 2003, pp. 427-428) y la construc- cin de unos paisajes irrigados (huertas) con una arquitectura representativa de su modelo social (e. GUinOt, la construcci d un paisatge& op. cit.). en la comarca de la Marina (Alicante), los estudios de poblamiento han detectado pequeas huertas junto a manantiales y puntos de agua, con muros levantados con piedra unida con arcilla y cal. la datacin de estas construcciones se ha establecido por similitud tipolgica entre los muros de cercado de espacios agrarios y los muros de contencin (J.A. GiSBert SAntOnJA, Marges i bancals de dnia y de la Marina Alta. Segles XVii-XX. Actas del Taller 2 Techniques de soutnement des terrasses de culture et transmission des savoir faire . Centre Mditerranen de l Environnement-Agence Paysages, 1997; J.A. GiSBert SAntOnJA, Muros y bancales... op. cit.). recientemente, la excelente publicacin de J. torr, muestra la disposicin oblicua de las terrazas irrigadas en relacin a los barrancos en Vernissa y la Font de l Ullet, en el valle de Pop, caracterstica que se repite en el valle de laguar o en la Font de l Hort y Benissalim en trbena (Alicante) (J. tOrr, terrasses irrigades& op. cit., pp. 319-323, 345; J. TORR, Arqueologia de la conquesta. Registre material, substituci de poblacions i transformaci de l espai rural valenci (segles Xiii-XiV). en: M. Barcel, et al. (eds.), El feudalisme comptat i debatut: Formaci i expansi del feudalisme catal. Valencia, 2003, pp. 178-181; J. TORR, Vall de Laguar. Asentamientos, terrazas de cultivo e irrigacin en las montaas de `arq al-Andalus: un estudio local. Recerques del Museu d Alcoi 16, 2007, pp. 151-182). 42 Ace, nm. 577, 939 y 940. Segovia, 6 de agosto de 1258. 57 Sabina Asins Velis los datos ms concretos de que disponemos acerca de los cultivos que se plantaban en el valle de elda se fechan a mediados del siglo XiV, perodo en el que se cita la produccin de avena, trigo, centeno, panizo, sorgo, cebada, habas, olivos, azafrn y alasfor (azafrn bastardo), destacando la via como produccin 43 ms importante . la canalizacin del agua para regar los huertos de este valle no debi de ser una tarea sencilla para la comunidad islmica. el rea irrigada ocupara la partida que histricamente se ha denominado la Huerta, que hasta mediados del siglo XX se aprovisionaba del agua captada en la mina de Pua, distante unos seis kilmetros del emplazamiento de sta. del agua de este manantial pudieron hacer uso tanto los campesinos que habitaban las casas construidas en la ladera, al amparo del castillo, como los moradores de la alquera de la C/ Nueva 9-11; no siendo factible su utilizacin para regar la huerta de la alquera de les canyaetes de la noguera, dado su emplazamiento. estos ltimos debieron proveerse del agua procedente de otro tipo de captacin, que no descartamos que fuera incluso un aljibe canalizado y que 44 pudiera tratarse de la denominada en el siglo XVii acequia del Aljibe , que en ese siglo proporcionaba riego eventual a las vias plantadas junto a les canyaetes de la noguera. la razn por la que an estando ubicados junto al ro Vinalop se abastecieran del agua del manantial de Pua, tan alejado de las tierras del valle de elda, debemos buscarla en el carcter irregular del caudal del ro. como se documenta desde el siglo XiV el cauce del Vinalop se utilizar para transportar el agua captada en los manantiales de las Fuentes del chopo y de las Virtudes de Villena, a ms de 20 kilmetros de Petrer. Mientras que se recurri al cauce de la rambla de Pua para transportar el agua de la mina que excavaron en el paraje de Pua, si bien, puntualmente, cuando el caudal de la rambla iba crecido, el agua se una a la extrada en la mina. Aunque no se ha podido determinar la datacin exacta de su construccin, su ubicacin junto a una alquera de nales del siglo XII y sus caractersticas tcnicas, ampliamente difun- 45 didas en la cultura islmica, hacen factible su adscripcin a los pobladores andaluses . Paralelos cercanos 46 seran la gran mina de Alcan que regaba la huerta de Aspe y la Font Antiga de crevillent . el transporte desde la mina se realiz durante siglos a tramos por medio de una acequia (que denominaban en el siglo 47 XVii acequia dels Comuns ) a tramos vertiendo el agua en el cauce de la rambla, por lo que se perda bastante agua durante el trayecto, como as se constata en la documentacin de los siglos XVii-XViii. A continuacin, el agua se almacenaba en una balsa, desde donde se canalizaba por la acequia ma- 48 yor a los distintos brazales para regar los huertos mediante el sistema de tandas o turnos, como consta 49 en la documentacin escrita desde 1315, aunque deba ser herencia andalus . la antigedad del sistema 43 M.t. Ferrer i MAllOl, Les aljames sarranes& op. cit. pp. 100-103. 44 AMP, libro Giradora, 44/3, f. 271. 45 H. GOBlOt, Les Qanats. Une technique d acquisition de l eau. Pars-La Haya-Nueva York, 1979; M. BARCEL, Qanat(s) a al-Andalus. Documents d Anlisi Geogrca 2, 1983, pp. 3-22; M. BARCEL et al., Les aiges cercades. Els qanat(s) de l illa de Mallorca. Palma de Mallorca, 1986; R. MART CASTELL, Oriente y occidente en las tradiciones hidrulicas me- dievales. en: El agua en zonas ridas... op. cit., pp. 419-440; J.M. BERNAB i MAESTRE, Obras hidrulicas tradicionales en el regado de Petrer. (Vall del Vinalop). Los paisajes del agua: libro jubilar dedicado al profesor Antonio Lpez Gmez. Valencia: Universitat de Valncia, 1989, pp. 188-189; T.V. PREZ MEDINA, La tierra y la comunidad rural de Petrer en el siglo XVII. Petrer, Alicante, 1993, pp. 85-86; T.V. PREZ MEDINA, Dinamismo y continuidad en los espacios hidrulicos de las comarcas del Vinalop 1500-1836, Agua y Territorio... op. cit., p. 51; T.V. PREZ MEDINA, La rambla de Pua: Patri- moni hidrulic i impacte hum al migjorn valenci. Braal 28-29, 2004, pp. 98-99; J. HERMOSILLA PLA (dir.), Las galeras drenantes del sureste de la Pennsula Ibrica. Uso tradicional del agua y sostenibilidad en el Mediterrneo espaol. Madrid: Ministerio de Medio Ambiente, 2006; E. SITJES, Inventario y tipologa de sistemas hidrulicos de Al-Andalus. En: Arqueo- loga espacial: espacios Agrarios. Arqueologa Espacial 26. teruel: Seminario de Arqueologa y etnologa turolense, 2006, pp. 263-291; T.V. PREZ MEDINA, La huerta desaparecida. Del regado islmico medieval a la expansin urbana actual. En: Tierra, crditos y agua... op. cit., pp. 121-135. el esquema del interior de la mina, levantado por un grupo de espelelogos, nos ha permitido comprobar la ubicacin de los dos ramales ya ciegos en el siglo XViii. 46 r. AZUAr rUiZ, economa campesina. Historia de la ciudad de Alicante. Alicante, 1990, pp. 85-86; E. GUINOT, S. SEL- MA, Las acequias de Elche y Crevillente. camins d Aigua n 4. el Patrimonio Hidrulico Valenciano. Valencia: conselleria d Agricultura, Peixca i Alimentaci, 2003, pp. 40-42, 52-53. 47 AMP, 49/2, cOnSeJOS MUniciPAleS 1649-1660, ff. 153-154, 7 de julio de 1652. 48 la primera referencia localizada de la cequia major en: ArV, PrOtOcOlOS nOtAriAleS, Gonzalo Fernndez, nm. 863, 4 de enero de 1586. 49 AcA, reg. 927, ff. 81v.-82r. en el ao 1315 Arnau de torrelles, Procurador dell Xixona, intent prohibir que negun moro 58 Los valles disponibles de acequias en el trmino se corrobora adems por un texto fechado en 1392 en el que se especica que los campesinos de Petrer cortaron a sus vecinos de elda la acequia que desde su trmino suministraba 50 agua para el riego eldense . Segn Glick, en la ley islmica los canales de riego son propiedad comunal de los individuos que contribuyeron a su establecimiento y ellos mismos regulan los asuntos relativos a 51 su suministro . los turnos de riego en el Petrer morisco se denominaban jornata , que se conocan por nombres, como por ejemplo den Vanega , de Ananera , de Abontfalil() , de Benjahadi , del cadi alguacil , Item unam oram aqua congregata in balsa dicte ville in jornata nominata de Almuedin , jornata 52 nominata de Buelhaijeig , de vayad , jornata del alguasir etc. Aparte de los cargos pblicos, los nombres propios de las jornadas, como Benjahadi y Buelhaijeig, no se corresponden con apellidos 53 mudjares/moriscos de la localidad , por lo que los incluimos aqu por si futuros estudios pudieran corroborar la antigedad del sistema de los turnos y jornadas. en el siglo XVi, el agua de las jornadas la compartan varios regantes (en los registros notariales se cita generalmente a dos regantes adems del que hace la venta de agua). la propiedad del agua se media en horas (entre un cuarto de hora y tres horas y media, en los documentos localizados) o tambin consta en Petrer ventas de una arroba. este mtodo de distribucin del agua permite suponer, en opinin de Glick, que el aporte hdrico de los manantiales 54 para el riego no era muy abundante , como as se conrma en Petrer por la documentacin posterior. con respecto al reparto del agua de las jornadas, en 1617 se indica que se seguan las costumbres moriscas, pero consideramos que esos turnos no deban coincidir del todo con los de poca islmica, ya que en el siglo XVii la balsa estaba cerrada entre las 18 y las 6 horas y en verano entre las 20 y las 4 horas, y sin embargo, con anterioridad al ao 1315, los campos de Petrer se regaban tambin de noche. en el siglo XVii, en el punto en que la balsa daba salida a las aguas haba una tabla con 46 puntos, que se conocan con el nombre de cuartos, y otros medios puntos intermedios a los anteriores o medios cuartos. esta graduacin tena por objeto la distribucin diaria y exacta entre los regantes. el agua se distribua en 14 turnos anuales, cada uno de 25 das, ms 1 turno conocido como de las Horetas, que tal vez pudie- ra ser la herencia islmica del tiempo de riego destinado a habices (para las propiedades de la mezquita, 55 costear reparaciones en la villa, etc.) . la capacidad de esta balsa y la duracin de los turnos de riego son los principales factores a considerar para evaluar la posible ampliacin y posterior fosilizacin del rea destinada a riego y riego eventual, ya que no ser hasta nales del siglo XIX-principios del XX cuando se construyan nuevas balsas en esta zona, como la de la Bienvenida, del Moro, Perico, etc. la ubicacin de la balsa de riego se suele relacionar con el emplazamiento de la conocida como Bassa Fonda, situada a una cota ms baja del que fuera ncleo de poblacin en poca islmica, y que se mantuvo en funcionamiento hasta los aos sesenta del siglo XX. no obstante, la balsa islmica pudo estar en un paraje algo ms elevado, pues en un documento del ao 1659 se acuerda abrir la acequia de no gos anar a regar de nit, exceptat que los moros de Favanella..., e de la vall, e de Elich e de Alacant que reguen per tanda, que aquell moro que haura la tanda que pusca regar de nit no exint de la terra que rech, e queu fasa a saber al senyor del loch d on ell ha a regar aquella nit/Et si daltra manera sa atrobat que sia mort o catiu. estas ordenaciones no se aprobaron hasta 1375 por las protestas que se levantaron, incluida la de Garca Jofr de loaysa, seor de Petrer. M.t. Ferrer i MAllOl, Els sarrans de la Corona& op. cit., p. 107. 50 contra tota raho tallen et leven a mes sostmesos de Elda una cequia qui del terme de Petrer acustuma de venir al dit loch dElda. ACA, C, reg. 2030, f. 11v.; M.T. FERRER i MALLOL, Les aljames sarranes& op. cit. p. 99. 51 t.F. GlicK, Regado y sociedad& op. cit., p. 379. 52 ARV, PROTOCOLOS NOTARIALES, Gonzalo Fernndez, nm. 4167, 19 de agosto, 2 y 3 de octubre de 1580; ARV, PRO- TOCOLOS NOTARIALES, Gonzalo Fernndez, nm. 861, 27 de febrero de 1582; ARV, PROTOCOLOS NOTARIALES, Gonzalo Fernndez, nm. 862, 14 de octubre y 24 de diciembre de 1583; ARV, PROTOCOLOS NOTARIALES, Gonzalo Fernndez, nm. 863, 6 de febrero y 4 de mayo de 1586; APM, Cosme Alamora, 10 de diciembre de 1593. 53 J. ricHArt GOM, Antroponimia mudjar en el valle del Vinalop en el siglo XV. col.lecci l Algoleja, n 11. Petrer: Centre d Estudis Locals del Vinalop, 2010 (en prensa); S. ASINS VELIS, M.C. RICO NAVARRO, La poblacin morisca del condado de elda. en: G. Segura Herrero (coord.), La comunidad morisca en el Valle del Vinalop. Petrer: centro de estudios locales del Vinalop, 2009, pp. 57-111. 54 t.F. GlicK, Regado y sociedad& op. cit., pp. 383-385, 411. 55 Vase c. trillO SAn JOS, el mundo rural nazar: una evolucin a partir de Al-Andalus. Studia Histrica. Historia Me- dieval 18-19, 2000-2001, p. 151. 59 Sabina Asins Velis 56 la Pea, arriba de la baa vella de dita vila , por lo que dejamos abierta la posibilidad de que hubiese habido una balsa de propiedad comunal anterior a la mencionada Bassa Fonda. esta balsa islmica pudo estar en un punto en que la construccin de la Fonda (puede que a nales del siglo XV, como veremos) no implicara la remodelacin del espacio irrigado en la partida de la Huerta. de forma similar, cuando en el siglo XiX se construy la Bassa de cuatrovientos, los regantes unieron esta nueva balsa a la Fonda por un pequeo tramo de acequia, no necesitando hacer ningn tipo de alteracin en la red de acequias 57 existente . el hecho de que en el ao 1659 pudieran reconocerse todava los restos de esta posible balsa islmica, que tendra ms de cuatro siglos, es totalmente factible, pues no olvidemos que a da de hoy se conservan las balsas de la partida de la Foya Falsa y la vieja de caprala, de al menos 400 aos de antigedad, y todava est en perfecto uso la nueva de caprala que data de 1766. Si bien la Bassa Fonda fue parcialmente destruida hace unos aos, sera interesante practicar excavaciones arqueolgicas que pudieran datar su cimentacin y su relacin con la del edicio al que al parecer se adosa, dada su forma irregular (Figura i-1.4). Por cuanto se reere al criterio de parcelacin de la huerta, el mdulo de supercie debi ser la ta- 2 hlla, como se ha mantenido histricamente, que en Petrer equivale a 1.201 m . la extensin que pudo tener la zona de huerta nos atrevemos a estimarla de forma indirecta. Ponce y Vzquez calculan que unos 50 vecinos podran trabajar entre 200 y 400 tahllas de regado, considerando el tamao de las parcelas 58 que se concederan en el repartimiento de Murcia a mediados del siglo Xiii . Si tenemos en cuenta que la primera estimacin del nmero de habitantes de Petrer data del ao 1430, en que constan 36 fuegos 59 60 o familias , y que en 1611 tras la expulsin de los moriscos se regaban de la balsa en la partida de la Huerta 200 tahllas (equivalentes a 24,02 hectreas), sugerimos al igual que se ha hecho para la vecina 61 poblacin de Sax , que la extensin de la huerta en poca islmica pudo ocupar las 200 tahllas de la conocida como partida de la Huerta, que es adems la ms cercana al ncleo urbano. Partida que podra regarse con el agua de la baa vella de la villa y ser trabajada por menos de 50 vecinos (cantidad factible dada la extensin del rea urbana musulmana facilitada por los hallazgos arqueolgicos y que en 1430 haba slo 36 familias) (Figuras i-1.5 y i-1.6). el permetro irrigado sera tambin paralelizable al esti- 62 mado para otras zonas de al-Andalus . Adems, como veremos ms adelante, la partida de la Huerta de Petrer tena en el ao 1882 una extensin de 25,01 hectreas y en una fecha tan tarda como 1900 segua teniendo 26,20 hectreas. las partidas conocidas como de las Oliveras y de las Vias de Arriba, ambas de secano mejorado con riego eventual, pudieron ponerse en cultivo algn tiempo despus (nales del siglo XV-principios del 63 XVi), motivado por el incremento del nmero de habitantes , para lo que debieron necesitar aumentar el volumen de agua captada y almacenada, pudiendo construir para ello la Bassa Fonda, con una capacidad 3 64 de 1.000 m segn estimaciones de J.M. Bernab . el espacio cultivado en secano mejorado se ampli de nuevo en 1536, en la partida denominada de las Vias de Abajo, gracias al agua de la acequia de Arriba -de- 65 rivada de la acequia del conde, que transportaba el agua de la Fuente del chopo desde Villena a elda -. 56 AMP, 49/2, cOnSeJOS MUniciPAleS 1649-1660, f. 452. 57 Vase el esquema del sistema de riego de las minas de Pua y de la Bienvenida en: J. HerMOSillA PlA (dir.), Los rega- dos tradicionales del Vinalop (Alto y Medio). Valencia: Generalitat Valenciana, Universitat de Valncia. coleccin regados Histricos Valencianos, 2007, p. 219. 58 G. POnce HerrerO, V. VZQUeZ HernndeZ, Aprovechamientos hidrulicos medievales en Sax. en: G. Ponce Herrero (ed.), Sax: Agua, territorio y sociedad. Alicante: Universidad de Alicante, 2002, p. 44. 59 c. lPeZ rOdrGUeZ, Nobleza y poder poltico... op. cit., p 101, nota 226. 60 Una tahlla = 1.201 m 2 ; T.V. PREZ MEDINA, M.C. RICO NAVARRO, La carta pobla... op. cit., pp. 159-170. 61 G. POnce HerrerO, V. VZQUeZ HernndeZ, Aprovechamientos hidrulicos medievales y urbanismo en Sax. Agua y Territorio... op. cit., pp. 276-277. 62 c. trillO SAn JOS, el tiempo del agua& op. cit., pp. 246-262. 63 Ao 1488: 72 vecinos (c. 324 habitantes) (r. VAlldecABreS rOdriGO, El cens de 1510... op. cit., p. 555). Ao 1510: 99 vecinos (c. 445 habitantes) (ArV, reAl 514, ter., ff. 57-61). 64 J.M. BernAB i MAeStre, Obras hidrulicas tradicionales en el regado de Petrer (vall del Vinalop). Bitrir I, p. 29. 65 Ace, nm 1168. Aunque las negociaciones deban ya estar en marcha con anterioridad, pues en 1493 el conde de cocentaina agradece el ofrecimiento del agua de la Fuente del chopo (AMV caja 724, exp. 72, citado por t.V. PreZ MedinA, dina- mismo y continuidad& op. cit., p. 48. t. PreZ MedinA, Paisaje construido. La huerta de Villena: de la incorporacin real 60 Los valles disponibles en el siglo XVi, en la huerta, el agua poda venderse por separado de la tierra, as como hacer do- 66 nacin por dote matrimonial o dejarse en herencia . no obstante cuando se arrendaban los campos la situacin poda ser distinta, indicndose por ejemplo en las clusulas del de la Horteta de Batiste Llopis (heredad ubicada en elda lindando con Petrer) que inclua toda el agua de las acequias de Arriba y de Abajo, sin poder vender el agua por parte de los arrendadores, especicndose que deban conservarla 67 para el riego y riegos ordinarios de las vias y huertos de dicha heredad . Posteriormente, en la carta de 68 Poblacin de 1611, se especica que la tierra no podra venderse separada del agua . respecto a los otros ncleos de poblacin localizados, las alqueras ubicadas en Gurrama y Pua, se encuentran a unos 6 kilmetros del entorno del castillo, si bien nicamente la de Pua ha sido objeto de excavaciones arqueolgicas en extensin. Esta alquera, construida a nales del siglo XII-principios 69 del siglo Xiii, perdur como ncleo habitado hasta principios del siglo XiV , momento en que hemos encontrado citado el topnimo por primera vez, en un documento fechado en 1326, al referirse a una 70 mujer que fue hecha cautiva en Pua, prop del loch de Petrer . las distintas construcciones que la inte- graban ocupaban una extensin destacada, ubicadas en un rea caracterizada por suelos de tipo regosol calcrico, de moderada capacidad actual de uso (clase c), en donde pudieron destinar una zona a huerta abastecida por una acequia derivada de la acequia principal de las fuentes de Pua, como exista al me- 71 nos desde 1630 . desconocemos si en un primer momento sera necesario establecer condiciones para el uso del agua entre los regantes de esta acequia secundaria y los de la balsa de la villa, como s se haca 72 en el siglo XVii, en que tenan prioridad los segundos sobre los primeros . esta alquera contara con trmino propio que debi pasar a la seora una vez abandonada sta, pues en una fecha algo ms tarda, en 1504, Johan roig de corella, seor de Petrer, arrend a Manuel diez, seor de Andilla, el derecho de 73 herbaje que le perteneca en elda, Salinas y en el trmino de Pua . Acerca de los tributos que pagara la comunidad musulmana, la primera informacin de que dispo- nemos es muy tarda, del ao 1488, ya bajo dominio cristiano. de los recaudados en otras zonas musul- 74 manas , en Petrer nicamente tenemos noticia de que perduraran los conocidos como alfarda, que en poca islmica se pagaba en metlico, gravaba el patrimonio de las aljamas y no se recaudaba de forma continua, y el diezmo, que se impona sobre la produccin agraria. Sin embargo, al ser los datos con que 75 contamos tardos , de 1488 y 1583, ya se haba desvirtuado el sentido de estos tributos musulmanes, 76 como ocurre en otras zonas , pues en 1583 la alfarda se indica como una renta ordinaria. tambin pue- de quedar constancia del denominado almagram, que en origen se aplicaba a las tierras irrigadas, pero que, como se seala para las cercanas poblaciones de Monvar y Xinosa, en Petrer pudo mantenerse a la desecacin lagunar. I Ayudas a la Investigacin, Fundacin Municipal Jos M Soler. Villena, Alicante (en prensa); AGS, cOnSeJO reAl de cAStillA, Procesos, Pleitos y expedientes, leg, 95, f. 1, 24 de junio de 1533. 66 ARV, PROTOCOLOS NOTARIALES, Gonzalo Fernndez, nm. 4167, 19 agosto, 2 de octubre y 4 de noviembre de 1580; ARV, PROTOCOLOS NOTARIALES, Gonzalo Fernndez, nm. 862, 4 de agosto de 1583; APM, Cosme Alamora, 10 de diciembre de 1593; APM, Cosme Alamora, seccin Elda, 23 de septiembre y 18 de diciembre de 1607. 67 APM, cosme Alamora, seccin elda, 11 de febrero de 1607. 68 ACE, nm. 1046; T.V. PREZ MEDINA, M.C. RICO NAVARRO, La carta pobla... op. cit. Para otras zonas de Al-Andalus: c. trillO SAn JOS, el tiempo del agua& op. cit., pp. 262-273. 69 c. nAVArrO POVedA, Petrer islmico... op. cit., pp. 15-22. Para las caractersticas de las alqueras musulmanas vase M. BArcel, Vespres de feudals& op. cit., pp. 240-247. 70 Mt. Ferrer i MAllOl, La frontera amb l islam en el segle XV cristians i sarrans al Pas Valenci. Barcelona, 1988, p. 273. 71 AMP, llibre de Amostasaf (1660-1700), caja 37, expediente 1, s/f., 1 de julio de 1693. 72 Un caso similar en que se habran establecido las condiciones de uso del agua desde el principio en: c. trillO SAn JOS, el tiempo del agua& op. cit., p. 271. 73 ArV, PrOtOcOlOS nOtAriAleS, Miguel Frigola, nm. 3253, 11 de julio de 1504. 74 J. tOrr, del almagram a las particiones de frutos. las cargas agrarias en las aljamas musulmanas del reino de Valencia. en: r. Vallejo Pousada (ed.), Los tributos de la tierra: Fiscalidad y agricultura en Espaa (siglos XII-XX). Valencia: Publica- cions de la Universitat de Valncia, 2008, pp. 185-222. 75 ARV, PROTOCOLOS NOTARIALES, Frances Soler, nm. 2169, 19 de diciembre de 1488 (ff. 83-94v.); ARV, PROTOCO- lOS nOtAriAleS, Gonzalo Fernndez, nm. 862, 13 de febrero de 1583. 76 J. tOrr, del almagram a las particiones de frutos& op. cit., pp. 190-191, 202, 204-205. 61 Sabina Asins Velis 77 bajo la denominacin de pecho . en el arrendamiento del condado de 1583 se citan juntos como renta ordinaria pechos y alfarda . En los documentos de ventas de tierra se especica el pecho coincidiendo siempre con ventas de bancales en la huerta, lo que no se puede deducir es la cantidad anual que se pagaba, de acuerdo a la extensin de la parcela o el cultivo, pues se indica en unas 2 sueldos, en otras 78 2 sueldos y medio, incluso 6 sueldos y 5 dineros y hasta 14 sueldos . Sin embargo, posteriormente, en la Carta de Poblacin de 1611, el pecho se expresa como una cantidad ja por tahlla en las tierras de regado y riego eventual, de 6 libras por dos tahllas en la huerta, 2 libras por 3 tahllas en las Vias de Arriba con riego eventual, 3 libras en partida de las Oliveras, con riego eventual, y 4 libras en las Vias 79 de Abajo, con el riego del agua de elda . 80 el diezmo, en rabe uar , parece que se aplicaba en origen preferentemente a las tierras de secano. como en el caso de los otros impuestos citados, en Petrer no tenemos referencias hasta el documento ya comentado de 1488, en que se recoge que en el delme van comprendidos los productos axi de regadiu com de sequa e de totes altres vinyes, sin que podamos ampliar ms datos hasta despus de la expulsin de los moriscos. Otra de las prcticas de inuencia islmica que consta en la documentacin escrita es la de alfarrazar o estimar directamente en el campo el montante de la produccin. Muy tardamente, en 1583, en Petrer, el alfarrazamiento se segua aplicando a la vid (como se cita para elche casi tres siglos 81 antes ): Angel taa y Francisco Alhayon, jurados de la villa de Petrer, y Juan lopo, contador de dicha villa, en nom de la universitat de dita vila & venen a Pere Colomina llaurador de la vila de Castalla trescentos sexanta quintars de pansa. Deu mes /o/ menys de la collita e alfarraz de la dita vila de Petrer per tanda de cascu son alfarraz com es us y costum. Prometent lliurarla y desde dihuit de octubre en avant continuament sens alar ma ns haverla rebuda ab que no ploga en los dies que la rebra ente- 82 nentse arrova neta de pansa . As pues, gracias a la creacin de espacios irrigados y a su ubicacin en el paso del corredor del Vi- nalop, a partir de poca islmica se consolidar el rea en torno al castillo de Petrer como asentamiento estable hasta nuestros das, debido a la valorizacin de las tierras del valle ms extenso de su territorio. los cambios ms importantes que se producirn sern debidos a acontecimientos polticos, ya que el temor a una posible reunicacin de al-Andalus, como consecuencia del xito del levantamiento de Ibn Hud contra el poder almohade en 1228, llev al rey castellano Fernando iii a reanudar la guerra contra los musulmanes. Unos aos ms tarde, en 1243, Muhammad Ibn Hud (pariente de Ibn Hud) rm el Pacto de Alcaraz con el infante Alfonso, hijo de Fernando iii y futuro rey Alfonso X el Sabio, por el que el reino de Murcia reconoca la soberana de castilla, a quienes entregaran la mitad de las rentas p- blicas del reino y las principales fortalezas, entre otras concesiones. A cambio, a los musulmanes se les respetaban las propiedades, religin e instituciones y se les daba proteccin militar contra Granada, entre 83 otros aspectos . Al ao siguiente, 1244, por el Tratado de Almizra, rmado entre el infante Alfonso y Jaime i de Aragn, quien ya haba conquistado el reino de Valencia a los musulmanes, se estableca la frontera entre castilla y Aragn en la lnea de montaas que una Biar con Aguas de Bussot, quedando 84 Petrer en el reino de Murcia, territorio castellano . 77 J. tOrr, del almagram a las particiones de frutos& op. cit., p. 205. 78 ARV, PROTOCOLOS NOTARIALES, Gonzalo Fernndez, nm. 861, 30 de diciembre de 1581 (libro de 1582); ARV, PRO- TOCOLOS NOTARIALES, Gonzalo Fernndez, nm. 862, 23 de noviembre de 1583; ARV, PROTOCOLOS NOTARIALES, Gonzalo Fernndez, nm. 863, 9 y 20 de enero de 1586. 79 Ace, nm. 1046. 80 J. tOrr, del almagram a las particiones de frutos& op. cit., p. 186 y ss. 81 J. tOrr, del almagram a las particiones de frutos& op. cit., p. 210. 82 ArV, PrOtOcOlOS nOtAriAleS, Gonzalo Fernndez, nm. 862, 3 de octubre de 1583. 83 J.V. cABeZUelO PlieGO, elda medieval: el dominio cristiano. Historia de Elda, tomo i, op. cit., p. 142. 84 e. GUinOt rOdrGUeZ, Els lmits del regne. El procs de formaci territorial del Pas Valenci medieval (1238-1500). Valncia: edicions Alfons el Magnnim iVei. col.lecci Politcnica, 58, 1995. 62 Los valles disponibles Fig. I-1.4. Bassa Fonda de Petrer, en uso hasta los aos sesenta del siglo XX (Fuente: M.c. ricO nAVArrO, 2002, p. 93) 63 Sabina Asins Velis Fig. I-1.5. detalle del rea abancalada junto al ncleo urbano a mediados del siglo XX. esta zona estara en cultivo desde poca islmica (Foto: Ayuntamiento de Petrer) Fig. I-1.6. Vista general del espacio agrario junto al pueblo a mediados del siglo XX. Partida de la Huerta junto al pueblo (Foto: Ayuntamiento de Petrer) 64 Captulo 2: Seran bons, lleals, els e obedients vasalls 1. El seoro de Petrer: de los Loaysa a los condes de Cocentaina Donacin a la familia Loaysa los captulos del Pacto de Alcaraz se mantuvieron hasta 1257 en que siendo ya rey Alfonso X se conso- lid el dominio de castilla sobre el reino de Murcia. el resultado de esta nueva poltica fue el acuerdo a que se lleg con Muhammad ibn Hud para aumentar el porcentaje de pobladores castellanos en el reino murciano. Al parecer, en 1257 se registr una importante sequa en castilla, y si bien no tenemos datos de que sta fuera una de las causas de la intensicacin del reparto de tierras entre los castellanos en 1 Murcia, lo dejamos indicado por si futuras investigaciones pudieran aportar mayor informacin . lo que si parece claro es que el repartimiento se vio favorecido por el hecho de que muchos de sus moradores 2 musulmanes se marchaban a vivir al reino de Granada, egipto o Marruecos . Uno de los primeros beneciarios de esta poltica de reparto de tierras fue Jofr de Loaysa, persona muy cercana al rey Alfonso X, quien le concedi el donado de Petrer, por el que se constitua en seor de su trmino, villa y castillo. Jofr de loaysa y su esposa doa Jacometa estuvieron en un primer mo- mento al servicio del rey de Aragn Jaime i, quien les encarg la educacin de su hija, la infanta doa Violante. cuando doa Violante se cas en 1249 con el infante Alfonso de castilla (futuro rey Alfonso X el Sabio), los loaysa se fueron a vivir con ella a castilla. Ya como rey, Alfonso X concedi a los loaysa, adems de Petrer, unos valiosos molinos en Guadaira y una casa en Abada, as como tierras en cartagena y Orihuela. en el tercer repartimiento de Murcia la familia loaysa obtendra una importante 3 extensin en la huerta, 1.684 tahllas (equivalente a unas 188 hectreas ), siendo citados en segundo 4 lugar, tras la reina . la incorporacin de Petrer al territorio cristiano de la corona de castilla no implic la sustitucin de la poblacin musulmana por colonos cristianos inmigrados. entre otros cambios substanciales que se 5 produjeron en el siglo XIII a raz de la conquista, como una mayor presin scal y la renta feudal , des- tacamos las relaciones que se establecieron entre la seora y los campesinos y las reacciones que stas suscitaron, dado que la poblacin musulmana no haba estado sometida con anterioridad a la dependen- cia que el vasallaje impona en los nuevos seoros. no tenemos constancia de cuantos abandonaran la villa para pasar a territorio musulmn pero, con aquellos que permanecieron, Jofr pact mediante car- tas las nuevas relaciones que se establecan entre ellos, manteniendo, entre otros derechos, el de poder 6 vender sus heredamientos . el 6 de agosto de 1258 Jofr de loaysa instituy donacin y mayorazgo de Petrer en su hijo mayor Garca Jofr, en los trminos siguientes: toda la villa, y todo el castillo que dizen Pedrs con todos los vasallos... con todos los derechos... de heredamientos de pan, e de riegos, e de huertos, de vias y de prados, y de pasturas, y de montes, y de fuentes y de aguas, con todas sus pertenencias derechuras labradas y por labrar, 1 H. BentABOl Y UretA, Las aguas de Espaa y Portugal, 1900; reproduccin facsmil, 1995. Madrid: Instituto Tecnol- gico Geominero de espaa, p. 41. 2 d. MenJOt, Murcie castillane: une ville au temps de la frontire (1243-milieu du XVe s.). Madrid, 2002, p. 181; J. TORRES FOnteS, La reconquista de Murcia en 1266 por Jaime I de Aragn. Murcia, 1987 (2 ed.), pp. 47 y 52-55. 3 con equivalencia de la tahlla murciana a 1.118 m 2 . 4 A. GArcA MArtneZ, Jofr de Loaysa, Crnica de los reyes de Castilla. Murcia, 1982 (2 ed.), pp. 28-31; J. TORRES FOnteS, Repartimiento de Murcia. Madrid, 1960, p. 2. 5 J. tOrr, Arqueologia de la conquesta& op. cit., p. 189. 6 Las cartas primeras que rm Jofr de Loaysa en LIBRE DELS FEYTS del Rey en Jacme, pag. clX-v. edicin facsmil, Barcelona, 1972. el derecho a vender sus propiedades en: carta de Ferrer descortell, baile general dell Xixona al rey Jaime ii, fechada en elche el 3 de enero de 1309 (M.t. Ferrer i MAllOl, Les aljames sarranes... op. cit., p. 205, doc. 36 (AcA,c, cr. Jaume II, caixa 25, nm 3147); en el valle de Laguar tambin se documenta este derecho: J. TORR, Vall de Laguar. Asen- tamientos, op. cit., p. 157. distincin entre donados y heredamientos en d. MenJOt, Murcie castillane& op. cit. p. 147. Sabina Asins Velis nombradas y por nombrar,... y con todo quanto me hy dio mi Seor el Rey Dn Alphonso con su 7 carta plomada... . la consolidacin del dominio castellano y los nuevos repartos de tierra no fueron bien acogidos por los 8 musulmanes del reino de Murcia, quienes nalmente, en 1264, se sublevaron contra Castilla . el rey aragons Jaime I medi en el conicto y a nales del ao siguiente acudi a ayudar a su yerno Alfonso X. tras asegurar Villena y elda, pas a parlamentar con los habitantes de Petrer, quienes le comunicaron que por el mal trato que Jofr les dispensaba deseaban incorporar la villa a los dominios del rey arago- ns. tras la promesa de Jaime i de que hablara con Jofr de loaysa y les cartes primeres los fariem atendre, los pobladores cedieron y el rey devolvi el castillo y villa a los miembros de la casa de Jofr 9 que le acompaaban . Unos aos ms tarde, los conictos que se sucedieron en Castilla, aprovechando la minora de edad de Fernando iV, propici que Jaime ii, rey de Aragn, pactara apoyo militar a los infantes de la cerda, hijos del fallecido primognito de Alfonso X el Sabio. A cambio de la ayuda, el reino castellano de Murcia se someta desde 1296 a la soberana de la corona catalano-aragonesa, entre cuyos territorios se inclua Petrer, siendo su seor Juan Garca de loaysa a quien Jaime ii puso bajo su proteccin en abril 10 de 1296 . terminados los problemas en castilla, Fernando iV pact con Jaime ii en 1304 y 1305 la sentencia arbitral de torrellas y el pacto de elche. con la delimitacin de fronteras, Petrer se incorpor 11 denitivamente al reino de Valencia . Por estos tratados algunas villas importantes pasaron al rey de Aragn, no obstante se j que los 12 castillos que ya estaban asignados a seores permanecieran en propiedad de stos , por lo que Petrer continu en poder de loaysa. esta decisin no debi agradar a sus habitantes quienes seguan sin estar contentos con el trato que reciban por parte de la seora, por lo que en el ao 1309 enviaron sus quejas a Jaime ii incidiendo en que Joan Garca de loaysa no cumpla con lo acordado por sus antepasados y por l mismo, solicitando permiso para vender sus heredamientos, segn tenan costumbre, y pasarse a 13 dominios de realengo, peticin que no prosper . la adaptacin de los mudjares de Petrer a las nuevas 7 Segovia, 6 de agosto de 1258, ACE, nm. 577, 939 y 940. En pg. 20 el rey Alfonso la conrm el 27 de agosto. Este docu- mento es un traslado hecho en el ao 1424 a peticin de Alfonso Snchez de calataiubio quien, como veremos ms adelante, interviene en el proceso de venta de Petrer a los Corella; G. SEGURA HERRERO, M C. RICO NAVARRO, Conmemoracin del 750 aniversario de la fundacin del mayorazgo sobre la villa y castillo de Petrer. Petrer: Ajuntament de Petrer, 2008. 8 J.V. cABeZUelO PlieGO, elda medieval: el dominio cristiano... op. cit., pp. 144-147. 9 liBre delS FeYtS del rey en Jacme, pag. clX-v,& op. cit.; J. TORRES FONTES, La reconquista de Murcia en 1266& op.cit., p. 58, 101, 121-122. el hijo de don Jofr, Garca Jofr de loaysa prest notables servicios a los reyes castellanos. Al- fonso X le concedi adems la villa y castillo de Jumilla y, posteriormente, el rey Sancho iV le nombr adelantado de Murcia en 1284. A. GArcA MArtneZ, Jofr de Loaysa, Crnica& op. cit., pp. 37-41. 10 d. MenJOt, Murcie castillane& op. cit. pp. 230-235; J.D. GARRIDO i VALLS, La conquesta de la Vall del Vinalop per Jaime ii. Revista del Vinalop 6-7, 2003-2004, pp. 27-37; J.V. CABEZUELO PLIEGO, Elda medieval: el dominio cristiano... op. cit., pp. 147-150. A la muerte de Garca Jofr de loaysa, en 1286, hered el seoro su hijo Juan Garca de loaysa quien sigui rdenes del infante don Juan Manuel, seor de Villena (A. GArcA MArtneZ, Jofr de Loaysa, Crnica& op. cit., pp. 50-51; M.T. FERRER i MALLOL, Organitzaci i defensa d un territori fronterer: la Governaci d Oriola en el segle XIV. Barcelona, 1990, pp. 27, 29, 39, 193; nalmente debi prestar juramento a Jaime II, conrmndole el rey la posesin del lugar de Petrer. El 5 de junio el rey conceda guiaje a los musulmanes de Petrer y el da 20 ordenaba a los ociales reales que obli- gasen a los musulmanes de Petrer, elda y novelda a pagar a Joan Garca de loaysa, alcalde de los castillos citados, las peitas o el tributo debido al alcalde que se negaban a pagarle (M.t. Ferrer i MAllOl, Les aljames sarranes... op.cit., pp. 24-26 (ACA, C, reg. 340, f.121v; ACA, C, reg. 340, f. 122r.; ACA, C, reg. 340, f. 157r.). En 1307 volvi a prestar juramento (M.T. Ferrer i MAllOl, Organitzaci i defensa& op. cit., p. 174). 11 M.t. Ferrer i MAllOl, l endem de la Pau de torrellas (1304). el nou mapa senyorial a la Vall del Vinalop. Revista del Vinalop 6-7, 2003-2004, pp. 14-16. 12 e si otros castiellos haba alguno otro rico home,& , que quen o sean d aquellos cuanto a la propiedad. cif. e. GUinOt rOdrGUeZ, Els lmits del regne& op. cit., p. 105. 13 que ls dits moros vos trameten clamar merc que com en Johan Garcia, senyor de Petrer, los pas contra algunes gracies e cartes que an dels seus anteessor e d ell, que sia vostra merce, senyor, que ls manets donar vostra carta per a ell d aquesta rah, per o que ells pusquen vendre lurs heretaments, segons que u an acostumat e venir a viure e estar a la vostra senyoria& sembla a mi que tot o que ells vos demanen s vostre serviy e que les vostres rendes ne valran ms& carta de Ferrer descortell, baile general dell Xixona al rey Jaime ii, elche el 3 de enero de 1309 (M.t. Ferrer i MAllOl, Les aljames sarranes... op.cit., p. 205, doc. 36 (AcA,c, cr. Jaume ii, caixa 25, nm 3147)). el deseo de los musulmanes de migrar a lugares de realengo 66 Seran bons, lleals, els e obedients vasalls condiciones que el seoro les impona no fue sencilla ya que, adems del incumplimiento de acuerdos por parte de los loaysa y de las restricciones a profesar sus costumbres (en 1318 Jaime ii les prohbe la crida de la sal, mediante noticacin a la viuda de Joan Garca de Loaysa), padecieron tanto directa como indirectamente las consecuencias de la guerra que entre 1309 y 1334 se mantuvo contra los mu- 14 sulmanes de Granada , y de nuevo entre 1356 y 1365/6 en la llamada guerra de los dos Pedros, en la que el seor de Petrer, Garca Jofr de loaysa, apoy a Pedro el ceremonioso, rey de Aragn, o a Pedro 15 el cruel, rey de castilla, segn los avatares de la guerra . la poblacin de Petrer se mantuvo concentrada en torno al castillo, detectndose a principios del 16 siglo XiV el abandono de la alquera de Pua , aunque todava debi continuar habitada la alquera calle nueva 9-11 hasta el siglo XV, momento en que fue abandonada y sellada por rellenos de huerta. 17 la organizacin fsica del parcelario y los elementos morfolgicos de la red hidrulica , no debieron experimentar cambios signicativos debido, entre otros aspectos, a la permanencia del colectivo musul- 18 mn . Por los datos de los cultivos proporcionados por la cercana elda para 1356-1357, 1366 y 1368 se sabe que se plantaba avena, trigo, centeno, panizo, sorgo, cebada, habas, olivos, azafrn y alasfor (aza- frn bastardo). Sin embargo, la via era el ms importante, calculndose para 1356 la cantidad de 3.082 quintales de uva pasa que se dedicaban a la exportacin. en Petrer, la avena se sembraba en los secanos, 19 al igual que el alasfor ; tambin se tienen noticias de que en 1353 se produca la cebada en secano y 20 regado, as como trigo candeal . Adems de trabajar los campos que se distribuan junto a la poblacin, sus agricultores disponan de propiedades en el trmino de elda, a quienes la reina (seora de elda) les reclam el pago del diezmo, pues los vecinos de Petrer se llevaban a escondidas el trigo y otros frutos 21 que recogan en sus posesiones de elda . La extensin de la supercie cultivada, segn los fueros de sigui dndose en los siglos XiV y XV, pues las moreras reales gozaban de mayores privilegios (c. lPeZ rOdrGUeZ, Nobleza y poder poltico& op. cit., pp. 161-166). A Joan Garca de Loaysa le sucedi su hijo del mismo nombre; en 1314 Jaime II le conrm la posesin de Petrer, con jurisdiccin civil y criminal (ACE, nm. 935. Copia notarial de 1761. En ACE, nm 936, se indica que Arnau de torrelles intentaba usurpar algunos derechos de Joan Garca de loaysa. en 1317 teresa, madre de Joan Garca, solicit a Jaime ii la administracin de la justicia de Petrer, como la haban tenido los loaysa en tiempos en que el lugar perteneca al reino de castilla, peticin que le concedi Jaime ii (M.t. Ferrer i MAllOl, Les aljames sarranes... op.cit., p. 25 (AcA,c, reg. 244, f. 36r.-v.). 14 M.t. Ferrer i MAllOl, Els sarrans de la Corona... op. cit., p. 90 (AcA, c, reg. 244, f. 338r.). en 1339 cuando se avisa al alcaide de Petrer de la intencin del sultn de Marruecos de apoderarse de varios castillos, entre ellos el de Petrer, donde se iban a reunir numerosos musulmanes, M.t. Ferrer i MAllOl, La frontera amb l islam& op. cit., p. 283 (AcA, c, reg. 1377, f. 3v.). 15 M.t. Ferrer i MAllOl, la frontera meridional valenciana durant la guerra amb castella dita dels dos Peres. en: Pere el Ceremonis i la seva poca. Barcelona, 1989; J.V. CABEZUELO PLIEGO, Documentos para la historia del valle de Elda 1356-1370. Elda, Alicante, 1991; J.V. CABEZUELO PLIEGO, Elda medieval: el dominio cristiano... op. cit., pp. 151-153. en uno de los perodos en que Garca Jofr apoy a Aragn, el Ceremonioso le conrm (14-XII-1359) los privilegios, franquicias e inmunidades sobre el lugar de Petrer (Ace, nm. 936. copia notarial de 1761). en 1361 Petrer volvi a estar bajo dominio castellano (J.V. cABeZUelO PlieGO, Documentos para la historia& op. cit, p. 58). en agosto de 1366 las tierras que con- guran el valle de Elda haban pasado ya al seoro y jurisdiccin del rey de Aragn, pero en julio de 1367 Garca Jofr de Loaysa segua rechazando la delidad a Pedro el Ceremonioso (M.T. FERRER i MALLOL, Les aljames sarranes... op.cit., p. 25; M.T. FERRER i MALLOL, Organitzaci i defensa& op. cit., p. 127; J.V. CABEZUELO PLIEGO, Documentos para la historia& op. cit, p. 160 (ACA, C, reg. 1079, f. 78 v.). Posteriormente, (16-06-1388) Juan I de Aragn le conrmar los privi- legios, derechos y regalas como hiciera Pedro iV (Ace, nm. 937). 16 tal vez por la preferencia del seoro a la concentracin del hbitat. Vase: e. GUinOt rOdrGUeZ, canvis i transformacions en l organitzaci del poblament al Pas Valenci arran de la conquesta feudal del segle Xiii. Una aproximaci. en: Territori i societat a l Edat Mitjana. Histria, Arqueologa, Documentaci. ii. Universitat de lleida, 1998, pp. 161-163. de cronologa algo posterior, siglo XV, se ha recuperado cermica en un cerro cercano a esta alquera (F.J. JOVer MAeStre, comunicacin personal). 17 J.F. MATEU, Assuts i vores uvials regades al Pas Valenci medieval. En: Los Paisajes del Agua. Valncia: Universitat de Valencia, 1989; M. BARCEL, El diseo de espacios irrigados& op. cit. 18 J. tOrr, terrasses irrigades& op. cit., pp. 331-335; E. GUINOT RODRGUEZ, S. SELMA CASTELL, L estudi del pai- satge histric de les hortes mediterrnies: una proposta metodolgica. Revista Valenciana d Etnologia 3, 2008, pp. 116. 19 M.t. Ferrer i MAllOl, Les aljames sarranes... op.cit., pp. 100-103. 20 J.V. cABeZUelO PlieGO, elda medieval: el dominio cristiano... op. cit., p. 161. 21 AcA, c, reg. 2030, ff. 11v. (sen porten somagadament et oculta sens pagar los drets a nos pertanyents e acostumats los blats e altres fruyts que cullen en sues possessions que hya et posseixen en lo terme dElda). 67 Sabina Asins Velis Valencia, se poda ampliar en las tierras incultas del trmino de las villas, siempre que stas no hubieran sido concedidas previamente, facultndose a los campesinos a roturar y labrar montes, marjales o riberas 22 sin necesidad de pedir licencia . estas roturaciones incrementaban la renta de la seora al aumentar los ingresos por los impuestos que gravaban la produccin. como comentamos anteriormente, el agua para el riego de la huerta de Petrer procedente de la mina de Pua, distante unos 6 kilmetros de la villa, se almacenaba en una balsa, desde donde se distribua a los campos mediante acequias. el sistema de irrigacin est documentado al menos desde 1315 cuando Arnau de torrelles (Procurador de Valencia dell Xixona) intent prohibir que los musulmanes fuesen a 23 regar los campos de noche . la prohibicin no afectaba a quienes regaban sus tierras por tandas, quie- nes podran hacerlo previa noticacin al seor del lugar. Entre estos campesinos se cita a los del valle (de elda). Adems, segn las ordenanzas, los musulmanes tampoco podan pasar a otro trmino a cazar o a recoger lea o esparto. estas ordenaciones no pudieron ser aprobadas hasta 1375 por las protestas 24 que suscitaron, entre las que se incluan las de la seora, Garca Jofr de loaysa . la acequia de Petrer tambin regaba parte de la huerta de elda, al menos hasta el ao 1392, en que los campesinos de Petrer 25 cortaron este suministro . esto pudo ser debido a que en ese mismo ao Juan i de Aragn haba conce- dido a los eldenses, para regar su zona de huerta, la propiedad, el uso y aprovechamiento de la Fuente de 26 las Virtudes y las aguas sobrantes del trmino de Villena, a costa de los regantes de Sax . En conjunto, se estima que la produccin agrcola fue suciente para asegurar el abastecimiento de la poblacin del valle de elda y para comercializar los excedentes en los mercados de Valencia, Alican- 27 28 te y castilla antes y despus de los perodos de guerra. Por cuanto se reere al ganado , conocemos para los aos 1355-1358 las cabaas de Aspe, 2.744 cabezas de ovejas y cabras, elda 2.280, y novelda 2.039, por lo que podemos suponer que en Petrer habra una cantidad superior o cercana a la de Aspe, si consideramos que en 1510, primer ao del que tenemos datos de Petrer, su cabaa casi doblaba a la 29 de Aspe . De los Loaysa a los Rocafull el seoro de Petrer pas por herencia a la familia oriolana rocafull, al no tener descendencia leonor, hija de Garca Jofr, casada con Joan de rocafull. Miembros tambin del brazo militar, gestionaron el seoro 30 hasta que Pere de rocafull y su mujer lo vendieron a eximen Prez de corella , el 27 de abril de 1431. Son escasos los datos acerca de la actividad agrcola de Petrer a principios del siglo XV. los rocafull 31 debieron verse afectados por el descenso de los precios agrarios en este cambio de centuria , agravado adems en la villa por las consecuencias que para su campo y ganado tuvo la guerra de 1428-1430, entre 22 FUrS Jaime i, libro iX, rubrica Xii (de departiment de coses), captulo XVi. edicin facsmil, Valencia 1990. 23 AcA, reg. 927, ff. 81v.-82r. en el ao 1315 Arnau de torrelles (Procurador dell Xixona) intent prohibir que negun moro no gos anar a regar de nit, exceptat que los moros de Favanella..., e de la vall, e de Elich e de Alacant que reguen per tanda, que aquell moro que haura la tanda que pusca regar de nit no exint de la terra que rech, e queu fasa a saber al senyor del loch d on ell ha a regar aquella nit/Et si daltra manera sa atrobat que sia mort o catiu. estas ordenaciones no se aprobaron hasta 1375 por las protestas que se levantaron, incluida la de Garca Jofr de loaysa, seor de Petrer. M.t. Ferrer i MAllOl, Els sarrans de la Corona... op. cit., p. 107. 24 ACA, reg. 927, ff. 81v.-82r.; M.T. FERRER i MALLOL, Els sarrans de la Corona... op. cit., p. 107. 25 ACA, C, reg. 2030, f.11v.; M.T. FERRER i MALLOL, Les aljames sarranes... op.cit., p. 99. 26 G. POnce HerrerO, V. VZQUeZ HernndeZ, Aprovechamientos hidrulicos medievales& op. cit., p. 36. 27 M.t. Ferrer i MAllOl, La frontera amb l islam& op. cit., p. 12 (ACA, C, reg. 1161, f. 42); M.T. FERRER i MALLOL, Les aljames sarranes... op.cit., p. 108. (AcA, c, reg. 1084, f. 154r.). 28 M.t. Ferrer i MAllOl, Les aljames sarranes... op.cit., p. 118. 29 Petrer 1.436, elda 88, Salinas 1.004, Aspe 896. (ArV, reAl 514, ter., ff. 57-61). r. GArcA crcel, el censo de 1510 y la poblacin valenciana de la primera mitad del siglo XVi. Saitabi XXVI, 1976, pp. 173, 176. 30 el 28 de abril de 1429 el rey Alfonso V da licencia a favor de Alfonso Snchez de calataiubio, Mara Snchez de Peralta, Yolanda de loaysa, herederos de Juan loaysa, e hija de Juan rocafull para vender todos sus derechos y acciones sobre el lugar de Petrer, a don eximen Prez de corella (ArV, reAl cAncillerA, reg. 256, f. 42v.). Puede que Alfonso Snchez de calataiubio vendiera su derecho en 31 de mayo de 1429 a eximen (Ace, nm 36, punto 4). 31 c. lPeZ rOdrGUeZ, el brazo militar del reino de Valencia a comienzos del siglo XV. Hidalgua 224, 1991, pp. 616- 640. Pere de Rocafull en pp. 620-621, 638; C. LPEZ RODRGUEZ, Nobleza y poder poltico& op. cit, pp. 247-248, 281. 68 Seran bons, lleals, els e obedients vasalls 32 Aragn y castilla, con la consiguiente reduccin de los ingresos de la seora . en ese momento la lo- 33 calidad contaba al menos con 36 fuegos, que corresponderan a unos 162 habitantes , poblacin escasa para la capacidad agrcola y ganadera de su trmino. Siguiendo la costumbre de la poca de complementar los ingresos procedentes de la explotacin de los seoros, bien con la compra de censales (prstamo a cambio de una pensin anual) bien con su 34 venta , Pere de rocafull se endeud entre 1397 y 1420 con 27.700 sueldos, que recab preferentemente de miembros del brazo militar, principales compradores de los censales a principios del siglo XV (tabla i-2.1). el inters de las operaciones llevadas a cabo por el seor de Petrer oscil entre el 7,69% y el 9,97 35 %, siendo mayor el nmero de censales cargados al 8,33% . la deuda que rocafull tena contrada en 1431 equivala a un 22,89% de la cantidad en que se valor Petrer al realizarse el contrato de venta de la villa. ese ao de 1431 supuso para los mudjares de Petrer un cambio de titularidad del seoro: de los Loaysa-Rocafull al inuyente Eximen Prez de Corella, quien, como los anteriores seores, no residira en su castillo. dato comn a ambas casas fue su cercana a los sucesivos monarcas, a cuyo servicio ob- tuvieron destacados cargos y a quienes acompaaron en distintas campaas militares. Tabla I-2.1. censales que tenan cargados Pere de rocafull y su mujer en 1431 (Fuente: ArV, reAl cAncillerA, reg. 495, ff. 505-507) NOTARIO/ ABONO PENSIN QUITAR POR INTERS COMPRADOR PERTENENCIA RESIDENCIA FECHA PENSIONES (S/D) (SUELDOS) ANUAL % Salvador Olives Bartolomeum (herencia del Brazo militar Valencia Marti 1 abril y 1.000,0 12.000 8,33 padre, Arnaldo 1-X-1406 octubre Olives) Joannes Ferrer Salvador Olives Brazo militar Valencia 23-Vi-1402 200,0 2.400 8,33 Bartolomeum Salvador Olives Brazo militar Valencia Marti 166,0 2.000 8,33 16-iX-1397 Gabrielem 21 febrero y Pedro Onigles Mercader Valencia Bonet agosto 500,0 6.500 7,69 21-ii-1420 Johanni Brazo militar Orihuela 1 de enero 399,0 4.000 9,97 Masquefa Bernardo lojar 66/8 800 8,33 Garcs TOTAL 2.331/8 27.700 Precio de venta de Petrer a Prez de corella = 121.000 sueldos = 6.050 libras censales cargados = 27.700 sueldos = 1.385 libras % del valor de los censales sobre el precio de venta de Petrer = 22,89% 32 ArV, reAl cAncilleriA, reg. 256, f. 91. la cercana de eximen Prez de corella al rey favorecera la concesin de este guidtico, pues eximen era ya seor de elda y Aspe, y desde 1429 estaba en negociaciones para comprar Petrer. 33 correlacin de 4,5 individuos por fuego. c. lPeZ rOdrGUeZ, Nobleza y poder poltico& op. cit, p. 101, nota 226. en 1401 haba en Petrer nicamente 4 casas de cristianos viejos, cifr. c. nAVArrO BelMOnte, c. BlAScO GArcA, Pobla- ment y poblaci a la Vall de novelda durant l edat Mitjana. Revista del Vinalop 6-7, 2003-2004, p. 83, tomado de V. GOnZ- leZ PreZ, La ciudad de Elche. Estudio geogrco. Valencia: Dep. de Geograa. Universitat de Valncia, 1976, p. 195. 34 c. lPeZ rOdrGUeZ, Nobleza y poder poltico& op. cit, pp. 127-128; J.V. GARCA MARSILLA, Vivir a crdito en la Valencia medieval: De los orgenes del sistema censal al endeudamiento del municipio. Valencia, 2002, pp. 135-227. 35 Sobre el inters al 8,33% vase J.V. GArcA MArSillA, estructura de la propietat i mercat de les rendes a la Valncia posterior a la conquesta (1238-1350). en: M. Barcel, et al. (eds.), El feudalisme comptat i debatut: Formaci i expansi del feudalisme catal. Valencia, 2003, pp. 402. los censales que tena cargados la nobleza en: c. lPeZ rOdrGUeZ, Nobleza y poder poltico& op. cit, pp. 133-155. 69 Sabina Asins Velis La familia Prez de Corella eximen Prez de corella ya posea elda, el lugar de Salinas y Aspe desde 1424, por las que pag, junto 36 a Francisco de Arinyo, 43.000 orines de oro de Aragn (23.650 libras) . Petrer se valor siete aos ms tarde en 121.000 sueldos (6.050 libras). Por sus servicios a Alfonso V, eiximen fue nombrado en 1429 37 gobernador del reino de Valencia ; a los pocos aos, en abril de 1438, obtendra el privilegio de inmuni- 38 dad, franqueza y exencin de impuestos (lezda, peaje y portazgo) , resultado de las peticiones del brazo 39 militar en las cortes de 1437-38 . el mismo rey, en 1448, fecha en que no era habitual en el reino de Valencia conceder ttulos nobiliarios a personas ajenas a la familia real, le otorg el ttulo de conde de 40 cocentaina, en consideracin a los servicios prestados en las guerras de italia y norte de frica . el 5 de febrero de 1449 se acogi a las prerrogativas que el Papa confera a quienes adquirieran tierras pobladas por ineles ; de este modo consegua diezmos y primicias sobre los productos agrcolas de los campos de elda, Aspe, Petrer y Salinas, de los que era seor, en detrimento de la dicesis de cartagena, primero, 41 y del cabildo de Orihuela, posteriormente, lo que origin un largo pleito . esta concesin coincidi con un perodo en que se produjo un xodo de musulmanes del reino de Valencia, por lo que el Baile Gene- ral dej de autorizar permisos para su salida, ya que las regalas y derechos de los seores de las villas 42 sufran una signicativa disminucin . En el documento de la venta a Eiximen Prez de Corella se especica que la propiedad estaba some- tida al derecho entutico, lo que implicaba que estaba sujeta al pago al seor directo de unos censos y prestaciones econmicas. A cambio el enteuta no poda ser privado de la propiedad siempre que no infringiera alguna clusula del acuerdo, como abandonar o descuidar los cultivos, no pagar los censos, 43 etc. en la venta del territorio se incluan , entre otros, las alqueras, las fuentes, aguas y acequias, los 44 acueductos, hornos y tabernas; y se concreta que estaba sujeto al pago de laudemio y fadiga . la de- pendencia de la economa seorial de la produccin agrcola quedaba reejada en el formalismo de la ceremonia de toma de posesin de cada nuevo seor, como en la de Johan roi de corella y Moncada: hixqueren en l orta de la dita vila, es passegaren per l orta de aquella e trencaren e tallaren e feren trencar e tallar al dit spectable senyor comte modern de les rames dels arbres, e cavaren e 45 cav de la terra en senyal de vera e pacca possesi... . 36 Un orn=11 sueldos; 20 sueldos=1 libra. La venta en: R. BELANDO CARBONELL, Realengo y seoro... op. cit., pp. 25-26. 37 ArV, reAl, reg. 418, ff. 98v.-99v., citado por c. lPeZ rOdrGUeZ, Nobleza y poder poltico& op. cit., pp. 287, 349, 351. 38 ArV, reAl, reg. 267, f. 126 v. 39 c. lPeZ rOdrGUeZ, Nobleza y poder poltico& op. cit., p 315. 40 c. lPeZ rOdrGUeZ, Nobleza y poder poltico& op. cit., pp. 71, 80, 88, 101, 254-256, 293-300, 354; J. PASTOR i FLUIX, Nobles i cavallers al Pas Valenci, Saitabi 53, 1993, p. 24; A.M. POVEDA NAVARRO, Elda y la familia de los Corella (siglo XV). Alborada XXIX, 1983, s/f. Falleci en 1457 y le sucedi su hijo Johan roi de corella, ii conde de cocentaina (diA- GO, Apuntamientos, tomo i, Valencia, 1936-1942, reed., pp. 132-138), a quien sigui en 1478 Johan roi de corella y Moncada, iii conde, quien estuvo al servicio de Juan ii y su hijo Fernando el catlico (diAGO, Apuntamientos... op. cit., pp. 138-139). 41 ArV, reAl cAncillerA, reg. 395, ff. 12-13. Pleito en: ArV, reAl 598, f. 71v.-82 (ao 1653) y otra copia en BiUV, manuscrito 196 (5). r. BelAndO cArBOnell, Realengo y seoro... op. cit., pp. 36-41. 42 Aureum opus regalium privilegiorum civitatis et regni Valentie cum historia cristianissimi Regis Jacobi ipsius primi conquis- tatoris. Valencia, 1990. edicin facsmil de la del ao 1515, p. 473, v. ii, 22 de octubre de 1449. 43 ARV, REAL CANCILLERA, reg. 495, ff. 504-511. En el documento se especica que se enajena el: territorium atque omnes et singulos sensus cum laudimio et faticis et toto alio pleno jure emphiteotico... cum omnibus et singulis castris fortitudiribus turribus Alquerecis donibus edecis et populationibus& Et guarinis et cum pratis pasturis montaneis planys montibus vallebus silvis nemoribus garrigiis venationibus erbagiis fustibus lignis arboribus et plantis fructiferis et infructiferis fontibus aquis cequis et aquarum ductibus cum fornis molendiniis macellis tabernis censibus laudimis et faticis morabatino seu monedatico tertio decimi herentiis... et cum ommi dominio et jurisdictione civile et criminalis alta e baxia mero et mixto imperio... Final- mente se pagaron 112.000 sueldos. la cantidad restante en Ace nms. 300 y 302. 44 El laudemio es el derecho que se paga al seor del dominio directo cuando se enajenan las tierras y posesiones dadas a enteusis; la fadiga es la cantidad que perciba el dueo directo por la renuncia a su derecho de prelacin en las enajenaciones de enteusis. 45 APP, PrOtOcOlOS nOtAriAleS, Garca Arts, 9 de noviembre de 1478, nm. 589. J. ricHArt GOM, inventarios de castillos y toma de posesin de elda, Petrer, Salinas, Aspe y Sax en 1478. Revista del Vinalop 5, 2002, pp. 177-180. 70 Seran bons, lleals, els e obedients vasalls En cuanto se reere a la organizacin del espacio agrario, durante el siglo XV, se detecta una redistribu- cin en un sector del parcelario al abandonarse la alquera de la calle nueva 9-11, que qued cubierta por rellenos de huerta. Por otro lado, adems del espacio cultivado en regado en el valle de elda, se trabajaban otros parajes del trmino, en concreto en la partida de Pua y en les Foyes de cat. en Pua 46 se han localizado restos de una posible alquera (en el contrato de venta de Petrer de 1431 sigue cons- 47 tando el vocablo alquericis para denominar el poblamiento disperso ) en un pequeo cerro, cercano a la antigua alquera de Pua que haba sido abandonada a principios del siglo XiV. en la partida de cat, se documenta la presencia de boqueras en el ao 1503, por lo que ya estaran construidas desde el siglo anterior: altre mollo a la coveta paredada a la Boquera del Barranch restant la coveta a ma esquerra en terme de 48 Petrer e dalli que responga linia recta a la Sella. Ytem a la boquera del Barranch dels Charcos... . estas boqueras, que se alimentaban de la crecida de los barrancos, se situaban en el extremo noreste ms alejado de la villa de Petrer, en concreto en el linde con castalla (posiblemente una a la altura del actual Barranc de les covetes y la otra en el Barranc dels charcos, topnimo desconocido hoy en da pero sin duda en la partida de cat), y se destinaran a mejorar el secano de les Foyes de cat, indicadas en este mismo documento. como veremos en el captulo siguiente, esta zona ser intensamente cultivada en el siglo XVI. Dada la lejana de este paraje, es factible que el edicio que se cita all el siglo siguiente como 49 palau estuviera ya construido en el siglo XV. Al igual que pudo haber alguna construccin en el Pla de 50 rufa (en el linde con Agost), apellido documentado desde 1478 en Petrer . las caractersticas principales de la explotacin del seoro las conocemos gracias a la concordia que Johan Roi de Corella rm, el 19 de diciembre de 1488, para el arrendamiento de Elda, Petrer, Aspe y Salinas, con Jaume Valles, Galcer d eslava y Francesc Miquel del Miracle, caballeros y vecinos de Valen- 51 cia, por cuatro aos (y posibilidad de cuatro ms de prrroga) comenzando el 1 de enero de 1489 (tabla I-2.2). En la Concordia se especican los derechos de los arrendadores y las obligaciones de los vecinos, 52 que fueron aceptadas por los representantes de las citadas poblaciones . Lo ms signicativo del contrato 53 es el elevado nmero de tributos que deben satisfacer los vecinos : terratge, erbatge, alfardes, raberatge, et dret de qualsevol arbres esplet de les terres aixi de reguadiu com de sequa, dret de morabati& e les al- masseres, drets de orts e los colomers del Senyor en les villes de Elda, asp, petrer e salines, e lo cens de la alqueria del alcadi de asp& e totes les vinyes e orts del Senyor& totes les rendes tot es drets e regalies& A lo que haba que aadir los presentes de navidad, Pascua de resurreccin y otros, que los mudjares de Petrer deban entregar al Seor, as como el tener que transportar la pasa al carregador de la villa de 54 Alacant. en 1497 el condado sera arrendado de nuevo por el conde, esta vez a mosn Vicente de Fachis . con el arrendamiento de las rentas del seoro, el conde de cocentaina, seor de la villa, obtena liquidez inmediata a la vez que se evitaba la gestin directa de la explotacin y la recaudacin de los impuestos. Entre los productos que se explotan y comercializan a nales del siglo XV en el condado, seran la pasa, el trigo, la cebada, el aceite, la batalafuga y el alasfor los ms remunerativos para la seora, pues son los que incluye especcamente en el contrato de arrendamiento. Por lo que se reere al comercio 46 F. J. JOVer MAeStre, comunicacin personal. 47 ArV, reAl cAncillerA, reg. 495, ff. 504-511. 48 AMc, signatura c-595/14, medicin del trmino entre castalla y Petrer (olim 409/14 da 1772). traslado del documento de 1503. 49 ARV, PROTOCOLOS NOTARIALES, Gonzalo Fernndez, nm. 861, 27 de febrero de 1582; ARV, PROTOCOLOS NOTA- riAleS, Gonzalo Fernndez, nm. 862, 1 de mayo de 1583. 50 APP, PROTOCOLOS NOTARIALES, Garca Arts, 9 de noviembre de 1478, nm. 589; J. RICHART GOM, Inventarios de castillos& op. cit., p. 178. 51 ARV, PROTOCOLOS NOTARIALES, Frances Soler, 19 de diciembre de 1488, reg. 2169, ff. 83-94v.; J.A. BARRIO BARRIO, J.V. CABEZUELO PLIEGO, Rentas y derechos seoriales de las moreras del valle de Elda a nales del siglo XV. Actas del VII Simposio Internacional de Mudejarismo. teruel, 1999, pp. 46-50. 52 ArV, PrOtOcOlOS nOtAriAleS, Frances Soler, 2 de enero de 1490, reg. 2170, ff. 1-3 y 68-69. 53 J. tOrr, del almagram a las particiones& op. cit. 54 Ace 28, p. 73, lo citan de diAGO, Apuntamientos, tomo 1, m 55, folio 260. 71 Sabina Asins Velis de la pasa a pequea escala, en Petrer debi de ser muy activo. en 1504, cilim Miclin vendi a Gaspari Valenti, mercader de Valencia, 200 quintales de pasa del trmino de la villa, por el precio de 8 sueldos 55 moneda de Valencia cada quintal, que deba llevar a Alicante . ese mismo ao, debido a la sequa que 56 afectaba a los campos , los mudjares de Petrer compraron al mercader Gaspar rull 50 cahizes de trigo al precio de 46 sueldos el cahiz, y 50 cahizes de ordeum a 16 sueldos el cahz. Adems de los campos destinados al cultivo, la extensin del terreno dedicado a pastos en el territo- rio de Petrer era notable, suciente para su cabaa ganadera y para alimentar al ganado forastero, que entraba en los meses de octubre a diciembre y se quedaba hasta la primavera. en 1504 Johan roig de corella arrend a Manuel diez, seor de la villa de Andilla el derecho de herbaje que le perteneca en 57 elda, Salinas y en el trmino de Pua, por un perodo de 6 aos y un precio de 40 libras cada ao . An- dilla, segn consta en el censo de 1510 posea un importante nmero de cabezas de ganado, y su seor 58 presentaba con cierta regularidad clams ante el tribunal dels Amprius . Acerca del nmero de habitantes durante el siglo XV y su relacin con el espacio cultivado, la poblacin, como habamos comentado anteriormente, era escasa para la capacidad agrcola y ganadera del trmino. en el ao 1431 la localidad contaba al menos con 36 fuegos, que corresponderan a unos 162 habitantes, cantidad que se increment hasta unos 72 vecinos (cerca de 324 habitantes) en el ao 1488 y hasta unas 77 familias 59 (alrededor de 346 habitantes) en 1493 . Gracias a un listado del ao 1478 conocemos el nombre de 67 de esas familias, cantidad bastante signicativa. Entre ellas destacan por su mayor representacin numrica los Alazla, Alfacar, Almaxi, Almielli, Anbran y Arrufe/rufa. Otro listado, del ao 1489, nos permite ampliar la 60 nmina de linajes ms numerosos con los Alaig, Alaycon, Alhafar, Annaxar, Melich y Berriz . Tabla I-2.2. clusulas del arrendamiento del condado de elda (Fuente: ArV, PrOtOcOlOS nOtAriAleS, Frances Soler, nm. 2169, 19 de diciembre de 1488, ff. 83-94v.) DERECHOS DE LOS ARRENDADORES molins forns de coure pa olleries gerreries cantereries tenheries e drets de salmedinatge drets de saboneries& panaderies e banys terratge erbatge alfardes raberatge et dret de qualsevol arbres esplet de les terres aixi de reguadiu com de sequa dret de morabati& e les almasseres drets de orts e los colomers del Senyor en les villes de elda asp petrer e salines e lo cens de la alqueria del alcadi de asp& e totes les vinyes e orts del Senyor& totes les rendes tot es drets e regalies& tienen derechos en las herencias de los mudjares, sobre los delincuentes y sus bienes, pueden emitir penas pecuniarias. Se incluye un apartado de rosegas, rditos, deudas, reparaciones de molinos, baos. que los dits arrendadors puixen haure liberament tots los blats olis sivades e qualsevol altres esplets e fruyts de les dites viles e loch& en cuanto a los presentes de navidad, Pascua de resurreccin y otros & sien tots dels dits arrendadors exceptat lo de Petrer lo qual resta al dit Senyor * GASTOS A PAGAR POR LA ALJAMA que perquant en les dites viles e loch ha bestiars e besties les quals acostumen de talar los blats aixi de sequans com de reguadius e los arbres e vinyes& las aljamas deben tener guardianes y pagarles sus salarios. Adems las aljamas deban pagar al colector de los arrendadores 60 libras: las villas de elda y Aspe 15 y 30 libras respectivamente, y la aljama de Petrer y el lugar de Salinas 7 libras y 10 sueldos cada una. 55 ArV, PrOtOcOlOS nOtAriAleS, Miguel Frigola, 20 de mayo de 1504, nm. 3253. 56 ArV, PrOtOcOlOS nOtAriAleS, Miguel Frigola, 7 de octubre de 1504, reg. 3253. 57 ArV, PrOtOcOlOS nOtAriAleS, Miguel Frigola, 11 de julio de 1504, reg. 3253. 58 cabezas de ganado en el censo de 1510: elda 88, Salinas 1.004, Petrer 1.436, Andilla 8.599 (ArV, reAl 514, ter., ff. 57-61. r. GArcA crcel, el censo de 1510& op. cit., pp. 173, 175, 176. V. GrAUllerA SAnZ, el territorio y la jurisdiccin de la ciudad de Valencia. el tribunal dels Amprius. El mn urb a la Corona d Arag del 1137 als Decrets de Nova Planta. XVII Congrs d Histria de la Corona d Arag. Barcelona, 2000, p. 5. 59 Ao 1431: c. lPeZ rOdrGUeZ, Nobleza y poder poltico& op. cit., p. 101, nota 226). Ao 1488: r. VAlldecABreS rOdriGO, El cens de 1510. Relaci& op. cit., p. 555. Ao 1493: ARV, REAL, reg. 650, f. 35; ARV, MAESTRE RACIONAL, nm. 10222, f. 39v. 60 J. ricHArt GOM, Antroponimia mudjar& op. cit. * Segn lugares, poda haber ms de cincuenta derechos por los que los seores recaudaban ingresos. c. lPeZ rOdrGUeZ, nobleza y poder poltico& op. cit., p. 109-123. J. HinOJOSA MOntAlVO, la renta feudal de los mudjares alicantinos. en: e. Sarasa Snchez y e. Serrano Martn (eds.), Seoro y feudalismo en la Pennsula Ibrica, Vol. ii. Zaragoza, 1993, pp.111-128. Para el monedatge, M.t. Ferrer i MAllOl, Les aljames sarranes... op.cit., pp. 159-162 y para el conjunto pp. 123-180. 72 Seran bons, lleals, els e obedients vasalls CARACTERSTICAS DE LOS DIEZMOS en lo dit arrendament& van e son compresos tots los delmes complets e sen divisio alguna los quals hui lo dit spectable comte com a senyor de les dites viles e loch ha e reb entregament sens divisio e partitio alguna e li pertanyen ab titols e butles apostoliques axi de regadiu com de sequa e de totes altres vinyes. En los quals delmes es entesa e compressa la part la qual olim lo bisbe de Cartagena pretenia deure haver e rebre& IMPORTANCIA DEL CULTIVO DE LA PASA ...que per qualsevol preus que la pansa de les dites villes e loch se hagues de vendre les dites aljames ans e primerament sien tengudes donarne la fadiga als dits arrendadors ns en mil e cinchcents quintas en axi que la fadigua hasen a deliberar los dits arrendadors dins huit dies que per entre ells sen pugar ser consullta. En axi que passats les huit dies les dites aljames e universitats tinguen facultat de poder vendre. & portaran los dits mil hi cinchcents quintas de pansa al carregador de la villa de Alacant& la pansa de Elda e Petrer per tot setembre e la de asp ns a vint de setembre& e que nos puxa carregar ne traure pansa alguna com ni batafaluga ni alasslor sens litentia dels dits arrendadors e collectors de aquells. & la dita pansa e los dits fruits altres que coliran en ses vinyes e heretats& PREVISIONES EN CASO DE GUERRA U OTRAS CALAMIDADES & es pactat e convengut& que se en seguiren per qualsevol via e qualsevol temps durant lo dit arrendament guerres, mortalitats en les dites viles e losch termens de aquells per tan les dites rendes e drets de delmes ne valguessen menys en tal cas ha electio dels dits arrendadors de tenir o lexar lo dit arrendament. PRECIO DEL ARRENDAMIENTO se estipul en sexaganta quatuor mile solos per anno quoliber (3.200 libras por ao). el conde acord con sus acreedores Francesc Mir, Joan Alepuz y dionis Miquel que se les entregaran los 64.000 sueldos del precio anual del arrendamiento para condonar parte de lo que les adeudaba. 2. El seoro de los Coloma: dinamismo de los moriscos de Petrer en el ao 1513 el seoro pas por venta de los condes de cocentaina (Johan roi de corella y Juana Fa- 61 jardo) a Juan coloma , quien haba sido caballero y secretario del rey Juan ii y de su hijo Fernando el ca- tlico. en 1577, su nieto tambin de nombre Juan coloma fue nombrado primer conde de elda, por Felipe 62 ii . el condado de elda perteneci a la familia coloma hasta 1729, y despus de esa fecha a sus herederos 63 directos, los condes de Puonrostro y los condes de cervelln . en el contrato de compra-venta del con- dado, de 1513, se especican los acuerdos a los que llegan los condes de Cocentaina con Rodrigo Roig de corella, hermano del hasta entonces titular del seoro, y arrendador y colector en esos momentos de las villas de elda, Petrer y Salinas. rodrigo, por problemas de herencia paterna entre ambos hermanos, deba 64 65 aprobar la venta per mayor seguretat del dit mosen Coloma . como se expresa en el contrato, venden : las dichas villas de Elda, Petrer y Salinas con el huerto del seor que esta en Elda no obstante la donacion que del tiene hecha el dicho seor Conde con todos sus castillos fortalezas terminos montes dehesas aguas tierras propiedades heredades y possessiones de los dichos seor conde y condesa situados y estantes en las dichas villa y terminos de aquellas y a la dicha seoria perte- nescientes y con todos los vasallos assi hombres como mujeres de qualquier ley y condicion sean y con todas las rentas emolumentos e devenimentos que por los servicios servitudes e qualquier otros derechos& a la dominicatura& pertenescientes y con toda la jurisdiction civil y criminal alta e baixa mero e mixto imperio con los molinos carnecerias fornos almaceras terares y otras qualesquiere tierras assi cultas como incultas casas casalicios y otras qualesquiere cosas rega- lias y preheminencias de seor que a la senyoria de las dichas villas en qualquier manera y por qualquier causa via e razon pertenescan& que todo pase perpetualmente en pleno dominio al dicho comprador& francas& de todas obligaciones y cargos de censales como de violarios como de qualesquiera otras obligaciones.. por precio& de quarenta ocho mil libras& 61 la genealoga de los coloma en: G. SeGUrA HerrerO, c. POVedA POVedA, Catlogo del Archivo Condal de Elda (I). Elda, 1999, pp. 37-69; O. ESQUERDO, Nobiliario Valenciano. tomo i. Valencia, 2002 (reed.), pp. 109-128. 62 G. SeGUrA HerrerO, c. POVedA POVedA, Catlogo del Archivo Condal de Elda... op. cit., pp. 43-50. 63 G. SeGUrA HerrerO, c. POVedA POVedA, Catlogo del Archivo Condal de Elda... op. cit., pp. 69, 78-79. 64 APP, PrOtOcOlOS nOtAriAleS, Miguel Frigola, nm. 11102, 31 de octubre de 1513. 65 APP, PrOtOcOlOS nOtAriAleS, Miguel Frigola, nm. 11102, 26 de febrero, 22 de marzo, 19 y 21 de abril y 11 de agosto de 1513. Pudo haber un pre-contrato en AMO, cartes rebudes del 1497, s/f. 73 Sabina Asins Velis la posesin real de Petrer estaba a nombre de la condesa de cocentaina, por lo que vena obligada a vender per a la restitucion de su dot y creix y deba renunciar a sus derechos de posesin, lo que hizo 66 por acto aparte, liberando a su alcaide, jurados y aljama del homenaje que le prestaron . Aspe se haba enajenado ya a nales de 1497 al seor de Elche, Gutierre de Crdenas. Elda, Petrer y Salinas se ven- 67 dieron por 48.000 libras , de las cuales Juan coloma deba retener 30.023 libras, 10 sueldos y 6 dineros para quitar los censales que tenan contrados la aljama de Petrer, procedimiento al que sin duda habra 68 recurrido para abastecerse de cereales o para hacer frente a algunos pagos extraordinarios (tabla i-2.3) 69 y, a ttulo particular, los condes de cocentaina (tabla i-2.4) . en total la deuda era de 30.146 libras, 1 sueldo, 3 dineros. el porcentaje de esta deuda sobre la cantidad en que tasaron elda, Petrer y Salinas era muy elevado, el 64,87%. Tabla I-2.3. Pensiones que abonaba la aljama de Petrer en 1513 (Fuente: APP, PrOtOcOlOS nOtAriAleS, Miguel Frigola, nm. 11102, 3 y 4 de septiembre de 1513) PENSIN COMPRADOR RESIDENCIA (SUELDOS/ DINEROS) Joan anoguera y su hermana 1.000/0 Hija de Minrelli 128/3 Joan San, que agora es de Loazes 268,0 Jernimo Joan Xtiva 125,0 Capitol de Murcia (por razn de los diezmos) 800,0 Jaime Molt 450,0 TOTAL en LIBRAS= 138/11/3 2.771/3 Tabla I-2.4. censales que tenan cargados en 1513 Johan roig de corella y Juana Fajardo (Fuente: APP, PrOtOcOlOS nOtAriAleS, Miguel Frigola, nm. 11102, 3 y 4 de septiembre de 1513) QUITAR ABONO PENSIN INTERS COMPRADOR PERTENENCIA POR PENSIONES (S / D) ANUAL (S / D) Luis Ladrn Brazo militar 5 enero y julio 2.111/0 31.470 6,71 Monasterio de San Julin de Valencia Junio y diciembre 225,0 3.371 6,67 Monasterio de San Julin de Valencia navidad y San Juan 146/8 1.800 8,15 Vicent Joan Boil Julio y dic. 58,0 870 6,67 Luis Angel Exarch Brazo militar 15 de enero y julio 146/8 2.200 6,67 Bernat Almunia Brazo militar Febrero 368/4 6.000 6,14 Jernimo d Artes Brazo militar Feb. y agosto 183,0 2.800 6,54 Dolefa (pagaderos a micer Gallardo) Brazo militar Feb. y agosto 514/6 7.717 6,67 Mujer de micer Crespi (pagaderos a Alonso Feb. y agosto 166/8 2.500 6,67 Fajardo) 66 APP, PROTOCOLOS NOTARIALES, 26 de mayo de 1489, nm. 20070. Informacin gentileza de Jaime Richart; APP, PRO- TOCOLOS NOTARIALES, Guillem Peris, 23 de mayo de 1498, nm. 23821; APP, PROTOCOLOS NOTARIALES, Miguel Frigola, nm. 11102, 4 de septiembre de 1513. la dote de la condesa sobre Petrer ascenda a 7.500 libras. con las ocho mil libras que se depositaron en la sacrestia de la Seu de Valencia por coloma, se compraran dos censales, cuya propiedad quedara a nom- bre de la condesa. con la cantidad sobrante se compraran censales hasta 3750 libras para la seguridad del creix de la seora. 67 Venta y censales en: APP, PrOtOcOlOS nOtAriAleS, Miguel Frigola, nm. 11102, 3 y 4 de septiembre de 1513. 68 el origen de los censales en los municipios en: J.V. GArcA MArSillA, Vivir a crdito& op. cit., pp. 281-297. en las cortes de 1403, Martn i haba concedido, a peticin del estamento militar que ninguna universidad pudiera vender o cargar censales sobre sus bienes sin licencia previa de su seor, consiguiendo as control sobre las nanzas de los municipios (C. L- PeZ rOdrGUeZ, Nobleza y poder poltico& op. cit., p. 38). 69 los censales en: APP, PrOtOcOlOS nOtAriAleS, Miguel Frigola, nm. 11102, 3 y 4 de septiembre de 1513. el 26 de enero de 1519 Juan roiz de corella vende unos censos anuos a su hermano rodrigo (Archivo de la catedral de Valencia, perg. 4910). 74 Seran bons, lleals, els e obedients vasalls QUITAR ABONO PENSIN INTERS COMPRADOR PERTENENCIA POR PENSIONES (S / D) ANUAL (S / D) Vicent afont Feb. y agosto 277/10 4.080 6,81 Miguel Aliaga notario Feb. y agosto 402,0 6.015 6,68 Costansa Corella noble Feb. y agosto 1.566/8 23.500 6,67 Costansa Corella noble Feb. y agosto 1.333/4 20.000 6,67 Joan Centelles Brazo militar Marzo y sep. 400,0 6.000 6,67 Batista Ferrer de Castellvi Brazo militar Marzo y sep. 1.000,0 15.000 6,67 Jordi de Cardona y/o Manuel Piera Brazo militar Marzo y sep. 289,0 4.350 6,64 Cetina Brazo militar Junio y dic. 1.210,0 18.150 6,67 Jaime Farina Brazo militar Mar., jun., sep., dic. 1.084,0 16.260 6,67 Na Francina Gil Mar., jun., sep., dic. 876,0 13.740 6,38 Bernat Conill Abril y oct. 333/4 5.000 6,67 Pere Cerver Brazo militar Abril y oct. 500,0 7.500 6,67 Viuda Joan Abril y oct. 300,0 4.500 6,67 Manuel de Vilanova Brazo militar Junio y dic. 300,0 4.500 6,67 Jaime Farina Brazo militar Abril, agosto, dic. 3.866/8 58.000 6,67 Governador de Xtiva Brazo militar Abril y oct. 222/4 3.362/6 6,61 Guillem de Moncada Brazo militar Abril y oct. 711,0 10.665 6,67 Jaime Bou Brazo militar Abril y oct. 66/8 1.000 6,67 Costansa Corella noble Abril y oct. 300,0 4.500 6,67 Senyora del Boy Mayo 100,0 1.500 6,67 Joan de Corella Brazo militar Abril y oct. 2.800,0 42.000 6,67 Luis Aguil Brazo militar Mayo y nov. 2.000,0 30.000 6,67 Miracle Brazo militar navidad y San Juan 1.000,0 15.000 6,67 Luis Coll navidad y San Juan 1.146/8 17.200 6,67 Lanalan Lanol Brazo militar Junio y dic. 858/10 12.882/10 6,67 Costansa Corella noble navidad y San Juan 511,0 7.730 6,61 Herederos de micer Joan Fau Agosto 236,0 3.740 6,31 Joan de Rocafull Brazo militar Junio 500,0 8.000 6,25 Gaspar Ribelles Brazo militar Septiembre 266/8 4.000 6,67 Joan de Calatayut Brazo militar Marzo y septiembre 1.066,0 16.000 6,66 Muller den Gaspar Rull Junio y dic. 1.333/4 20.000 6,67 Duque de Ganda Brazo militar Junio y dic. 1.200,0 18.000 6,67 Angel Exarch Brazo militar enero y julio 160/10 2.246/8 7,16 Francisco Riquelme navidad y San Juan 800,0 12.000 6,67 Rodrigo de Corella Brazo militar Feb., jun., octubre 3.000,0 45.000 6,67 Rodrigo de Corella Brazo militar Abril, agosto, oct. 3.000,0 45.000 6,67 Alynnos() de Xtiva 533/4 8.000 6,67 Joan de Calatayut Brazo militar 525,0 7.000 7,50 TOTAL en LIBRAS = 30.007/10 Precio de venta de elda, Petrer y Salinas a Juan coloma = 48.000 libras censales cargados (condes de cocentaina y aljama de Petrer) = 30.146 libras, 1 sueldo, 3 dineros. % del valor de los censales sobre el precio en que se tasaron elda, Petrer y Salinas = 64,87% la venta del condado se produjo en un momento en que se increment la presin sobre los mudjares del reino. Por cunto se reere al nmero de ellos que habra en ese momento en la villa, si a nales del siglo XV Petrer contaba con unas 77 familias (cerca de 346 habitantes), la poblacin alcanz en 1510 75 Sabina Asins Velis 70 la cifra de unos 99 vecinos (alrededor de 445 habitantes) . de ellos, conocemos en el ao 1513 el nom- bre de 93 familias, cantidad tambin bastante representativa. Sern los Aacay, Aladich, Alami, Alazla, 71 Almielli, Annayar, rufa, alema/Xuleymen, Mamili y Mar, las familias ms numerosas . todos ellos se vieron afectados por el decreto de 4 de abril de 1525 que ordenaba su bautismo forzoso, por el que 72 adems se les obligaba a cambiar de nombre . los vecinos de Petrer pasaron de llamarse Mahomat, Amet, Yaye, Abrahim, ahat, a llamarse Joannes, Gaspar, Balthasar, etc.; sin embargo, pudieron man- tener su apellido. el nmero de habitantes continu aumentando a lo largo del siglo XVi y gracias al listado del ao 1563, para el desarme de los moriscos, conocemos la liacin de los 127 hombres y 6 viudas que en l 73 se incluyen, lo que nos indicara una poblacin entorno a los 598 habitantes . esta cantidad de moriscos en Petrer es superior a la facilitada en el censo de 1565-1572, realizado por Jernimo Muoz, quien cifra 74 en 97 las familias de moriscos de la villa . A los nombres de las familias que ya hemos citado para el trnsito de los siglos XV al XVi hay que aadir, entre otros, los Almanari, Almenrich, Baroni, castella- ni, catdon-aydon, como, Guiniguet, Mecliu, Mocharnal, Palla, Panchut-Paut y Perpir, familias que permanecern en la villa hasta su expulsin en el ao 1609. Ser a partir de 1563 cuando se observa un mayor dinamismo de la poblacin en Petrer. los datos de que disponemos nos permiten estimar que en el trnsito de los siglos XVi-XVii el nmero de habitantes 75 se increment notablemente, hasta alcanzar en el ao 1608 las 245 casas (unos 1.102 habitantes) . en este perodo destaca tanto el volumen numrico de grandes familias, en general los apellidos que hemos citado hasta el momento, como la incorporacin de nuevos linajes, como dadi, dayo, Maglin, Xiquillo 76 o Xuarez, entre otros . la importancia numrica de los pueblos del Vinalop Medio ha sido puesta de relieve por J. Piqueras, quien indica que estas villas, pertenecientes scalmente a la llola de elda, eran de gran tamao, superiores a 200 casas, lo que las asemejaba a los pueblos cristianos que contaban 77 aproximadamente con unas 230 casas . Los protocolos notariales de nales del siglo XVI dan fe del dinamismo de los moriscos y de los dos condes que se sucedieron en ese momento. Por un lado, don Juan Prez calvillo y coloma, primer conde de elda, solicit en el ao 1581 facultad para comerciar sin pagar derechos, en cantidad de 18.000 hasta 20.000 libras. Gracias a este documento conocemos que el conde tena una renta cercana a las 12.000 libras de la villa de elda y de los lugares de Salinas y Petrer y de otros censales y posesiones que dis- frutaba en la ciudad y reino de Valencia y en el reino de Mallorca. La nalidad del conde era comprar seda et mutat illius forma vendere. el procurador patrimonial del rey acogindose a los dictados de los 78 Fueros de Valencia le record la imposibilidad de practicar el comercio a nobles y militares , peticin en la que insisti el conde quien, en un extenso memorando, aleg sus derechos a comerciar, entre ellos: 70 ArV, reAl 514, ter., ff. 57-61. 71 J. ricHArt GOM, Antroponimia mudjar& op. cit. 72 el proceso de conversin en r. BenteZ SncHeZ-BlAncO, cristianos o bautizados la trayectoria inicial de los moriscos valencianos, 1521-1525. Estudis (Revista de Historia Moderna) 26, 2000, pp. 11-36; M.A. GONZLEZ i HERNNDEZ, Musul- mans, jueus i cristians a les terres del Vinalop (1404-1594). Petrer, Alicante: centre d estudis locals del Vinalop. col.lecci Algo- leja, n 5, 2002; J.F. PARDO MOLERO, De mudjars a moriscos. La conversi forada. En: Entre terra i fe. Els musulmans al regne cristi de Valncia (1238-1609). Valencia: Universitat de Valncia; SECC, 2009, pp. 87-106. Para el valle de Elda: L.F. BERNAB POnS, la comunidad mudjar y morisca de elda (siglos Xiii-XVii). Historia de Elda, tomo i, op. cit., pp. 187-198. 73 ARV, REAL CANCILLERA, reg. 563, vol. III, ff. 1076r.-1077r.; ARV, REAL CANCILLERA, reg. 564, vol. III, ff. 1264r.- 1272v. 74 t. HAlPerin dOnGHi. Un conicto nacional: moriscos y cristianos viejos en Valencia. Valencia: institucin Alfonso el Magnnimo, 1980, Apndice de Poblacin. 75 S. ASinS VeliS, M.c. ricO nAVArrO. la poblacin morisca del condado& op. cit., p. 58. 76 S. ASinS VeliS, M.c. ricO nAVArrO. la poblacin morisca del condado& op. cit., pp. 98-111. 77 J. PiQUerAS, Geografa de la poblacin morisca al regne de Valncia al comenament del segle XVii. en: Entre terra i fe... op. cit., p. 178, gura de p. 198. 78 lo dit Joan Coloma es noble, et ulterius es titulat, co es comte e quant no fora sino noble solament, o militar, no podria ne- gociar ne tractar ni francament ni de altra manera com lo tracte negociatio, y commerci e mercancia sia prohibit als nobles y militars, y& contrari a la dignitat de noblea& y axi quant (mes) ilustre es la dignitat y titol tant mes sies prohibit el commerci y tracte al quilate (ArV, BAilA A, letra P, Procesos, n 2526, s/f). desde los primeros fueros de Jaime i les estuvo prohibido al estamento militar ejercer legalmente la usura o el comercio. FUrS, Jaime i, lib. iV, rub. Xiiii, cap. iii. 76 Seran bons, lleals, els e obedients vasalls que al tener doce hijos era de justicia se le concediera la franqueza de derechos especiales y personales; que los fueros no prohiban que se pudiera comerciar con la cantidad que se tena al contado, que era la que le sobraba de su renta y patrimonio, por lo que poda emplearla en lo que a l le parezca, pues era hacienda propia. Adujo incluso que despus de ms de cien aos, los caballeros y personas nobles y tituladas de la ciudad y reino de Valencia, por silencio del rey y de sus ociales, haban estado tratando y comerciando libremente arrendando los derechos de la ciudad y ocupndose en otros tratos que eran ms incompatibles con la dignidad ilustre que el comercio. Argumentaba adems que cuanto ms principal era un caballero ms obligacin tena de dejar a sus hijos hacienda y patrimonio, adems del mayorazgo, 79 para poder dotar a sus hijas y repartir bienes entre sus hijos . coincidiendo con este momento, se observa en Petrer una importante actividad constructiva, similar a la que se desarrolla en la vecina elda. el incremento en el nmero de habitantes llevara en Petrer a la ampliacin del rea destinada a viviendas, como se deduce del testamento de Angela Alhaig y de Alme- nig quien deja a su hijo Pedro la casa dels solars nous, la qual li ha de ajudar a obrar lo dit son germa 80 Bernat . A la vez se realizaron obras religiosas de gran envergadura, como el encargo hecho a Gregorio Mir, obrer de vila vecino de Villena, para terminar la iglesia de San Bartolom de Petrer, o a domini- 81 cus de Cheverria para edicar la Iglesia de Nuestra Seora de los ngeles del Monasterio de Elda . entre la arquitectura civil destaca, a la vista del presupuesto invertido, la construccin de los Archs del Riu de Petrer, obra conocida en la actualidad como Acueducto de San rafael en la rambla de Pua, terminada en el ao 1583 (Figura i-2.1). la direccin del trabajo se encarg a Guillem Pasqual de Jaca, fuster e mestre de fer molins, trabajo por el que le haban pagado 510 libras el Justicia y los Jurados de la villa de elda. en un principio, se estipul que los arcos y un azud se construyeran en la rambla de caprala, para lo que Pasqual haba cortado mucha piedra en la primera pedrera, nivelado y abierto los cimientos; sin embargo no se sigui porque mudaren lo designe y en lloch de dits edifcis y aut de dalt u en apres los dits archs del Riu de Petrer. A Guillem Pasqual tambin le encargaron abrir una mina en lo terrer del Almorchon, as como hacer cinco partidores en la equia nova del Negret de elda y minas para que pasara el agua de la Fuente del chopo, lo que nos informa del inters por dotar el espacio irri- 82 gado con mayores recursos de agua . Otra obra de importancia fue la construccin de una nueva almazara en elda en el ao 1593. la obra fue encargada por el segundo conde de elda, Antonio coloma, quien pagara 2.500 reales castellanos para que pudiera llevarse a cabo. el trabajo sera realizado por los albailes Bartholome dadi, morisco de Petrer, y Gines Milich Montal, morisco de elda, bajo la supervisin del citado dominicus de cheve- rria. Se levantara junto a los molinos en el sitio y lugar donde solia estar una xaboneria antiguamente, y tendra 50 palmos de ancho y 130 palmos de largo (es decir, unos 10 x 26 metros). de alto deba tener 20 palmos (4 metros), o lo que pidieren los husillos de las almazaras viejas que se iban a reutilizar; las 83 paredes tendran un grosor de 2 palmos y medio (50 centmetros) . Conamos que en un futuro las ex- cavaciones arqueolgicas la puedan sacar a la luz. de igual modo, como veremos a continuacin, los protocolos notariales nos informan del dinamismo de la comunidad morisca del condado, sobre todo en cunto se reere a la extensin del espacio cultiva- do y a la constante compra-venta de los bancales en produccin. los topnimos de las distintas partidas cultivadas por los moriscos de Petrer, y que se han mantenido casi en su totalidad hasta la actualidad, nos indican la movilidad de que disponan, tanto por el trmino de Petrer como por Salinas, Sax y elda, lu- gares a donde se desplazaban a cultivar las tierras que posean en la marjal, en la huerta o en el secano, y cuyo diezmo y el resto de tributos que se les exiga era tan signicativo para la economa de la seora. 79 ArV, BAilA A, letra P, Procesos, n 2526, s/f 80 ArV, PrOtOcOlOS nOtAriAleS, Gonzalo Fernndez, n reg. 863, 19 de enero de 1586. 81 S. ASinS VeliS, M.c. ricO nAVArrO, G. SeGUrA HerrerO, Construccin de las Iglesias del Condado de Elda durante el perodo morisco (en redaccin). 82 ArV, PrOtOcOlOS nOtAriAleS, Gonzalo Fernndez, n reg. 862, 27 de septiembre (testamento de Guillem Pasqual de Jaca) y 27 de noviembre de 1583. 83 AAM, cosme Alamora, 11 de julio de 1593. 77 Sabina Asins Velis Fig. I-2.1. Archs del Riu de Petrer, construidos por Guillem Pasqual de Jaca en 1583, actualmente conoci- dos como Acueducto de San rafael Las partidas en cultivo en el siglo XVI los moriscos de Petrer trabajaron tanto la huerta y cultivos en secano mejorado, junto a la villa, como, con seguridad al menos desde mediados del siglo XVi, los parajes ms alejados del trmino. Para ubicar los campos eligieron los valles cuaternarios interiores y los piedemontes de las sierras, mejorando al me- nos parte de sus cultivos con el aporte que les proporcionaba el agua de los manantiales. esta ampliacin del espacio cultivado la podramos relacionar con el signicativo incremento de la poblacin que, como hemos comentado, pas de tener unos 324 habitantes en 1488 a unos 1.102 habitantes en el ao 1608. como en el siglo anterior, conocemos algunas caractersticas de la explotacin del seoro gracias a los detalles de un contrato de arrendamiento del condado de elda del ao 1583. los campos que cul- tivaban los agricultores de Petrer estaban sujetos, entre otros, al pago de diezmo, alfarda y pecho. este 84 ltimo impuesto pudo derivar en las villas del Vinalop Medio del almagram islmico , pues en Petrer, segn se desprende de las ventas de bancales en la huerta, el pecho se pagaba nicamente sobre las tie- rras irrigadas. lo que no se puede deducir es la cantidad anual que se cargaba segn la extensin de la parcela, o si variaba dependiendo del tipo de cultivo, pues en unas se indica 2 sueldos, en otras 2 sueldos 85 y medio, incluso 6 sueldos y 5 dineros y hasta 14 sueldos . no obstante, con posterioridad, en la carta de Poblacin de 1611, el pecho s que se expresa como una cantidad ja por tahlla en las tierras de regado y riego eventual. Se pagaban 6 libras por dos tahllas en la huerta, 2 libras por 3 tahllas en las Vias de Arriba con riego eventual, 3 libras en la partida de las Oliveras, con riego eventual, y 4 libras 86 en las Vias de Abajo, con el riego del agua de elda . 84 J. tOrr, del almagram a las particiones de frutos& op. cit., p. 205. 85 ARV, PROTOCOLOS NOTARIALES, Gonzalo Fernndez, nm. 861, 30 de diciembre de 1581 (libro de 1582); ARV, PRO- TOCOLOS NOTARIALES, Gonzalo Fernndez, nm. 862, 23 de noviembre de 1583; ARV, PROTOCOLOS NOTARIALES, Gonzalo Fernndez, nm. 863, 9 y 20 de enero de 1586. 86 Ace, nm. 1046. 78 Seran bons, lleals, els e obedients vasalls en 1583 don Juan coloma arrend el condado durante cuatro aos a su hijo Antonio, quien deba 87 pagarle por ello 6.200 libras al ao . En un extenso convenio se especican las condiciones y se indica que en l iban incluidas las rentas ordinarias y las regalas extraordinarias, diezmos, frutos, primicias y dems rentas, tanto de elda, como de Petrer y Salinas, incluida la huerta llamada de domingo (plantada de olivar y vias). el conde de elda, Juan coloma, se reservaba para s la institucin civil y criminal, el mero y mixto imperio y todas las penas civiles y criminales. entre los privilegios del conde constaban: que se escogiera la mejor uva para hacer el vino que l necesitaba, sin descontar nada del arrendamiento (incluso se contempla que se le tendra que llevar donde el estuviese, si as lo requera). de igual forma, si precisaba paja para su caballera, tanto si estaba en elda como en Alicante, se le debera llevar sin des- contarlo del arrendamiento. el trigo, la cebada o el aceite que el conde necesitara para su casa se le deba de dar, pero a cuenta del arrendamiento. Adems el conde estipulaba que se les entregara a los frailes de nuestra Seora de los ngeles de elda el vino que cada ao les daba de limosna, descontndolo del precio del arrendamiento. entre los pagos anuales a los que haca frente el conde de elda se indica en los captulos que su hijo Antonio coloma se deba hacer cargo de pagarlos, entre ellos: la pensin que le daba al mismo Antonio por alimentos (1.500 libras), a los tres clrigos de elda y Petrer (50 libras a cada uno), al clrigo de Salinas (35 libras), al Alcayde de elda (30 libras), a los Alcaydes de Petrer y Salinas (20 libras a cada uno), a los dos alguaciles de elda y Petrer (10 libras a cada uno), al doctor Bartholome Gil (38 libras), a los frailes de elda (15 libras de limosna para carne), al sacristn de la iglesia de elda (10 libras), a Juan Prez Muoz, solicitador del pleito de las dcimas en roma (33 libras y 6 sueldos), ms a doa Juana de coloma, su hermana monja de la Santa Fe de toledo, lo que se le sola dar cada ao mientras no se le pagara su dote. igualmente deba hacerse cargo del pago de 891 libras del total de las pensiones de los censales que tena cargados el conde de elda, los nombres de cuyos receptores se incluyen en los captulos. en total los gastos de los que se haca cargo Antonio, descontando las 1.500 libras que l mismo reciba por alimentos, ascendan a unas 1.262 libras, ms la pensin de doa Juana coloma que no sabemos a cunto ascenda. Acto seguido, Antonio coloma encarg la administracin de este arrendamiento a Gaspar remiro, por un salario de 100 libras al ao ms 1/5 de la ganancia del arrendamiento, descontados todos los gastos. remiro se obligaba con ello a colectar los frutos (entre los que se indican trigo, cebada, alcanda, mijo, centeno y, ya elaborados, aceite, vino y pasas, que deba depositar en el granero, bodegas y ille- ras que le proporcionara Antonio coloma) y las rentas del condado, a cumplir con todos los requisitos puestos por el conde y a encargarse de tramitar el pago de todos los censales y cargos relacionados en el 88 prrafo anterior . todos estos pagos, desde luego, salan del trabajo de los agricultores del condado. Partidas de cultivo alrededor de la villa 89 el espacio cultivado en bancales rodeaba el ncleo urbano organizado en torno al castillo . el rea ms cercana a las viviendas estaba ocupada por la partida de la Huerta, que tena una extensin de 200 tah- llas (24 hectreas), como se deduce de la carta de Poblacin de 1611, a lo que aadiramos otros huertos 90 y algualejas que tambin estaban en cultivo al menos desde el siglo XVi, y que como se indica en la 91 misma carta se distribuyeron por autos particulares . las distintas sub-partidas de esta zona de huerta, dedicadas al cultivo de via y olivar preferentemente, as como a hortalizas, se identicaban mediante topnimos, como Almafra, Viley/Videy, partida del cam de la enia, del cam de les Vies, del cam de elda, del cam dellig (elche), de Xuqueta, senda del bancal del lup, partida de Mail Almehim, de 87 ArV, PrOtOcOlOS nOtAriAleS, Gonzalo Fernndez, n reg. 862, 13 de febrero de 1583. 88 ArV, PrOtOcOlOS nOtAriAleS, Gonzalo Fernndez, n reg. 862, 13 de febrero de 1583. 89 la primera cita localizada del vocablo bancal en Petrer data del ao 1581: ArV, PrOtOcOlOS nOtAriAleS, Gonzalo Fernndez, nm. 861, 30 de diciembre de 1581 (libro de 1582). 90 Venta de una algoleja en la boca del Riu de Petrer (rambla de Pua), frente al azud y al camino: ArV, PrOtOcOlOS nO- tAriAleS, Gonzalo Fernndez, nm. 4167, 17 de abril de 1580. 91 ACE, nm. 1046; T.V. PREZ MEDINA, M.C. RICO NAVARRO, La carta pobla... op. cit., pp. 159-170. 79 Sabina Asins Velis la Balsa, de la daya, Alqiubla, del Anafaraig/canafaraig, del Fossar, partida de la senda del cam de 92 novelda, del Arney (que pudo derivar en Guirney), del Fossar, etc . Adems en las inmediaciones del pueblo se ubicaban las partidas de secano que contaban con un 93 aporte eventual de riego, ocupando a nales del siglo XVI un total cercano a las 120 hectreas . estas partidas se denominan de los Olivares y de las Vias de Arriba, que se ampliaron con la partida de las 94 Vias de Abajo gracias a la llegada del agua de la Fuente del chopo de Villena . en enero de 1504 se estipul que, a cambio de un censo de 35 libras/ao, el agua de esta fuente se vertera al ro de Sax (Vi- nalop) por una acequia que construiran los vecinos de elda. desde all se volvera a canalizar el agua hasta llegar a elda. la villa de elda quedaba obligada a hacer una parada de estacas, tierra y atorfas procurando, a toda su posibilidad, que no se saliera el agua; a limpiar la acequia desde la Fuente del Chopo a la parada del Sendero; a hacer las reparaciones necesarias; a tomar el agua de cualquiera de las acequias de la parada de los Moros abajo en caso de que no bajara suciente agua; a hacer dos puentes a su costa, pero empleando peones de Villena; a permitir que los ganados de Villena abrevaran en la acequia dentro del trmino de sta ltima,& Posteriormente se ampliaran estos acuerdos; lo que se traducira en 1533 en la peticin de nulidad 95 del contrato , que concluir con la rma de nuevas condiciones en 1535, como el aumento a 80 ducados anuales por el agua. Finalmente, en 1536 se autoriz a la comunidad de elda la construccin de la Ace- quia del conde desde la Fuente del chopo hasta Sax, donde se verta el agua al Vinalop. cerca de elda el agua se desviaba por las Acequias de Abajo y de Arriba. esta ltima permita el riego de la partida de las Vias de Abajo de Petrer. como hemos comentado con anterioridad, las tierras de la Huerta y de las partidas de los Olivares y de las Vias de Arriba se regaban con el agua de la balsa que almacenaba la que llegaba desde la mina de Pua, 96 y que se distribua por acequias, una de ellas llamada en 1586 cequia major , sin duda de herencia anda- lus. los turnos de riego en el Petrer morisco se denominaban jornadas , que se conocan por nombres, como por ejemplo den Vanega , de Ananera , de Abontfalil() , de Benjahadi , del cadi alguacil , Item unam oram aqua congregata in balsa dicte ville in jornata nominata de Almuedin, jornata nominata 97 de Buelhaijeig, de vayad , jornata del alguasir, etc. , en las que compartan el agua varios regantes (en los registros notariales generalmente se cita a dos regantes adems del que hace la venta, por ejemplo: acompaada ab la aygua de Miquel Milich y de Francisco Almenig, adsociata cum aqua Joannis Abo- 98 maer et Joannis Alazarach, etc. ) . la disponibilidad de agua se media en horas (entre un cuarto de hora 99 y tres horas y media, en los documentos localizados) o tambin consta en Petrer ventas de una arroba . 92 ARV, PROTOCOLOS NOTARIALES, Gonzalo Fernndez, nm. 861, 1 de enero, 4 y 27 de febrero de 1582; ARV, PROTO- cOlOS nOtAriAleS, Gonzalo Fernndez, nm. 862, 11 de febrero, 11 de marzo, 27 de abril, 1 de mayo, 26 de julio, 19 y 25 de octubre, 15 de diciembre de 1583; ARV, PROTOCOLOS NOTARIALES, Gonzalo Fernndez, nm. 863, 20 de enero, 16 de febrero y 27 de julio de 1586. 93 ntese que la Font Antiga de crevillent regaba tambin unas 120 hectreas (e. GUinOt, S. SelMA, Las acequias de Elche y Crevillente& op. cit., p. 41) 94 Ace, nm 1168. negociaciones que deban ya estar en marcha, pues en 1493 el conde de cocentaina ya agradece el ofreci- miento del agua de la Fuente del chopo (AMV caja 724, exp. 72, citado por t.V. PreZ MedinA, dinamismo y continuidad ... op. cit., p. 48; T. PREZ MEDINA, Paisaje construido. La huerta de Villena... op. cit. 95 AGS, cOnSeJO reAl de cAStillA, Procesos, Pleitos y expedientes, leg, 95, f. 1, 24 de junio de 1533. 96 ArV, PrOtOcOlOS nOtAriAleS, Gonzalo Fernndez, nm. 863, 4 de enero de 1586. 97 ARV, PROTOCOLOS NOTARIALES, Gonzalo Fernndez, nm. 4167, 19 de agosto, 2 y 3 de octubre de 1580; ARV, PRO- TOCOLOS NOTARIALES, Gonzalo Fernndez, nm. 861, 27 de febrero de 1582; ARV, PROTOCOLOS NOTARIALES, Gonzalo Fernndez, nm. 862, 14 de octubre y 24 de diciembre de 1583; ARV, PROTOCOLOS NOTARIALES, Gonzalo Fernndez, nm. 863, 6 de febrero y 4 de mayo de 1586; APM, Cosme Alamora, 10 de diciembre de 1593. 98 ArV, PrOtOcOlOS nOtAriAleS, Gonzalo Fernndez, nm. 861, 27 de febrero de 1582: tres ores y mija de aygua en la bassa acompaada ab la aygua de Miquel Milich y de Francisco Almenig en les jornades de benjahadi y del cadi alguacil. ArV, PrOtOcOlOS nOtAriAleS, Gonzalo Fernndez, nm. 862, 14 de octubre de 1583: medietatem cuyusdam ore aque in jornata nominata de vay adsociata cum aqua Joannis Abomaer et Joannis Alazarach; ArV, PrOtOcOlOS nOtAriA- leS, Gonzalo Fernndez, nm. 4167, 19 de agosto y 2 de octubre de 1580. 99 ARV, PROTOCOLOS NOTARIALES, Gonzalo Fernndez, nm. 4167, 19 de agosto y 2 de octubre de 1580; ARV, PROTO- COLOS NOTARIALES, Gonzalo Fernndez, nm. 862, 4 de agosto de 1583; ARV, PROTOCOLOS NOTARIALES, Gonzalo Fernndez, n reg. 863, 4 de mayo de 1586. 80 Seran bons, lleals, els e obedients vasalls Por su parte, por los datos del ao 1617 sabemos que el reparto del agua para el riego de la partida de las Vias de Abajo segua las costumbres moriscas, por lo que en el siglo XVi dispondran de 30 das de agua repartidas de noviembre a marzo, siendo los tres primeros y los tres ltimos das de cada mes 100 para las tandas de Petrer, y un caudal durante 2 horas; cada hora se subdivida en 8 azumbres . tambin por los datos del siglo XVii sabemos que los vecinos de Petrer pagaban 50 libras anuales al conde de elda por utilizar el agua de esta acequia. el riego de esta partida, como hemos dicho dependiente de la acequia de Arriba, deba ser nocturno, ya que era por las noches cuando tena asignada el agua la villa de elda, como se indica en las denuncias que hicieron los eldenses en el ao 1583 contra Miguel de torreblanca (alcalde ordinario de la villa de Sax) y contra Juan y Alonso estevan: por haver hurtado el agua del riego de esta dicha villa a fuera de armas amenazando de matar a los que la guardavan por parte de la dicha villa si no les dexavan regar con ella& contravi- niendo los asientos y capitulaciones que la dicha villa de Elda tiene con la villa de Saix sobre el riego de la agua que la dicha villa de Elda tiene comprada de la ciudad de Villena que por pasar por el termino de la dicha villa de Saix riega la dicha villa de Saix los das desde que sale el Sol hasta que se pone y la dicha villa de Elda las noches desde que el sol se pone hasta que sale. La qual agua quitaron como digo es a mano armada fuera y violencia y con preparacin de grande escandalo y de poderse seguir muchos daos& . los vecinos de Sax abusaban, en opinin de los 101 de elda, por ser poca la pena de las capitulaciones viejas . 102 los elementos con que contaban los sistemas de riego estaban integrados por azudes , minas, balsas, ace- quias, partidores y boqueras. tambin debi haber una cenia, como se indica en la venta de fundos sive 103 bancals plantados de olivos en la huerta de Petrer partita dicta del Cami de la enia . de la importancia que tenan las conducciones de riego deja constancia el que uno de los tres ediles con que contaba la villa era 104 105 llamado de la cequia . en la huerta, la tierra se venda junto con el agua pero igualmente poda venderse 106 por separado, as como hacer donacin por dote matrimonial o dejarse en herencia . en el registro de una venta del agua que discurra a la balsa, de un cuarto de hora, por 5 libras y 10 sueldos se indica que se haba 107 pedido licencia para ello al magnicum gubernatorem et bajulum, Balthasar de Vargas . no obstante cuando se arrendaban los campos la situacin poda ser distinta, como por ejemplo se indica en las clusulas del de la Horteta de Batiste Llopis (heredad ubicada en elda lindando con Petrer) que inclua toda el agua de las acequias de Arriba y de Abajo, sin poder vender el agua por parte de los arrendadores, especicndose que 108 deban conservarla para el riego y riegos ordinarios de las vias y huertos de dicha heredad . Posteriormente, 109 en la Carta de Poblacin de 1611, se especica que la tierra no podra venderse separada del agua . 100 t.V. PreZ MedinA (1997), dinamismo y continuidad& op. cit., pp. 48-49. t.V. PreZ MedinA, Regados histricos del Pas Valenciano. La cuenca del Vinalop en la poca moderna. tesis doctoral Universitat de Valncia, pp. 170-176 (cortesa del autor). 101 ArV, PrOtOcOlOS nOtAriAleS, Gonzalo Fernndez, n reg. 862, 25 de abril, 6 y 21 de mayo de 1583. 102 cerca de la villa haba al menos dos azudes en la rambla: ArV, PrOtOcOlOS nOtAriAleS, Gonzalo Fernndez, n reg. 861, 27 de febrero de 1582 (de so el aut ns al altre aut). 103 ARV, PROTOCOLOS NOTARIALES, Gonzalo Fernndez, n reg. 861, 27 de febrero de 1582; ARV, PROTOCOLOS NOTARIALES, Gonzalo Fernndez, n reg. 862, 24 de diciembre de 1583; ARV, PROTOCOLOS NOTARIALES, Gonzalo Fernndez, n reg. 863, 9 de enero de 1586; AAM, Cosme Alamora, 29 de septiembre de 1603. 104 t.V. PreZ MedinA, intervencionismo condal y estatal en la administracin de una villa seorial valenciana (Petrer, s. XVii). Alebus 2/3, 1992/1993. en ArV, PrOtOcOlOS nOtAriAleS, Gonzalo Fernndez, n reg. 863, 4 de mayo de 1586, consta el morisco Juan Alazarach de la equia. 105 APM, cosme Alamora, seccin elda, 23 de marzo de 1607. 106 ARV, PROTOCOLOS NOTARIALES, Gonzalo Fernndez, nm. 4167, 19 agosto, 2 de octubre y 4 de noviembre de 1580; ARV, PROTOCOLOS NOTARIALES, Gonzalo Fernndez, nm. 862, 4 de agosto de 1583; APM, Cosme Alamora, 10 de diciembre de 1593; APM, Cosme Alamora, seccin Elda, 23 de septiembre y 18 de diciembre de 1607. 107 AAM, cosme Alamora, 10 de diciembre de 1593. 108 APM, cosme Alamora, seccin elda, 11 de febrero de 1607. 109 ACE, nm. 1046; T.V. PREZ MEDINA, M.C. RICO NAVARRO, La carta pobla... op. cit., pp. 159-170. Para otras zonas de Al-Andalus: c. trillO SAn JOS, el tiempo del agua& op. cit., pp. 262-273. 81 Sabina Asins Velis tambin junto a la villa se cultivaba en la Caada darrere lo Castell, donde haba bancales de tierra 110 blanca e higueras . en esta partida, Pero Gonalez, zahor de Segovia, se comprometi en el ao 1583 a encontrar agua: havent vist y reconegut la partida del terme de dita vila de la partida del Castell y havent certi- cat als honorables justicia y jurats de dita vila que conforme lo que enten de aygues hay aygua en dita partida. Per o promet donarlos y descubrirlos tres teules de aygua corrent en dita partida la qual traura a sa despesa e si alguna cosa li anticiparan sia ab fermanes de restituendo. Ab parte y conditio que trenta dies apres de haver corregut dita aygua apres de trate li hajen de pagar quatre mil reals castellans e si mes fera se li haja de pagar al respecte e si menys fera se li haja 111 de disminuir del preu a la mateixa raho . igualmente disponan de aporte de agua las tierras que rodeaban la casa de la partida de Santa Brbara, construida con anterioridad a 1586, y que Francisco coloma (caballero de la Orden de San Juan de Jerusaln, comendador de la encomienda de Aragn, y que en esos momentos se encontraba viviendo en Salinas) cedi a su hermano carlos en esa fecha, junto con una fuente, una balsa y la misma ermita 112 de Santa Brbara, ubicadas frente a las montaas de la Font de noguera . el cultivo de tierras en re- gado en la partida de noguera est documentado desde el ao 1576, pues en esa fecha Gaspar remiro d espejo prohibi regar con aguas de caprala y noguera las heredades contiguas, bajo pena de 50 libras, 113 ordenando a los campesinos que las dejaran circular libremente para el consumo humano en elda . Precisamente la canalizacin del agua de elda se mejor en 1583, cuando estuvo terminado el llamado en la actualidad Acueducto de San rafael y en su da Archs del Riu de Petrer. cerca tambin de la villa se cultivaba via en la partida de Salinetas, en la del Pedregal y en la 114 partida del Almorchon . en esta partida, en el ao 1582, comenz un cristiano de elda, Francisco de Montalvan, a comprar tierras a los moriscos de Petrer, en nombre de Gaspar remiro. en total pag 69 libras, 10 sueldos y 5 dineros a Juan Panchut, diego aynoch, domingo castorli, Jose Xuarez, diego Albayon, Gaspar Aduhamen, luis ramon e isabel Perez conyuges, isabel Milich viuda de Pere Sanea 115 y a Ferrando castorli por las tierras colindantes que estos trabajaban . en esta partida del Almorchon 116 se distinguan la partida del retamar del Almorchon y la partida de la caada del llentiscle . desta- camos que esta ltima partida estaba frente a la tierra del morisco nofre aet, alias Berbegal (que viva en Petrer en 1586), apodo que perdurar a travs de los siglos en el topnimo de la foya y el monte de 117 Berbegala . el espacio cultivado por los moriscos, junto a la villa de Petrer, ocupaba prcticamente todo el valle hasta los trminos de elda y Sax y los piedemontes de las sierras cercanas (la Figura i-2.2, tomada en la dcada de los 50 del siglo XX, nos puede dar una visin bastante aproximada), tierras clasicadas en la actualidad con capacidad agraria moderada, pero que an as se trata de los suelos cuaternarios ms productivos del municipio, sobre todo si se mejoraban con el aporte de agua como as hicieron desde poca islmica. 110 ArV, PrOtOcOlOS nOtAriAleS, Gonzalo Fernndez, n reg. 861, 27 de febrero de 1582. 111 ArV, PrOtOcOlOS nOtAriAleS, Gonzalo Fernndez, n reg. 862, 1 de agosto de 1583. 112 ArV, PrOtOcOlOS nOtAriAleS, Gonzalo Fernndez, n reg. 863, 24 de abril de 1586. 113 en 20 de marzo de 1576: l. AMAt SeMPere, Elda, tomo II. Elda: Excmo. Ayuntamiento de Elda; Caja de Ahorros del Mediterrneo, 1875; reproduccin facsmil, 2004, pp. 270-271. 114 ARV, PROTOCOLOS NOTARIALES, Gonzalo Fernndez, n reg. 861, 13 y 14 de enero, 27 de febrero de 1582; ARV, PrOtOcOlOS nOtAriAleS, Gonzalo Fernndez, n reg. 863, 4 de enero y 24 de febrero de 1586. 115 ArV, PrOtOcOlOS nOtAriAleS, Gonzalo Fernndez, n reg. 861, 13 de enero de 1582. 116 ARV, PROTOCOLOS NOTARIALES, Gonzalo Fernndez, n reg. 862, 1 de mayo de 1583; ARV, PROTOCOLOS NOTA- riAleS, Gonzalo Fernndez, n reg. 863, 23 de enero de 1586. 117 ArV, PrOtOcOlOS nOtAriAleS, Gonzalo Fernndez, n reg. 863, 23 de enero de 1586. 82 Seran bons, lleals, els e obedients vasalls Fig. I-2.2. Partidas en cultivo alrededor de la villa de Petrer, docu- mentadas desde nales del siglo XVI. (Foto: Archivo fotogrco de El Carrer, Petrer) Partidas alejadas de la villa de Petrer con respecto a las tierras cultivadas en parajes alejados de la poblacin, a principios del siglo XVi ni- camente tenamos constancia del cultivo en los entornos de Pua y de la Foya de cat. Sin embargo, a nales de esta centuria la documentacin nos aporta gran informacin acerca de la extensin del espacio cultivado por los moriscos, por lo que debi de aumentar el nmero de construcciones dispersas por el trmino. el vocablo alquerecis, que encontrabamos citado en el contrato de venta de 1431, fue sustituido 118 en el del ao 1513 por el de heredades , trmino heretats que ser el usual en Petrer desde el siglo XVii para referirse a las propiedades que constaban de casa, tierras, era y corral de ganado. entre las diversas construcciones destaca la que se levantaba en la partida de cat, en donde, con anterior a 1582, se edi- c el inmueble que se cita como Palau. este vocablo poda referirse al conjunto de habitaciones de un edicio, que probablemente sera de buen tamao pues se heredaba o venda por partes de las que hemos localizado hasta cinco (por ejemplo de Beatriz aydon era teriam partem cuyusdam domus nominati 119 palau situm in dicta partita nominata de Cati ). Probablemente, y a falta de que futuras prospecciones arqueolgicas lo demuestren, este palau podra estar ubicado en el mismo espacio en que se construy despus la casa conocida como la Administracin, que en 1678 era propiedad de Mosn thomas rico 118 APP, PrOtOcOlOS nOtAriAleS, Miguel Frigola, nm. 11102, 26 de febrero, 22 de marzo, 19 y 21 de abril y 11 de agosto de 1513. 119 ArV, PrOtOcOlOS nOtAriAleS, Gonzalo Fernndez, n reg. 861, 27 de febrero de 1582: de Joana Almate viuda de Martino Almerig era Item un tros de terra en Cati en la Foya junt al palau ab la quarta part del palau que afronta dita terra de Francisco Almenig y ab terra de Juan Abdonalem. Item un altre tros de terra en la ombra devers lo barranch que afronta ab lo dit tros de terra que esta prop del palau. ArV, PrOtOcOlOS nOtAriAleS, Gonzalo Fernndez, n reg. 862, 1 de mayo de 1583: de Beatriz aydon. 83 Sabina Asins Velis en cat y contaba con casa, corral, ermita, una calera y una casa de poner nieve (en ruinas ya a princi- pios del siglo XViii, por lo que no descartamos que sea una construccin de poca morisca). Posterior- mente, con anterioridad a 1876, la casa de la Administracin sera de nuevo reedicada por los hermanos Vicente e isabel Maestre Miralles, reforma que corresponde a los restos que hoy quedan en pie. tambin en cat se explotaban las tierras de la partida de la lloma de lopo (familia documentada en Petrer al menos desde 1478), de la partida de la Pea Foradada (donde de nuevo tena tierra nofre aet, alias Berbegal), de la del tereu en la foya de cat, y de la foya y torrente del ezquerfeig(), cuya ubi- 120 121 cacin exacta desconocemos . igualmente, en 1582, se cultivaba en la partida del Almatar , que con- frontaba con la tierra de Pedro rabosa y con la montaa que el mismo rabosa vendi a Juana Mohamel, por lo que podemos suponer que la actual partida de rabosa debi estar ya roturada en ese momento 122 (aunque no la hemos encontrado citada en la documentacin hasta el ao 1662 ). del mismo modo, con anterioridad a 1603, se pusieron en cultivo las tierras de la partida del Alhaig (linaje que se documenta en Aspe en 1478 y en Petrer en 1489). en Palomaret, el otro paraje ms alejado de la villa que se cita expresamente en la carta de Poblacin 123 de 1611, consta el cultivo de cereales en 1583, partida donde tambin se indica que haba una casa . esta propiedad, que deba ser extensa, confrontaba con los montes de tibi por una parte y con la heredad de Berengarius Baroni por otra (apellido que consta en Petrer en el listado de desarme de los moriscos de 1563, que sin duda dio nombre a la partida de las vueltas de Baroni, ubicada en Palomaret junto a la rambla del Horno de Vidrio, en cultivo a nales del siglo XVI). Cerca de Palomarets se localizaban las tierras dels Fontanars de Petrer, donde el seor de Agost intent establecer un horno de vidrio en 1573, concretamente en el cerro de las Montesas; peticin que no prosper al oponerse los jurados y justicias de Alicante por el consumo excesivo de lea que se prevea. en esta decisin no intervino la 124 villa de Petrer, pero el horno se edicara el siglo siguiente (en 1639 ya estaba en funcionamiento ) y en el mismo emplazamiento, siendo posteriormente cancelada su actividad por el excesivo consumo de 125 lea que en l se haca . en Pua, al menos en 1580, se cultivaba junto al camino de castalla, en la Solana de Pua, en el estret de 126 Pua, en la partida denominada de la Umbra de Marco (apellido morisco documentado en elda en 1583 ) y 127 cerca de all en la partida del esquinar . la importancia de Pua radicaba en que la mina que abasteca de agua a la balsa del pueblo se ubicaba en esta partida. Adems aqu deba haber otras captaciones importantes de agua, como la que transportara el canatum (canal) propiedad de Francisco Palom, morisco vecino de Petrer, quien don una parte a su hijo Joannes a cambio de que ste se hiciera cargo de mantener y vestir al propio Francisco 128 Palom, y del que ya haba donado otra parte a su otro hijo, Antonio . del mismo modo haba otros surgimientos 129 de agua menores cuya medida de agua para el riego se expresaba con el trmino aumen . en esta partida se 130 indica que las huertas se ubicaban dentro de la rambla de Pua (orteta in umme de Petrer) . 120 ARV, PROTOCOLOS NOTARIALES, Gonzalo Fernndez, nm. 4167, 15 de julio de 1580; ARV, PROTOCOLOS NOTA- riAleS, Gonzalo Fernndez, n reg. 861, 4 de febrero de 1582. ArV, PrOtOcOlOS nOtAriAleS, Gonzalo Fernndez, n reg. 862, 1 de mayo de 1583; ARV, PROTOCOLOS NOTARIALES, Gonzalo Fernndez, n reg. 863, 24 de febrero de 1586. 121 ARV, PROTOCOLOS NOTARIALES, Gonzalo Fernndez, n reg. 861, 4 de febrero de 1582; AAM, Cosme Alamora, 11 de octubre de 1603: Martinus aet de Onufrio de Petrer vende a Gaspari Milich de elda, tierra campa in partita dicta del Almatar, por 85 libras, confrontatur cum terris Joannis Alhaig. 122 Ace, nm. 857, 23 de febrero de 1662. 123 ARV, PROTOCOLOS NOTARIALES, Gonzalo Fernndez, n reg. 862, 26 de julio de 1583; ARV, PROTOCOLOS NOTA- riAleS, Gonzalo Fernndez, n reg. 863, 6 de febrero de 1586. 124 AMP, 49/1, cOnSeJOS MUniciPAleS 1616-1648, f. 252. 125 Ace, nm 919, f. 457 v.-458 y 463 v., ao 1774. 126 S. ASinS VeliS, M.c. ricO nAVArrO. la poblacin morisca del condado& op. cit., p. 85. 127 ARV, PROTOCOLOS NOTARIALES, Gonzalo Fernndez, nm. 4167, 4 de noviembre de 1580; ARV, PROTOCOLOS NOTARIALES, Gonzalo Fernndez, n reg. 861, 4 y 27 de febrero de 1582; ARV, PROTOCOLOS NOTARIALES, Gonzalo Fernndez, n reg. 862, 23 de junio de 1583. 128 ArV, PrOtOcOlOS nOtAriAleS, Gonzalo Fernndez, n reg. 862, 4 de octubre de 1583. 129 ARV, PROTOCOLOS NOTARIALES, Gonzalo Fernndez, nm. 4167, 4 de noviembre de 1580; ARV, PROTOCOLOS nOtAriAleS, Gonzalo Fernndez, n reg. 863, 19 de enero de 1586. 130 ArV, PrOtOcOlOS nOtAriAleS, Gonzalo Fernndez, n reg. 862, 4 de octubre de 1583. 84 Seran bons, lleals, els e obedients vasalls en caprala constan distintas parcelas en cultivo en 1580, 1582, 1583 y 1593 (una de ellas de 5 jor- nales, equivalentes a 2,5 hectreas, venta como se indica previa licencia de Balthasar de Vargas, mag- 131 nicum gubernatorem et bajulum) , si bien ya hay noticia de que en 1576 Gaspar remiro d espejo prohibi regar con aguas de caprala las heredades contiguas, bajo pena de 50 libras, ordenando a los 132 campesinos que las dejaran circular libremente para el consumo humano en elda . cercana a caprala, la partida de la navayol se cita en cultivo en 1583, propiedad de la morisca elisabeth Ximeno, viuda 133 de ramon lombart, que dej como mejora a su hijo Franciscus lombart (apellido documentado en Petrer desde 1478. ramn lombart consta en el listado de desarme de los moriscos y su hijo Franciscus 134 en los listados posteriores) . Finalmente, entre las partidas alejadas de la poblacin, hemos localizado el cultivo, con anterioridad 135 a 1603, en la partida de la Maaba , que probablemente corresponda a la actual Almadrava. tambin deba estar cultivada la partida de cajuli, pues la casa se cita en 1618, por lo que no descartamos que se 136 construyera en el siglo XVi o incluso anteriormente (Tabla I-2.5 y Anexo Cartogrco, mapa siglos XiV-XVi). Agricultores de Petrer en los campos de Salinas, Sax o Elda la dispersin de los campos de cultivos era notable, lo que se aprecia sobre todo en los testamentos de los moriscos, ya que adems de cultivar en el trmino de Petrer, tanto junto a la villa como en los valles de caprala, Pua, cat, navayol, Palomarets, etc., los moriscos se desplazaban a los campos de Salinas, 137 Sax o elda . dispersin que, por otra parte, sera paralelizable a la que se detecta en reas cristianas cercanas como la Foia de castalla, en donde ya en el ao 1456, el 66,6% de las explotaciones constaban 138 de cinco campos y en algunas ocasiones se llegaba a los veintitrs . Quiz lo ms destacado de las propiedades de petrerenses en Salinas sean los terrenos que se citan 139 en su almarjal, cuyas ventas constan desde 1580, pero que se debieron cultivar desde poca islmica . En cuanto se reere a la presencia de los vecinos de Petrer en los campos de Elda est ya documentada desde mediados del siglo XiV, en que la reina, seora de elda, se queja de que los de Petrer sen porten somagadament et oculta sens pagar los drets a nos pertanyents e acostumats los blats e altres fruyts que 140 cullen en sues possessions que hya et posseixen en lo terme dElda . la venta de estas propiedades por los moriscos de Petrer, sobre todo en la huerta de Elda, aparece constantemente documentada a nales del siglo XVi. con respecto a Sax es muy interesante el expediente de los campos de la partida del chorrillo, pues adems con el tiempo hubo litigios entre Elda, Sax y Petrer para jar en esta partida el lmite entre los tres pueblos. cultivada ya en pocas bera y romana, las tierras de esta zona son de las de mayor capa- cidad agrcola del valle, que se vean adems beneciadas por la Font de la aygua vulgarment dita del 131 ARV, PROTOCOLOS NOTARIALES, Gonzalo Fernndez, nm. 4167, 4 de noviembre de 1580; ARV, PROTOCOLOS NOTARIALES, Gonzalo Fernndez, n reg. 861, 27 de febrero de 1582; ARV, PROTOCOLOS NOTARIALES, Gonzalo Fer- nndez, n reg. 862, 1 de mayo y 26 de julio de 1583; AAM, Cosme Alamora, 6 de enero de 1593 confrontaba con las tierras de ludovii lopo por un lado y con las de Petri lopo por otro, tierras que estaran en la lloma de Lopo. 132 l. AMAt SeMPere, Elda,& op. cit., pp. 270-271. 133 ArV, PrOtOcOlOS nOtAriAleS, Gonzalo Fernndez, n reg. 862, 1 de mayo de 1583. 134 J. ricHArt GOM, Antroponimia mudjar& op. cit.; S. ASinS VeliS, M.c. ricO nAVArrO. la poblacin morisca del condado& op. cit., p. 107. 135 AAM, cosme Alamora, 21 de agosto de 1603. 136 AMP, 49/1, cOnSeJOS MUniciPAleS 1616-1648, ff. 11v-12r, 9 de diciembre de 1618. 137 Por ejemplo en: ArV, PrOtOcOlOS nOtAriAleS, Gonzalo Fernndez, n reg. 863, 19 de enero de 1586. 138 AMC, Padrn de riqueza, 1456, cifr. A. FURI, F. GARCA, Dicultats agrries en la formaci i consolidaci del feudalis- me al Pas Valenci. Estudi General 5-6, 1985-86, p. 300. 139 ARV, PROTOCOLOS NOTARIALES, Gonzalo Fernndez, nm. 4167, 14 de marzo de 1580; ARV, PROTOCOLOS NO- tAriAleS, Gonzalo Fernndez, n reg. 862, 11 de marzo de 1583. tambin se cita una heredad de 50 jornales en la partida del coscojar de Salinas, en AAM, cosme Alamora, 11 de julio de 1593. 140 AcA, c, reg. 2030, ff. 11v. 85 Sabina Asins Velis 141 Chorrillo y bassa de aquella . Una parte de la heredad y de la fuente la haba comprado Gaspar Milich de Petrer a unos particulares de Sax; en 1582, el tutor de sus hijos y herederos, Gaspar y Marti, la vendi 142 a Juan coloma y elisabeth de Saa, condes de elda . esta ltima enseguida volvi a venderla al admi- nistrador Gaspar remiro. en 1583, remiro adquiri adems las tierras y otra tercera parte de agua de 143 la fuente propiedad del tambin morisco y vecino de Petrer, Balthasar Milich . La nca que logr unir remiro constaba de 150 tahllas en el trmino de Sax y de elda. de ellas, 30 tahllas estaban en el reino de castilla con la fuente con la que se poda regar toda la heredad, y 120 tahllas en el reino de Valencia en la partida del Chorrillo (trmino de la villa de Sax) y del Almorchon (se especica que en trmino de 144 elda, pues esta partida comprende los trminos de elda y Petrer) . Por los datos de que disponemos, esta nca de Remiro era la ms extensa del trmino, ya que ocupara unas 18 hectreas que, como se indica, se poda regar en toda su extensin gracias a la fuente del chorrillo. Por lo que conocemos a travs de las ventas, testamentos, donaciones, etc. la extensin de las parcelas de los moriscos de Petrer era mucho menor que esta nca, ya que adems la dispersin de las propiedades era muy grande. Cultivos principales durante el siglo XVi, los cultivos ms importantes seran trigo, cebada, alcanda, mijo, panizo, via, centeno, olivo, grana, cardo, lino, camo, barrilla, salicornio y las higueras, as como otras cosechas de regado o secano y otros frutos, dando por supuesto que los que se citan en la carta de Poblacin de 145 1611 estaban en produccin desde al menos la centuria anterior . Gracias a las mejoras a esa carta que se rmaron el 27 de octubre de 1612 sabemos que a nales del siglo XVI se deban recoger unas 3.200 arrobas de olivas (de las que se podran obtener unos 40.000 litros de aceite), ya que el conde de elda solicit a los vecinos de Petrer, por los gastos ocasionados por la repoblacin y reparto de casas, 400 146 arrobas de aceite de la cosecha de aceitunas que en ese momento estaban en los olivos . esta cantidad coincida, en el ao 1618, con el diezmo del aceite por el que se pagaba de ocho-una, como veremos ms adelante. Por su importancia comercial, y por su contribucin a los ingresos de la seora, sobresala la pro- 147 duccin de pasa, elaborada con la variedad de uva valens , siendo uno de los mercados de Petrer la cercana poblacin de Yecla. el 9 de febrero de 1587, los vecinos de Yecla, Sebastin Puche, Aparicio Ortuo, Alonso ibez y Sancho Muoz y Soriano compraron a Joan Panchut, sndico y procurador de la universidad de Petrer, 18 quintales de pasa al precio de 23 reales cada quintal, por lo que le deban 414 reales de plata castellana. el 27 de febrero Francisco Ortuo y su mujer le deban tambin 276 reales de plata castellana por 12 quintales de pasa, a 23 reales el quintal; que le pagaran el da de la esta de 148 nuestra Seora de Agosto . nuevamente se desplazara Joan Panchut a Yecla el ao siguiente. el da 8 de febrero le compraran Joseph Vicente y Baltasara dueas 15 quintales de pasa, a 30 reales el quintal, 149 por lo que le deban 450 reales de plata castellana (de a 34 maraveds cada uno) . los jurados y el contador de Petrer (moriscos los tres) se encargaban de vender la pasa del alfarraz de la villa, como as se hizo en 1583: Angel Taa y Franciscus Alhayon jurati de la vila de Petrer y Juan Lopo comptador de dita vila en nom de la universitat de dita vila& venen a Pere Colomina llaurador de 141 ArV, PrOtOcOlOS nOtAriAleS, Gonzalo Fernndez, n reg. 861, 1 de enero de 1582. 142 ArV, PrOtOcOlOS nOtAriAleS, Gonzalo Fernndez, n reg. 861, 14 de enero de 1582. 143 ArV, PrOtOcOlOS nOtAriAleS, Gonzalo Fernndez, n reg. 862, 29 de agosto y 30 de septiembre de 1583. 144 ArV, PrOtOcOlOS nOtAriAleS, Gonzalo Fernndez, n reg. 862, mayo-junio de 1583, cargamiento de censal. 145 ACE, nm. 1046; T.V. PREZ MEDINA, M.C. RICO NAVARRO, La carta pobla... op. cit., pp. 159-170. 146 Ace, nm 1047. 147 AMe, libro Viejo, ao 1599, 11 de junio, f. 11, cifr. r. BelAndO cArBOnell, Realengo y Seoro... op. cit., pp. 92- 93. 148 APY, caja ao 1586, Pedro Ortuo, leg. 2, exp. 9, registro de escrituras pblicas diversas. 149 APY, caja ao 1588, Pedro Ortuo, leg. 2, exp. 15, f. 3, registro de escrituras pblicas diversas. el mismo Joan Panchut previa licencia del conde Joan coloma carg un censal en su nombre y como sndico y procurador de la universidad de Petrer, a Anna Massich y de Sfora y Phelip Massich como tutores y curadores de los hijos y herederos de Andrea Sfora por 3.000 sueldos de pensin anual, sin laudimio y francos, y precio de 1.500 libras. Ace nm 1018 y 1019. 86 Seran bons, lleals, els e obedients vasalls la vila de Castalla trescentos sexanta quintars de pansa, deu mes /o/ menys de la collita e alfarraz de la dita vila de Petrer per tanda de cascu son alfarraz com es us y costum , el precio en ese ao era de 18 reales castellanos por quintal de pasa, y si se retrasaba la villa en la entrega deba pagarle a colomina 150 200 libras . el cultivo de la higuera se constata en el testamento de rodrigo Alhaig, en la dote por matrimonio de elisabeth Milich, en el testamento de Angela Alhaig (tierra de higueras en la caada del castell) y en el de lleonor Mars, viuda de Marti Aay, quien dejaba a su hija lleonor y a su cuada Angela, un higueral 151 que lindaba con los higuerales de Martin lopo y de rodrigo de nofre y con un colmenar . las vias, las oliveras (nuevas y viejas) y los productos de huerta son los cultivos que se citan en la Horteta de Batiste Llopis, heredad que arriendan a medias, en 1607, los moriscos de Petrer, Petrus lopo Palla y de elda, Michael ibdon. esta heredad, ubicada en trmino de elda, se compona de cultivos de secano y regado, y se arrendaba con toda el agua de las acequias de Arriba y de Abajo, sin poder vender el agua por parte de los arrendadores, especicndose que deban conservarla para el riego y riegos ordinarios de las vias y huertas de dicha heredad. Adems se indica en el contrato que si durante el arrendamiento, rmado para cuatro aos, se vendiese la propiedad, se pagara a ibdon y Lopo los barbechos o rebar- 152 bechos, segn la estimacin de labradores que nombraran ambas partes . 153 154 Adems, por el impuesto de la quema , con mesa recaudatoria en elda , conocemos los productos que comerciantes de elche, Villena, Sax o Yecla hacan circular por el condado en direccin a castilla desde 1520 hasta nales del siglo XVII. Entre ellos destacaban abundante jabn, pasas, piones y al- pargatas, a los que seguan en mucha menor cuanta higos, aceite, vino, camo, chirivias, seda, ajos, matalauva, barrilla, cardo, alazor, cebollas, arroz, lentejas, bellotas o castaas; y otros productos como recipientes de vidrio, tejas, medias, etc. Pero la actividad detectada en el ltimo cuarto del siglo XVi se debi ver alterada con el cambio de centuria. Algunos autores sealan que en ese momento hubo un perodo de malas cosechas, al que se sumaron las contribuciones extraordinarias a las que tuvieron que hacer frente los moriscos, como las de 155 1599 y 1602 . Estos extremos se conrman en el condado de Elda donde tenemos documentados siete registros diferentes de autorizacin para que las villas tomaran a censo distintas cantidades con las que abastecerse de cereales y otros productos, por la escasez que haba habido en el reino de Valencia. dos 156 de estas autorizaciones son algo anteriores, de 1580 y 1586, por parte de Juan coloma y las otras cinco por Antonio coloma o sus procuradores. As ocurri en 1592 debido a la esterilidad que afectaba a todo 157 el reino de Valencia ; o en 1603 cuando Baltasar Juli, Procurador General de Antonio Coloma, dio 158 licencia a las aljamas para cargarse con censales hasta 3.000 libras . Al ao siguiente, el 3 de junio de 1604, el conde nombr procurador y administrador general a su pariente Francisco de cardona para que administrase el condado en su ausencia, facultndole para dar licencia a las aljamas para vender censales con los que avituallarse de trigo y otros cereales por un total de hasta 1.000 libras. las condiciones de estos censales se establecan segn los fueros de Valencia, y sin laudemio ni fadiga, obligndose las al- jamas a pagar las pensiones y devolver el capital. el 2 de febrero de 1607, amparndose en esta licencia, 150 ArV, PrOtOcOlOS nOtAriAleS, Gonzalo Fernndez, n reg. 862, 3 de octubre de 1583. 151 ARV, PROTOCOLOS NOTARIALES, Gonzalo Fernndez, n reg. 861, 27 de febrero de 1582; ARV, PROTOCOLOS NO- TARIALES, Gonzalo Fernndez, n reg. 862, 1 de mayo de 1583; ARV, PROTOCOLOS NOTARIALES, Gonzalo Fernndez, n reg. 863, 19 de enero de 1586; APM, Cosme Alamora, seccin Elda, 19 de marzo de 1607. 152 APM, cosme Alamora, seccin elda, 11 de febrero de 1607. 153 e. ciScAr PAllArS, Moriscos, nobles y repobladores. Valencia, 1993, p. 51. 154 ArV, MAeStre rAciOnAl, reg. 11486. Aos: 1519, 1520, 1528, 1531, 1544, 1607, 1608. Para el siglo XVii, aos 1610, 1611, 1619, 1620, 1621, 1625, 1628-29 (MAeStre rAciOnAl, reg. 11486), 1698 (MAeStre rAciOnAl, reg. 10573), 1699 (MAeStre rAciOnAl, reg. 10574), 1701 (MAeStre rAciOnAl, reg. 10575), 1704 (MAeStre rAciOnAl, reg. 10576). 155 e. ciScAr PAllArS, Tierra y seoro en el Pas Valenciano (1570-1620). Valencia, 1977, p. 48; E. CISCAR PALLA- rS, Moriscos, nobles... op. cit., p. 103. 156 ARV, PROTOCOLOS NOTARIALES, Gonzalo Fernndez, nm. 4167, 3 de octubre de 1580; ARV, PROTOCOLOS NOTA- riAleS, Gonzalo Fernndez, n reg. 863, 5 y 7 de abril de 1586: sterilitatis et defectus annorum proxime preteritorum. 157 AAM, cosme Alamora, 21 de marzo de 1592. 158 ArV, MAnAMentS Y eMPAreS, Ao 1603. libro 8, Mano 80, ff. 1 y sig. 87 Sabina Asins Velis 159 Francisco de cardona dio permiso a las aljamas del condado para tomar nuevos censales . Posterior- mente, el 26 de enero de 1608, Antonio coloma concedi personalmente licencia a los justicias, jurados y consejeros y a todos los dems vecinos, a voz de consejo General, porquanto soy informado la falta que ha havido y hay no solamente en el dicho mi condado de Elda pero agun en todo aquel Reyno de Valencia de cogida de trigo y sevada y otros frutos ne- cesarios para el sustento de los vecinos y de los que a el acuden y por el pasan y por lo qual el dicho mi condado tiene necesidad de tomar a censo para bastuelle de pan de trigo y sevada y otros granos y frutos... hasta en cantidad de 3.000 libras, imponiendo el censo sobre los bienes y rentas de las dichas villas 160 y de sus vecinos.... el censo que suscribieron sum 1.400 libras . inmediatamente despus, el 1 de septiembre de ese mismo ao de 1608, volvieron a nombrar un sndico para que pudiera tomar a censo 2.000 libras con las que abastecerse de granos y otros artculos para atender las necesidades de los veci- 161 nos . dado que tras la expulsin de los moriscos los seores se haran cargo del pago de las pensiones de los censales debidos por las aljamas, estos permisos para cargarse de censales parecen indicar que el conde de elda, Antonio coloma, a pesar de su proximidad al monarca, no deba tener noticia de la decisin que se tom en la reunin del consejo de estado de 30 de enero de 1608, presidida por el du- que de Lerma, en la que se opt denitivamente por la expulsin de los moriscos, y que se concret en la posterior reunin del 4 de abril de 1609 en la que se decidi llevar a cabo su salida ese mismo ao, 162 comenzando por el reino de Valencia, el ms poblado de moriscos . Por cuanto se reere al condado de Elda, el censo realizado en 1609 por el marqus de Caracena pro- porciona la cifra de 700 casas de moriscos para elda y Petrer, que con la equivalencia de 4,5 personas por vivienda correspondera aproximadamente a unos 3.150 habitantes. el reciente estudio de los lista- dos de vecinos, que suscribieron peticiones de censales entre los aos 1603 y 1608, nos ha permitido co- nocer el nombre y apellidos de 713 moriscos varones de ambas poblaciones. ello nos indica que, como mnimo, abandonaran el condado unos 3.208 habitantes, dato bastante cercano al de caracena y que corroborara las estimaciones previas realizadas por lapeyre, ramos Vidal y Snchez recio, entre otros 163 autores . de esta cantidad, a elda le correspondan unos 468 nombres de moriscos (alrededor de 2.106 habitantes). las familias que abandonaran Petrer seran una cantidad cercana a 245, que equivaldran a unos 1.102 habitantes. la villa se quedara despoblada, nicamente habitada por entre 3 y 7 familias de 164 cristianos que vivan en la localidad (Grco I-2.1) . 159 ARV, MANAMENTS Y EMPARES, Ao 1607, Libro 7, Mano 69, ff.1 y sig.; y Mano 70 f. 19-38v. 160 ArV, MAnAMentS Y eMPAreS, Ao 1608, libro 6, Mano 67, ff. 8-28. 161 ArV, MAnAMentS Y eMPAreS, Ao 1608, libro 8, Mano 93, ff. 1-28. 162 e. ciScAr PAllArS, Tierra y seoro... op. cit., p. 135. 163 H. lAPeYre, Geografa de la Espaa morisca. Valencia: Universitat de Valncia, 2009 (reedicin); J.A. RAMOS VIDAL, Aspectos demogrcos de Elda (siglos XVI, XVII y XVIII). Alborada XXIII, 1977, s/f; G. SNCHEZ RECIO, Carta de Po- blacin del Seoro de Elda. 1611-1612. elda: Ayuntamiento de elda, 1979. 164 ARV, MANAMENTS Y EMPARES, Ao 1603, Libro 8, mano 80, folio 1 y siguientes; ARV, MANAMENTS Y EMPARES, Ao 1607, Libro 7, mano 69, ff. 1 y sig.; mano 70, f. 19-38v; ARV, MANAMENTS Y EMPARES, Ao 1608, Libro 6, Mano 67, ff. 8-28; ARV, MANAMENTS Y EMPARES, Ao 1608, Libro 8, Mano 93, ff. 1-28; S. ASINS VELIS, M.C. RICO nAVArrO. la poblacin morisca del condado& op. cit. 88 Seran bons, lleals, els e obedients vasalls Tabla I-2.5. Partidas en cultivo y elementos del sistema de riego documentados en el siglo XVi PARTIDAS EN CULTIVO EN EL SIGLO XVI Partidas alrededor de la villa: con riego de la balsa de la villa: dels Horts (24 hectreas), dels Olivars y de les Vinyes de Dalt. Sub-partidas en la zona dels Horts: Almafra, Viley/Videy, partida del cam de la enia, del cam de les Vies, del cam de elda, del cam dellig (elche), de Xuqueta, senda del bancal del lup, partida de Mail Almehim, de la Balsa, de la daya, Alqiubla, del Anafaraig/canafaraig, del Fossar, partida de la senda del cam de novelda, del Arney (que pudo derivar en Guirney), del Fossar, algoleja en la boca del Riu de Petrer (rambla de Pua), frente al azud etc. De les Vinyes de Baix (con riego de la Acequia de Arriba, desde 1536 en que se construye la Acequia del conde). Caada darrere lo Castell (con anteriodad a 1582). Partida de Salinetas, partida del Pedregal y partida del Almorchon (partidas del retamar del Almorchon y de la caada del llentiscle), con anterioridad a 1582. Partida de Santa Brbara, con anterioridad a 1586. tierra del morisco nofre aet, alias Berbegal (que viva en Petrer en 1586, apodo que perdurar a travs de los siglos en el topnimo de la foya y el monte de Berbegala). Partidas alejadas de la villa: tierras de una posible alquera en Pua en el siglo XV y Foyes de Pua (con anterioridad a 1503). Foyes de cat, lindando con el trmino de castalla (con anterioridad a 1503). Fontanars (con anterioridad a 1573). caprala (con anterioridad a 1576). noguera (con anterioridad a 1576). en Pua, al menos en 1580, se cultivaba junto al camino de castalla, en la Solana de Pua, en el estret de Pua, en la partida de la Umbra de Marco (apellido morisco documentado en elda en 1583) y en la partida del esquinar. en cat (trigo y pasas): con anterioridad a 1580, partidas de la lloma de lopo, de la Pea Foradada, del tereu, foya y torrente del ezquerfeig(), Almatar, rabosa y Alhaig (antes de 1582). en Palomaret: se cultiva con anterioridad a 1583 trigo y vid (pasas). Heredad de Berengarius Baroni (partida de las vueltas de Baroni, ubicada en Palomaret junto a la rambla del Horno de Vidrio). Partida de la navayol se cita en cultivo en 1583. la Maaba -actualmente la Almadrava- (con anterioridad a 1603). Posible cultivo de la tierra en la partida de cajuli (la casa se cita en 1618). campos de los agricultores de Petrer en Salinas, Sax y elda. ELEMENTOS DEL SISTEMA DE RIEGO Fuentes de Petrer (mina de Pua). Acequia de Petrer (riega tambin la huerta de Elda hasta 1392; el agua procedera de la mina de Pua). Boqueras citadas en 1503 en dos barrancos que lindan con castalla (una en el Barranch dels charcos topnimo hoy desconocido-, y la otra posiblemente en el Barranc de les covetes), tal vez para mejorar el secano en la partida de les Foyes de cat. Acequia de Abajo y Acequia de Arriba (en 1536 se canaliz, por medio de la construccin de la Acequia del conde, parte del agua de la Fuente del chopo de Villena hasta Sax donde se verta el agua al ro de Sax (Vinalop); cerca de Elda el agua se desviaba por las Acequias de Abajo y de Arriba). Cequia major (citada en 1586). Balsa de la villa, azudes y partidores (anteriores a 1580). cenia (en 1582 se cita en la huerta de Petrer la partida del Cami de la enia). Archs del Riu de Petrer (actual Acueducto de San rafael), terminado en 1583. Mina en lo terrer del Almorchon (anterior a 1583). Font de noguera (anterior a 1586). Canatum (canal) en Pua, propiedad de Francisco Palom, anterior a 1583. Surgimientos de agua en Pua cuya medida de agua para el riego se expresaba con el trmino aumen, con anterioridad a 1580. 89 Sabina Asins Velis Grco I-2.1. evolucin de la poblacin mudjar-morisca de Petrer y repoblacin con cristianos en 1611 165 (Fuente: S. ASinS VeliS, M.c. ricO nAVArrO, 2009) 165 Datos: Ao 1431: 36 vecinos (c. 162 habitantes) (c. lPeZ rOdrGUeZ, Nobleza y poder poltico& op. cit., p. 101, nota 226). Ao 1488: 72 vecinos (c. 324 habitantes) (r. VAlldecABreS rOdriGO, El cens de 1510. Relaci& op. cit., p. 555). Ao 1510: 99 vecinos (c. 445 habitantes) (ArV, reAl 514, ter., ff. 57-61). Ao 1563: 133 vecinos (c. 598 habitantes) (ARV, REAL CANCILLERA, reg. 563, vol. III, ff. 1076r.-1077r.; ARV, REAL CANCILLERA, reg. 564, vol, III, 1264r.- 1272v.). Ao 1608: 245 vecinos (c. 1.102 habitantes) (ArV, MAnAMentS Y eMPAreS, Ao 1603, libro 8, mano 80, folio 1 y siguientes; ARV, MANAMENTS Y EMPARES, Ao 1607, Libro 7, mano 69, ff. 1 y sig.; mano 70, f. 19-38v; ARV, MANAMENTS Y EMPARES, Ao 1608, Libro 6, Mano 67, ff. 8-28; ARV, MANAMENTS Y EMPARES, Ao 1608, Libro 8, Mano 93, ff. 1-28). Ao 1611: 100 vecinos (c. 450 habitantes), t.V. PreZ MedinA, M.c. ricO nAVArrO, la carta pobla... op. cit. 90 Captulo 3. Los nuevos pobladores cristianos 1. La expulsin de los moriscos y la repoblacin de Petrer con cristianos A principios de septiembre de 1609 se extendi el rumor de la inminente expulsin de los moriscos del reino de Valencia. Sin embargo, don Antonio coloma, conde de elda, no acudi a las Juntas que inme- diatamente convocaron los miembros del estamento militar, ni a la signicativa del 16 de septiembre, 1 ni a las sesiones de los das 18, 19, 20 y 22 siguientes . en la junta de este ltimo da se ley la carta enviada el 11 de septiembre por Felipe iii -cuyo texto coincide con el encabezamiento de la posterior 2 carta Pobla de Petrer- en la que el rey explica los motivos que le han llevado a ordenar su expulsin . tampoco asisti el conde de elda a las juntas de los das 24, 26 y 28 de septiembre ni a las siguientes de 3 los das 1 y 3 de octubre , pues se encontraba en el puerto de Alicante preparando la salida de las galeras 4 hacia frica. el da 4 de octubre las cerca de 245 familias de moriscos de Petrer partieron de sus casas con direccin a Alicante, desde donde embarcaron el da 6 con destino a Orn acompaados personal- 5 mente por don Antonio coloma, capitn General de las Galeras de Portugal , llevando consigo todos los bienes muebles que pudieron transportar. Sus haciendas y dems posesiones fueron adjudicadas al conde, en correspondencia a la promesa hecha por el monarca a los nobles de reparar el dao que se les 6 haca con la expulsin . el conde de elda particip adems activamente en un segundo viaje, ocupndose del avituallamiento y 7 traslado de moriscos desde Alicante a Orn, con parada en el puerto de Maarquibur (Mazalquivir) . Al 8 nalizar el viaje el conde expres al rey: espero que pronto se acabara esta sancta hobra . Al trmino de su intervencin directa en el traslado de los moriscos a frica, el conde tuvo que resolver numerosos asuntos en sus seoros: la repoblacin del territorio con cristianos, la redaccin de las cartas puebla, el pago de las pensiones de los censales..., que hicieron necesaria su presencia en el condado. Ante el desconcierto que se origin con la expulsin, a partir del mes de noviembre de 1609 se suce- dieron las directrices para la repoblacin de los lugares despoblados: por la Pragmtica real de 19 de noviembre se oblig a la nobleza a poner los campos en cultivo en el trmino de diez das o, en caso de que ellos no pudieran, se llevara a cabo por otras personas o por los mismos censalistas. el 15 de diciembre de 1609, el marqus de caracena autorizaba a quien quisiera a sembrar y cultivar las tierras hasta entonces no adjudicadas a nadie por sus propietarios, a cambio del pago al seor del territorio con una cantidad variable de la cosecha segn seoros. el 12 de enero de 1611 se inst de nuevo a los seores a poblar sus lugares segons voldran y podran en un plazo de seis meses. Finalmente, el 15 de 9 julio de 1611, se les dio un plazo de 15 das para llevar a cabo la poblacin de los territorios . Fue a partir de este bando, que se cita varias veces en la carta Pobla de Petrer, cuando el conde de elda pact las 1 ArV, reAl cAncilleriA, reg. 527, ff. 393-394, 409, 411. 2 ArV, reAl cAncillerA, reg. 527, f. 411. Vase el proceso en particular en: e. SAlVAdOr eSteBAn, la cuestin de los censales y la expulsin de los moriscos valencianos. Estudis 24, 1998, pp. 127-146; M. PESET, T.M. HERNNDEZ, De la justa expulsin de los moriscos de espaa, Estudis 20, 1994, pp. 231-252. 3 ArV, reAl cAncilleriA, reg. 527. 4 ARV, MANAMENTS Y EMPARES, Ao 1603, Libro 8, mano 80, folio 1 y siguientes; ARV, MANAMENTS Y EMPARES, Ao 1607, Libro 7, mano 69, ff. 1 y sig.; mano 70, f. 19-38v; ARV, MANAMENTS Y EMPARES, Ao 1608, Libro 6, Mano 67, ff. 8-28; ARV, MANAMENTS Y EMPARES, Ao 1608, Libro 8, Mano 93, ff. 1-28; S. ASINS VELIS, M.C. RICO NA- VArrO. la poblacin morisca del condado& op. cit. 5 ACE, nm. 1046; T.V. PREZ MEDINA, M.C. RICO NAVARRO, La carta pobla... op. cit., p. 159. 6 ArV, reAl cAncilleriA, reg. 527, f. 411 y ArV, reAl cAncilleriA, reg. 527, f. 424v. carta al estamento militar del 29 de septiembre de 1609. en la crida del marqus de caracena del 1 de octubre de 1609 (ArV, reAl cAncillerA, reg. 699, f. 142) se prohbe a los moriscos vender el ganado, cabalgaduras, cereales, aceite, casas, tierras, censales, etc., a ex- cepcin de que fuera en pago de deudas contradas con la seora u otros acreedores siempre que constara documento pblico de la deuda. 7 AGS, eStAdO, leg. 213, carta del conde de elda al rey, Alicante, 19 de octubre de 1609. 8 AGS, eStAdO, leg. 213, carta del conde de elda al rey, cartagena, 30 de octubre de 1609. 9 e. ciScAr PAllArS, Tierra y seoro... op. cit., pp. 150-151. Sabina Asins Velis 10 condiciones con los nuevos pobladores , ya que dos aos antes la localidad haba perdido su poblacin morisca. As, el 19 de agosto de 1611 se acordaron los captulos con los 96 hombres y 5 viudas (por 4 de ellas 11 rmaron sus hijos) que vinieron de Castalla, Onil, Biar, Xixona y la huerta de Alicante , cantidad in- ferior en un 59 16% a la que hemos estimado momentos antes de la expulsin de los moriscos. estos nuevos pobladores se sentiran atrados a trasladarse a Petrer por la gran fragmentacin y dispersin de la tierra en sus lugares de origen: ya en el ao 1456, el 66,6% de las explotaciones de la Foia de 12 castalla constaban de cinco campos y en algunas ocasiones se llegaba a los veintitrs . este espacio agrario, debido a repartos de herencias o ventas, estara todava ms fragmentado en 1611, motivo que deba ser ms que suciente para plantearse el cambio de domicilio, ya que por otra parte se sabe que las cargas seoriales que pagaban en castalla, Onil y tibi al duque de Mandas y marqus de terranova 13 no eran muy elevadas . llegaron los rico, Maestre, Paya, Brotons... apellidos que se han mantenido hasta nuestros das. en la nueva organizacin municipal se mantuvieron los cargos que ya tena la aljama morisca, es decir, un justicia y un lugarteniente del justicia, que atenderan las causas civiles y criminales; tres jurados, quienes representaban y defendan los intereses de los habitantes y doce consejeros (de los moriscos conocemos nicamente la presencia de ocho en los actos notariales). los tres ediles de la aljama moris- ca, uno de ellos de la cequia, fueron sustituidos por un almotacn, un clavario, un sobresequiero y un 14 repartidor de las aguas de la villa . el procurador general del condado continu como representante del seor. entre las regalas que el conde poda arrendar se citan en la carta: tiendas, molinos, tabernas, hostal y piln de la carnicera. entre los gastos que deban afrontar los vecinos destacaban los salarios del escri- bano, del jurado, del contador, del sobrecequiero y de los peones empleados en la reparacin de muros, caminos, paredes, azudes, partidores, acequias y mondas de ellas, limpieza de la balsa y su cubo, etc., pagndose estos gastos de las sisas de la carne, de las tretas y otros arbitrios o de repartimientos entre ellos. Sin embargo, no estaban sujetos, como lo haban estado los moriscos, a prestaciones personales o a la entrega de gallinas, presentes, cabalgaduras, etc., aunque s deban suministrar la paja para las caballeras del seor durante cuatro meses al ao, si los seores se encontraban viviendo en el condado. igualmente, podan cortar madera para construir o reparar sus casas, y hacer cenizas, carbn y lea sin causar dao a los pinos. la seora asign libremente los campos y las casas de Petrer entre los nuevos pobladores, a quienes exigi que no los vendieran en cuatro aos, que cultivasen la tierra sin negligencia y cuidasen las vi- viendas, so pena de perderlas. A los cuatro aos podran venderlas o repartirlas entre sus hijos, previa licencia del conde. La supercie agrcola se distribuy en 100 suertes, una por familia, consistiendo cada una en 2 tahllas de huerta, 4 tahllas en las Vias de Abajo, con riego, 3 tahllas en las Vias de Arriba, con riego, 30 pies de oliveras y jornales en el secano. Tambin se especica que la concesin de licencias para el establecimiento de tierras incultas en el realengo, y su conversin a tierras de labor 15 era derecho privativo del conde . la tierra no podra venderse separada del agua, y a quienes se les adjudicaran las vias de Abajo se les daran 30 das de agua de la Acequia de Arriba repartidas en cinco meses, de noviembre a marzo, siendo los tres primeros y los tres ltimos das de cada mes para las tandas de Petrer, por lo que deberan 10 ACE, nm. 1046; T.V. PREZ MEDINA, M.C. RICO NAVARRO, La carta pobla... op. cit., pp. 159-170. 11 ACE, nm. 1046; T.V. PREZ MEDINA, M.C. RICO NAVARRO, La carta pobla... op. cit. p. 160; R. BELANDO CARBO- nell, el condado de elda, siglos XVii-XViii. de la expulsin de los moriscos a la desaparicin del seoro (i). Historia de Elda, tomo i, op. cit., pp. 199-215. 12 AMC, Padrn de riqueza, 1456, cifr. A. FURI, F. GARCA, Dicultats agrries en la formaci& op. cit., p. 300. 13 En Castalla no pagan ms de 5 sueldos por casa de censo; algunas tierras peyta, que como el derecho de borra eran de escaso valor; y de los frutos no tena la seora ninguna particin sino solamente el tercio diezmo. En Onil y Tibi las cargas eran muy semejantes (e. ciScAr PAllArS, Tierra y seoro... op. cit., pp. 95-96). 14 t.V. PreZ MedinA, intervencionismo condal& op. cit. 15 como se recoge en testimonios posteriores, que hacen referencia a los derechos privativos de la seora segn lo establecido por la carta Puebla y la costumbre: Ace, nm. 315, f. 3v. y 5v. 92 Los nuevos pobladores cristianos pagar a la villa de elda 50 libras anuales, quien a su vez, como hemos visto anteriormente, deba pagar a Villena por el uso del agua. en este captulo se estipul que el ao que no tomaran el agua no tendran 16 obligacin de pagar las 50 libras, acuerdo que harn valer los vecinos en 1680 para renunciar al agua . en las suertes no se incluan algunos huertos y algualejas, que se distribuiran por autos particulares. en concepto de diezmo, que por la concesin de 1449 corresponda a la seora en vez de a la iglesia, se pagaran 1/8 de la cosecha de trigo, cebada, alcanda, mijo, panizo, via, centeno, vino, pasas, aceite, grana, cardo, lino, camo, barrilla, salicornio y las dems cosechas de regado o secano; y el derecho de octava de higos y frutos, excepto de lo que comieran en sus casas. en cuanto al aceite, no tendran la obligacin de remoler, como antiguamente se sola hacer. las pasas y el trigo de cat y de Palomare(t)s se alfarrazaran, tras lo cual cada vecino acudira con la octava. el cultivo de vias para elaborar uva pasa era mayoritario en Petrer, pues se reconoce en la carta que la villa no tena cosecha de vino, por lo que se obligaba a comprar el vino a elda siempre que el cntaro no excediera de ocho sueldos. Se estableca que el ganado no pudiera entrar en las vias ni en los plantados, pero s en los campos de Petrer o elda en comn ambas poblaciones, as como en la sierra del cid, debiendo pagar el diezmo de las cras de cabras y corderos y de la lana y del queso. estos acuerdos se revisaron el 27 de octubre de 1612, introducindose entre otros cambios los siguien- 17 tes : se les concedieron 34 jornales de agua de 12 horas para regar las vias de Petrer a cambio de 75 libras, teniendo la obligacin de dar el agua la villa de elda los meses de noviembre a febrero, y si en noviembre no fuera posible la dara en los meses siguientes; concesin de las hierbas y trmino de Petrer para los ganados de los vecinos, a excepcin del herbaje de la sierra del cid que el seor se reserv para s; facultad para establecer sisas, sacas y otras imposiciones, con las que se incrementaron los Propios de la villa para pagar salarios y otros gastos, y eliminacin de la clusula de obligatoriedad de comprar el vino a elda. ese mismo da el seor solicit a la villa, a cambio de los gastos ocasionados por la re- poblacin y reparto de las casas, 400 arrobas de aceite de la cosecha de aceitunas que en ese momento haba en los olivos, cantidad que, como veremos por las cuentas de 1618, coincida con el diezmo del aceite por el que se pagaba de ocho-una, lo que nos proporciona una produccin de unas 3.200 arrobas. Peticin a la que accedieron los vecinos haciendo notar que se entendiera que sera slo por esa vez. 18 el 31 de julio de 1616 se corrigieron nuevamente algunos acuerdos de la carta , por los que podran plantar vias de vino (sin arrancar las vias de pasa para ello), almendros, sembrar ans, salicornio, barrilla, legumbres, lino, cardo y otras menudencias pagando por razn de diezmo de doce-una. los vecinos podran vender sus haciendas, pagando a su seora 6 libras (a razn de 2 libras por la huerta, 2 por las vias y 2 por el olivar); y los secanos, francos. La panadera, taberna, mesn y tienda quedaran a cargo de la villa a cambio de entregar a la seora 80 libras anuales. Las Concordias con los censalistas la preocupacin por el pago de las pensiones y la devolucin de los prstamos fue uno de los motivos que adujo el estamento militar en contra de la expulsin de los moriscos en la embajada que envi al rey 19 el 18 de septiembre de 1609 . en enero de 1610, d. diego clavero, funcionario del consejo de Aragn, describa cmo haba nobles, entre los que se encontraban el conde de elda, que respondan ms por los censales de lo que tenan de renta, por lo que para benecio de estos seores se podran reducir los 20 intereses de los censales que estaban impuestos sobre ex-lugares de moriscos . la aljama de Petrer en los ltimos aos se haba endeudado con unas pensiones anuales de 418 libras 10 sueldos, que a partir de la expulsin de 1609 corresponda pagar al conde de Elda segn se estableci en la Carta Pobla rmada en 1611 (tabla i-3.1). 16 AMP, 49/1, cOnSeJOS MUniciPAleS 1616-1648, ff. 215-217. 17 Ace, nm 1047. 18 ACE, nm 1048. Copia del notario Martn Juan Colomina. Estas capitulaciones no sern respetadas, lo que queda reejado en AMP, 49/1, cOnSeJOS MUniciPAleS 1616-1648, 27 de octubre de 1631, ff. 155-156. 19 ArV, reAl cAncillerA, reg. 527, ff. 400 y sig. 20 e. ciScAr PAllArS, Tierra y seoro... op. cit., pp. 140-141. 93 Sabina Asins Velis don Antonio coloma y doa Juana enriques de Mendoa anticipndose (junto con don Felipe Boyl, 21 seor de Manises, y don lucas Malferit, seor de Ayelo) a los dems miembros del estamento militar rmaron el 10 de octubre de 1612 una Capitulacin y Concordia con los censalistas para aliviar el 22 grande empeo de los dichos condado y villas . En la Concordia se especica que los condes prometan pagar, con obligacin e hipoteca de sus bienes, las pensiones de los censales cargados por ellos mismos, 23 por las aljamas del condado y por los particulares moriscos , cuyo total anual ascenda a 5.277 libras, 14 24 sueldos y 6 dineros , renunciando adems a los derechos de alimentos sobre las rentas, censos, frutos, regalas y otros derechos dominicales. Tabla I-3.1. Pensiones anuales de los censos cargados por la aljama de Petrer hasta 1609 25 (carta Pobla, captulo 15) COMPRADOR PENSIN ANUAL QUITAR POR % ANUAL (LIBRAS/SUELDOS/DINEROS) (LIBRAS) La Iglesia 25/00/0 Juan Serrano 112/10/0 Obispo y Captulo 40/00/0 Balthasar Julin 83/00/0 Colegio de Orihuela 16/13/4 * Francisco Martinez de Olivencia, de Valencia 35/00/0 400 8,75 San Juan del Mercado 33/ 6/8 Isabel Rico 73/00/0 TOTAL 418/10 1 libra = 20 sueldos; 1 sueldo= 12 dineros Para que los censalistas pudieran cobrar las pensiones, las rentas del conde en las villas de elda, Petrer y Salinas estaban secuestradas y arrendadas, por orden y provisin de la real Audiencia de Valencia, a Hieronimo de Vallebrera, de la ciudad de Alicante, por 7.250 libras anuales, desde el da 1 de enero de 1612 hasta el 31 de diciembre de 1619. la cantidad establecida la deba depositar Vallebrera en dos pagos (navidad y San Juan) en la tabla de cambios y depsitos de la ciudad de Valencia, a suelta de la real audientia, de donde retiraran los acreedores censalistas las pensiones anuales, a fuero de 10 dineros por libra durante los aos que duraba el con- trato de arrendamiento. de igual manera, se estableci que del 1 de enero de 1620 en adelante los acreedores censalistas deban recibir las pensiones anuales de los censales a fuero y cantidad de un sueldo (12 dineros) por 26 libra . el capitn Vallebrera debi aceptar hacerse cargo por su amistad con el conde de elda, ya que: 21 Pragmticas para la reduccin del inters de los censales: 2 de abril de 1614 (ArV, reAl cAncillerA, reg. 699, ff. 158-164); 21 de julio de 1614 y carta de 21 de diciembre de 1615 (ARV, REAL CANCILLERA, reg. 698, ff. 181 y 185); de 26 de septiembre de 1620 (ArV, reAl cAncillerA, reg. 698, ff. 245-246v.) y 28 de septiembre de 1622 (ArV, reAl cAncillerA, reg. 699, ff. 190 y ss. tambin en ArV, reAl cAncillerA, reg. 698, ff. 72 a 75v.). 22 ArV, MAnAMentS Y eMPAreS. Ao 1612. libro 8, Mano 83, Fol. 42-69. Se inserta la licencia del conde a la condesa para hacer la Concordia con los censalistas (14 de agosto de 1612). La Capitulacin y Concordia fue autorizada por el rey, recticando algunos puntos (ArV, reAl cAncillerA, reg. 698, ff. 163bis-163bis v., 9 de junio de 1614). citada en la Recopilacin de los daos que ha de causar... de Mosn Bartolom Sebastin (ArV, reAl cAncillerA, reg. 698, legajo separado, p. 3). 23 la capitulacin 12 afect a los cristianos viejos de elda y Salinas, porquanto los pobladores antiguos cristianos viejos de dicho condado y villas solian contribuir en algunos censales por cuenta propia juntamente con los moriscos expulsos... el dicho conde y sus sucesores tengan facultad de poder recobrar de los dichos pobladores antiguos las cantidades que aquellos antes de la expulsion acostumbravan pagar . en el ao 1673 intentaban aclarar este aspecto (Ace, nm 35). en 1656 se les reclama a los vecinos de las tres villas el pago de 29 pensiones atrasadas de un censo cargado el 23 de enero de 1608, que se niegan a pagar aduciendo los captulos de poblacin, AMP 49/2, cOnSeJOS MUniciPAleS 1649-1660, ff. 350-352. 24 Al menos en el ao 1618, en que se tiene constancia por la liquidacin de gastos e ingresos del condado (ArV, MAnA- MentS Y eMPAreS. Ao 1619, libro 7, Mano 68, f. 26). 25 ACE, nm. 1046; T.V. PREZ MEDINA, M.C. RICO NAVARRO, La carta pobla de Petrer... op. cit., p. 166 * este censo de 400 libras se carg el 1 de enero de 1590. lo hered a la muerte de Francisco, en 1599, su hijo Juan Martnez de Olivencia, de quien lo heredara su esposa Beatriz Ainar, ArV, MAnAMentS Y eMPAreS. Ao 1625. libro nmero 2954. 26 Sptima capitulacin. en la octava capitulacin se estipula que los resagos de las pensiones debidas en los aos 1609, 1610 94 Los nuevos pobladores cristianos no tenia interes en dicho arrendamiento, porque la ganancia o perdida, y el dicho arrendamiento le tenia por cuenta del dicho Conde don Antonio, y el dicho don Geronimo avia hecho la obli- gacin y dado anas a contento de la Real Audiencia; y el Conde avia nombrado en Colector a Cristbal Ninou, para que cobrasse las rentas y regalias, censos y herbages del Condado, y 27 pagasse los censales a que estava obligado dicho Conde . en 1622 el conde recibi 3.000 libras de las 100.000 que el rey mand repartir entre los nobles afecta- dos por la expulsin de los moriscos, procedentes de las tierras de los mismos moriscos que se haban 28 vendido, dado en establecimiento o a debitorios . An as, nuevamente, en 1625, los herederos de Francisco Martnez de Olivencia, mediante nueva concordia con don Joan coloma (iii conde de elda), pactaron una importante reduccin del pago de la pensin, que no cobraban desde 1620, a 4 dineros por 29 libra . el nuevo conde no quiso mantener la renuncia a los derechos de alimentos hecha por su padre en la Capitulacin y Concordia, en cuyo concepto reclam 5.000 libras de las que nalmente, y tras varios pleitos con los acreedores censalistas, el Supremo real consejo de Aragn le concedi 2.500 libras 30 anuales desde el 11 de agosto de 1621, fecha en que nuevamente se hallaba secuestrado el condado . 2. El espacio agrcola en el siglo XVII consideramos de inters los datos anteriores porque nos permiten establecer si, como consecuencia de la expulsin de los moriscos, se produjo una reduccin de la renta de la seora dependiente de las tierras en cultivo. Por los datos de que disponemos nos atrevemos a proponer que tal reduccin no fue signicativa en el condado de elda. como hemos visto en el captulo anterior, entre los aos 1583-1587 el entonces conde de elda lo arrend por 6.200 libras anuales. en el ao 1612, una vez expulsados los moriscos y repobladas las villas, el condado se arrend por 7.250 libras anuales, cantidad que sugiere que la produc- tividad de los campos no haba venido signicativamente a menos. Adems, en el ao 1619, contando pechos, arriendo de regalas y diezmos se obtuvieron del total del condado 8.073 libras, 15 sueldos y 7 31 dineros . Por otra parte, como hemos dicho, en 1612 el conde solicit a la villa de Petrer, a cambio de los gastos ocasionados por la repoblacin y reparto de las casas, 400 arrobas de aceite de la cosecha de aceitunas que en ese momento haba en los olivos, cantidad que en el ao 1618 coincida con el diezmo del aceite, lo que tambin nos indicara que la produccin de los olivos no habra disminuido. lo que desde luego si era cierto era el gran endeudamiento del conde de elda, pues de esas 7.250 libras anuales en que estaba arrendado el condado deba abonar 5.277 libras anuales para el pago de las pensiones de los censales. este endeudamiento, unido al esfuerzo que supondra para los nuevos pobla- dores el traslado de localidad, nos inclina a considerar que en un primer momento el espacio agrcola que se les adjudic continuara organizado como en tiempo de los moriscos, dado que los importantes gastos que se hubieran derivado de la reestructuracin de la red de acequias, balsas, bancales asociados y 1611 se cobrarn a fuero y cantidad de 12 dineros por libra. estos atrasos (625 libras anuales) los pagar el conde de las 425 libras restantes de las 525 libras anuales (625 libras ms adelante) que el conde percibe con merced de su Majestad de la Baylia General de Valencia, y de las 200 libras de aquellas 300 anuales que recibe de la Baylia General de la ciudad de Orihuela. Sin embargo, como el conde ya tena comprometidos los ingresos procedentes de las Baylias de los aos 1612, 1613 y 1614, las 1875 libras que sumaban los atrasos de los aos 1609 a 1611 los pagara del residuo del precio del arrendamiento del condado en 5 aos; a saber, del precio de los aos 1615, 1616, 1617, 1618 y 1619, a razn de 375 libras anuales. Adems el conde de elda fue uno de los seores a quien el rey concedi reduccin, cifr. e. ciScAr PAllArS, Tierra y seoro... op. cit., p. 400; Relacion de los seores de lugares del reyno de Valencia a los quales ha concedido su Majestad reducion, realenco y alimentos, ArV, M.r. num 10.113, ff. 16-18v. 27 Ace, nm. 847, f. 2. 28 ARV, MANAMENTS Y EMPARES, Ao 1622, Libro 2, mano 25, ff.39-48, 12 de febrero de 1622; y mano 26, ff. 1-12. 29 ArV, MAnAMentS Y eMPAreS. Ao 1625, libro nmero 2954. en la Pragmtica de 28 de septiembre de 1622 ya se reconoce que hay lugares que antes eran de moriscos en los que se estn cobrando las pensiones a razn de 3, 4 y 6 dineros por libra (ARV, REAL CANCILLERIA, reg. 698, f. 74v.). Las dicultades en el pago hasta el ao 1625 fue similar a otras casas como se reconoce en ArV, reAl cAncillerA, reg. 698, ff. 289-294. 30 ARV, REAL AUDIENCIA, Procesos parte 3, exp. 2284; ACE, nm 256. 31 ArV, MAnAMentS Y eMPAreS. Ao 1619, libro 7, Mano 68, f. 30. 95 Sabina Asins Velis a esos riegos, caminos, etc. seran difcilmente asumidos tanto por la seora, a quien le hubiera corres- pondido pagar una tercera parte de algunos de esos gastos segn los acuerdos de la carta Pobla, como por los nuevos habitantes. el espacio agrcola del trmino de Petrer, a excepcin del rea destinada a cultivos de secano, ocupa- ba al menos 144,12 hectreas. de ellas 24,02 (equivalente a 200 tahllas) eran de regado y otras 120,10 de secano mejorado, sin contar algunos huertos y algualejas, que como se indicaba en la carta se distri- buiran por autos particulares (tabla i-3.2). esa extensin de huerta, junto al ncleo de poblacin (24,02 hectreas), debi quedar fosilizada desde poca islmica y fue prcticamente la misma a lo largo de los siglos siguientes, como recogen los datos de los aos 1882 (25,01 hectreas) y 1900 (26,20 hectreas), que ampliaremos ms adelante. En la descripcin de las propiedades que se recoge en las distintas Giradoras queda de maniesto la intercalacin de acequias, boqueras, balsa, canales, sendas y caminos en la conguracin del espacio abancalado del regado o secano mejorado, que se dedicaba a productos de la huerta, vias y malloles, olivos, tierra blanca (cereales) o campa e higueras. constan numerosas referencias a bancales en regado y secano mejorado en el libro Giradora que se inicia el ao 1636, tanto en la partida de los Olivares como en la de las Vias de Arriba, abastecidas por el agua de la balsa, en la de las Vias de Abajo o en las algualejas en el ro. en la partida de la Huerta, adems de las propiedades particulares, haba bancales 32 de tierra blanca propiedad de la villa . A cada familia se le distribuyeron en regado y secano mejorado casi una hectrea y media. Adems se les adjudic una cantidad no detallada en secano, pero que por las ventas y donaciones registradas entre 33 1665 y 1699 pudo estar entre 15 y 25 jornales , es decir de 7,2 a 12 hectreas. Un ejemplo signicativo es la donacin de Mara Brotons a sus hijos y hermanos, que constaba de 14 tahllas (1,2 hectreas) en regado y secano mejorado (huerta, via y olivera) y 15 jornales (7,2 hectreas) en secano distribuido en 34 tres partidas distintas del trmino . en dos ventas registradas en que la extensin de jornales de secano era mayor (20 y 25 jornales, equivalentes a 9,6 y 12 hectreas), se indica que se trata de una heredad, 35 que se componan de casa, corral y era, como la que se vendi en Pua . teniendo en cuenta que fueron 100 las familias a las que se distribuy la tierra, la extensin del secano tras la repoblacin pudo alcanzar entre 900 y 1.000 hectreas. A los pocos aos, el 31 de julio de 1616, con la rma de mejoras a la Carta de Poblacin, se les autoriz a introducir otros cultivos, adems de los ya especicados en la Carta de 1611, como vias de vino (sin arrancar las vias de pasa), almendros, ans y legumbres, pagando por ello de diezmo 1/12, diversicando de este modo la produccin. El rea de secano dispona tambin de sectores de regado intercalados, gracias a pequeos manantiales, como 36 nos informa la documentacin desde nales del siglo XVI . los ingresos que el cultivo y venta de los productos del campo proporcionaba a los agricultores se complementaban con la explotacin de la 37 cabaa ganadera y con los aprovechamientos del monte . 32 AMP, libro Giradora, 44/1, ff. 1, 62, 64, 91, 96, 111, 116, 119, 146, 148, 172, 246, 260, 273, 283. 33 Aunque las fechas de 1665 y 1699 puedan parecer algo tardas para hacer estas estimaciones, la coincidencia en la extensin de las ventas y repartos de herencias parece indicar que los campos se haban distribuido hasta alcanzar entre 7 y 12 hectreas. APM, seccin Petrer, ao 1665, herencia de Angela Esteve, ff. 41-43; APM, ao 1665, seccin Petrer, herencia de Pere Paya de Gregori, ff. 74-75; APM, seccin Petrer, 6 de septiembre de 1690; APM, Petrer 14, libro aos 1698-1699; 3 de enero, 6-7-11 y 15 de febrero, 11 de marzo, 1 de junio, 22 de julio, 4 de septiembre y 13 de noviembre de 1698; 2 de febrero y 9 de septiembre de 1699; ARV, BAilA A, expedientes de amortizacin, Petrel, ao 1764-66, 1779, 1788-91, reg. 2917, f. 53. 34 APM, Petrer 14, libro aos 1698-1699, 9 de septiembre de 1699. 35 APM, Petrer 14, libro aos 1703-1704; Ao 1704 f. 270. 36 Ya a principios del siglo XVii, en la Giradora de 1636, se indica que Joan Pay dispona en la partida de cat de una pequea rea de huerta abancalada. AMP, libro Giradora, 44/1, f. 1v. 37 la estructura de la tenencia agraria y el rgimen de explotacin en el siglo XVii en: t.V. PreZ MedinA, La tierra y la comunidad rural& op. cit, pp. 62-67 y 75-78. 96 Los nuevos pobladores cristianos Tabla I-3.2. extensin del regado y secano mejorado en 1611 PARTIDA EXTENSIN m 2 100 suertes m 2 TOTAL ha PECHO Libras Huerta 2 tahllas = 2.402 m 2 240.200 24,02 6 Vias de Arriba, con riego eventual 3 tahllas = 3.603 m 2 360.300 36,03 2 Oliveras, con riego eventual 30 pies (en unas 3 tahllas) = 3.603 m 2 360.300 36,03 3 TOTAL CON RIEGO DE LA BALSA = 96,08 hectreas Vias de Abajo, CON RIEGO DEL 4 tahllas = 4.804 m 2 480.400 48,04 4 AGUA DE ELDA TOTAL 14.412 m 2 1.441.200 144,12 Jornales sin especicar. Estimado entre 15 y 25 jornales (entre 7,2 y 12 hectreas) Secano por familia. en total pudo distribuir entre 900 y 1.000 hectreas Algunos huertos y algualejas Jornales sin especicar las partidas que se distribuyeron en el secano en el ao 1611 estaban ubicadas en las zonas que se indi- can en la Tabla I-3.3 y Anexo Cartogrco, mapa siglo XVII. Por cunto se reere a nuevos repartos de tierras tras la repoblacin, tenemos documentado un establecimiento, en el ao 1620, en que se concedi a Frances Maestre una suerte propiedad de la villa en el esquinal de Pua, lindando con la montaa y el 38 camino de castalla ; de otros establecimientos de tierra tenemos constancia porque se anotaban en los libros de Giradora, como as se indica que era la costumbre en la documentacin del siglo XViii. los topnimos los localizamos tambin gracias a los consejos Municipales y a los registros notariales. en 1636 constan bancales en las partidas del Figueral rot (tierra campa, frente a la rambla del Zit), 39 Salinetes, la Foya del Sit, el Almorch y cochinet (tierra campa) . Bancales que se siguen citando en la Giradora de 1654, en las mismas partidas, y en donde se sigue especicando en algunos de ellos que 40 se trata de bancales blancos (cereales) . de igual modo, son numerosas las referencias a los bancales 41 42 en la Giradora de 1682, en los mismos emplazamientos . las tierras cercanas a la mina de Pua se cultivaban en bancales en 1651; y alejada del ncleo urbano, la denominada heretat de Noguera estaba ya en produccin en secano y en secano mejorado, abastecida por fuentes y abancalada, al menos desde 43 la mitad de esa centuria . estas partidas del secano se repartieron con la nueva poblacin, a las que se sumaron nuevos estable- cimientos conforme aumentaba el nmero de habitantes. lo que se produjo de forma lenta, pues desde principios a mediados del siglo XVII, su poblacin no experiment un crecimiento signicativo. El censo 44 de Generalidad de 1646, estim para Petrer 120 familias , equivalente a unos 540 habitantes. en el ao 1650, un censo municipal nos aporta la cifra de 153 familias, unos 688 habitantes. dado que la tasa de cre- cimiento nos parece demasiado elevada entre esos cuatro aos (27,45%), consideramos ms able la cifra 45 proporcionada por el censo municipal . la poblacin habra crecido de unos 450 habitantes en 1611 a unos 688 en 1650, es decir un 52,88% en 39 aos, lo que dara un crecimiento medio anual bastante bajo. A partir de la segunda mitad del siglo, con la nueva Giradora (ao 1654) se anotarn nuevas partidas rurales y caminos que comunicaban entre ellas (como el de Girney, dels Sequers, del Salitre y la senda 38 AMP, 49/1, cOnSeJOS MUniciPAleS 1616-1648, ff. 37v-38, 10 de enero de 1620. 39 AMP, libro Giradora, 44/1, f. 1 v, 4v, 88-89. 40 AMP, libro Giradora, 44/2, ff. 15, 44, 49, 61, 69, 89, 91, 92, 98, 106, 111,117, 129, 130, 172, 183, 191, 195, 220, 226, 228, 273, 281. 41 AMP, libro Giradora, 44/3, ff. 2, 6, 7, 9, 11, 14, 19, 21, 25, 32, 34, 36, 38, 41, 47, 56, 66, 67, 73, 83, 87, 89, 91, 102, 106, 111, 113, 115, 116, 123, 128, 133, 141, 146, 150, 155, 158, 183, 227, 235, 236, 237, 240, 256, 276. 42 AMP, 49/2, cOnSeJOS MUniciPAleS 1649-1660, captulo 7 de la construccin de la mina. 43 AMP, Libro Giradora 44/2, f. 137; AMP, Llibre de Amostasaf (1660-1700), Caja 37, expediente 1, s/f., 4 de marzo de 1686. 44 desde 1611, con una estimacin de 450 habitantes la tasa de crecimiento habra sido un 0,57% medio anual en 35 aos 45 Censo de 1646: ARV, GENERALIDAD, reg. 4826, ff. 42-44; Censo de 1650: AMP, 49/2, CONSEJOS MUNICIPALES 1649-1660, ff. 71-76. Para la conversin estimamos 4,5 habitantes por casa. Segn los datos del censo de Generalidad, desde 1611, con una poblacin estimada en 450 habitantes, hasta 1646 la tasa de crecimiento medio anual habra sido un 0,57%, can- tidad muy baja, mucho ms que el 1,36 que nos aporta el censo municipal, que tambin nos parece baja. 97 Sabina Asins Velis del campet). tambin se indica que las huertas se extendan abancaladas hasta la rambla de Pua y la 46 montaa, y se trabajaba en la partida del Algup (en secano) . en 1655 se nombran las partidas del cam- 47 pet, carril, derramador de corts, Sequers, Foya del castell, navayol y toll de domingo . en 1658 se 48 trabajaban tambin los bancales de la Pedrera y en 1662 se cita la partida de Almatar de los Moros (la 49 Solana de Almatar), encima de los bancales eo boltes de Varoni als Castellarets de Rabosa ; en 1665 se venden por 130 libras dos suertes en la partida de Pua, de unos 14 jornales (6,72 hectreas), una ubicada en la partida del Estret de Cat -en concreto se especica que frente a las tierras de la Gurrama y la Foya 50 Falsa, por lo que podra tratarse de la zona del pantanet-, y la otra en la Xinquera ; se cultivaban vias en el campet, higueras en els Pedregals, productos de secano en les boltes de Baroni (frente al barran- 51 co del Forn del Vidre), en rabosa y en la lloma de lopo (en la partida de cati) ; as como tambin se 52 cultivaba via en la partida del Almafr . Adems, gracias al contrato de arrendamiento a partido de una heredad en Pua propiedad de la viuda Josepha Pico, ubicada frente al Riu dels Molins (rambla de Pua), conocemos las particularidades con que estos se detallaban; en este caso concreto los cultivos eran olivos, forment y sivada, y se especica que no se podan sembrar en la propiedad avena, centeno, panizos ni alcandas; el contrato era para cuatro aos durante los cuales la renta que hicieran las oliveras sera a medias, quedando encargado de todos los trabajos el arrendador, hasta que se partieran el aceite; 53 del forment, la sivada y cualquier otro tipo de grano pagara de cinco-uno, sin sacar la simiente . en 1666 se vuelve a arrendar la heredad llamada del Girney en la que haba plantadas numerosas oli- 54 veras . ese mismo ao se vende a la villa de Petrer, por deudas, una heredad en Pua compuesta de casa, 55 tierra campa, corral y era, ms 8 jornales en la costa de Pua y otros 8 jornales en Xenquera ; en 1669 se 56 cultivaban bancales plantados de almendros, de la variedad maquilla, en la heretat de la Gurrama ; y se sembraban 3 jornales de tierra campa en la partida de la Pea de les Monteses, frente a la senda del Paloma- 57 ret . con anterioridad a 1678 haba plantados 8 jornales de almendros y oliveras en la Foya Falsa, frente al 58 59 barranco del Cajuli y 10 jornales en las Ombras del esquinal, lindando con el trmino de castalla . en 60 la partida del esquinal se diferenciaba un trozo de tierra que se conoca por la sort del Ginebre . tambin consta que Mosn Toms Rico ya tena propiedades en la partida de Cat, gura que destacar en la pobla- 61 cin por el Beaterio, escuela y capellanas que mandar fundar a principios del siglo siguiente . el Bancal del Garrofer, en la partida del derramador de cortes, constaba de 2 tahllas de vias, y algunas oliveras y 62 63 algarrobos , y la foya de detrs del castillo y la partida de Ferrusa estaban ya en cultivo . en 1680 se citan ribas en las partidas del Almatar y del Alaig, que tendra una zona en secano mejorado gracias a la fuente 64 del Alaig, al igual que la propiedad en la que se inclua la fuente de tortosa . Aqu, en el Alaig, mossen Onofre esteve, Prevere de Petrer, vendi en 1686 la parte que tena de la heretat del Alaig y otras tierras a Balthasar tortosa y su esposa Margarita Agullo. Al cabo de tres aos, dicho matrimonio compens el precio 46 AMP, libro Giradora, 44/2, ff. 24, 53v., 72, 109, 143, 147, 193. 47 AMP, 49/2, cOnSeJOS MUniciPAleS 1649-1660, ff. 269-271. 48 AMP, 49/2, cOnSeJOS MUniciPAleS 1649-1660, ff.361-362. 49 Ace, nm. 857, 23 de febrero de 1662. 50 APM, seccin Petrer, ao 1665, 15 enero. 51 APM, seccin Petrer, ao 1665, herencia de Angela esteve, ff. 41-43. 52 APM, seccin Petrer, ao 1665, f. 65. 53 APM, seccin Petrer, ao 1665, 22 febrero. 54 APM, seccin Petrer, ao 1666, f. 299v. 55 APM, seccin Petrer, ao 1666, f. 383, 5 diciembre. 56 APM, seccin Petrer, ao 1675, 8 de septiembre. en 1687 se intenta la venta de 13 jornales plantados de almendros en esta partida, que vuelve a recuperar esperanza Perez (APM, notario Joseph Gil, ao 1689, 2 de abril). 57 APM, seccin Petrer, ao 1669, 6 de septiembre. 58 APM, seccin Petrer, ao 1678, 16 de noviembre. 59 APM, seccin Petrer, ao 1678, 27 de agosto. 60 APM, notario Joseph Gil, ao 1689, 2 de abril). 61 APM, seccin Petrer, ao 1678, 15 de diciembre. 62 APM, seccin Petrer, ao 1679, 16 de abril. Se vende por 34 libras. 63 APM, seccin Petrer, ao 1679, 7 de septiembre. Venden 4 jornales y medio en la foya, frente a las eras, el camino de Ferrusa y dels Sequers. 64 AMP, llibre de Amostasaf (1660-1700), caja 37, expediente 1, s/f., 3 de agosto de 1680. 98 Los nuevos pobladores cristianos de estas tierras con las que ellos tenan en la partida de rabosa, con una extensin de 16 jornales plantados de almendros (lindaba por levante con la tierra llamada del raco del Alaig, por poniente con el barranch de 65 Rabosa, y por levante con realengo) . la pea Foradada, en la partida de cat, estaba abancalada al menos hasta la mitad de sus laderas de levante y poniente, cuyas tierras trabajaban Vicent Garca y Madalena Paya 66 de Petrer, sirviendo las ribas como lneas divisorias de sus respectivos campos . en la Foradada se ubicaba 67 el maset de Sirera, en el que se cultivaban tres jornales de trigo y un jornal de batalafua . las ordenanzas municipales de 1658 protegan los bancales del trmino, castigando con penas mone- tarias a quienes hicieran caminos por bancales ajenos, pasasen por ellos con cabalgaduras o plantaran rboles a menos de 5 pasos del lindero del bancal del vecino. ninguna persona poda sacar hierba de su 68 bancal y ponerla en el camino, sino en los mrgenes de los suyos, bajo pena de cinco sueldos . en cuan- to a la roturacin de nuevas tierras era frecuente la ampliacin en terrenos incultos colindantes, sin pedir licencia para ello: thomas Brotons haba labrado un malladar arriba del clot dit de Santo en tierras de 69 realengo, que por tanto no le pertenecan, y que desde la repoblacin no se haban cultivado . tambin se daba el caso de recurrir al almotacn para que inspeccionara a los vecinos que abancalaban tierras que no eran suyas, como en 1686 en que la viuda de Melchor Maestre haba labrado sin pertenecerle un malladar de tierra en la solana de la sierra de noguera, arriba de donde naca el agua, en el alto del 70 collado, cuyas tierras, trabajadas haca ms de 40 aos, pertenecan a la heredad de noguera . e incluso cuando algn vecino intentaba cultivar en bancales en zonas de paso comn, como junto al abrevadero 71 del ganado en el barranco de noguera, lo que no se autoriz por ser paso comn y realengo . en 1688 se reclam a Batiste Maestre, quien arriba del toll de Domingo, por el camino del Almorch a la rambla de caprala, haba hecho un camino por dentro del bancal de Baltazar Maestre, y describen: la senda que dexa el cami de Salines pera anar dins lo Almorcho per la orellada dels bancals de Balthazar Maestre y li toca al dit Balthazar Maestre tenir bo y rebedor ns La Calera que esta al cap de amunt y de La Calera amunt toca als hereters..., por lo que toda la ladera estara ya abancalada. este hecho se volvi a repetir en 1693 cuando Gines Joan labr el camino que, por encima del convento de elda, 72 atravesando un bancal, utilizaban carros y cabalgaduras para dirigirse a la villa de Salinas . en otras ocasiones, sobre todo si las piedras cadas entorpecan la circulacin del agua de las acequias, 73 se solicitaba a los propietarios de los campos que repararan las paredes de los bancales . las paredes deban hacerse tanto de piedra como sin ella; en este ltimo caso, la erosin de los lomos se paliaba uti- 74 lizando el esparto: para atochar los rivazos de los Bancales . Adems tambin se penaba si los cultivos de un bancal perjudicaban a los del bancal colindante: ...an acsedit a la orta de dit Guillem Paia que esta davall lo partidor de davall la Baa a on en te unes parres vora de la riba... que les dites parres per estar plantades tan vora de la riba migera y ser tan grans y losanes fan pergui a la orta de dita viuda... axi per la molta sombra com per els molts sarments que baxen riba avall que es calen en el bancal, e o, orta de baix si no els tallen... deu dit Guillem Paia apartarles devers el seu bancal tres pams la soca de aquelles y que estiguen 75 tretes y en cava decantades deves lo bancal de dit Guillem Paia . la tierra de que dispona la alcalda alrededor del castillo pas a ser Bien comn de la villa en 1670, cultivndose los bancales a jornal, que pagara la villa, formndose un psito con el trigo que all se 65 APM, notario Joseph Gil, ao 1689, 23 de marzo. 66 AMP, llibre de Amostasaf (1660-1700), caja 37, expediente 1, s/f. 1680-1681. 67 AMP, Ma de execucions de la vila de Petrer. 21 de junio de 1681. 68 AMP, 49/2, cOnSeJOS MUniciPAleS 1649-1660, ff.365-371. Ao 1658. Clams de Sequies y Camins. 69 AMP, llibre de Amostasaf (1660-1700), caja 37, expediente 1, s/f., 17 de mayo de 1681. 70 AMP, llibre de Amostasaf (1660-1700), caja 37, expediente 1, s/f., 4 de marzo de 1686. 71 AMP, llibre de Amostasaf (1660-1700), caja 37, expediente 1, s/f., 5 de febrero de 1693. 72 AMP, llibre de Amostasaf (1660-1700), caja 37, expediente 1, s/f., 11 de agosto, 3 de septiembre de 1688 y 5 de febrero de 1693. 73 AMP, llibre de Amostasaf (1660-1700), caja 37, expediente 1, s/f., 24 de octubre de 1693, fuera de orden, acequia de Pua. 74 AMP, 49/3. lliBre de cOnSellS 1700-1712: Ao 1700, f. 27. 75 AMP, llibre de Amostasaf (1660-1700), caja 37, expediente 1, s/f., 5 de noviembre de 1700. 99 Sabina Asins Velis 76 cosechara . como ya ocurriera en las Giradoras de los aos 1636 y 1654, en la de 1675 se documenta tambin por escrito la disposicin del espacio agrcola junto a la poblacin y el abancalamiento desde la curva de nivel de 500 a 400 metros, en la partida del campet direccin a la acequia de elda, repi- tindose continuadamente la intercalacin de sendas, acequias y bancales plantados de via, almendros 77 y olivos . Hacia el este, la zona de huerta en la segunda mitad del siglo XVii llegaba ya abancalada 78 hasta el piedemonte, a ambos lados de la rambla del Asutet (la de Pua) . Y en 1690 se vuelve a incidir documentalmente en el abancalamiento tanto en las Vias de Dalt como en las de Baix y en los Oliva- res, entre los que discurran distintos tramos de acequias, como ya vimos en las Giradoras. igualmente estaban abancaladas la ladera del camino que iba a la partida de Figuerals rots y la zona de Salinetas, 79 que contaba en algunos sectores con acequias para regar los mallols . Se cultivaba tambin en les foyes de Noguera (higueras y oliveras), en la foya de Berbegala, en la 80 partida del Pasador, en el Perri, en la foia de darrere del Castell y el Guirnei (Figura i-3.1). en 1698, 81 los bancales llegaban hasta la orilla de la rambla del esquinal, en el lmite del trmino municipal ; y 82 a nales de siglo se ampliaba el cultivo de la via en la partida de l Almafr . Por el documento de delimitacin de los trminos de Petrer y castalla, en 1698, que completaba al que hemos citado del ao 1503, se nombran el estrecho de la Sara, la pea roga (antes Morral roig), el Alt dels castellars o de 83 ribelles, la casa de nieve de cat y la pea del Frare . 76 M.c. ricO nAVArrO, Apuntes para la Historia de Petrer. Petrer: Ajuntament de Petrer, Caixa de Crdit de Petrer; Ali- cante: Universitat d Alacant, 2000, p. 186. 77 AMP, Llibre de Amostasaf (1660-1700), Caja 37, expediente 1, s/f., 14 de junio de 1680, rerindose a 16 de octubre de 1675. 78 AMP, libro Giradora, 44/2, f. 100, huerta de Gregori Brotons, y AMP, libro Giradora, 44/3, f. 76v. huerta de Pere Perales (en la partida dels orts de la part della de la Rambla). 79 AMP, Llibre de Amostasaf (1660-1700), Caja 37, expediente 1, s/f., 6 y 16 de septiembre de 1690; 14 y 29 de enero; 10 y 14 de marzo de 1693; 8 de mayo de 1695; 19 de diciembre de 1699. 80 APM, Petrer 14, libro aos 1698-1699; 7 de febrero, 11 de marzo, 22 de julio, 4 de septiembre de 1698, 81 APM, Petrer 14, libro aos 1698-1699; 6 de noviembre de 1698 (delimitacin del trmino). 82 AMP, libro Giradora, 44/3, f. 143. 83 APM, Petrer 14, libro aos 1698-1699; 6 de noviembre de 1698 (delimitacin del trmino). 100 Los nuevos pobladores cristianos Tabla I-3.3. Partidas en cultivo en el siglo XVii. las fechas indican la primera referencia escrita localizada, por lo que se encontraban en cultivo con anterioridad a esa fecha PARTIDAS EN CULTIVO Citadas con Partidas alrededor de la villa: con riego de la balsa de la villa: dels Horts (24 hectreas), dels Olivars y de les Vinyes anterioridad a de Dalt. 1611 Sub-partidas en la zona dels Horts: Almafra, Viley/Videy, partida del cam de la enia, del cam de les Vies, del cam de elda, del cam dellig (elche), de Xuqueta, senda del bancal del lup, partida de Mail Almehim, de la Balsa, de la daya, Alqiubla, del Anafaraig/canafaraig, del Fossar, partida de la senda del cam de novelda, del Arney (que pudo derivar en Guirney), del Fossar, algoleja en la boca del Riu de Petrer (rambla de Pua), frente al azud etc. De les Vinyes de Baix (con riego de la Acequia de Arriba, desde 1536 en que se construye la Acequia del conde). Caada darrere lo Castell (con anteriodad a 1582). Partida de Salinetas, partida del Pedregal y partida del Almorchon (partidas del retamar del Almorchon y de la caada del llentiscle), con anterioridad a 1582. Partida de Santa Brbara, con anterioridad a 1586. tierra del morisco nofre aet, alias Berbegal (que viva en Petrer en 1586, apodo que perdurar a travs de los siglos en el topnimo de la foya y el monte de Berbegala). Partidas alejadas de la villa: tierras de una posible alquera en Pua en el siglo XV y Foyes de Pua (con anterioridad a 1503). Foyes de cat, lindando con el trmino de castalla (con anterioridad a 1503). Fontanars (con anterioridad a 1573). caprala (con anterioridad a 1576). noguera (con anterioridad a 1576). en Pua, al menos en 1580, se cultivaba junto al camino de castalla, en la Solana de Pua, en el estret de Pua, en la partida de la Umbra de Marco (apellido morisco documentado en elda en 1583) y en la partida del esquinar. en cat (trigo y pasas): con anterioridad a 1580, partidas de la lloma de lopo, de la Pea Foradada, del tereu, foya y torrente del ezquerfeig(), Almatar , rabosa y Alhaig (antes de 1582). en Palomaret: se cultiva con anterioridad a 1583 trigo y vid (pasas). Heredad de Berengarius Baroni (partida de las vueltas de Baroni, ubicada en Palomaret junto a la rambla del Horno de Vidrio). Partida de la navayol se cita en cultivo en 1583. la Maaba -actualmente la Almadrava- (con anterioridad a 1603). Posible cultivo de la tierra en la partida de cajuli (la casa se cita en 1618). campos de los agricultores de Petrer en Salinas, Sax y elda. 1618 casa del cajuli. 1620 esquinal de Pua (lindando con la montaa y el camino de castalla). 1636 Huerta de Cat; Figueral Rot (ubicada frente a la rambla del Cit); Salinetes; Foya del Sit; Almorcho; Cochinet; Algualejas en el ro. 1646 Heretat de noguera. 1651 Bancales cerca de la mina de Pua. 1654 El Algup (en secano); Huerta a ambos lados de la rambla del Asutet (Pua); els Sequers. 1655 campet, carril, derramador de corts, Figueral rot, Sequers, Foya del castell, navayol, toll de domingo. 1658 la Pedrera. 1662 la partida nombrada de Almatar de los Moros, encima de los bancales eo boltes de Varoni als Castellarets de Rabosa. 1665 Partida del Estret de Cat; la Foya Falsa; terres dites de la Gurrema; Xenquera; els Pedregals, les boltes de Baroni (en- frente del barranco del Forn de Vidre); Rabosa; partida de Cati denominada la Lloma de Lopo; Almafra. 1666 Heretat del Girney; Heretat en Pua; Costa de Pua. 1668 Maset de irles. 1669 Heretat de la Gurrema; Pea de les Monteses frente a la senda del Palomaret. 1670 la tierra de que dispone la alcalda alrededor del castillo pas a ser bien comn de la villa cultivndose trigo. 1675 campet en direccin a la acequia de elda. 1678 Ombras del esquinal. 1679 Bancal del Garrofer en la partida del Derramador de Cortes; Ferrusa. 1680 Almatar; Alaig; Pea Foradada hasta la mitad de sus laderas de levante y poniente; Maset de Sirera en la Foradada. 1681 clot de Santo (roturacin ilegal en tierras de realengo), Ginebre. 1686 Solana de la sierra de noguera, en el alto del collado (roturacin ilegal). 1688 La Calera; La Pedrera al Cochinet. 1689 Heretat del Forn de Vidre. Partida de rabosa (almellers 16 jornals de llaurar), terra del raco del Alhaig. 1690 ladera del camino que iba a la partida dels Figuerals rots y la zona de Salinetes. 1698 Foyes de Noguera; Foya de Berbegala; El Pasador; Perri; Hasta la orilla de la rambla del Esquinal. 101 Sabina Asins Velis CULTIVOS Y PRODUCTOS 1611 trigo, cebada, alcanda, mijo, panizo, via (vino, pasas), centeno, aceite, grana, cardo, lino, camo, barrilla, salicornio y otras cosechas de regado y secano. Haba tambin higueras. 1616 autorizacin para plantar vias de vino (sin arrancar las vias de pasa para ello), almendros, ans, salicornio, barrilla, legumbres, lino, cardo y otras menudencias. 1679 Algarrobos. 1681 Batalafua. Fig. I-3.1.cultivos junto al pueblo de Petrer en el ao 1961, las terrazas del secano datan, al menos, de nales del siglo XVI. Desde mediados del siglo XX, gran parte de la huerta ha sido sellada por las construcciones, en primer trmino en la imagen. La echa seala la ubicacin del castillo (Foto: Archivo de Urbanismo, Ayuntamiento de Petrer) 3. Ampliacin del sistema de riego: manantiales, azudes, acequias, boqueras, balsas y la construccin del pantano la extensin de las partidas de regado (partida de la Huerta) y riego eventual (de las Oliveras y de las Vias de Arriba) dependientes del agua de la Bassa Fonda, en total 96,08 hectreas que se distribuyeron en la carta Pobla, habra quedado fosilizada desde la construccin de esta balsa, debido a su capacidad 3 ja (1.000 m ) y a la duracin establecida de los turnos de riego. cabe la posibilidad, como hemos co- mentado, de que esta balsa fuera una construccin de nales del siglo XV-principios del XVI, en que pudo ampliarse el rea cultivada de la primitiva huerta musulmana (partida de la Huerta) con la puesta 84 en cultivo de las partidas de las Oliveras y de las Vias de Arriba, en riego eventual . el agua de la 85 mina de Pua se almacenaba en esa gran balsa , cerrada entre las 18 y las 6 horas y en verano entre las 84 en un documento fechado el 26 de enero de 1659 se acuerda abrir la cequia de la Pea, por arriba de la baa vella de dita vila (AMP, 49/2, cOnSeJOS MUniciPAleS 1649-1660, f. 452). 85 AMP, 40/1, ff. 30-41, 6 de junio de 1869, en que se redactan las Ordenanzas del riego. 102 Los nuevos pobladores cristianos 20 y las 4 horas, desde la que parta la Sequia Maior (acequia Madre) y distintos brazos, para regar los bancales de las partidas citadas. en el punto en que la balsa daba salida a las aguas haba una tabla, en la que se jaron 46 puntos, que se conocan con el nombre de cuartos y otros medios puntos intermedios a los anteriores que se conocan con el nombre de medios cuartos. esta graduacin tena por objeto la distribucin diaria y exacta entre los regantes. el agua se distribua en 14 turnos anuales, cada uno de 25 das, ms un turno conocido como de las Horetas. los 14 turnos y Horetas comenzaban del 1 al 15 de octubre por un turno de huertas, siguiendo dos turnos de olivares, dos de vias, tres de huertas, uno de olivares, cuatro de huertas y por ltimo uno de olivares. en total las huertas tenan asignadas ocho turnos, los olivares cuatro y las vias dos, partindose el agua de cada da en cuatro tandas de tres horas. 3 en el rea repartida con la repoblacin de 1611, los 1.000 m de capacidad de la balsa aportaran en cada 86 riego una capa de agua de unos 15 centmetros, segn estimaciones de J.M. Bernab . A lo largo del siglo XVii fueron continuos los trabajos de mejora en esta red, desde la captacin del agua en la fuente de Pua hasta su almacenamiento en la balsa, para asegurar un caudal mnimo que aportar a los cultivos, llegando incluso a afrontar los gastos de la construccin de un pantano, como veremos. entre los trabajos de menor envergadura destacan la construccin de un azud en la rambla (de 87 Pua) en 1622, alegando el Consell de Petrer que si no se haca no podran coger panizo , o de nuevo, el 28 de diciembre de 1652, en que se acord hacer otro pequeo azud para facilitar el paso del agua a la 88 acequia que iba a los canales , sin duda en referencia a la partida de la canal, plantada de olivares, vias y almendros en secano mejorado que consta en la documentacin en el ao 1723. la partida de las Vias de Abajo, como vimos en el captulo 9 de la carta Pobla de unas 48,04 hectreas, se regaba con el agua de la Acequia de Arriba, captada en la Fuente del chopo de Villena y denominada el agua de elda . esta partida tena asignados 30 das de agua repartidos en cinco meses, de noviembre a marzo, siendo los tres primeros y los tres ltimos das de cada mes para las tandas de Petrer. A cambio pagaran 50 libras anuales a la villa de elda, estipulndose que el ao que no tomaran el agua no tendran obligacin de pagar. en las mejoras de 1612 aumentaron esta cantidad hasta 34 jornales de agua de 12 horas, de noviembre a febrero, a cambio de 75 libras (1500 sueldos) lo que signicaba para cada agricultor un pecho anual de 15 89 sueldos . A diferencia de lo que comentbamos para la supercie irrigada por el agua de la balsa de la villa, la extensin de esta partida de las Vias de Abajo s pudo aumentar a los once aos de la repoblacin, en 1622, 90 en que la acequia de Arriba cont con dos ramales nuevos . de nuevo, en 1625, se hicieron otros canales en el agua de elda, con la colaboracin de los vecinos de Petrer, quienes entregaron a los de elda 25 quintales 91 de pasas . no obstante, parece que esa ampliacin no increment el nmero de agricultores que utilizaban el agua, ya que si en 1611 se haba distribuido en 100 suertes, en 1659, eran 98 los vecinos que seguan pagando 92 por el agua de elda . estos mismos usuarios, reunidos en consejo en 1680 y acogindose al captulo de la carta Pobla en que se indicaba que el ao que no tomaran el agua no tendran obligacin de pagar, acordaron renunciar al agua, porque quant ve poca aygua per lo Riu no reguen perque en ve poca, y quant ne ve molta com que tam poch reguen porque las acequias de elda no estaban en buenas condiciones y el agua no poda 93 pasar, y no regar y pagar es cossa fort, por lo que propusieron dejar el agua porque no la avem menester . en 94 95 esta partida se cita la parada del Baladre y entre las acequias menores la de la Gerreria . 86 J.M. BernAB i MAeStre, Obras hidrulicas tradicionales& op. cit., p. 30. 87 AMP, 49/1, cOnSeJOS MUniciPAleS 1616-1648, 31 de marzo y 4 de abril de 1622. 88 AMP, 49/2, cOnSeJOS MUniciPAleS 1649-1660, f. 129. el adjudicatario de la obra deba asegurar la rafa, para que no se saliera el agua, a excepcin de en caso de avenida o diluvio. 89 AMP, libro Giradora, 44/1, f. 208. 90 AMP, 49/1, cOnSeJOS MUniciPAleS 1616-1648, f. 51. en este ao tambin se limpiaron las minas de esta acequia. 91 AMP, 49/1, cOnSeJOS MUniciPAleS 1616-1648, f. 75. las obras de carcter municipal se encargaban a los maestros niveladores, los de obras de cantera y los maestros de obras, como se especica en el Consejo de 13 de febrero de 1675 en que se nombr a los especialistas toms Bernabeu y Pedro Bendicho para que aprobaran los trabajos hechos en el azud y en la acequia de Abajo de la villa (M.c. ricO nAVArrO, Apuntes para la Historia& op. cit., p. 187). 92 AMP, 49/2, cOnSeJOS MUniciPAleS 1649-1660, f. 453. 93 AMP, 49/1, cOnSeJOS MUniciPAleS 1616-1648, ff. 215-217. 94 AMP, libro Giradora, 44/3, f. 86. 95 AMP, libro Giradora, 44/3, f. 133v. 103 Sabina Asins Velis el regado y secano mejorado se extenda puntualmente por otros parajes del trmino, en reductos de escasa extensin. esta ampliacin del suministro se lograba a partir del caudal de manantiales y de pequeos nacimientos, de la utilizacin del agua sobrante de la canalizacin preferente de Pua o de la captacin de aguas de avenida mediante boqueras, entre otros, costeando los propios agricultores el importe de todos los trabajos. la nica excepcin la constitua la infraestructura que traa el agua de Pua, de cuyos gastos se haca cargo el Consell de la villa (no olvidemos que a cada familia se le haba dado una hectrea y media dependiente de esta agua), con la participacin de un tercio por parte de la seora, como se hizo tambin posteriormente para construir el pantano. entre los enclavados de secano 96 mejorado tenemos noticia de que haba un pozo en el maset de irles , de que la partida de Salinetes se 97 98 regaba por medio del braal major , y otras zonas gracias al braal dit de la Noguereta y a la acequia 99 del Aljibe, en las vias . los bancals de la vila, dedicados preferentemente al cultivo del olivo, se re- 100 gaban por la del Cequers, que discurra por detrs de los secaderos de la villa . Adems haba una red de acequias que aprovechaban los manantiales del trmino o el desvo de agua de las ramblas, como la acequia del Ruglo que se nutra del encauzamiento del agua intermitente de la rambla llamada de Gaspar 101 Maestre . en la partida de Pua haba una acequia que tomaba el agua de la principal de las fuentes de Pua, justo en una parada que sta tena junto a una olivera grosal. esta conduccin secundaria cruzaba el camino de castalla y regaba, cuando la rambla de Pua vena crecida y sobraba el agua en el pueblo, 102 todos los campos por donde pasaba, al menos desde la dcada de 1630 . Otras acequias las construan los particulares para poner en regado determinados cultivos, como la que, por dentro de un bancal de 103 tierra, le dej abrir Baltasar tortosa a mosn Bonifacio Garca, en Salinetes, para regar los mallols . del cuidado de las canalizaciones y de controlar que llegara el agua de elda se ocupaba el mustasaf 104 de Petrer, por un salario de 4 libras . las dos acequias principales de la villa se conocan como acequia del Riu y acequia dels Comuns; ambas tenan una anchura de agua de tres palmos, de cuya limpieza se encargaba la villa subastndola regularmente, pero ayudando con hombres al arrendador en caso de que se produjesen importantes avenidas de agua que rompieran las rafas o cayesen deslizamientos de tierra 105 en las acequias . Adems, asiduamente se proceda a la limpieza de la red, como se documenta en 1623, cuando el seor conde solicit 50 hombres a la villa para limpiar las minas de Petrer o en 1636 en que se acord que la acequia que se tomaba en el partidor del convento, por la que se regaba con el agua de elda, y en la que iba a la villa y desde la balsa al partidor, cada propietario la limpiara en el tramo que pasaba por su propiedad. tambin peridicamente se inspeccionaba el estado en que se encontraba la balsa de la villa, como se puso de maniesto en la reunin del Consell de 30 de mayo de 1638 en la que se informaba de la necesidad de repararla porque se perda mucha agua, para lo que compraron 106 107 10 cahces de cal . la limpieza de esta balsa sala a subasta y se requiri darle ampriu para que el 108 cieno que de ella se sacaba no fuera a parar a los campos y paredes de alrededor . en 1643 se autoriz a que se limpiara la acequia desde la balsa hasta el azud, y a que se hiciera una contra-arcada para que 109 se pudiera tomar una buena cantidad de agua , y de nuevo en 1646 volvieron a organizarse cuadrillas 110 para limpiar las acequias . 96 Ace, nm. 857, 23 de febrero de 1662. 97 AMP, libro Giradora, 44/2, f. 172v. 98 AMP, libro Giradora, 44/3, f. 22v., con anterioridad a 1690. 99 AMP, libro Giradora, 44/3, f. 271. 100 APM, seccin Petrer, 23 de diciembre de 1689. 101 AMP, llibre de Amostasaf (1660-1700), caja 37, expediente 1, s/f., 18 de noviembre de 1675. 102 AMP, llibre de Amostasaf (1660-1700), caja 37, expediente 1, s/f., 1 de julio de 1693. 103 Quince aos ms tarde le vendera dicha parte de acequia por 12 sueldos. APM, seccin Petrer, 1689, 7 de junio. 104 AMP, 49/1, cOnSeJOS MUniciPAleS 1616-1648, f. 61. 105 AMP, 49/2, cOnSeJOS MUniciPAleS 1649-1660, ff. 153-154, 7 de julio de 1652. 106 AMP, 49/1, cOnSeJOS MUniciPAleS 1616-1648, f. 241. 107 AMP, 49/1, cOnSeJOS MUniciPAleS 1616-1648, ff. 88, 206 y 210-211. 108 AMP, 49/1, cOnSeJOS MUniciPAleS 1616-1648, f. 232. 109 AMP, 49/1, cOnSeJOS MUniciPAleS 1616-1648, f. 362. 110 AMP, 49/1, cOnSeJOS MUniciPAleS 1616-1648, f. 407. 104 Los nuevos pobladores cristianos Con el tiempo, estas disposiciones se reejaron por escrito, en extensas y detalladas ordenanzas mu- 111 nicipales , que prohiban cambiar la direccin de las acequias sin licencia de Justicia y Jurados. estaba tambin penado lavar y dejar pasar al ganado o las cabalgaduras por la acequia que iba a la villa y se obligaba a limpiar las acequias o caminos que enfrentaban con los respectivos campos. de igual modo, los propietarios que poseyeran tierras frente a las conducciones de Pua tenan obligacin de limpiar la acequia, y se prohiba dejar abiertas ms de una parada en los brazales de las acequias de la huerta, 112 via u olivares . Amparndose en estas ordenanzas, en noviembre de 1660, por ejemplo, se le orden a Melchor Maestre que en tres das volviera a construir la acequia que haba deshecho y con la que regaba 113 luis Morant parte de su via , y en 1681 a raz de unas diferencias entre dos vecinos acerca de una boquera situada en la partida del Guirnei, se describe como por medio de un partidor el agua entraba la mitad en la tierra y oliveras de Batiste Prez, y la otra mitad en la de Thomas Brotons, y se especica que deban rehacer la boquera por donde iba antiguamente. Casi a nales de siglo, en 1690, se prohibi desviar el agua que llegaba a la fuente de la poblacin para regar los campos del Guirnei u otras zonas, 114 como venan haciendo los labradores, bajo pena de 60 sueldos . entre los sistemas de captacin de agua ms caractersticos de la zona, que un siglo ms tarde llamara la atencin del botnico cavanilles, destaca la construccin de boqueras para canalizar el agua de ave- nidas. este mtodo lo encontrbamos ya documentado en el ao 1503, pero su importancia aument no- tablemente en la documentacin desde el siglo XVii. As, por ejemplo, a la font dita de mossen Thomas Rico se acceda por una senda por arriba de la loma que comenzaba en el camino que vena de Petrer por unos bancales, e iba a parar a una baeta. Junto a esta red se localizaba la boquera construida por Joseph 115 dura . Se citan tambin la de la partida del Guirnei, que derramaba en la parte de arriba del camino de 116 noguera, e iba por debajo de los hornos de yeso , la de la partida de los Olivares, abancalada y junto a 117 la rambla , y la boquera que, en la partida del Palomaret, bajaba de les Solanes Aspres y derramaba en 118 el trozo conocido como del almelleral . igualmente, en 1679, en los captulos que se redactaron para 119 construir la acequia que llevara el agua del futuro Pantano se cita la que haba en la Gurrama : Primo sea de pendre la aygua damunt la boquera de la Gurrema a on y a una Creu Negra fent asut damunt el charco del sumidor. Y de nuevo en 1693, Melchor Maestre, propietario de la Gurrama, y Berthomeu 120 Molla, propietario de un trozo de tierra junto a esta heredad, pactan ante notario : & baxa dita boquera de dins la cerra dita de les ombries a derramar en dita terra de dit Bertho- meu Molla... Lo dit Berthomeu Molla bona y voluntariament li dona part en dita Boquera al dit Melchor Maestre per a que regue en dita heretat de la Gurrema de la vinguda de aquella y ay- guaduig de aquella ab los pactes y condicions seguents...Primo que lo dit Berthomeu Molla haja de regar sempre... tota la aygua que aura menester... y tota la demes aygua que li sobrara que la puixa regar dit Melchor Maestre y los seus en la sua heretat de la Gurrema& El cuidado y limpieza de los elementos que conguraban este sistema de obtencin de aguas de avenida se inclua tambin en los contratos de arrendamiento de las explotaciones, como en el caso de la heretat de la Gurrama. en los aos 1669 y 1675 se arrendaron, por cinco aos en cada contrato, la casa, el co- rral, la era, y la tierra plantada con numerosos almendros de la variedad maquilla. en los captulos del 121 arrendamiento se especica : 111 AMP, 49/2, cOnSeJOS MUniciPAleS 1649-1660, ff.365-371. Ao 1658, Clams de sequies i camins. 112 AMP, 49/2, cOnSeJOS MUniciPAleS 1649-1660, ff.365-371. Ao 1658. 113 AMP, llibre de Amostasaf (1660-1700), caja 37, expediente 1, s/f., 10 de noviembre de 1665. 114 M.c. ricO nAVArrO, Apuntes para la Historia& op. cit., p. 196. 115 AMP, llibre de Amostasaf (1660-1700), caja 37, expediente 1, s/f., 4 de noviembre de 1676. 116 AMP, llibre de Amostasaf (1660-1700), caja 37, expediente 1, s/f., 17 de mayo de 1681. 117 AMP, libro Giradora, 44/3, ff. 33, 33 (anterior a 1695), 79v. 118 AMP, llibre de Amostasaf (1660-1700), caja 37, expediente 1, s/f., 3 de octubre de 1692. 119 AMP, caja 37, exp. 20. 120 APM, seccin Petrer, ao 1693, 12 de diciembre. 121 APM, seccin Petrer, ao 1669, 8 de septiembre y APM, seccin Petrer, ao 1675, 28 de octubre. 105 Sabina Asins Velis Que lo Arrendador de la Gurrema hasa de fer les boqueres y sustentarles a sa costa y el dia que acabara lo Arrendament deixarles bones y rebedores a coneguda de dos experts& Que lo dit Arrendador haja de fer els portells y adobarlos de manera que no tinguen dany los bancals& los constantes episodios de sequa que se documentan en Petrer en el siglo XVii, coincidiendo con el nal de la Pequea Edad de Hielo, se traducen en el inters por parte de los agricultores de disponer de recursos para mejorar los cultivos, lo que les llev incluso a solicitar permiso a la seora para utilizar el dinero que se obtena del arrendamiento del bovalar de las vias, durante 8 aos, para alumbrar y au- 122 mentar las aguas de la villa . Igualmente se consideraba prioritario buscar nuevos pozos manantiales; as, por ejemplo, en 1647 se aprob que se trajera agua de cat y de Xenquera y que se uniera a la que ya 123 dispona el pueblo para aumentar el caudal, coste lo que costes . la captacin de agua en este ltimo emplazamiento no se hizo realidad hasta mucho tiempo despus, si bien en 1689 ya se haba llevado al zahor de Jumilla, Joseph Avellan, a la margaleta de Xinquera (en el esquinal) donde haban comenzado una excavacin; el zahor les advirti de la gran cantidad de agua del pozo, que podran dirigir por la 124 rambla del esquinal . El agua del Esquinal, nalmente, no fue utilizada por los agricultores de Petrer hasta muy recientemente (ao 1965). el zahor fue tambin, en 1691, a la fuente del estrecho de cat, 125 donde determin que se cavaran 14 palmos en una pea encima del Pantano . En la bsqueda de nuevos recursos de agua se podan asociar varios labradores, rmando Captulos para la explotacin del agua. en la partida de la Pedrera al cochinet, cerca del camino del Almorcho, dentro de un bancal de tierra, lorens Molla, Visent Garcia y Sebastian Sanchez compartan un pozo que los dos primeros haban excavado. en el pacto que redactaron acordaron limpiarlo y empedrarlo conjuntamente, respetar los 126 amprius y tener derecho los tres a entrada y salida por el bancal . Adems el agua de los manantiales se conceda tambin por va de establecimiento por parte de la seora. en 1689, Joan Andreu coloma Prez calvillo de Saha (iV conde de elda) estableix, dona, cedeix y assenta per via de establiment a Frances Agra- munt, labrador de Petrer y a los suyos, las aguas manantiales del barranco del Forn de Vidre, excepto la fuente que naca en los bancales de la heredad del Forn de Vidre. el agua la llevara Agramunt a los abrevaderos del barranco, bajo el camino que atraviesa para ir a Agost, y de all a sus heredades y tierras, en donde podra utilizarlas para regar o para lo que las necesitara, pudiendo venderlas o donarlas. Poda igualmente alumbrar dichas aguas desde su nacimiento, penalizando con 60 sueldos a quien las usara, excepto el abrevadero del ganado que quedaba a libre disposicin. el pecho que deba pagar Agramunt a la seora por el uso del agua, 127 que se estableca atendiendo a los fueros del reino de Valencia, era de 2 sueldos anuales . las canalizaciones de agua para el riego eran prioritarias a otras infraestructuras, como se aprecia en las condiciones que impusieron para la construccin del molino de plvora que Andreu coloma preten- da levantar en 1650-51, con licencia del seor, junto a la rambla de Pua. los representantes de la villa le exigieron que ste no afectara al agua de riego, por lo que debera situarlo en la pea (o cantal) de 128 la edra . en 1665 acudieron a revisar la red hdrica del molino y obligaron a su propietario a pasar el cajero de la acequia por un punto ms elevado, de manera que no perdiera agua en caso de que viniera en cantidad, y a que rehiciera con argamasa la acequia que Andreu coloma abri nueva desde el molino 129 hacia abajo. Mientras tanto, podra usar la acequia principal . en 1677 le amenazaron con una multa de 10 libras si no arreglaba la acequia por la que se perda el agua de la villa, que se necesitaba urgente- 130 mente para regar el panizo y otros productos (tabla i-3.4). 122 APM, seccin Petrer, ao 1669, 3 de junio. 123 AMP, 49/1, cOnSeJOS MUniciPAleS 1616-1648, ff. 415-416. 124 APM, 25 de febrero de ao 1689. 125 M.c. ricO nAVArrO, Apuntes para la Historia& op. cit., p. 197. 126 Dado que el bancal era de Molla, Garcia le pagaba 6 barchillas de trigo por el derecho a senda; y Snchez a Garca 21 reales por el trabajo realizado. APM, seccin Petrer, 8 de febrero de 1688. 127 APM, seccin Petrer, ao 1689, 11 de enero. 128 AMP, 49/2, cOnSeJOS MUniciPAleS 1649-1660, f. 89. 129 AMP, llibre de Amostasaf (1660-1700), caja 37, expediente 1, s/f, 6 de mayo de 1665. 130 AMP, llibre de Amostasaf (1660-1700), caja 37, expediente 1, s/f, 17 de agosto de 1677. 106 Los nuevos pobladores cristianos Nuevas y lentas excavaciones en las fuentes de Pua A los pocos aos de establecerse la nueva poblacin, el Consell Particular de la villa trat de la amplia- cin del caudal del agua de Pua. el 10 de junio de 1618 reunido ste, tras la visita de un minador y de un fraile de castalla, quienes aconsejaron minar la fuente de Pua para aumentar el caudal, acordaron que Jusep rico, justicia de Petrer, se desplazara a Madrid a solicitar permiso de don Juan coloma para 131 poder cavar la mina . la ampliacin del caudal de riego fue de nuevo objeto de debate en el consejo del da 13 de julio de 1650, en el que se acord que Vicente Alcaraz cavara ms arriba de la Fuente de Pua para aumentar la cantidad de agua que llegaba a la balsa de Petrer. Sin embargo no se busc en ese momento el agua que muchas personas decan or correr por una abertura de la pea en la punta de la 132 sierra del caballo, en Pua . el ao siguiente, se mand llamar a fray Pedro de la compaa de Jess, experto zahor, para que les ayudara a determinar dnde cavar. tras su visita, el fraile detall la forma en que haban de proceder para sacar el agua. entre otras sugerencias destacaba hacer minas nuevas en Pua, lo que sera aceptado por el Consell Particular de Petrer. El 25 de junio de 1651 saldran a subasta la ampliacin de la mina y acequia de la fuente de Pua; obra que se adjudic a Frances Joan Brotons, por 149 libras y 10 sueldos, en base a siete captulos. en ellos se indica que deba tener 7 palmos de alta y 4 palmos de ancho y deba comenzar als olmets enfront de la olivera y a de anar per la ma esquerre de la acequia anant amunt ya de parar dita mina en lo primer 133 pou de baix. tendra medio palmo de corriente, en cada 40 palmos . Fray Pedro concret tambin que esta mina, que ira por la parte de mano izquierda subiendo al monte, debera tener respiraderos cada 134 18 palmos y que desde donde empezara la misma hasta los pozos ira a nivel . los alrededores de la mina estaban ya abancalados en 1651, pues en el captulo 7 se establece que si se hiciera algn dao al poner tierra en el bancal de alguien, la villa pagara dichos daos. Medio ao despus de comenzar los trabajos, aunque haban encontrado la veta de agua, sta no era suciente para dar los trabajos por con- cluidos. en mayo de 1653 estos estaban todava en curso, y con problemas para continuarlos, y en 1655 todava no haban encontrado suciente agua, por lo que el arrendador de la obra suplic a la villa, dada su gran pobreza, que le eximiera de la obligacin de cavar, para lo que adems pagara 80 libras, que se 135 destinaron a lo benifet del aygua . En 1660 la excavacin no deba haber nalizado, por lo que acordaron traer a un religioso para que determinara que deban hacer, cuestin que no se resolvi hasta 1665 en que Bartolom coloma se com- prometi a cavar de nuevo, segn unas condiciones que no se remataron hasta el Consell Particular de 136 10 de junio de 1668 . Al abrirse nuevas galeras, en la documentacin ya se hablar de pozos y minas de las fuentes de Pua, en plural, como el 21 de marzo de 1668 cuando se sealaron los amprius de los pozos. en este documento se describen con detalle los distintos pozos de las dos galeras excavadas. Habra una primera mina o galera (llamada de la casa de Baltasar Maestre), ms arriba del camino de castalla, con cuatro pozos: en el primer y segundo pozo dejaron 12 palmos de ampriu alrededor de sus bocas; al igual que en el tercero, en la solada de las oliveras; en el cuarto dejaron 6 palmos por su parte de arriba y 24 palmos desde la boca del pozo. en la segunda mina, habra un primer pozo orellada el cami de Castalla, en el cequiot, al que se le sealaron 8 palmos alrededor, y en el segundo pozo de dicha 137 mina otros 8 palmos . Al tercer pozo, en el ao 1699, se le daran igualmente 8 palmos de ampriu, por- que lo haban labrado hasta la boca; al igual que al cuarto pozo, al que dejaron 8 palmos. Esta segunda 138 mina se conoca tambin con el nombre de l esquinal . 131 AMP, 49/1, cOnSeJOS MUniciPAleS 1616-1648, f. 16: puis nos pot cavar sens lisensia . 132 AMP, 49/2, cOnSeJOS MUniciPAleS 1649-1660, f. 68. 133 AMP, 49/2, cOnSeJOS MUniciPAleS 1649-1660, f. 85, 96, 136. 134 AMP, 49/2, cOnSeJOS MUniciPAleS 1649-1660, f. 126. 135 AMP, 49/2, cOnSeJOS MUniciPAleS 1649-1660, f. 117, 132, 166, 339, 343. 136 M.c. ricO nAVArrO, Apuntes para la Historia& op. cit., pp. 179, 181, 184. 137 AMP, 48/1, liBrO de VeredAS Y OrdenAnZAS 1643-1768, s/f, 21 de marzo de 1668 (Acte de les mines de Pua). 138 AMP, 48/1, liBrO de VeredAS Y OrdenAnZAS 1643-1768, s/f, 7 de septiembre de 1699. (relacio sobre els pous de Pua). 107 Sabina Asins Velis estos amprius no fueron respetados por los agricultores de las tierras donde estaban los pozos, quienes los labraron, quitando el cerco de tierra que protega la boca. esto ocasion que en 1701, tras una fuerte avenida de agua, sta formara un canal y entrara por la boca de los pozos, arrastrando mucha tierra. en la mina de abajo, llamada del camino de castalla o del esquinal, el primer y segundo pozo estaban en buen estado; sin embargo en el tercer y cuarto pozo, por haberlos labrado, se haban causado graves daos. Por ello el propietario de esta tierra (isidoro Maestre) deba pagar a ocho hombres para que limpiaran los daos y adems volver a hacer un cerco alrededor de la boca de los pozos. los otros pozos de la mina que iban desde la casa de Balthasar Maestre estaban en buen estado y conforme a la relacin que se hizo 139 el 7 de septiembre de 1699 . el ao 1719 se produjo la colmatacin de las minas de Pua por haverse sulido gran parte de dichas minas de agua, a lo que se aadi ser un ao estril, en el que no se pudo regar, por lo que para que se limpiaran las minas y se acrecentara el agua, se solicit la contribucin eco- nmica de don carlos coluchi (procurador general del duque de Atri, por estar el conde de elda exiliado 140 en Viena), quien ayud con 8 libras y 10 sueldos, como con anterioridad acostumbraba la seora . La construccin del pantano en un territorio como el de Petrer, con caudales de agua irregulares y sequas recurrentes, el Consell General de la villa solicit, en 1678, licencia al seor conde para cargarse de censales para construir un pantano: me an suplicat que per a obi de avituallar dita Universitat dita nostra vila y singulars de aquella de forment, vi, oli, y altres fruits, y fent un pantano pera aumentar les aygues pera remei de dits 141 singulars de dita nostra vila de Petrer concedeixca llisencia, permis y facultat& . La obra se nanci con capital local, sin el apoyo econmico de la Corona, al igual que se documenta 142 en construcciones similares en otros lugares de seoro del reino de Valencia . Para poder costear las obras, la localidad se endeud con censales por valor de 2.500 libras, de las que el conde de elda se hizo cargo del pago de las pensiones de 500 libras, por lo que anualmente ingresaba 25 libras en la clavera municipal. El resto, 90 libras en pensiones, lo costeaban los agricultores que se beneciaban del agua, en proporcin a las tahllas que regaban y a las tandas que necesitaban, a razn de 15 di- 143 neros cada tanda. la villa cancel parte de los censales en 1736 y 1778 , pero todava en 1833 se le 139 AMP, 48/1, liBrO de VeredAS Y OrdenAnZAS 1643-1768, s/f, 3 de septiembre de 1701 y en AMP, 49/3, lliBre DE CONSELLS 1700-1712; 25 de agosto de 1701, ff. 149-150. 140 APM, escrituras pblicas de 1713 a 1721. Ao 1719, f. 38. la participacin en el mantenimiento de obras pblicas: FUrS, Pedro ii de Valencia (iV de Aragn, el ceremonioso), libro iX, rubrica Xii (de departiment de coses), captulo XViii, Ao 1342. Valentia: Ad supplicationen brachi regalis. Tots los nobles homens, cavallers, clergues, religioses, ciutadans, e tota altra persona de qualquier gran dignitat sia: sien tenguts a posar, e a metre del lura obrar e a refer, e a reparar los murs, e a fer, e a reparar, e a mudar los valls, e a fer, e a mudar, e adobar les carreres publiques, els ponts, e a la guarda de la ciutat, e a mudar les cequies, els braals, e a donar cequiatgue& , Al menos desde 1246 los fueros de Jaime i obligaron a nobles, caballeros, clrigos, religiosos y ciudadanos a contribuir en la limpieza y reparacin de acequias, y al pago del cequiaje (FUrS, Jaime i, lib. IX, rub. XII, cap. XVI; AO, Jaime I, priv. XXI; desde 1251 AO, Jaime I, priv. XXXVIIII; C. LPEZ RODRGUEZ, Nobleza y poder poltico& op. cit, p. 29. 141 APM, seccin Petrer, 2 de septiembre de 1678. En opinin de A. Furi la ampliacin de las supercies irrigadas tena como principal nalidad el aumento de los rendimientos de los cereales y la via y no tanto el mantenimiento o la expansin de la horticultura: A. FUri dieGO, la domesticacin del medio natural: Agricultura, ecologa y economa en el Pas Valenciano en la Baja edad Media. en: J. clemente (ed.), El medio natural en la Espaa medieval: actas del I Congreso sobre ecohistoria e historia medieval. cceres: Universidad de extremadura, Servicio de Publicaciones, 2001, p. 85). 142 d. BernAB Gil, Poltica hidrulica en la espaa de los Austrias. en: A. Alberola (ed.), Cuatro siglos de tcnica hidru- lica en tierras alicantinas. Alicante, 1995, p. 77-81; A. ALBEROLA ROM, La cuestin de las aguas en tierras valencianas durante la edad Moderna. en: El agua en la Historia. Simancas, Valladolid: Servicio de Publicaciones de la Universidad, instituto Universitario de Historia Simancas, 1998. en el caso del pantano de relleu se compensaba el esfuerzo econmico con el tercio del diezmo que perteneca a la real Hacienda, por las nuevas cosechas obtenidas: P. GiMneZ FOnt, el pantano de relleu y el riego de la huerta de Villajoyosa (1653-1879). Investigaciones Geogrcas 30, 2003, pp. 97-118. 143 t.V. PreZ MedinA. Agua para los regados meridionales valencianos. las presas del siglo XVii de elx, Petrer y elda. Revista de Historia Moderna. Anales de la Universidad de Alicante 16, 1997, pp. 280-282. 108 Los nuevos pobladores cristianos reclamaba al conde su contribucin para el pago de los mismos, mucho tiempo despus de inutilizado 144 el pantano . la construccin, que deba estar terminada en un ao y medio, se realiz conforme a lo establecido en 145 veinticinco captulos , en los que se especicaba que sobre la pea maciza del barranco de la Gurrama se construira una pared de 32 palmos de grosor por 60 de altura. el lado del pantano en contacto con el agua se deba fabricar de piedra picada, la pared exterior de buena mampostera y el remate superior con sillares machiembrados, para que el agua no descarnara la mampostera. la bveda tendra 12 palmos de anchura por 14 palmos de altura, donde se insertara la paleta. en la pared se hara un cup de piedra picada, de 4 palmos de largo y 2,5 de ancho, en donde entrara el agua para ir a la paleta. no obstante todas las especicaciones, se inclua un captulo en el que se indicaba que si anant fent la obra la es- periencia mostras haverse de afegir, o, llevar alguna cosa la qual se conegues ser beneci de la obra, ab molt bon concell se haja de fer. Sus constructores, Frances Peres, maestro de obras de vila, y Miquel 146 reymundo , maestro de cantera, daban una garanta de la obra por un ao y un da. la revisin de la misma fue llevada a cabo por los maestros de cantera rafel Soler de Onteniente y Juli Guillem de 147 Alicante . A continuacin se redactaron los captulos para la construccin de la acequia que desde el pantano 148 llevara el agua a Petrer . el agua se tomara arriba de la boquera de la Gurrama, haciendo un azud de argamasa de 5 palmos de ancho, por encima del charco del sumidor. desde este azud se abrira la acequia, excavndola en la pea, de 2 palmos de ancha y 2,5 palmos de alta. donde no fuera necesario excavarla en la roca, se hara de argamasa con medio palmo de hormign en el suelo, y un cajero de dos palmos de ancho, bruido por dentro. Se conducira por un matapoll hasta el saltador de debajo de la boquera (Figuras i-3.2 y i-3.3). los agujeros y grietas que hubieran, del saltador hacia abajo, se arregla- ran con hormign, para que no se saliera el agua todo el barranco hacia abajo hasta donde comenzara la acequia, para sacarla a la orellada de la rambla del esquinal dins llebeig hasta el saltador del camino de cat. cuando llegara al barranco, que bajaba de la propiedad de dur, se deba hacer una bveda a la acequia para que el agua no se saliera. los problemas que se derivaron de la construccin del pantano comenzaron a detectarse muy rpida- mente. As el 29 de junio de 1701 se envi al maestro de obras de Agost, thomas Visedo, a limpiar el cubo del pantano. Visedo inform a los miembros del Consell de que esta limpieza no implicaba dicul- tad, pero que para arreglar los sumideros que se haban detectado en la obra se necesitaba mucha cal y otros materiales; y que, incluso habindolos reparado, no haba seguridad de que no se abrieran por otro lado. Adems tendra que hacer una acequia desde la paleta del pantano hasta la parte de abajo de todos 149 los agujeros por donde se sala el agua . estos arreglos de emergencia no surtieron desde luego efecto, 150 y en marzo de 1704 se sugiri fundir la paleta del pantano por encontrarse ste fuera de servicio , y se procedi por parte del Ayuntamiento al arrendamiento del bancal que se haba generado en el espacio 151 ocupado por el embalse del agua debido al aterramiento . 144 AMP, l-30 (1). libro de cuentas de Propios y Arbitrios. en 1833 todava se le cobraba al conde de cervelln. 145 AMP, caja 37, exp. 20. t.V. PreZ MedinA. Agua para los regados meridionales... op. cit., pp. 274-282. t.V. PreZ MedinA, regados histricos... op. cit., 125-135. 146 APM, seccin Petrer, ao 1678, 4 de diciembre. 147 AMP, caja 37, exp. 20, 1 de julio de 1680. notario Joseph Gil. 148 AMP, caja 37, exp. 20. 149 AMP, 49/3, LLIBRE DE CONSELLS 1700-1712; 29 de junio de 1701, f. 143-144. 150 AMP, 49/3, LLIBRE DE CONSELLS 1700-1712; 16 de marzo de 1704, f. 248. 151 AMP, 50/1. Cabildos desde el ao 1713 asta el de 1751 inclusive y diferentes reales provisiones. 24 de junio de 1721, f. 292. Parece que la cantidad de agua del pantano que se haba distribuido a los agricultores durante los pocos aos que estuvo en funcionamiento fue nicamente una tanda (AMP, 49/3. LLIBRE DE CONSELLS 1700-1712; 28 de octubre de 1701, f. 157). Sera muy interesante hacer un anlisis de los sedimentos depositados en el pantano, datados entre 1681 y 1704, para conocer la fuente de esos sedimentos y los posibles eventos de riadas durante esos aos, como el diluvio del que tenemos constancia documental en 1692, e incluso los siguientes hasta la actualidad. en el cercano pantano de tibi los fangos a evacuar por el desarenador cada 4 aos alcanzaban alturas de 10 a 12 metros (A. Gil OlcinA, evolucin histrica del problema del agua en los regados decitarios alicantinos. En: A. Alberola (Ed.), Cuatro siglos de tcnica hidrulica& op. cit., p. 25). 109 Sabina Asins Velis Fig. I-3.2. Planta del pantano de la vila de Petrer feta per Chochim Bernabeu mestre de canteria. Ao 1679 (Fuente: Archivo Municipal de Petrer, caja 37, exp. 20) Fig. I-3.3. Pared del pantano de Petrer en la actualidad 110 Los nuevos pobladores cristianos Tabla I-3.4. elementos del sistema de riego documentados en el siglo XVii, la fecha indica la primera referencia escrita que hemos localizado AO ELEMENTOS DEL SISTEMA DE RIEGO Citados con Fuentes de Petrer (mina de Pua). anterioridad a Acequia de Petrer (riega tambin la huerta de Elda hasta 1392; el agua procedera de la mina de Pua). 1611 Boqueras citadas en 1503 en dos barrancos que lindan con castalla (una en el Barranch dels charcos topnimo hoy desconocido-, y la otra posiblemente en el Barranc de les covetes), tal vez para mejorar el secano en la partida de les Foyes de cat. Acequia de Abajo y Acequia de Arriba (en 1536 se canaliz, por medio de la construccin de la Acequia del conde, parte del agua de la Fuente del Chopo de Villena hasta Sax donde se verta el agua al ro de Sax (Vinalop); cerca de Elda el agua se desviaba por las Acequias de Abajo y de Arriba). Cequia major (citada en 1586). Balsa de la villa, azudes y partidores (anteriores a 1580). cenia (en 1582 se cita en la huerta de Petrer la partida del Cami de la enia). Archs del Riu de Petrer (actual Acueducto de San rafael), terminado en 1583. Mina en lo terrer del Almorchon (anterior a 1583). Font de noguera (anterior a 1586). Canatum (canal) en Pua, propiedad de Francisco Palom, anterior d 1583. Surgimientos de agua en Pua cuya medida de agua para el riego se expresaba con el trmino aumen, con anterioridad a 1580. 1618 Visita a la mina de Pua para aumentar su caudal. 1622 Dos ramales nuevos de la acequia de Elda; nuevo azud en la rambla de Pua. 1625 construccin de otros canales en la acequia de elda. 1630 Acequia secundaria en las fuentes de Pua, cruzaba el camino de castalla. 1636 Acequia que se tomaba en el partidor del Convento, por la que se regaba con el agua de Elda; acequia que iba a la villa; acequia desde la balsa al partidor; el agua de la balsa abastece la partida de los Olivares; huerta en Cat. 1650 Sequia Maior y distintos brazos para regar los bancales de las Huertas, Olivares y Vias de Arriba. Acuerdo para cavar arriba de la Fuente de Pua y aumentar el caudal de agua que llegaba a la balsa de la villa. 1651 Subasta de la ampliacin de la mina y acequia de la fuente de Pua. 1652 Acequia del Riu y acequia dels Comuns; pequeo azud en la rambla de Pua; canales; rafa. 1654 Rambla del Asuset (Pua); Braal Major (partida de Salinetes). 1659 Acequia de la Pea, arriba de la balsa vieja de la villa. 1662 Pozuelo nombrado de irles. 1665 Acequia desde el molino de la plvora de Andreu coloma hacia abajo. 1668 nuevos captulos para la ampliacin de la mina de Pua. 1669 Boqueres de la Gurrama. Solicitan utilizar el dinero del arrendamiento del bovalar de las vias para alumbar y aumentar las aguas de la villa. 1675 Acequia del ruglo, en la rambla de Gaspar Maestre. 1676 Font dita de Mossen Thomas Rico y baeta; boquera de Joseph Dura. 1679 comienzan la obra del Pantano y de la acequia. Azud en el charco del sumidor. 1680 Fuente del Alaig, fuente de tortosa. 1681 Boquera en la partida del Guirnei, derramaba en la parte de arriba del camino de noguera, e iba por debajo de los hornos de yeso. 1682 Acequia de la Gerreria (en las Vias de Abajo, que se abasteca del agua de Elda); parada del Baladre (en las Vias de Abajo); Braal dit de la Noguereta; acequia del Aljibe; Braal major a Salinetes. 1688 captulos para excavar un pozo en la partida de la Pedrera al cochinet. 1689 Acequia dels Cequers; Acequia para regar los mallols de Salinetas. Bsqueda de agua en la margaleta de Xinquera (en el esquinal). establecimiento de las aguas manantiales del barranco del Forn de Vidre. Fuente que naca en los bancales de la heredad del Forn de Vidre. 1691 Visita a la fuente del estrecho de cat, donde se determina que caven 14 palmos en una pea encima del Pantano. 1692 Boquera en la partida del Palomaret: bajaba de les Solanes Aspres y derramaba en el almelleral. 1695 Boquera de la partida de las Oliveras, junto a la rambla. 111 Sabina Asins Velis 4. Fluctuacin de las cosechas en el siglo XVII y sequas recurrentes A lo largo de todo el siglo XVii se produjeron una serie de aos de sequas que incidan en la productivi- dad de las cosechas, lo que llev a los agricultores a realizar todas las obras que acabamos de describir. como hemos comentado en la descripcin del rea de estudio, estas series se han documentado tambin en otras reas de Espaa y del Mediterrneo europeo, coincidiendo con el nal de la denominada Pe- 152 quea edad del Hielo . debido a esta caresta, en marzo de 1623 Pere Molina de Onil les vendi 30 153 40 cahces de trigo a razn de 11 libras y media , precio bastante alto comparado con el de 1618 (6 libras, 10 sueldos). de igual manera en 1628 la villa tuvo que recurrir al conde para que les proporcio- 154 nara la simiente para poder sembrar ; en 1631 el ao fue tan estril que buscaron en Alicante 300 155 400 arrobas de garrofas para remediarse , solicitando ese mismo ao las villas de elda y Petrer, por lo 156 imposibilitadas que estaban, pagar por el diezmo de todo lo que haban plantado a razn de 1/10 . la sequa continuaba el ao siguiente, por lo que la vila de Elda es venguda en proseso... per a pregar a 157 nostre seor los done aygua . en 1634 sigui la escasez de simiente, por lo que compraron en el Pins 158 50 cahces de trigo; repitindose la misma circunstancia el siguiente ao . Sin embargo, Juan coloma, iii conde de elda, en mayo de 1637, les ofreci 20 30 cahces de trigo que rechazaron por no hacerles falta; aunque en esta ocasin el precio por cahz era de 13 libras. En septiembre del mismo ao el conde 159 ofert comprarles el trigo del almacn de la villa a 9 libras por cahz , y en 1641 el cahz de trigo se 160 pagaba a 8 libras y la arroba de aceite a 9 reales . Todava el 24 de junio de 1640 se pactaron mejoras por las que se puso n a los pleitos que haba emprendido la villa ante la real Audiencia de Valencia contra el titular del condado. Para dar por con- cluidos los litigios se acord, entre otras disposiciones, que podran arrancar los pinos pequeos que cre- cieran en las tierras de cereales, tras solicitar licencia para ello. Por las plantas que se criaban en secano, que no se acostumbraban a regar, se pagaran por derecho de diezmo y particin de frutos de diez-uno, y de la barrilla, ans, legumbres, cardo, salicornio, sosas y otro gnero de frutos, exceptuando los granos que iban al molino, de ocho-uno. Por el derecho de la cobranza de las simientes que el seor diera a los vasallos slo se pagara 6 dineros por libra; y no se cobrara por la licencia para cortar maderas o vender tierras pechadas. Se les concedi permiso para hacer un bovalar en la huerta, vias y olivares, adonde podran llevar 800 ovejas y ninguna cabra. Adems el seor no arrendara (a excepcin de a algn ami- go) las hierbas del trmino, siempre que hubieran 1.000 cabezas de ganado de los vecinos, siendo ms de la mitad lanar. igualmente, por la concordia el conde devolvera los bienes que haban ocupado sus 161 ociales durante los pleitos . la barrilla y el salicornio se usaban tanto en jaboneras como en los hornos de vidrio, de los que en 162 Petrer haba uno al menos desde 1639, en la partida conocida como del Forn de Vidre . la explotacin de la barrilla rentabiliz el valor de terrenos de escasa capacidad de uso agrcola, como los de la parti- da de los Blanquizares, cuyo topnimo se ha conservado en Petrer, en los que poda entrar en rotacin trienal con trigo y cebada. tambin era frecuente el cultivo asociado de barrilla con ans y cominos. el 163 salicornio se plantaba en terrenos salinos y rotaba con centeno en las tierras de escasa calidad . 152 M. BArriendOS VAllVe, J. MArtn-Vide, Secular climatic oscillations... op. cit.; F.S. RODRIGO et. al., rainfall variability in Southern Spain& op. cit.; A.T. GROVE, The Little Ice Age and its geomorphological consequences& op. cit. 153 AMP, 49/1, cOnSeJOS MUniciPAleS 1616-1648, f. 54. 154 AMP, 49/1, cOnSeJOS MUniciPAleS 1616-1648, ff. 117-118. 155 AMP, 49/1, cOnSeJOS MUniciPAleS 1616-1648, f. 150. 156 AMP, 49/1, cOnSeJOS MUniciPAleS 1616-1648, f. 151. 157 AMP, 49/1, cOnSeJOS MUniciPAleS 1616-1648, f. 160. 158 AMP, 49/1, cOnSeJOS MUniciPAleS 1616-1648, ff. 179 y 189. 159 AMP, 49/1, cOnSeJOS MUniciPAleS 1616-1648, f. 229 231. 160 AMP, 49/1, cOnSeJOS MUniciPAleS 1616-1648, f. 333. 161 AMP, 49/1, CONSEJOS MUNICIPALES 1616-1648, f.f. 283, 289-296; ACE, nm. 1048; ARV, REAL AUDIENCIA, Pro- cesos Parte 1, letra c, exp. 793. 162 AMP, 49/1, cOnSeJOS MUniciPAleS 1616-1648, f. 252. 163 A. Gil OlcinA, explotacin y cultivo de las plantas barrilleras en espaa. Estudios Geogrcos 36, 138/139, 1975, pp. 455, 457, 462. 112 Los nuevos pobladores cristianos 164 Por lo que respecta a los cereales, de nuevo en 1646 se necesitaron 50 cahces de trigo y en 1647 se compraron 30 ms, pero esta vez el vendedor, nadal Planelles, les pidi 17 libras por cahz, precisa- 165 mente en estos aos en que se darn casos de peste en el condado de elda y en ciudades como Alicante 166 y Orihuela . en abril del ao siguiente necesitaron 60 cahces que pagaron a Andreu rico de la villa de Castalla a 15 libras el cahz; nalmente compraron slo 40 previo prstamo de 900 libras de Lluch Berenguer de Onil, aunque en septiembre volvieron a necesitar trigo, que les pidieron a 100 reales el 167 cahz, para lo que necesitaron 2.000 ducados . Sin embargo, el 8 de septiembre de 1650 subastaron 68 cahces de trigo del almacn de la villa a 9 libras y un quartillo por cahz, que se qued Bertomeu roca, 168 sndico de Xtiva . Pero al ao siguiente volvieron a estar sin simiente, por lo que pidieron prestado 700 libras para comprar 50 cahces de trigo, aunque nalmente fueron 40, a Gines Perez de Castalla, que se reparti entre 67 vecinos para proceder a su siembra. en 1652 el trigo se trajo de Alicante. en 1653 169 el cahz de trigo estaba en 9 libras, 2 sueldos para bajar a 7 libras, 7 sueldos el ao siguiente, en que se remataron aproximadamente 100 cahces del almacn de la villa, que les compr carlos corbi de ibi. los cerca de 100 cahces del almacn de 1654 fueron comprados por Jusep ribes de elda a 7 libras el 170 cahz . todas las mejoras pactadas con el conde no impidieron el que la villa tuviera deudas conforme pasaba el tiempo, tanto por los salarios que deban pagar a los empleados municipales como sobre todo por la necesidad de comprar trigo como simiente o para hacer pan. As en 1656 se reconoci que la villa estaba molt exhausta i pobre, y que responda cambio de ms de 1.100 libras a lluch Berenguer, a isabel Joan 171 dura viuda de Pere Marquino y a Joan Peres mayor, de la villa de Petrer . recordemos que en 1609 la villa morisca pagaba anualmente 418 libras/10 sueldos por pensiones de censales (carta Pobla, captulo 15). en el ao 1655 no hubo cosecha de cereales debido a la sequa, pero en 1656 Deu nostre Seor es estat servit per sa innita misericordia donar aygua per a poder sembrar cossa que tant estavem desitjant, por lo que se pedir permiso al conde para comprar 40 cahces de trigo a lluis rico de castalla, para 172 tener semilla y sembrar . la sequa volvi a repetirse los aos 1657 y 1658, en los que la villa estuvo endeudada e imposibilitada para pagar los salarios de los empleados locales, a lo que se sum la peticin real de una derrama extraordinaria para atender los grandes gastos de las distintas guerras que se libra- 173 ban esos aos . igualmente en 1662 habr gran necesidad de trigo y otros granos en la villa, en 1665 se ver afectada por una enfermedad contagiosa y en 1668 se repetir la falta de agua. Sin embargo en 174 1672 hubo necesidad al no poderse trabajar en los campos por las muchas lluvias cadas . en esos aos la produccin se centraba preferentemente en el trigo, la pasa blanca, la pasa negra, la sivada, el panizo, 175 el vino, la avena y el aceite . en cuanto a la dcada siguiente, Milln estima que a partir de 1680 se 176 produjo una etapa de recuperacin en la costa mediterrnea . en Petrer, en 1690 el montante ms importante del diezmo lo aportaba el trigo, seguido de la cebada, 177 correspondiendo un porcentaje mnimo al centeno y la avena . en 1692 se produjo una inundacin 164 AMP, 49/1, cOnSeJOS MUniciPAleS 1616-1648, f. 393. 165 AMP, 49/1, cOnSeJOS MUniciPAleS 1616-1648, ff. 417, 418, 421 y 430. 166 J. Milln, Rentistas y campesinos. Desarrollo agrario y tradicionalismo poltico en el sur del Pas Valenciano, 1680- 1840. Alicante, 1984, p. 61. 167 AMP, 49/1, cOnSeJOS MUniciPAleS 1616-1648, f. 422 y 432. 168 AMP, 49/2, cOnSeJOS MUniciPAleS 1649-1660, f. 51. 169 la caresta de 1652 y el alto precio de 1653 pudo deberse a la peste, avenida del ro y otros infortunios, citados en el Memo- rial del Obispo, r. BelAndO cArBOnell, Realengo y seoro... op. cit., pp. 37. 170 AMP, 49/2, cOnSeJOS MUniciPAleS 1649-1660, ff. 103, 111-113 , 118, 177, 199-200, 257. 171 AMP, 49/2, cOnSeJOS MUniciPAleS 1649-1660, ff. 315-320. 172 AMP, 49/2, cOnSeJOS MUniciPAleS 1649-1660, ff. 291-293. 173 AMP, 49/2, cOnSeJOS MUniciPAleS 1649-1660, ff. 394-395, 432. 174 M.c. ricO nAVArrO, Apuntes para la Historia& op. cit., p. 180, 181, 183, 186. 175 AMP, caja 37, expediente 2, s/f. 176 J. Milln, Rentistas y campesinos... op. cit. p. 121. 177 AMP, caja 37, exp. 4, legajo 37. contrallibre de 1690. t.V. PreZ MedinA, La tierra y la comunidad rural... op. cit., p. 93; T.V. PREZ MEDINA, Regados histricos... op. cit., p. 127. 113 Sabina Asins Velis 178 importante y en 1696-1697 se volvi a repetir la sequa . en 1700 la pasa blanca se pag a 18 reales el 179 180 quintal , y la negra a 24 reales el quintal ; y en 1701, ante la necesidad de semilla de trigo para sem- brar se procedi al reparto del psito de la villa, al precio de 9 libras y 10 sueldos el cahz; ese mismo ao la pasa blanca se pag a 16 reales el quintal y la negra a 9 sueldos y 6 dineros la arroba. el trigo volvi 181 a bajar en 1703 pagndose a 7 libras y 2 reales . 5. Delimitacin del bovalar el bajo porcentaje de la explotacin agrcola en relacin con las dimensiones del territorio de Petrer, y las posibilidades de sus reas montaosas de proporcionar pasto, favorecieron la delimitacin del bovalar de la villa. en la reunin del consell Municipal de 9 de diciembre de 1618 se acord que ste comprendera desde el Cajuli y el estrecho de Pua, Solana arriba hacia cat hasta el trmino de casta- lla; trmino adelante hasta la Foradada, y desde aqu a la Penyeta de les Monteses y estrecho de la Sarsa, hasta frente a la canyadeta de Mosen Banyuls. desde dicha caada de nuevo a la casa del cajuli, por el 182 alto adelante hasta frente Joan Peres y Joan Marti . el que contaran con un bovalar no era bice para que algunos ganados entraran en los olivares e higuerales causando gran dao para los campos, por lo 183 que en ms de una ocasin hubo que tasar los desperfectos que se haban producido . en 1639, visto el nmero de cabezas de ganado, se decidi hacer una redonda por la senda que iba a la Solana derecho al castellaret, y de all al Malladar de Pere dur, recto al collado de la tierra de nadal Planelles hasta el Figueralet de Gines Joan, rodeando la loma de realengo hasta el camino de Agost. esta redonda se guardara durante el mes de marzo bajo pena de 60 libras de da y el doble 184 de noche . A los pocos meses se decidi que se determinaran de nuevo los lmites del bovalar, que qued establecido desde el collado de Gregori Paya recto a castellarets, cerro abajo por encima de las Boltes de Baroni, camino de Agost, al estrecho arriba del Forn del Vidre, por el medio de la Solana a la senda dels colmeners, senda adelante recto a la caada de debajo del Alaig, y desde all recto al camino del collado de Pere Paya, volviendo por el camino debajo de cat, derecho al dicho collado 185 de Gregori Paya . en las mejoras de la carta de Poblacin que se pactaron el 24 de junio de 1640 se les concedi per- miso para hacer un bovalar en la huerta, vias y olivares, adonde podan llevar 800 ovejas y ninguna cabra. Adems se estipul que el seor no arrendara (a excepcin de a algn amigo) las hierbas del 186 trmino siempre que hubieran 1.000 cabezas de ganado de los vecinos, siendo ms de la mitad lanar . este bovalar o redonda se extenda por la rambla de la vila (la de Pua) hasta el convento, de all por la acequia de elda al campet y al carril hasta el barranco de Salinetas, camino de novelda arriba hasta el Derramador de Corts, siempre barranco arriba hasta el Figueral Rot; desde all, por el camino dels Sequers hasta la ermita de Sant Bonifaci. Si el arrendador de este bovalar era forastero se le sealaba adems de lo expresado, en caso de que lloviera y no pudiera entrar en las vias, oliveras o huerta, desde la ermita de Sant Bonifaci hasta los mojones de novelda, Foya del castell y el abrevadero hasta el corral 187 de Girones, camino de navayol, noguera y al toll de domingo . A mitad de la centuria se sucedieron aos de sequa, como las de 1655, 1657 y 1658, por lo que pidieron al arrendador de este bovalar que lo 178 t.V. PreZ MedinA, La tierra y la comunidad rural... op. cit., pp. 22-23. 179 la pasa se mantuvo estable en la 2 mitad del siglo XVii, pues en 1650 se pag a 18 reales el quintal (AMP, 49/2, cOnSe- JOS MUniciPAleS, 30 de octubre de 1650, f. 50). 180 AMP, 49/3. LLIBRE DE CONSELLS 1700-1712; 7 de noviembre de 1700, f. 91. 181 AMP, 49/3. LLIBRE DE CONSELLS 1700-1712; 17 de octubre de 1701, f. 155; 4 de diciembre, f. 161; 26 de julio de 1703, f. 226. 182 AMP, 49/1, cOnSeJOS MUniciPAleS 1616-1648, ff. 11v-12. 183 AMP, 49/1, cOnSeJOS MUniciPAleS 1616-1648, f. 231-232. 184 AMP, 49/1, cOnSeJOS MUniciPAleS 1616-1648, f. 246. 185 AMP, 49/1, cOnSeJOS MUniciPAleS 1616-1648, f. 252. 186 AMP, 49/1, CONSEJOS MUNICIPALES 1616-1648, f.f. 283, 289-296; ACE, nm. 1048; ARV, REAL AUDIENCIA, Pro- cesos Parte 1, letra c, exp. 793. 187 AMP, 49/2, cOnSeJOS MUniciPAleS 1649-1660, ff. 269-271. 114 Los nuevos pobladores cristianos dejara para las cabalgaduras de la villa: no ay palla poca ni molta i que no ay on poder sustentarse les 188 cavalgadures si no es en los olivars i ortes . en 1656 volvera a ampliarse el bovalar y se determin que en la partida de cat y sus laderas no pu- diera entrar ganado forastero, sino solamente el de la villa y el del arrendador de la carne de Petrer, bajo multa de 25 libras. el bovalar se extenda por toda la foya de cat, y desde all recto hasta el alto de la sierra del Fraile, y sierra abajo recto hasta el estrecho de las peas del Cachuli, y de all a los altos del cachuli y al castellar de la Almadraba, desde donde se diriga a la mojonera de los trminos de tibi y 189 castalla . en 1660, se les volvi a conceder licencia para ampliar el bovalar para los ganados de Petrer, de la hoya de cat y la Foradada a la Pea de las Montesas, al camino de Agost, al bancal de Gaspar 190 Garca y a los castillicos de la Almadraba . todas las limitaciones que se establecan a los ganados se recogieron en 1658 en unas ordenaciones 191 municipales o Clams de Ganados y Cavalgadures . el 29 de abril de 1668 en el Consell Particular de la villa se inform de que por dos veces en dos semanas haban quemado a mano toda la sierra del Alaig y las peas de Les Monteses que, se especica, era la mejor zona del bovalar. Por lo que acordaron, que hasta que las zonas quemadas estuvieran de nuevo en condiciones de proporcionar pasto, se deba ampliar el permetro de ste, para no perjudicar al arrendador de la carne de Petrer y a la cabaa de los vecinos. la nueva extensin llegaba desde la loma de lopo hasta la mojonera de tibi adelante hasta el estrecho de la Sarsa, alto hacia delante hasta el maset de irles. igualmente se acord pedir al obispo de 192 Oriola la excomunin para quien quem los montes . 188 AMP, 49/2, cOnSeJOS MUniciPAleS 1649-1660, ff. 357-360. 189 AMP, 49/2, cOnSeJOS MUniciPAleS 1649-1660, ff. 303, 306-307. 190 AMP, 49/2, cOnSeJOS MUniciPAleS 1649-1660, f. 379, 4 de febrero de 1660. ntese la castellanizacin de algunos topnimos por Martn Valera, procurador del conde que es quien rma la autorizacin. 191 AMP, 49/2, cOnSeJOS MUniciPAleS 1649-1660, ff. 362-364. 192 AMP, 48/1, liBrO de VeredAS Y OrdenAnZAS 1643-1768, s/f, 29 de abril de 1668. 115 Captulo 4: Los establecimientos autorizados, las roturaciones ilegales y la bsqueda de manantiales en el siglo XVIII Desconocemos la actitud de los petrerenses ante la Segunda Germana, a nales del siglo XVII; sin embargo, si es bien conocida su postura en la Guerra de Sucesin. el bando del archiduque carlos aglutin a campesinos antiseoriales, junto con otros sectores como comerciantes, terratenientes o algunos miembros de la pequea nobleza, con promesas, en un principio, como la abolicin de los 1 derechos seoriales, entre otras . no obstante, la mayora de los habitantes de Petrer se mantuvieron eles a la causa de Felipe V. Puede que en la adopcin de esta postura inuyera la opinin de los representantes de la iglesia, seguidores en su mayora de la causa del Borbn, pues el 18 de diciembre de 1705 se reuni el Consell General de Petrer con la asistencia de todos los sacerdotes del pueblo: Gaspar Maestre, Thomas Rico, Frances Montesinos, Frances Paya, Bonifacio Juan y el beneciado Pere Pau Poveda, y se determin: que en cas de venir el enemich a estos paraches o que enviaren cartes per a que la vila prestara la obediencia respondre que no conegien mes Rey que a nostre Catolich Monarca Felip quint... y que es previnga la vila de polvora y bales y demes manteniments que sien necesaris per a dit 2 efecte, tapant portillos, posant Guardes en els portals y portes... la actitud del conde de elda, Francisco coloma, fue bien distinta: en un primer momento se mostr par- tidario del rey Borbn, lo que origin el embargo de sus bienes por el archiduque carlos, actuando como secuestrador y encargado de administrar las rentas Felipe Armengol de Folch. Sin que conozcamos la causa exacta que motiv el cambio de actitud, en el verano de 1706 el conde de elda se pas al bando austracista, lo que debi evitar la efectiva conscacin de sus rentas, pues no constan en la relacin de embargos de la taula de canvis de Valencia, a no ser que sta se hubiera producido en las primeras 3 requisas del general Baset de lo que no ha quedado constancia documental . el 26 de abril de 1707 el ar- chiduque carlos concedera al conde de elda el privilegio de Grande de espaa, en agradecimiento a lo 4 mucho que en el mo os haveis sealado . Pero tras la victoria de Felipe V los lugares y dems hacienda que don Francisco coloma posea fueron secuestrados y embargados. Sin embargo, como las regalas de elda, Petrer y Salinas pertenecan por donacin inter-vivos de sus padres, primero, y por testamento 5 despus, a su to, el arcediano don carlos coloma, ste solicit no se incluyeran en el secuestro . el con- de parti hacia Viena e igual suerte corrieron otros partidarios austracistas de la villa, como Gernimo Amad y Joseph Garca de Visente o el pintor Thoms Prez, cuyas propiedades fueron conscadas por 6 el rey y adjudicadas a la villa, que procedi a arrendarlas por perodos de 4 aos . en un extenso documento, en el que se relata los distintos servicios y gastos que prestaron a la causa de Felipe V desde 1704 a 1707, los representantes de Petrer solicitaron al monarca la concesin de las regalas, dos hornos, permiso para reedicar a costa del pueblo dos molinos de harina sitos en el trmino, dos almazaras de aceite y reduccin a la mitad de las 1.666 libras anuales que hasta entonces pagaban al conde elda y ahora a Felipe V, carga que consideraban insoportable debido a la pobreza en que se encon- 1 M. Ardit lUcAS, Seores y vasallos en el siglo XViii valenciano. en: e. Sarasa Snchez, e. Serrano Martn (eds.), Seoro y feudalismo en la Pennsula Ibrica, Vol. ii. Zaragoza, 1993, p. 254, 255. c. PerZ APAriciO, reivindicaciones antiseo- riales en el Pas Valenciano. de la Segunda Germana a la Guerra de Sucesin. Estudis 24, 1998, p. 279. 2 AMP, 49/3. LLIBRE DE CONSELLS 1700-1712; 18 de diciembre de 1705, ff. 255-257. 3 C. PERZ APARICIO, La poltica de represalias y conscaciones del archiduque Carlos en el Pas Valenciano 1705-1707. Estudis 17, 1991, p.165, 166, 184,185, 190, 191, 194. J.A. cHiQUillO PreZ, la nobleza austracista en la guerra de Su- cesin. Estudis 17, 1991, pp. 122, 126, 144. J. PrAdellS nAdAl, la guerra de Sucesin y elda (1700-1714). Historia de Elda, tomo i,... op. cit., pp. 249-260. 4 Ace, nm. 270. 5 Ace, nm. 896. 6 AMP, 50/1. Cabildos desde el ao 1713 asta el de 1751 inclusive y diferentes reales provisiones. 18 de octubre de 1719, f. 321; 17 de octubre de 1723, f. 239; 18 de octubre de 1719, f. 322-323. Sabina Asins Velis 7 traba la villa . en ausencia del conde, casimiro Mart fue nombrado administrador general del condado 8 en 1709, siendo despus sustituido por carlos coluchi, ambos al servicio del duque de Atri . en ese ao 9 la villa de Petrer contaba con unos 170 vecinos (765 habitantes) . en abril de 1725 los nobles exiliados fueron perdonados e inmediatamente, entre el 20 de abril y el 11 de mayo, Francisco coloma volvi a tomar posesin de sus propiedades en el condado de elda y de sus dems pertenencias en Valencia, Anna, relleu, enguera, Piles, Palmera y Pedreguer. en concreto en el trmino de Petrer se le restituy: la villa y seoro de Petrer con sus trminos, derechos, jurisdicciones, etc.; la casa del seoro; el patronato del presbiterio de la iglesia parroquial; el castillo; los dos molinos de aceite; los dos molinos harineros; los dos hornos, el derecho de tajo de la carnicera y el marquesado 10 de noguera y su trmino . El regreso del conde fue la ocasin oportuna para que se rmara una nueva concordia entre los vecinos de Petrer y el titular del seoro. en junio de 1727, Francisco coloma y los representantes del pueblo pactaron, entre otros, la reduccin de los diezmos del trigo, cebada, avena y centeno, de ocho-una que venan pagando desde la poblacin, a de diez-una, y el que pudieran hacer uso 11 de las hierbas del trmino de Salinas para el mantenimiento del ganado lanar y caprino . 1. Las tierras cultivadas a principios de siglo Pasado el conicto blico, se estipularon los nuevos gravmenes con que deban contribuir los vecinos a la corona; adems se redactaron instrucciones, ordenadas por el Rey, para conocer con detalle las cargas con que contribuan los Ayuntamientos y ciudadanos, incluyendo, en los lugares de seoro, el desglose 12 de los pechos que se pagaban al Seor . el impago de los impuestos conocidos como equivalente y dels Quartels supuso la venta de tierras al Ayuntamiento de Petrer por parte de los morosos. A nales de 1720 se especican varios registros de venta por esta causa: 8 jornales en el Almorch, medio jornal en Pusa, 6 jornales y un corral, 8 jornales en la Pedrera, 3 jornales de almendros en caprala, 3 tahllas de parras 13 y otros rboles en Ferrusa, etc . estas y otras tierras tambin de Propios del Ayuntamiento fueron pos- teriormente vendidas por el mismo Ayuntamiento a distintos compradores, destacando entre ellos don 14 Pedro de Hoyos, de Alicante, y sus herederos . el arrendamiento de tierras o heredades Propios de la villa era tambin la frmula empleada por el Ayuntamiento para obtener ingresos adicionales, entre ellas destacan las que la villa tena en Cat, con casa y corral de ganado; los 5 jornales y un corral de ganado de Caprala; 8 jornales en el Almorch; los 14 jornales en la Pedrera; una Via de Arriba; 3 tahllas en las 15 Vias o varios sectores en Ferrusa . igualmente algunos vecinos debieron recurrir a vender propiedades 16 para hacer frente a los pechos que se pagaban anualmente . Ya desde principios de siglo, aparecen nombradas por vez primera algunas partidas rurales, o se espe- cica cul era la dedicacin de otras documentadas en los siglos anteriores. En la Huerta de la villa haba 7 AMP, Memoria de lo que la villa de Petrel ha expresado al servicio de nuestro monarca Felipe V desde el ao 1704 hasta el de 1707. 8 ARV, REAL JUSTICIA, nm. 783, ff. 54v-56v; ARV, REAL JUSTICIA, nm. 784, ff. 45-46v.; AMP, 50/1. Cabildos desde el ao 1713 asta el de 1751 inclusive y diferentes reales provisiones. 23 de enero de 1724, f. 211. J. SAMPer AlcZAr, Variaciones en el seoro jurisdiccional de la villa de elda despus de la Guerra de Sucesin. Alebus 2/3. 9 AMP, 25 de octubre de 1709. Pago de los cuarteles de invierno. 10 Ace, nm. 748. 11 APM, escrituras pblicas de 1726 a 1731, 5 de octubre de 1727; ACE, nm 1049. 12 AMP, 48/2. Instruccin que se ha de observar en las ciudades, villas y lugares de este Reyno de Valencia, para el repar- timiento, y cobrana del Equivalente de Alcabalas, Cientos, Millones, y sus nuevos impuestos, en este presente ao de mil setecientos diez y ocho. tambin se conserva la instruccin para informar sobre los empeos del Comun de cada Pueblo, por el que los Ayuntamientos deban informar del estado de cuentas de la villa y sus habitantes (d. luis A. de Mergelina, 27 de marzo de 1718). 13 APM, escrituras pblicas de 1713 a 1721: Ao 1720: ff. 71, 72v., 74, 75 v., 77, 79, 80 v., 82, 83 v. 14 APM, escrituras pblicas de 1725 a 1722: Ao 1722, ff. 14 (la importante venta aqu reseada asciende a cerca de 120 jornales de tierra en distintas partidas, por un valor de 405 libras, 17 sueldos y 2 dineros), 16; Ao 1725, f. 66; escrituras pblicas de 1726 a 1731: Ao 1727, ff. 3, 59. 15 AMP, 50/1. Cabildos desde el ao 1713 asta el de 1751 inclusive y diferentes reales provisiones. 4 de agosto de 1720, f. 304; 6 de agosto de 1724, f. 217v.; 8 de diciembre de 1720, f. 309v.-312v.; 8 de octubre de 1719, f. 323v. 16 APM, escrituras pblicas de 1713 a 1721: Ao 1717, f. 49, 51; escrituras pblicas de 1726 a 1731: Ao 1730, f. 6. 118 Los establecimientos autorizados, las roturaciones ilegales y la bsqueda de manantiales en el siglo XVIII 17 diferentes rboles frutales y parras y bancales plantados de higueras en la partida de los Olivares, enci- 18 ma de la boquera . En las Vias de Arriba se cultivaba via, olivos, almendros e higueras; en la ombra del Perri y en la Almadrava abundaban los almendros, al igual que en caprala (alternando con via), 19 20 navayol o Pua . tambin haba almendros en cat, el Barchell (adems de olivos e higueras) , Saline- 21 tas, llobera, rabosa y el esquinal , y se describe con mayor detalle las instalaciones con que contaban 22 23 las casas de campo, como la de navayol o la Gurrama . Adems de los cereales, almendros, olivos y vid citados, el trmino se dedicaba en menor extensin al cultivo de panizo y a la morera, productos de 24 los que tambin se contribua con el diezmo que se calculaba mediante estimacin visual . la foyeta de mosn Thomas Rico se encontraba en 1716 plantada de higueras y almendros; la Oya de Abaxo de Ferrusa, en 1719, de higueras, olivos y almendros; la partida de la Canal se nombra en 1723 y el Secanet en el camino de Salinetas, con olivos, higueras y vias. en 1724 se trabajaba en la Oya de las Moreras en Pua lindando con el camino de Castalla; y la Oya Blanca y la Ombra de caprala se 25 resean en 1725 con olivos y almendros . estas ltimas partidas se encontraban totalmente abancaladas en 1763, plantadas de almendros y en menor proporcin de vias, y con reas de huerta dedicadas a 26 pimientos, nabos y alfalfa . Pero lo que nos permite establecer con mayor precisin las partidas cultivadas a principios de siglo es el libro de Hacienda de 1726, en donde se repite constantemente el trmino bancal al describir las 27 propiedades . en l constan, adems de las ya citadas en los captulos anteriores (como el Alaig, Fonta- nars, l Almatar, Vervegala-Berbegala o el maset de Yrles, entre otras muchas) los campos del derrama- dor de las Vias de Arriba, la oya de la ta Pasquala, el secano de los cannigos, la Foyeta de corts, las Bueltas del ro, Foyeta de la teuleria, Oyeta de dur, Bueltas de la rambla, cabesa de Aroba, el Amorchonet de Nogera, pago del Baladre, pago del Pino de Poveda, partida de la Pea de la edra, clot del llop, pago de los Arenales, Oya de Morant, cantalars, Ayguarius, pago del cantal de llobregat, el tarrosal, la Foyeta de Jirones, el Bancal del Cavall, huertos del chorret de la rambla, el pago del Fosar, Oyas de los charcos, Borujos, el pago del convento, la sort de terol en Pua, heredad de cal cano en Pua, el campico o el clot de Amaro. entre los propietarios, adems de los vecinos de Petrer, haba labradores de Xixona, Aspe, castalla, elda, Biar, Villena, Onil, novelda, Agost y Monvar. estas seran aquellas zonas que se distribuyeron con la repoblacin y aquellas otras en las que se fue ampliando el cultivo a lo largo del siglo XVii y principios del XViii. Y aunque nicamente hayamos localizado una referencia documental de un nuevo establecimiento autorizado por el Ayuntamiento des- de la repoblacin de 1611 hasta el ao 1732 (en concreto el del esquinal de Pua en 1620), los nuevos 17 APM, escrituras pblicas de 1726 a 1731: Ao 1729, f. 29. 18 APM, escrituras pblicas de 1713 a 1721: Ao 1717, f. 31v. 19 APM, escrituras pblicas de 1713 a 1721: Ao1718, f. 61; escrituras pblicas de 1731 a 1721: Ao 1719, ff. 75-76. Aos 1726 a 1731: Ao 1726, ff. 35, 39, 67, 69, 71, 74, 75, 82 v., 89, 103, 115, 117, 119, 121, 122, 123, 129, 130, 131. Ao 1730, f. 17, 6. 20 la propiedad de Mosn thoms rico, en cat, dejada en usufructo a su hermana Beatriz, constaba de 74 jornales plantados con muchos almendros, con casa y corral, una ermita, una casa de nieve y una calera. Adems le haba dejado 5 jornales de huerta en la partida del camino del cit, con corral de ganado, 7 jornales en el Barchell con almendros, olivos, higueras que lindaban con la boquera de arriba del Guirnei, 4 tahllas de huerta y una refaccin en las huertas de la villa, 9 tahllas de via en el campico, ms un censo de 70 libras cargado sobre la Oya Falsa, partida de Pussa (APM, escrituras pblicas de 1713 a 1721: Ao 1713, f. 8). el contrato de arrendamiento de cat en APM, escrituras pblicas de 1713 a 1721: Ao 1721, f. 36 y sig. el arrendamiento de la tierra del Barchell en APM, escrituras pblicas de 1726 a 1731: Ao 1728, f. 41. 21 APM, escrituras pblicas de 1713 a 1721: Ao 1717, f. 7v.; escrituras pblicas de 1726 a 1731: Ao 1728, ff. 39, 41. Ao 1730, f. 41. Ao 1753, f. 21. 22 AMP, 50/1. Cabildos desde el ao 1713 asta el de 1751 inclusive y diferentes reales provisiones. 11 de julio de 1722, f. 260. 23 APM, seccin Petrer, 3 de diciembre de 1737, p. 82 y 84. 24 AMP, 50/1. Cabildos desde el ao 1713 asta el de 1751 inclusive y diferentes reales provisiones. 4 de febrero de 1748, f. 38v.; 9 de enero de 1741, f. 90; 16 de febrero de 1739, f. 114; 28 de marzo de 1733, f. 150. 25 APM, escrituras pblicas de 1719, f. 59; escrituras pblicas de 1725 a 1722: Ao 1723, f. 21v.; Ao 1724, f. 140; Ao 1725, f. 61v.-65v. 26 APM, escrituras pblicas, 12 de octubre de 1763. 27 AMP, 45/1. libro de Hacienda, ao 1726. 119 Sabina Asins Velis campos de cultivo, especialmente aqullos de los que se pagaba el pecho, se anotaron en los libros de Giradora de los aos 1636, 1654 y 1682, segn era la costumbre, como as se especica en los nuevos establecimientos de tierra que se concedieron desde 1738. consideramos que las partidas con topnimos castellanos, como los cannigos, el Pino de Poveda, los Arenales, etc., recogidas en el libro de Hacien- da de 1726, corresponden a nuevas roturaciones tras el decreto de nueva Planta (1707). 2. Expansin de cultivos: los nuevos establecimientos de tierras incultas la evolucin de la agricultura valenciana durante los siglos XViii y XiX, en relacin con los cambios operados por la ampliacin de la supercie de cultivo, ha sido objeto de estudio desde muy diversos 28 enfoques, tanto generales como locales . A grandes rasgos, como veremos a lo largo de este captulo, el territorio de Petrer comparte algunas de las caractersticas que se sealan para otros municipios del Medio Vinalop, como novelda, en donde la roturacin fue poco intensa en relacin al total de suelo 29 disponible , pero en el caso de Petrer signicativa en trminos porcentuales en cuanto al total cultivado. dinmica que tambin se sigui en lo relativo al aumento de poblacin, pues Petrer pas de contar con unos 765 habitantes en el ao 1709 a 2.636 segn el Censo de Floridablanca de 1787, y a la densicacin 2 del hbitat concentrado y disperso (pasando de 7,3 a 25,29 habitantes/km ). este incremento en el nme- ro de vecinos se correspondi con una intensicacin del abancalamiento de laderas, duplicando la ex- tensin del espacio cultivado, y la captacin de nuevos acuferos para mejorar la produccin agrcola. la puesta en cultivo de nuevas laderas se produjo tanto de forma legal, mediante nuevos estableci- mientos escriturados ante notario, como ilegalmente, roturando los terrenos colindantes a las propie- dades o apropindose de terrenos de los azagadores, caminos o simplemente de terrenos incultos. Por cuanto se reere al dominio del secano, su extensin tras la repoblacin de 1611, como vimos en el 28 Por lo que a nuevas roturaciones y abancalamientos se reere son signicativos los autores que, desde una u otra perspectiva han estudiado el tema: e. GiMneZ lPeZ, Alicante en el siglo XVIII: Economa de una ciudad portuaria en el antiguo r- gimen. Valencia: Instituci Alfons el Magnnim, Diputaci Provincial de Valencia, 1981; A. ALBEROLA ROM, Jurisdiccin y propiedad de la tierra en Alicante (ss. XVII y XVIII). Alicante: Universidad de Alicante, 1984; R. GARRABOU, Un fals dile- ma: modernitat o endarreriment de l agricultura valenciana (1850-1900). Valencia: instituci Alfons el Magnnim. instituci Valenciana d Estudis i Investigaci, 1985; P. RUIZ TORRES, Desarrollo y crisis de la agricultura en el Pas Valenciano a nales del Antiguo rgimen. en: r. Garrabou, et al., (eds.), Historia Agraria de la Espaa Contempornea. Barcelona: Crtica, 1985; l. UrteAGA, La tierra esquilmada. Las ideas sobre la conservacin de la naturaleza en la cultura espaola del siglo XVIII. Barcelona: Serbal; Madrid: CSIC, 1987; E.M TONDA MONLLOR, Los aprovechamientos de la tierra en Alcoy a nes del siglo XiX. Investigaciones Geogrcas. Instituto Universitario de Geografa. Universidad de Alicante, pp. 137-150, 1988; F. SncHeZ SAlAZAr, Extensin de cultivos en Espaa en el siglo XVIII: roturas y repartos de tierras concejiles. Madrid: Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentacin, 1988; J.F. BONMAT ANTN, La agricultura en la provincia de Alicante a nales del siglo XIX. Valencia: Conselleria d Agricultura i Pesca, 1989; J. ROMERO GONZLEZ, La agricultura valenciana en el proceso de industrializacin y urbanizacin. Cambios estructurales recientes en el espacio rural valenciano (1959-1986). Generalitat Valenciana: Conselleria d Agricultura i Pesca, 1989, pp. 42-52; P. RUIZ TORRES, La agricultura valenciana en el siglo XViii. en: Estructuras agrarias y reformismo ilustrado en la Espaa del siglo XVIII. Madrid: Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentacin, 1989, pp. 99-132; M. ARDIT LUCAS, Els homes i la terra del Pas Valenci (segles XVI-XVIII). Barce- lona: Curial, 1993; M. HERNNDEZ HERNNDEZ, Paisajes agrarios y medio ambiente en Alicante. Evolucin e impactos medioambientales en los paisajes agrarios alicantinos: 1950-1995. Alicante: Publicaciones de la Universidad de Alicante, 1997, pp. 37-70; J. SIMPSON, La agricultura espaola (1765-1965): la larga siesta. Madrid: Alianza Universidad, 1997; A. SAnMArtin i BeSAldUcH, la participacin de la nobleza en las transformaciones agrarias del siglo XX. el Patrimonio del Barn de la Pobla. Tesis doctoral. Departament d Histria Contemporania. Facultat de Geograa i Histria de Valencia, 1998; J. SOriAnO, los rompimientos de tierras forestales en el siglo XViii en el norte de la comunidad Valenciana. en: Preac- tas del IX Congreso de Historia Agraria. Bilbao: Servicio Editorial de la Universidad del Pas Vasco, 1999, pp. 487-496; G. cHAStAGnAret (dir.), Crise espagnole et nouveau sicle en Mditerrane. Politiques publiques et mutations structurelles des conomies dans l Europe mditerranenne (n XIXe-dbut XXe sicle). casa de Velzquez. Publications de l Universit de Provence, 2000; J. PIQUERAS HABA, Expansin vitcola y reparto de la propiedad. Un estudio local: Campo Arcs 1752- 2000. Cuadernos de Geografa 67/68, 2000, pp. 351-380; A.F. GRAU ESCRIHUELA, Domini i propietat a la Marina Alta: Dnia, Xbia i el Verger, segles XV-XIX. Dnia: Institut Alacant de Cultura Juan Gil-Albert, 2001; J. PASTOR i FLUIX, Histria de les baronies de Calp, Benissa, Teulada i Altea (segles XIV-XIX). Calp (Alacant): Ajuntament de Calp; Valncia: Biblioteca Valenciana, 2005; y especialmente la reciente monografa de P. GiMneZ FOnt, Las transformaciones del paisaje valenciano en el siglo XVIII: una perspectiva geogrca. Alacant: instituci Alfons el Magnnim, 2008. 29 P. GiMneZ FOnt, Las transformaciones del paisaje& op. cit., p. 250. 120 Los establecimientos autorizados, las roturaciones ilegales y la bsqueda de manantiales en el siglo XVIII captulo anterior, pudo alcanzar entre 900 y 1.000 hectreas. durante el siglo XViii, coincidiendo con el perodo en que estuvieron en vigor los distintos reales decretos que favoreceran la extensin del cultivo, se autoriz por parte de la seora y del Ayuntamiento el establecimiento de tierras incultas, lo que supuso el incremento de los abancalamientos en el secano en unas 105,20 hectreas. Aumento al que hay que aadir la construccin de numerosos bancales ilegales que fueron objeto de denuncias constantes desde 1750. en el Amillaramiento del ao 1859 ya se cultivaban unas 2.138,92 hectreas en secano, por lo que durante los siglos XVII, XVIII y primera mitad del siglo XIX su ampliacin s fue signicativa en rela- cin con el total cultivado, al crecer en unas 1.138 hectreas, duplicndose as el espacio secano abanca- lado; sin embargo, nicamente tenemos constancia del establecimiento mediante escrituras notariales de 105,20 hectreas, es decir de un 9,24% de las actuaciones. Pero si bien se duplic el rea cultivada, en 1859 sta slo representaba el 20,51% del territorio (en total el 22,47% si incluimos el regado y riego eventual); as y todo, el mximo cultivado de que tenemos constancia alcanzara nicamente el 26,51% del trmino municipal en el ao 1900. ello ha permitido que a da de hoy en Petrer, incluidas aqullas reas que se aterrazaron en esos siglos y en la actualidad se han abandonado, el 73,58% del total del municipio se dedique a pinar, matorral y pastos, aportando una de las cifras ms elevadas de toda la comunidad Valenciana de espacio natural y semi-natural. la ampliacin de los abancalamientos en el siglo XViii tuvo su correspondencia en la excavacin de nuevos puntos de aprovisionamiento de agua, cuya construccin y gestin recaa en los particulares, a excepcin de la conduccin del agua de Pua en cuyas mejoras contribua la seora con un tercio de los gastos. entre las obras emprendidas destacan por su inters la nueva acequia desde los Molinos de la rambla de Pua hasta la balsa, el azud en la misma rambla; balsas de menor tamao por diferentes partidas, como la de la Gurrama, o con una capacidad mayor como la balsa nueva de Caprala de 1766; la boquera de la rambla del Horno del Vidrio o las de otros particulares; manantiales como el de Gines Jun o la ampliacin de la mina de Pua. no obstante, la limitacin del caudal de los recursos hdricos del municipio se constata al analizar el destino del agua de esos nuevos puntos de captacin. estos no se dirigieron a ampliar considerable- mente el espacio cultivado en regado, sino, por un lado, a aportar un suplemento mnimo a los cultivos de secano de las distintas partidas del interior montano y, por otro, a asegurar el caudal del agua que llegaba a la balsa de la villa, que se destinaba a las partidas de riego y riego eventual. Pues en Petrer, al contrario de lo ocurrido en otras zonas, no se forz la extensin del regado, limitado por la falta de recursos hdricos autctonos y no recurrirse a los alctonos. Hecho que llamo la atencin del botnico cavanilles: Si fuesen mas las aguas todo seria huerta desde Petrel hasta los terminos de Elda y Sax, ha- 30 llandose los campos en declive . Si recordamos que en 1611 se trabajaban 24,02 hectreas en regado y 120,10 en riego eventual, en el Amillaramiento del ao 1859 eran 30,60 las hectreas irrigadas y 172,14 las dedicadas a riego eventual, por lo que estimamos que, entre esas dos fechas, nicamente se ampli en unas 6,58 hectreas el regado y 52,04 hectreas el riego eventual. ese incremento, aunque desde luego modesto, supona no obstante la ampliacin del 27,39% del espacio cultivado en regado y del 44,33% del cultivado en secano mejorado en los siglos anteriores. de todas formas, si bien la nueva extensin del regado representa en trminos porcentuales un au- mento importante, debemos tener en cuenta que, si repartiramos la misma extensin de huerta que se 2 dio en 1611 a cada familia (dos tahllas, equivalentes a 2.402 m ), las 6,58 hectreas en que creci el rea de regado alcanzara nicamente para 27 nuevas familias, eso en los casi 250 aos que separan 1611 y 1859. los datos de extensin del rea irrigada se reducen si nos atenemos a la informacin de los aos 1882 (25,01 hectreas en regado) y 1900 (26,20 hectreas), cifras muy cercanas a las 24,02 hectreas del ao 1611. estas estimaciones permiten concluir que en Petrer el permetro de la huerta permaneci prcticamente invariable desde al menos el ao 1611. es ms, como comentamos en cap- tulos anteriores, consideramos que sera la misma extensin que correspondera a la trabajada por los moriscos e incluso equivalente a la partida de la Huerta de poca islmica. la extensin de las partidas 30 A.J. CAVANILLES, Diarios de Campo. Jard Botnic de la Universitat de Valencia. Copia microlmada. Nm. 7, f. 104. 121 Sabina Asins Velis en riego eventual en enclavados de secano creci a expensas de las nuevas captaciones de agua, que- dando tambin fosilizada la de aqullas que dependan de la balsa de la villa (las de los Olivares y las Vias de Arriba) debido a que la capacidad de sta y la duracin de los turnos de riego eran los mismos que en siglos anteriores. no obstante si creci el nmero de usuarios de la balsa de la villa, de 100 con la repoblacin de 1611 a 135 vecinos en el ao 1793, lo que se debi a las ventas de medias huertas con agua de la balsa o a la particin de herencias, que se registran en la documentacin notarial a lo largo 31 de la centuria . como hemos dicho, an siendo importante la ampliacin de los cultivos en el siglo XViii en trmi- nos porcentuales, no lo fue en relacin con el total de suelo susceptible de abancalar. esto permiti que la extensin de los Bienes de Propios del Ayuntamiento de Petrer en 1861, cuando comenz su venta por el proceso desamortizador, fuera de 5.621,77 hectreas a arbolado, monte bajo y pastos (54% del territorio). las transformaciones paisajsticas producidas por las roturaciones del siglo XViii no alcan- zaron en este municipio la importancia que tendran en algunas poblaciones de la ribera valenciana o en la cercana elche, por ejemplo, al no forzarse la extensin del regado, por sus mismas limitaciones de recursos hdricos y no recurrir adems a los forneos, lo que a da de hoy le da indudables ventajas respecto a otros municipios del entorno, tanto a nivel ambiental como socio-poltico. Por otra parte, la prctica del aterrazamiento de las laderas mediante muros de mampostera de piedra seca, generalizada tambin en toda la comunidad Valenciana, evit la erosin de los suelos en los campos abancalados, si bien estos bancales se hicieron a costa de las reas boscosas o de matorral de la localidad. 2.1. Establecimientos legales Autorizacin para roturar nuevas tierras: Real Decreto de Felipe V, de 8 de octubre de 1738 Atendiendo al real decreto de 8 de octubre de 1738, sobre baldos y despoblados, los nuevos estable- cimientos de tierras incultas se fomentaron tanto por parte de la seora como del Ayuntamiento. dado el relieve del trmino y la organizacin previa del espacio cultivado, los nuevos campos de cultivo se establecieron en las laderas de las montaas, disponindose en bancales. la precisin con que se des- cribe en los protocolos notariales estos establecimientos nos ha permitido identicar en el terreno casi todos los aterrazamientos de nueva concesin que se realizaron entre 1737 y 1746. en las escrituras se especicaba que el nuevo propietario deba cultivar y cuidar la tierra y pagar a su seora anualmente el pecho o censo perpetuo e irredimible, en los plazos convenidos por la villa, para lo que deba registrarse el nuevo establecimiento en el libro Giradora de la poblacin. el establecimiento se haca atendiendo a los captulos, condiciones y dems circunstancias prevenidas en los establecimientos antiguos, en los captulos de Poblacin y en las escrituras y concordias. la peticin por parte del labrador se redactaba segn los trminos siguientes, con algunas variantes: Excelentsimo Seor, (nombre del labrador) vecino de la villa de Petrer de su Excelencia su mas humilde vasallo, puesto a sus pies, con todo rendimiento suplicante dice, que encontrandose en el termino de dicha villa de Petrel unos pedazos de realencos contiguos y comprehendidos desde (descripcin del sitio) hasta (descripcin del sitio) teniendo como tiene el suplicante (nmero) hijos deseando con la ayuda de estos, y para dexarles algunas tierras donde puedan trabajar, sacar, y desmontar dichos pedazos de realencos, para hazerlo sin incurso de pena y con titulo legitimo que le sirva para posesion al suplicante y sus sucesores suplica a su Excelencia se digne establecerles para inperpetuum los dichos pedazos de realenco, merzed que espera del recto zelo, y piedad para sus vasallos. A la frmula de peticin segua un Decreto en el que se especicaba que las referidas tierras no perte- necan a un tercero, y que con el establecimiento no se causaba perjuicio a nadie con mayor derecho. Y se aada que deba satisfacer el debido diezmo a la seora. A continuacin se pactaban las condiciones 31 Por ejemplo: APM, escrituras pblicas de 1725 a 1722: Ao 1724, 7 de enero y ff. 68, 70. 122 Los establecimientos autorizados, las roturaciones ilegales y la bsqueda de manantiales en el siglo XVIII para su puesta en cultivo: el otorgante deba desmontar, labrar y cultivar los realengos otorgados en el trmino de unos aos desde la fecha de la escritura (variable entre 4 y 8 aos en Petrer), so pena de comiso y que de los frutos que se cogieran panicados de dicho realengo pagara el diezmo correspon- diente, segn la costumbre de Petrer. igualmente se indicaba que segn la real Orden de Felipe V, de 9 de julio de 1739, podan vender las tierras a su voluntad, excepto a clrigos, lugares santos y personas de rdenes religiosas. en otros casos recogidos en la documentacin, las tierras que haban dejado de cultivarse con el tiempo eran nuevamente establecidas, para que no se perdiera la pensin anual que el conde obtena de ellas. tras la comprobacin de que haca un tiempo no se pagaban los pechos por las tierras, en los libros del arrendador de los derechos dominicales y decimales de la villa, el Secretario y Apoderado General 32 del conde poda conceder licencia para el nuevo establecimiento del terreno abandonado . las nuevas concesiones autorizadas por la seora se efectuaron por los labradores de Petrer tanto en el trmino de esta localidad como en Salinas. A excepcin del establecimiento de 1732, los establecimientos legales concedidos por la seora que se escrituraron en Petrer (tabla i-4.1) coinciden con el periodo de validez del real decreto de 8 de octu- bre de 1738, promulgado por Felipe V, sobre la enajenacin de baldos y despoblados. Hasta el punto de que los que se concedieron en 1735 se volvieron a escriturar en 1739, en vista de que no estaban inscritos en la forma debida. este real decreto fue anulado el 18 de septiembre de 1747 por su hijo Fernando Vi, a instancia de la diputacin de los Reynos, con el n de reparar los daos que haban experimentado los baldos y despoblados del pas desde lo pactado, acerca de que estas tierras quedasen a benecio de los 33 pueblos para poder hacer frente a la carga del impuesto de Millones que se les impuso . Tabla I-4.1. establecimientos autorizados en Petrer por parte de la seora durante el siglo XViii AO LABRADOR PARTIDA JORNALES Ref. APM 1732 Francisco Poveda desde la cuesta de castalla hasta donde se juntan las dos Un pedazo de Seccin Petrer sendas, una se encamina hacia Pussa y la otra entra en dos realengo 12-X-1732 barrancos. Poner en cultivo en 5 aos 1735* Joseph Olzina, campico de Petrer, vias de abajo. Pagar de pecho anual, y 3 tahllas Seccin Petrer menor, vecino de por derecho de aguas, 3 libras, 11 sueldos y 3 dineros 11-V-1739 elda, carpintero 1735* Antonio romero campico de Petrer, vias de abajo. Pagar de pecho anual, y 7 tahllas Seccin Petrer de lorenzo por derecho de aguas, 8 libras, 6 sueldos y 3 dineros 13-V-1739 1735* Antonio Mico de campico de Petrer, vias de abajo. Pagar de pecho anual, y 2 tahllas Seccin Petrer Miguel por derecho de aguas 2 libras, 7 sueldos, 6 dineros 13-V-1739 1735* Joseph lorente, campico de Petrer, vias de abajo. Pagar de pecho anual, y 4 tahllas Seccin Petrer vecino de elda por derecho de aguas 4 libras, 15 sueldos 23-V-1739 1737 Silvestre cuenca reoyo de la balsa del Sit. linda con realengo por todas partes 6 jornales de Seccin Petrer tierra secana 9-Xii-1737, f. 4v. 1741 Agustn caprala. desde las vertientes que derraman en tierras de la Unos pedazos de Seccin Petrer Montesinos heredad que ya posee en caprala, vertientes arriba hasta el realengo 5-Xi-1741 barranco de castilla. Poner en cultivo en 8 aos 1742 ignacio Bernabe caprala. Sin pecho. desde el barranco de castilla, llegando a 25 30 jornales Seccin elda de Vidal los trminos de castalla y Sax, y montaas dichas de caprala. de tierra secana 4-Xii-1742 Poner en cultivo en 4 aos 1743 Blas navarro collado del navayol, lindan con el collado y con el rincn del 7 jornales de Seccin elda 1742- Arenal. Poner en cultivo en 2 aos. Sin pecho tierra secana 1747. 30-i-1743 32 Ace, nm 938, 24 de octubre de 1760. 33 novsima recopilacin de las leyes de espaa. tomo ii. Madrid: imprenta de la Publicidad, ao 1850. libro Vii, tit.XXiii, Ley III, nov. Recop. (Ley III.- Extincin de ja Junta y Superintendencia de baldos: su reintegro a los pueblos; y conocimiento de este ramo en el consejo. d. Fernando Vi por real resolucin, 18 de septiembre de 1747). 123 Sabina Asins Velis AO LABRADOR PARTIDA JORNALES Ref. APM 1743 Pedro Poveda Alto de Antonio Guarinos. Poner en cultivo en 3 aos 10 jornales de Seccin elda 1742- tierra secana 1747. 25-ii-1743 1743 Joseph Valor tras la sierra del cid, rayando el trmino de Agost (linda con 15 jornales de Seccin elda 1742- cueva). Poner en cultivo en 4 aos tierra secana 1747. 25-ii-1743 1743 Bartolom navayol, en la cuesta Blanca, linda con mojonera de castalla. 8 jornales de Seccin elda 1742- rodrigues de Poner en cultivo en 3 aos tierra secana 1747. Gines 21-iii-1743 1743 Vicente Alcaras Bajo los molinos harineros de la villa, entre los barrancos 6 jornales de Seccin elda 1742- el Fuerte (Fort) y el que baja de dichos molinos. Poner en tierra secana 1747. cultivo en 2 aos 18-V-1743 1743 Antonio Frances del Barranco del Pantano, desde las Fuentes de dicho 10 jornales de Seccin elda 1742- pantano hasta la fuente del Badallet. linda con tierras de la tierra secana 1747. Administracin de mosn thomas rico, dicha fuente y loma. 3-Vi-1743 Poner en cultivo en 2 aos 1743 rafael cortes del camino de Agost y del Horno del Vidrio. Poner en cultivo 15 jornales de Seccin elda 1742- en 3 aos tierra realenga 1747. 14-Xi-1743 1744 Blas rico el Figueralet, sobre los molinos harineros de la localidad. 6 jornales de Seccin elda 1742- Poner en cultivo en 3 aos tierra realenga 1747. 3-ii-1744 1744 Pasqual Bernabe la Pedrera. linda con sierra del cochinet. Puesta en cultivo 10 jornales de Seccin elda 1742- de Marcelinos en 3 aos. en el realengo tierra 1747. 18-Xii-1744 1745 Pedro Perales navayol, linda con la cuesta de Pusa. Quiere que se le 40 jornales de Seccin elda 1742- establezcan los ensanches que tiene en sus tierras y heredad. tierra inculta y 1747. Poner en cultivo en 6 aos realenga 8-iii-1745 1745 Joseph Perales navayol. linda con rambla que baja de las fuentes de 8 jornales Seccin elda 1742- caprala, con rambla que baja del barranco de las Cuebas 1747. y con montaa que baja del alto dicho de Antn Guarinos. 8-iii-1745 Poner en cultivo en 4 aos 1745 Francisco Maestre Partida del Agua Buena, a mano izquierda subiendo al 8 jornales de Seccin elda 1742- de Francisco barranco de las cuevas, a la izquierda subiendo al Alto de tierra realenga 1747. Antn Guarinos. linda con mojonera de castalla y montaas. 3-X-1745 Poner en cultivo en 4 aos 1745 ignacio carbonell Partida de la Maxada Onda, rayano al trmino de Sax. linda 15 jornales de Seccin elda 1742- con dicho trmino y con montaas. Poner en cultivo en 4 tierra realenga 1747. aos. 10-Xi-1745 1746 Blas romero Vias de Abajo. Media via, que hace muchos aos que est Media via Seccin elda 1742- Martinez inculta, y sin contribuir a su excelencia el correspondiente 1747. pecho, o censo annuo, con su justo pecho y agua. Poner en 16-Viii-1746 cultivo dentro de ese ao 1746 Gines Juan de Almafra, sobre la acequia donde se dividen ambas 1 tahlla y Seccin elda 1742- Bernardo jurisdicciones. tierra de regado inculta desde hace muchos 1747. aos. Poner en cultivo dentro del ao. 16-Xi-1746 1746 Gines Juan de el campico. linda con camino real que sube a la villa de 8 tahllas de Seccin elda 1742- Bernardo Petrel. tierra inculta y sin ser conocida de dueo que la tierra 1747. cultive. Poner en cultivo en 1 ao 20-Xi-1746 1748 Antonio romero Vias de Abajo. Pagar de pecho anual, y por derecho de 3 tahllas, de Seccin elda de lorenzo aguas, 3 libras 11 sueldos y 3 dineros tierra yerma 10-Vii-1748, f. 11 1749** 6 jornales r. BelAndO, 1986, p. 35** TOTAL EXTENSIN ESTABLECIDA POR LA SEORA (1 jornal = 4 tahllas; 1 tahlla = 1.201 m 2 ) SECANO = 200 jornales = 96,08 hectreas; REGADO Y RIEGO EVENTUAL = 30, 5 tahllas = 3,66 hectreas. * estos establecimientos se hicieron en 1735, pero en 1739 vieron que las escrituras no estaban en la forma debida, por lo que se tuvieron que reescriturar. ** r. BelAndO cArBOnell, la expansin de las tierras cultivadas a lo largo del s. XViii. los establecimientos del condado de elda. Investigaciones Geogrcas 4, 1986, p. 35 y r. BelAndO cArBOnell, realengo y seoro... op. cit., pp. 69-70. 124 Los establecimientos autorizados, las roturaciones ilegales y la bsqueda de manantiales en el siglo XVIII Anulacin del Decreto por Fernando VI, el 18 de septiembre de 1747 esta fecha de 1747 coincide con los ltimos establecimientos concedidos en Petrer por parte de la se- 34 ora en todo el siglo XViii de los que tenemos constancia notarial . Fernando Vi adems de ordenar el cese de las transacciones sobre baldos y despoblados, mand que los terrenos volvieran a ser rein- tegrados a los pueblos, conforme los disfrutaban en 1737, aunque mantuvo por el momento las ventas, adjudicaciones o transacciones que desde 1737 se hubieran hecho de tierras incultas y montuosas de las que no tenan ningn aprovechamiento los pueblos. Por esta misma orden se extinguieron la Junta y Superintendencia de baldos. Por la real ordenanza de 7 de diciembre de 1748, sobre el aumento y conservacin de montes y plantos, se prohibi, bajo multa de 10 ducados por fanega adems de pagar el dao, todo nuevo rom- pimiento sin facultad real al notar que las rozas y quemas que se hacan para sembrar en tierras nuevas inmediatas a los montes, causaban incendios. Se prohibieron adems las quemas sin retirar previamente la lea a menos de medio quarto de legua de distancia de los montes; lea que deban cubrir con tierra de forma que no levantara llama. con la misma precaucin se procedera en las rozas y quemas de tierra 35 abierta, aunque para estas no se necesitara facultad real . de hecho en Petrer se incrementa la preocu- 36 pacin por la conservacin del bosque , para lo que reclamaban medidas pues si no vendra el casso con humedad de tiempo, que los vecinos y naturales de esta dicha villa padeseran la ruina resultante de un 37 total atalamiento y que carezcan de los benecios de su termino . Autorizacin de Fernando VI, de 15 de julio de 1752 de nuevo se autorizaran rompimientos a partir del 15 de julio de 1752, cuando Fernando Vi orden para remedio de los pobres, que a partir de ese ao se establecieran tierras sobrantes, sin perjudicar las zonas 38 de pastos comunes . As, en 1759 el Ayuntamiento concedera a lorenzo Morant el establecimiento de 34 como vemos en la tabla, los ltimos establecimientos de los protocolos notariales datan de 1748 y 1749, cuando ya se haban prohibido estos por Fernando Vi, aunque realmente el de 1748 se trata, ms que de una concesin para roturar nuevas tierras, de cultivar de nuevo un campo en la partida de las Vias de Abajo que deba estar abandonado. el establecimiento que consta en 1749 no lo hemos encontrado, pero lo citamos al haberlo recogido r. BelAndO de quien nos consta la minuciosidad con que comprob la documentacin. r. BelAndO cArBOnell, la expansin de las tierras cultivadas a lo largo del s. XViii. los establecimientos del condado de elda. Investigaciones Geogrcas 4, 1986, p. 35 y r. BelAndO, Realengo y seoro... op. cit., pp. 69-70. 35 novsima recopilacin de las leyes de espaa,& op. cit., ley XiV, real ordenanza para el aumento y conservacin de montes y plantos, punto 22. 36 el 30 de junio de 1716 se hizo un pregn en el pueblo informando de la orden enviada por el rey el 3 de mayo de ese ao, en la que se apremiaba a los Ayuntamientos a repoblar (AMP, 50/1. Cabildos desde el ao 1713 asta el de 1751 inclusive y diferentes reales proviciones. 30 de junio de 1716, ff. 381v.-384); Carta de 8 de agosto de 1718 sobre talas e incendios (AMP, 48/2. Libro de Ordenanzas y repartos); aprovechamiento de lea (AMP, 50/1. Cabildos desde el ao 1713 asta el de 1751 inclusive y dife- rentes reales proviciones. 7 de septiembre de 1743, f. 82v.). la vigilancia de los bosques del trmino municipal era constante, de ah que en mayo de 1741 se siguiera una Causa Criminal de Ocio en la Real Audiencia de Valencia contra Diego Snchez de diego por el delito de tala de montes del trmino de Petrer. Y en este sentido son varias las cartas que los vecinos dirigen a la seora informndole del dao que hacan los vecinos de Sax, Agost, novelda y elda cortando lea, esparto y madera y haciendo carbn (AMP, 50/1. Cabildos desde el ao 1713 asta el de 1751 inclusive y diferentes reales proviciones. 30 de mayo de 1741, f. 95; 4 de agosto de 1741, f. 96). 37 AMP, 50/1. Cabildos desde el ao 1713 asta el de 1751 inclusive y diferentes reales proviciones. 18 y 19 de abril de 1741, f. 92-94. 38 de Propios o Arbitrios, o las que llaman de Consejo, o muchas incultas, en sus baldos, donde no resultara perjudicial para los pastos comunes (AMP, 48(5), libro de Ordenanzas y Veredas dirigidas a esta villa). en 7 de marzo de 1752 se reciba la carta del Sr. Marqus de Malespina para que se forme relacion de los despoblados montes de essas tierras y demas efectos , en contestacin a la carta se indica como a excepcin de la poca huerta que tiene esta villa, todo lo demas de su termino y jurisdiccin, son montes, y peascos, los que naturalmente producen pinos carrascos, y el monte principal llamado la zierra del Zit que dista como cossa de un quarto de legua de esta villa la falda de dicho monte, por la hombria, y solana que fructican las tierras de diferentes labradores que las cultivan, y apaan, cuyo monte confronta con las Jurisdicciones, de Novelda, Monforte y Agost; Y linea reta por el Collado dicho del Horno del Vidrio, prosiguen los montes dichos las Peas de las Montesas Estrecho de la Zarza, la Sierra dicha del Lopo, y Frayle dicho de Cati, que estas confrontan con las villas de Tibi, y de Castalla, y de las peas de dicho Frayle va insiguiendo, los Montes por la mojonera de dicha villa de Castalla, por la Zierra dicha de los Molares, y Barranco de Castilla, que confrontan con la villa de Sax, del Reyno de Murcia, y en la mediacin de dichos Montes se enquentran tierras, tanvien de diferentes particulares y vecinos, que panican, y parte de ellas las tienen 125 Sabina Asins Velis 16 jornales de tierra inculta en la partida del Badallet, y en 1760, usando las facultades adquiridas por los captulos de nueva poblacin, el Ayuntamiento establecera a don Marzelo rico, presbtero, 3 jornales de tierra inculta en la partida del Rincn de Ribelles. En las condiciones del contrato se especica que 39 el clrigo se obligaba a reducirlo a cultivo en el plazo de 2 aos (tabla i-4.2). es tambin a partir de mediados de siglo cuando se anotan la partida de castalla y la hacienda dels Amats en Salinetas, con su 40 casa, corrales y cisterna, plantado de olivos y almendros , la de las canales de Santa Brbara y la del 41 Molino nuevo o la hoya del collado de llauri, la cruz de Medina, la cachuleta, la Hoya de los caa- 42 res, la pea de las Palomas, los chaparrales, la loma colorada, o el collado del Maset de Pruna , de los que no hemos localizado los registros de autorizacin. Tabla I-4.2. establecimientos autorizados por el Ayuntamiento de la villa de Petrer durante el siglo XViii Ref. APM AO OTORGADO A PARTIDA JORNALES (seccin Petrer) 1759 el Ayuntamiento de la Badallet. lindan con dicho Badallet, con dicho de cati y 16 jornales de 22-Xii-1759 Villa a favor de loren- realencos. no debe causar perjuicio al abrevador del Bada- tierra inculta zo Morant llet, ni menos al de las fuentes del pantano. Poner en cultivo en 4 aos. 1760 el Ayuntamiento de la rincn de ribelles. Pretenda el establecimiento Bartolome 3 jornales de tierra 24-iii-1760 Villa a favor de Mar- Maestre de diego. lo solicita Marcelo rico porque los 3 inculta celo rico, presbtero jornales lindan con las tierras que l ya posee, por lo que pide ser privilegiado en la concesin, por cercana. lindan con el trmino de castalla y con montaas reales. Poner en cultivo en 2 aos. TOTAL EXTENSIN ESTABLECIDA POR EL AYUNTAMIENTO SECANO = 19 jornales = 9,12 hectreas Real Provisin de Carlos III, de 26 de mayo de 1770 Se dio tambin el caso de la presentacin, por parte del hacendado Pedro Montengn en 1770, de un 43 real despacho de su Majestad y Seores del Supremo consejo de castilla , por el que se le concedi licencia para desmontar y reducir a cultivo las orillas y ensanches incultos que tena en la heredad de ra- bosa, con arreglo a las reales rdenes y pragmtica de su Majestad relativas a dicha cuestin. de hecho, 44 carlos iii, por real provisin de 26 de mayo de 1770, haba ordenado como sigue : - Que los repartimientos de tierras de propios, Arbitrios concejiles de labrantas, hechos hasta aqu en virtud de las rdenes generales, subsistan en todo lo que mantengan cultivado y corriente los vecinos a quienes se hubiere repartido; con prevencin de que dexndolo de cultivar, el precio del arrendamiento por un ao, pierdan la suerte, y se incluya en el repartimiento que se haga. - Exceptuando la senara o tierra de Concejo en los pueblos donde se cultivase, se convinieran cultivarla de vecinal, las demas tierras de Propios, Arbitrios o concejiles labrantas de los pue- blos, que no estan repartidas ni arrendadas, se repartan en manos legas. plantadas de olivos, y almendros: Cuya situacin de dichos montes, de longitud comprenderan como cossa de legua y media, y de latitud, como cossa de una legua en poca diferencia que estos son los realencos pertenecientes su Majestad (Dios lo Gde) y no se enquentra en todos ellos deessa alguna. (AMP, 48(5), libro de Ordenanzas y Veredas dirigidas a esta villa. 7 de marzo de 1752). 39 APM, escrituras pblicas de 1760, f. 29 v. 40 APM, escrituras pblicas de 1726 a 1731: Ao 1730, f. 21; escrituras pblicas de 1758, f. 32. 41 AMP, 48(6), libro de Ordenanzas y Veredas dirigidas a esta villa. 23 de julio de 1763. 42 AMP, 51/1, 21 de noviembre de 1764. expediente de los azagadores del trmino. 43 en contestacin a un recurso presentado por Montengn contra la Justicia de Petrer, con el objeto de prohibir a los ganaderos y pastores entrar los ganados en su heredad sin licencia. AMP, caja 37, exp. 5, 5 de agosto de 1770. 44 novsima recopilacin de las leyes de espaa,& op. cit., leyes sobre dehesas y pastos. ley XVii, Repartimiento de tierras de propios y Arbitrios concejiles a los labradores, baxo las reglas que se expresan, puntos 1, 3, 4 al 7. 126 Los establecimientos autorizados, las roturaciones ilegales y la bsqueda de manantiales en el siglo XVIII - En primer lugar a los labradores de una, dos y tres yuntas, que no tengan tierras competentes para emplear las yuntas propias, dividindolas en suertes de a 8 fanegas, dando una suerte por cada yunta. - En segundo lugar a los braceros, jornaleros o senareros, que se declara ser todo peon acostum- brado a cavar y demas labores del campo; a los cuales pidindolo, se les repartir una suerte de tres fanegas en el sitio o paraje menos distante de la poblacin; previniendo que, desando un ao de beneciarla o cultivarla, o no pagando la pension, la pierdan; - Si hecho el primer repartimiento entre todos los que se hallaren aptos para el, y lo pidieren voluntariamente, sobraren tierras que repartir, se repetir otro otros repartimientos, por el mismo orden que va explicado, entre los labradores de una, dos y tres yuntas; hasta completarles las tierras que puedan labrar con ellas; y si todava sobraren, se repartirn a los que tengan mas pares de labor, con proporcion a lo que necesitasen, y puedan cultivar; y no necesitndolas, se sacarn a subasta, y se admitirn forasteros,...; sin que ninguno pueda subarrendar ni traspasar extrao la tierra de esta clase que se le haya repartido arrendado. - Los comisarios electores de Parroquias hagan el nombramiento de repartidores y tasadores, los quales con intervencin de la Junta de Propios regularn el tanto que se haya de pagar por cada suerte en frutos en dinero, con atencin a la calidad de las tierras y sus huecos, y segn la prctica y estilo del pais; teniendo consideracin que no decaigan los caudales pblicos de lo que antes les producan las mismas tierras, sobre que velarn los Corregidores de las cabezas de partido; quedando en libertad los pueblos, en que los vecinos tienen derecho de cultivar en los montes trminos comunes, para que puedan practicarlo sin que en esto se haga novedad; ni tampoco se cargue pension alguna por las tierras concejiles en los pueblos donde, por no ser de Propios, ni tener sobre s algun Arbitrio, hasta ahora se han repartido y labrado libremente sin pension canon alguno. De igual modo, la Iglesia de Petrer concedi nuevos establecimientos; en este caso, un trozo de tierra de propios de la rectora, llamado el Fosar, junto a las peas de San Bonifacio, pero para construir casas y 45 eras de pan trillar, a cambio de un censo redimible del 3%, segn haba estipulado el rey . en total en el siglo XViii, con la documentacin escrita de que disponemos, entre la seora y el Ayuntamiento se concedi el establecimiento legal de 105,20 hectreas en el secano y 3,66 hectreas en regado y riego eventual, en total 108,86 hectreas, ms las parcelas que no especican la extensin y se asignan como pedazos y otras licencias concedidas, como la de Pedro Montengn para ensanchar su nca de Rabosa (Tabla I-4.3 y Anexo Cartogrco, mapa siglo XVIII). 2.2. Roturaciones ilegales Las tierras que quedaban sin conceder formaban los baldos del pueblo. A partir de 1739 se intensic la presin del rey para conocer, por medio de la Real Junta de Valdos y Arbitrios, las tierras baldas y realengas que se hallaban usurpadas al patrimonio real, distinguiendo adems los conceptos de Propios 46 y Arbitrios . como ya comentamos para el siglo XVii, estas tierras baldas se intentaban en ocasiones roturar ignorando la legislacin vigente sobre el particular, como se detect en Petrer, en 1750, en la sie- rra del caballo, en el barranco del Pantano, en la sierra del cid, en la pea de las Montesas y en rabosa, donde algunos vecinos haban reducido tierra a cultivo, en perjuicio del comn y de la cabaa ganadera; por lo que se inform por bando a los pastores que no tenan obligacin de respetar esos campos, pues ya se haba noticado en diferentes ocasiones a los labradores que no estaba permitido labrar en estos 47 parajes . como hemos visto en el apartado anterior, entre 1747 y 1752 se haban prohibido por el rey las roturaciones, por lo que en esta fecha de 1750 las roturaciones eran ilegales. esta misma actitud mantu- vo carlos iii quien, por real cdula de 17 de febrero y provisin de 19 de abril de 1762, ordenaba que 45 APM, escrituras pblicas de 1767 a 1775: Ao 1769, f. 21 46 AMP, 48/3, instruccin del 27 de junio de 1739, adjuntando las reales cdulas sobre Arbitrios y Baldos. 47 AMP, 50/1. Cabildos desde el ao 1713 asta el de 1751 inclusive y diferentes reales proviciones. 5 de julio de 1750, f. 16 v. 127 Sabina Asins Velis si se justicaba que por aumentar las tierras de cultivo se haba perjudicado a los montes y a los pastos, se deban, una vez recogidos los frutos de los campos, reponer las tierras usurpadas con rompimientos injustos cuyos excesos son notorios y muy freqentes en todo el Reyno, dejando comprendidas en el 48 recinto de los montes las tierras pertenecientes a ellos . estas roturaciones ilegales seguan siendo tambin patentes en Petrer, donde en 1764 se indica que son numerosos los labradores que haban levantado bancales en el terreno reservado como ensanches de las carretas o azagadores. concretamente, en el Azagador que sala del charco de domingo: Pascual navarro haba labrado una suerte al subir a la loma de Santa Brbara apropindose de los terrenos de realengo; la viuda de Juan Navarro en las Bueltas de Coloma; Juan Vera un bancalito en la Oya del Al- morch; y otro bancalito la viuda de Juan Molina bajo el camino hasta los terreros. en el Azagador de la Horteta de Elda se pusieron tas para que no se passen de alli los bancales de dicho molino. Al igual que en el Azagador del Azud que va al Almorcho se pusieron tas para que Vicente Poveda no passe sus bancales de ella. en el Azagador del Ginebre: Ensima de la hoya de las oliveras de Visedo dicha de Maci y que todo ello antes estava inculto encuentran que Gaspar Manchon a sacado tierras en perjuicio por lo que le han quitado dos bancalitos de los de mas arriva& como de una thaulla& y al llegar a otras tierras nuevas que a bancalado Francisco Cortes le han quitado quatro bancales que tendran medio jornal por ser del asagador& y siguiendo dicho asagador por el rio por el que tiene Joseph Paya su corral hasta caher al barranco en el que le han quitado a Pasqual Navarro un bancalito encima del 49 camino& . Situaciones similares se sealan en el Azagador que partiendo del ro de Sax atravesaba el trmino de Petrer hacia Agost, por Caprala y Navayol; en el Azagador que desde la Buelta del nogal llegaba a la Rambla de Pua; en el que discurra desde la villa a Salinetas o en el que desde las Humbras del Frayle terminaba en el Orno del Vidrio. En todos ellos se conscaron numerosos bancales que los propietarios 50 de las tierras colindantes haban roturado en terreno comn . este tipo de actuaciones eran denunciadas mediante detallados expedientes: ... se le mand por dicha Justicia en quel acto no se intrometiera sacar ni desmontar tierras desde dicha cassa (casa de campo de Josseph rico y Amat, situada en medio del collado del Hor- no del Vidrio) hasta las bueltas que hay en dicho Cantal (de llobregat) quedandose toda aquella Hombria de la Cassa por asagador para baxar a dar agua la machada y los Ganados de esta Villa... y siendo assi que el contenido Joseph Rico y Amat, con poco temor de dios, y en menos precio de esta Real Justicia y de los preseptos de ella, en la mencionada Hombria y asagador... se a puesto arrosar y desmontar tierras cortando mucha porcion de pinos que en pocos aos serviran para madera y para precaver los daos y perjuicios que se puedan ocasionar assi a los derechos de este comun como a los Ganaderos de el, suplicava y suplico a su Merced admitiese esta Denuncia... y se le mande al contenido Josseph Rico suspenda dicha rossa y desmonte de 51 tierras y corte de pinos... . Por lo que en abril de 1770 se public un bando por orden del alcalde por el que se impona una multa de 10 libras por cada tahlla de tierra inculta puesta en cultivo sin licencia por escrito, con la obligacin de dejar esa tierra de nuevo inculta. Por este mismo bando se prohiba hacer hierba en bancales, mrgenes o acequias que no fueran de propiedad de los interesados, y llevar bestias a pastar ni animales a bancales 52 de huerta u olivares . Pero pese a las denuncias y conscaciones, los labradores de Petrer siguieron 48 novsima recopilacin de las leyes de espaa,& op. cit., ley XVii, nombramiento de visitadores de montes y plantos e instruccin que deben observar en las visitas de ellos, punto 10. 49 AMP, 50 (1-2), 26 de noviembre de 1764, f. 4 v.-10. 50 AMP, 50 (1-2), 26 de noviembre de 1764, f. 4 v.-10 y AMP, 51/1, 21 de noviembre de 1764 a 16 de febrero de 1765, f. 9-16v. 51 AMP, 51/1, 16 de febrero de 1765, f. 16. 52 AMP, 15 de abril de ao 1770. 128 Los establecimientos autorizados, las roturaciones ilegales y la bsqueda de manantiales en el siglo XVIII roturando y abancalando las laderas sin solicitar permiso. Al poco tiempo, concretamente en enero de 53 1776, se inspeccionaron de nuevo los azagadores y se encontr que : ... en el pago del Chorrillo... y en las tierras de Juan Garcia... la tierra que se le mando no cul- tivase... las a sembrado todas... y han advertido que un pedazo de Solana que tamvien taron por Vereda que estava inculta se halla desmontada y rossada, y labrada de fresco, e inmediato a esta se halla otra porcion de tierras incultas y labradisas... y siguiendo... hasta las tierras de Marcos Navarro... pero las tierras que se le consignaron por ensanche de la referida Vereda las tiene labradas... Assimismo han encontrado una buelta que se le comisso a Josseph Montesinos y Paya... inmediata a dicho abrevador y sestero de las fuentes de Caprala labrada... y siguiendo... assia las tierras de Josseph Perales se enquentran... las tierras que se le comisaron sembradas; Y siguiendo... en el Pago del Navayol... se enquentran... la tierra que se le comisso... se halla labrada...; Las tierras de Gabriel Navarro zituadas en la partida del Almadrava... labradas; Y en el asagador que avaja de la zierra del Zit... enquentran que en la maxada que hay ensima de las Bueltas del referido Cantal a sacado tierra el zitado Francisco Rico como cossa de tres thaullas y causa grande perjuicio para baxar y subir a las Solanas del Palomaret... y en el rincon ensima de los Cantalares inmediato a la pea de las Palomas del Horno del Vidrio ha sacado tambien tierra como cossa de un jornal... ; en el Asagador Real que sale de esta Villa y cruza todas las Salinetas... una porcion de tierras que ha labrado Joseph Amat; ... en el pago del referido Molino nuevo y el de Santa Barbara (han encontrado las tierras) labradas como cossa de medio jornal; Francisco Maestre y Poveda... en el Pago de Cati de este termino a labrado una punta de ban- cal... Sobre las tierras que han sacado los Herederos de Melchor Garcia a la Hombria de los Puntales del Ginebre assial Almadrava, se les manda estos si quieren sacar tierras, lo hagan de continuacion de las suyas, dexando passo competente para passar la machada... comisando las que nuevamente han sacado, en tres distintas partes, que seran todas ellas como cossa de una tahulla. Sobre las tierras sacadas en la Zierra del Zit por Joseph Santo y Andres Poveda lo dexan al advitrio de esta Ilustre Villa; como y tamvien las sacadas por Vicente Paya en la zierra del Cavallo, advirtiendo que en estas hay unas Cuevas donde se retiravan los ganados para librarse de las aguas, y que por la parte de arriva de ellas ha zerrado el passo a los ganados, y de que no para de desmontar y sacar tierra todo el rincon arriva... Adems, y aunque en las escrituras de los nuevos establecimientos se estableca claramente la extensin de stos, algunos labradores se excedan con el tiempo en los lmites, como as se denunci en 1776, 54 cuando estas ampliaciones afectaban a los azagadores : Y en las Cordelleras del Asagador de la Zierra del Zit a sacado Josseph Rico y Amat un jornal de tierra, la que se le comisso... Y mayormente que dicho jornal de tierra no esta comprendido en los limites del establecimiento que se le dio al zitado Rico, y estar muy distante de las tierras que abraza quel y ser realenco, con cuyos motivos se deve dexar perder... Tabla I-4.3. Partidas que se citan en la documentacin en el siglo XViii, a las que hay que aadir las citadas para el siglo XVii, que siguen apareciendo en los textos AO PARTIDAS EN CULTIVO 1713 Propiedad de Mosn Thomas Rico en Cat (con casa, corral, ermita, una casa de nieve y calera); partida del camino del Cit; Barchell 1716 Foyeta de Mosn thomas rico 1719 Oya de Abaxo de Ferrusa 1722 llobera en Salinetas 53 AMP, 51/1, 28 de enero de 1776, ff. 18-23. 54 AMP, 51/1, 28 de enero de 1776, f. 23. 129 Sabina Asins Velis AO PARTIDAS EN CULTIVO 1723 la canal, el Secanet en el camino de Salinetas 1724 Oya de las Moreras en Pussa, lindando con el camino de castalla 1725 Oya Blanca y la Ombra de caprala 1726 Derramador de las Vias de Arriba; la oya de la Ta Pasquala; el secano de Los Cannigos; la Foyeta de Corts; las Bueltas del Ro; Foyeta de la Teuleria; Oyeta de Dur; Bueltas de la Rambla; Cabesa de Aroba; el Amorchonet de Nogera; pago del Baladre; pago del Pino de Poveda; partida de la Pea de la Edra; Clot del Llop; pago de los Arenales; Oya de Morant; Cantalars; Ayguarius; pago del Cantal de Llobregat; el Tarrosal; la Foyeta de Jirones; el Bancal del Cavall; huertos del Chorret de la Rambla; el pago del Fosar; Oyas de los Charcos; Borujos; el pago del Convento; la sort de Terol en Pussa; heredad de cal Cano en Pussa o el Clot de Amaro 1730 * Sequeros (els Sequers en 1654) 1732 cuesta de castalla 1737 Reoyo de la balsa del Sit, heredad del esquinal 1741 caprala, vertientes arriba hasta el barranco de castilla 1742 caprala, desde el barranco de castilla hasta los trminos de castalla y Sax. 1743 Collado de Navayol, linda con collado y con el rincn del Arenal; Alto de Antonio Guarinos; tras la sierra del Cid rayando el trmino de Agost y lindando con cueva; cuesta Blanca de Navayol lindan- do con mojonera de Castalla; bajo los molinos harineros de la villa entre los barrancos del Fuerte (Fort) y el que baja de dichos molinos; del Barranco del Pantano que empieza desde las Fuentes de dicho pantano hasta la fuente del Badallet; linda con tierras de la Administracin de mosn Thomas Rico, dicha fuente y loma; del camino de Agost y del Horno del Vidrio 1744 El Figueralet, sobre los molinos harineros de la localidad; la Pedrera lindando con sierra del Cochi- net 1745 Navayol, linda con cuesta de Pusa; Navayol, linda con rambla que baja de las fuentes de Caprala, con rambla que baja de barranco de las Cuebas y con montaa que baja del Alto dicho de Antn Guarinos; Partida del Agua Buena, linda con mojonera de Castalla y montaas; de la Maxada Onda, raya con el trmino de Sax y montaas 1750 roturaciones ilegales en la sierra del caballo, en el barranco del Pantano, en la sierra del cid, en la pea de las Montesas y en rabosa 1758 Partida de Castalla; hacienda dels Amats en Salinetas 1760 rincn de ribelles 1763 Partida de las canales de Santa Brbara, partida del Molino nuevo 1764 Hoya del Collado de Llauri; la Cruz de Medina; la Cachuleta; la Hoya de los Caares; pea de las Palomas; los Chaparrales; la loma Colorada; collado del Maset de Pruna en Cat; Majadal de la Umbra en cat (linda con barranco de la Orteta) 1764 (nombres de partidas que conocemos por estar relacionadas con o cerca de roturaciones ilegales): En el Azagador que sala del Charco de Domingo al subir a la loma de Santa Brbara; en las Bueltas de Coloma; en la Oya del Almorch; bajo el camino hasta los terreros. En el Azagador del Ginebre: la hoya de las oliveras de Visedo dicha de Maci, tierras nuevas que a bancalado Francisco cortes 1770 Ampliacin de la tierra de la heredad de rabosa 1776 Hombria de los Puntales del Ginebre * APM, escrituras pblicas de 1726 a 1731: Ao 1730, f. 21. 130 Los establecimientos autorizados, las roturaciones ilegales y la bsqueda de manantiales en el siglo XVIII 3. Nuevas construcciones para mejorar el aporte de agua 3.1. Partidas del riego de la balsa de la villa en Petrer, los costes de las obras corran por cuenta de los particulares (tabla i-4.4), a excepcin de la conduccin del agua que desde la mina de Pua iba a la balsa del pueblo, para el riego de la partida de la Huerta y el riego eventual en las de las Oliveras y las Vias de Arriba, en cuya reparacin participaba la seora hacindose cargo de un tercio de los gastos. incluso mientras dur el exilio del conde de elda, tras la guerra de Sucesin, carlos coluchi se haca cargo de pagar al clavario de Petrer las 25 libras con que ste contribua por las aguas y pensiones del censo de la fbrica del pantano, ya inutilizado. Adems, por decreto del Ayuntamiento, estas reparaciones tambin se nanciaban con el importe del arrendamiento del bancal de tierra que se haba generado en el embalse del pantano, que se ingresaba en 55 los Propios de la villa . Durante el siglo XVIII tenemos constancia de mejoras en esta red en el ao 1727 y sobre todo a na- les de la centuria. en 1727 se requiri al conde para que sufraga la tercera parte de lo que importaba el coste de la nueva acequia de cal y canto que se iba a construir desde los Molinos de la rambla de Pua hasta la balsa, para el mayor benecio de las haciendas de riego de la villa, as como la tercera parte del azud que se hara en la misma rambla, peticiones que se recogieron formalmente en la concordia 56 rmada con el conde de Elda al regreso de su exilio en Austria . Pero ser a nales de siglo cuando se emprenda la obra de mayor envergadura. En 1784, el rey Carlos iii envi un despacho al intendente General del ejrcito y reino de Valencia explicndole que la villa de Petrer, por va de la contadura General de Propios y Arbitrios, haba presentado una peticin para construir una caera cerrada y acueductos por donde conducir el agua de la mina de Pua y de la fuente 57 de Gins Juan, para el abasto pblico y el regado . Se expona, en el extenso memorial, que se aumen- tara el riego, se evitaran los continuos gastos de mantenimiento de los tramos de canales de madera, se repararan los daos causados en la conduccin por el terremoto de 1776, y se podra proyectar alguna fbrica (rerindose a molinos). La cantidad de agua que ua de estas fuentes, a nales de julio, era de un pie cbico de la vara de castilla, perdindose ms de la mitad antes de llegar al abasto del pueblo. Hasta ese momento la conduccin del agua era al aire libre, y, segn indican en el maniesto: corren por el suelo de un barranco (el de Pua), por terrenos salitrosos y por minas de yeso a cie- lo abierto, recibiendo en el verano las inuencias del excesivo calor y en el invierno de los frios y yelos, mezclandose con las aguas de las tempestades y de las avenidas, y tomando las nocivas qualidades del yeso y salobre por donde pasa; y lo que es peor es que el expresado barranco por donde corren las aguas es un bosque de adelfas, de cuyas nocivas qualidades toman por la larga distancia que vienen lavando las expresadas plantas; a que tambien se aade el que dichas aguas son holladas de caballerias y ganados en muchas partes en que cruzan el barranco y sus aguas; diferentes veredas y caminos, que son preciso transito para los molinos y heredades del monte, y de todo el conjunto de causas, que concurren a la infeccion, y corrupcion de las aguas resul- tan en el vecindario de este pueblo muchas enfermedades de dicil curacion, que por lo comun suelen padecer los jornaleros y vecinos mas pobres, que no tienen posivilidad, ni disposicion de poder conducir el agua para su abasto, y de sus familias, tomandola en el origen de las fuentes, por lo intrincado del camino, y larga distancia de una legua, conforme lo practican los vecinos hacendados, para conserbar su salud, pues las expresadas aguas son excelentes en el origen de sus fuentes. 55 APM, escrituras pblicas de 1713 a 1721: Ao 1717, f. 57v., 59. AMP, 50/1. Cabildos desde el ao 1713 asta el de 1751 inclusive y diferentes reales proviciones. 2 de mayo de 1745, f. 41v.; 7 de diciembre de 1741, f. 101. 56 AMP, 50/1. Cabildos desde el ao 1713 asta el de 1751 inclusive y diferentes reales provisiones. 3 de octubre de 1727, f. 182 v.; ACE, nm 1049; APM, escrituras pblicas de 1726 a 1731, 5 de octubre de 1727. 57 AMP, caja 5, exp. 3. M.c. ricO nAVArrO, las fuentes pblicas de la villa de Petrer. Bitrir II, 1993, pp. 243-245. 131 Sabina Asins Velis la obra se tas en 27.000 libras. esta cantidad se pagara 1/3 por el seor territorial, otro tercio por los regantes, y el tercero del caudal de Propios de Villa. Para ello venderan, en tres aos, 600 cahzes de trigo que la villa tena en el psito a un precio estimado en 12 libras el cahz. Adems utilizaran los in- tereses que haban producido las acciones del Banco nacional de San carlos, y las 1.129 libras, 1 sueldo y 7 dineros que haba en el Arca de Propios. en el memorial se indicaba que salan favorecidas las tres partes que pagaban la obra: los vecinos, por el benecio de la salud pblica; los propietarios de tierra, porque se aseguraban el riego y por la mayor extensin que lograran con el aumento de las aguas; y el seor territorial, como perceptor nico de los derechos decimales, por el aumento que lograran sus rentas con la seguridad y extensin del riego. los vecinos contribuiran con sus ganados, para conducir materiales, y los jornaleros con su trabajo (pagndoles, los das que tenan obligacin de trabajar en la construccin de la caera, la mitad del jornal que de otro modo ganaran). la resolucin autorizando su construccin la rm el conde de Campomanes el 6 de junio de 1789, siendo seora del condado Mara luisa centurin y Velasco, Xi condesa de elda, y marquesa de Villena. Las especicaciones tcnicas de la obra fueron realizadas por el ingeniero don Juan de Abelln, y el pliego de condiciones fue presentado por don Vicente Gasc, director de la real Academia de San car- los de Valencia, quien correga algunos puntos del ingeniero. la caera sera de obra de tierra cocida, cuyos conductos tendran un palmo y medio de dimetro de luz, dos palmos de largo, y dedo y medio de grueso despus de cocidos. ira empotrada en el centro de un slido de mampostera y hormign de cinco palmos y medio. donde se tuviera que hacer un ngulo se pondra una pila de piedra fuerte, en la que los arcaduces iran machiembrados para formar el ngulo. las pilas seran ms hondas, para facilitar la limpieza a la vez que sirvieran como respiraderos. en el nacimiento de las aguas de Pua se deba hacer una casita con una balsa en su suelo, tres o cuatro palmos ms profunda que la caera, para que se depositaran en el fondo las arenas. en la entrada de la caera se pondra una reja de hierro, y un rallo para que no entrara hojarasca. Se deba tambin dejar un conducto abierto a la rambla para que en el caso de que vinieran avenidas grandes de agua stas fueran a la rambla, desde donde tambin se aprovecharan para el riego. en el punto en que la caera que llegaba desde Pua se encontrara con la de la fuente de Gines Juan se hara otra casita igual a la anterior. desde all, ya juntas las aguas, iran por la falda de la sierra del caballo, atravesando con puentes acueductos algunos barrancos. en el cantal de Pedro Sans se hara un sifn, con conductos de piedra sillera machiembrados, mampostera y hormign; para seguir a continuacin por el mismo sitio que iba la acequia en ese momento, pero remozndola. en el punto alto se construiran las casitas para la divisin y distribucin del agua entre las fuentes pblicas, el riego, y para la fbrica de molinos que se podan hacer contiguos a la misma villa. El proyecto qued nalmente aprobado en Madrid el 6 de junio de 1789 (Figura i-4.1). Simultneamente, en 1788, se recurri a don Antonio Ferreti, hidrulico, para ampliar la red de ace- quias. Ferreti, tras un minucioso trabajo, inform al Ayuntamiento de las posibilidades de aprovechar 58 para el riego las Fuentes del Pantano, la de Gins Juan (conocida en 1859 como de la Seora ) y la de Josef Planelles. el Ayuntamiento consult a los representantes de los regantes, encabezados por el mximo contribuyente del riego de la balsa de Petrer, Juan Maestre Familiar, quienes dieron facultad al 59 Ayuntamiento para celebrar la escritura de convenio . Ese mismo ao, se trat de la excavacin de la mina de la Pua hasta llegar al maniesto. Obra de la que se encarg Luis Bartolom Rico, Abogado de los Reales Consejos y vecino de Petrer, quien rm la escritura de convenio con el Ayuntamiento (en su calidad de Administrador del riego), en la que se especicaba que la excavacin no se hara con plvora, y que tendra la misma altura y anchura que en 60 ese momento tena el salto donde caa el agua a la Mina nueva (Figura i-4.2). el caudal que se deba manifestar era seis veces el que haba. los gastos de la ejecucin de la obra se costearan entre los agri- cultores que utilizaban el agua de la balsa, a razn de 3 libras por huerta, 1 libra y 10 sueldos por cada 58 AMP, 46/1, resumen del amillaramiento de 1859. 59 AMP, caja 5, exp. 2 60 AMP, caja l- 5, exp. 2. 132 Los establecimientos autorizados, las roturaciones ilegales y la bsqueda de manantiales en el siglo XVIII olivar y 15 sueldos por via de arriba, ms las Horetas de agua del Ayuntamiento. en 1793 se seguan pagando los gastos de ejecucin de esta obra entre los 135 vecinos que se beneciaban del agua de la balsa que se abasteca de la mina de Pua. en la obra tambin se inclua la reparacin de la Acequia de Abajo, rota en las avenidas de 1792, y de la misma Balsa, por lo que pagaban un suplemento de 12 suel- 61 dos por huerta, 6 sueldos por olivar y 3 sueldos por via, y 4 libras con 4 sueldos por las Horetas . en 1792 los continuos temporales y avenidas de agua ocasionaron la rotura de la acequia principal de riego de la huerta de la villa, por lo que su ayuntamiento resolvi que mientras se proceda a su reparacin, se condujese el agua por canales de madera, y adems solicit al conde de Puoenrostro que colaborase 62 con la tercera parte de los gastos de la nueva construccin . Fig. I-4.1. Distintas conducciones del agua de Pua; la primera por la derecha corresponde a la autori- zada en 1789 61 AMP, caja l- 5, 12 de marzo de 1793. 62 AMP, caja 37, expediente 21, hojas sueltas. 133 Sabina Asins Velis Fig. I-4.2. Plano para la ampliacin de la mina de Pua. Ao 1788 (AMP. caja 5, exp. 2) 3.2. Infraestructuras de captacin, transporte y almacenamiento de agua en las partidas de secano para mejorar algunos cultivos durante el siglo XViii se proyect la excavacin de nuevas minas y pozos y la construccin de acequias, boqueras o balsas para distribuir el agua y garantizar un aporte mnimo a los campos de cultivo en el se- cano o para irrigar pequeas huertas enclavadas en esas partidas, si bien las obras de mayor envergadura se hicieron en su segunda mitad. esta tendencia al desarrollo de la pequea hidrulica segua igualmente 63 la dinmica del conjunto valenciano . en las partidas de secano se continuaba recurriendo al tradicional mtodo de construccin de boque- ras, tanto en el curso de barrancos y torrentes, para captar las aguas de avenida, como en algunas partidas para distribuir el agua cuando vena crecida. en la documentacin consta por primera vez las boqueras de las partidas del Almorcho, desde 1718, y de la canal en 1723. Haba tambin otra en la heredad de 63 M. Ferri i rAMreZ, et al., Poltiques hidruliques en temps de cavanilles, Cuadernos de Geografa 62, 1997, pp. 653- 670; T.V. PEREZ MEDINA, Petits embassaments valencians del segle XVIII. Cuadernos de Geografa 71, 2002, pp. 11-30; P. GiMneZ FOnt, Las transformaciones del paisaje valenciano... op. cit. p. 155. 134 Los establecimientos autorizados, las roturaciones ilegales y la bsqueda de manantiales en el siglo XVIII Cat, que conocemos gracias al detallado contrato de arrendamiento rmado en 1721. Se especica ante notario que el arrendatario deba mantener a su costa todas las vertientes y boqueras de la heredad y las acequias y boqueras de la huerta que all haba. deba igualmente alumbrar el agua hasta las minas cuando fueran a tanda de la villa. en los 74 jornales de tierra campa, plantada de almendros y otros r- boles, no poda cultivar barrilla; y en caso de sembrar centeno o avena lo deba escardar a satisfaccin del administrador. no podra sembrar ningn bancal que no tuviera tres rejas, ni ningn rebarbecho en 64 los 4 aos sin licencia, y deba aadir 50 cargas de estircol al ao a cada huerta . Otras boqueras, distri- buidas por el trmino, se citan en el memorial que se redact en 1764 tras la revisin de los azagadores, 65 como la de la casa de los Perales o la de la Hoya Falsa , y exista otra boquera y acequia en la partida 66 del regado de la villa . la boquera de Joseph Sarrio y Juan que sala del barranco de Hernndez, el canalito de las Ygueras, el segundo canalito tambin de las Ygueras, o la boquera de Bartolom Paya y 67 Montesinos, todos ellos en el pago de llobera en Salinetas, ya estaban en uso en 1776 . Adems, se recurra al notario para que inscribiera los acuerdos entre particulares en lo concerniente al agua de boqueras, como en el partido del Palomaret, en donde Gernimo Brotons cedi la mitad de la boquera de la rambla del Horno del Vidrio, que l mismo haba construido, a su sobrino, con la con- dicin de que la presa o rafa la deban de hacer a medias, distribuyndose el agua de la boquera por dos partidores. Adems construiran una nueva boquera, de 8 palmos, y un puente acanalado de mamposte- 68 ra, que atravesara la boquera comn . el botnico cavanilles, aunque no incluyera en su obra Observaciones sobre la Historia Natural, Geografa, Agricultura, poblacin y frutos del Reyno de Valencia las peculiaridades del riego de la zona, si que las anot detalladamente en sus diarios de campo de 1793: Como en esta parte del reyno hay escazes de aguas para el riego, buscan modos de aprovechar las aguas que en las avenidas y tempestades se despean; y lejos de temerlas como en otras tierras, aqu las desean, para dar algun riego a los campos. Para esto abren zanjas en estos por donde dirigen el curso de las ramblas; ramican luego los canales de riego, anivelan los cam- pos, y lo tienen todo preparado para aprovechar las aguas. Con esta operacion queda sin ellas el antiguo cauce que van rellenando con lo que quitan las lomas, y aumentan los campos utiles 69 para plantios y sembrados . Por otro lado, tambin se aprovechaba el caudal de pequeos manantiales o fuentes, como la de Ferrusa, 70 que en 1720 alimentaba una balsica , la que llenaba la balzica de la Orteta, en el pago de cat, propia de 71 la capellana de thomas rico (que debe ser la baeta que encontramos ya citada en 1676) , las fuentes 72 de navayol, de reig o el ojo del agua de la casa de los navarros . 64 APM, escrituras pblicas de 1713 a 1721: Ao 1721, f. 36 y sig. Mosn thoms rico haba dejado sus propiedades en cat en usufructo a su hermana Beatriz, en concreto 74 jornales plantados con muchos almendros, con casa y corral, una ermita, una casa de nieve y una calera. Adems le haba dejado 5 jornales de huerta en la partida del camino del cit, con corral de ganado, 7 jornales en el Barchell con almendros, olivos, higueras que lindaban con la boquera de arriba del Guirnei, 4 tahllas de huerta y una refaccin en las huertas de la villa, 9 tahllas de via en el campico, ms un censo de 70 libras cargado sobre la Oya Falsa, partida de Pussa (APM, escrituras pblicas de 1713 a 1721: Ao 1713, f. 8). el contrato de arrendamiento de la tierra del Barchell en APM, escrituras pblicas de 1726 a 1731: Ao 1728, f. 41. 65 AMP, 50 (1-2), 26 de noviembre de 1764, f. 4v.-10 y AMP, 51/1, 21 de noviembre de 1764 a 16 de febrero de 1765, f. 9-16v. 66 ArV, BAilA A, expediente de amortizacin. Petrel, ao 1740, 1793-98, 1802-11, 1816. reg. nm. 1381, f. 18v. 67 AMP, 51/1, 28 de enero de 1776, f. 21v. Adems tambin se prestaba especial atencin a recoger el agua de lluvia: el arren- datario de unos bancales en el Guirney, desde las bueltas de Alcaras hasta el barranco de Noguera, deba mantener la presa de la rambla para recoger las aguas pluviales y tener limpio el conducto hasta la primera divisin de los bancales (APM, escrituras pblicas, 1 de noviembre de 1771). 68 APM, escrituras pblicas, 26 de enero de 1773. 69 A.J. CAVANILLES, Diarios de Campo. Real Jardn Botnico de Valencia. Copia microlmada. Nm. 7, f. 102. 70 APM, escrituras pblicas de 1713 a 1721: Ao 1718, f. 40v.; escrituras pblicas de 1725 a 1722: Ao 1723, f. 21v. AMP, 50/1. Cabildos desde el ao 1713 asta el de 1751 inclusive y diferentes reales provisiones. 8 de diciembre de 1720, f. 312v. 71 ArV, BAilA A, expediente de amortizacin. reg. nm. 2917, f. 44v. y 45. Ao 1763. 72 AMP, 50 (1-2), 26 de noviembre de 1764, f. 4v.-10 y AMP, 51/1, 21 de noviembre de 1764 a 16 de febrero de 1765, f. 9-16v. 135 Sabina Asins Velis Pero quiz el manantial ms importante sea el de caprala, ya que todava a da de hoy aporta recur- sos; la Oya Blanca y la Ombra de caprala se encontraban totalmente abancaladas en 1763, plantadas 73 de almendros, vias en menor proporcin y con reas de huerta dedicadas a pimientos, nabos y alfalfa . el agua que abasteca el regado de este valle proceda de las fuentes manantiales, que al menos desde el siglo XVi llenaban una balsita que facilitaba el denominado riego de abajo o riego viejo. como la distribucin del agua haba ocasionado disputas entre los labradores, el da 30 de diciembre de 1766, ao en que se acab de construir una gran balsa y un acueducto para que llegara el agua a las tierras de todos los interesados, se rm una Escritura de Convenio y Captulos (Figura I-4.3). Con ello preten- dan distribuir el agua con igualdad, atendiendo al derecho de cada uno y a las costas con que haban contribuido en la construccin de la acequia y balsa nueva. La escritura pblica fue rmada por Seferino Pellicer, Juan rico y los dems interesados en las aguas de riego de caprala y balsas de ellas, por medio de la que estipulaban que en el abrevadero real, que era el barranco de las Fuentes, se deba mantener el agua por los interesados de arriba. las mismas balsas, que se nutran de esta agua y de la que vena de las avenidas del barranco, se deban mantener limpias entre todos. los propietarios de la huerta vieja, o de abajo, deban ocuparse de que la presa, por medio de la cual tomaban el agua, estuviera siempre en buenas condiciones, para que no rezumara rambla abajo, y fuera directamente a la balsa de la huerta vieja. igualmente los propietarios que usaran el agua de la balsa vieja deban evitar que se perdiera el agua. los interesados del agua de abajo regaran por turno del agua de la balsa: Juan Francisco rico, 4 das, Juan rico, 2 das, y otros 2 das Vicente Alcaraz y Joseph Montesinos. de la presa hasta el bancal de Montesinos ira corriente, comn; y desde all hasta abajo cada uno tomara el agua enfrente de su bancal. el riego de arriba se estableca de la siguiente forma: Un da a Seferino Pellicer, otro a thomas Brotons, 18 horas a Vicente Alcaraz y a Joseph Montesinos, 1 da a Balthasar Maestre que regaba con ella sus tierras del Almorch-, y 2 das a la herencia de Mara Paya, de los que daran 2 horas al bancal de la Hoya Blanca, vendido a Joaqun rico de castalla. las 45 horas y media de agua que quedaban se distribuyeron entre algunos de ellos. deban adems contribuir con agua si les faltaba a los del riego de la huerta vieja o de abajo. Quien no estuviera interesado algn da en el agua la poda vender, teniendo siempre preferencia las personas rmantes del acuerdo. El precio se estipul en 8 sueldos por 24 horas en invierno, y 16 sueldos en verano. las acequias se deban mantener limpias, tapando las paradas y cerrando la balsa una vez concluido el turno de riego. los regantes de caprala deban colaborar en la reparacin de las acequias hasta el collado de los lobos. el agua se intentaba aprovechar hasta el mxi- mo posible, solicitando permiso incluso para utilizar los escurrims (escurrimbles) para llenar un pozo 74 de servidumbre para una casa en la hoya del Almorch . Algunos de los propietarios hicieron valer el derecho a venta del agua de esta balsa, como se estipula- ba en el contrato por el que Vicente Alcaraz venda por 56 libras a Pedro Maestre tancredi los sobrantes de regar tres bancalitos de ms o menos 3 tahllas del agua de las fuentes y balsa del partido de caprala (las 9 horas cada 7 das al mes, perpetuamente). Y de nuevo en 1769 en la escritura por la que Joseph Montesinos venda tambin a Pedro Maestre tancredi el agua que le sobraba de las 9 horas en cada 7 75 das que le correspondan de la Balsa nueva y fuentes de caprala . Tabla I-4.4. construcciones de riego que se citan en la documentacin del siglo XViii AO CONSTRUCCIONES DE RIEGO 1718 Boquera en la partida del Almorcho 1720 Fuente que alimenta una balsica en Ferrusa 1723 Boquera en la partida de la canal 73 APM, escrituras pblicas, 12 de octubre de 1763. 74 APM, escrituras pblicas, 1767, 16 de noviembre. 75 APM, escrituras pblicas de 1766, f. 9v.; y escrituras pblicas de 1767 a 1775: Ao 1769, f. 22. 136 Los establecimientos autorizados, las roturaciones ilegales y la bsqueda de manantiales en el siglo XVIII AO CONSTRUCCIONES DE RIEGO 1727 nueva acequia de cal y canto desde los Molinos de la rambla de Pua hasta la balsa, y azud en la rambla 1764 Boquera de la casa de los Perales, la boquera de la Hoya Falsa, las fuentes de navayol, caprala, reig, o el ojo del agua de la casa de los Navarros; boquera y acequia en la partida del regado de la villa 1766 Balsa nueva de caprala 1771 Presa de la rambla para recoger las aguas pluviales en el Guirney 1773 Presa o rafa, dos partidores, nueva boquera y puente acanalado de mampostera en la rambla del Horno del Vidrio 1776 Boquera de Joseph Sarrio y Juan que sala del barranco de Hernndez; el canalito de las Ygueras, el segundo canalito de las Ygueras y la boquera de Bartolom Paya y Montesinos en el pago de llobera en Salinetas 1788 Excavacin de la mina de Pua hasta llegar al maniesto 1789 Firma de la resolucin autorizando la construccin de una caera cerrada y acueductos por donde conducir el agua de la mina de Pua y de la fuente de Gins Juan 1793 reparacin de la Acequia de Abajo, rota en las avenidas de 1792, y de la Balsa principal que se alimentaba de la mina de Pua Fig. I-4.3. Balsa nueva de caprala, construida en el ao 1766 4. La tierra de las Capellanas, Obras Pas y Fundaciones Dado el signicado que estas tierras tendrn en el proceso desamortizador, dedicamos este epgrafe a de- limitar las propiedades incluidas en las diferentes capellanas, Obras Pas y Fundaciones dejadas por los vecinos de Petrer fundamentalmente desde principios del siglo XViii. A diferencia de otros territorios de la comunidad Valenciana, su desamortizacin en el siglo XiX no supuso la ampliacin del espacio cultivado en esta localidad, pues se trataba de tierras que ya se encontraban en explotacin, en general 137 Sabina Asins Velis por va de arrendamiento, para mantener a los clrigos de la poblacin o para la celebracin de misas y otros ocios religiosos. Estos bienes en poder de Comunidades Eclesisticas y Manos Muertas esta- ban sujetos a los reales derechos de Amortizacin y Sello y eran objeto regular de visita e inspeccin, 76 por lo que sus administradores deban manifestar las nuevas adquisiciones de bienes de realengo . los reales derechos se establecieron para hevitar las ilimitadas adquisiciones de bienes races, que su fa- 77 vor logravan las manos muertas, en perjuicio de la Real Jurisdiccin, Herrario, y del estado Secular , por lo que a partir del 26 de septiembre de 1737 deban pagar, por las haciendas adquiridas, los mismos 78 impuestos y tributos regios que pagaban los legos . en Petrer, el total de las propiedades en manos muertas durante el siglo XViii fue de 184,93 hectreas, ms al menos 4 heredades y unos pedazos de tierra sin especicar la extensin. Capellana de mosn Bonifacio Juan la capellana ms antigua que consta en Petrer es la instituida en el ao 1686 por mosn Bonifacio Juan, a cargo de una misa rezada y limosna. Segn el libro de Hacienda de 1726 y el de Veredas de 1741 79 comprenda las propiedades siguientes (tabla i-4.5): Tabla I-4.5. Propiedades de la capellana que mand fundar mosn Bonifacio Juan ESTIMACIN EN PARTIDA EXTENSIN 1726 (Libras) Una huerta en el pago de las huertas, agua de la balsa 2 tahllas 110 Junto a los Olivares de la Canal, plantadas de vias y almendros 235 Salinetas, junto a rambla del Cid, plantado de almendros y olivos. De natural 72 tahllas 650 Un pedazo de tierra natural en el pago de la Foradada 30 Un pedazo de tierra en el Derramador de las Vias de Arriba, plantado de diferen- 165 tes rboles TOTAL EXTENSIN CONOCIDA = 8,89 hectreas ms los pedazos Beaterio, Capellana y Administracin de mosn Thomas Rico de entre todas las fundaciones que se establecieron en el siglo XViii destaca, por la extensin de sus bienes, el Beaterio, las dos capellanas laicas y la Administracin de nuestra Seora del remedio que instituy sobre sus bienes mosn thomas rico en 1702 y 1709, posteriormente refrendadas por su her- mana en 1714 (tabla i-4.6). Tabla I-4.6. Propiedades de las capellanas y Beaterio de mosn thomas rico, ao 1764 VALOR PARTIDA EXTENSIN Libras Bienes de la 1 CAPELLANA Cat Una heredad, de 26 jornales de tierra campa, casa y corral de ganado 1.400 Cat 3 jornales, del abrevador del Badallet a la caada de Pruna Cat 5 jornales, subiendo a tramontana por la caada de Pruna Cat 3 jornales, desde el collado del Alto del Maset de Paya Cat 6 jornales, plantados de almendros Cat 1 jornal de huerta 76 AMP, l-16, 5 de septiembre de 1787. 77 ArV, BAilA A, expediente de amortizacin. reg. nm. 465, ff. 20-21. AMP, l-16, real cdula en que se inserta el artculo Viii, ao 1760. 78 AMP, 48/4, libro de Ordenanzas dirigidas a la Justicia, consejo y regimiento de esta villa, ao 1742, p. 7. AMP, 48/6, real Deliberacin, rmada en el Pardo a 10 de marzo de 1763 por el Marqus de Squilace. 79 AMP, 45/1, Libro de Hacienda de 1726, f. 251; AMP, 48/3, Veredas desde 1737 hasta 1741. Hoja suelta, testimonio de Ger- nimo Amad de 4 de julio de 1741. 138 Los establecimientos autorizados, las roturaciones ilegales y la bsqueda de manantiales en el siglo XVIII VALOR PARTIDA EXTENSIN Libras Pago de las Huertas 5 tahllas 350 Pago de la Canal, olivar 3 tahllas 90 Pago de las Vias, vias 3 tahllas 25 Pago de los Olivares 3 tahllas 80 Pago de las Huertas huerta, declarada en 1787 260 TOTAL EXTENSIN = 191 tahllas= 22,94 hectreas Bienes de la 2 CAPELLANA Cat Una heredad, de 27 jornales de tierra campa, casa y corral de ganado. en cuyas tierras, que 1.675 estan a la parte de la hermita, y empiezan desde dicha casa siguiendo al medioda y llegan a dicha hermita se comprehende un Bancal que dicen de abajo de los tres que se denominan los estercolados Cat-Caada de Pruna 4 jornales Cat-Caada del Maset 3 jornales Cat-Majadal de la Umbra, 3 jornales linda con barranco de la Orteta Cat-balzica de la Orteta 2 jornales y hasta el barranco que baja al Badallet Cat, almendros 6 jornales Pago de las Huertas (camino 2 tahllas 130 de los Algezares) Pago de las Huertas 3 tahllas 205 Pago de los Olivares 3 tahllas 90 Olivares de la Canal 2 tahllas 45 Pago de las Huertas huerta, declarada en 1787 250 TOTAL EXTENSIN = 193 tahllas= 23,18 hectreas Obra Pa del BEATERIO Campet 6 tahllas, de secano plantadas de via 30 Pago de los Olivares 1 tahlla (sin pecho ni agua) 20 Barchell 8 jornales de secano, plantados de olivos, almendros y algunas higueras 200 Pago bajo los Olivares 4 tahllas, de secano, con derecho a agua de la rambla Pago de los Olivares 5 tahllas (con pecho y agua de la balsa) 200 Pago de las Huertas 14 tahllas 1.005 Una casa con huerto en la Plaza 400 Mayor Bancal bajo de los olivares tierra secana 50 TOTAL EXTENSIN CONOCIDA = 61 tahllas = 7,33 hectreas las capellanas se fundaron el 5 de abril de 1727, y el Beaterio el 6 de mayo de 1730. entre sus bienes se indicaba que la Casa de poner Nieve (nica instalacin de este tipo cuyos restos todava se conservan hoy en Petrer) haca mucho tiempo que estaba fuera de uso y casi arruinada, por lo que consideramos que 80 se debi de construir al menos en el siglo XVii . en 1765 se nombr a dos labradores expertos, vecinos de Petrer, para que justipreciaran las propiedades de las Capellanas, y observaron que la supercie de la heredad de cat de la primera capellana haba pasado de 26 a 38 jornales, y la de la segunda capellana de 27 a 44 jornales plantados de almendros. esto fue debido a que, siguiendo la tnica general que ya 80 ARV, BAILA A, Expediente de amortizacin. Reg. Nm. 2917; ARV, BAILA A, Expediente de amortizacin. Reg. Nm. 465. 139 Sabina Asins Velis hemos apuntado anteriormente para todo el siglo XViii, se haban roturado ilegalmente nuevas tierras 81 en los lindes de las propiedades, que se dispusieron en bancales . de este modo quedaban la primera capellana con 28,7 hectreas y la segunda capellana con 31,34 hectreas. Obra Pa de Gaspar Maestre Otra Obra Pa fue la del dr. dn. Gaspar Maestre, presbtero, quien por testamento de 4 de abril de 1719, instituy por herederos universales a Melchor y esperanza Maestre, consortes, estipulando que en caso de morir stos sin hijos legtimos se fundase un Benecio en la Parroquial de Petrer bajo la invocacin 82 de San Bartholome, como as se hizo en 1747 (tabla i-4.7) . De la administracin de este Benecio se encargaron sus sobrinos Baltasar y mosn Juan Maestre, quienes no pagaron los derechos de Amortiza- 83 cin, lo que implic un largo pleito . Tabla I-4.7. Propiedades del Benecio de San Bartolom de Gaspar Maestre, en 1764 PARTIDA EXTENSIN VALOR EN LIBRAS Del Guirney 20 jornales 1.150 Cabeza de Arrova 9 jornales 180 Oyas de Noguera 8 jornales 130 Secanet 11 jornales 260 De las Vias 1 jornal y 40 De las Vias via y , con pecho de 3 libras anuales a la Seora 40 Bueltas de la Rambla 2 jornales 50 De las Vias 1 via, con pecho de 2 libras anuales a la Seora 36 La Pedrera 6 jornales 70 La Pedrera 8 jornales de via 156 Una casa, con 10 sueldos de 434 libras, 13 sueldos pecho tOtAl 2.546 libras, 13 sueldos TOTAL EXTENSIN = 269,5 tahllas= 32,37 hectreas Administracin de mosn Juan Maestre este mismo mosn Juan Maestre dej escrito en su testamento su deseo de que con sus bienes se fun- dase una Administracin, que en el libro Giradora de 1727 comprenda dos tahllas en el pago de las Huertas, 1 olivar en el de los Olivares y Via de Abajo, y que nalmente se fund en 1757, aadida 84 la heredad de rabosa (valorada en 300 libras) . la extensin conocida de sus tierras era de 7 tahllas, equivalentes a 0,84 hectreas, ms las de la heredad de rabosa. igualmente se fund con sus propieda- des una Obra Pa cuya administracin corri a cargo de la iglesia de San Bartolom. Obra Pa de Melchor y Esperanza Maestre Adems de administrar la Obra Pa a nombre de Gaspar Maestre, Melchor y esperanza Maestre desea- ban fundar una Obra Pa con parte de sus propiedades. en 1737 hicieron una escritura de donacin y Mayorazgo a favor de su sobrino don Baltasar Maestre, cuyas propiedades comprendan: la heredad de la Gurrama, con 30 jornales de tierra plantados la mayor parte de almendros, casa de habitacin y 2 co- rrales de ganado y una heredad en el esquinal, que constaba de 25 jornales de tierra plantada de olivos y almendros, con casa y corral de ganado, que fueron reevaluados en el ao 1765 por los peritos en 37 81 ArV, BAilA A, expediente de amortizacin. reg. nm. 2917, f. 46v. 82 ArV, BAilA A, expediente de amortizacin. reg. nm. 1708. 83 ArV, BAilA A, expediente de amortizacin. reg. nm. 1708. 84 AMP, 44/5, Libro Giradora, ao 1727, f. 6v.; ARV, BAILA A, Expediente de amortizacin. Reg. Nm. 1708, s/f. 140 Los establecimientos autorizados, las roturaciones ilegales y la bsqueda de manantiales en el siglo XVIII 85 y 27 jornales y valorados en 1.170 y 500 libras, respectivamente . la extensin total de las tierras de la Obra Pa era de 256 tahllas, equivalentes a 30,74 hectreas. Propiedades de la Iglesia Parroquial de San Bartolom Por su parte, la iglesia Parroquial de San Bartolome de la villa de Petrer declaraba en 1740: un censo de 217 libras, 7 sueldos, 10 dineros parte de las 40.000 libras que su Majestad concedi a las iglesias de los Moriscos en las cortes celebradas en Monzn en el ao 1564, siendo sta una de las 184 iglesias entre las que se repartieron francas de derechos de amortizacin y sello; un censo de 300 libras conce- dido por su Majestad a dicha iglesia en las Cortes de Monzn de 1626; otro de 1.500 libras suplicado por los tres brazos en las cortes celebradas en Valencia en 1645, y 1.385 libras en censos de distintas cantidades, cargados a favor de dicha iglesia desde el ao 1634 en adelante, ms diversas propiedades 86 de tierra (tabla i-4.8) . el incumplimiento del pago de los derechos de amortizacin de las Administraciones de nuestra Seora del remedio, San Josef, mosn Juan Maestre y mosn Juan Molla hizo que se iniciara un largo proceso contra la iglesia, que pasa por el embargo de las propiedades de estas Administraciones y que naliz en 1816 con el levantamiento del secuestro de casi todas ellas, tras el pago de las tasas debidas. Sin embargo parte de las propiedades de la de San Bonifacio se sacaron a subasta, por haber cado en comiso a favor de su Majestad, al haberse detectado irregularidades en unas permutas. en la subasta, nalizada en 1792, una tahlla y en Elda que fue subastada por 160 libras alcanz un valor de 330, y dos tahllas de Petrer de 170 libras alcanzaron 250 libras. En el maniesto se indica que las tierras se 87 encontraban barbechadas y regadas para sembrar . Tabla I-4.8. Propiedades de la iglesia Parroquial de San Bartolom IMPORTE DE LOS BIENES PARTIDA EXTENSIN (L/s/d/r) Vias de Abajo 1 tahlla De la Llac (Alaig), linda con Peas Monteses y Maset de Yrles Una heredad 343/18/11/4 (ao 1793) Cat, linda con barranco de la Solana de Almatar 5 jornales Pusa Una heredad 170/8/7/8 (ao 1793) Regado de la villa, olivar 3 tahllas Esquinal Una heredad 725/7/10/15 (posterior al ao 1764) Regado de la villa, huerta 2 tahllas TOTAL EXTENSIN CONOCIDA 26 tahllas = 3,12 hectreas ADMINISTRACIN DE SAN JOSEF * (fundada por el cannigo Juan corts de Marquina, testamento 16-02-1705. Bienes adquiridos en 1722 ) Pusa 6 jornales 392 l (en 1763) Camino de las Salinetas 6 jornales 200 l. Pago de las Huertas Sin especicar ** En 1789 los bienes comprendan : Una casa con huerto 2 huertas y 100 l. Pago de los Olivares 3 tahllas 50 l. Pago de las Huertas huerta 50 l. Berbegala 6 jornales 40 l. Llobera 4 jornales Dos censos redimibles 1.300 l. TOTAL EXTENSIN CONOCIDA 95 tahllas = 11,41 hect- reas 85 ARV, BAILA A, Expediente de amortizacin. Reg. Nm. 2917, f. 53; ARV, BAILA A, Expediente de amortizacin. Reg. Nm. 465. 86 ARV, BAILA A, Expediente de amortizacin. Reg. Nm. 1381; ARV, BAILA A, Expediente de amortizacin. Reg. Nm. 1584. 87 ARV, BAILA A, Expediente de amortizacin. Reg. Nm. 1641; ARV, BAILA A, Expediente de amortizacin. Reg. Nm. 2920. * ARV, BAILA A, Expediente de amortizacin. Reg. Nm. 1381; ARV, BAILA A, Expediente de amortizacin. Reg. Nm. 2920. ** ArV, BAilA A, expediente de amortizacin. reg. nm. 2621. 141 Sabina Asins Velis ADMINISTRACIN DE NUESTRA SEORA DEL REMEDIO * (fundada por mosn toms rico, presbtero, testamento 11-05-1709) 1 tahlla y 40 l (en 1765) 1 tahlla (sin pecho ni agua) 20 l (en 1765) TOTAL EXTENSIN 2,5 tahllas = 0,30 hectreas CAPELLANA DE NUESTRA SEORA DEL REMEDIO (fundada por testamento de Gaspar Maestre, presbtero) no se conoce OBRA PA DE MOSN JUAN MAESTRE ** (fundada por testamento de mosn Juan Maestre) Pago de las Vias 2 tahllas 35 l (en 1763) Pago de los Olivares 1 olivar 75 l (en 1763) Pago de las Huertas 1 huerta 150 l (en 1763) Una almacera en el pueblo 215 l. (en 1763) TOTAL EXTENSIN 7 tahllas = 0,84 hectreas *** ADMINISTRACIN DE SAN BONIFACIO (fundada por testamento de mosn Juan Moll, ao 1752) Albocar de Elda, huerta y algunos olivos 1 tahlla y Tierra plantada de 20 almendros, 1 higuera y habas sin especicar 160 l (en 1782) Salinetas, almendros 2 tahllas Vias de Arriba, vias e higueras 5 jornales y 170 l (en 1783) Olivar de Planelles 1 jornal 20 l TOTAL EXTENSIN CONOCIDA 29,25 tahllas = 3,51 hectreas Capellana de Joseph Paya de Collado la capellana de Joseph Paya de collado, llamada Misa de Alzar a dios , fue fundada por testamen- to de 1712. constaba en 1756 de 6 tahllas en las vias de arriba, otras 6 en las de abajo, 4 tahllas 88 de huerta y 3 de olivares . Adems contaba con 14 hectreas de secano, con casa de campo, era y corral de ganado en Pusa, lindando con el Alto de crdenas, y 2 hectreas de secano con corral junto al Alto de Xinquera, que sumaban una extensin de 18,28 hectreas, con la particularidad de que no 89 se escrituraron hasta el ao 1926, en que se vendieron , librndose de la desamortizacin de bienes eclesisticos. Obra Pa de Francisco Maestre de Diego y Josefa Brotons Otra Obra Pa fue la fundada por Francisco Maestre de diego y Josefa Brotons, por testamento de 1760, para que se les celebrase una misa mientras mundo fuere mundo, que comprenda un total de 5 tahllas (0,60 hectreas), repartidas en una huerta (2 tahllas) y un olivar (3 tahllas), cuyo administrador deba ser siempre el alcalde de la localidad, quien proceda en subasta a su arrendamiento. tras un largusimo pleito que naliz en el ao 1794, las escasas propiedades de esta Obra Pa pasaron a los herederos de 90 los fundadores . Administracin de Blas Olzina y Anna Mara Corts la Administracin de Blas Olzina y Anna Mara corts constaba en 1763 de 4 tahllas (0,48 hectreas) en las Vias de Abajo, plantadas de via, olivos y parras, valoradas en 80 libras, y aunque fueron adqui- * ArV, BAilA A, expediente de amortizacin. reg. nm. 2917, f. 51. ** ArV, BAilA A, expediente de amortizacin. reg. nm. 2920. *** ArV, BAilA A, expediente de amortizacin. reg. nm. 1641. 88 AMP, 44/5, libro Giradora, ff. 140 y 227. 89 notario Jess Sancho-tello. Mnovar, escritura de venta n. 794, Monvar tomo 64, folio 286v., n. 1008, 6-09-1926. estas propiedades de secano se vendieron a Vicente Maestre Amat por 10.500 pesetas en 1926, que ingresaron en la contadura del erario episcopal de Orihuela, donde deban convertirlas en ttulos del 4% interior de papel del estado. 90 ARV, BAILA A, Expediente de amortizacin. Reg. Nm. 643; ARV, BAILA A, Expediente de amortizacin. Reg. Nm. 2918; ARV, BAILA A, Expediente de amortizacin. Reg. Nm. 2919; AMP, 44/5, Libro Giradora, ao 1727, f. 116. 142 Los establecimientos autorizados, las roturaciones ilegales y la bsqueda de manantiales en el siglo XVIII ridas con posterioridad al 13 de abril de 1740 sin privilegio de Amortizacin, y no estar sujetas al indulto general que en ese ao se concedi a algunas Obras Pas, el rey les concedi el indulto de la pena de 91 comiso, perdonndoles parte de los derechos de Amortizacin y Sello . Capellana del Santsimo Christo la capellana de la capilla del Santsimo christo de la iglesia de los remedios fue dispuesta en testa- mento por don Martn de Segura y rodrguez, natural de elche pero vecino de la ciudad de Mxico, en 30 de marzo de 1781. la cantidad dejada para la fundacin fueron 4.000 pesos, que llegaron a espaa en el navo de guerra San Phelipe. esta suma se deba entregar a su primo hermano, clrigo, Joseph Planelles y rodrguez, vecino de Petrer, quien dispuso inmediatamente que se empleara el dinero en comprar ncas: que no en otros depositos, pues que las rentas de aquellas, asegurada por los Arrendamientos es xa, para que con ella se mantengan los Capellanes, que deven tener con presicin para ordenar- se congrua suciente y segura para no quedar expuestos a mendigar contra el decoro del Estado Eclesistico, cuya seguridad podria faltarles invirtiendo el dinero en depositos en otras cosas en que su renta consiste en la casualidad de que haya no ganancia en el fondo y por esta fuerte razon qued determinado la compra de ncas. As en 1784 Joseph Planelles solicit los permisos para la fundacin de la capellana y procedi a la adquisicin de tierras (tabla i-4.9), las cuales una vez valoradas redituaban anualmente 204 libras, 18 sueldos y 9 dineros, lo que supona la renta de que dispona el clrigo. Sin embargo, y aunque se haban comprado las tierras, no haba llegado en 1791 la concesin de la capellana, para lo que se recurri in- cluso al rey. el Ayuntamiento redact un informe en el que se indicaba que la villa se compona de 500 ms vecinos, casi todos labradores, jornaleros y pastores, con el trabajo a 2 y a 3 horas de distancia de la poblacin, por lo que consideraban muy conveniente su fundacin en la ermita situada a las afueras de la poblacin, lo que favorecera el que muchos agricultores no perdieran el da de trabajo para asistir 92 a misa . Tabla I-4.9. Propiedades de la capellana de la capilla del Santsimo christo, ao 1785 PARTIDA EXTENSIN PRECIO DE COMPRA Vias de Abajo, vias 7 tahllas 700 l Vias de la Canal 4 tahllas 415 l De los Olivares 1 tahlla y media 180 l Vias de Abajo, via 2 tahllas 200 l Vias de Arriba, via 3 tahllas 240 l Vias de Arriba, via 3 tahllas 196 l Vias de Abajo, via 2 tahllas 200 l De los Olivares, olivar 3 tahllas y media 300 l De los Olivares, olivar 1 tahlla y media 140 l De los Olivares, olivar 2 tahllas 260 l De los Huertas 1 tahlla 350 l Vias de Abajo, via 3 tahllas 250 l De las Huertas huerta 335 l De las Huertas huerta 340 l TOTAL EXTENSIN 35,5 tahllas = 4,26 hectreas 4.106 l 91 ArV, BAilA A, expediente de amortizacin. reg. nm. 2918. 92 ArV, BAilA A, expediente de amortizacin. reg. nm. 715. 143 Sabina Asins Velis Obras Pas de Luis Monzo, Antonio Llopis e Isabel Juana Berd, Gabriel Juan, Francisco Rico de Pedro, Bartholome Paya Montesinos y Cristhoval Paya Adems de las citadas anteriormente, por testamento de 2 de junio de 1779 se instituy la Obra Pa de luis Monzo, a cargo de una casa, una huerta (0,24 hectreas), y un pedazo de tierra secana en Salinetas. estos bienes no gozaban del real Privilegio de Amortizacin, por lo que se inici un largusimo pro- 93 ceso, que no haba concluido en 1823 . En 1787 guran tambin las de Antonio Llopis e Isabel Juana 94 Berd, de tres jornales y medio (1,68 hectreas) de tierra en la partida del maset de irles , Gabriel Juan, 95 Francisco rico de Pedro, Bartholome Paya Montesinos y cristhoval Paya , a cargo del cura y del ayun- tamiento. de algunas de ellas desconocemos las propiedades. en el captulo siguiente analizaremos la evolucin durante el siglo XiX de este espacio agrario aban- calado, muy interesante desde el punto de vista social, poltico y econmico, pues durante este perodo se producir la abolicin de los seoros y el importante y controvertido proceso desamortizador de bienes eclesisticos y de propios. 93 ARV, BAILA A, Expediente de amortizacin. Reg. Nm. 465; ARV, BAILA A, Expediente de amortizacin. Reg. Nm. 2917, primer legajo, f. 1. 94 AMP, l-16, 22 de junio de 1788. 95 ArV, BAilA A, expediente de amortizacin. reg. nm. 2621. AMP, l-16, 1788. informe practicado& sobre la amortiza- cin. 144 Captulo 5: Las repercusiones de las leyes desamortizadoras 1. La abolicin del rgimen seorial: el nal del vasallaje los estudios sobre el siglo XiX valenciano coinciden en sealar que la lucha contra el poder seorial se vena manifestando desde haca varios siglos, si bien se agudiz desde mediados del siglo XViii. en Petrer, tras la expulsin de los moriscos, los nuevos pobladores cristianos pactaron hasta cuatro veces con la seora mejoras a la carta Pobla, la ltima en 1727. Por lo dems, son numerosas las referencias a las desavenencias con los sucesivos condes, que se recogen en las actas de los consejos celebrados en la poblacin, negndose incluso en ocasiones a satisfacer las pretensiones de derramas extraordinarias. Por cuanto se reere a la villa de Elda, inici en 1815 el proceso de reversin a los dominios de la Co- 1 rona . el decreto de las cortes de cdiz de 1811 y las leyes aclaratorias de 1823 y 1837 fueron las tres normas bsicas de la abolicin de los seoros. en 1813 se publicaba en Petrer el decreto de las cortes 2 generales y extraordinarias : Los ayuntamientos de todos los pueblos procedern por s, y sin causar perjuicio alguno, quitar y demoler todos los signos de vasallaje que haya en sus entradas, casas capitulares, o cualquiera otros sitios, puesto que los pueblos de la Nacin Espaola no reconocen ni reconocern jamas otro seoro que el de la nacin misma, y que su noble orgullo no sufriria tener la vista un re- cuerdo continuo de su humillacin. De carcter revolucionario y rupturista, estas leyes beneciaban principalmente a la burguesa, al no 3 pretender una reforma agraria que implicara el reparto de las tierras entre los campesinos . descrito 4 5 minuciosamente por la profesora Belando carbonell , el proceso de abolicin de los seoros se sigui con intensidad en todo el valle de elda. A raz de la abolicin, Felipe M Osorio y de la cueva, conde de cervelln, XiV conde de elda y Xiii de Anna, nicamente pudo conservar en Petrer las propiedades sobre las que tena dominio pleno, es decir, 7 tahllas de via en la partida de las Vias de Abajo y 2 jornales, tambin de via, en la partida de la Pedrera. Mantuvo adems tres casas y media, un molino harinero, dos hornos de pan y dos almazaras de aceite, una de ellas inservible, propiedades que arrend 6 en condiciones similares a los dems contratos entre particulares . en 1888, a su descendiente Manuel Felipe Falc y Osorio slo le quedaban en el trmino de Petrer 4 tahllas en la partida casa Huerta, un jornal en la partida Molino nuevo, un jornal en la partida del Pino, dos hornos de pan, una casa y una casa de labor en Santa Brbara, aunque mantena todos sus ttulos como duque de Fernn-nez, conde 7 de cervelln, XVi conde elda y XV de Anna . Por cunto se reere al destino de los montes del municipio, no hemos encontrado documentacin de 8 las pruebas que aport el Ayuntamiento para alegar el aprovechamiento inmemorial sobre los mismos , ni si se resolvi a su favor en base a la clusula incluida en las mejoras de la Carta Pobla de 1611, rma- das el 27 de octubre de 1612, en donde se especicaba: su Excelencia haze merced la villa de Petrel de las hiervas, y trminos de aquella para los ganados que los vecinos de dicha villa tendran quitandose 9 la libertad de vender dicho termino del dia de oy, en adelante, excepto la Cierra del Cid . Pero, efec- 1 r. BelAndO cArBOnell, Realengo y seoro& op. cit., pp. 56-60, 103-105. 2 AMP, l-16, 26 de mayo de 1813. 3 F.J. HernndeZ MOntAlBn, La abolicin de los seoros en Espaa (1811-1837). Valencia, 1999, pp. 17, 20, 117- 132. 4 r. BelAndO cArBOnell, Realengo y seoro& op. cit., pp. 97-113. 5 coleccin legislativa, impresin ao 1838, vol. 23, reales resoluciones expedidas en julio, pp. 99-102. 6 r. BelAndO cArBOnell, Realengo y seoro... op. cit., pp. 110, 112. 7 AMP, 46(1-2). Amillaramiento de 1888, forasteros (incluido en el expediente del Amillaramiento de 1853). 8 c. MOntiel MOlinA, Los montes de utilidad pblica en la Comunidad Valenciana. Madrid: serie estudios, Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentacin, 1995, pp. 94-111. 9 Ace, nm 1047, punto Sobre pasto de yerbas de Petrel y Salinas, excepto la Sierra del cit . Sabina Asins Velis tivamente, en la declaracin de montes que se realiz en la segunda mitad del siglo XiX, como conse- cuencia del proceso desamortizador, el patrimonio de Bienes de Propios del Ayuntamiento alcanzaba las 5.621,77 hectreas, aproximadamente un 54% del territorio. debe adems destacarse que el nico monte excluido de la venta por la Clasicacin de 1859 es el denominado Montes del Cid, declarado como perteneciente al estado en 1887 (y que aparece como Silla del cid en el catlogo de Montes de 10 Utilidad Pblica de 1901) , al que se aadirn dos de pequea extensin, como veremos seguidamente. la razn de que este monte se anotara como del estado puede estar en la exclusin que se haca de su aprovechamiento a los vecinos en la mejora de 1612 citada. Por otro lado, la asignacin de los montes como de Propios del Ayuntamiento, y no como comuna- 11 les , pudo ser debida a que el consell de la villa en el siglo XVii y el Ayuntamiento en el XViii arrenda- ba los pastos de las sierras al ganado forastero para aumentar los recursos del municipio. Si se hubieran podido declarar como comunales, que implicaba el aprovechamiento libre y gratuito de los vecinos, tal vez pudieran haberse librado de la venta muchos de ellos, cosa que no ocurri, ya que fueron declarados como de Propios del municipio y vendidos en pblica subasta un 85,29% de los mismos. 2. Las desmortizaciones de los bienes eclesisticos no disponemos de datos en Petrer de que los primeros intentos desamortizadores de bienes eclesisticos, como los de Godoy de 1798, los propuestos bajo el gobierno de Jos i, la ley desamortizadora de 13 de septiembre de 1813 o los que se realizaron durante el trienio constitucional de 1820-1823, afectaran a 12 este tipo de bienes en la poblacin . Bienes que siguen constando en el libro Padrn de Haciendas de 13 Petrer a nombre de los eclesisticos . Por el real decreto de 29 de julio 1837 se adjudicaban a la nacin todas las propiedades del clero secular. Por el momento, se exceptuaban los bienes pertenecientes a prebendas, capellanas, benecios y dems fundaciones de patronato pasivo de sangre. Si que pasaban a la nacin, sin embargo, los bienes de las parroquias y cofradas que, segn indicaba el decreto, se deban enajenar por sextas partes en los 14 seis primeros aos a partir de 1840 . A partir de esta fecha se suceden los inventarios y expedientes instruidos por el Ayuntamiento de Petrer para la toma de posesin a nombre del estado de parte de los Bienes eclesisticos que radica- 15 ban en el pueblo . como hemos visto en el captulo anterior, los datos incluidos en los expedientes de Amortizacin del siglo XViii, que constan en el Archivo del reino de Valencia, dan unos bienes por valor de 184,93 hectreas, ms al menos 4 heredades, unos pedazos de tierra sin especicar, varias ca- sas, una almazara, censos, etc. Al cotejar estos datos con los que facilita el Ayuntamiento a la comisin de Amortizacin a partir de 1841, se observa un importante desfase en la extensin y el nmero de las propiedades, as como la ocultacin por parte del Ayuntamiento de las propiedades de varias capellanas y Obras Pas, alguna de las cuales se escriturarn incluso en el ao 1926. el 25 de septiembre el secre- tario del Ayuntamiento inventari a la baja las propiedades de la iglesia Parroquial de San Bartolom de 10 c. MOntiel MOlinA, Los montes de utilidad pblica& op. cit., p. 265. 11 c. MOntiel MOlinA, Los montes de utilidad pblica& op. cit., pp. 179-188; D. BERNAB GIL, Bienes rsticos de aprovechamiento pblico en la Valencia moderna. Studia histrica, Historia moderna 16, 1997, pp. 131; M. PESET REIG, P. HernAndO SerrA, comunales y Propios en Valencia. en: S. de dios, J. infante, r. robledo, e. torijano (coords.), Histo- ria de la propiedad en Espaa: bienes comunales, pasado y presente. ii encuentro interdisciplinar, Salamanca 31 de Mayo-3 de Junio de 2000. Madrid: centro de estudios registrales, 2002, pp. 188-196, 203. 12 J. AZAGrA rOS, La desamortizacin de Godoy en Valencia (1799-1807). Valencia: instituci Alfons el Magnnim. insti- tuci Valenciana d Estudis i Investigaci, 1986; J. BRINES BLASCO, La desamortizacin eclesistica en el Pas Valenciano durante el trienio constitucional. Universidad de Valencia: Secretariado de Publicaciones, 1978. 13 AMP, libro Padrn de Haciendas de la Villa de Petrel, ao 1819. 14 coleccin legislativa, impresin ao 1838, vol. 23, reales resoluciones expedidas en julio, pag. 99-102. decreto de las cortes suprimiendo la contribucin de diezmos y primicias, y todas las prestaciones emanadas de los mismos. A 29 de julio de 1837. 15 AMP, caja 5, exp. 42, ao 1837, expediente formado sobre las Obras Pas y Patronatos en virtud del decreto de las cortes de 27 de diciembre ltimo; AMP, L-16, s/f, a 18 de septiembre de 1841. 146 Las repercusiones de las leyes desamortizadoras Petrer (tabla i-5.1), pues su informe no coincide ni con el que se conserva en el Archivo Histrico de 16 la Provincia de Alicante , ni con los datos que hemos expuesto en el captulo anterior, del Archivo del reino de Valencia (tabla i-4.8). de los tres inventarios, el que aporta mayores propiedades es el ltimo citado. el 30 de septiembre de 1841 previnieron a los arrendadores inquilinos y dems tenedores de dichos bienes que desde el da siguiente pertenecan a la nacin, y que desde aquel la renta se deba pagar a los 17 comisionados de Amortizacin . el 14 de octubre se reciba un escrito en el Ayuntamiento en el que se les informaba de que se deba tomar posesin de las propiedades de la Obra Pa de San Jos (presunta- mente excluida por el artculo 6) y la de mosn Juan Moll, como as se hizo al da siguiente; y el 18 de octubre se recibi otro escrito por el que se reclam al Ayuntamiento la relacin de las propiedades de las capellanas colativas de Sangre, que en principio tambin estaban excluidas por el artculo 6, prrafo 1 de la ley (tablas i-5.2 y i-5.3). Tabla I-5.1. listado de propiedades de la Fbrica Parroquial, facilitado por el Ayuntamiento, que por la ley de desamortizacin correspondan a la nacin, ao 1841 RENTA ANUAL/ DENOMINACIN PROPIEDAD IMPORTE CENSOS Fbrica de la Iglesia la ruina de un molino de aceite Sin renta Una tahlla de via 90 reales Obra pa de Mosn Juan Maestre Una huerta 480 reales Un olivar 240 reales dos tahllas de via 90 reales Obra Pa de Nuestra Sra. del Remedio Medio olivar y una refaccin 210 reales Censos existentes a favor de la Iglesia del pueblo 2720 reales y 13 maravedes Tabla I-5.2. listado de propiedades de las capellanas colativas de Sangre, facilitado por el Ayuntamiento, en principio excluidas por la ley, ao 1841 DENOMINACIN PROPIEDAD RENTA ANUAL Capellana del Collado 22 jornales (Partido de Pua) 1350 reales Una huerta (Partido de las Huertas) 600 reales Media huerta (Partido de las Huertas) 285 reales Una huerta (Partido de las Huertas) 485 reales dos vias (Partido de las Huertas) 345 reales Capellana del Dr. Toms Rico 54 jornales de tierra (Partido de cat) 12 cahizes de trigo Una huerta (Partido de las Huertas) 510 reales dos huertas (Partido de las Huertas) 1.020 reales dos olivares (Partido de las Huertas) 480 reales Media via (Partido de las Huertas) 76 reales Capellana del Dr. Gaspar Maestre 54 jornales de tierra (Guirney y Pedrera) 12 jornales de via (Secanet) Media via (en las de esta Villa) Un olivar (en los de esta Villa) Un jornal de tierra (Partido de la casa de corts) Una casa (calle del Portal) 16 r. BelAndO cArBOnell, Realengo y Seoro... op. cit., pp. 219-221. 17 AMP l-16, expediente instruido por el Ayuntamiento para la toma de posesin a nombre del estado de los Bienes eclesis- ticos que radican en este pueblo: a 18 de Septiembre de 1841, p. 6. 147 Sabina Asins Velis DENOMINACIN PROPIEDAD RENTA ANUAL Capellana de D. Juan Corts 10 jornales (Berbegala) 120 reales 3 jornales de via (Salinetas) Una huerta (en esta Villa) dos olivares (en esta Villa) Una casa en que habita el capelln Tabla I-5.3. Propiedades de la iglesia que por el Artculo 6 de ley de desamortizacin no correspondan a la nacin, ao 1841 RENTA ANUAL DENOMINACIN PROPIEDAD (reales) Beaterio de Toms Rico Una casa dos huertas y nueve jornales de tierra campa (Partido de las Huertas y 1.800 de Barchell) Una huerta (Partido de las Huertas) y un oliveral (Partido de los 1.170 Olivares) dos huertas (Partido de los Olivares) y tres jornales de tierra campa 1.425 (Partida del campico) dos huertas, medio olivar y una pieza (Partido del campico y de la 1.800 cruz) Obra Pa de San Jos dos huertas y media (en el Partido de las Huertas) 1.275 dos olivares (Partido de los Olivares) 240 Media via y un trozo de tierra secana (en las Vias de Arriba) 135 18 A partir del da 6 de julio de 1842 se publicaron en el Boletn Ocial de la Provincia de Alicante las condiciones para la subasta del arriendo de algunas de las propiedades que pertenecan a la parroquial de Petrer, por un total de 2,10 hectreas (una tahlla de via en partida de Abajo por 50 reales de velln), y a las Obras Pas de la iglesia (una tahlla de huerta partida de Abajo por 240 reales, 1 y olivar partida de Abajo por 120 reales, 1 huerta partida de Abajo por 240 reales; 1 y olivar por 120 reales; 1 y olivar por 120 reales y 3 tahllas de olivar por 90 reales). en cuanto a los compradores de los censos subastados, nicamente tenemos noticia de que Juan Antonio rico compr por 31.120 reales los censos 19 desamortizados en Petrer que procedan de los dominicos de Orihuela . como consecuencia de la aplicacin de la nueva ley General de desamortizacin del 1 de mayo de 1855, el clero parroquial de Petrer cedi varias ncas al Estado concretamente el da 14 de julio de 1863. A partir del ao 1865 comenzaron a publicarse las subastas de estas ncas y se vendieron una tahlla y media de huerta en la partida de Abajo que remat Antonio Poveda, quien cedi la venta a Joaqun 20 21 Poveda , tres tahllas en el partido de los Olivares, a favor de Jos Segura , una tahlla de huerta en 22 el partido del Olivar que remat Joaqun reich Maestre y otras ncas hasta completar un total de 9 23 tahllas . Por cuanto se reere a los bienes de las Capellanas y Obras Pas, con anterioridad a 1876 se haba vendido la importante hacienda de la Administracin, en la partida de cat, que, como hemos visto, estableci mosn thomas rico como parte de los bienes de su capellana a principios del siglo XViii. 18 BOPA nm. 864 , anuncio nm. 1 y BOPA 865, anuncio nm. 2, del da 6 de julio de 1842. 19 G. SncHeZ reciO, 1986, La desamortizacin de Mendizbal en la provincia de Alicante. El clero regular: 1836-1850. Alicante: instituto de estudios Juan Gil-Albert. excma. diputacin Provincial, pp. 62, 75, 87 y 131. 20 Registro de la Propiedad de Elda, seccin Petrer, tomo 69, nca 687, p. 190. 21 Registro de la Propiedad de Elda, seccin Petrer, tomo 69, nca 694, p. 209. 22 Registro de la Propiedad de Elda, seccin Petrer, tomo 174, nca 1867, p. 214. 23 r. BelAndO cArBOnell, Realengo y Seoro... op. cit., p. 227. 148 Las repercusiones de las leyes desamortizadoras la hacienda la Administracin, compuesta de poco ms de 28 hectreas, parte plantado de via y parte de tierra blanca con diferentes rboles y de un jornal de tierra huerta, ms la mitad de una balsa y un manantial de agua para el riego, casa de labor, corral de ganado, era de trillar y la mitad de un pozo para colocar nieve en estado ruinoso, con sus correspondientes ensanches de monte, perteneca en 1876 la mitad a Vicente Maestre Miralles y la otra mitad a su hermana isabel, parte por herencia de su madre Ana Mara Miralles Astor y parte por permuta con Gabriel Maestre Prez. la casa de campo y corral, 24 que se encuentra en la actualidad en estado ruinoso, la construyeron dichos hermanos . tambin per- tenecan a la Administracin de thomas rico, 5 hectreas de tierra secana inculta, destinada a pastos, situada en Badallet, dentro de cuyo permetro haba una casa, y a quien corresponda la otra mitad del pozo de colocar nieve, lindante con la capellana de la Administracin, inscrita en 1891 a nombre de 25 Andrs Juan tortosa . 26 Hasta el ao 1867, las escasas propiedades del clero secular (2,78 hectreas) y regular de Petrer que salieron a subasta, como ha analizado Belando carbonell, ms las 33 hectreas de la hacienda de la Administracin, que se debieron subastar antes de 1876, fueron compradas por vecinos de la localidad. la desamortizacin de estas propiedades en Petrer no supuso una ampliacin del espacio agrcola, pues las escasas propiedades que se vendieron ya se encontraban en cultivo. los restantes bienes del clero 27 quedaron exceptuados de la venta por la ley de 1841 , por lo que debieron conservar aproximadamente unas 149,15 hectreas, ms al menos las 4 heredades, los pedazos de tierra sin especicar, varias casas y la almazara. en la actualidad, a la iglesia de Petrer le quedan unas siete hectreas de propiedad. 3. Los Bienes de Propios de Petrer y los montes del Estado la ley de 1 de mayo de 1855, conocida como la ley Madoz, declaraba en estado de venta todos los bienes pertenecientes al Estado, Ayuntamientos y Establecimientos Pblicos, excepto aqullos cuya 28 venta no creyera oportuna el Gobierno , y estableci como condicin indispensable para eximir de la desamortizacin a los terrenos de aprovechamiento comn, el que la posesin de los pueblos sobre estos terrenos deba ser al menos desde los ltimos veinte aos. tampoco podan reputarse como de aprove- chamiento comn aquellas ncas en que no tenan todos los vecinos el disfrute libre y sin retribucin alguna. Por su parte la ley de 6 de mayo de 1855 admiti las adquisiciones de suertes que en diferentes pocas haban tenido lugar en ncas de baldos, realengos, comunes, propios y arbitrios; as como aque- llas que siendo de origen ilegtimo haban sido legitimadas por las leyes. A la vez se exigi que quienes no tuvieran todava los ttulos de propiedad correspondientes los solicitasen. estas leyes fueron comple- tadas con el real decreto de 10 de julio de 1865, que tambin determinaba el derecho de los ayuntamien- 29 tos a reclamar las excepciones acerca de terrenos de aprovechamiento comn o dehesa boyal . En los aos 1856 y 1859 se hicieron las clasicaciones de los montes y por el Real Decreto de 22 de 30 enero de 1862 se concret la confeccin del primer catlogo de Montes Pblicos . el Ayuntamiento de Petrer fue facilitando paulatinamente la informacin sobre los montes que conformaban sus Bienes, ocultando en un primer momento la propiedad sobre algunos de ellos. Y si bien eran numerosos aquellos que contaban con ms de 100 hectreas, stos al parecer no cumplan con la condicin que se especi- caba en ese real decreto respecto a las especies que deban albergar para eximirlos de la venta (pinos, robles o hayas) sino ms bien estaban compuestos por especies arbustivas (contiene pocos productos de 24 registro de la Propiedad de Monvar. Finca la Administracin, nmero 2237, tomo 211, libro 31 de Petrel, folio 186, 10 de abril de 1876. Gentileza de Luis Villaplana. En el ao 1960 se volvi a peritar la propiedad y result tener una supercie total de 54 hectreas. 25 Registro de la Propiedad de Monvar, nca nmero 3839, folio 49, 16 de abril de 1891. Gentileza de Luis Villaplana. 26 r. BelAndO cArBOnell, Realengo y Seoro... op. cit., p. 220, 228. total: 14,15 tahllas, que equivalen a 1,70 hect- reas, ms 1,08 hectreas subastadas entre 1864-67. 27 r. BelAndO cArBOnell, Realengo y Seoro... op. cit., pp. 228, 233 y cuadro ciV, nota 4. 28 c. MOntiel MOlinA, Los montes de utilidad pblica& op. cit., p. 23. 29 coleccin legislativa de espaa. 1865, tomo XciV. imprenta del Ministerio de Gracia y Justicia, 1865. 30 J. GOrdO, l. Gil, los bosques espaoles y el catlogo de Montes de Utilidad Pblica, Ecologa, Fuera de Serie n 1, 1990, pp. 113-127. 149 Sabina Asins Velis monte alto ni bajo). la actitud y criterios seguidos en Petrer, tanto por parte de su Ayuntamiento como 31 de los ingenieros que confeccionaban el catlogo, coincide con lo que, como seala Montiel , fue la tnica dominante en la mayora de municipios. los montes no catalogados como exceptuados de la ven- ta salieron a subasta en lotes o individualmente en los aos 1861, 1878-1879, 1886, 1892-1893, 1906 y nalmente en 1919, ms algunos que se inscribieron en el Registro de la Propiedad sin que sepamos la fecha de la subasta. el estudio de los expedientes de venta localizados y la documentacin del registro de la Propiedad de elda nos permiten suponer que el total de Bienes de Propios del Ayuntamiento, antes de comenzar los procesos de desamortizacin, deba de ser cercano a 5.621,77 hectreas (de las 10.420 con que cuenta el trmino). entre los aos 1861 y 1919, salieron a subasta 4.795,07 hectreas de montes de la localidad y solamente fueron protegidas un total de 826,70 hectreas. debemos resear que hasta la relacin que hace el Ayuntamiento en 1887 todos los montes que iba declarando se citan como de Bienes de Propios; sin embargo en la que se hace pblica en 1887 algunos de ellos se describen como Bienes de Propios (1.010 hectreas) y otros guran como propiedad del Estado (en ese momento se detallan 1.750 hect- reas del estado, por cesin que le hizo la villa de Petrer como perteneciente a sus Propios, en virtud de la ley de desamortizacin, como se indica en algn documento posterior). tambin en este aspecto sigue Petrer la dinmica que se observa en la provincia de Alicante, para la que se indica que se incluyeron 32 ms montes estatales que municipales entre los exceptuados de la venta , pues, al nal del proceso, de esas 826,70 hectreas que quedaron protegidas, el estado mantuvo la propiedad sobre 571,31 y el Ayuntamiento slo de 255,39 hectreas. en una fecha tarda, 1924, el ingeniero forestal del distrito de Alicante destacaba lo ocurrido en Petrer en donde se haban declarado protegidos montes pertenecientes al estado que reunan las mismas caractersticas que los de Propios del Ayuntamiento, que s haban 33 salido a subasta . Al igual que ocurriera en otros municipios, en Petrer se form una sociedad de vecinos con el n de 34 comprar los montes que salan a la venta . casi la mitad de los montes subastados fueron comprados por la Sociedad de los Montes Particulares de Petrel, que contaba entre sus principales accionistas con las familias ms acomodadas de la localidad. el resto de las subastas fue adquirido, a ttulo individual, por destacados miembros de Petrer, que participaban a su vez en la citada Sociedad, y por vecinos de Agost, Sax, castalla y Alicante. con los datos de que disponemos hemos estimado que posteriormente slo se pusieron en cultivo unas 420 hectreas, es decir un 8,76% del total de las que salieron a subasta, que dadas las caractersticas fsicas del territorio se dispusieron en bancales. An as, esta cantidad supona un incremento del 17,95% sobre el espacio que se cultivaba en 1859. en la actualidad, gracias a diversas devoluciones por impago, compras o donaciones, vuelven a ser de titularidad pblica un total de 4.347,34 hectreas, cantidad inferior en un 9,33% a los Bienes de Propios que se vendieron hasta el ao 1919. Parte de estas hectreas gestionadas por el Ayuntamiento de Petrer, la Generalitat Valenciana, la diputacin de Alicante y el Ministerio de defensa han quedado incluidas en el recientemente declarado Paisaje Protegido Serra del Maigm i Serra del Sit (que comprende 6.500 hectreas de Petrer, incluidas las de titularidad pblica). 3.1. Montes subastados en el ao 1861, adquiridos por la Sociedad de los Montes Particulares de Petrel los vecinos interesados en adquirir los montes de la localidad que iban a ser subastados se asociaron por medio de un convenio privado, con anterioridad al mes de julio de 1861 (que formalizaron ante no- 35 tario el 4 de enero de 1862) . esta Sociedad estaba participada por 1.005 acciones, tasadas a 17 reales 31 c. MOntiel MOlinA, Los montes de utilidad pblica& op. cit., pp. 21-26. 32 c. MOntiel MOlinA, Los montes de utilidad pblica& op. cit., p. 38. 33 c. MOntiel MOlinA, Los montes de utilidad pblica& op. cit., p. 73. 34 c. MOntiel MOlinA, Los montes de utilidad pblica& op. cit., pp. 154-158. 35 APM, notario Jos Prez Lpez, 4 de enero de 1862, p. 8; APM, notario Jos Prez Lpez, 7 de diciembre de 1865, p. 370. 150 Las repercusiones de las leyes desamortizadoras 36 cada una , de las que 653 se las repartan entre 20 socios. estos ltimos eran propietarios y primeros 37 contribuyentes de la poblacin , cuyos apellidos encontramos ya citados en la carta Pobla de 1611, y residentes en el pueblo, a excepcin de Santiago Amat, que viva en Valencia y luisa Maestre, en Alicante. en las distintas relaciones y Juntas Generales constan entre estos miembros con mayora de acciones Ventura y luciano Prez Planelles, Gabriel Prez lpez, Vicente Maestre Miralles, Miguel Amat Maestre, Gabriel Maestre Prez, Francisco Javier Soria (fallecido ya en 1865), Jos Pay corts, Jos Maestre Prez, ramn Maestre rico (apoderado de su padre Jos Maestre Prez), Joaqun Maes- 38 tre y Bernabeu, Jos rico Amat , Jos Prez lpez, Francisco Manuel Verd rico, Manuela Maestre Miralles, carlos y Manuel castillo rico, enrique Amat Maestre, Joaqun Agull Barcel, Pascual Soria Benito, Onofre Pay Pay, Jos Pay Pay, Joaqun Beltr Alted, Mariano rico Pay, luisa Maestre rico (viuda de 36 aos, representada legalmente por Gabriel Maestre), Mariana Planelles Pay (viuda 39 de 78 aos, representada por luciano Prez) y Santiago Amat Peyr . el 26 de julio de 1861 varios miembros de la Sociedad se personaron en la subasta de los Bienes de Propios de Petrer que realiz el Estado, y compraron las 11 ncas que salieron a la venta (Tabla I-5.4). Tabla I-5.4. Montes de Propios de Petrer, comprados en nombre de la Sociedad de los Montes Particulares de Petrel, en 26 de julio de 1861 (Fuente: APM, notario Jos Prez lpez, 7 de diciembre de 1865, p. 3) CABIDA TASACIN VALOR Referencia DENOMINACIN CARACTERSTICAS (hectreas) (en reales)* REGISTRO** Finca (ARPE) Pea de las Montesas contiene pocos productos 260 1.940 no consta 1.353 forestales de monte alto ni bajo Rullo ( Rubio) y contiene pocos productos de 670 2.500 no consta 1.354 Arenal monte alto ni bajo Altos del Colegial no tiene monte alto ni bajo 12 360 37 escudos 1.355 esta raso Altos de Peret contiene pocos productos de 21 320 40 escudos 1.356 monte alto y bajo Castellarets contiene pocos productos de 76 500 50 escudos 1.357 monte alto y bajo Loma Gorda 84+4=88 800 101 escudos 1.358 Ginebre contiene pocos productos de 81 900 100 escudos 1.359 monte alto ni bajo Clot del Llop contiene pocos productos de 80+257=337 800 90 escudos 1.360 monte alto ni bajo Solana del Matar no tiene monte alto ni bajo 48+9=57 1.500 200 escudos 1.361 y si algunos pinatos y pastos Alto de Cascales contiene pocos produc- 350 800 101 escudos 1.362 tos de monte alto y bajo Altos de Ferrusa contiene pocos produc- 46 1.600 162 escudos 1.363 tos de monte alto y bajo TOTAL 1728+270=1998 12.020 1 escudo =10 reales de velln. * Fuente: r. BelAndO cArBOnell, Realengo y Seoro,... op.cit. p. 242; **Referencia: ARPE, seccin Petrer. A la subasta acudieron Ventura Prez, Joaqun Agull, Gabriel Maestre Prez y Gabriel Moll Pay, los tres primeros propietarios y vecinos de Petrer, y el ltimo catedrtico de latinidad, vecino de Alicante. 36 APM, notario Jos Prez lpez, 29 de mayo de 1862, p. 153: Jos y Baltasar Maestre Prez venden a su hermano Gabriel un total de 71 acciones que poseen en propiedad en los once montes de la Sociedad al precio de 17 reales la accin. 37 e. MirA-PerceVAl, M.c. ricO, nobiliaria en el Medio Vinalop y en la Hoya de castalla: Apellido rico. Revista del Vinalop 6-7, 2003-2004, pp. 265-268. e. MirA-PerceVAl, M.c. ricO, nobiliaria en el Medio Vinalop y en la Hoya de castalla: Apellido Prez. Revista del Vinalop 8, 2005, pp. 173-211. 38 APM, notario Jos Prez lpez, 4 de enero de 1862, p. 8. 39 Archivo del Registro de la Propiedad de Elda, seccin Petrer, nca 1353. 151 Sabina Asins Velis Vericaron la adquisicin de los 11 montes en concepto de Comisionados de la asociacin de vecinos de Petrer, denominada Sociedad de los Montes Particulares de Petrel, la cual les facilit los fondos nece- sarios para el primer plazo y gastos de escrituras, quedando los montes hipotecados a favor del estado por los nueve plazos que quedaban por pagar. los montes salieron a subasta con una tasacin de 12.020 reales y una cabida total de 1.728 hectreas, que despus de su venta y tras las oportunas mediciones dieron un total de 1.998 hectreas (en concreto 257 hectreas que resultaron de ms en el ao 1898 tras la nueva medicin del monte clot del llop, las 9 hectreas que dio de ms la Solana de (Al)Matar en 1961 y las 4 hectreas de ms de loma Gorda). el 17 de agosto de 1865 se convoc una Junta General de Socios, y reunidos Manuel castillo rico, carlos castillo rico, Ventura Prez Planelles, luciano Prez Planelles, Vicente Maestre Miralles, Jos rico Amat, Gabriel Prez lpez, Miguel Amat Maestre, Gabriel Maestre rico, Jos Pay corts, Jos Maestre Prez (representado por su hijo y apoderado ramn Maestre Prez), tenedores de la mayor par- 40 te de acciones, y en representacin de la Sociedad, nombraron una Junta directiva formada por : Presidente Miguel Amat Maestre (abogado de 29 aos) Vicepresidente Gabriel Prez lpez (propietario, 53 aos) Vocales Luciano Prez Planelles (propietario, 39 aos); Jos Rico Amat (propietario, 30 aos); Gabriel Maestre Prez (propietario, 63 aos); Jos Pay Corts (labrador propietario, 65 aos). la Junta directiva, en representacin de la Sociedad, qued autorizada para redactar el reglamento, 41 proceder al deslinde y amojonamiento de los montes pertenecientes a la misma , para arrendar leas, esparto y dems productos de los montes, para aceptar las obligaciones de los arrendatarios y cobrar los arrendamientos, otorgando para el efecto las correspondientes cartas de pago; as como para poder vender de dichos montes a los particulares colindantes hasta el 15% de la cabida de las tierras laboreadas que estos poseen contiguas o inmediatas a dichos montes por el precio en que se convenga, pudiendo comprar tambin algn trozo de terreno enclavado en los mismos o permutar alguna parte de ellos, si lo creyeran conveniente, a efectos de amojonamiento; y, nalmente, para representar a la sociedad en todos los pleitos verbales, de conciliacin, etc. 42 A los pocos aos, en la Junta directiva del 13 de marzo de 1870 , el presidente, Miguel Amat Maes- tre, inform de que las deudas contra la Sociedad eran mayores que sus crditos, por lo que propona vender los montes. los presentes acordaron por unanimidad autorizar a la Junta directiva para la venta de los once montes bajo las siguientes especicaciones, entre otras: que las ventas se hicieran en pblica subasta, previo anuncio en el Boletn Ocial de la Provincia de Alicante; que se pudiera vender el 15% a los colindantes de tierras de labor por el precio que se conviniera; que con el dinero obtenido de la venta de los montes se pagaran en primer lugar las deudas y que se repartira el resto segn el nmero de acciones de cada socio. Los montes que se subastaron, tras el oportuno anuncio en el Boletn Ocial de la Provincia, se escrituraron el 2 de septiembre de 1871. Esto signica que, durante 10 aos, desde 1861 a 1871, no se intent ningn tipo de venta, roturacin, ni espe- culacin de las propiedades que haba adquirido la Sociedad. en la subasta que realiz la Sociedad de los Montes Particulares de Petrel en 1871, tres montes fueron comprados de nuevo por miembros de la Sociedad (loma Gorda, Alto de cascales y Ferrusa) y el monte clot del llop fue comprado por un comerciante de Barcelona. en total 821 hectreas, de las que con el tiempo clot del llop volvi al estado y Ferrusa al Ayuntamiento. 40 Archivo del Registro de la Propiedad de Elda, seccin Petrer, nca 1353 a 1363. El da 7 de diciembre de 1865 haban re- gistrado el nombramiento de la Junta directiva ante el notario Jos Prez (APM, notario Jos Prez lpez, 7 de diciembre de 1865, pp. 369-372). 41 el deslinde y amojonamiento de los montes se realiz en 1866, pues haban surgido dudas con los propietarios colindantes o que tenan enclavados algunos yermos o tierras cultivadas en el interior de los montes, por lo que se pidi el deslinde judicial y amojonamiento excepto en la parte que connaban con montes pblicos, pues en esa zona no era competencia de la jurisdic- cin ordinaria. el deslinde se protocoliza el 5 de enero de 1867 (APM, Protocolo de Actas de los aos 1863, 64, 65, 66 y 1867, notario Jos Prez lpez, 5 de enero de 1867, hasta pgina 128). 42 Archivo del Registro de la Propiedad de Elda, seccin Petrer, nca 1353. 152 Las repercusiones de las leyes desamortizadoras Pero la cantidad ms importante fue adjudicada posteriormente, ya en los aos 1945 y 1948, a ramn Maestre Maestre (quien hered un importante nmero de acciones de la Sociedad que pertenecieron a su padre ramn Maestre rico): le correspondieron 1.177 hectreas de los montes que haba comprado la Sociedad en 1861, ms las 113,7 hectreas que compr su padre entre el collado de Amors y las nueve partes de la Solana del Fraile que veremos a continuacin. en total pasaron a su nombre 1.290,7 hect- reas que haban pertenecido a los Bienes de Propios de Petrer y al estado (collado de Amors). tras su muerte, en 1951, hered sus propiedades su hijo de igual nombre, ramn Maestre Maestre, de quien pasaron, tambin a su muerte ocurrida en 1975, a sus tres hermanas, quienes las vendieron; por lo que entre 1861 y 1975 tampoco se especul con estas propiedades. Especcamente, a partir del ao 1871, tras la decisin de venta de los montes que haba adquirido la Sociedad diez aos antes, el proceso que se sigui y el destino de estos montes fue el siguiente: Montes re-vendidos por la Sociedad de Los Montes Particulares de Petrel en 1871 y 1879 Loma Gorda el monte loma Gorda, en el partido del esquinal, se lo quedaron, en el ao 1871, entre ramn Maestre rico y Francisco Manuel Verd rico, por 1.167 pesetas. en la escritura constan 88 hectreas, en lugar de las 84 que salieron a subasta. en 1890 falleci Francisco Manuel Verd quien dej su parte de los montes a sus dos hijos; en 1900 falleci Ramn Maestre Rico, quien leg su participacin en su hija 43 enriqueta Maestre . Alto de Cascales los Altos de cascales, de 350 hectreas, se lo qued en 1871 Vicente Maestre Miralles, propietario, por 1.667 pesetas, quien vendi la mitad a Gabriel Maestre Prez, hacendado y vecino de Petrer. Ambos venderan en 1875 la tercera parte de la nca a Manuela Gisbert Prez, de Ibi, por 555,66 pesetas. El 44 Alto de cascales pas posteriormente a los herederos de los tres propietarios . en el mismo acto, la So- 45 ciedad vendi los desmontes del Alto de cascales, a enrique Amat Maestre y a ramn Maestre rico . Ferrusa el monte Ferrusa lo adquiri enrique Amat Maestre, por 2.500 pesetas, quien vendi una parte a Miguel Amat Maestre y a luciano Prez Planelles, por 1.500 pesetas. en la actualidad pertenece al Ayuntamien- to de Petrer. Llop el destino del monte clot del llop fue diferente. el da 24 de septiembre de 1879, reunida la Junta di- rectiva, se inform de que formadas las cuentas de los fondos de los productos de los montes, desde el 20 de diciembre de 1870 hasta el 20 de septiembre de 1879, result que se deba al depositario (luciano Prez) la cantidad de 4.405 reales y 48 cntimos. la Junta acord que para reintegrarle el importe al depositario se procediese a la venta del monte llop, en pblica subasta, previa tasacin por los peritos Jos Maestre Amat y ceferino navarro, vecinos de Petrer. el 21 de abril de 1880 se subast el monte, que compr Oscar Porta Vicua, vecino de Barcelona y dedicado al comercio, por un total de 1.750 pesetas. la cabida de este monte haba sido estimada en 80 hectreas. Sin embargo en el ao 1898, Porta solicit una nueva medicin del monte que dio una cabida de 337 hectreas, sin que hubiera ninguna reclamacin por parte de los colindantes. En el informe se especica que el exceso de cabida se conoci al deslindar el monte, y no se deba a la mala fe de Oscar Vicua, por lo que se solicit que se le reco- 43 Archivo del Registro de la Propiedad de Elda, seccin Petrer, nca 1358. 44 Registro de la Propiedad de Monvar, nca 1362, tomo 140 antiguo, libro 18 de Petrer, folio 169, 21 de mayo de 1870. Es- critura de venta, 13 de agosto de 1871 ante el notario de elda, Pedro Juan ivorra. Gentileza de luis Villaplana. 45 Archivo del Registro de la Propiedad de Elda, seccin Petrer, nca 1362. 153 Sabina Asins Velis nociera la propiedad total. Para ello Porta ingres en las arcas del tesoro, en 1898, un total de 723,80 pesetas, en que se tas el exceso de hectreas, y el informe se pas a la direccin General de Propieda- des y derechos del estado. dos aos ms tarde, en 1901, el estado procedi al embargo de sta y otras tres propiedades de Oscar Porta, para cubrir las deudas que ste tena con el estado por compra de bienes e intereses de demora. A su muerte, ocurrida ese mismo ao, la propiedad pas a sus cuatro hijos, quienes cancelaron la deuda con el estado en 1904, y en 1906 vendieron sta y otras propiedades a Juan esteve y Juan. tras varias ventas, la compr en 1952 el Patrimonio Forestal del Estado junto a otras tres ncas (11 hectreas de Jos Alcaraz Montoyo, 6 hectreas de Primitiva Pay Brotons, y la tercera no la hemos localizado) por 46 un total de 30.000 pesetas . repoblado de pino carrasco en 1965, fue declarado de utilidad pblica en 47 19 de julio de 1969, con una cabida total de 372,8660 hectreas . en la actualidad es zona militar. Montes adjudicados por la Sociedad a Ramn Maestre Maestre entre 1945 y 1948 Pea de las Montesas, Rullo (Rubio) y Arenal, Altos del Colegial, Altos de Peret, Castellarets como hemos comentado anteriormente, en el ao 1945 todava quedaban propiedades a nombre de la Sociedad. ese mismo ao, siendo secretario de la misma luciano Prez Maestre, se adjudicaron 5 mon- tes a ramn Maestre Maestre, por ser poseedor de un importante nmero de acciones. ramn Maestre Maestre falleci en 1951 y la propiedad de estos montes pas a su hijo, llamado tambin ramn Maestre Maestre, quien los conserv mientras vivi y fueron ya sus hermanas, emelina, remedios y consuelo Maestre Maestre, quienes los vendieron en el ao 1975. Una de las ncas que se le adjudic es la denominada las Peas Montesas. En 1952 se desestim por parte del Patrimonio Forestal del estado el ofrecimiento de ramn Maestre Maestre de la venta de este monte, de 260 hectreas, argumentando que no interesaba la compra, aunque el precio estimado era su- 48 perior al que ofert Maestre . en 1958, Maestre solicit la repoblacin de la Pea de las Montesas con esparto, por medio de consorcio con el Patrimonio Forestal del estado (en total 394 hectreas, 22 reas, 64 centireas), pues el estado ya tena en esa zona 2.762 hectreas. tras dos ventas posteriores de la pro- 49 piedad, pertenece, desde 1977, a la Sociedad Mercantil Hacienda el Palomaret, de capital asturiano . los otros montes que se le adjudicaron en 1945 fueron rullo (rubio) y Arenal, que en 1949 y 1960 50 51 52 fueron segregados en varias parcelas , y Altos del colegial y Altos de Peret , que a la muerte de su hijo en 1975 pasaron a sus hermanas, quienes los vendieron a Jos llorens Maestre, as como castella- 53 rets, que tambin vendieron las hermanas a Francisco Gonzlez esteve . Ginebre el Ginebre le fue adjudicado a ramn Maestre Maestre, en septiembre de 1948, al quedarle 81 acciones, por un valor de 593,73 pesetas. A su muerte pas a sus hermanas emelina, remedios y consuelo Maes- 54 tre Maestre, quienes lo vendieron a Jos llorens Maestre . Solana de (Al)Matar en 1946 fue entregado a ramn Maestre Maestre por sus acciones en la Sociedad. Valorado en el ao 1948 en 500 pesetas, fue permutado por ramn Maestre Maestre a carlos Beneit navarro, del comercio y vecino de Petrer, por 50 acciones de la Sociedad de Montes. en 1952 se desestim por parte del Patri- 46 Archivo del Registro de la Propiedad de Elda, seccin Petrer, nca 1360. 47 Arxiu de Montes, S(ervicios) t(erritoriales) de la c(onselleria) de M(edio) A(mbiente), Agua, Urbanismo y Vivienda, caja 69. clot del llop. BOPA 12 de junio de 1965. 48 Arxiu de Montes, StcMA, caja 69. 49 Archivo del Registro de la Propiedad de Elda, seccin Petrer, nca 1353. 50 Archivo del Registro de la Propiedad de Elda, seccin Petrer, nca 1354. 51 Archivo del Registro de la Propiedad de Elda, seccin Petrer, nca 1355. 52 Archivo del Registro de la Propiedad de Elda, seccin Petrer, nca 1356. 53 Archivo del Registro de la Propiedad de Elda, seccin Petrer, nca 1357. 54 Archivo del Registro de la Propiedad de Elda, seccin Petrer, nca 1359. 154 Las repercusiones de las leyes desamortizadoras monio Forestal del estado su oferta de venta, aunque en el informe se seala la importancia forestal que 55 tendra la adquisicin de esta nca y la de la Pea de las Montesas, tambin ofertada . cuando en 1960 se deslind para proceder a su venta a Lorenzo Romn Serna, dio una supercie de 57 hectreas en vez de las 48 que se haban declarado en 1861. En el ao 1963 la nca fue vendida nuevamente, esta vez a la Sociedad Plantacin y cultivos Forestales, S.A., de Madrid, y, tras otra venta, pas en 1973, junto con 56 otras 14 ncas, a la Sociedad Urbanizadora Calafate, de Oviedo . 3.2. Montes subastados en 1878-1879 y relacin de Bienes de Propios de 1880 los montes que salieron a subasta los aos 1878-1879 fueron la Solana del Fraile y el collado de Amors. Solana del Fraile el monte de la Solana del Fraile, con una cabida de 63 hectreas, con pastos buenos para el ganado compuestos de tomillos, bojas y algunas atochas, perteneca a los Propios de la villa de Petrer, pero en su interior existan enclavados de distintos vecinos. en 1878 sali a subasta pblica, que remat por 1.000 pesetas Francisco Manuel Verd y Rico, propietario, vecino de Petrer. Nueve partes de la nca (56,7 57 hectreas) pasaron a ramn Maestre Maestre por compra a sus herederos en 1902 . Collado de Amors el collado de Amors, de 57 hectreas, corresponda al estado por cesin que le hizo la villa de Petrer como perteneciente a sus Propios, en virtud de la ley de desamortizacin. Sus pastos se componan de tomillos bajos, algunas atochas y otras hierbas. Sali a subasta en 1879, que remat ramn Maestre Rico, como ya hemos visto propietario y vecino de Petrer. La nca pas en 1900 por herencia a su hijo 58 ramn Maestre Maestre . An habindose vendido 2.118 hectreas, en 1880 todava quedaban 22 montes de Bienes de Propios, con una cabida de 3.142 hectreas (tabla i-5.5), si bien el Ayuntamiento de Petrer tampoco declar en esta relacin todos los montes de propios que le quedaban a la localidad, que fueron hacindose pblicos en los aos sucesivos. tal vez los motivos de esta ocultacin se resuman en la carta que acompaaba a la relacin de los montes que se hizo en 1880, y que envi Gabriel Poveda, teniente Primero y Alcalde 59 accidental de Petrer : Diligencia: Cumplido lo dispuesto por el Sr. Gobernador de esta Provincia segn consta por la precedente acta referente la entrega para su custodia de los montes del Estado y Municipales de este trmino, al alferez de la guardia Civil don Manuel Moares Diaz, el que suscribe en nombre y representacin de este Municipio creo oportuno consignar por esta diligencia que protesta del acto y reserva el derecho de dirigir a quien corresponda a n de hacer ver el estado deplorable en que queda este pueblo sin el disfrute de los escasos pastos y leas que contienen dichos montes, tanto por quedar los ganados en pocas lluviosas sin sustento alguno como por tener los braceros que sucumbir en periodos calamitosos por carecer de recursos para el alimento de las familias, que se proporcionan con la extraccion de algunos haces de lea rmado Gabriel Poveda (Te- niente Primero y Alcalde accidental). 55 Arxiu de Montes, StcMA, caja 69. 56 Archivo del Registro de la Propiedad de Elda, seccin Petrer, nca 1361. 57 Registro de la Propiedad de Monvar, nca 2.625, en el tomo 269, libro 38 de Petrer, folio 38v., 13 de noviembre de 1879. Gentileza de luis Villaplana. 58 Archivo del Registro de la Propiedad de Elda, seccin Petrer, tomo 269, nca 2624, folio 31. 59 AMP 40/1, 21 de agosto de 1880. 155 Sabina Asins Velis 60 coincida esta opinin, con la que se recoge para otras zonas de la pennsula , y que sintetiz lamberto 61 Amat Sempere en su historia de Elda, escrita en 1875 : Finalizaremos ste captulo insinuando el estado actual de los Montes, su propiedad y aprove- chamiento de sus producciones, si bien con profunda pena, por el indebido inesperado despojo, que de todo ellos han sufrido los infelices proletarios de los tres pueblos (elda, Petrer y Salinas), cuya miseria y malestar en todas ocasiones reuye sobre las demas clases, y en ciertos casos con graves disgustos y prdidas de consideracin. Tabla I-5.5. relacin de los montes que el Ayuntamiento declar poseer en 28 de julio y en 21 de agosto de 1880 (Fuente: AMP l-47, AMP 40/1) CABIDA DENOMINACIN (hectreas) Chaparral 720 Silla (del Cid) 680 Caballo 350 Alto de Crdenas 110 Almorchoneta 75 Berbegala 84 Guirney y Cabezarroba 115 Tejera Vieja 25 Puntales del Perri 53 Rabosa y Cantal del Moro 110 Atochar y Calera 40 Umbra del Cochinet 100 Cantera 36 Poblet 96 Loma Bada 105 Loma Rasa y Blanquizares de los Charcos 225 Alto del Cap 37 Alto de Portillo 100 Forca y Llobera 18 Horteta 15 Alto de los Menores 20 Alto del Collado de la Hoya 28 TOTAL 3.142 3.3. Montes subastados en 1885-1886 y relacin de Bienes de Propios de 1887 en estos dos aos salieron a la venta, adems de montes que aparecan en el listado de 1880, como Ber- begala, los Puntales del Perri y loma Bada, otros que no estaban declarados que haban sido reconoci- dos como de Propios del pueblo en el ao 1883, como los Altos de la casa del cid, el Alt del estret, las 60 c. MOntiel MOlinA, Los montes de utilidad pblica& op. cit., pp. 136-141; GRUPO DE ESTUDIOS DE HISTORIA RURAL, Poltica forestal y produccin de los montes pblicos espaoles. Una visin de conjunto, 1861-1933. VIII Simposio de Historia Econmica. Barcelona: Universidad Autnoma de Barcelona, 1996; GRUPO DE ESTUDIOS DE HISTORIA RURAL Diversidad dentro de un orden. Privatizacin, produccin forestal y represin en los montes pblicos espaoles, 1859-1926. Historia Agraria 18, 1999, pp.129-178; A. SABIO ALCUTN, imgenes del monte pblico, patriotismo forestal espaol y resistencias campesinas, 1855-1930. Ayer 46, 2002, pp. 133-153. 61 l. AMAt SeMPere, Elda, tomo ii... op. cit., pp. 335-346. 156 Las repercusiones de las leyes desamortizadoras 62 Peas del Seor, las lomas del Palomaret, cabecicos de Salinetas y los Blanquizares . el total vendido en 1885 y 1886 fue de 733,09 hectreas. en el ao 1928 las Peas del Seor y las lomas del Palomaret fueron incautadas por el estado, al haberse declarado en quiebra el comprador. el informe de los tcnicos subray que la calidad del terreno era impropia para el cultivo agrcola permanente y en cambio si era susceptible de repoblacin forestal, por lo cual proceda declararlo de utilidad pblica, por lo que tras los oportunos trmites la Peas del Seor y Palomaret se incluyeron en el catlogo de los de Utilidad Pblica de la Provincia de Alicante, 63 con una cabida total de 212,7625 hectreas y una cabida forestal de 173,6575 hectreas . Altos de la Casa del Cid este monte tena una cabida de 36,3 hectreas, con escasos pastos y algunas atochas, y estaba atravesado por el camino de Salinetas y el barranco de Santos. la subasta se realiz el 17 de noviembre de 1885, tasado en 260 pesetas y rematado por 2.000 pesetas por Gabriel Pay Pay, propietario de Petrer. en pocos aos este monte se fue segregando en algunas parcelas, como las 50 tahllas (6 hectreas) incultas vendidas en 1890 a enrique Pay Amat, las 30 tahllas (3,6 hectreas) en parte incultas y en parte de almendros y via a Amalia Pay Pay, o las restantes poco ms de 29 hectreas a constantino rico Pay, en 1897. en el ao 1933 casi todo era todava monte, pero con algunas parcelas roturadas dedicadas a 64 via y rboles frutales en el partido de les Foyetes y Forca . Alt del Estret En el Boletn Ocial de la Provincia de Alicante de 2 de marzo de 1886 se anunci la venta del monte Alt del estret y de las Peas del Seor, para el da 6 de abril. el Alt del estret proceda de los Bienes de Propios, sus productos en 1886 eran leas y pastos escasos, siendo su cabida de 56 hectreas, a leas y escasos pastos. lindaba al sur con las Peas del Seor y al este con el Maigm, barranco del estret en medio. los peritos lo tasaron en 310 pesetas en venta y 10 pesetas en renta, fue rematado en 605 pesetas por Primo Corts Brotons, labrador de Agost, quien se lo vendi a nales de ao a Juan Aquilina Torre- 65 grosa por el mismo precio . Peas del Seor las Peas del Seor no se haban incluido en el catlogo de 1862. Se consideraba el monte como de Propios del pueblo, aunque se ignoraba la razn de ello y el Ayuntamiento careca de titulo con que acre- ditarlo, pero tambin en el Boletn Ocial de la Provincia de Alicante de 2 de marzo de 1886 se anunci la venta de este monte para el da 6 de abril. Su extensin monte era de 79 hectreas y 25 reas, pero en su interior los agricultores haban cultivado 11 hectreas y 25 reas, por lo que quedaban 68 hectreas de terreno pblico. el informe comenta: Ignoramos el fundamento legal de la posesin de estos enclava- dos consistentes en terrenos de cultivo accidental y temporero llamado a desaparecer para convertirse en yermos que sirven unos cuantos aos de barbecho y para utilizar los pastos sus poseedores... En la umbra hay hasta la base del cinto de peas que corona el monte seales de antiguos bancales hoy yermos. no haba arbolado y escaseaba el monte bajo. Finalmente salieron a subasta 70 hectreas, 10 reas, tasadas en 390 pesetas, pero adjudicadas por 1.000 pesetas tambin a Primo corts Brotons, quien 66 igualmente lo revendi a nales de ao a Juan Aquilina Torregrosa . Sin embargo estuvo poco tiempo en propiedad particular, pues el estado se incaut del monte por impago, publicndose en el Boletn Ocial de la Provincia de Alicante (BOPA) en el ao 1923 su adscripcin con carcter de pblico, con 62 Aunque constaba un monte Blanquizares de los charcos en las relaciones, no se debe corresponder con este Blanquizares, pues el primero sigue anotado como de Propios en la relacin de 1887, y este Blanquizares se vendi en 30 de marzo de 1886. 63 Arxiu de Montes, STCMA, caja 69. Alicante, 29 de febrero de 1928; Madrid 17 de febrero de 1928. 64 Archivo del registro de la Propiedad de elda, seccin Petrer, tomo 391, folio 9. 65 Archivo del Registro de la Propiedad de Elda, seccin Petrer, tomo 381, folio 203; tomo 847, folio 221. 66 Arxiu de Montes, STCMA, caja 69, Alt del Estrer y Peas del Seor, 15 de septiembre de 1883; Archivo del Registro de la Propiedad de elda, seccin Petrer, tomo 391, folio 18. 157 Sabina Asins Velis la indicacin de que estaba poblado de aulagas, su cabida era de 79 hectreas, 26 reas, y en su interior 67 haba tierras cultivadas de propiedad particular . Lomas del Palomaret el 29 de agosto de 1883 se inspeccionaron las Lomas del Palomaret. estos montes no estaban incluidos en el catlogo del ao 1862. Se consideraba el monte como de Propios del pueblo, aunque se ignoraba la razn de ello y el Ayuntamiento careca de titulo con que acreditarlo. En el informe se especica que en su permetro haba poco ms de 27 hectreas de cultivos de almendros, algarrobos y sembradura, es- tablecidos en las lneas de reunin de aguas y que era de temer que los colindantes hubieran ensanchado los predios invadiendo el monte pblico, cuya custodia ha dejado por lago plazo mucho que desear. Se ignoraba el fundamento legal de la posesin de estos enclavados que lo mismo pueden proceder de establecimientos concedidos de antiguo por el Real patrimonio o por el seor territorial, como de in- trusiones. Su vegetacin se compona de muy pocos pinos carrascos, y jarillas, coscoja y alguna atocha, todo muy escaso. En total la supercie de terreno pblico que quedaba era de 105 hectreas, 65 reas y 75 centireas. Al ser su extensin mayor de 100 hectreas podra ser exceptuado de la venta, segn la ley de 24 de mayo de 1863. Sin embargo, se estim que como el nmero de pinos era escaso y el terreno era susceptible de cultivo agrario permanente, podra evaluarse como enajenable, mxime cuando no estaba solicitado para comn aprovechamiento ni para dehesa boyal. Se le calcul un valor en venta de 4.000 68 pesetas, y una renta anual de 150 pesetas . Finalmente el monte las lomas del Palomaret fue vendido a Juan Aquilina de Alicante, pero por incumplimiento en el pago, el estado se incaut de nuevo de este monte, como as se public en el BOPA en el ao 1923, con una cabida de 133 hectreas, 51 reas, pero 69 indicando que haba enclavadas tierras cultivadas de propiedad particular . Cabecicos de Salinetas el monte cabecicos de Salinetas, de 45,6395 hectreas cubierto de leas, bojas y algn esparto perte- neca a los Bienes de Propios de Petrer hasta que sali a subasta el 30 de marzo de 1886, que remat el mdico Jos M Poveda Vidal quien traspas inmediatamente la mitad del monte al comerciante romn Pay Soria. El destino de este monte si que podramos calicarlo como de tpico dentro de lo que fue en otras zonas el proceso desamortizador. Segregado en dos ncas, fue roturado y aterrazado en pocos aos, y dedicado parte al cultivo de la via. En concreto en una de las ncas el rea de cultivo ocup 1,68 hectreas, dejando el resto inculto. Parte de la otra nca (que comprenda los Altos Redondo y Largo, los alticos de la boquera de Muda, y de los Algarrobos, entre otros) se dedic igualmente al cultivo de la via, sin especicar su extensin. Ambos compradores construyeron un camino de carro que partiendo de la carretera de Madrid llegaba, atravesando los montes, hasta la casa de cirilo Poveda, unindose al camino de las Salinetas. en el interior de los cabecicos se localizaban los llanos de la casa de cirilo, 70 cultivados y aterrazados . Monte Blanquizares los Blanquizares, de 38,43 hectreas a leas bajas con pastos y algunas atochas, fue justipreciado por 300 pesetas, y rematado en la subasta del 30 de marzo de 1886 en 1.545 pesetas por Gabriel Pay Pay. en 1887 y 1897 se segregaron 10 jornales (4,8 hectreas). las restantes pasa de 33 hectreas todava in- cultas fueron permutadas a Gabriel Poveda Poveda, propietario de Petrer, por el derecho a unas canteras en Poblet y Molino y la Pedrera (que deba compartir con Matas Bernab Pay los primeros diez aos), valorando tal derecho en igual suma de 1.500 pesetas. Gabriel Poveda comenz a segregar el monte de los Blanquizares en 1898 en extensiones de 4 y 8 jornales (1,92 y 3,84 hectreas respectivamente), que 71 fueron puestos en cultivo en bancales . 67 BOPA 200, de 8 de septiembre de 1923. 68 Arxiu de Montes, StcMA, caja 69, lomas del Palomaret, 29 de agosto de 1883. 69 BOPA 200, de 8 de septiembre de 1923. 70 Archivo del Registro de la Propiedad de Elda, seccin Petrer, tomo 381, ncas 4042 y 4044, folio 175. 71 Archivo del registro de la Propiedad de elda, seccin Petrer, tomo 391, folio 32. 158 Las repercusiones de las leyes desamortizadoras Monte Berbegala en 1883 el alcalde de Petrer recibi una carta para que procediera a la incautacin a nombre del estado de los terrenos del monte Berbegala, de 84 hectreas, que se haba declarado de Bienes de Propios del 72 pueblo . Al proceder a su subasta se declararon 108,93 hectreas, a pastos y atochas. Fue adquirido por Gabriel Pay Pay por 9.000 pesetas, aunque se haba tasado en 600 pesetas. Gabriel Pay pag en la subasta un primer plazo que corresponda al 10% del importe, y la hipoteca de 8.100 pesetas, que haba sobre la nca a favor del Estado, fue nalmente cancelada en el ao 1968, casi 80 aos despus de la compra. comenz a segregarlo a partir de 1889 en pequeas parcelas, como un montecito yesoso con algn pasto, o en el ao 1892, 4 jornales; en 1896 un jornal en una venta y 3 jornales en otra; en 1898 un 73 jornal; en 1899 siete jornales y tres jornales , y as hasta 1907, en que tambin se segreg una porcin 74 de terreno de 576 metros sobre la que en 1903 se haba construido una balsa . Puntales del Perri el Ayuntamiento haba declarado en 1880 una cabida de 53 hectreas, sin embargo salieron a subasta 108,93 hectreas a pastos, leas y espartos, dentro de las cuales haba plantadas vias y arbolado de propietarios particulares. el 30 de marzo de 1886 fueron rematados a favor de Juan Antonio Maestre Po- veda por 8.201 pesetas, superando con mucho las 900 pesetas en que haban sido tasados. en 1896 se se- gregaron 10 parcelas con una extensin cada una de 65 tahllas y (70,8966 hectreas en total), al igual 75 que en 1897, 1900 y 1923 en estas ocasiones una parcela cada ao, pero con la misma extensin . Monte Loma Bada Si bien constaba en la relacin de montes del Ayuntamiento en 105 hectreas (tabla i-5.5), este monte fue subastado con una extensin de 25,2228 hectreas a leas bajas con esparto, tambin el 30 de marzo de 1886, y rematado por Manuel Carratal Denia, quien a nales de ao lo traspas a Jos M Poveda Vidal y a romn Pay Soria. Se indica en el registro que la parte que pasaba a Poveda (11,28 hectreas) se encontraba todava inculta, pero en la que se quedaba romn Pay (13,93 hectreas) haba 6 tahllas 76 (0,72 hectreas) plantadas de via , que se disponan en bancales. tras todas estas ventas, el 15 de mayo de 1887 el Ayuntamiento realiz una nueva relacin de los mon- tes que quedaban de Bienes de Propios (tabla i-5.6), y aunque fue presentando montes que todava no haba declarado, seguan quedando otros que no se haran pblicos hasta el siglo XX. en esta relacin no consta ya la propiedad de algunos de los montes que guraban en la del ao 1880, como Atochar y calera y Alto de Portillo, de los que no hemos encontrado expedientes y que sumaban un total de 140 hectreas, que sin duda debieron salir a subasta. 72 AMP, l-47, carpeta 3 Hacienda, subcarpeta hacienda 6. 73 Archivo del Registro de la Propiedad de Elda, seccin Petrer, tomo 381, nca 3372, folio 170. Nos sorprendi la coincidencia entre las hectreas que salieron a subasta en Berbegala y Puntales del Perri, pero comprobado de nuevo en el Archivo se cons- tata la misma extensin para las dos ncas. Gentileza de Lorenzo Blanes del Registro de la Propiedad de Elda. 74 Archivo del Registro de la Propiedad de Elda, seccin Petrer, tomo 661, nca 4841, folio 146. 75 Archivo del Registro de la Propiedad de Elda, seccin Petrer, tomo 381, nca 3363, folio 119. Nos sorprendi la coincidencia entre las hectreas que salieron a subasta en Berbegala y Puntales del Perri, pero comprobado de nuevo en el Archivo se cons- tata la misma extensin para las dos ncas. Gentileza de Lorenzo Blanes del Registro de la Propiedad de Elda. 76 Archivo del Registro de la Propiedad de Elda, seccin Petrer, tomo 381, ncas 4041 y 4043, folio 184. 159 Sabina Asins Velis Tabla I-5.6. relacin de los montes de 15 de mayo de 1887 (Ayuntamiento y estado) (Fuente: AMP l-38(2)). DENOMINACIN CABIDA (hectreas) MONTES DEL AYUNTAMIENTO Alto de Crdenas 110 Almorchoneta 75 Guirney y Cabeza Roba 115 Tejera Vieja 25 Rabosa y Cantal del Moro 110 Humbria del Cochinet 100 Cantera 36 Poblet 96 Loma Rasa y Blanquizares de los Charcos 225 Alto del Cap 37 Forc y Llobera 18 Horteta 15 Alto de los Menores 20 Alto del Collado de la Hoya 28 TOTAL 1.010 MONTES DEL ESTADO Chaparral 720 Silla (del Cid) 680 Caballo 350 TOTAL 1.750 TOTAL MONTES DEL AYUNTAMIENTO Y DEL ESTADO 2.760 3.4. Montes subastados en 1892-1893 Puntal de la Costa cerca del Alto de Peret, el puntal de la costa tena una extensin de 36 hectreas, y no haba aparecido como de Bienes de Propios en ninguna de las relaciones que el Ayuntamiento haba presentado. con un valor en venta de 300 pesetas se subast el 31 de octubre de 1892, siendo rematado por 301 pesetas por Vicente Alcaraz daz, propietario vecino de Petrer, quien se lo vendi a Francisco Verd Maestre, comerciante de Petrer, en 1895 por un precio en el registro de 301 pesetas. las laderas y piedemonte de la costa se rotur a lo largo del siglo XX, y en sus terrazas se plantaron almendros y olivos, a excepcin 77 de 11,55 hectreas dedicadas a pinar maderable y matorral . Actualmente se le conoce por Altet de la costa. Monte Poblet y Molino Poblet y Molino, con 24,02 hectreas y escasos pastos, salieron a subasta por 620 pesetas el 11 de agos- to de 1892. Subasta que no pudo tener efecto por falta de licitadores, por lo que se convoc una nueva subasta el 5 de octubre de 1892 con un 25% de rebaja en la tasacin. Finalmente fue rematada por 600 pesetas por Gabriel Poveda Poveda, propietario de Petrer, quien la revendi en 1896 a Matas Bernab Pay, tambin propietario de Petrer. Gabriel Poveda se reserv el derecho a las canteras de estos montes y del de la Pedrera, y, como hemos visto, los permut a Gabriel Pay Pay por 33 hectreas en el monte 77 Archivo del registro de la Propiedad de elda, seccin Petrer, tomo 505, folio 94. 160 Las repercusiones de las leyes desamortizadoras 78 Blanquizares . no obstante, el comprador de estos montes tuvo derecho proindiviso con Gabriel Pay durante 10 aos para explotar las canteras. Monte Pedrera este monte, de 14,52 hectreas, lindante con la divisoria del trmino de Sax y con la va frrea por el oeste, consta que estaba compuesto de escasos pastos y de piedra para edicar de inferior calidad. Fue rematado el 5 de octubre de 1892 tambin por Gabriel Poveda Poveda en segunda subasta, al ser anula- da la primera por falta de licitadores. Se vendi nalmente por 3.400 pesetas, pero en 1897 lo vendi a 79 Matas Bernab Pay en las mismas condiciones de explotacin de las canteras que Poblet y Molino . Sierra del Caballo El Caballo no se inclua en las Clasicaciones de 1856 y 1859 ni en el Catlogo de Montes Pblicos de 1862. estaba compuesto de tomillos, timones, aliagas, bojas y otras hierbas aprovechables para el gana- 80 do, sin arbolado de ninguna clase. en 1866 se anunci la subasta de 254,3889 hectreas , que debi de quedar desierta porque la Sierra del caballo consta como de Montes del estado en la relacin que hizo el Ayuntamiento en 1887. Sin embargo vuelve a subastarse en 25 de febrero de 1892, por un total de 246,40 hectreas, tasadas en 2.925 pesetas, que remat Gonzalo Fernndez de crdoba e iranzo, abogado de Sax, por 5.000 pesetas. en 1897 fue ya vendido, y tras varias ventas ms, la ltima en 1994, contina en 81 propiedad particular excepto una parte que ha pasado a la diputacin de Alicante . Chaparrales del Cid Salieron a la venta una extensin de 650 hectreas (en lugar de las 720 que constan en la relacin del Ayun- tamiento de 1887), que remat el 8 de marzo de 1892 Vctor Ponte(i) castillo por 30.000 pesetas, quien 82 cedi del remate a Jos rico Amat, a Manuel Amat Soria, y a Oscar Porta Vicua . Un informe que se haba realizado en los chaparrales, en diciembre de 1880, describa que dentro de su permetro radica- ban 7,89 hectreas de tierras de cultivo aterrazadas. la propiedad de mayor extensin tena 1,63 hectreas y la de menor 0,03 hectreas, cuya posesin se bas, en su mayora, en autorizaciones concedidas por el municipio a determinados vecinos que solicitaban permiso para roturar. los bancales de toms Vilaplana y Molt estaban en su casi totalidad cultivados desde hacia muchos aos, pero se localizaron unas 0,05 83 hectreas, que haban sido roturadas haca muy poco tiempo . los cultivos se ubicaban en las pequeas hondonadas, y en el propio cauce de los barrancos, en series escalonadas de pequeos bancales realizados con sencillos muros transversales de mampostera en seco. en ellos se cultivaba cereal, y haba plantados almendros y algarrobos. en cuanto al estado de la vegetacin indicaba que slo se encontraron una media docena de ejemplares de Pinus halepensis de primera edad, situados en puntos difciles de ser alcanzados porque de lo contrario habrian sufrido seguramente la suerte de sus anes que dieron nombre al Rec de la pinata sea Rincn de los pinos y que junto con las chaparras, que debe el monte su denominacin, lo cubriran por completo. de esta ltima especie, Quercus coccifera, L. quedaban todava bastante ejem- plares, as como de madroos y algunos ejemplares de enebros y sabinas, tambin haba pastos y esparto. el monte de los chaparrales, segn el informe citado, se deba excluir de la venta, porque adems de ser impropio para el cultivo agrario y convenir su repoblacin a n de disminuir la virulencia de las aguas torrenciales desprendidas de tan speras vertientes, violencia atestiguada por los numerosos bancales destruidos en los cauces de los barrancos, forma parte muy esencial de la importante Sierra del Cid, enclavada en una zona completamente forestal, si bien la rapacidad ha hecho desaparecer en 84 su mayor parte las plantas maderables que en su dia la vistieron . 78 Archivo del registro de la Propiedad de elda, seccin Petrer, tomo 541, folio 216 y 221. 79 Archivo del registro de la Propiedad de elda, seccin Petrer, tomo 541, folio 221. 80 BOPA del 17 de febrero de 1866, citado por r. BelAndO cArBOnell, Realengo y Seoro... op. cit., p. 242, cuadro cXiX. 81 Archivo del registro de la Propiedad de elda, seccin Petrer, tomo 528, folio 144. 82 Archivo del registro de la Propiedad de elda, seccin Petrer, tomo 528, folio 144. 83 AMP, Actas Municipales, 12 de marzo de 1880. 84 Arxiu de Montes, StcMA, caja 69, Montes chaparrales, p. 6. Alicante 10 de diciembre de 1880. 161 Sabina Asins Velis Sin embargo, del monte Chaparrales salieron, como hemos visto, nalmente a la venta 650 hectreas en 1892. no obstante la extensin total del monte debi resultar mayor que la subastada pues en una relacin posterior consta que entre 1940 y 1943, Francisco Fajardo Milln posea 750 hectreas, Gabriel rico Prez, 172 hectreas y emilia Verd, 650 hectreas. stos dos ltimos las haban comprado a la Agencia ejecutiva de Petrel, porque el dueo anterior estaba en deuda con el Ayuntamiento. en 1943- 44 Gabriel rico Prez ofreci las 172 hectreas al Patrimonio Forestal del estado por 10.000 pesetas y Quintn Verd, en nombre de su hija, sus 650 hectreas; en el ao 1945 el Patrimonio Forestal del Estado compr a Francisco Fajardo Gallardo sus 750 hectreas, cubiertas de pinos y encinas, y un aljibe, por la cantidad de 16.000 pesetas. en un expediente del 4 de diciembre de 1969 consta como 725,87 hect- 85 reas . en la actualidad est transferido a la Generalitat Valenciana. Los Altos de Petrel en el informe se indica que este monte fue enajenado por la Administracin como consecuencia de las leyes desamortizadoras, sin que dispongamos de la fecha. en el Amillaramiento de 1900 estaba inscrito 86 a nombre de Vicente lpez Sirvent con 275 hectreas de secano a monte . Posteriormente fue anulada la venta por quiebra del comprador, continuando el predio con el carcter de pblico. Fue considerado impropio para el cultivo agrcola permanente, como lo comprueba el hecho de no haber sido roturado a pesar de haber estado varios aos abandonado y como un bien mostrenco, y susceptible de repobla- cin forestal ya que formaba parte de una importante zona forestal. la vegetacin que presentaba era tomillo, algo de esparto y coscoja. el anuncio por el que se atribua su pertenencia al estado se public 87 en el BOPA en el ao 1923 y transcurrido el plazo reglamentario sin presentarse ninguna reclamacin, procedi a incluirse, en 1925, en el catlogo de los de Utilidad Pblica de la Provincia de Alicante. la cabida total del monte era de 175,71 hectreas, pero la cabida forestal bajaba a 136,09 hectreas, pues 88 haba 39 hectreas, 62 reas ocupadas por cultivos . 3.5. Montes subastados en 1906 y 1919 Cabezo y Altets de la Rambla dels Chics (actualmente Altet dels Xiquets) en las relaciones de 1880 y 1887 consta como Alto de los Menores. Salieron a subasta 19,78 hectreas, en las que no exista vegetacin arbrea, ms que 15 pinos, carrascas viejas de escasas dimensiones y tomillo, romero, aliagas, y pastos escasos pero de buena calidad. dentro de su permetro haba un en- clavado de via de ricardo Prez Girones de 5 reas de extensin. el mejor postor, por 458,99 pesetas, fue el mismo ricardo Prez Girones, propietario, diputado provincial, y vecino de castalla y padre de 89 ricardo Prez lassaleta, quien hered la propiedad . Monte Horteta en las relaciones de 1880 y 1887 constaban 15 hectreas, sin embargo salieron a subasta 9,26, que rema- t el 28 de julio de 1919 constantino rico Pay, propietario de Petrer, por 125 pesetas (tabla i-5.7). 85 Arxiu de Montes, StcMA, caja 69. 86 AMP, 46(3). Amillaramiento de 1900, forasteros. 87 BOPA 200, de 8 de septiembre de 1923. 88 Arxiu de Montes, StcMA, caja 69, 17 de octubre y 19 de septiembre de 1925. 89 Archivo del registro de la Propiedad de elda, seccin Petrer, tomo 667, folio 40. 162 Las repercusiones de las leyes desamortizadoras Tabla I-5.7. resumen de los montes vendidos entre 1861 y 1919, con fecha de venta conocida CABIDA Hectreas VENDIDOS DENOMINACIN COMPRADOR (hectreas) vendidas Ao 1861 Pea de las Montesas Sociedad de los Montes de Petrel 260 rullo (rubio) y Arenal Sociedad de los Montes de Petrel 670 Altos del colegial Sociedad de los Montes de Petrel 12 Altos de Peret Sociedad de los Montes de Petrel 21 castellarets Sociedad de los Montes de Petrel 76 loma Gorda Sociedad de los Montes de Petrel 84+4= 88 Ginebre Sociedad de los Montes de Petrel 81 llop Sociedad de los Montes de Petrel 80+257= 337 Solana de (Al)Matar Sociedad de los Montes de Petrel 48+9= 57 Alto de cascales Sociedad de los Montes de Petrel 350 Ferrusa Sociedad de los Montes de Petrel 46 TOTAL 1.998 Aos 1878-1879 Solana del Fraile Francisco Manuel Verd rico 63 collado de Amors ramn Maestre rico 57 (del estado) TOTAL 120 Aos 1885-1886 Altos de la casa del Gabriel Pay Pay 36,3 cid Alt del estret Primo corts Brotons (de Agost) 56 Peas del Seor Primo corts Brotons (de Agost) 68 lomas del Palomaret Juan Aquilina torregrosa (Alicante) 105,65 cabecicos de Salinetas Jos M Poveda Vidal 45,63 Berbegala Gabriel Pay Pay 108,93 Puntales del Perri Juan Antonio Maestre Poveda 108,93 Blanquizares Gabriel Pay Pay 38,43 loma Bada Manuel carratal denia 25,22 Atochar y Calera 40 Alto de Portillo 100 TOTAL 733,09 Aos 1892-1893 Puntal de la costa Vicente Alcaraz daz 36 Poblet y Molino Gabriel Poveda Poveda 24,02 Pedrera Gabriel Poveda Poveda 14,52 Sierra del caballo Gonzalo Fernndez de crdoba e 246,4 (del estado) iranzo (de Sax) chaparrales del cid Vctor Ponte(i) castillo 650 (del estado) TOTAL 970,94 No consta fecha de venta Altos de Petrel Vicente lpez Sirvent 275 275,00 (antes de 1900) 163 Sabina Asins Velis CABIDA Hectreas VENDIDOS DENOMINACIN COMPRADOR (hectreas) vendidas Aos 1906 y 1919 cabezo y Altets de la ricardo Prez Girons 19,78 rambla dels chics (de castalla) Horteta constantino rico Pay 9,26 TOTAL 29,04 TOTAL VENDIDOS 4.126,07 3.6. Evolucin de otros Montes del Ayuntamiento de los que no consta fecha de venta Rabosa y Cantal del Moro de este monte, de 110 hectreas, poblado de Pinus halepensis en 1923, nicamente consta su fecha de inscripcin como monte de carcter pblico, publicada en el BOPA en 1923, por lo que pudo haberse 90 vendido e incautado posteriormente por impago . Adems, en la relacin de 1887 se incluan otros montes pertenecientes a los Bienes de Propios de Petrer de los que no conocemos ni los compradores ni las fechas de subasta (tabla i-5.8), pero que se vendieron porque a da de hoy slo es monte pblico rabosa y cantal del Moro. Tabla I-5.8. Montes de los Bienes de Propios de Petrer en 1887 que se vendieron sin que conozcamos fecha de subasta ni el comprador Hectreas VENDIDOS DENOMINACIN vendidas No consta fecha de venta ni comprador Almorchoneta 75 Guirney y cabeza roba 115 tejera Vieja 25 cantera 36 rabosa y cantal del Moro 110 * loma rasa y Blanquizares de los charcos 225 Alto del cap 37 Forc y llobera 18 Alto del collado de la Hoya 28 TOTAL 669,00 en total suman 669 hectreas que junto a las 4.126,07 hectreas de la tabla resumen anterior, nos aportan el total general que fue subastado desde nales del siglo XIX hasta principios del siglo XX: 4.795,07 hectreas (tabla i-5.9), parte de las cuales, como hemos visto y veremos tambin a continuacin, vol- vieron con el tiempo a ser de titularidad pblica. 90 BOPA 200, de 8 de septiembre de 1923. * este Blanquizares de los charcos no se corresponde con el monte los Blanquizares, de 38,43 hectreas, que fue rematado en la subasta del 30 de marzo de 1886 por Gabriel Pay Pay (Archivo del registro de la Propiedad de elda, seccin Petrer, tomo 391, folio 32). 164 Las repercusiones de las leyes desamortizadoras Tabla I-5.9. total de montes subastados entre 1861 y 1919 MONTES VENDIDOS EXTENSIN Con nombre de comprador 4.126,07 Sin constar su venta 669,00 TOTAL VENDIDO 4.795,07 Finalmente constan la Sierra del cid, el Puntal de la Horadada y chimenea, el Alto de los Morenitos y la Silla del cid (tabla i-5.10), en los que los expedientes son algo confusos, pero que en la actualidad perte- necen bien al Ayuntamiento de Petrer, bien fueron transferidos por el estado a la Generalitat Valenciana. Sierra del Cid 91 el Monte cid, de 561,2752 hectreas sali a la venta en 1866 . Sabemos que en 1943 el estado haba comprado en la Sierra del Cid la nca de Luis Garca Paya (de 8 hectreas, llamada Rincn de Rafael, 92 en donde en 1880 haba bancales cultivados e incultos pertenecientes a Juan Jos Garca ), en 1944 la de remedios rico (de 3 hectreas) y Vicente Garca Paya (de 1 hectrea), y en 1958 la Finca rovira (3,8432 hectreas). Igualmente se aceptaron donaciones, como la de Amalia Franzes Poveda, con el n de que su tierra fuera repoblada. el rincn de Benisa, en las cercanas del cid, tambin fue comprado en el ao 1959 por parte del Patrimonio Forestal del estado. como curiosidad anotamos que en 1871 nos 93 aparece citado por vez primera el topnimo Pen de la Mama de la Sierra del cid . Puntal de la Horadada y Chimenea como hemos comentado anteriormente, el Ayuntamiento no declar en un principio todos los montes p- blicos, que fueron posteriormente inscritos. es el caso del Puntal de la Horadada y chimenea. en el Boletn Ocial de la Provincia de Alicante de 19 de diciembre de 1934 (n 298), se reconoce Las Chimeneas como de pertenencia al estado, con una cabida de 5 hectreas poblado con Pinus halepensis. en el Boletn del da siguiente (n 299) consta la tambin pertenencia al estado del Puntal de la Horadada, con una cabida forestal 20 hectreas y cubierto tambin de Pinus halepensis. Se indica que ambos montes son colindantes entre s, por lo que forman una unidad, que es declarada en el ao 2004 de utilidad pblica e incluida en el catlogo 94 de Montes de Utilidad Pblica de la provincia de Alicante, con una supercie de 25,9711 hectreas . Alto de los Morenitos con una cabida de 21,72 hectreas pertenece al estado sin que se pueda precisar desde cundo. en el ao 1960-61 se le denominaba monte Fenollar, y se adjudic la explotacin de dos canteras. en 1962-63 se efectu aprovechamiento de pastos como monte del estado. Se da la circunstancia que en este monte fue multado, en 1960-61, eduardo Args lillo, por roturacin arbitraria en el monte, siendo la ltima denuncia de que tengamos noticia en el pueblo de Petrer por aterrazamientos ilegales. en el ao 1979 se propuso su declaracin de Utilidad Pblica del Monte, que naliz con la publicacin en el DOGV de 95 19 de junio de 1987, pero con una supercie pblica de 0,34 hectreas, de aliagas, romero y tomillo . Silla del Cid el expediente de Silla del cid es tambin confuso. Por un lado, en el catlogo de Montes de Utilidad P- 96 blica del ao 1859 se denominaba El Cid y constaba de una supercie de 685 hectreas , prcticamente 91 BOPA, del 17 de febrero de 1866, citado por r. BelAndO cArBOnell, Realengo y Seoro... op. cit., p. 242, cuadro cXiX. 92 AMP, Actas Municipales, 12 de marzo de 1880. 93 AMP, 51/1, deslinde de trminos Petrer/Monforte, ao 1889, con referencia a 1871. 94 Arxiu de Montes, STCMA, Caja 71, y Diario Ocial de la Generalitat Valenciana de 25 de mayo de 2004 (n 4760). 95 Arxiu de Montes, StcMA, caja 80. 96 c. MOntiel MOlinA, Los montes de utilidad pblica& op. cit., p. 265. 165 Sabina Asins Velis las mismas que en la relacin de montes de 28 de julio y 21 de agosto de 1880 y en la de 15 de mayo de 1887 (tablas i-5.5 y i-5.6) en donde constan 680 hectreas de extensin. Sin embargo, ms tarde, en el Catlogo de Montes de Utilidad Pblica del ao de 1901 ya bajo la denominacin de Silla del Cid gura 97 con una supercie de 582 hectreas , al igual que se indica en el registro de la Propiedad de elda. de esas 582 hectreas le quedaban al estado 545 hectreas, por lo que suponemos que haba enclavados de cultivo dentro de su permetro. Se especica que haba algunas matas de encinas, escaso monte bajo y algunos pinos aislados. Su aprovechamiento era para pastos y leas, y estaba valorado en 2.725 pesetas. Se inscribi a nombre del Estado el da 6 de septiembre de 1922, quien lo transri a la Generalitat Va- 98 lenciana el 15 de enero de 1985 . Tabla I-5.10. Montes que no se vendieron y que bien se quedaron en manos del Ayuntamiento, bien pasaron al estado y han sido transferidos a la Generalitat Valenciana TITULARIDAD DENOMINACIN HECTREAS MONTES DEL AYUNTAMIENTO * Alto de crdenas 155,39 Humbra del cochinet 100,00 MONTES DEL ESTADO Puntal de la Horadada y chimenea 25,97 Alto de los Morenitos 0,34 Silla del cid 545,00 TOTAL PROTEGIDOS 826,70 el estudio detallado de los expedientes de venta localizados y la documentacin del registro de la Propiedad de elda nos permite suponer que el total de Bienes de Propios del Ayuntamiento, antes de comenzar los procesos de desamortizacin, deba de ser cercano a 5.621,77 hectreas, si consideramos las 4.795,07 hectreas que se vendieron y las 826,70 hectreas que no salieron a subasta, lo que implica que desde 1861 a 1919 se vendi nalmente el 85,29% de stos. como veremos en el apartado siguiente, los montes que fueron vendidos a particulares corrieron dis- tinta suerte, siendo mantenidos unos como zonas de bosque o matorral, y dedicndose al cultivo otros, que se dispusieron en terrazas tanto en los piedemonte como en las laderas de los montes. Parte de los que se mantuvieron o pasaron a nombre del estado se repoblaron, segn un informe del ao 1953, como fue el caso de zonas de las laderas de los montes Silla del cid, chaparrales del cid, los Altos, Peas del Seor, Palomaret y esquena del Gos, e iban a ser sometidas a repoblacin Sierra del cid y clot del Llop, y nalmente La Chau, que en su mayora estaba cubierta de encinar, encinar que se estaba regene- 99 rando por medio de cortes y el aprovechamiento consiguiente . desde entonces han sido numerosas las actuaciones de repoblacin que se han llevado a cabo en los montes pblicos, algunas con ms fortuna que otras dependiendo de la tcnica empleada y de las especies elegidas. A estos montes de propiedad pblica se han ido sumando con el tiempo otras adquisiciones por parte de distintos organismos de la administracin autonmica o nacional (tabla i-5.11), lo que ha permitido que en el ao 2006 sean de titularidad pblica un total de 4.347,34 hectreas, cantidad superior en un 52,86% a las 2.844 hectreas que haban sido declaradas como de titularidad pblica en 1887, pero en realidad un 9,33% inferior a los Bienes de Propios que se vendieron hasta el ao 1919, en total 4.795,07 hectreas, una vez el Ayuntamiento fue haciendo pblicas las ocultaciones de los primeros aos. en la 97 c. MOntiel MOlinA, Los montes de utilidad pblica& op. cit., p. 265. 98 Archivo del Registro de la Propiedad de Elda, seccin Petrer, tomo 781, folio 40, nca 5320. * Arxiu de Montes, StcMA, caja 36, carpeta 1. informacin pblica BOPA 284, de 15 de diciembre de 1924 y deslinde en BOPA 8 de agosto de 1962. en un informe del ao 1924 se sigue reseando como de los Propios del pueblo de Petrer con una cabida forestal de 155,39 hectreas, cantidad superior a las 110 hectreas que se anotaron en el ao 1887. 99 Arxiu de Montes, StcMA, caja 69. Alicante, 31 de diciembre de 1953. 166 Las repercusiones de las leyes desamortizadoras 100 actualidad, amparndose en la ley de Ordenacin del territorio y Proteccin del Paisaje , la Generali- tat Valenciana ha declarado Paisaje Protegido el conjunto que forman las montaas del Maigm, despe- ador, l Arguenya, Sierra de castalla y los montes de Petrer conocidos como el cid, Sierra del Fraile y Sierra del caballo, por un total de 13.768 hectreas. entre ellas se incluyen 6.500 hectreas de las 10.420 101 con que cuenta el trmino de Petrer . en estas 6.500 hectreas se enclavan algunos de los montes que ya son de propiedad pblica, pero se incorporan tambin otros parajes del trmino que no estaban prote- gidos, por lo que se asegurar el mantenimiento del valor agrcola, ecolgico, cultural y paisajstico de una parte muy importante del territorio de Petrer, equivalente a un 62,38% de su total. 102 Tabla I-5.11. distribucin de los montes de titularidad pblica de Petrer en el ao 2006 PROPIEDAD DENOMINACION HECTREAS * GENERALITAT VALENCIANA cOnJUntO MOnteS del cid: 1.872,54 ** Ventetas Silla del cid lomas del Palomaret Peas del Seor chaparrales del cid Alto de los Morenitos 0,34 Puntal de la Horadada y chimeneas 25,97 TOTAL 1.898,85 AJUNTAMENT DE PETRER Ferrusa Parte de l Alt de crdenes cotxinets Umbra de Marcos (campamento de caprala) caminos vecinales (unas 800 hectreas) TOTAL 1.281,00 GERENCIA DE INFRAESTRUCTURAS Y EQUIPAMIENTOS, MINISTERIO DE clot del llop 440,00 DEFENSA TOTAL 440,00 DIPUTACIN DE ALICANTE navayol 126,05 calafate 279,47 casa cancio 49,21 la Forad 18,02 clot de les Manyes 87,87 catxuli 166,87 TOTAL 727,49 TOTAL DE TITULARIDAD PBLICA 4.347,34 4. La supercie cultivada en el siglo XIX 4.1. Las leyes que autorizaban nuevas roturaciones Simultneamente a la redaccin de las leyes que abolan los seoros, que incidan tanto en la organi- zacin social como econmica de las villas, durante el siglo XiX se produjo una importante actividad legislativa relativa al acceso a la tierra, con intensidad creciente a partir de su segunda mitad (tabla 100 GenerAlitAt VAlenciAnA, 2004a, ley 4/2004 de 30 de junio. 101 GenerAlitAt VAlenciAnA, 2007a, conselleria de territorio y Vivienda. decreto 25/2007, de 23 de febrero, del consell, de declaracin del Paisaje Protegido de la Serra del Maigm y Serra del Sit. dOcV, nm. 5.325, de 27 de febrero de 2007. 102 Informacin facilitada por D. Luis Villaplana de la Ocina del Catastro del Ayuntamiento de Petrer. * informacin facilitada por d. Juan Giner, Servicios territoriales de la conselleria de Medio Ambiente, Alicante. ** expediente de declaracin de utilidad pblica, 214,50 hectreas, BOPA 15-06-1976, nmero 134. 167 Sabina Asins Velis i-5.12). las suertes de terrenos baldos, realengos, comunes, propios y arbitrios que, como hemos visto, se repartieron legalmente atendiendo a la real provisin de carlos iii, de fecha 26 de mayo de 1770, se mantuvieron como propiedades particulares. Por real orden de 31 de diciembre de 1800, carlos iV decretaba que siempre que acreditaran su propiedad, los dueos de los terrenos que por desidia u otros motivos se hubiesen cubierto de monte bajo podran volver a cultivarlos, conservando algunos rboles para el surtido de leas. respecto a rompimientos de terrenos baldos cubiertos de monte bajo, donde no existieran rboles, se observaran las leyes y reales rdenes comunicadas por la Marina: porque as como en el trmino de unos pueblos convendr dar extensin a la agricultura por la escasez de tierras y la abundancia de montes, en otros, donde fueren muchas las labores y pocos 103 los montes, ser preciso criarlos y fomentarlos . el 4 de enero de 1813, las cortes generales y extraordinarias, considerando que con la reduccin de los terrenos comunes a dominio particular se fomentaba la agricultura e industria, queriendo adems pre- miar a los defensores de la patria y dar socorro a los ciudadanos no propietarios, decretaron que todos los terrenos baldos o realengos, y de propios y arbitrios, con arbolado y sin l, excepto los ejidos ne- cesarios a los pueblos, se reduciran a propiedad particular. las cortes, a propuesta de las diputaciones provinciales, aprobaran la forma de compensar los rendimientos anuales de los Propios y Arbitrios de los pueblos. la venta de estos terrenos se realizara preferentemente a los vecinos de los pueblos en los que stos radicaran, en plena propiedad, pero sin poder vincularlos, ni pasarlos a manos muertas. Se re- servaba la mitad de los baldos y realengos de la Monarqua, exceptuando los ejidos, para que sirvieran de hipoteca al pago de la deuda nacional, y seran las diputaciones provinciales quienes propondran los terrenos que era indispensable conservar en los pueblos. Adems se conceda gratuitamente una pequea suerte (premio patritico) a los militares de menor graduacin que hubieran participado en la guerra, de soldado a capitn, procurando que su extensin fuera tal que cultivada regularmente bastara para la manutencin de un individuo. Por otro lado, de los baldos y realengos se dara gratuitamente una suerte en plena propiedad a los vecinos que no tuvieran tierras, que no podran vender antes de cuatro aos ni dejar que pasaran a manos muertas, y estaran 104 exentos durante ocho aos de las contribuciones sobre las tierras o sus productos . esta disposicin fue derogada por real cdula de 8 de julio de 1814. el 5 de agosto de 1818, Fernando Vii design la venta de los baldos y realengos, que contribuyesen al fomento de la agricultura, para el pago de rditos y amortizacin de la deuda pblica, y promulg la real cdula de 21 de diciembre de 1818 que rescinda la venta de los baldos y comunes hecha du- rante la invasin francesa. igualmente, por la real cdula de 22 de julio de 1819, se dispuso que deba entenderse por terrenos arbitrados y apropiados, para el efecto de eximirse de la venta, aquellos que lo hubiesen sido con autoridad de Fernando VII, de sus predecesores, o del Consejo Real; y bajo el de bal- dos de aprovechamiento comn de los pueblos los que estos necesitasen para sus ganados propios, y no forasteros, a no ser que tuvieran comunidad de pastos; y se incluan tambin los que se necesitaban para sembrar, conservando la alternativa de ao y vez, y para cortar madera o lea para su uso. Se estipulaba adems que se conservaran para los ganados trashumantes los pastos que necesitasen cerca de las caa- das, abrevaderos y descansaderos, y, los que no, se venderan. Se comprendan tambin en la venta los despoblados; y para fomento de la poblacin y agricultura, Fernando VII concedera ttulo de barn a quien comprara suertes de tierra suciente para establecer a quince colonos, pero especicando que sin jurisdiccin ni otro derecho exclusivo, que no procediera de arrendamiento u otro contrato. Se detalla que se deba hacer un expediente por cada pueblo, en el que se comprendera el reparti- miento de suertes a los braceros y labradores con yunta, sin bienes races sucientes, de la misma forma 103 novsima recopilacin de las leyes de espaa,& op. cit., libro Vii, ttulo XXiV, de los Montes y Plantos, su conserva- cin y aumento. ley XXVii de carlos iV, por real orden circular de 31 de diciembre de 1800. 104 coleccin de los decretos y rdenes que han expedido las cortes generales y extraordinarias desde 24 de mayo de 1812 hasta 24 de febrero de 1813. tomo iii. Madrid: imprenta nacional, ao de 1820, pp. 189-193: decreto ccXiV, de 4 de enero de 1813: Sobre reducir los baldos y otros terrenos comunes a dominio particular: suertes concedidas a los defensores de la patria y a los ciudadanos no propietarios. 168 Las repercusiones de las leyes desamortizadoras en que se repartan las tierras de Propios conforme a lo dispuesto en la real provisin de 26 de mayo de 1770. Se nombraran dos peritos, uno por el comisionado del intendente y otro por el Ayuntamiento, quienes tasaran la cabida y precio de los terrenos enajenables. tras un anuncio pblico de 30 das se procedera a la subasta. A continuacin se rematara entre los braceros y labradores con yunta; en defecto de los cuales se admitiran los vecinos de mayores facultades, y, si estos no bastasen, los comuneros, y en ltimo lugar los forasteros. el remate deba ser forzosamente por el precio de la tasacin, sin que 105 bastasen las dos terceras partes . el mes siguiente, a 31 de agosto de 1819, se public un nuevo real decreto por el que Fernando Vii favoreca a las provincias, corporaciones o particulares que emprendieran rompimientos de terrenos incultos y la construccin de nuevos canales de riego. A los roturadores de terrenos incultos, que los redujeran a cultivo estable y permanente, les conceda la exencin de diezmo y primicia en las cuatro primeras cosechas, ya se cogieran stas en cuatro u ocho aos, siempre que los sembraran de granos u otros frutos de los que concluan la vegetacin en solo un ao. la misma exencin gozaran quienes plantaran arbolado en los terrenos nuevamente roturados; pero en este caso comenzara a contarse: en el planto de vid, concluido el sptimo ao de su plantacin; en los de olivo y algarrobo, cumplido el vein- te; y en el de morera, al duodcimo; reservndose dictar las reglas para otra clase de rboles o arbustos si se justicaba la necesidad de su fomento. La Direccin del Crdito Pblico, a quien estaban consignados los diezmos de los nuevos rompimientos y la mitad del aumento en los de nuevo regado, se encargara 106 de averiguar los roturaciones que se hubieran hecho despus del 30 de agosto de 1800 . restablecido en 1820 el rgimen constitucional, se orden nuevamente el repartimiento de baldos por las rdenes de las cortes de 8 de noviembre de 1820, 29 de julio de 1821 y 29 de junio de 1822. esta ltima mand reducir a propiedad particular todos los terrenos baldos y realengos, exceptuando los de las cuatro sierras nevadas de Segovia, len, cuenca y Soria y los ejidos necesarios a los pueblos. coincidiendo con esta legislacin, hemos localizado los registros notariales de varios establecimientos del Ayuntamiento cons- titucional de novelda a vecinos de la localidad, en 1822. Se observa un cambio en la frmula de los registros con respecto a los que se concedieron en Petrer en el siglo XViii. en el caso de estas nuevas roturaciones se indica que el Ayuntamiento constitucional conceda los establecimientos para aumentar el patrimonio de quien lo solicitaba y la riqueza nacional. los interesados deban manifestar al Ayuntamiento si el terreno era ms adecuado para cultivar que para montes. el Ayuntamiento, una vez estudiada la propuesta, conceda el es- tablecimiento con la expresa obligacin por parte del roturador de tener que satisfacer anualmente las cargas 107 y contribuciones nacionales y todas aquellas a que estaban sujetas las tierras de dominio particular . estas disposiciones se anularon con la restauracin del gobierno absoluto de Fernando Vii en 1823, quien dict la real orden de 4 de febrero de 1824 y la real orden de 24 de febrero de 1826, por la que in- dultaba a los que haban hecho roturaciones en la poca constitucional (a la sombra de las revoluciones pa- sadas), con arreglo a la orden de 1 de julio de 1824, y a los que las vericaron antes en montes pblicos sin legtima facultad para ello; pero con la condicin de que deba conservarse el arbolado existente, que deba tenerse por de los Propios o del comn, sin perjuicio de que los indultados pagasen las costas procesales, arreglndose a la ordenanza en cuanto a las roturas hechas desde 1 de agosto de 1823, y dando aviso a la Direccin general de Propios de dichas roturas, para que si correspondiesen a estos los terrenos, je el 108 canon que deban pagar los que los posean y hayan hecho hasta el citado 1 de agosto de 1823 . tras la restauracin del rey Fernando Vii, en Petrer se nombr un Fiscal de Montes y Plantos de la 109 Villa y su trmino . en el Ayuntamiento de la localidad se reciba la orden del da 6 de abril de 1827 por la que se mandaban pagar cnones a los roturadores de terrenos indultados por reales rdenes cir- 105 F. MARTN DE BALMASEDA Decretos del Rey Don Fernando VII. Se reeren a todas las reales resoluciones generales que se han expedido por los diferentes ministerios y consejos en todo el ao de 1819. tomo Sexto. Madrid: imprenta real, ao 1820. 106 Decretos del Rey Don Fernando VII. Se reeren a todas las reales resoluciones generales que se han expedido por los di- ferentes ministerios y consejos en todo el ao de 1819. Por don Fermn Martn de Balmaseda. tomo Sexto. Madrid: imprenta real, ao de 1820. Pag. 340-345 107 APM, seccin Petrer, ao 1822, 8 de julio. 108 decretos del rey nuestro seor don Fernando Vii. Por don Josef Mara de nieva, tomo 11. Madrid: imprenta real, ao 1827. 109 AMP, 39/1, hoja suelta de 5 de febrero de 1825. 169 Sabina Asins Velis culadas, en 18 de septiembre de 1826, por la Direccin General de los Propios del Reyno; y la de 29 de agosto de 1828, por la que el rey ordenaba que los almendros plantados en terrenos que no se hubieran roturado haca 30 aos gozaran la exencin de pagar diezmo las cuatro primeras cosechas, empezndo- 110 se a contar este privilegio despus de concluido el sptimo ao de su plantacin . nuevamente, en 18 de mayo de 1837, se public una real orden incluyendo un decreto de las cortes que volva a aclarar la situacin en que se encontraban los terrenos roturados: Las Cortes han resuelto que a los labradores, senareros y braceros del campo, a quienes por disposicin de la circular del consejo de Castilla de 26 de mayo de 1770 se repartieron en suerte terrenos de propios, en los que por declaraciones posteriores han sucedido sus descendientes, pagando canon como si hubiese sido un verdadero enteusis, no se les inquiete en su posesin y disfrute, que lo mismo se entienda con los terrenos repartidos bajo las mismas reglas durante la guerra de la independencia por disposicin de los ayuntamientos o de las juntas con los que lo fueron por lo dispositivo del decreto de las Cortes de 4 de enero de 1813 en las dos pocas que ha regido; con los que hasta el da se han distribuido con orden superior competente; y nalmente, que de los arbitrariamente roturados, siempre que los hayan mejorado, plantndolos de viedo o arbolado, se conserve a sus tenedores en la posesin, pagando el canon de 2 por 100 del valor 111 de aquellos antes de recibir la mejora . la observancia de esta orden fue reglamentada de nuevo por la real orden de 4 de febrero de 1841 y por la real orden de 5 de octubre de 1843, que resolva que la cesin de tierras baldas, deseando asegurar las ventajas que deriva el estado de las mencionadas enajenaciones, quedaba reservada al Gobierno, 112 bajo el canon correspondiente . Unos aos ms tarde, por la ley de 6 de mayo de 1855 se regularizaba la propiedad de los po- seedores de terrenos baldos, realengos, comunes, propios y arbitrios repartidos con anterioridad y la de las roturaciones arbitrarias de los mismos. las cortes decretaban, e isabel ii sancionaba, que eran de propiedad particular las suertes que de terrenos baldos, realengos, comunes, propios y arbitrios se repartieron con las formalidades prescritas en la real provisin de 26 de mayo de 1770 y decreto de las cortes de 4 de enero de 1813, 29 de junio de 1822, 18 de mayo de 1837, y las que bajo las mismas reglas se repartieron tambin por los ayuntamientos y juntas durante la Guerra de la independencia. Adems se reconoca que haban continuado las roturaciones arbi- trarias, por lo que deban pagar un recargo proporcional por el terreno agregado. A quienes care- cieran del ttulo de adquisicin que vlidamente se les reparti les sera otorgado por los ayun- tamientos respectivos, haciendo constar en el ttulo el canon bajo el cual se hizo la concesin. Y a los que deban legitimarlos por la presente ley, se les otorgaran tambin las correspondientes escrituras, despus que el expediente instructivo obtuviera la aprobacin de las diputaciones provinciales. el canon a que se sujetaban estas fincas se ajustara a lo que se estableciera en la ley de desamortizacin general. como en siglos anteriores, en ningn caso se legitimaran las roturaciones hechas en los ejidos de los pueblos, caminos, caadas, veredas, pasos, abrevaderos 113 y dems servidumbres . esta ley se complement con la posterior Orden de 30 de junio de 1862 por la que se indicaba que no se instruira por los ayuntamientos expediente alguno que versase sobre roturaciones o repartimientos 110 AMP, caja 37, Mano de rdenes recibidas en 1827 y AMP, caja 37, rdenes recibidas en 1828. 111 Coleccin de las leyes, decretos y declaraciones de las Cortes y de los Reales Decretos desde el 1 de enero hasta n de junio de 1837. tomo XXii. Madrid: imprenta nacional, ao 1837.18 de mayo de 1837: real orden incluyendo un decreto de las cortes que favorece en la posesin de los terrenos repartidos de propios en distintas pocas a los labradores y braceros. 112 coleccin de las leyes, decretos y declaraciones de las cortes, y de los reales decretos, rdenes, resoluciones y reglamentos generales expedidos por los respectivos ministerios desde 1 de julio hasta n de diciembre de 1843. Tomo XXXI. Madrid: imprenta nacional, ao 1844. 113 Boletn de jurisprudencia y administracin. tomo i. Madrid, pp. 204-205. 6 de mayo de 1855, ley sobre repartimiento de propios y comunes. 170 Las repercusiones de las leyes desamortizadoras 114 vericados con posterioridad al decreto de las Cortes de 18 de mayo de 1837 . Por la real orden de 4 de noviembre de 1862, ante el importante nmero de expedientes que todava se instruan en solicitud de legitimacin de repartimientos o roturaciones arbitrarias de bienes de propios, se regulaban las normas a seguir con el n de acreditar la poca de las roturaciones, la extensin, deslinde y valor en venta y renta. Por la orden de 2 de diciembre de 1863 se especicaba que los Jueces de primera instancia instruiran 115 los expedientes para reconocer la propiedad de estos terrenos . el real decreto de 10 de julio de 1865 conceda un plazo de seis meses a los poseedores de terrenos roturados (de propios, comunes, baldos, realengos, ejidos y dems con ese carcter) que todava no hubieran tramitado el ttulo de adquisicin, disponiendo que se entendera que quienes no lo hicieran haban renunciado a su derecho, por lo que sus terrenos quedaran sujetos a la ley desamortizadora. las informaciones de testigos se deban hacer ante Jueces de primera instancia, si la legitimacin versaba sobre terrenos del Estado, cuyo canon deba pagarse a la Hacienda pblica; y ante el alcalde y el secre- tario con audiencia del sndico, en representacin de los derechos comunales del pueblo, si los terrenos 116 eran bienes de propios o comunes de los pueblos . Por la orden de 30 de agosto de 1871 se regulaba que los expedientes que todava no haban sido resueltos por el Ministerio de la Gobernacin se remitiran a los gobernadores de las provincias para que los pasasen a las diputaciones provinciales, en donde se 117 acordara lo que se estimase procedente . la ley de Presupuestos de 5 de agosto de 1893, en su artculo 42, y el real decreto de 29 de agosto de 1893, establecan con respecto a los terrenos del estado arbitrariamente roturados que en ningn caso podra adjudicarse a cada individuo una extensin de terreno mayor de 10 hectreas, aunque fuere superior la solicitada y cultivada. la adjudicacin se hara mediante un canon, pagadero durante diez aos, del 6% del valor actual de la nca adjudicada. La Real orden de 26 de enero de 1894 prohibi que se admitieran nuevas solicitudes de legitimacin de terrenos baldos, realengos, comunes, propios y arbitrios. Sin embargo, posteriormente, por el artculo 7 de la ley de 10 de junio de 1897, y la real orden de 25 de junio de ese ao, se concedi a los poseedores de terrenos arenales de zonas martimas, pantanos desecados, etc., y a los roturadores de terrenos del estado o de Propios y comunes de los pueblos que ca- recieran de ttulo, el derecho a legitimar su posesin siempre que los estuvieran cultivando desde haca diez aos. como precio de esta legitimacin se impuso a los poseedores el canon de un 6% sobre el 40% del valor de los terrenos. Por real orden de 27 de agosto de 1897 se declararon no comprendidos en las prescripciones del 25 de junio, los predios exceptuados de la desamortizacin en concepto de utilidad pblica. el real decreto slo era de aplicacin a los montes y dems terrenos declarados enajenables (incidira de nuevo en ello el art. 18 de la r.O. de 19 de septiembre de 1900). el Ministerio de Gracia y Justicia expidi, en 28 de octubre de 1897, una real orden indicando que las inscripciones de estas ncas deban hacerse en el Registro de la Propiedad. El carcter de estos terrenos se especicaba en la real orden de 5 de enero de 1899. A principios del siglo XX, eran todava numerosos los roturadores de terrenos que no haban visto reconocido su derecho a la propiedad, como as se recoge en el texto que reproducimos: Por lo dems, que debera facilitarse de nuevo la legitimacin de las roturaciones as anteriores (cuyos poseedores no se hayan acogido los benecios legales) como posteriores la ley del 97, es indudable. Hay una gran masa de propiedad con ese carcter precario. Aqu o all, accidental, espordicamente, obedeciendo generalmente no al inters pblico, sino rencillas locales, 114 coleccin legislativa de espaa, tomo 87, ao 1862, pp. 767-768. Orden de 30 de junio de 1862. real orden, dictando las disposiciones que han de observarse para legitimar los repartimientos de terrenos de propios o las roturaciones que en los mis- mos se hicieron arbitrariamente sin haberse otorgado todava la correspondiente aprobacin superior. 115 coleccin legislativa de espaa, tomo 90, ao 1863, pp. 811-812. Orden de 2 de diciembre de 1863. real orden disponiendo que las informaciones acerca de repartos o roturaciones arbitrarias se instruyan ante los Jueces de primera instancia. 116 coleccin legislativa de espaa, tomo 94, ao 1865, pp. 519-522. 21 de septiembre de 1865. real orden dictando varias reglas para llevar a cabo el real decreto de 10 de julio ultimo, relativo a la desamortizacin. 117 coleccin legislativa de espaa, tomo 107, ao 1871, pp. 463-465. 30 de agosto de 1871. real orden circular, dictando reglas para la instruccin y resolucin de los expedientes de legitimacin de roturaciones arbitrarias. 171 Sabina Asins Velis cuestiones particulares venganzas tan frecuentes en los pueblos, se priva algun desdichado de la tierra que ha roturado y cultivado con un penoso y agotador trabajo, aunque muchas veces no vuelva real y positivamente al patrimonio comn ni le rinda frutos ventajas; y de todos modos son muchsimos los roturadores, cuyo nmero aumenta de da en da, que poseen sus tierras de un modo precario, sin pagar canon alguno y sin que, por otra parte, el Poder pblico se atreva a reivindicarlos de un modo regular y general. Y una de dos: se debe hacer esto ltimo, reconsti- tuyendo los patrimonios comunales, se deben buscar medios y procedimientos ms ecaces que 118 los que hasta ahora empleados para que todo lo arbitrariamente roturado quede legitimado . Tabla I-5.12. resumen de las principales leyes, decretos y rdenes relativas a las nuevas roturaciones en el siglo XiX MANDATO FECHA CONTENIDO Carlos IV 31 diciembre, 1800 Autoriza la vuelta al cultivo de campos previamente abandonados Cortes (exilio del 4 enero, 1813 reduccin de terrenos comunes a dominio particular, excepto los ejidos Rey) necesarios a los pueblos. Se reservaba la mitad de los baldos y realengos de la Monarqua para que sirvieran de hipoteca al pago de la deuda nacional. derogada por la real cdula de 8 de julio de 1814 Fernando VII 5 agosto, 1818 Venta de baldos y realengos para el pago de rditos y amortizacin de la deuda pblica Fernando VII 21 diciembre, 1818 rescinde la venta de los baldos y comunes hecha durante la invasin francesa Fernando VII 22 julio, 1819 Venta de despoblados. Ttulo de barn a quien comprara tierra suciente para establecer a 15 colonos, pero sin jurisdiccin ni otro derecho exclusivo Fernando VII 31 agosto, 1819 Se favorece a provincias, corporaciones o particulares que emprendan rompimientos de terrenos incultos y la construccin de nuevos canales de riego. exencin de diezmo y primicia las primeras cosechas, dependiendo del tipo de cultivo Cortes (Trienio 8 noviembre, 1820 reducir a propiedad particular los baldos y realengos, exceptuando las Liberal) 29 julio, 1821 cuatro sierras nevadas de Segovia, len, cuenca y Soria y los ejidos 29 junio, 1822 necesarios a los pueblos. Anuladas por Fernando Vii en 1823 Fernando VII 4 febrero, 1824 indulto a los roturadores de poca constitucional. Se conservara el 1 julio, 1824 arbolado existente, que deba tenerse por de los Propios o del comn 24 febrero, 1826 18 septiembre,1826 Fernando VII 6 abril, 1827 Se manda pagar cnones a los roturadores de terrenos indultados por las reales rdenes de 1826 Fernando VII 29 agosto, 1828 exencin de pagar diezmo las cuatro primeras cosechas de los almendros plantados en terrenos que no se hubieran roturado haca 30 aos Isabel II (regencia) 18 mayo, 1837 Rearman en su posesin a los roturadores de terrenos desde la circular de 26 de mayo de 1770, siempre que los hubieren plantado de viedo o arbolado, pagando el canon de 2% del valor de los terrenos antes de haberlos puesto en cultivo Isabel II (regencia) 4 febrero, 1841 la cesin de tierras baldas quedaba reservada al Gobierno, bajo el canon 5 octubre, 1843 correspondiente Isabel II 6 mayo, 1855 regulariza la propiedad de los poseedores de terrenos baldos, realengos, comunes, propios y arbitrios repartidos con anterioridad, y la de las roturaciones arbitrarias de los mismos Isabel II 30 junio, 1862 no se instruira por los ayuntamientos los expedientes sobre roturaciones vericados con posterioridad al decreto de las Cortes de 18 mayo 1837 Isabel II 4 noviembre, 1862 normas para instruir la solicitud de legitimacin de repartimientos o roturaciones arbitrarias 118 enciclOPediA JUrdicA eSPAOlA por l. Moutn y Ocampo, l.M. Alier y casi, e. Oliver rodrguez y J. torres Ballest. Publicacin autorizada por r.O. de 4 de junio de 1910. tomo Vigsimo sptimo, Barcelona: Francisco Seix, editor. 172 Las repercusiones de las leyes desamortizadoras MANDATO FECHA CONTENIDO Isabel II 2 diciembre, 1863 los Jueces de primera instancia instruiran los expedientes Isabel II 10 julio, 1865 Plazo de seis meses para tramitar los ttulos de adquisicin de terrenos roturados Amadeo de Saboya 30 agosto, 1871 los expedientes no resueltos por el Ministerio de la Gobernacin se remitiran a los Gobernadores de las provincias, y ellos a las diputaciones provinciales Alfonso XIII 5 agosto, 1893 no se poda adjudicar extensin mayor de 10 hectreas de los terrenos del (regencia) 29 agosto, 1893 Estado arbitrariamente roturados. Canon del 6% del valor actual de la nca adjudicada Alfonso XIII 26 enero, 1894 Se prohbe la admisin de nuevas solicitudes de legitimacin de terrenos (regencia) Alfonso XIII 10 junio, 1897 Se vuelve a permitir la legitimacin de tierras, siempre que los estuvieran (regencia) 25 junio, 1897 cultivando desde haca diez aos Alfonso XIII 27 agosto, 1897 Se excluyen de las legitimaciones los predios exceptuados de la (regencia) desamortizacin en concepto de utilidad pblica Alfonso XIII 28 octubre, 1897 Las inscripciones de las ncas deban hacerse en el Registro de la (regencia) Propiedad Alfonso XIII 5 enero, 1899 Especicacin del carcter de los terrenos (regencia) Alfonso XIII 19 septiembre, Se incide en que se excluan de las legitimaciones los predios exceptuados (regencia) 1900 de la desamortizacin en concepto de utilidad pblica 4.2. Las partidas cultivadas y los efectos de la desamortizacin los regmenes de tenencia y explotacin de la tierra en Petrer en el siglo XiX fueron estudiados con de- 119 talle por Belando carbonell , por lo que nos centraremos en la evolucin de la supercie cultivada que, como hemos comentado durante todo el estudio, se distribua totalmente en bancales. Segn las cuentas de la colecta de Petrer del ao 1831, los productos por los que el conde de elda perciba rentas hasta que se produjo la abolicin de los seoros eran: trigo, cebada, panizo, vino, almendra comuna, almendra pa(e)staa, y entre los menudos: avena, centeno, aceite, habas, hortalizas, fruta, cebollas, alfalfa y ca- 120 mo . el catastro de rstica del ao 1841 nos facilita una detallada descripcin de las reas en las que se cultivaban dichos productos. esta relacin nos aporta numerosos topnimos de partidas rurales que encontramos citados por primera vez en la documentacin, as como nos informa del mximo nmero de partidas en cultivo de que tenemos noticia desde que comenz la explotacin agrcola del trmino de Petrer. Sin embargo observamos que partidas que necesariamente estaban cultivadas, como el Guirney, Noguera o Santa Brbara, no constan en la relacin del Catastro (Tabla I-5.13 y Anexo Cartogrco, 121 122 mapa de mediados del siglo XiX) , aunque si se incluyen en el posterior Amillaramiento de 1859 . esta informacin se completa con la respuesta que remiti el alcalde al informe que solicit Joaqun ruiz de Togores en 1849, en la que se especica que el trigo, la cebada y la avena se sembraban del 15 de octubre al 15 de noviembre, que necesitaban al menos 4 riegos al ao, si el ao era poco lluvioso, y que la siega se realizaba en el mes de junio; adems de la almendra (pestaa, na, comuna, blancaleta y mollar), vid, olivo y maz (de corta cosecha; si el ao era seco y se necesitaban seis riegos ya no compensaba el coste de las labores) se cultivaban algunas legumbres como habichuelas, garbanzos y lentejas para el consumo de algunas casas; declarndose que la cosecha de hortalizas era insignicante, debido a la corta extensin de la tierra huerta. en el informe se especi- ca que en los ltimos aos se haba intentado plantar naranjos y moreras, que no haban podido aclimatarse por la crueldad del clima y escasez de aguas. los nicos instrumentos agrcolas que se utilizaban eran el arado con 119 r. BelAndO cArBOnell, Realengo y seoro& op. cit. pp. 190-207. 120 Ace, nm. 700. 121 AMP, l-39(1), catastro de rstica de 1841. 122 AMP, 46/1, resumen del amillaramiento de 1859. 173 Sabina Asins Velis reja de puente angosto, azadas anchas y pesadas, azadas estrechas y legones cuadrilongos para mover la tierra 123 barbechada de antemano . la publicacin de Madoz, en ese mismo ao, coincide en cuanto a los cultivos con los datos facilitados a togores, a lo que se aade que la almendra y el vino se dedicaban a la exportacin, a la vez que se importaba trigo, gneros de ultramar y telas para vestir; y que, adems de la actividad agrcola, en el 124 pueblo haba cinco fbricas de alfarera y una de tejas, dos molinos harineros y dos de aceite . Tabla I-5.13. dedicacin agrcola de las partidas rurales del municipio de Petrer en 1841 (Fuente: AMP, l-39(1), catastro de rstica) PARTIDA CULTIVOS Vias de la Canal riego eventual, via, cereal, arbolado, almendro Vias del Tercio riego eventual, via, cereal, almendro Vias del Derramador riego eventual, via Vias de la Rambleta riego eventual, via, cereal, almendro Campet cereal, olivo Los Olivares Olivo, almendro, cereal, via Secanet Via, olivo, cereal, almendro. Zonas con riego eventual Rambleta del Secanet Olivo, cereal Casa de Corts Olivo, via, almendro, cereal. Zonas con riego eventual Salinetas Olivo, cereal, almendro Llanos de Salinetas cereal, almendro, via Las Salinetas del Sacristn Olivo, cereal, almendro Higuerales Rotos, en Salinetas cereal, almendro, via Los Charcos cereal, almendro, olivo Las Hoyas Blancas cereal, via, olivo Huerto del Cucharn Via, cereal, almendro. riego eventual Almafr Olivo, via, cereal. Zonas con riego eventual La Casita de la Muerte Via, cereal, almendro. Zonas con riego eventual Huerto de Hilario cereal, almendro. riego eventual Huerto de Doroteo Via, cereal, almendro. riego eventual. Barranco de Santo cereal, almendro Barranco del Cid cereal, almendro, olivo, poca via Del Puente Nuevo Olivo, cereal Del Rebentn Olivo, cereal, almendro Estrecho de la Zarza cereal, almendro Cat-La Forad cereal, almendro Cat-Las Cuevas cereal, almendro. Zonas con riego eventual Cat-Hoyo de los Maes cereal, almendro Cat-Ribelles cereal Cat-El Maset cereal, almendro Casa del Alaig cereal, almendro Las Solanas de Media Vida cereal, almendro Barranco de Tereu (actualmente Tireu) cereal Barranco de Rabosa cereal, almendro Rabosa cereal, almendro 123 AMP, caja 37, exp. 17, ao 1849. 124 P. MAdOZ, Diccionario Geogrco-estadstico-histrico de Espaa y sus posesiones de ultramar. tomo Xii, Madrid, 1849, p. 824. 174 Las repercusiones de las leyes desamortizadoras PARTIDA CULTIVOS Almadraba cereal, almendro, poco olivo, via muy escasa Sierra del Caballo cereal, almendro Sierra del Caballo-Solana de Tofolet cereal, almendro Caprala cereal, almendro, via. Zonas con riego eventual Almorch Via, cereal, almendro Cochinet Via, olivo, cereal Pedrera Via, cereal, almendro Barranco Fuerte cereal, almendro. Zonas con riego eventual Figueralet Olivo, almendro, cereal Vueltas del Ro Olivo, cereal, almendro Molino Derribado Olivo, cereal, almendro Del Salto cereal, almendro La Gurrema cereal, almendro, olivo, via Hoya Falsa cereal, almendro, olivo, via Badallet cereal, almendro Pantano cereal, almendro, poca via Cachuli cereal, almendro. cereal y arbolado en regado La Administracin cereal, almendro. cereal y arbolado en riego eventual * Solana del Matar cereal, almendro Calafate (propiedad de Joaqun Verd y Beltrn) cereal, almendro La Forrada cereal, almendro Partido del Aljibe Via, cereal, almendro. Zonas con riego eventual Pieza de las Almas cereal, almendro. riego eventual Del Baladre. Linda con pieza de las Almas Olivo, via, cereal, almendro. riego eventual Del Molino Nuevo cereal, arbolado Aguarrios Via, cereal Sierra del Caballo-cueva des Crdenes Via Collao de Charpa cereal, almendro (N)Avayol cereal y arbolado en riego eventual. cereal y arbolado en re- gado Barranco de Castilla cereal, arbolado Barranco del Fardacho cereal De la Costa cereal, almendro Del Esquinal cereal, almendro, via, olivo Barranco de las Cuevas cereal, almendro Rincn de Coloma cereal, almendro Barranco de Escurina cereal, almendro Barranco de Plaza (linda con trmino de Castalla) cereal, almendro La Loma de Pua Olivo, via, cereal, almendro Horno del Vidrio cereal, olivo La Zarza cereal, almendro Montes del Cid cereal Casita de Vicedo cereal, almendro * en el ao 1726 se le denomina l Almatar, AMP, 45/1. libro de Hacienda, ao 1726, y en 1740 Solana del Almatar, ArV, BAi- LA A, Expediente de amortizacin. Reg. Nm. 1381; ARV, BAILA A, Expediente de amortizacin. Reg. Nm. 1584. 175 Sabina Asins Velis PARTIDA CULTIVOS Palomaret-Fontanars cereal y arbolado en regado, almendros Palomaret-casas de abajo cereal, almendro Palomaret-casas de arriba cereal, almendro Palomaret-casas de arriba por rambla del Horno del cereal, almendro. Zonas con riego eventual Vidrio Palomaret-Casas de Onil Via, cereal, arbolado. Zonas con riego eventual Venteta cereal, olivo entre las partidas que encontramos citadas por primera vez en cultivo, cercanas a la villa, destacan varios huertos en riego eventual, como el del cucharn, el de Hilario, el de doroteo y la casita de la Muerte. En el secano, aunque algunas de ellas disponen de riego eventual, guran las del Puente Nuevo, el rebentn, las Solanas de Media Vida, Barranco de tereu (actualmente tireu), el Molino derribado, del Salto, del Aljibe, la Pieza de las Almas, el collao de charpa, el Barranco del Fardacho, de la costa, el rincn de coloma, el Barranco de escurina, el Barranco de Plaza, la casita de Vicedo y Venteta. en Palomarets se documenta la divisin con la que se siguen denominando hoy en da estas partidas: casas de Abajo, casas de Arriba y casas de Onil. A estas partidas hay que aadir adems las que constan en cultivo en el Amillaramiento de 1859, como la rambleta de Mariana Planelles (en el camino de novelda), el tros de caro (en el camino de Salinetes), tejera Vieja, el llano del Pito, las hoyetas del trueno (junto al molino del azud), la rambleta de Jos Pay navarro, Forc, las hoyetas de tendero, la cuesta del tibero, la hoya de tomaso, el partido del campo Santo, el esgoleron en el cid, el Barranco del dragn, la casa de la Seora en Pua, el par- tido de la noria (linda con camino y acequia de elda), del Poco Pan (en la Pedrera, y la casa de labor en cochinet), las Bueltas de Mosn Pau en el Guirney, la casita de Brotons en el camino de caprala y el rac de Mosn Frances en cat. el espacio cultivado ocupaba en el ao 1853 un total de 2.342,49 hectreas, siendo sta la primera 125 cifra global de que disponemos del total de hectreas cultivadas en el trmino municipal . Por su parte, en el resumen del Amillaramiento de 1859, completado en 1888 con el Amillaramiento de los forasteros con tierras en Petrer, se indica que haba 1.397 ncas sujetas a contribucin y 112 casas en el campo destinadas a labor. Por cultivos, y aunque somos conscientes de que poda haber ocultacin de datos, se 126 estima como se expone en la tabla i-5.14 . estos datos sirven de referencia aproximada para poderlos comparar con los del ao 1882 (tabla 127 128 i-5.15) y los de 1900 (tabla i-5.16) , con el n de evaluar la incidencia que pudieron tener las leyes desamortizadoras de los Bienes de Propios en la ampliacin del espacio cultivado, pues, como hemos visto anteriormente, la desamortizacin de los Bienes eclesisticos no supuso en Petrer la expansin del rea de cultivo. A primera vista, el resumen de los datos que nos aportan los Amillaramientos indicaran una amplia- cin de los campos de cultivo, entre 1859 y 1900, de 420,37 hectreas, que supondra un incremento de un 17,95% del total cultivado entre esos dos aos de referencia (tabla i-5.17), pero que representaran nicamente un 8,76% del total de hectreas que salieron a subasta con la venta de los montes de los Bienes de Propios del municipio (4.795,07 hectreas). 125 r. BelAndO cArBOnell, Realengo y seoro& op. cit. p. 193. 126 AMP, 46/1, resumen del amillaramiento de 1859. 127 AMP, L-47, subcarpeta 6 varia, Designacin de los cultivos y extensin supercial del terreno de cada cultivo, 21 de julio de 1882. 128 r. BelAndO cArBOnell, Realengo y seoro& op. cit. p. 263, cuadro CXLI; AMP, 46(3). Amillaramiento de 1900. 176 Las repercusiones de las leyes desamortizadoras Tabla I-5.14. resumen del Amillaramiento de 1859 (Fuente: AMP 46/1) CLASES Y CALIDADES DE PRODUCTOS HECTREAS HECTREAS LAS TIERRAS REGADO cereales y arbolado TOTAL REGADO 30,60 RIEGO EVENTUAL Olivos 23,60 cereales 69,12 Vias 59,87 cereales y almendros de 1 19,55 TOTAL RIEGO EVENTUAL 172,14 TOTAL rea de riego 202,74 SECANO Vias 314,06 cereales y almendros 488,39 Olivos 95,36 cereales 1241,11 TOTAL SECANO 2.138,92 TOTAL CULTIVOS 2.341,66 Tabla I-5.15. extensin del espacio cultivado en 1882. (Fuente: AMP l-47, subcarpeta 6 varia, designacin de los cultivos y extensin supercial del terreno de cada cultivo, 21 de julio de 1882) CALIDAD DEDICACIN HECTREAS HECTREAS REGADO, PARTIDO DE LAS HUERTAS cereales 6,36 Arbolado 18,65 TOTAL REGADO 25,01 RIEGO EVENTUAL, PARTIDA OLIVARES cereales 13,33 Olivar 8,65 Almendros 4,02 Via 9,31 RIEGO EVENTUAL, PARTIDA DE LAS VIAS cereales 20,51 Olivar 20,87 Almendros 34,06 Via 59,88 TOTAL RIEGO EVENTUAL 170,63 TOTAL rea de riego 195,64 SECANO cereales 926,00 Olivar 172,79 Almendros 921,08 Via 502,14 TOTAL SECANO 2.522,01 TOTAL CULTIVOS 2.717,65 177 Sabina Asins Velis Tabla I-5.16. resumen del Amillaramiento de 1900. (Fuente: r. BelAndO cArBOnell, Realengo y seoro& op. cit., p. 263, cuadro cXli). la cifra de inculto y monte es muy inferior a la que proporcionan los expedientes citados en tablas anteriores CALIDAD PRODUCTOS HECTREAS HECTREAS REGADO cereales 0,2402 cereal y almendros 1,5010 cereal y arbolado 22,3058 Olivar 0,0600 Arbolado 2,1017 TOTAL REGADO 26,2087 RIEGO EVENTUAL cereales 27,3713 cereal y almendros 66,0445 cereal y arbolado 1,6813 Via 94,1990 Olivar 29,2721 Arbolado 3,2424 TOTAL RIEGO EVENTUAL 221,8106 TOTAL rea de riego 248,0193 SECANO cereales 1.312,0676 cereales y almendros 804,8074 cereal y arbolado 4,6839 Via 283,2831 Olivar 79,9712 Arbolado 27,3828 Almendros 1,8206 TOTAL SECANO 2.514,0166 TOTAL CULTIVOS 2.762,0359 INCULTO Y MONTE 2.702,3849 TOTAL GENERAL 5.464,4208 Tabla I-5.17. resumen de la evolucin del espacio cultivado en 1859, antes de la venta de los Bienes de Propios, y en 1882 y 1900, una vez vendidos stos. la cifra de inculto y monte es muy inferior a la que proporcionan los expedientes citados en tablas anteriores AO 1859 AO 1882 AO 1900 DIFERENCIA ENTRE 1859 Y 1900 CALIDAD HECTREAS HECTREAS HECTREAS HECTREAS reGAdO 30,60 25,01 26,2087 rieGO eVentUAl 172,14 170,63 221,8106 TOTAL rea de riego 202,74 195,64 248,0193 45,2793 SecAnO 2.138,92 2.522,01 2.514,0166 375,0966 TOTAL CULTIVADO 2.341,66 2.717,65 2.762,0359 420,3759 incUltO Y MOnte 2.136,88 2.702,3849 TOTAL GENERAL 4.854,53 5.464,4208 Si entre 1859 y 1900 la diferencia se cifra en 420,37 hectreas, las actuaciones seran ms importantes en los primeros aos, pues entre 1882 y 1900 nicamente se observa una ampliacin de 44,38 hectreas. comprobado en el registro de la Propiedad de elda y en el Amillaramiento de 1900, cuales pudieron ser los montes de Bienes de Propios vendidos que fueron objeto de una inmediata roturacin, se identican en Poblet y Molino, el piedemonte del collado de Amors y las Peas del Seor. Otros topnimos que 178 Las repercusiones de las leyes desamortizadoras constan por vez primera en el Amillaramiento de 1900 se ubican en los piedemontes de otras sierras tam- bin subastadas, como los cultivos de las laderas del Alt del colegial bajo la denominacin de Caprala, linda con trmino de Castalla y Montes Molares, dedicadas a cereal, y la casa del niap (bajo el Alto de cascales, actualmente nap) con 16 hectreas de cereales. es tambin el caso de los campos de cultivo de las zonas ms bajas de la Sierra del cid, monte que sali a la venta en 1866, donde en el parat del rac del cid se grab en una piedra la fecha de su construccin (ao 1877), o la partida els Blanquizals que se vende en distintas parcelas en 1905, 1910 y 1911. Parte de las laderas de los Puntales del Perri tambin pudieron ponerse en cultivo, ya que como hemos visto entre 1896 y 1900 se segregaron 12 ncas por un total de 94,68 hectreas. Adems, constan otros emplazamientos que encontramos citados por primera vez en el Amillaramiento de 1900, como las dedicadas al cultivo de cereales del rincn de Patio y la Foyeta de Feo; la sierra del Pintor, con olivos; la casa de Pan-Torrao, con olivos, o las de Don Carlos y de Juan Nez, plantadas de cereales (Anexo Cartogrco, mapa desde nales del siglo XIX). Esta dinmica roturadora fue signicativa en el conjunto del territorio valenciano en donde a partir de 1860 se produjo una importante ampliacin del rea de cultivo. Garrabou estima que entre 1860 y 1903-12 se transformaron en Castelln unas 141.914 hectreas de bosques en supercie cultivable. En Valencia afectara alrededor de 51.419 hectreas y en Alicante a 44.000 hectreas. en Valencia, y pro- bablemente tambin en Alicante, se dio un fuerte impulso al movimiento roturador hasta 1890, y con continuidad pero con un ritmo ms lento hasta 1922. castelln present una extraordinaria actividad ro- turadora entre 1860 y 1886-90, superior a la de Valencia; sin embargo, a diferencia de sta, en el perodo siguiente las roturaciones fueron todava ms importantes, y adems entre 1903-12 y 1922 una parte de la supercie cultivada se destin a pastos. Estas roturaciones se hicieron tambin a costa del patrimonio pblico de montes y pastos, por lo que en la provincia de Alicante, entre 1859 y 1909-10 ste disminuy 129 en ms de 100.000 hectreas y en castelln en cerca de 40.000 hectreas . 5. Actuaciones para fomentar la ampliacin del regado El Real decreto de 19 de mayo de 1816 reconoca las dicultades de la monarqua para emprender obras de riego de consideracin, por lo que, en la real cdula de 22 de julio de 1819, Fernando Vii reiteraba la cesin o exencin de diezmos a los empresarios de nuevos riegos. reservndose el rey conceder en cada caso los aos que durara esta exencin en proporcin a los gastos y dicultad de la empresa. nuevamente se insistira el 31 de agosto de 1819, fecha en que se public un real decreto por el que se favoreca a las provincias, corporaciones o particulares que emprendieran rompimientos de terrenos incultos, y la construccin de nuevos canales de riego, pues se consideraba al inters individual el agente ms intrpido y poderoso cuando la mano del Gobierno, lejos de entorpecer su accin, la facilita con fuertes estmulos... especialmente en un clima donde generalmente se arriesgan las cosechas por falta 130 de lluvias oportunas . Por ello el rey concedi la exencin de diezmo y primicia en las cuatro prime- ras cosechas a los roturadores de terrenos incultos que los redujeran a cultivo estable y permanente, y a los ayuntamientos, comunidades, compaas, cabildos o particulares, que previo el correspondiente permiso del Gobierno, construyesen a sus expensas canales de nuevo riego, ya tomen las aguas de ros caudalosos, ora las renan de muchos arroyos o manantiales en un punto, bien las extraigan del seno de las altas montaas; concedo en las tierras que efectivamente reciban el benecio del riego la exen- cin de todo el aumento de diezmos y primicias por las cosechas siguientes. Estos benecios incluan tambin a quienes extendiesen el regado por cualquier otro medio que no exigiese permiso real, y se aplicaba a cereales, vias, olivos, algarrobos y moreras. A pesar de estas disposiciones reales, durante la primera mitad del siglo XiX no tenemos constancia documental en Petrer de la presentacin de solicitudes para emprender obras de importancia. no obs- tante, s que se registra un incremento en la extensin de las partidas radicadas junto a la villa que se 129 r. GArrABOU, Un fals dilema: modernitat o endarreriment de l agricultura valenciana (1850-1900). Valencia: instituci Alfons el Magnnim. instituci Valenciana d estudis i investigaci, 1985. 130 F. MArtn de BAlMASedA, Decretos del Rey Don Fernando VII... op. cit., pp. 340-345. 179 Sabina Asins Velis beneciaban del riego: en 1611 fueron 144,12 las hectreas irrigadas documentadas; hasta mediados del siglo XViii stas se ampliaron de forma legal en 3,66 hectreas (lo que proporciona un total de 147,78 hectreas). en 1859 la cantidad ya ascenda a 202,74 hectreas (es decir 54,96 hectreas ms). Gracias al catastro de rstica de 1841 se detectan nuevos topnimos en el riego eventual que corresponderan a estas ampliaciones, como por ejemplo las Vias del tercio o los huertos del cucharn, doroteo o Hi- lario. El Catastro conrma adems las partidas con enclaves irrigados en los valles interiores, que a lo largo de los siglos haban ido apareciendo en la documentacin, como cat, caprala, cachuli, la Admi- nistracin, navayol, Fontanars y Palomaret. la tnica ser diferente para la segunda mitad de la centuria, momento en que constan bastantes peticiones de licencia dirigidas al Ayuntamiento para construir nuevas acequias, rafas, azudes y balsas. en realidad, estas infraestructuras no se dedicaban a la realizacin de proyectos ambiciosos o a fomentar 131 una agricultura intensiva de regado, como en otras zonas valencianas , sino a mejorar el secano o a abastecer pequeas zonas de huerta, como se deduce de la comparacin del espacio irrigado entre 1859 (202,74 hectreas) y 1900 (248,01 hectreas). An con todo, dado lo reducida que era ya de por s la extensin del riego eventual, la ampliacin en 45,27 hectreas entre esas dos fechas supuso un signi- cativo aumento de un 22 33%. como hemos visto, a lo largo de los siglos en Petrer se distingua, por un lado, el espacio irrigado junto al ncleo urbano dependiente del agua de la balsa de la villa y, por otro, los enclavados en las zonas interiores que se beneciaban de regado o riego eventual gracias a la captacin del agua en manantiales, boqueras, pozos, etc. durante esta segunda mitad de siglo, las actuaciones se centrarn sobre todo en estos ltimos parajes. Entre los diferentes ejemplos destaca, por su inters y complejidad, el largo convenio que rmaron en 1857 los diecinueve miembros de la familia propietaria de las haciendas del barranco de Fontanars (dichas de Arriba, en el partido del Palomaret), procedentes de la herencia de los hermanos Antonio y 132 Jos Brotons rico, que posean en mancomn las boqueras, fuentes y balsas . el expediente localiza- do nos proporciona la datacin de las obras efectuadas y complementa el dibujo que hiciera en su da 133 J.M Bernab, que adjuntamos (Figura i-5.1) . Se indica que en las haciendas haba dos boqueras, la primera reciba las aguas del Salto de los Fontanares y la segunda del barranco del mismo nombre y de la rambla del estrecho de cat, cuyas avenidas se utilizaban por aquel a quien le corresponda el agua la semana o tiempo de la avenida. Sin embargo con el convenio acordaban dividrsela entre los interesados en proporcin cada uno a los derechos del agua del parado, para regar todos a la vez con el agua que les perteneca (Juan Pay deba ceder su derecho de la parte de la boquera de los Fontanares y a cambio le compensaban con la que vena del estrecho de Agost, a la que no tena derecho). los gastos ocasiona- dos por la construccin de las boqueras y acequias del parado seran distribuidos en proporcin al agua que tena cada uno, advirtindose que nadie poda oponerse a que se les ocupasen las tierras por donde discurriran. Francisco corts y Sarri deba adems abonar 160 reales por haberle cedido el terreno de la presa de la boquera del barranco de los Fontanares. Adems se autorizaba a nicols Brotons a hacer una mina por fuera del barranco de los Fontanares, con la condicin de que si observaban que disminua la cantidad de agua al variar su curso debera dejarlas correr barranco abajo, como era la costumbre. Se indicaba tambin que a la izquierda del abrevadero, bajando hacia las casas, haba un parado muy anti- guo para poder recoger las aguas, que perteneca a todos los interesados del parado o balsa que haba en la parte interior, en proporcin al agua que corresponda a cada uno. Se especicaba adems que ninguna caballera ni ganado podra entrar en las boqueras y acequia del parado, ni abrevar en sta, quedando de comn las hierbas que crecan en las mismas. As como se aadan algunas clusulas que afectaban a algunos de los propietarios, como Antonio Poveda que podra 131 S. cAlAtAYUd Giner, el regado ante la expansin agraria valenciana: cambios en el uso y control del agua (1800- 1916). Agricultura y Sociedad 67, 1993, pp. 47-92. 132 APM, seccin Petrer, notario Jos lpez Prez, 15 de marzo de 1857, convenio n 79, entre Jaime tortosa, Salvador Pay, nicols Brotons y otros. 133 J.M. BernAB i MAeStre, Obras hidrulicas tradicionales en el regado de Petrer. (Vall del Vinalop). Los paisajes del agua: libro jubilar dedicado al profesor Antonio Lpez Gmez. Valencia: Universitat de Valncia, 1989, p. 191. 180 Las repercusiones de las leyes desamortizadoras regar la hoya de los Fontanares tres veces al ao; la direccin que deban tomar algunas acequias, como la de la buelta de Mariano, por debajo de la boquera; o la obligacin de dar paso al agua entre ellos. El convenio naliza condenndose mutuamente perpetuo silencio para la perpetua estabilidad y rmeza de todo lo convenido. Fig. I-5.1 Fontanars de Palomarets. croquis levantado por J.M Bernab (Bitrir I, 1989, p. 21). el convenio de distribucin del agua data del ao 1857 (APM, seccin Petrer, notario Jos lpez Prez, 15 de marzo de 1857) en esta segunda mitad de siglo, entre los vecinos que sobresalen por las peticiones que hace al Ayunta- miento destacamos a Jos rico y Amat, quien junto a Ventura Prez, abogado y propietario, solicit, en 1859, la compra de un terreno municipal para continuar una mina en busca de agua. en el expediente se concreta que haca tiempo que haban comenzado a excavarla en las tierras que ambos posean en la Ha- cienda del Palomaret, con objeto de abastecer la casa de labor y aprovechar los sobrantes para el riego de las tierras. Para proseguir con los trabajos tenan que entrar por las tierras incultas del comn vecinal en la falda de las Peas Montesas, a espaldas de la casa. Ambos propietarios dirigieron la peticin al Ayun- tamiento por ser el encargado por la Ley municipal de administrar dichos bienes, e incluso de venderlos, si de ello resultaba benecio a la riqueza rstica del pueblo. Por ello solicitaron que se les estableciera lo que la ley prevea, es decir 300 varas de longitud y 200 varas de latitud (de las que se les concedi 300 por 150), previo pago de 40 reales en que se haba tasado el terreno. Francisco Morell Gmez, socio de la 181 Sabina Asins Velis real Sociedad econmica de Amigos del Pas de Valencia, midi el agua que sala de la mina que haban 134 abierto en el Palomaret y estim un caudal, en el mes de abril, de 0,405 litros/segundo . el mismo Jos rico y Amat, junto a enrique Amat y Maestre, solicit de nuevo autorizacin en 1869 para construir una presa o rafa en el paraje denominado cantal de Pere Santo, con el objeto de reunir las aguas potables y de riego que discurran por la rambla y dirigirlas a la acequia que daba movimiento al molino harinero que Jos rico posea en la parte superior del azud. enrique Amat podra regar parte de sus tierras de la hacienda llamada la Hoya del castillo. las condiciones que impuso el ayuntamiento nos indican claramente la preocupacin que haba por las construcciones de riego en el municipio: que la rafa se construyera de mortero y los cimientos se hicieran a la profundidad necesaria para evitar que las aguas discurrieran subterrneamente, estibndolo en el Cantal de Pere Santo para mayor solidez; colocar en la embocadura de la acequia un regulador o portn y una reja, para evitar que las avenidas introdujeran piedras, maderas, y otras malezas en la acequia, y para que no recibiera sta mayor cantidad de agua que la de que fuera susceptible. Adems enrique Amat no podra aprovecharse de las aguas de avenida a menos que stas no saltasen por el azud de la parte inferior del molino de Jos rico. Una vez terminados los trabajos, pas una inspeccin municipal que les dio el permiso denitivo al comprobar la 135 solidez de la obra . de nuevo a enrique Amat y Maestre se le concedi el aprovechamiento de un sector de acequia antigua de las fuentes de la villa, que comprenda desde el cubo del molino harinero de Jose rico hasta debajo de la tejera de Andreu, con el objeto de poder pasar el agua del riego y conducirla a 136 la hacienda que posea en la Hoya del castillo . Otro ejemplo fue una obra de mayor envergadura que solicit Santiago Amat y que fue remitida al gobernador de la provincia. consistan los trabajos en construir una presa para poder regar sus tierras en el partido de la Pedrera. la construccin se completara con un acueducto, que deba discurrir en su mayor parte por terreno del comn de la villa, a lo que no se opona el ayuntamiento porque es conocido 137 el benecio que de ello resultaria para el fomento de la agricultura . destacable es tambin el alumbramiento de la mina de la Bienvenida. desde el 22 de septiembre de 1881 la Sociedad la Bienvenida posea un manantial de aguas dulces situado en terreno del estado, en las estribaciones del Alto Xinquera. el alumbramiento estaba formado por una galera de 800 metros de extensin y 20 metros de profundidad, que siguiendo la direccin del lecho del barranco verta las aguas en las obras de canalizacin de la Sociedad la Bienvenida que las conduca hasta el pueblo, a unos 7 3 Km., donde las verta en una balsa tambin de su propiedad de 1.500 m de capacidad, situada en la Hoya del castillo (cuatrovientos), desde donde se distribua para el riego y las necesidades del vecindario. el caudal del alumbramiento era variable, pero como mnimo 2 litros/segundo. el manantial fue alum- 138 brado por Jos Amat tortosa quien lo cedi a la Sociedad que represent al tiempo de su constitucin (Figuras i-5.2, i-5.3, i-5.4). entre las balsas distribuidas por el trmino se citan la del chorret, y el estrecho del mismo nombre, en donde haba una acequia para conducir el agua de riego; la que haba construido Bernardo Garca en 2 su huerto, para regar una cuarta de tahlla (300 m ) plantada de verduras; la balsa de Mariano Amat; 139 la que haba junto al antiguo molino del conde ; y la que se construy en la segunda mitad del siglo XiX conocida por la balsa de los desperdicios. Sita en la partida del Guirney, se abasteca de la mina de los desperdicios, de escaso caudal. en 1887 al registrarse casos de viruela en la poblacin obligaron a lavar la ropa de los enfermos tan solo en esta balsa o en el lavadero de las Piedras del Fosar. en 1908, se inform de que la balsa era un foco de infeccin por la escasa cantidad de agua que la alimentaba, debido a la sequa y al haberse tambin clausurado el lavadero que aumentaba su caudal. la mina y la 140 balsa pertenecan a la Sociedad el Progreso . 134 AMP, l-5, caja 5, exp. 43. 135 AMP, 40/1, libro de Actas de 1869, pp. 12-14, 17-19. 136 AMP, 40/1, libro de Actas de 1869, p. 48, 15 de agosto. 137 AMP, 40/1, libro de Actas de 1869, p. 52, 5 de septiembre. 138 registro de la Propiedad de Monvar, 15 de junio de 1914, n 771, folio 226, libro 50. Gentileza de luis Villaplana. 139 AMP, l-5, caja 5, exp. 30, 16 de junio de 1861. 140 AMP, L-30(1); AMP, L34(2), 16 de mayo y 5 de noviembre de 1908. F.J. JOVER MAESTRE, M.C. RICO NAVARRO, 182 Las repercusiones de las leyes desamortizadoras Igualmente en el Guirney, tambin nanciada por un propietario local, Gabriel Pay Pay, se cons- truy en 1903 la balsa del Moro, de silleria, cal y porland y una tubera de acero, por un coste total de 50.000 reales. la balsa, en donde se recoga un total de 87 horas de agua del manantial de Santa Brbara y las aguas pluviales, era compartida entre Gabriel Pay, ramn Maestre Maestre (a quien correspon- dan 26 horas de agua en cada tanda, por lo que debi abonar a Pay 7.774 reales) y Jos Bernab Pay 141 (24 horas por tanda, por 7.174 reales) . Fig. I-5.2, I-5.3 y I-5.4. interior, canalizacin y balsa primera de la mina de la Bienvenida, actualmente abandonada. el alumbramiento del agua data de 1881 Historia de la sanidad en Petrer. col.lecci l Almorx 3. Petrer: regidoria de cultura i Patrimoni, Ajuntament de Petrer. 2006, pp. 30, 66-67. 141 Archivo del Registro de la Propiedad de Elda, seccin Petrer, tomo 661, nca 4841, folio 146. 183 Sabina Asins Velis Por cuanto se reere al riego de las partidas junto a la villa, tambin Jos Rico y Amat solicit en 1850 permiso para construir una acequia, de un palmo de ancho por otro de alto, desde el molino harinero de su propiedad, en el azud, hasta los huertecitos de Petrer, donde enlazara con la acequia que haba all. la nueva acequia se construira de mortero, lo que beneciara al riego de la villa al impedir la merma por 142 ltraciones . Posteriormente, en 1861, al haberse detectado numerosas prdidas y agua de mala cali- dad, se hizo un reconocimiento de las aguas potables y de riego de la poblacin. en el mismo se observ que sta sala pura de los tres manantiales principales (el de la casa de la Seora, la mina de Pua y el del Pantano) de los que se abasteca la balsa grande del pueblo. Sin embargo, su calidad empeoraba bien por el mal uso del agua que hacan los vecinos en las acequias, como limpiar la vajilla o lavar la ropa, bien por las numerosas ltraciones de las acequias de mampostera que haba construido recientemente Jos rico, o porque algunos agricultores la enturbiaban al regar con cntaros. Para solucionar el problema se acord que quienes tuvieran paradas abiertas para regar por la acequia de los huertecitos deban colocar brancas, cuyas soleras se elevaran medio palmo sobre el curso natural de las aguas. En el informe tambin se constataba el deciente estado de conservacin de las acequias y presas (se indica que algunas eran de piedra mezclada con tierra) que llevaban el agua a los molinos harineros de la localidad, como el ya citado de Jos rico, Salvador corts, timoteo Montesinos y Antonio Aguado, o los canales de madera del molino que le haba quedado en Petrer al conde de cervelln, tras la abolicin de los seoros, que verta dos o tres dedos de agua por una rotura. Se seala la gran importancia que le dan a las ltraciones, especicando que por cuya causa se ven discurrir 3 4 dedos de agua ro abajo, y esto es de muy notable perjuicio a los intereses del riego. concluye la comisin sealando el mal uso que hacan del agua los hacendados Jos Maestre, en la heredad de la Gurrama, y Manuel castillo, que regaba con el agua de la Seora y de la mina, y los propietarios de los molinos Jose Rico, Timoteo Montesinos y Salvador Cortes; as como los vecinos que regaban sin tener asignada agua de la balsa. En total, nalizaba el informe, que haba muchos abusos que corregir y gran cantidad que se perda, siendo por lo tanto indispensable pensar en traer las aguas por 143 un acueducto slido y perfeccionado, que beneciaria al riego y a las aguas potables . el Ayuntamiento continu siendo el encargado de la administracin del agua que dependa de la Bassa Fonda, as como de la revisin de las infraestructuras que inspeccionaba peridicamente, hasta que, en sesin extraordinaria de 30 de mayo de 1869, decidi que se redactaran unas Ordenanzas para las Aguas del riego de la Villa, por las cuales el Ayuntamiento quedara libre de la gestin directa sin perjuicio de que en la junta que se formara entrara el sndico y un regidor para que vigilaran el abasto 144 de las aguas potables . de todas formas, el Ayuntamiento sigui implicndose en las obras que se rea- lizaban en la mina de Pua, como ocurri, por ejemplo, en 1899 cuando se acord por unanimidad que se perforasen veinte metros de galera en la mina, obra que una vez sacada a subasta realizara Juan de 145 Mata Montesinos y Amat (Figuras i-5.5, i-5.6 y i-5.7). la disposicin del Ayuntamiento de quedar libre de la gestin directa del agua debi de tomarse al am- 146 paro de la ley de Aguas de 1866 del Ministerio de Fomento . De igual modo, la redaccin denitiva de los estatutos de la comunidad de regantes de Petrer, de 22 de marzo de 1912, se hizo conforme a la ley de 147 Aguas de 1879 . Esta decisin del Ayuntamiento del ao 1869 generara importantes conictos y litigios en la localidad con el paso del tiempo. As, desde mediados del siglo XX, la gestin del agua de la mina de Pua que, como hemos visto, estuvo bien denida durante siglos, supuso un duro enfrentamiento entre el Ayuntamiento y la comunidad de regantes, debido en un principio a que el caudal de la mina satisfaca con dicultad las necesidades de agua en una poblacin creciente. La solucin pas por la fundacin de una cooperativa Sindical de regantes en 1962 para el alumbramiento de nuevos recursos de agua, como 142 AMP, Leg. 41, ao 1850; M.c. ricO nAVArrO, Las fuentes pblicas... op. cit, pp. 245-247. 143 AMP, l-5, caja 5, exp. 30, 16 de junio de 1861. 144 AMP, 40/1, Libro de Actas de 1869, p. 29, 30 de mayo; AMP, 40/1, ff. 30-41, 6 de junio de 1869, en que se redactan las Ordenanzas del riego. 145 AMP, L-34(2), Libro de acuerdos tomados por el ayuntamiento en el bienio 1898-1899; 1 de abril de 1899. 146 Gaceta de Madrid. 1866. ley de Aguas de 3 de agosto de 1866. Ministerio de Fomento, n 219, 7 de agosto. 147 Gaceta de Madrid. 1879. ley de Aguas de 13 de junio de 1879. Ministerio de Fomento, n 170, 19 de junio. 184 Las repercusiones de las leyes desamortizadoras 148 as se llev a efecto en el ao 1965 en el pozo del esquinal (cuyo potencial, como dijimos, ya se haba detectado en el ao 1689). Desde nales de los aos 60 del siglo XX, y tras ms de 700 aos documentados de prestar servicio a la comunidad, el agua de Pua, salvo en caso de episodios torrenciales muy puntuales, ha dejado de manar, debido seguramente a la perforacin, aguas arriba, del pozo del esquinal. Figs. I-5.5, I-5.6 y I-5.7. Pozo de aireacin e interior de los t- neles excavados a partir de 1899 en la mina de Pua 148 S. PAY VillAPlAnA, relaciones del Sindicato Agrcola y la caja rural de Ahorros y Prstamos de Petrer con las aguas de nuestro pueblo. en: X. Amat Montesinos (coord.), Tierra, crditos y agua. El cooperativismo agrario en Petrer 1908-2008. Petrer (Alicante): cooperativa Agrcola de Petrer, 2008, pp. 137-143. 185 Captulo 6: La actividad agrcola actual en el trmino municipal: debilidades y potencialidades Hoy en da, la supercie agrcola y forestal supone el 77% del uso del suelo en los pases de la Unin europea-25, siendo el total estimado para espaa del 83,42% (34,42% agrcola y 49% forestal, prados 1 y pastizal) . Sin embargo, en Petrer, debido al importante proceso de abandono agrcola, esta proporcin 2 se distribuye entre un 14,72% del territorio destinado a la agricultura y un 73,58% a forestal y pastos , lo que le convierte en uno de los municipios de la comunidad Valenciana con mayor proporcin de terre- 3 no dedicado a estos ltimos usos . A nivel europeo, un tercio de su extensin se incluye en las reas de 4 montaa ; en Espaa estas reas comprenden unos 20 millones de hectreas, equivalentes al 39 58% del 5 total nacional . en los ltimos cincuenta aos, en el territorio espaol, en un proceso similar al ocurrido en otros pases del arco mediterrneo, se ha producido una atraccin de la mano de obra dedicada hist- ricamente al sector primario hacia los sectores secundario y terciario. la entrada tarda de espaa en la Unin Europea, en 1986, ha implicado que el pas no se beneciara de las polticas de desarrollo rural que se venan impulsando por la Comisin Europea desde nales de los aos 50, al iniciarse el proceso de abandono agrcola, como fueron los primeros fondos de garanta, los intentos del plan Mansholt o 6 las incipientes ayudas a las reas menos favorecidas . con el propsito de estimular el desarrollo de las reas de montaa, las polticas nacional y autonmica han impulsado medidas para tratar de conciliar progreso y conservacin, manteniendo el espritu de la conferencia europea sobre desarrollo rural, de la que diman la declaracin de cork, de los consejos de europa, celebrados en lisboa en el ao 2000 7 y en Gotemburgo en el ao 2001, y de la reunin de tesalnica (2003) . en la actualidad, en espaa, se distinguen tres tipos de zonas desfavorecidas. en primer lugar las zonas con riesgo de despoblamiento (incluye las reas poco productivas, con bajas rentas agrarias y escasa densidad de poblacin, entre otras caractersticas) que suponen casi 18 millones de hectreas. en segundo lugar, las zonas de agricultura de montaa, entre las que se consideran las ubicadas por encima de los 1.000 metros de altitud, aquellas con pendientes superiores al 20%, o las que combinan una altitud por encima de 600 metros con una pendiente mnima de entre el 15 y el 12%. estas ltimas se denomi- 1 Los datos de la UE-25 en: COMMISSION OF THE EUROPEAN COMMUNITIES, 2005b, COM(2005) 304 nal. Pro- posal for a council decision on community Strategic Guidelines for rural development (Programming period 2007 2013), Sec(2005) 914, p. 7. la estimacin realizada para espaa a partir de MiniSteriO de MediO AMBiente Y MediO rUrAl Y MArinO, 2009, Anuario de Estadstica.. op. cit., Tabla 3.3: Distribucin de la supercie segn grandes usos y aprovechamientos del suelo, 2007, p. 19. 2 Datos: Ocina del Catastro, diciembre de 2006. El porcentaje se ha obtenido considerando la extensin total de su territorio en 104,2 km 2 . Segn el catastro hay 1.533,11 hectreas dedicadas al cultivo y 7.667,64 hectreas a pasto, pinar maderable y matorral. 3 el total de la comunidad Valenciana aporta un 30,31% del suelo destinado a agricultura y un 50,45% a forestal, prados y pastizal, en: MiniSteriO de MediO AMBiente Y MediO rUrAl Y MArinO, 2009, Anuario de Estadstica& op. cit., p. 19. 4 eUrOPeAn cOMMiSSiOn, 2003c, Community policies and mountain areas. Proceeding of the conference organised by the European Commission. Brussels 17-18 October 2002. Luxembourg: Ofce for Ofcial Publications of the European Com- munities. 5 MiniSteriO de AGricUltUrA, PeScA Y AliMentAcin, 2003, Libro blanco de la agricultura y el desarrollo rural. Madrid: centro de Publicaciones del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentacin, tomo 3 p. 76. (el porcentaje del 39,58% lo hemos calculado considerando la extensin total de espaa en 50.536.846 ha, no obstante no hemos podido calcular el porcentaje de estas tierras que se dedican a la agricultura). 6 COMMISSION OF THE EUROPEAN COMMUNITIES, 2004, Commission staff working document SEC(2004)931, Part 1, historical evolution. 7 eUrOPeAn cOMMiSSiOn, 1996, cork declaration. The European Conference on Rural Development. cork, ireland, 7-9 November 1996; PARLAMENTO EUROPEO, 2000, Conclusiones de la Presidencia, Consejo Europeo de Lisboa, 23 y 24 de marzo de 2000; EUROPEAN COUNCIL, 2001, Presidency Conclusions, Gteborg European Council, 15 y 16 de junio de 2001. SN 200/1/01 REV 1; EUROPEAN COUNCIL, 2003, Presidency Conclusions, Thessaloniki European Council, 19 y 20 de junio de 2003; J. ROMERO GONZLEZ, J. FARINS DAS, Los territorios rurales en el cambio de siglo. En: J. Romero (coord.), Geografa humana: procesos, riesgos e incertidumbres en un mundo globalizado. Madrid: Ariel, 2004, pp. 333-394. Sabina Asins Velis nan zonas de agricultura de montaa parcialmente delimitadas, entre las que incluiramos el territorio de Petrer. en total estas reas de agricultura de montaa suponen ms de 20 millones de hectreas. en tercer lugar, se incluyen las zonas con dicultades especiales, que afectan a un milln y medio de hect- reas, en donde las actividades agrcolas deben realizarse conforme a las prcticas tradicionales, que han 8 generado ecosistemas bien denidos cuya conservacin es prioritaria . los cambios drsticos y rpidos experimentados por el paisaje espaol, en los ltimos cincuenta aos, estn afectando tanto a las zonas agrcolas del litoral como al interior montaoso, si bien sus problemas son muy distintos. Mientras en las zonas cercanas a la costa, un porcentaje estimable de las reas agrcolas estn siendo selladas por la construccin de segundas residencias, complejos tursticos, polgonos industriales o por la ampliacin de los ncleos urbanos, el interior montaoso ha experimen- tado un importante despoblamiento y abandono agrcola, llegando incluso a alcanzar el 75%, el 89% 9 el 98% en algunas zonas . esta situacin es similar al abandono experimentado en otras zonas del Medi- terrneo europeo, como Francia, Portugal e italia, destacando en este ltimo pas el ejemplo de cinque terre (liguria), en donde en el ao 1900 se cultivaban 1.000 hectreas en terrazas y en la actualidad algo ms de 100 hectreas, lo que supone el abandono de un 90% del espacio agrcola aterrazado, con el consiguiente colapso de los muros de mampostera y la extensin de los deslizamientos en masa como 10 proceso erosivo ms destacado . en espaa, desde el ao 1990 hasta el 2007 se han abandonado 2.775.400 hectreas, disminuyendo en 11 un 13 75% la supercie agrcola utilizada . en Petrer, se calcula que en la actualidad el rea afectada por el abandono agrcola supone el 44,49% del espacio cultivado en el ao 1900. dadas las importantes im- plicaciones que este abandono supone, tanto a nivel humano como cultural y ambiental, el Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino encargado de jar las directrices para el conjunto del pas, y las diferentes comunidades autnomas, a quienes corresponden las competencias en materia de agricultura y desarrollo rural, han orientando sus polticas a las directrices acordadas en el seno de la Unin europea, integradas en la PAc. estas medidas comunitarias de proteccin se incrementaron con la introduccin de las ayudas directas para agricultores en reas de montaa, y con la aprobacin de las disposiciones con- templadas en la Agenda 2000, a raz de la cual el desarrollo rural pas a ser el segundo pilar de la PAc. con todo, para el perodo 2004-2012, las previsiones de crecimiento de los ingresos agrcolas por explotacin, incluyendo agricultura intensiva y extensiva, son de un modesto 4% en la EU-15; 12 alcanzando sin embargo un signicativo 50,4% en los nuevos Estados Miembros . estas previsiones pueden verse alteradas por los efectos de la actual crisis econmica y nanciera, que en el sector agrario presenta incertidumbres sobre todo en cuanto se reere a su impacto sobre los ingresos dispo- nibles, el mercado laboral, el acceso a los crditos, el precio de la energa, las polticas de mercado, 13 etc. no obstante, la inminente reforma de la PAc, prevista a partir del ao 2013, introducir nuevos planteamientos que requerirn la adaptacin de las polticas nacionales y autonmicas a las directrices orientadas a la adaptacin/al y mitigacin/del cambio climtico, a la necesidad de una mejor gestin de los recursos de agua, a la proteccin de la biodiversidad y a la produccin de energa verde, entre 14 otros aspectos . 8 MiniSteriO de AGricUltUrA, PeScA Y AliMentAcin, 2003, Libro blanco de la agricultura... op. cit., tomo 3 pp. 74-76. 9 t. lASAntA, el proceso de marginacin de tierras en espaa. en: t. lasanta y J.M. Garca-ruiz (eds.), Erosin y recuperacin de tierras en reas marginales: casos prcticos aplicables a la Rioja. logroo, 1996, pp. 7-31. 10 M. BeSiO, le cinque terre: una presentazione. Atti del Convegno Internazionale LIFE 00 ENV/IT/000191. P.R.O.S.I.T. castello di riomaggiore, riomaggiore, italia. 26 luglio 2004, p. 6. 11 MiniSteriO de MediO AMBiente Y MediO rUrAl Y MArinO, 2009, Anuario de Estadstica& op. cit., p. 17. 12 eUrOPeAn cOMMiSSiOn, 2005d, Prospects for agricultural markets and income 2005-2012. directorate General for Agriculture and rural development of the european commission, p. 10. 13 eUrOPeAn cOMMiSSiOn, 2009b, Prospects for agricultural markets and income in the European Union 2008-2015. directorate-General for Agriculture and rural development. p. 10. 14 cOMiSin de lAS cOMUnidAdeS eUrOPeAS, 2007, Preparndose para el chequeo& op. cit.; EUROPEAN cOMMiSSiOn, 2009c, Health check of the cAP& op. cit.; A. MASSOT i MART. La PAC tras el Health Check & op. cit.; A. MASSOt i MArt, Espaa ante la refundacin de la Poltica Agrcola Comn& op. cit. 188 La actividad agrcola actual en el trmino municipal el vigente Plan de desarrollo rural 2007-2013 se estructura en cuatro ejes, bajo los epgrafes: au- mento de la competitividad del sector agrcola y forestal; mejora del medio ambiente y del entorno rural; 15 calidad de vida en las zonas rurales y diversicacin de la economa rural; y leader . estos cuatro ejes incluyen medidas de inters para las reas de montaa, relacionadas con las infraestructuras, los produc- tos de calidad, el apoyo a los jvenes agricultores y a las mujeres, la diversicacin de actividades no agrcolas, la creacin de micro-empresas, el apoyo al turismo rural o la intensicacin de las medidas agroambientales, entre las ms signicativas. Este programa agro-ambiental facilita incentivos econ- micos a los agricultores que trabajen de acuerdo a los cdigos nacionales de Buenas Prcticas Agrcolas, como compensacin por los costes extras o las prdidas de ingresos. Sin embargo, por lo que se reere a espaa, la comunidad Valenciana, y desde luego a Petrer, estos contratos no han encontrado gran respuesta entre los agricultores. esta postura se hace incluso extensiva a los agricultores de otros pases de la Europa Mediterrnea, ya que en estas zonas se han rmado menos contratos agro-ambientales que 16 en europa central o del norte . el rea bajo medidas agro-ambientales vara entre menos del 10% del total del espacio agrcola de espaa o Grecia a ms del 75% en Austria, Alemania o Finlandia, para el perodo 2000-2003. el rea comprendida en las medidas agro-ambientales dedicadas a biodiversidad y 17 paisaje tambin es superior en los pases nrdicos o de la europa central . 1. La supercie cultivada dada la nueva orientacin de la poltica agraria y de desarrollo rural de la Unin europea, en Petrer interesa especialmente conocer las caractersticas actuales de las explotaciones agrcolas, as como sus debilidades y potencialidades. En el ao 1859, el 22,47% de la supercie total del trmino de Petrer se dedicaba a la 18 19 produccin agrcola ; en 1882 esta cantidad ascendi hasta un total del 26,08% y en 1900 el porcentaje 20 se situaba en un 26,51% . en 1957, debido a la atraccin de la mano de obra agrcola que ejerca el sector del calzado, pionero por cuanto se reere al establecimiento industrial en el valle de Elda, sta descendi hasta el 11,83%, para recuperarse ligeramente, alcanzando el 14,79%, en 1978. los datos aportados para el ao 1984, poco antes de la entrada de Espaa en la Unin Europea, situaban en un 23,21% la supercie 21 cultivada; cantidad que volvi a descender hasta el 13,02% en el ao 1994 , debido a la poltica de retira- 22 da de tierras del cultivo. en 2006, la explotacin agrcola del territorio se estabiliz en torno al 14,71% (Grca I-6.1, Anexo Cartogrco, mapas globales actuales y mapas detallados por parcelas). 15 cOMiSin eUrOPeA, 2005, reglamento (ce) no 1698/2005 del consejo de 20 de septiembre de 2005 relativo a la ayuda al desarrollo rural a travs del Fondo Europeo Agrcola de Desarrollo Rural (FEADER). Diario Ocial de la Unin Europea l277/1, de 21 de octubre de 2005. 16 eUrOPeAn cOMMiSSiOn, 2005c, Agri-environment Measures: Overview on General Principles, Types of Measures, and Application, pp. 3-7, 13, 20; EUROPEAN COMMISSION, 2003b, Council Regulation (EC) n 1782/2003. Luxembourg: Ofce for Ofcial Publications of the European Communities. EUROPEAN COMMISSION, 2004c, Commission Regulation (EC) n 796/2004. Ofcial Journal of the European Union L/141/18-58; EUROPEAN COMMISSION, 2005e, Commission Regulation (EC) n 1954/2005. Ofcial Journal of the European Union L/314/10-12. D. KLEIJN, W.J. SUTHERLAND, How effective are european agri-environment schemes in conserving and promoting biodiversity Journal of Applied Ecology 40, 2003, 947-969; E. DEFRANCESCO et al., Factors affecting farmers participation in agri-environmental measures: a northern italian perspective. Journal of Agricultural Economics 59, 2008, pp. 114-131. los antecedentes en espaa en: A. PAniAGUA MAZOrrA, Agri-environmental policy in Spain. the agenda of socio-political developments at the national, regional and lo- cal levels. Journal of Rural Studies 17, 2001, pp. 81-97. 17 eUrOPeAn cOMMiSSiOn, 2004b, Environment and Forestry. Biodiversity Action Plan& , op. cit., pp. 9-10; EUROPEAN cOMMiSSiOn, 2005f, court of Auditors, Special Report n 3-2005 concerning rural development: the verication of agri-en- vironment expenditure, together with the Commission s replies. Ofcial Journal of European Union C-279, 11-XI-2005, p. 5-6. 18 AMP, 46/1. resumen del Amillaramiento de 1859. total en cultivo: 2.341,66 hectreas. total del trmino 10.420 hectreas. 19 AMP, L-47, subcarpeta 6 varia, Designacin de los cultivos y extensin supercial del terreno de cada cultivo, 21 de julio de 1882. total en cultivo: 2.717,65 hectreas. 20 resumen del Amillaramiento de 1900: r. BelAndO cArBOnell, realengo y seoro... op. cit., p. 263, cuadro cXli. total en cultivo: 2.762,03 hectreas. 21 M. HernndeZ HernndeZ, Paisajes agrarios... op. cit., p. 221. 22 Datos de la Ocina del Catastro, actualizados a diciembre de 2006. Segn el catastro hay 1.533,11 hectreas dedicadas al cultivo. 189 Sabina Asins Velis en cuanto al tipo de poblamiento, todava en el ao 1935 el nmero de familias de agricultores que 23 vivan en casas dispersas por el territorio supona el 8,03% de los habitantes de Petrer (tabla i-6.1) , cantidad que se elev al 10,65%, en 1955, pero que inclua un nmero importante de zapateros que 24 vivan en el Guirney . este porcentaje baj drsticamente en el ao 1965, hasta alcanzar nicamente el 25 1,52% de la poblacin (tabla i-6.2) . en la actualidad las casas diseminadas por el territorio se dedican principalmente a segunda residencia. Si consideramos la distribucin por usos del suelo, utilizando los datos del catastro del ao 2006, el 14,72% del territorio est destinado a la produccin agrcola, el 73,58% a pinar, matorral y pastos y el 11,70% restante a otros usos, como construcciones urbanas, polgonos industriales, etc. (tabla i-6.3, Grca I-6.2). Es importante destacar que en Petrer el porcentaje dedicado a forestal, prados y pastizal (73,58%) es ms del doble del estimado para la provincia de Alicante y netamente superior al de la co- 26 munidad Valenciana, que hemos calculado en el 35,46% y 50,45% de su territorio, respectivamente . Grca I-6.1. Variacin de la supercie cultivada en Petrer entre 1611 y 2006 Tabla I-6.1. resumen del padrn, 1 de diciembre de 1935 (Fuente: AMP, 27/3. Padrn de vecinos 1935-1940) PARTIDA n PARTIDA n PARTIDA n PARTIDA n la canal 40 Sta. Brbara 115 Acequia Abajo 3 esquinal 31 casa Plaza 25 Almorch 13 cuevas del ro 118 Hoya Falsa 7 campico 11 Pedrera 28 Ginebre 12 cat-calafate 10 ensanche 9 Poblet 9 Almadraba 23 cat-Alach 7 Secanets 13 Pantano 4 Venteta 4 cat-Administracin 12 Almafr 218 casa dols 12 rabosa 35 cat-casa nab 2 Ferrusa 5 cochinet 16 cachuli 3 cat-carrascalet 5 Horteta 3 caprala 47 Gurrema 8 cat-clot Maez 18 estrecho 4 navayol 12 Mirabuenos 7 Palomaret 41 Salinetas 13 Molinos 16 Figueralet 7 casas Onil 8 la Molineta 8 cruz ro 6 Pusa 30 Almafr 3 Guirney 116 tOtAl cAMPO 505 habitantes tOtAl PUeBlO 5.786 habitantes TOTAL AO 1935 6.291 habitantes 23 AMP, 27/3. Padrn de vecinos 1935-1940. resumen del padrn, 1 de diciembre de 1935. 24 AMP, 1309, Padrn de vecinos 1956-1960. resumen del padrn, 31 de diciembre de 1955. 25 AMP, 1311, resumen Padrn, 31 diciembre de 1965. 26 MiniSteriO de MediO AMBiente Y MediO rUrAl Y MArinO, 2009, Anuario de Estadstica& op. cit., p. 19. 190 La actividad agrcola actual en el trmino municipal Tabla I-6.2. resumen Padrn 31 diciembre de 1965. (Fuente: AMP 1311) (*de los 37 vecinos de Santa Brbara, solo 1 de ellos era agricultor y 2 eran jornaleros) PARTIDA N PARTIDA N caprala 27 navayol 8 cat 32 Palomarets 4 el cid 1 Ventetas 8 esquinal 12 Pedreras 20 Ginebre-Almadraba 3 Pusa 27 Horteta 3 Salinetas 27 Ferrusa 2 Sta. Brbara 37* Forcat 2 tOtAl cAMPO: 213 habitantes tOtAl PUeBlO: 13.817 habitantes TOTAL AO 1965 14.030 habitantes Tabla I-6.3. distribucin por usos del suelo (Elaboracin propia a partir de la Base de Datos de la Ocina del Catastro de Alicante, 2006) DEDICACIN hectreas % sobre el total cultivos de secano 1.252,02 12,02 cultivos de regado 281,09 2,70 SUBtOtAl 1.533,11 ha (14,72% del total) Pastos 548,13 5,26 Pinar maderable 5.356,97 51,41 Matorral 1.762,54 16,91 SUBtOtAl 7.667,64 ha (73,58% del total) Otras supercies (urbana, ...) 1.219,25 11,70 TOTAL 10.420,00 Grca I-6.2. Usos del suelo en porcentajes (Elaboracin propia a partir de la Base de Datos de la Ocina del Catastro de Alicante, 2006) los mapas que se insertan en el anexo a este libro, relativos a la explotacin actual del territorio, se han elaborado con las bases de datos facilitadas por la Ocina del Catastro en Alicante. Para facilitar su correlacin con trabajos previos realizados en el municipio, su distribucin en hojas sigue el esquema introducido en la publicacin coordinada por H. navarro Guilln, en el que se recogen todos los topni- 27 mos actuales de los distintos parajes del trmino de Petrer . la superposicin de las curvas de nivel y de la ortofoto a escala 1:5.000 a las capas de cultivos, al de- talle de parcela, nos ha permitido calcular la altitud mxima a la que se instalaron los campos de cultivo 27 H. nAVArrO GUilln (coord.), Petrer: Tierra y Cielo. Un paseo por Petrer y sus alrededores. Petrer: Alvent comuni- caci (ed.), 2005. 191 Sabina Asins Velis y se construyeron los bancales de muros de mampostera, as como la incidencia del abandono atendien- do a la ubicacin de los mismos. la recopilacin de los datos nos ha permitido distinguir entre: a) reas productivas, en las que se mantienen los cultivos en bancales. no obstante, debido al ta- mao pequeo y medio de estas explotaciones y a la diversicacin de la economa, se trabajan a tiempo parcial. en estas zonas los agricultores deben afrontar importantes problemas, como las costosas tareas de mantenimiento de los muros de mampostera en seco. b) Por otro lado, aquellas zonas difcilmente mecanizables, alejadas de los ncleos de poblacin, mal comunicadas, y consideradas marginales desde el punto de vista econmico, que se roturaron y ate- rrazaron principalmente en los siglos XViii y XiX, se han abandonado y han reorientando su dedicacin a otros usos. las zonas en las que el cultivo permanece se trata preferentemente de depsitos cuaternarios, ms llanos, junto a las ramblas principales, sobre todo en caprala, Pua, cotxinets, l Almadrava, l Almafr y els colegials. la altitud de estas partidas oscila entre los 440-480 metros de l Almafr y els colegials, 480-520 m en els cotxinets, 640-680 m en los depsitos de la rambla de caprala, 640-680 m en la rambla de Pua, 640-700 m en l Almadrava, 720-760 m en la casa de castalla y 720-840 m en la Admi- nistracin. todas estas partidas se dedican principalmente al cultivo de almendros y olivos en secano, y estn bien comunicadas con el pueblo por medio de carreteras locales. los campos abancalados abandonados los localizamos tanto en las cercanas del pueblo como en reas ms aisladas. las zonas que se abandonaron cerca del pueblo se cultivaban en laderas sobre margas preferentemente, en donde los procesos erosivos han actuado con gran rapidez. en estas reas se abandonaron tanto los campos ubicados a baja cota como a altitudes superiores, por ejemplo en co- legiales de 400 a 520 m, Salinetes y rebent, entre 440-480 m, en Berbegala entre 440-600 m, en els Blanquizals, las casas del cid y enclavados de cultivo en els Xaparrals entre 480-560 m y en Aiguarrius a 560 m. en partidas algo ms alejadas del ncleo de poblacin se observa igualmente que el abandono afect tanto a tierras situadas a cotas ms bajas como en les Pedreres Altes a 480 m, el barranco junto a la ca- rretera de caprala en els coxinets a 480 m, en la casa del dols entre 480-520 m, en la casa del llop de 520 a 600 m, Pua entre los 560 y 640 m, en el barranco de la casa del estret, Palomarets y Fontanars desde 600 m, en Fond Feo y Saleres entre 600-640 m, como a aquellas ubicadas a cotas superiores, por ejemplo frente al arenal del Almorch a 640 m, dentro del cauce de la rambla de caprala, entre 680 y 720 m, en el Altet dels Gegantets a 680-720 m, en las faldas del caballo frente a Pua entre 680-860 m, en el Perri, Mirabuenos, calafate y cantal del Moro hasta 720 m, en Figueralet hasta 760 m, zonas de difcil acceso como el rac coloma y la cova de la ta estebana, entre 720-840 m, la casa de Quintn, el rac rafel y el Ginebre hasta los 800 m, o reas de la Administracin entre 800-900 metros. la mayora de estas zonas constan como zonas de matorral o pastos en el mapa de distribucin forestal/pastos, y todava se distinguen con nitidez en la ortofoto los antiguos bancales. Atendiendo a la distribucin de los cultivos, hoy en da el almendro es la variedad que ms extensin 28 ocupa, doblando casi su supercie desde 1990. Si en el ao 1990 se cultivaban 457 hectreas , en 2006 se trabajan 801,79 hectreas tanto en secano como en regado, lo que representa el 52,30% del total cultivado. la produccin en los ltimos 10 aos ha oscilado entre los 60.000 y los 190.000 kg anuales, asociado sobre todo a los fenmenos meteorolgicos. el olivo es el segundo cultivo en extensin, con 341,61 hectreas (22,28% sobre el total), y una produccin de aceituna, tambin en los ltimos 10 aos, entre los 400.000 y los 800.000 kg anuales. el labrado ocupa 255,70 hectreas (16,68%) y la via 97,98 29 hectreas (6,39%) con una produccin entre 72.000 y 225.000 kg anuales . Por su parte los frutales se 28 J.r. AlBArrn MArtn, et. al., la situacin agraria actual en Petrer. Bitrir II, 1993, p. 68. 29 las producciones totales en los ltimos 10 aos en el cuadro 1 de: c. cOrtS SAMPer, S. OrtiZ PreZ, Adaptaciones recientes de la cooperativa Agrcola y estrategias de intervencin. en: X. Amat Montesinos (coord.), Tierra, crditos y agua. El cooperativismo agrario en Petrer 1908-2008. Petrer (Alicante): cooperativa Agrcola de Petrer, 2008, p. 67. Por parecernos ms ables, dado que la fuente es la Cooperativa Agrcola del municipio, utilizamos estos datos en lugar de los facilitados por GenerAlitAt VAlenciAnA (2007b). Informe del Sector Agrario Valenciano 2007. estadsticas Agrcolas. conselleria de Agricultura, Pesca y Alimentacin; tabla Supercies y Producciones. Alicante Ao 2007. 192 La actividad agrcola actual en el trmino municipal extienden por 36,03 hectreas (2,35%), entre los que sobresale el cerezo (Tabla I-6.4, Grca I-6.3). Los cultivos son en su mayora de secano (81,67%), representando el regado nicamente el 18,33% del total 30 cultivado, y un 2,70 del total de usos del suelo . estos porcentajes se fundamentan en la eleccin de los cultivos adaptados a las caractersticas climticas de un territorio como el de Petrer que no est siendo sometido por sus agricultores, como ocurre en otros municipios cercanos, a la sobreexplotacin de los acuferos o a recurrir a trasvases de agua para poner en regado reas extensas, con lo que podemos con- siderar que la agricultura de este municipio es sostenible y compatible con los recursos de agua de los que dispone (Figuras i-6.1 a i-6.21). Tabla I-6.4. Distribucin de la supercie cultivada en Petrer (Elaboracin propia a partir de la Base de Datos de la Ocina del Catastro de Alicante, 2006) Cultivos Secano (ha) Regado (ha) TOTAL (ha) % sobre el total Almendro 706,37 95,42 801,79 52,30 Olivo 286,63 54,98 341,61 22,28 labrado (trigo, cebada...) 157,60 98,10 255,70 16,68 Via 75,05 22,93 97,98 6,39 Frutal 26,37 9,66 36,03 2,35 TOTAL 1.252,02 281,09 1533,11 Grca I-6.3. distribucin de cultivos en porcentajes sobre el total cultivado (Elaboracin propia a partir de la Base de Datos de la Ocina del Catastro de Alicante, 2006) con respecto a la distribucin de la propiedad, a la espera de que en el ao 2010 se publique el nuevo censo Agrario del instituto nacional de estadstica, los datos ms recientes publicados son los del censo 31 Agrario de 1999 . Se trata en su mayora de explotaciones de pequeo tamao, para ser producciones de secano, dado que el 81,09% de las propiedades est entre el rango de 0,1 a 5 hectreas; este porcentaje se eleva al 86,62% si consideramos nicamente la supercie agrcola utilizada (Tablas I-6.5, I- 6.6, I-6.7). el rgimen de tenencia de la tierra es en su mayora (96,20%) en propiedad, considerando igualmente la supercie agrcola utilizada (89,59%), debido sobre todo a la pequea extensin de las explotaciones y al tipo de cultivos, que permite su explotacin con dedicacin a tiempo parcial (tablas i-6.8 y i-6.9). la dedicacin agrcola a tiempo parcial ha hecho necesario la introduccin de maquinaria (tabla i-6.10), que se ha visto igualmente facilitada por la mejora de los caminos rurales. Finalmente, por cuanto se reere a los grupos de edad, los titulares de las explotaciones son preferentemente personas mayores de 65 aos, destacando la prctica ausencia de jvenes entre los propietarios de tierras, debido sobre todo a la baja atraccin que ofrecen las rentas agrcolas comparadas con los sectores secundario y terciario (tabla i-6.11). 30 desde 1957, en que el regado ocupaba el 2,01% del total de usos del suelo (M. HernndeZ HernndeZ, Paisajes agrarios... op. cit., p. 224), est estabilizada su extensin, pues en 2006 representa el 2,70% , como se aprecia en la tabla i-6.3 de nuestro estudio. 31 inStitUtO nAciOnAl de eStAdSticA, Censo Agrario de 1999. http://www.ine.es 193 Sabina Asins Velis Tabla I-6.5. explotaciones, parcelas, unidades ganaderas (UG) y unidades trabajo-ao (UtA) (Fuente: censo Agrario de 1999, instituto nacional de estadstica) Nmero de Nmero de Nmero de Nmero de parcelas Unidades Unidades de explotaciones: explotaciones con explotaciones sin ganaderas (UG) trabajo-ao (UTA) Total tierras tierras 463 460 3 1.049 190 206 Tabla I-6.6. Nmero de explotaciones segn supercie total (hectreas) (Fuente: censo Agrario de 1999, instituto nacional de estadstica) Nmero de explotaciones = 0,1 a 5 = 5 a 10 = 10 a 20 = 20 a 50 = 50 con tierras ha ha ha ha ha 460 373 24 24 19 20 % Sobre el total 81,09% 5,22% 5,22% 4,12% 4,35% Tabla I-6.7. Nmero de explotaciones segn supercie agrcola utilizada (hectreas) (Fuente: censo Agrario de 1999, instituto nacional de estadstica) Nmero de explotaciones con = 0 a 5 = 5 a 10 = 10 a 20 = 20 a 50 = 50 SAU ha ha ha ha ha 441 382 23 20 15 1 % Sobre el total 86,62% 5,21% 4,54% 3,40% 0,23% Tabla I-6.8. Supercie total de las explotaciones segn rgimen de tenencia (hectreas) (Fuente: censo Agrario de 1999, instituto nacional de estadstica) Todos los regmenes Propiedad Arrendamiento Aparcera En otros regmenes de tenencia 7.026 6.759 81 172 14 % Sobre el total 96,20% 1,15% 2,45 0,20% Tabla I-6.9. Supercie agrcola utilizada de las explotaciones segn rgimen de tenencia (hectreas) (Fuente: censo Agrario de 1999, instituto nacional de estadstica) Todos los Propiedad Arrendamiento Aparcera En otros regmenes de regmenes tenencia 1.383 1.239 61 68 14 % Sobre el total 89,59% 4,41% 4,92% 1,01% Tabla I-6.10. Maquinaria propiedad exclusiva de la explotacin (nmero de mquinas) (Fuente: censo Agrario de 1999, instituto nacional de estadstica) Tractores (ruedas o Motocultores, motosegadoras, motoaza- Cosechadoras de cereales Otras cosechadoras cadenas) das y motofresadoras 85 215 0 1 Tabla I-6.11. titulares persona fsica por grupos de edad y ocupacin principal 194 La actividad agrcola actual en el trmino municipal 32 (Fuente: censo Agrario de 1999, instituto nacional de estadstica) las actuales debilidades de la agricultura como sector productivo en Petrer son comunes a muchas reas del mediterrneo europeo, debido principalmente al rgimen de minifundio y al predominio de agricul- 33 tores mayores de 65 aos . Atendiendo a las directrices del Plan de desarrollo rural 2007-2013, las l- neas de ayudas priorizadas por la Generalitat Valenciana, incluidas en las Medidas de Acompaamiento de la Poltica Agraria comunitaria (PAc), se han centrado en: %lnea 1: modernizacin de infraestructuras, %lnea 2: ayudas para jvenes agricultores, %lnea 3: jubilacin anticipada, %lnea 4: forestacin de tierras agrcolas, %lnea 5: indemnizacin compensatoria para zonas de montaa y %lnea 6: medidas agroambientales, que incluyen: - Medida 3: tcnicas ambientales de racionalizacin en el uso de productos qumicos, y es- peccamente la 3.3, produccin integrada en los cultivos de ctricos, vid y uva de mesa; - Medida 4, lucha contra la erosin en medios frgiles, con una pendiente del 8%, y cultivos en terrazas, especcamente para el cerezo en Alicante y el avellano en Castelln; - Medida 5, proteccin de la ora y la fauna de los humedales, en concreto la 5.1, dirigida a los arrozales, - Medida 9, que subvenciona los pastos ecolgicos asociados a una explotacin ganadera. las caractersticas de las explotaciones de Petrer han implicado que en las tres primeras lneas no se ha solicitado ninguna ayuda desde el ao 2000, debido sobre todo a que se requera que los agricultores 34 estuvieran dados de alta en el rgimen agrario de la seguridad social , y como hemos comentado en Petrer no haba ninguna persona que se ajustara a este perl. Con respecto a la lnea de forestacin de tierras agrcolas, lnea 4, nicamente se solicit ayuda para 20 hectreas, de las que en la actualidad slo 35 5 hectreas reciben prima compensatoria por prdidas de renta . 32 Valores: Hasta 34 aos, 14 individuos; de 35 a 54, 119; de 55 a 64, 114; ms de 65, 206. 33 MiniSteriO de AGricUltUrA, PeScA Y AliMentAcin, 2003, Libro blanco de la agricultura& op. cit. 34 GenerAlitAt VAlenciAnA, 2008f, Orden de 25 de marzo de 2008, de la conselleria de Agricultura, Pesca y Alimenta- cin por la que se aprueban las bases reguladoras de las subvenciones en materia de modernizacin de explotaciones agrcolas y de primera instalacin de agricultores jvenes, en el marco del Programa de desarrollo rural de la comunitat Valenciana 2007-2013. dOcV, nm. 5736, de 7 de abril de 2008. informacin sobre Petrer facilitada en enero de 2007 por d. Vicente Paos de la Seccin de Mejora de la direccin territorial de Alicante, conselleria de Agricultura, Pesca y Alimentacin de la Generalitat Valenciana. 35 informacin facilitada en enero de 2007 por da. teresa Velzquez, Jefa de Servicio de Gestin Agraria Sostenible. conse- lleria de Agricultura, Pesca y Alimentacin de la Generalitat Valenciana. 195 Sabina Asins Velis en cuanto a la indemnizacin compensatoria para zonas de montaa, lnea 5, a pesar de los importan- tes problemas ambientales, sobre todo de erosin, que se reconocen en el trmino de Petrer como conse- cuencia del abandono paulatino de la actividad agrcola, debemos resaltar el hecho de que este territorio no se encuentre incluido entre las zonas desfavorecidas de montaa de la comunidad Valenciana que pudieron acogerse a subvenciones, ni en la Orden de 8 enero de 2004 ni en las posteriores del ao 2008. estas ayudas se concedan para asegurar un uso continuado de las tierras agrarias y fomentar sistemas agrarios sostenibles respetuosos con el medio ambiente. de los municipios del entorno, en el Anexo i 36 de estas rdenes, nicamente est incluido el trmino de tibi . esta situacin se repiti, tanto en el ao 2004 como en el 2008, con respecto a la medida 4 de la lnea 6, lucha contra la erosin en medios frgiles, con una pendiente del 8%, y cultivos en terrazas, limitadas especcamente para el cerezo en 37 Alicante y el avellano en castelln , en la que de nuevo es tibi la nica localidad de la zona incluida en el anexo, a pesar de que en Petrer se cultivan cerezos en terrazas susceptibles a sufrir procesos erosivos en partidas como l Almadrava, la Gurrama, etc. Por cuanto se reere a las subvenciones para agricultura 38 ecolgica, nicamente se ha tramitado un expediente de 2 hectreas destinadas al cultivo del almendro , es decir un 0,13% de la supercie cultivada. Tampoco se ha presentado ninguna solicitud para pastos ecolgicos. Finalmente, la reforma de la PAc de junio de 2003 introdujo una nueva lnea de ayudas al agricultor, denominadas derecho de Pago nico. estas ayudas distinguen entre las acopladas, que exigen el cultivo anual, como ocurre con el almendro (aunque en el 2010-2011 puede ser que esto vare) y las desacopla- das, no subordinadas a la produccin de ningn producto especco. Estas ayudas se calculan a partir de las ayudas directas que el agricultor recibi durante el periodo 2000-2002 (1999 a 2002, en el caso 39 del olivar) . en la convocatoria de 2006, se presentaron en la conselleria de Agricultura, Pesca y Ali- mentacin nicamente 177 expedientes de solicitud de estas ayudas por parte de propietarios de tierras 40 41 de Petrer . ese ao haba contabilizados 1.321 propietarios de tierra en la localidad , predominando la pequea extensin (entre 0,1 y 5 hectreas), por lo que solo el 13,39% de ellos habra solicitado el Pago nico. las peticiones de derecho de Pago nico han ascendido ligeramente en el ao 2009, alcanzando 42 las 220, pero an as representa un escaso 16,65% del total de propietarios . la causa del bajo inters puede deberse a que la explotacin agrcola media apenas supera la media hectrea. el almendro, por ejemplo, se subvenciona con unos 180 euros por hectrea. Por cuanto se reere a la vid, no tiene derecho a pago nico; situacin que cambiar a partir de 2010. El olivo se subvenciona en funcin de la produc- cin olecola de los aos de referencia 2001-2003, segn lo que se entrega en la almazara. las potencialidades del campo de Petrer estn muy ligadas al concepto de multifuncionalidad intro- ducida en el seno de la comisin europea y a la vinculacin de las tcnicas agrcolas tradicionales y el 36 GenerAlitAt VAlenciAnA, 2004b, Orden de 8 de enero de 2004 de la conselleria de Agricultura, Pesca y Alimenta- cin por la que se regula la indemnizacin compensatoria en determinadas zonas desfavorecidas de la comunidad Valenciana en el ejercicio 2004. DOGV, nm. 4678, de 27 de enero de 2004; GENERALITAT VALENCIANA, 2008a, Orden de 21 de enero de 2008& op. cit. 37 GenerAlitAt VAlenciAnA, 2004c, Orden de 8 de enero de 2004 de la conselleria de Agricultura, Pesca y Alimenta- cin por la que se regulan las ayudas a la utilizacin de mtodos de produccin agraria compatibles con el medio ambiente, en el ejercicio 2004, correspondientes al Programa nacional de desarrollo rural para las Medidas de Acompaamiento. dOGV, nm. 4677, de 26 de enero de 2004; GENERALITAT VALENCIANA, 2008a, Orden de 21 de enero de 2008& op. cit. 38 informacin facilitada en diciembre de 2006 por d. teresa Velzquez, Jefa de Servicio de Gestin Agraria Sostenible. con- selleria de Agricultura, Pesca y Alimentacin de la Generalitat Valenciana. 39 GenerAlitAt VAlenciAnA, 2009b, Orden de 23 enero de 2009, de la consellera de Agricultura, Pesca y Alimentacin, sobre cuestiones generales aplicables al rgimen de ayudas agroambientales e indemnizacin compensatoria y rgimen aplica- ble al pago nico y otras pagos directos a la agricultura y ganadera en el mbito de la comunitat Valenciana y de aprobacin de las bases reguladoras de ayudas de pago nico y otras ayudas directas. dOcV, nm. 5946, de 3 de febrero de 2009. 40 informacin facilitada en diciembre de 2006 por d. ricardo llcer, Jefe de Servicio de Proteccin de rentas Agrarias, con- selleria de Agricultura, Pesca y Alimentacin de la Generalitat Valenciana. Adems se han presentado 19 solicitudes de admi- sin, sin derecho a cobro (informacin facilitada por d. carlos Pay de la cooperativa Agrcola de Petrer, enero de 2007). 41 Informacin facilitada por D Sara Snchez de la Ocina de Desarrollo Econmico del Ayuntamiento de Petrer, octubre de 2009. 42 informacin facilitada por d. carlos Pay de la cooperativa Agrcola de Petrer, octubre de 2009. 196 La actividad agrcola actual en el trmino municipal desarrollo rural. entre las medidas recomendadas para la preservacin del paisaje y las tcnicas de ex- plotacin agrcola tradicionales, de aplicacin en el territorio de Petrer, destacaramos las siguientes: a) Apoyo a la agricultura activa en la actualidad, son numerosos los motivos que se aducen para el mantenimiento de la agricultura en las reas de montaa, tanto a nivel social como ambiental. en su vertiente social, supone sobre todo la continuacin de un estilo de vida, que se remonta en europa a ms de 8.000 mil aos. en este sentido, con el n de estimular la forma de vida rural, las medidas aplicadas en el conjunto del pas se han centrado en las ayudas destinadas a la modernizacin de las explotaciones agrarias, la incorporacin de agricultores jvenes, la promocin de las mujeres en el medio rural, el fomento del asociacionismo 43 y la formacin, y otras medidas de acompaamiento de la PAc . entre las ventajas con que cuenta la localidad para canalizar tanto la produccin agrcola como la distribucin de informacin a los agricultores destacamos el funcionamiento de la cooperativa Agrcola, que en el ao 2008 celebr su 44 centenario . el concepto de organizacin del paisaje agrcola, por medio de la agricultura activa, es factible en las zonas aterrazadas ms productivas o en aquellas cuyos propietarios las mantienen a tiempo parcial ms por tradicin familiar que por rentabilidad econmica. A nivel ambiental, las buenas prcticas agrcolas contribuyen positivamente a la conservacin de la ora y la fauna asociadas a la agricultura. Por ello, la Comisin Europea ha identicado el proceso de abandono agrcola como uno de los cam- 45 bios ms signicativos que alteran el equilibrio agricultura-biodiversidad . Solamente en la comu- nidad Valenciana se han inventariado 106 especies de ora antiguamente cultivada (posteriormente asilvestrada o integrada en el medio natural), de las cuales 43 especies se consideran extinguidas en la 46 comunidad . Adems el mantenimiento de los aterrazamientos dedicados al cultivo aporta ventajas en la prevencin de los incendios forestales, ya que disminuyen la velocidad de propagacin del fuego 47 y mantienen la vegetacin aislada de los ncleos de habitacin, entre otros aspectos . 48 De acuerdo con una clasicacin bsica de los paisajes europeos , el espacio agrcola en activo de Petrer se incluira entre los siguientes tipos: %Paisajes caracterizados tanto por ncas agrcolas de bajo input y baja contaminacin como por la me- jora del hbitat y la biodiversidad. Se encuadraran en este punto las ncas de Pua, Caprala, Ginebre, navayol, la Gurrama y en general todas las partidas del trmino. reseamos, sin embargo, que el porcentaje de explotaciones inscritas en el comit de Agricultura ecolgica de la comunidad Valen- ciana es todava muy bajo en Petrer, con una supercie total de 9 hectreas, de las que 6,5 se dedican a olivar y el resto a frutales y almendro. no obstante podran acogerse muchas ms hectreas porque 49 numerosas explotaciones renen los requisitos que se exigen para inscribirse . 43 MiniSteriO de AGricUltUrA, PeScA Y AliMentAcin, 2003, Libro blanco de la agricultura... op. cit. 44 X. AMAt MOnteSinOS (coord.), Tierra, crditos y agua. El cooperativismo agrario en Petrer 1908-2008. Petrer (Ali- cante): cooperativa Agrcola de Petrer, 2008. 45 eUrOPeAn cOMMiSSiOn. 2004b, Environment and Forestry. Biodiversity Action Plan... op. cit. 46 e. lAGUnA, 1998, Flora cultivada, amenazada, extinguida o en extincin. en: Flora endmica, rara o amenazada de la Comunidad Valenciana. Valencia: Generalitat Valenciana, conselleria de Medio Ambiente, pp. 357-359. (pueden presentarse ocasionalmente ejemplares cultivados mantenidos en colecciones, jardines botnicos, etc.). 47 J.F. GAltie et al., les paysages de terrasses l preuve de l incendie: comportement, durabilit et enjeux. le cas de la r- gion de collioure / Banyuls-sur-Mer/Port-Vendres (Pyrnes-Orientales). Actas de las Jornadas sobre terrazas y prevencin de riesgos naturales. Consell de Mallorca: Departament de Medi Ambient, 2007, pp. 227-238; J. JOY, A. MEDRANO, Valoracin de terrazas frente a incendios forestales en la cAiB. Actas de las Jornadas sobre terrazas y prevencin de riesgo.. op. cit., pp. 239-243; L. LOURENO, A. NAVE, O papel dos socalcos na prevenao de incndios forestais. Exemplos das bacias hidro- grcas dos rios Alva e Alvoco (Serras do Aor e da Estrela). Actas de las Jornadas sobre terrazas y prevencin de riesgo.. op. cit., pp. 203-211. 48 cOMMiSSiOn OF tHe eUrOPeAn cOMMUnitieS, 2000, Indicators for the Integration of Environmental Concerns into the Common Agricultural Policy. COM (2000) 20 nal, p. 24. Planteamientos tericos acerca de la utilidad o no de las clasicaciones del paisaje en: B. PEDROLI, et al., Landscape what s in it Trends in European landscape science and priority themes for concerted research. Landscape Ecology 21, 2006, pp. 421-430. 49 informacin facilitada por el cOMit de AGricUltUrA ecOlGicA, conselleria de Agricultura, Pesca y Alimen- 197 Sabina Asins Velis %espacios Agrarios de Alto Valor natural y Paisajes culturales amenazados por la marginalizacin de la agricultura, con un papel fundamental para mantener la calidad ambiental. dado el tipo de cultivos y las prcticas agrcolas que se utilizan en Petrer, se enmarcaran en este punto casi todas las ncas del trmino. la Forad destaca por compartir el espacio agrcola con un sistema pastoral de baja in- tensidad. Por otra parte, entre las zonas de cultivo que merecen ms atencin y apoyo en Petrer, para que pueda continuar la agricultura en activo, destacamos el rea que rodea al ncleo urbano. Si bien la expansin de la poblacin desde los aos 60 del siglo XX se hizo a expensas de los bancales de la huerta histrica, en la actualidad los enclavados que todava continan en cultivo al sur del pueblo se encuentran prote- gidos como Suelo no Urbanizable comn (l Almafr Alta y Baja). en estas zonas se deben considerar las importantes sinergias con el entramado urbano y las compensaciones que para la poblacin supone el poder disfrutar de espacios abiertos, con funciones complementarias a las urbanas, junto al lugar de residencia. evitar el vertido de residuos o la contaminacin de las aguas de riego, as como proteger los elementos patrimoniales asociados al cultivo, como los bancales de esta zona de huerta, es poder reco- nocer la historia del municipio: nos atrevemos a decir, el diseo comenzado en poca islmica. b) recuperacin de reas de pasto adyacentes a zonas forestales Si bien desde 1989 se est fomentando la primera reforestacin de las supercies agrcolas abandonadas, las ayudas especcas destinadas no han surtido todos los efectos esperados, ya que estos campos abando- nados son los que presentan en Petrer mayores tasas de erosin, y los que estn provocando la desorgani- zacin de parte de su paisaje. Por ello nos gustara destacar los resultados de los proyectos realizados en Mallorca y en el Pirineo Aragons. Estas investigaciones han identicado los riesgos ambientales ocasio- nados por el abandono agrcola, la disminucin del pastoreo y la ausencia de gestin de los recursos silv- colas, como son, entre otros, el incremento del riesgo de incendios debido a la revegetacin de numerosas laderas, la disminucin de la diversidad ecolgica, as como la disminucin de la disponibilidad de agua en las cuencas. Para hacer frente a estos problemas se propone una alternativa de gestin en estos espacios que se centrara en la transformacin de campos abandonados en zona de pastos, mediante el desbroce de matorrales. Este proceso se realizara seleccionando previamente las reas a intervenir con el n de evitar 50 tasas de erosin del suelo signicativas . c) Mantenimiento de las estructuras tradicionales para diversicar las actividades econmicas, estimular el turismo rural y fomentar la inversin privada en este sentido, las actuaciones que se estn realizando, para restaurar y divulgar el rico patrimonio cultural ligado al paisaje agrcola, no son sucientes, ni a nivel privado ni por parte de la administra- cin pblica, siendo sta la causa principal del deciente estado de conservacin en que se encuentran numerosas construcciones rurales. entre las iniciativas particulares destaca el esfuerzo inversor que se est realizando en algunas ncas para preservar los abancalamientos de piedra en seco y las cons- trucciones asociadas a ellos, as como el inters por ampliar la oferta de turismo rural, como el hotel La Porta del Aigua, o restaurando antiguas ncas de labor, como la casa rural La Esperanza, ligado a la atraccin que ejerce en la actualidad entre los ciudadanos este tipo de contacto con la naturaleza y el tacin, Generalitat Valenciana, julio de 2006: las empresas ubicadas en Petrer que comercializan productos ecolgicos son BOCOPA, que elabora y embotella vinos y vinos de licor; Carrefour, que distribuye pan ecolgico y Jos Luis Valds Espinosa, productos de pastelera. 50 G. AlOMAr, G. BArdi, Prevencin y lucha contra los incendios forestales. el uso de ganado en los campos abancalados de la Serra de tramuntana. Actas de las Jornadas sobre terrazas y prevencin de riesgo& op. cit., pp. 245-251; S.M. VICENTE- SerrAnO, et al., Inuencia de la ganadera en la evolucin del riesgo de incendio en funcin de la vegetacin en un rea de montaa: el ejemplo del valle de Borau (Pirineo aragons). Geographicalia 38, 2000, pp. 33-58; M.P. ERREA, et al., Aplica- cin de SiG para seleccionar campos abandonados recuperables como reas de pastoreo en el Pirineo Aragons. en: c. conesa, Y. lvarez, J.B. Martnez Guevara (eds.), Medio Ambiente, Recursos y Riesgos Naturales. Anlisis mediante tecnologa SIG y Teledeteccin. Murcia: Universidad de Murcia, 2004, pp. 117-130; T. LASANTA, et al., Mountain Mediterranean landscape evolution caused by the abandonment of traditional primary activities: a study of the Spanish central Pyrenees. Applied Geog- raphy 25, 2005, pp. 47-65; T. LASANTA, et al., Using landscape ecology to evaluate an alternative management scenario in abandoned Mediterranean mountain areas. Landscape and Urban Planning 78, 2006, pp. 101 114. 198 La actividad agrcola actual en el trmino municipal 51 medio rural . no obstante, es necesario hacer un estudio previo acerca de los posibles inconvenientes que puede comportar una importante auencia turstica (nmero de visitantes, capacidad de acogida, sectores beneciados, etc.,), as como la evaluacin de los nuevos conceptos introducidos en el medio 52 rural como autenticidad, mercantilizacin y globalizacin . Por otra parte es necesario evaluar las posibilidades de empleo que generan tanto la rehabilitacin y el mantenimiento de las estructuras arquitectnicas, como los nuevos complejos tursticos que se establezcan. d) Preservacin de las caractersticas histricas del paisaje Si la proteccin de la diversidad ecolgica en los campos de cultivo es uno de los objetivos de la comisin europea, no es menos importante el mantenimiento de los elementos culturales asociados 53 al paisaje rural . Histricamente, el cambio es inherente al paisaje, con la introduccin de nuevos cultivos, la ampliacin de las conducciones de riego y de las reas aterrazadas, la construccin de nuevas heredades, etc., lo que ha congurado el actual carcter del paisaje de Petrer. Hoy en da han desaparecido en la localidad cultivos importantes en el siglo XVii, como la barrilla, el salicornio, el ans, la uva de pasa... pero todava muchas de las infraestructuras centenarias siguen estando ah. Por ello se hace necesario preservar la Historia de Usos que se reeja en el paisaje rural, del mismo modo que se respetan y recuperan en las ciudades los rasgos de su pasado. Sera prioritario intervenir, entre otros lugares, en el Pantanet y su entorno; en el aljibe del Esquinal; en las balsas de Cotxinets, La Seora, Caprala, Palomarets, la Foia Falsa; en las minas de Noguera, Pua, Bienvenida, Fontanars; en las minetas del Cid, Pepiosa, Bernab; en los parats del Cid, Perri, Catxuli, l Aavaiol, Coxinets; en els alcavons de Pua, en las boqueras, pozos, caboyas y abrevaderos repartidos por el trmino; en los bancales del Figueralet, Pua, el Fondo Feo; recuperar el atractivo del casero de Santa Brbara ya en pie en el siglo XVi,... e incluso restaurar algunas cuevas-habitacin, como la de la ta estebana o las de navayol, y en este mismo paraje recuperar la calera de Villaplana. Sealizar rutas a pie por las ramblas, incluso hacer rutas temticas (como la de las partidas de cultivo en poca morisca, por el 54 Alhaig, Almatar, navayol, Berbegala, el acueducto de San rafael, etc.) . incluso se poda plantear la compra por parte del Ayuntamiento de alguna heretat para instalar un centro de interpretacin del Paisaje de Petrer, y que mejor sitio para ello que la casa de Monis (popularmente conocida como de la capellana), en la que vivi el Profesor Jos M Bernab, tan 55 dedicado al estudio del paisaje de Petrer . todas estas iniciativas permitiran ligar el territorio con su historia escrita, que nos aporta interesante informacin sobre quines, cundo, cmo y porqu lo construyeron. las futuras acciones de ordenacin territorial que se realicen en el municipio deben integrar esa diver- 56 sidad de actuaciones en los instrumentos de planicacin y gestin, como se viene recomendando . Para ello, sera oportuno el diseo previo de una serie mnima de indicadores a nivel local. estos indi- cadores, centrados directamente en valorar la contribucin de los sistemas de conservacin de suelo y agua, puede ser una herramienta muy til para implementar las polticas de la comisin europea, as 51 i. VAnSleMBrOUcK, et al., impact of agriculture on rural tourism: a hedonic pricing approach. Journal of Agricultural Economics 56, 2005, pp. 17-30. 52 A. BUiJS et al., From hiking through farmland in a leisure landscape: changing social perceptions of the european landscape. Landscape Ecology 21, 2006, pp. 375-389; S. SWAFFIELD, J. PRIMDAHL, Spatial concepts in landscape analysis and policy: some implications of globalisation. Landscape Ecology 21, 2006, pp. 315-331. 53 dGiV/dc-FArO, 2005, Ministerial conference. Intercultural Dialogue: The Way Ahead. Closing Conference of the 50th Anniversary of the European Cultural Convention. 27-28 October 2005. Faro, Portugal. Framework Convention of the Council of europe on the value of cultural heritage for society. 54 F.J. JOVer MAeStre, t.V. PreZ MedinA, t. Petrer, el cam de la rambla de Pua. en: t. Prez Medina (coord.), Arquitectures tradicionals de l aigua a les Valls del Vinalop. Serie Punt d encontre n 1. Petrer: centre d estudis locals del Vinalop, 2007, pp. 45-61; R. MILL POVEDA, I hui& on anem Petrer: Ajuntament de Petrer, 2009. 55 T.V. PREZ MEDINA, Un projecte inacabat de Josep M. Bernab: Geograa histrica dels espais irrigats de Petrer (les Valls del Vinalop). Cuadernos de Geografa 67/68, 2000, pp. 23-35. 56 Vase un ejemplo de aplicacin en: i. BielSA et al., Agricultural abandonment in the north eastern iberian Peninsula: the use of basic landscape metrics to support planning. Journal of Environmental Planning and Management 48(1), 2005, pp.85-102. 199 Sabina Asins Velis como para proporcionar informacin cuantitativa y para validar la ecacia de estas medidas. Entre los modelos ya desarrollados destacamos el elaborado por la diputacin de Barcelona: Sistema Municipal 57 de indicadores de Sostenibilidad de la red de ciudades y Pueblos hacia la Sostenibilidad . Otro estu- dio de aplicacin es el dirigido por l. recatal Boix, en el que se ha seleccionado un exhaustivo set de indicadores para evaluar la calidad ambiental de los municipios, incluido el semi-rido mediterrneo, 58 que permite tambin disear escenarios futuros . entre los modelos sectoriales, el desarrollado por de 59 Aranzbal et al. puede ser considerado como un indicador agroambiental efectivo de aplicacin al pai- saje aterrazado, sobre todo en cuanto se reere a contemplar escenarios de cambio ligados a la actividad socioeconmica. tambin de carcter sectorial es el centrado en el turismo, desarrollado por el equipo 60 de trabajo dirigido por J.F. Vera rebollo para la provincia de Alicante . en Petrer en particular, y en el territorio valenciano en general, los resultados que se derivaran de estos estudios, complementaran los que se han obtenido recientemente combinando el uso de SiG con indicadores ambientales para valorar 61 la degradacin qumica, fsica y biolgica de los suelos, incluidos los agrcolas . Fig. I.6.1. Valle de caprala (almendros) 57 DIPUTACI DE BARCELONA, Sistema Municipal d Indicadors de Sostenibilitat. http://www.diba.cat/xarxasost/indi/ info_ind.asp 58 l. recAtAl BOiX (dir.), Indicadores e ndices integrados en la Agenda 21 Local para la evaluacin de la calidad ambiental en reas afectadas por deserticacin del mbito mediterrneo. Valencia: Fundacin Biodiversidad; Universitat de Valncia, 2009. 59 i. de ArAnZBAl, et al., Modelling of landscape changes derived from the dynamics of socio-ecological systems. A case study in a semiarid Mediterranean landscape. Ecological Indicators 8, 2008, pp. 672-685. 60 J.A. IVARS BAIDAL, Planicacin y gestin del desarrollo turstico sostenible: propuestas para la creacin de un sistema de indicadores. documentos de trabajo, nm. 1, 2001. Alicante: instituto Universitario de Geografa, Universidad de Alicante. 61 J.M. de PAZ, et al., combined use of GiS and environmental indicators for assessment of chemical, physical and biological soil degradation in a Spanish Mediterranean region. Journal of Environmental Management 79, 2006, pp. 150-162. 200 La actividad agrcola actual en el trmino municipal Fig. I.6.2. Parte alta de caprala (vias) Fig. I.6.3. Pla de Manel (almendros) 201 Sabina Asins Velis Fig. I.6.4. Pla de Manel (olivos) Fig. I.6.5. la Forad (almendros y olivos) 202 La actividad agrcola actual en el trmino municipal Fig. I.6.6. casa de castalla (olivos y almendros) Fig. I.6.7. rabosa (almendros) 203 Sabina Asins Velis Fig. I.6.8. l Administraci (almendros) Fig. I.6.9. el carrascalet (almendros) 204 La actividad agrcola actual en el trmino municipal Fig. I.6.10. casa dels Pins (almendros) Fig. I.6.11. Xinquera, frente a la casa del esquinal (almendros y olivos) 205 Sabina Asins Velis Fig. I.6.12. el rancho Grande, Pua (almendros) Fig. I.6.13. la Gurrama (almendros, olivos y cerezos) 206 La actividad agrcola actual en el trmino municipal Fig. I.6.14. la Gurrama (olivos) Fig. I.6.15. casa de la capellana. en 1926 haba plantados almendros, olivos, dos granados, trigo, cebada, avena, garbanzos y lentejas; en la actualidad almendros y cereal. Al fondo la Casa de la Seora 207 Sabina Asins Velis Fig. I.6.16. cotxinets (almendros) Fig. I.6.16. cotxinets (almendros, via y olivos) 208 La actividad agrcola actual en el trmino municipal Fig. I.6.17. l Almadrava (cerezos y almendros) Fig. I.6.18. l Almadrava (olivos) 209 Sabina Asins Velis Fig. I.6.19. el Ginebre (olivos y almendros) Fig. I.6.20. Marquesat de noguera (olivos) 210 La actividad agrcola actual en el trmino municipal Fig. I.6.21. Salinetes (almendros) 211 SEGUNDA PARTE RIQUEZA CULTURAL Y AGRO-AMBIENTAL DEL PAISAJE ABANCALADO los elementos patrimoniales que describiremos seguidamente van a ser incorporados al sistema ico- nogrco SITTI (Systems of Traditional and Innovative Techniques) del Banco de datos Mundial de conocimientos tradicionales (Traditional Knowledge World Bank), desarrollado por iPOGeA bajo el 1 patrocinio de UneScO . entre los iconos ya incluidos en Sitti, se encuentran representados en Petrer los siguientes: AGRICULTURA Y PROTECCIN DEL SUELO: GESTIN DEL AGUA: 1 la versin de los iconos en castellano en: P. lAUreAnO, Atlas de Agua. Los conocimientos tradicionales para combatir la deserticacin. Barcelona: laia libros ed., UneScO, 2005. CONSTRUCCIONES TRADICIONALES: ASPECTOS SOCIALES: Captulo 1: Caractersticas tipolgicas de los bancales 1. Clasicacin morfolgica de los sistemas de conservacin de suelo Una vez esbozado el anlisis histrico, que nos ha permitido conocer las lneas principales de evolucin y ampliacin del paisaje abancalado de Petrer, presentamos las caractersticas constructivas ms impor- tantes de estas estructuras. La clasicacin que hemos adoptado es la propuesta por el equipo del proyec- 2 to PAtter (Patrimonio de bancales en el Mediterrneo occidental, una propuesta de catalogacin) , dado que el enfoque metodolgico y las completas chas de rea y de sector que proponen se adaptan perfectamente a nuestra zona de estudio. en este apartado se incluyen parmetros como la disposicin de los campos de cultivo, la litologa del paramento, el tipo de aparejo, el tipo de coronamiento y otros elementos constructivos, como pueden ser las escaleras de acceso a los campos superiores. las principales diferencias que hemos encontrado a lo largo del tiempo, en cuanto a las caractersticas constructivas, conciernen tanto a la variable tipolgica como de funcionamiento. en este sentido cuando se ha optado por no utilizar la tcnica tradicional de construccin, con muros de mampostera de piedra en seco, se han introducido en el paisaje elementos tan fuera de contexto como encofrados y bloques de hormign, neumticos de camin e incluso somie- res, con los que se han intentado frenar los procesos de prdida de suelo en laderas con pronunciada pendiente. no obstante, la mayora de las actuaciones de este tipo realizadas en los ltimos aos pueden ser todava reversibles, y estn ya prohibidas en el reglamento que desarrolla la ley de Ordenacin del territorio y Proteccin del Paisaje de la Generalitat Valenciana. Por cuanto se reere a la descripcin de las caractersticas tipolgico-morfolgicas de los elementos hidrulicos de Petrer, stos han sido estudiados en parte por los miembros del grupo eStePA (estudios 3 del territorio y del Patrimonio) del departamento de Geografa de la Universitat de Valncia . el tra- bajo del grupo eStePA se ha centrado en la catalogacin de las estructuras relacionadas con el regado histrico y la cartografa de la red, por lo que consideramos que el estudio que nosotros presentamos sobre su evolucin histrica, y al que aadimos otras construcciones localizadas en el trmino, podr 4 complementar sus resultados . A nivel de la comunidad Valenciana, las caractersticas constructivas de los bancales, junto con las prcticas de conservacin de estas estructuras, son de inters para cuanticar su ecacia frente a los procesos erosivos. en este sentido, gracias a la base de datos que se confeccion para elaborar los mapas de capacidad de usos del suelo de la comunidad Valencia se ha podido extraer una aproximacin carto- 5 grca de esas prcticas y de la ecacia de estos abancalamientos . en el proyecto, cuando los abancala- mientos fueron considerados efectivos frente a la erosin se tuvo en cuenta, adems del valor de longitud y ngulo de la pendiente natural del terreno (factor lS de la ecuacin Universal de Prdida de Suelo -USle-) el valor de la longitud y ngulo de los aterrazamientos estimados efectivos. As, los bancales con una profundidad de al menos veinte metros, acondicionados para el cultivo, se identicaron como LSt siendo la t indicativa de la efectividad del aterrazamiento frente a la accin de los procesos erosivos. en la base de datos del mencionado proyecto este valor acompaa al de longitud y ngulo de la pendien- te, caso de que esta prctica no se haya considerado efectiva en toda la supercie contabilizada, sino en alguna parte de ella. el nuevo valor que se le aplic al factor LS de la USle fue una media ponderada que corresponde al de las reas con bancales efectivos junto a aquellas en las que no lo son. 2 A. cOlOMAr MAr (dir.), Patrimoni de marjades a la Mediterrnia Occidental. Una proposta de catalogaci. consell de Mallorca. departament de Promoci i Ocupaci. FOdeSMA, 2002. 3 J. HerMOSillA PlA (dir.), Los regados tradicionales del Vinalop (Alto y Medio). Valencia: Generalitat Valenciana, Universitat de Valncia. coleccin regados Histricos Valencianos, 2007. 4 Un trabajo de catalogacin previo en: J. HerMOSillA PlA (dir.), Las galeras drenantes en el sureste de la pennsula ib- rica: uso tradicional del agua y sostenibilidad en el Mediterrneo espaol. Madrid: Ministerio de Medio Ambiente, 2006. 5 c. AntOln, et al., Aplicacin de la ecuacin Universal de Prdida de Suelo en la comunidad Valenciana. en: c. Antoln (coord.), El suelo como recurso natural en la Comunidad Valenciana. Valencia, 1998, pp. 136-165. Sabina Asins Velis en el estudio no se incluyeron los bancales en los que el estado de deterioro era evidente, o se situaban en pendientes topogrcas superiores al 25%, pues no se consideraron efectivos. La evaluacin del Factor LS como LSt da valores ms bajos, y por consiguiente el valor de prediccin de prdida de suelo de la USle es menor. estos valores son ms acordes con la realidad de campo en las reas donde estas prcticas de conservacin se han mostrado efectivas, es decir, mientras se han mantenido los muros de mampostera. Un estudio en profundidad de esta informacin permitir, a nivel de la comunidad Valenciana, establecer la representacin cartogrca de la presencia de los abancalamientos efectivos frente a los procesos erosivos. en funcin de esa base de datos se presenta la Figura ii-1.1, en la que se han diferenciado las uni- dades con Moderada y Baja capacidad de Uso debido a limitaciones de pendiente, que coinciden con reas histricamente abancaladas. estos aterrazamientos han permitido poner en cultivo zonas que, de haberse cultivado sin la construccin de estas estructuras de retencin de suelo, hubieran experimen- tado importantes procesos erosivos. no obstante, en la actualidad, debido al abandono agrcola y a la falta de mantenimiento de los muros de mampostera se est produciendo el desmoronamiento de estas estructuras, con el consiguiente arrastre y prdida de suelo, sobre todo alli donde no se ha producido la colonizacin vegetal en los primeros estadios de abandono. # Castelln # Valencia # Alicante n 0 10 20 30 40 Kilometers Fig. II-1.1. reas con capacidad de uso moderada o baja, histricamente abancaladas. Se han considerado aquellas unidades en las que la pendiente es la 1 la 2 limitacin: c (capacidad de Uso Moderada) ! cp (5,2%): cep, cpf, cpg, cpq, cpr, cpx d (capacidad de Uso Baja). ! dp (12,4%): dep, dpf, dpg, dpq Metodologa: C. ANTOLN, C. A, 1998, pp. 111-131; y la Base de Datos incluida en el CD del libro 220 Caractersticas tipolgicas de los bancales el estudio de las caractersticas constructivas de los campos dispuestos en bancales (en gradera o an- teatro en palabras de Cavanilles), tiene en consideracin los factores que denen la conguracin de este espacio, que estarn en funcin de la pendiente, la litologa, el tipo de suelo sobre el que se instalan, la orientacin de la ladera, etc. A) DISPOSICIN DE LOS CAMPOS ABANCALADOS las variables que determinan la forma en que se distribuyen los campos de cultivo estn relacionadas tanto con las particularidades fsicas de la ladera como con la inversin de capital o de mano de obra. de igual modo, su ubicacin puede estar supeditada a la disponibilidad de agua, proporcionada por ramblas o torrentes, o al diseo del espacio hidrulico cuando se estructuran en relacin a una balsa o conjunto de ellas. Dependiendo tambin de las caractersticas del rea, el tamao de la supercie de cultivo puede variar desde una hilera de rboles hasta campos ms extensos, destinados por lo general en origen al cultivo de cereales. La tipologa diferenciada en el paisaje agrario de Petrer se clasica como sigue: Paralela continua: es la ms extendida en el trmino. Se caracteriza porque los muros se construyen en alineaciones paralelas a lo largo de la ladera, variando en funcin de la morfologa y litologa del terreno y del tipo de suelo sobre el que se asientan los bancales. dado que en Petrer no se ha utilizado maquinaria pesada para nivelar los campos (nicamente hemos localizado un ejemplo de movimiento de tierras realizado con bulldozer para la construccin de terrazas en el valle de caprala), los bancales que se obtenan con este tipo de disposicin eran estrechos en las laderas, para un solo rbol, y ms extensos en las foyas y los piedemontes. ejemplos de este tipo los encontramos distribuidos por todo el territorio, como en el Alaig, el derramador de navayol, la Gurrama, la Foia Falsa, la Foia Blanca, rabosa, la Administracin, la sierra del Maigm, el Fond Feo y el rutllo (Figuras ii-1.2 a ii-1.7). incluidas en este apartado se distinguen las estructuradas segn su disposicin concntrica, caracte- rizadas porque los muros siguen la direccin trazada a partir de un centro comn en sucesivos arcos de radio que se van reduciendo. esta disposicin es caracterstica de los campos de cultivo que se instalaron en dorsales pronunciadas y colinas abancaladas en su prctica totalidad, como en navayol, la Forad, la casa de castalla y el calafate. tambin encontramos esta tipologa en la parte baja del piedemonte, en el clot de les Manyes, o dentro de los cauces de determinados barrancos, como en el de la casa del nap (Figuras ii-1.8 a ii-1.12). los bancales que se establecan en estos cauces sufran los efectos de los episodios de lluvias torrenciales, como se recoge en la documentacin escrita: Los trozos que en el barranco de Santos van marcados como bancales yermos arruinados, constan solo de piedras y arena, con algun almendro salpicado; antes eran bancalitos que escalonaban dicho barranco, pero los 6 destruy el agua . 6 Arxiu de Montes, StcMA, caja 69, Alicante 10 de diciembre de 1880. expediente de los chaparrales. 221 Sabina Asins Velis Fig. II-1.2. disposicin paralela de campos abancalados de cereales. el derramador, en la partida de navayol Fig. II-1.3. Actualmente abandonados, estos campos abancalados, con disposicin paralela, se dedica- ron al cultivo del almendro. el Alaig 222 Caractersticas tipolgicas de los bancales Fig. II-1.4. disposicin paralela, formando bancales ms estrechos en la parte media de la lade- ra y ms amplios en el piedemonte. la Gurrama Fig. II-1.5. Los bancales de la Foya Falsa disponan, al menos desde nales del siglo XVII, de una pequea zona de regado abastecida por las dos balsas que se llenaban del agua del catxuli. los lomos de los bancales conservan restos de los muros de mampostera que los cubran. en la actualidad se est produciendo la colonizacin vegetal de estos lomos 223 Sabina Asins Velis Fig. II-1.6. la Foya Blanca, disposicin paralela junto a la rambla de Pua Fig. II-1.7. Abancalamiento de forma paralela de la ladera del rutllo 224 Caractersticas tipolgicas de los bancales Fig. II-1.8. Barranco anterior a la casa del nap. disposicin concntrica de los campos de cultivo Fig. II-1.9. toda esta ladera de navayol se dispona en abancalamientos concntricos 225 Sabina Asins Velis Fig. II-1.10. el abancalamiento de la Forad est documentado desde el siglo XVi. disposicin concntrica de los muros de mampostera Fig. II-1.11. en el piedemonte del clot de les Manyes se cultivan almendros en bancales dispuestos de forma concntrica, siguiendo las curvas de nivel 226 Caractersticas tipolgicas de los bancales Fig. II-1.12. la distancia entre los bancales, dispuestos de forma concntrica, en la casa de castalla ha per- mitido la mecanizacin de algunas labores agrcolas, por lo que, an siendo la explotacin ms alejada de la poblacin de Petrer, sus tierras no se han abandonado Paralela en zig-zag: localizados preferentemente en reas no muy extensas, los muros se disponen de forma paralela, conectando los diferentes niveles de terrazas por medio de rampas en zig-zag, por lo que no se necesitan otro tipo de estructuras para acceder a los bancales superiores. ejemplos de esta tipologa los encontramos en rabosa, la casa de castalla y la Gurrama (Figuras ii-1.13 a ii-1.15). Fig. II-1.13. campos de reducida extensin, en zig-zag, en la Gurrama 227 Sabina Asins Velis Fig. II-1.14. campos de almendros con acceso en zig-zag en rabosa Fig. II-1.15. los tramos en zig-zag conectan los distintos niveles de terrazas en la casa de castalla Finalmente, otros tipos identicados, poco representados, son los que presentan una disposicin que re- quieren una menor inversin de tiempo, con soluciones en el trazado poco regulares. Uno de ellos sigue una disposicin geomtrica no paralela. Se caracteriza porque las diferentes estructuras se distribuyen 228 Caractersticas tipolgicas de los bancales siguiendo patrones geomtricos pero el conjunto no se ajusta a un mdulo regular, localizados principal- mente en nuestra zona de estudio en los niveles de terrazas de la rambla, en la casa de l estret (Figura ii- 1.16). Se distingue tambin la disposicin no geomtrica, atendiendo al modelado natural del terreno. este ltimo tipo es representativo de los casos de microrelieve, como en cotxinets (Figura ii-1.17). Fig. II-1.16. Bancales dispuestos de forma geomtrica no paralela en la casa de l estret, dentro del barranco Fig. II-1.17. Bancales que se adaptan al micro-relieve, en els cotxinets 229 Sabina Asins Velis B) LITOLOGA DEL PARAMENTO no hemos detectado en este aspecto gran variedad en la utilizacin de la materia prima, dado que se utilizaban los recursos ms cercanos, primando en la construccin el empleo de la piedra caliza (Figu- ras ii-1.18 y ii-1.19) y los guijarros de mayor tamao (bolones) en los campos de cultivo cercanos a las ramblas (Figura ii-1.20). en casos puntuales hemos observado la utilizacin de areniscas masivas (como en els cotxinets, Figura ii-1.21) o de lajas de yeso (junto a la antigua fbrica de cal, dentro del cauce de la rambla de Pua, Figura ii-1.22). consideramos que en Petrer los trabajos de abancalamiento los realizaron los mismos agricultores, recurriendo a bancaleros profesionales en contadas ocasiones y nicamente para hacer los bancales de gran calidad, como los construidos junto al molino la reixa, los ubicados en los barrancos de la casa de Paco dels cotxinets, y los contratados por don luis Villaplana en su nca de Navayol. El tallado de la piedra en la gran mayora de estructuras adolece del cuidado con que se hizo en los ejemplos citados. Histricamente, la presencia continua de los agricultores en los campos de cultivo compensara en muchos casos la falta de atencin en la elaboracin de las estructuras, pues la inmediata reposicin de las piedras tras los derrumbes favorecera su mantenimiento. de igual modo, el despedregamiento del suelo, sin el debastado posterior de las piedras, se utiliz para elevar la altura de algunas partidas previamente abancaladas (como se observa en algunos tramos de los barran- cos de la casa de Paco dels cotxinets). Fig. II-1.18. Muro de mampostera de piedra caliza, en la Administracin Fig. II-1.19. Piedra caliza en los bancales del Marquesat de noguera 230 Caractersticas tipolgicas de los bancales Fig. II-1.20. Pared levantada con bolones de la rambla de Pua, cerca del acueducto de San rafael Fig. II-1.21. Bloques de arenisca en los bancales dels cotxinets Fig. II-1.22. Muro de mampostera en seco realizado con lajas de yeso, junto a la calera en la rambla de Pua 231 Sabina Asins Velis C) TIPO DE APAREJO las posibilidades en este aspecto son muy variadas, pero primando los tratamientos de tipo ms sencillo sobre los ms complejos y trabajados. Puede que esta sea la variable que ha tenido mayor incidencia en la conservacin o no de los muros, tanto tras el abandono de los campos de cultivo como en los campos actualmente en cultivo en los que se ha abandonado la tarea de reposicin de las piedras. esta ausencia de mantenimiento de las paredes se debe a la falta de tiempo por parte de los propietarios, que trabajan los campos a tiempo parcial, y al excesivo coste que tendra el contratar a profesionales. Por ello, en la actualidad, los lomos de numerosos bancales todava en cultivo bien se estn recubriendo de vegetacin, afortunadamente en la mayora de los casos, bien estn sometidos a importantes problemas erosivos, con la consiguiente prdida de suelo y la lenta pero constante reduccin del espacio cultivado. en los campos abandonados, el tipo de aparejo, junto a la posicin del campo en la ladera y la disponibilidad de banco de semillas en el entorno, est tambin condicionando la rpida colonizacin vegetal tras el abandono, o la impactante actuacin de los procesos erosivos. en la imagen que adjuntamos (Figura ii-1.23), junto a la casa de la Seora, se observa la solidez de una parte del bancal, con un aparejo bien construido, y los procesos erosivos que se han producido tras el desplome de las paredes realizadas con menor precisin. Fig. II-1.23. importancia del tipo de aparejo en la conservacin del muro del bancal. casa de la Seora, a la dere- cha del molino de la reixa entre la distinta tipologa de aparejo que se ha descrito, encontramos en Petrer las siguientes: Aparejo sin labrar: distribuido por todas las partidas del trmino y en todo tipo de ubicaciones. dependa ms de la pericia y la inversin econmica que de las caractersticas fsicas del empla- zamiento. Se observa en paredes levantadas directamente sobre la roca madre (leptosol ltico), en donde anclaban la primera lnea de piedras y construan el bancal que rellenaban con material procedente del cauce de los barrancos, formando de este modo un suelo frtil (clasicado como regosol ntrico), como se aprecia en las algunas laderas del barranco de castella y junto a la 232 Caractersticas tipolgicas de los bancales cueva del Agua. tambin los levantaron en posiciones de piedemonte, valles, etc. en este tipo de aparejo las piedras no han sido trabajadas, y se disponen con cierto desorden, sin estar rematados los bancales por ningn tipo de corona (Figuras ii-1.24 a ii-1.31). Fig. II-1.24. Aparejo sin labrar en las laderas del barranc de castella Fig. II-1.25. Bancales de rac i coloma, en el Xocolate Fig. II-1.26. en este tipo de aparejo la piedra seleccionada poda ser de cualquier tamao, como en este ejemplo de mayores dimensiones. entre la casa de la ta Pel y la cueva del Murciano, en escurina 233 Sabina Asins Velis Fig. II-1.27. disposicin irregular de las piedras sin labrar. casa de Villaplana en navayol Fig. II-1.28. Aparejo sin labrar de caliza en el pla de Manel Fig. II-1.29. en el barranco de la Petiosa se construyeron los bancales con aparejos irregulares sin labrar, y sin ningn tipo de coronamiento 234 Caractersticas tipolgicas de los bancales Fig. II-1.30. este tipo de aparejo irregular se compona en general de una sola hilera de pie- dras, que requera de continuas reparaciones tras episodios de lluvias torrenciales. ejemplo de l Almadrava Fig. II-1.31. detalle de aparejo irregular sin labrar y de tamaos variados. carretera de Petrer a castalla Aparejo irregular poco labrado: con piedras dispuestas atendiendo a una cierta regularidad y estraticacin de las hileras, pero con escaso trabajo de tallado, y nicamente en la cara vista y en la posterior para facilitar su colocacin. en general se observa una seleccin buscando piedras de un tamao uniforme. igualmente distribuidas por todo el trmino, encontramos ejemplos ilus- trativos en el Xocolate, caprala, la Foia Falsa, el Marquesat de noguera, etc. (Figuras ii-1.32 a ii-1.34). 235 Sabina Asins Velis Fig. II-1.32. Seleccin de piedras de tamao uniforme y poco labradas. els cotxinets Fig. II-1.33. Aparejo irregular poco labrado pero muy cementado y efectivo para retener el suelo. la Foia Falsa 236 Caractersticas tipolgicas de los bancales Fig. II-1.34. Piedras dispuestas de forma irregular y poco labradas. carretera de Pua a castalla Aparejo irregular labrado: con las mismas caractersticas que la categora anterior, pero con mayor inversin de trabajo en el labrado de la piedra. localizamos bancales de este tipo en el rac coloma, caprala, l Administraci, Pua, Aiguarrius y Salinetes, entre otras zonas (Figuras ii-1.35 y ii-1.36). Fig. II-1.35. labrado de la piedra y disposicin irregular de las mismas, en la casa de la Seora Fig. II-1.36. Muro de mampostera en seco con labrado del aparejo ms cuidado. Aiguarrius Aparejo irregular muy labrado: con lo que se consiguen supercies planas en las piedras, que proporcionan al muro un aspecto regular, sin salientes, como en los ejemplos de la casa de Villa- plana, cotxinets, o el Marquesat de noguera (Figuras ii-1.37 y ii-1.38). 237 Sabina Asins Velis Fig. II-1.37. Aparejo irregular muy labrado en el tramo inferior de un bancal de la casa de Villaplana en navayol Fig. II-1.38. Muro de mampostera sin salientes gracias al aparejo irregular muy labrado, en el Marquesat de noguera Aparejo semipoligonal: realizados por profesionales del tallado, que obtienen una forma casi geomtrica de la piedra, lo que proporciona mayor solidez al muro al lograr ajustar todas las pie- dras. la partida de cotxinets es la que presenta mayor nmero de muros con estas caractersticas, que dada su homogeneidad debieron realizarse a la vez por un mismo bancalero (Figuras ii-1.39 a ii-1.41). los bancales que mand realizar luis Villaplana en navayol, entre 1920 y 1930 fueron tambin hechos por un profesional (Figuras ii-1.42 y ii-1.43). 238 Caractersticas tipolgicas de los bancales Fig. II-1.39. Bancales de cotxinets de aparejo semipoligonal Fig. II-1.40. Perfecta ejecucin en los bancales de cotxinets Fig. II-1.41. estos bancales, gracias a su perfecto diseo, ejecucin, y mantenimiento han resistido las crecidas de agua del barranco en la partida de cotxinets 239 Sabina Asins Velis Fig. II-1.42. casa de Villaplana en navayol, bancal construido entre 1920 y 1930, con un encaje perfecto entre las piedras Fig. II-1.43. Bancal de aparejo semipoligonal de la casa de Villaplana en navayol Aparejo poligonal: encontramos muy pocos ejemplos de este tipo de aparejo, en el que la piedra se labra hasta conseguir un encaje perfecto, como el tramo inferior del parat del catxuli, el bancal junto al molino de la reixa, en Pua o los muros dels cotxinets. estos bancales deberan catalo- garse como de especial proteccin (Figuras ii-1.44 a ii-1.48). 240 Caractersticas tipolgicas de los bancales Fig. II-1.44. Bancal de perfecta factura, sin salientes, de aparejo poligonal en els cotxinets Fig. II-1.45. Detalle del bancal de la gura anterior. Para evitar la prdida de agua, el espacio entre los sillares labrados se rellen con piedras de pequeo tamao 241 Sabina Asins Velis Fig. II-1.46. Bancal de perfecto trazado, de aparejo poligonal en cotxinets Fig. II-1.47. el tramo inferior del parat del catxuli est construido con sillares rectangulares, de piedra caliza, sin salientes, que ha resistido las avenidas del barranco 242 Caractersticas tipolgicas de los bancales Fig. II-1.48. Bancal de aparejo poligonal junto al molino de la reixa, en Pua Otros tipos ms sencillos, que hemos incluido al margen de la catalogacin realizada por el proyecto PAtter, son las piedras amontonadas formando talud (Figura ii-1.49), que consiste nicamente en acumular las piedras tras el laboreo, las piedras amontonadas para elevar el nivel de un bancal previamente construido (Figura ii-1.50), y la proteccin a un solo rbol (Figura ii-1.51), que ya reco- 7 mendaba Ibn al-Awwan a nales del siglo XII . Fig. II-1.49. este tipo de talud se origina normalmente al amontonar las piedras que salen a la supercie durante el laboreo. cotxinets 7 J.A. BAnQUeri, Libro de agricultura / su autor el doctor escelente Abu Zacaria Iahia. Madrid: Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentacin, 1802 (reproduccin facsmil, 1988). 243 Sabina Asins Velis Fig. II-1.50. Bancal construido en el cauce del barranco, que se ha sobreeleva- do con piedras amontonadas. cotxinets Fig. II-1.51. en el trmino de Petrer no hemos encontrado prc- ticamente ejemplos de proteccin a un solo rbol. Barranco de escurina en la actualidad, debido a la falta de mantenimiento de los muros de mampostera, se estn desarrollan- do tres tipos de pared de bancales que debemos tener en cuenta, en unos casos por la implantacin de la vegetacin, en otros por los procesos erosivos que se producen. nos referimos a las tres variedades 244 Caractersticas tipolgicas de los bancales siguientes, al margen tambin de la catalogacin del proyecto PAtter, que hemos incorporado por la importancia que estn adquiriendo en la zona de estudio: Lomos cubiertos de vegetacin: el trabajo de campo nos ha permitido deducir que en un prin- cipio la mayora de las reas abancaladas, si no todas, contaban con paredes de piedra, dado que se conservan restos aislados en alguna parte del bancal. conforme se iba desmoronando el muro, si no se reemplazaban las piedras, poda desarrollarse la vegetacin si dispona de un banco de semillas cercano y las dems condiciones naturales eran favorables. esta vegetacin protega los lomos de los bancales de los procesos erosivos, de una forma tambin ecaz. Diferentes proyectos de investigacin ya citados consideran las ventajas que aportan estos lomos cubiertos de vegeta- cin que adems pueden funcionar como corredores ecolgicos (Figuras ii-1.52 y ii-1.53). Fig. II-1.52. campo de almendros en produccin, con los lomos de los bancales cubiertos de vegetacin, ecaces contra los procesos erosivos. casa dels Pins en la partida de Castalla Fig. II-1.53. cultivo de cereales en bancales con los lomos cubiertos totalmente de vegetacin. la Administracin 245 Sabina Asins Velis Alternancia de piedras con vegetacin y con tramos de lomo desnudo: se trata de un estadio in- termedio, en el que la pared del bancal conserva algunos restos de los muros que han logrado jar la vegetacin, y tramos en que sta no ha podido instalarse, con el consiguiente incremento de los procesos erosivos, preferentemente tras lluvias torrenciales (Figuras ii-1.54 y ii-1.55). Fig. II-1.54. Alternancia de restos del muro de piedras, con vegetacin y con tramos de lomo des- nudo en cotxinets Fig. II-1.55. Ausencia de tareas de mantenimiento en los muros de los bancales sobre margas fcil- mente erosionables, en donde alternan las piedras, con el desarrollo incipiente de la vegetacin y con tramos de lomo desnudo. casa de Monis 246 Caractersticas tipolgicas de los bancales Lomo desnudo: generalmente afectando a tramos o a todo el bancal, que ha perdido la piedra que retena el suelo. este tipo particular est bastante extendido por el trmino, tanto en campos en cultivo como abandonados, y sobre todo en litologas margosas, como en Fontanars, el Pla de Manel, les Pedreres Altes, Salinetes, la casa de castalla y el rac coloma. Si se ubican en pendientes pronunciadas provocan importantes arrastres de suelo, generalmente tras episodios de lluvias intensas (Figuras ii-1.56 a ii-1.59). Fig. II-1.56. cultivo de almendros en bancales como lomo desnudo. casa de castalla Fig. II-1.57. los bancales van perdiendo las piedras de los muros, con la consiguiente prdida de suelo. casa de l esquinal del Pla de Manel 247 Sabina Asins Velis Fig. II-1.58. Prdida de piedras de los bancales, tras la ausencia de prcticas de mantenimiento, debido a que consistan nicamente de una hilera de piedras. les Pedreres Altes Fig. II-1.59. Bancales en materiales margosos con importantes procesos erosivos debido a la prdida de las piedras que contenan las paredes. les Pedreres Altes 248 Caractersticas tipolgicas de los bancales D) TIPO DE CORONAMIENTO la corona es el remate del bancal por su parte superior. en el trmino de Petrer no son muchos los ejemplos que se conservan de este tipo de acabado, siendo mayoritarios los que no disponen de l, lo que en nuestra opinin abunda en la idea de que fueron hechos, en su gran mayora, por los propios agricultores. las formas de corona- miento localizadas corresponden a rasantes, en los bancales mejor construidos de cotxinets, o con corona, de lajas en el barranco d escurina, y de grandes piedras tambin en cotxinets (Figuras ii-1.60 a ii-1.63). Fig. II-1.60. el tipo ms abundante es el bancal sin corona, que encontramos distri- buido por todo el trmino. cotxinets Fig. II-1.61. Bancal con corona alternando piedras grandes con otras de menor tama- o, que han desaparecido. cotxinets 249 Sabina Asins Velis Fig. II-1.62. Bancal con rasante, de perfecta factura. cotxinets Fig. II-1.63. Bancal con corona de lajas. Barranco d escurina E) OTROS ELEMENTOS CONSTRUCTIVOS las escaleras voladas, para pasar de un bancal a otro, las hemos localizado nicamente en l Administraci y en Pua (Figuras ii-1.64 y ii-1.65). el que no se encuentren este tipo de elementos y otros, como ca- setas dentro de los bancales, como ocurre en el norte de castelln, inciden en la falta de maestra de los constructores de los bancales. 250 Caractersticas tipolgicas de los bancales Fig. II-1.64. escalera volada en la Administracin Fig. II-1.65. Pequeos peldaos para acceder al bancal superior, junto al molino de la reixa, en Pua 251 Sabina Asins Velis 2. Sistemas de aprovechamiento del agua y de regularizacin de la escorrenta en un dominio semirido como Petrer, estas construcciones son tan importantes como los abancala- mientos en s, cuyas caractersticas y cronologa hemos denido en el anlisis histrico. Manantiales como el de caprala, el Pouet o Fonteta de Pruna en el barranco del cid, minas como la de navayol, la Administracin, el carrascalet, rabosa, Petiosa, Fontanars, la casa de Quintn, Pua, la Bienvenida, el catxuli, el Pantanet, casa de Mons, el Ginebre, el Perri o el Marquesat de noguera se asociaban a acequias y balsas desde las que se distribua el agua a los campos de cultivo; en algunas de ellas, como hemos visto en los captulos anteriores, la participacin de cada propietario se regulaba mediante esta- tutos (Figuras ii-1.66 a ii-1.97). Figs. II-1.66 y 1.67. Asociacin de mineta y balsa en la Administra- cin, documentadas en el siglo XViii 252 Caractersticas tipolgicas de los bancales Figs. II-1.68 y 1.69. Mineta nmero 2, locali- zada en un bancal de la Administracin, e inte- rior de la misma 253 Sabina Asins Velis Figs. II-1.70, 1.71 y 1.72. Mina del carrascalet, entrada por la pared del bancal, y desage 254 Caractersticas tipolgicas de los bancales Fig. II-1.73. Boca de la mineta en la ladera del barranco de la Petiosa Fig. II-1.74. Mina de Fontanars 255 Sabina Asins Velis Figs. II-1.75 y 1.76. Pozo de ventilacin y ltimos tramos construidos de la mina de Pua 256 Caractersticas tipolgicas de los bancales Figs. II-1.77, 1.78,1.79 y 1.80. Mina de la Bienvenida. el comienzo de la mina no presenta ningn tipo de revestimiento, el tramo intermedio est abovedado y revestido el techo de losas y los muros con mampostera en seco. El tramo nal est de nuevo sin revestir. En la foto de abajo a la derecha se aprecia la canalizacin del agua 257 Sabina Asins Velis Figs. II-1.81 y 1.82. casa de Monis. el agua procede del Salt de canuto, pero nicamente se canaliza tras lluvias intensas 258 Caractersticas tipolgicas de los bancales Fig. II-1.83. Mina del Perri Fig. II-1.84. Mina del Marquesat de noguera, construida en el ao 1831 259 Sabina Asins Velis Figs. II-1.85, 1.86, 1.87, 1.88 y 1.89. Balsa nueva y acequia de caprala, terminada de construir en el ao 1766 260 Caractersticas tipolgicas de los bancales Fig. II-1.90. tramo de la acequia de la Gurrama tras el Pantanet, hecha conforme a los captulos redactados en 1678. la mina que la abastece se encuentra en perfecto estado de conservacin Fig. II-1.91. Acequia de la Foia Falsa. la explotacin de los campos de cultivo en esta partida est documentada con anterioridad a 1665 261 Sabina Asins Velis Fig. II-1.92 y 1.93. Balsas de la Foia Falsa que se llenaban con el agua procedente de la acequia de la gura ii.1.91. Siglos XVii y XViii 262 Caractersticas tipolgicas de los bancales Fig. II-1.94. Balsa de Gins Juan, del siglo XViii, conocida posteriormente como de la casa de la Seora. en el ao 2009 los sillares han sido recubiertos con cemento Fig. II-1.95. Acequia que conduca el agua a la balsa del Palomaret 263 Sabina Asins Velis Fig. II-1.96. la gran balsa del Palomaret, de 50x50 metros. en 1841 en la zona haba planta- dos almendros y cereal Fig. II-1.97. Balsa del Moro en el Guirney, construida en 1903 por Gabriel Pay Pay. des- aparecida por la construccin de un centro comercial (Foto: Archivo Ayuntamiento Petrer) 8 Adems, el trmino es muy rico en construcciones como boqueras (Figuras ii-1.98 y ii-1.99) acue- ductos (Figura ii-1.100), alcavons (Figura ii-1.101) y pozos (Figuras ii-1.102 a ii-1.105). la primera 8 la explicacin de su funcionamiento en: M. BOX AMOrS, terrazas y riegos de boquera. El Campo (Bilbao) 103: 1986, pp. 116-118; A. MORALES GIL, El riego con aguas de avenida en las laderas subridas. Papeles del Departamento de Geografa 1, 1968-1969, pp. 167-183; A. MORALES GIL, Abandono y desorganizacin de los sistemas tradiciones de riego de turbias. Su incidencia en la escorrenta. en: Los paisajes del agua: libro jubilar dedicado al profesor Antonio Lpez Gmez. Valencia: Universitat de Valncia, 1989, pp. 199-204. 264 Caractersticas tipolgicas de los bancales referencia escrita en la que se menciona a las boqueras data de 1503, al redactarse el documento de amojonamiento entre los trminos de Petrer y castalla altre mollo a la coveta paredada a la Boquera del Barranch restant la coveta a ma esquerra en terme de Petrer e dalli que responga linia recta a la Sella. 9 Ytem a la boquera del Barranch dels Charcos... . el derecho al agua de las boqueras tambin estaba pactado, como detallamos en el captulo del siglo XVII; derecho que todava perduraba en el siglo XIX, 10 como se especica en la boquera del Figueralet, cerca del camino que conduca a Pua . Fig. II-1.98. Boquera del Guirney, se cita una boquera en esta par- tida en 1681 Fig. II-1.99. Boquera de Aiguarrius 9 AMc, signatura c-595/14, medicin del trmino entre castalla y Petrer (olim 409/14 da 1772). traslado del documento de 1503. 10 APM, seccin Petrer, ao 1869, 9 de enero. las hermanas Maria y dolores navarro son propietarias en el Figueralet de poco ms de 3 hectreas, con casa, era, y derecho al agua de una boquera, cerca del camino que conduce a Pusa. en la propiedad hay almendros, olivos, y un trozo de huerta (una tahlla) dedicada a parras y almendros. tambin tienen 2 jornales de ensanches de terreno inculto. 265 Sabina Asins Velis Fig. II-1.100. Acueducto del marquesat de noguera, construido en el ao 1901 Fig. II-1.101. Alcav de Fontanars. el ltimo convenio para distribuir el agua de este paraje data de 1857 266 Caractersticas tipolgicas de los bancales Figs. II-1.102, 1.103 y 1.104. la Gurrama. conjunto formado por pozo, molineta y acequia 267 Sabina Asins Velis Fig. II-1.105. Pozo de navayol entre las cisternas destaca el complejo sistema del esquinal, que recoge el agua de escorrenta de la ladera, la ltra en dos balsas de decantacin y nalmente llena la gran cisterna abovedada. Estas estruc- turas hidrulicas se encuentran en su mayora fuera de uso actualmente y requieren de una inmediata intervencin (Figuras ii-1.106 a 1.108). Fig. II-1.106. recogida del agua de escorrenta. el esquinal 268 Caractersticas tipolgicas de los bancales Figs. II-1.107 y 1.108. Balsas de decantacin y cisterna del esquinal 269 Sabina Asins Velis A la vez que se construan sistemas de captacin, almacenamiento y distribucin del agua se aplicaron estrategias para regularizar el drenaje interno y externo de los campos abancalados. los ejemplos ms signicativos los hemos localizado en la Administracin, en donde se dise perfectamente la distribu- cin de los campos de cultivo teniendo en cuenta estos factores (Figuras ii-1.109 a 1.111). en cotxinets tallaron un canal en la roca para recoger el agua de escorrenta y conducirla a una balsa tambin tallada en la roca (Figura ii-1.112). Otros ejemplos son la construccin de canales en los laterales y fondo de los campos, desde donde dirigir el agua y almacenarla o redistribuirla (Figuras ii-1.113 a 1.116). Figs. II-1.109, 1.110 y 1.111. Sistemas de drenaje de los campos de cultivo. la Adminis- tracin. 270 Caractersticas tipolgicas de los bancales Fig. II-1.112. el agua de escorrenta es canalizada y re- cogida en la balsa excavada en cotxinets Fig. II-1.113. canal para aprovechar el agua de escorrenta, la Foia Falsa 271 Sabina Asins Velis Figs. II-1.114, 1.115 y 1.116. conduccin del agua de escorrenta y pequea cisterna para recoger el agua. rac i coloma, en el Xocolate. Partida en cultivo con anterioridad a 1841 Sin embargo, en Petrer la estructura ms signicativa para regularizar los aportes de agua, y crear a la vez supercies de cultivo en los cauces y los fondos de valle son los parats. el parat del catxuli, el de 272 Caractersticas tipolgicas de los bancales 11 Palomaret (construido con anterioridad a 1858) , el espectacular parat del cid construido en 1877, los que se levantaron en los barrancos del cotxinet, l Almadrava, la Sarsa, el Perri, el Salt de canuto, Fon- tanars, el Alaig, el Pi de Poveda, navayol y el Ginebre son representativos del esfuerzo efectuado por los agricultores a lo largo de los siglos para aprovechar los recursos del medio de forma sostenible (Figuras ii-1.117 a 1.121). los parats son paredes de piedra en seco, generalmente de gran altura (por ejemplo, entre los 3,5 metros del Salt de canuto, los 7 metros de los del catxuli y el barranco de la Sarsa, y los 8 12 metros del cid ) construidos con una nalidad mltiple: a la vez que frenaban la erosin en una zona del cauce, el depsito de los sedimentos creaba espacio cultivable detrs de la estructura, y se aprovechaba la concentracin de ujo para derivar el agua con la que irrigar reas prximas. Uno de los ejemplos en donde mejor se constata su funcionalidad es el parat del catxuli, en donde todava es visible el pequeo canal excavado en la roca que conduca el agua desde el parat hasta las balsas de la Foia Falsa, y es evidente la ampliacin de la supercie cultivable detrs del mismo. Hoy en da, casi todas estas estructuras hidrulicas se encuentran abandonadas, y la mayora adole- cen de tareas de conservacin. dada su gran riqueza tipolgica, su mantenimiento contribuira a promo- cionar rutas del agua, como se ha hecho en otros municipios, como chelva (Valencia), que podra servir como foco de atraccin para itinerarios tursticos a pie. Fig. II-1.117. Parat del cid, de 8 metros de altura, construido en 1877 11 APM, seccin Petrer, ao 1868, 16 de enero. Manuela Paya y Vicedo es duea, por herencia de 28 de marzo de 1858, de la sexta parte del agua del Parat existente en la hacienda del Palomaret, propia de ella y de sus cinco hermanos Bartolom, rita, Pedro, Antonio y Juan. el agua procede del manantial que hay en el predicho paraje del parat, lindando con barranco y rambla. Valorada dicha sexta parte en 30 escudos. 12 J.M. BernAB, Obras hidrulicas tradicionales en el regado de Petrer (vall del Vinalop). Bitrir I, pp. 25-29. 273 Sabina Asins Velis Figs. II-1.118 y 1.119. Parats en la rambla de l Almadrava, y en un barranco de la partida de l Almadrava Figs. II-1.120 y 1.121. Parat en el barranco de la partida dels cotxinets, y en la del Alaig 3. Construcciones de piedra en seco asociadas al espacio agrario la utilizacin de la piedra en seco ha ido histricamente ligada al paisaje agrario. las construcciones de habitacin distribuidas por el trmino nos ofrecen interesantes ejemplos de arquitectura rural, como son las casas de la Gurrama, el rancho Grande, la casa de Monis, Palomarets, rabosa, la casa de la Bassa en caprala, y las casas de distinto tamao y entidad distribuidas por todas las partidas rurales. en el interior de estas construcciones se conservan interesantes elementos que nos permiten evaluar el modo de vida de los habitantes de Petrer desde el siglo XVii. Hornos de pan-cocer, chimeneas de grandes proporcio- nes, techos de troncos de rboles, etc. se deben respetar cuando se acometa la restauracin de estas cons- trucciones. Estos edicios se complementaban con estructuras asociadas, como lavaderos (entre los que destaca el de la Gurrama), pozos, fuentes, corrales, que utilizaban la piedra como elemento principal. Adems en Petrer destaca la utilizacin de la piedra en la construccin de los molinos harineros y de plvora, datados algunos de ellos al menos desde el siglo XVii, y distribuidos por la rambla de Pua. Sobresale tambin por su impresionante construccin la calera, que se estableci en la misma rambla. Otros ejemplos de utilizacin de la piedra labrada son el pozo de nieve de l Administraci, fuera de uso ya a principios del siglo XViii, o construcciones ms recientes, como las cubiertas de las caboyas de la cordillera del Ferrer, o las conejeras de navayol y els cotxinets (Figuras ii-1.122 a 1.128). en la actualidad son numerosas las infraestructuras que necesitan de reparaciones urgentes para evi- tar el desmoronamiento de los muros. nos referimos en particular a los molinos de la rambla de Pua, cuya recuperacin para disfrute de la localidad est estudiando el Ayuntamiento. Otras infraestructuras necesitaran del acuerdo con los propietarios particulares, como es el caso del pozo de nieve. la solucin ms difcil por el momento es la que concierne a la rehabilitacin de las interesantes casas rurales repar- tidas por el trmino municipal, tanto por su historia como por su riqueza constructiva. la diputacin de Alicante est recuperando las explotaciones del calafate y el catxuli, entre otras. el Ayuntamiento de 274 Caractersticas tipolgicas de los bancales Petrer ha rehabilitado la nca de Ferrusa y el Centro Excursionista de Elda la de Rabosa. No obstante, ncas como la Administracin, (aunque esta casi en ruinas, todava conserva intactas las estructuras de almacenamiento de aceite), el esquinal, el Marquesat de noguera, Mirabuenos, les Pedreres Altes, y un largusimo etctera, podran recuperarse bien como ncas habitadas bien como alojamientos rurales, dada la belleza de los emplazamientos en donde se ubican, sus caractersticas constructivas y su tradi- cin histrica. Fig. II-1.122. conejera de navayol Fig. II-1.123. Pozo de nieve de l Administraci, inutilizado ya a principios del siglo XViii 275 Sabina Asins Velis Fig. II-1.124. lavadero de la balsa de caprala, construida en 1766 Fig. II-1.125. lavadero de la Gurrama, construido en 1883 276 Caractersticas tipolgicas de los bancales Fig. II-1.126. restos del molino del turco, en la rambla de Pua. los molinos harineros y de plvora construidos en esta rambla se documentan desde el siglo XVii Fig. II-1.127. caboyas. laderas del barranc de castella 277 Sabina Asins Velis Fig. II-1.128. conjunto de abrevadero y balsa de rabosa. Aunque el cultivo en el paraje de rabosa est documentado al menos desde nales del siglo XVI, las construcciones de la fotografa deben corresponder a las ampliaciones de D. Pedro Montengn a nales del siglo XVIII 4 Estado de conservacin de las infraestructuras. Documentacin grca Graves problemas de erosin 278 Caractersticas tipolgicas de los bancales Figs. II-1.129, 1.130, 1.131. Proceso de pandeo y rotura de los muros de mamposte- ra. Els Cotxinets. (Descripcin del proceso en: J. PALLARES BOU, 1994, pp. 23-36; J. PAllAreS, A. cAlVO, 1994, pp. 135-148) Fig. II-1.132. el monte Xocolate, camino del rac i coloma 279 Sabina Asins Velis Fig. II-1.133. Sobre la carretera de Petrer a castalla, frente a la rambla de Pua 280 Caractersticas tipolgicas de los bancales Fig. II-1.134. erosin debida al desmoronamiento de las paredes de piedra de los bancales. Sobre la rambla de Pua Fig. II-1.135. ramblas antiguamente abancaladas. en la actualidad slo se conservan testigos de estos bancales en algunos tramos. Pua 281 Sabina Asins Velis Fig. II-1.136. Bancales que han quedado colgados, debido a la erosin de sus paredes, sobre la rambla de Pua Fig. II-1.137. rambla de Pua 282 Caractersticas tipolgicas de los bancales Fig. II-1.138. Abandono de cultivos en la partida del Figueralet, erosin en crcavas Fig. II-1.139. Marquesat de noguera 283 Sabina Asins Velis Fig. II-1.140. Abandono de cultivos, desmoronamiento de los muros de mampostera. camino al Ginebre Fig. II-1.141. el Ginebre 284 Caractersticas tipolgicas de los bancales Fig. II-1.142. cultivos colgados en el cid a rac de Xoli Fig. II-1.143. Ventetes 285 Sabina Asins Velis Fig. II-1.144. erosin en terrenos margosos en el Pa- lomaret (cases de dalt) Fig. II-1.145. Salinetes 286 Caractersticas tipolgicas de los bancales Fig. II-1.146. ladera afectada por el abandono del cultivo en l Almadrava. Se aprecian restos de muros de mampostera por toda la ladera 287 Sabina Asins Velis Campos en produccin en los que se necesitan actuaciones de reparacin Fig. II-1.147. el Barchell Fig. II-1.148. casa de la Seora 288 Caractersticas tipolgicas de los bancales Fig. II-1.149. Salinetes Fig. II-1.150. Salinetes 289 Sabina Asins Velis Bancales restaurados Fig. II-1.151. casa de la esperanza (proceso de recuperacin de los bancales), caprala. restaurados por sus propietarios Fig. II-1.152. el calafate, restaurados por la diputacin Provincial de Alicante 290 Caractersticas tipolgicas de los bancales Excelente estado de conservacin Fig. II-1.153. cotxinets Fig. II-1.154. cotxinets 291 Sabina Asins Velis Fig. II-1.155. Cotxinets, mismo bancal de la gura anterior Bancales abandonados Fig. II-1.156. Bancal de la cueva del Agua, en el Xocolate. El nacimiento de agua de la gura siguiente, con un mnimo caudal serva para mejorar el aporte de agua a estos bancales 292 Caractersticas tipolgicas de los bancales Fig. II-1.157. canalizacin excavada en la roca que transportaba un mnimo caudal de agua a los bancales situados junto a la cueva del Agua, actualmente abandonados Fig. II-1.158. rac i coloma, en el Xocolate 293 Sabina Asins Velis Fig. II-1.159. Barranco de rac i coloma, en el Xocolate Fig. II-1.160. del to Murciano, en el Xocolate Fig. II-1.161. Bancales de la casa de la ta Pel, en caprala 294 Caractersticas tipolgicas de los bancales Fig. II-1.162. laderas del barranco de escurina Fig. II-1.163. Junto a la casa de la Bassa (caprala) Fig. II-1.164. Junto al nacimiento del agua en caprala 295 Sabina Asins Velis Fig. II-1.165. rambla de caprala, junto al Xorret de caprala Fig. II-1.166. rambla de caprala, frente al campamento 296 Caractersticas tipolgicas de los bancales Fig. II-1.167. Navayol; terrenos de la Diputacin de Alicante Fig. II-1.168. navayol 297 Sabina Asins Velis Fig. II-1.169. el esquinal Fig. II-1.170. Bajo la sierra del Maigm 298 Caractersticas tipolgicas de los bancales Fig. II-1.171. Sierra del cavall, junto a la casa de Monis Fig. II-1.172. Pua, junto al molino de la reixa 299 Sabina Asins Velis Fig. II-1.173. el Ginebre Fig. II-1.174. Bancales situados encima de la primera balsa de la Bienvenida, bajo el Bancal de la Sort, en Pua, donde se ubicaba la alquera islmica de Pua 300 Caractersticas tipolgicas de los bancales Fig. II-1.175. cotxinets, laderas del barranco anterior al pozo y ruinas del Mudo Fig. II-1.176. Marquesat de noguera 301 Sabina Asins Velis Fig. II-1.177. Barranco de la izquierda del Marquesat de noguera Fig. II-1.178. laderas del cid 302 Caractersticas tipolgicas de los bancales Fig. II-1.179. Palomarets Fig. II-1.180. Palomarets 303 Sabina Asins Velis Fig. II-1.181. Salinetes Fig. II-1.182. Salinetes 304 Caractersticas tipolgicas de los bancales Desorganizacin del paisaje Fig. II-1.183. rambla de Pua Fig. II-1.184. rambla de Pua 305 Captulo 2. Consecuencias del abandono de los aterrazamientos 1. Proceso de colonizacin vegetal en los bancales tras el abandono agrcola En la Comunidad Valenciana la supercie forestal se ha incrementado en los ltimos 23 aos en un 23,29%, al pasar de 934.800 hectreas en 1984 a 1.152.600 hectreas en el ao 2007, en paralelo al des- censo de la supercie agrcola, estimada en 933.800 hectreas en el ao 1984, y en 705.200 hectreas en 1 2007, lo que implica una reduccin del 24,48% . como hemos visto, se calcula que entre los aos 1900 y 2006 se ha producido en Petrer el abandono del cultivo de unas 1.229 hectreas, lo que supone el 44,49% del espacio trabajado en 1900. el destino de la mayor parte de estos campos ha sido la colonizacin vegetal de los mismos, ya que desde que entraron en vigor las medidas para la primera forestacin de campos agrcolas abandonados nicamente se ha solicitado una ayuda a la conselleria de Agricultura, Pesca y Alimentacin por parte de los particulares en el municipio de Petrer, de la que en la actualidad 2 slo se benecian 5 hectreas en concepto de prima compensatoria por prdida de rentas . Por cuanto se reere a las repoblaciones forestales, slo han sido objeto de repoblaciones parciales los montes de propiedad pblica, como la Sierra del cid, calafate, etc. Tras el abandono de tierras, la prediccin de la respuesta vegetal se encuentra sujeta a la inuencia 3 de numerosos factores . como consecuencia del abandono agrcola y la posterior colonizacin vegetal se est produciendo tanto la homogeneizacin del paisaje, como la prdida de la diversidad biolgica pro- 4 porcionada por los suelos dedicados al cultivo . en los medios semiridos, como es el caso de Petrer, la retirada de cultivos no siempre conduce a una rpida colonizacin vegetal; para ello se necesitar la con- juncin de ciertas condiciones que permitan el establecimiento de la vegetacin como son: clima, suelo, banco de semillas, estrategias de dispersin de las mismas, facilitacin y competicin entre especies, tipo 5 y densidad de plantacin de las variedades cultivadas abandonadas, regmenes de disturbancia, etc. A nivel general, en la comunidad Valenciana encontramos ejemplos de cmo el abandono del cultivo conduce a la rpida colonizacin en unos casos y a la persistencia de suelo prcticamente desnudo en otros. Se producen as mosaicos en el paisaje con diferentes grados de estabilidad, caracterizados por 1 cOnSelleriA de AGricUltUrA, PeScA Y AliMentAcin, Datos bsicos del sector agrario valenciano en 2007. Valencia: Generalitat Valenciana, conselleria de Agricultura, Pesca y Alimentacin, 2007, cuadro 2 (continuacin): distribu- cin general de las tierras. 2 informacin facilitada en enero de 2007 por da. teresa Velzquez, Jefa de Servicio de Gestin Agraria Sostenible. conse- lleria de Agricultura, Pesca y Alimentacin de la Generalitat Valenciana. 3 J.J. iBAeZ, et al., los Geoecosistemas mediterrneos en el espacio y en el tiempo. en: J.J. ibez, et al. (eds.), El Paisaje Mediterrneo a travs del Espacio y del Tiempo. Implicaciones en la Deserticacin. logroo: Geoforma ediciones, pp. 27- 131, 1997; S. MAZZOLENI, et al. (eds.), Recent dynamics of the Mediterranean Vegetation and Landscape. John Wiley & Sons, 2004; J.D. THOMPSON. Plant evolution in the Mediterranean. 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GARCIA FAYOS, T.M RECATALA. La reserva de semillas en una cuenca de badlands (Petrer, Alicante). Pirineos 140, 1992, pp. 29-36; A. PADILLA BLANCO, Colonizacin vegetal en campos de cultivo abandonados en la provincia de Alicante. Alicante: Universidad de Alicante, 1998; J.B. GALLEGO-FERNNDEZ, et al., Vegetation dynamics of Mediterranean shrublands in former cultural landscape at Grazalema mountains, South Spain. Plant Ecology, 172, 2004, pp. 83-94; A. BONET, J.G. PAUSAS, Species richness and cover along a 60-year chronosequence in old- elds of southeastern Spain. Plant Ecology 174, 2004, pp. 258, 262-266; F.i. PUGnAire, et al., colonization processes in semi-arid Mediterranean old-elds. Journal of Arid Environments 65(4), 2006, pp. 591-603; A. BONET, J.G. PAUSAS, Old eld dynamics on the dry side of the Mediterranean Basin: patterns and processes in semiarid SE Spain. En: V.A. Cramer, R.J. Hobbs (eds.), Old Fields: Dynamics and Restoration of Abandoned Farmland. USA: island Press, 2007, p. 248. Sabina Asins Velis cubiertas vegetales dispersas con huecos de suelo desnudo entre las plantas, que dan lugar a la tpica 6 conguracin en parches que incluye las denominadas islas de fertilidad . Una vez se ha producido el abandono de los cultivos, se destaca la importancia que puede tener el no arrancar los pies de los culti- vos leosos (algarrobos, vides, olivos, ...) de los campos, ya que estos pueden facilitar la colonizacin vegetal tanto indirectamente, actuando como perchas donde los pjaros reposan y aportan semillas al suelo bien por regurgitacin bien por defecacin, como directamente, mejorando las condiciones micro- ambientales bajo planta al retener mayor porcentaje de humedad e incrementar la porosidad del suelo, 7 lo que favorece la germinacin de las semillas . en general, los factores ms destacados en la colonizacin vegetal de bancales parecen ser la diversi- 8 dad climtica y la tipologa y las caractersticas edcas . Por lo que se reere al clima, principalmente en cuanto al rgimen pluviomtrico anual y a los episodios de lluvias de importante intensidad horaria. En relacin con las caractersticas edcas, se observa gran dicultad en la colonizacin vegetal all donde los suelos de los bancales presentan costras y selladura supercial. Tambin cuando se producen aoramientos superciales de materiales excesivamente arcillosos y plsticos, en los casos de exceso de carbonatos y en aquellos de destruccin de la estructura por inadecuadas prcticas agrcolas prece- dentes. en la comunidad Valenciana, la zona mejor conocida en este aspecto es la Vall de la Gallinera (Alicante), donde se ha analizado el estado de colonizacin vegetal, de la capacidad de inltracin, la 9 produccin de escorrenta y la prdida de suelo en seis grupos diferentes de bancales . los estudios, ms numerosos, que se han llevado a cabo en Provenza apuntan resultados parecidos, en concreto al sealar que las terrazas abandonadas se recolonizan rpidamente por la vegetacin, siguiendo una dinmica de bosque, en ausencia de perturbaciones. igualmente, se sealan los incendios como los causantes de la 10 aparicin de matorral . Para el Pirineo, en las zonas abancaladas abandonadas, el tiempo de abandono ha permitido la recolonizacin por parte de densas comunidades de matorral y arbreas (estimndose que en unos 60 aos tras el abandono, en lugares poco alterados, las laderas adquieren el aspecto de la vegetacin natural), favoreciendo la inltracin, aumentando la intercepcin y la evapotranspiracin y limitando la escorrenta supercial. En estos ambientes, los factores destacados a considerar son el con- 11 tenido en materia orgnica, el aporte de nutrientes, la cubierta vegetal y la compactacin del suelo . Uno de los problemas ms importantes que afecta a los suelos de la comunidad Valenciana es la erosin hdrica. en cuanto a su importancia en las laderas abancaladas abandonadas, la incidencia de los fenmenos erosivos depender en parte de la solidez de los muros de mampostera y de la rapidez con que se desarrolle el proceso de colonizacin. la experiencia de la Vall de la Gallinera indica que tanto durante el cultivo, como tras la regeneracin de la vegetacin, la prdida de suelo es muy baja o inexistente, mientras que tras un incendio y durante el primer ao de abandono, las tasas de erosin son 12 altas . en estudios realizados en el Pirineo se ha comprobado que a medida que transcurre el tiempo 6 e. BOcHet et al., Modied topsoil islands within patchy Mediterranean vegetation in SE Spain. Catena 38, 1999, pp. 23-44. 7 M. Verd, P. GArciA-FAYOS, nucleation processes in a Mediterranean bird-dispersed plant. Functional Ecology 10, 1996, pp. 275-280; M. VERD, P. GARCIA-FAYOS, Old-eld colonization by Daphne gnidium: seedling distribution and spatial dependence at different scales. Journal of Vegetation Science 9, 1998, pp. 713-718; J.G. PAUSAS, et. al., the role of the perch effect on the nucleation process in Mediterranean semi-arid oldelds. Acta Oecologica 29, 2006, pp. 346-352. 8 A. PAdillA BlAncO, Colonizacin vegetal en campos de cultivo abandonados... op. cit., pp. 334-337. A. rOMerO DAZ, Inuencia de la litologa en las consecuencias del abandono de tierras de cultivo en medios mediterrneos semiridos. Papeles de Geografa 38, 2003, pp. 151-165. 9 J. rOdrGUeZ AiZPeOleA, et al., colonizacin vegetal y produccin de escorrenta en bancales abandonados: Vall de Gallinera, Alacant. Cuaternario y Geomorfologa 5, 1991, pp. 119-129. 10 t. tAtOni, et al., Secondary successions on abandoned cultivation terraces in calcareous Provence. i- Vegetation and soil. Acta Rcologica 15(4), 1994, pp. 431-447. 11 J.M GArcA rUiZ, Marginacin de tierras y erosin en reas de montaa. en: t. lasanta y J.M. Garca ruiz (eds.), Ero- sin y Recuperacin de Tierras en Areas Marginales: Casos Prcticos Aplicables a la Rioja. Zaragoza: instituto de estudios Riojanos. Sociedad Espaola de Geomorfologa, 1996, pp. 33-50; M. MOLINILLO, et. al., Managing mountainous degraded landscape after farmland abandonment in the central Spanish Pyrenees. Environmental Management 21, 1997, pp. 587-598; G. dUnJ et al., land use change effects on abandoned terraced soil in a Mediterranean catchment, ne Spain. Catena 52, 2003, pp. 23-37. 12 J. rOdrGUeZ AiZPeOleA, et al., colonizacin vegetal y produccin de escorrenta... op. cit. 308 Consecuencias del abandono de los aterrazamientos despus del abandono tienden a moderarse los procesos geomorfolgicos dominantes en los campos abandonados. durante los primeros aos la erosin difusa fuerte es el proceso ms extendido, debido a la escasa cubierta vegetal; tras 10 aos, con una cubierta herbcea entre el 70 y el 80%, los procesos de erosin difusa dbil pasan a ser dominantes. despus de 25 30 aos, cuando ya se ha instalado una cu- 13 bierta densa de matorral, la escorrenta supercial y la erosin se reducen a valores mnimos . Adems de los ya citados, entre otros factores importantes a considerar en la colonizacin vegetal de las laderas aterrazadas abandonadas destacan la litofacies, los rasgos topogrcos (fundamentalmente pendiente, 14 orientacin y exposicin), el tipo de cultivo que se abandona y la microtopografa de la parcela . el proceso de colonizacin vegetal en campos de cultivo abandonados en la provincia de Alicante ha sido objeto de estudio en profundidad fundamentalmente por parte de A. Bonet y J.G. Pausas, y A. 15 Padilla Blanco . las parcelas que seleccion esta ltima autora en Petrer, previo trabajo de campo, se encontraban localizadas en reas representativas de los distintos enclaves en los que se haba producido el abandono, atendiendo a sus caractersticas topogrcas, morfolgicas, climticas, biogeogrcas, an- tropognicas y de estado de las formas de erosin y composicin de la cubierta vegetal. los resultados del trabajo de campo permitieron una aproximacin a la importancia que tenan la litofacies, la pendien- te, la poca de abandono, el rgimen pluviomtrico, las lluvias de carcter torrencial, la existencia o no de una formacin vegetal junto al sector agrcola abandonado, la forma de las parcelas y de los muros de piedra en el desarrollo de las formas erosivas, en el porcentaje de cobertura vegetal, en los tipos biol- 16 gicos y en la estructura predominante de las especies que colonizaban esos campos abandonados . las parcelas elegidas en el trmino de Petrer se ubicaban en terrazas de cultivo abandonadas: a) Sobre litofacies margosas: la presencia de parcelas de distintas pocas de abandono permiti establecer la siguiente secuencia de colonizacin vegetal (tabla iii.1.1): Tabla II-2.1. evolucin de la cubierta vegetal tras al abandono de los campos de cultivo sobre litofacies margosas (Fuente: A. PAdillA BlAncO, 1998, pp. 138-143, 289) UBICACIN DE LAS ESTADIO ETAPAS DE COLONIZACIN VEGETAL PARCELAS cese reciente de la actividad agrcola cubierta vegetal escasa y variada, que coloniza en primer lugar Bancales abandonados en Pusa (primeros cinco aos) los surcos del arado y los pies de los rboles frutales. especies (pendiente 6%), pinar de la Um- inventariadas: Brachypodium retusum, Koeleria vallesiana, bra (pendiente 10%). Eryngium campestre, Inula viscosa, Pallenis spinosa, Teucrium capitatum, Cistus albidus, Helianthemum syriacum, Euphorbia serrata, Lygeum spartum Posteriormente (primeros cinco-diez comienza a instaurarse un matorral compuesto por: Anthyllis casa de la loma en la sierra del aos) cytisoides, Rosmarinus ofcinalis, Ulex parviorus caballo, y Alto de Ponce en la sie- rra del Fraile. Pendientes en torno al 18% Si las condiciones medio-ambienta- la tendencia es el incremento paulatino de Juniperus oxyce- Sierra del Fraile les son favorables, y hay fuentes de drus, Rhamnus lycioides, Quercus coccifera, Quercus rotundi- semillas prximas folia 13 J.M GArcA rUiZ, Marginacin de tierras y erosin... op. cit.; J.M GArcA rUiZ et al., Soil erosion after farmland abandonment in submediterranean mountains: a general outlook. en: J.l. rubio y A. calvo (eds.), Soil Degradation and De- sertication in Mediterranean environments. logroo: Geoforma ediciones, 1996, pp. 165-183. 14 A. PAdillA BlAncO, Colonizacin vegetal en campos de cultivo abandonados... op. cit., pp. 342-348; A. NAVAS, et al., Soil properties and physiographic factors controlling the natural vegetation re-growth in a disturbed catchment of the Central Spanish Pyrenees. Agroforestry Systems 72, 2008, pp. 173-185. 15 A. BOnet et al., changing vegetation structure and landscape patterns in semi arid Spain. en: Y. Villacampa esteve, c.A. Brebbia, J.l. Us (eds.). Ecosystems and Sustainable Development. III. Advances in Ecological Sciences 10. Southampton (UK): Computational Mechanics Publications, 2001, pp. 377 386; A. BONET, Secondary succession of semi-arid Mediter- ranean old-elds in south-eastern Spain: insights for conservation and restoration of degraded lands. Journal of Arid Environ- ments 56(2), 2004, pp. 213-233; A. BONET, J.G. PAUSAS, Species richness& op. cit.; A. BONET, J.G. PAUSAS, Old eld dynamics& op. cit.; J.G. PAUSAS et. al., the role of the perch& op. cit.; A. PADILLA BLANCO, Colonizacin vegetal en campos de cultivo abandonados... op. cit. 16 A. PAdillA BlAncO, Colonizacin vegetal en campos de cultivo abandonados... op. cit. 309 Sabina Asins Velis b) Sobre margas. Se observ que sobre calizas y margas haba una cobertura del 40-45% en laderas abandonadas en los aos 70 del siglo pasado, y ms del 60% en la mayora de las parcelas con abandonos datados en la misma poca, pero situadas en litofacies margosas y depsitos coluviales y aluviales (tabla iii.1.2). Tabla II.2.2. evolucin de la cubierta vegetal tras al abandono de los campos de cultivo sobre margas (Fuente: A. PAdillA BlAncO, 1998, pp. 195-200, 303-304) UBICACIN DE ESTADIO ETAPAS DE COLONIZACIN VEGETAL LAS PARCELAS cese reciente de la actividad Son las gramneas las primeras en ocupar el suelo tras el abando- Sierra del cid (Palo- agrcola no agrcola: Brachypodium retusum, Koeleria vallesiana al mismo maret, Pozo Blanco, tiempo que las especies arvenses y nitrlas, Moricandia arven- pendiente media en sis, Pallenis spinosa. colonizan las especies ligadas a litofacies de torno al 12%, y expo- margas yesferas como Anthyllis cytisoides, que suele tener una co- sicin a solana bertura importante respecto al total de la parcela, Atriplex halimus, Salsola genistoides, Suaeda splendens, Thymelaea hirsuta, adems de helilas y termlas, Fumana, Helianthemum, Helichrysum, Teucrium. tanto en los taludes como en los muros de mampostera se ha inventariado Rhamnus lycioides especies de estadios supe- Juniperus oxycedrus, Pistacia lentiscus, Rhamnus alaternus, Rham- Sierra del cid (Pozo- riores. Ocupan taludes de nus lycioides blanco) parcelas abandonadas 10 aos antes del estudio, o con formacin vegetal aledaa c) Bancales abandonados sobre coluviones y aluviones, depsitos de ladera con pendientes suaves, inferiores al 10% y del 25% (tabla iii.1.3). Tabla II.2.3. evolucin de la cubierta vegetal tras al abandono de los campos de cultivo sobre coluviones y aluviones en depsitos de ladera (Fuente: A. PAdillA BlAncO, 1998, pp. 202-205) UBICACIN DE LAS ESTADIO ETAPAS DE COLONIZACIN VEGETAL PARCELAS cese reciente de la actividad agrco- Predominio de especies pioneras. Herbceas: Aegilops Sierra del cid pendiente la, cinco aos antes del estudio triuncialis, Eryngium campestre, Koeleria vallesiana, 10%. litofacies: coluvin Moricandia arvensis, Piptatherum miliaceum; Subar- bustivas: Euphorbia squamigera, Fumana ericoides, Helichrysum stoechas, Inula viscosa; y ligadas a las margas que componen parte de los depsitos de ladera: Thymelaea hirsuta. Se han inventariado de manera pun- tual ejemplares de espino negro (Rhamnus lycioides) y aladierno (Rhamnus alaternus), prximos a los taludes cese reciente de la actividad agrco- Predominio de gramneas. Herbceas: Brachypodium Sierra del cid, pendiente: la, cinco aos antes del estudio retusum, Moricandia arvensis, Pallenis spinosa. Subar- 25% bustivas: Anthyllis cytisoides, Salsola genistoides, Se- litofacies: margas, arcillas dum sediforme y yesos en general, con respecto a la colonizacin vegetal de las parcelas, en todos los ambientes de Petrer, tendrn tambin una funcin destacada los lomos de los bancales que presentaban cubierta de vegeta- cin mientras la actividad agrcola se mantena en activo. tras el abandono, estos lomos son el banco de semillas ms cercano, lo que unido al mayor espesor del suelo en las zonas abancaladas, siempre que no presente costras superciales, puede permitir un recubrimiento mayor que en las zonas aledaas sin estas caractersticas (Figuras ii.2.1 a ii.2.15). 310 Consecuencias del abandono de los aterrazamientos Figs. II.2.1, 2.2, 2.3, 2.4 y 2.5. colonizacin vegetal, entre las piedras de los muros o en el interior de los campos abandonados en Petrer: tomillo (Thymus vulgaris), jara (Cistus albidus), romero (Rosmarinus ofcinalis), albaida (Anthyllis cytisoides) y efedra (Ephedra fragilis) 311 Sabina Asins Velis Fig. II.2.6. Primer estadio de abandono. las semillas transportadas desde los lomos de los bancales y las aportadas por los pjaros favorecen la colonizacin vegetal Fig. II.2.7. laderas del barranc de castella, colonizacin vegetal en bancales abandonados: predo- minio del romero 312 Consecuencias del abandono de los aterrazamientos Fig. II.2.8. laderas del barranc d escurina: colonizacin con esparto, romero y pino, como especies prioritarias Fig. II.2.9. Bancales de oliveras abandonadas colonizados con gramneas, en la rambla de caprala 313 Sabina Asins Velis Fig. II.2.10. Abandono de bancales en l Administraci, cubiertos fundamentalmente en la actualidad por gramneas, que frenan la erosin del suelo Fig. II.2.11. colonizacin vegetal en bancales abandonados en las laderas del Barranc de castella. no se producen fenmenos erosivos, pero el abandono de los cultivos incrementa el riesgo de incendios forestales 314 Consecuencias del abandono de los aterrazamientos Fig. II.2.12. colonizacin vegetal de los lomos de los bancales. evitan la erosin, enriquecen la di- versidad biolgica de los campos de cultivo y funcionan como corredores ecolgicos Fig. II.2.13. detalle de la colonizacin vegetal de los lomos de los bancales en campos de cultivo en produccin. el carrascalet 315 Sabina Asins Velis Fig. II.2.14. Ephedra fragilis entre las piedras del bancal, caprala Fig. II.2.15. regularizacin de la ladera tras el abando- no agrcola, en el Altet dels Gegantets A la vez que se est produciendo la colonizacin de la vegetacin en extensas reas de bancales aban- donados del municipio, se reconocen importantes procesos erosivos en zonas muy vulnerables en que la revegetacin no est teniendo lugar a un ritmo que evite estos procesos. de igual modo estos procesos son muy activos en pendientes pronunciadas sobre litologa de margas, en parajes como el monte del chocolate, el Fondo Feo o els Figueralets, en los laterales de los campos que se establecieron junto 316 Consecuencias del abandono de los aterrazamientos a caminos rurales y cauces de agua, como ramblas o barrancos, y en aquellos otros en que la erosin remontante ha sido predominante. dado el carcter margoso y fcilmente erosionable de sus suelos, el piping y la formacin de crcavas, que implican una considerable prdida de suelo, destacan entre los 17 procesos ms signicativos que se estn produciendo en su territorio (Figura ii-2.16, ii-2.17). Fig. II.2.16 Procesos de erosin tras el abandono de cultivos, junto a la carretera de l Almadrava Fig. II.2.17 importantes procesos de erosin en bancales abandonados en la ramba de Pua 17 t. lASAntA MArtneZ, Evolucin reciente de la agricultura de montaa: el Pirineo aragons. logroo: Geoforma Ediciones, 1989, 220 pp.; T. LASANTA MARTNEZ, L agriculture en terrasses dans les Pyrnees centrales espagnoles. Mdi- terrane 71 (3-4), 1990, pp. 37-41; F. GALLART, P. LLORENS, Consecuencias hidrolgicas y geomorfolgicas del abandono de tierras en montaa media mediterrnea. Paralelo 37, 16, 1993/94, pp. 241-248; F. GALLART, et al., Studying the role of old agricultural terraces on runoff generation in a small Mediterranean mountainous basin. Journal of Hydrology 159, pp. 291-303, 1994; A. CERD, et al., degradacin del suelo en una catena sobre margas afectada por el abandono del cultivo en un ambiente semirido. Cuaternario y Geomorfologa, 9(3-4), 1995, pp. 59-74; T. LASANTA, et al., Marginal lands and erosion in terraced elds in the Mediterranean mountains: A case study in the Viejo Cameros (Northwestern Iberian System, Spain). Mountain Re- search and Development 21 (1), 2001, pp. 69-76; E. SYMeOnAKiS, et al., land use change and land degradation in Southeast- ern Mediterranean Spain. Environmental Management 40, 2007, pp. 80-94. A. rOMerO dAZ, et al., the causes of piping in a set of abandoned agricultural terraces in southeast Spain. Caterna 69, 2007, pp. 282-293; A. ROMERO DAZ, et al., Procesos de piping en la regin de Murcia (Sureste de espaa). Cuadernos de Investigacin Geogrca 35, 2009, pp. 87-117. 317 Sabina Asins Velis 2. Trabajos de repoblacin forestal Histricamente los vecinos de Petrer intentaron preservar la riqueza de los montes de Propios del tr- mino de Petrer. en 1573 se impidi por parte de los Jurados y Justicias de Alicante la construccin de un horno de vidrio en el cerro de las Montesas, por el consumo excesivo de lea que se prevea. Y 18 aunque este horno se edicara a principios del siglo siguiente en el mismo emplazamiento propuesto , 19 su actividad se cancel posteriormente por esa misma causa . Adems la vigilancia de los bosques era constante, de ah que en mayo de 1741 se siguiera una causa criminal de ocio en la Real Audiencia de Valencia contra diego Snchez de diego por el delito de tala de montes en el trmino de Petrer. Y en este mismo sentido son varias las cartas que los vecinos dirigieron a la seora informndole del dao que hacan los vecinos de Sax, Agost, novelda y elda en los montes de Petrer, cortando lea, esparto y 20 madera y haciendo carbn . la difusin por parte del Ayuntamiento de las ordenanzas recibidas para fomentar las repoblaciones forestales fue continua durante el siglo XViii, sin embargo, no tenemos constancia de las tareas que se realizaran en tal sentido por parte del Ayuntamiento o la seora en ese siglo. el 30 de junio de 1716 se hizo un pregn en el pueblo informando de la orden enviada por el rey Felipe V, el 3 de mayo de ese ao, en la que se apremiaba a los Ayuntamientos -dada la gran falta de lea que haba- a que repoblaran los montes, dehesas y baldos de su jurisdiccin. las especies a seleccionar deban ser, en el monte, bello- ta, castao, pin blanco, pinos nigrales y carrascos blancos; en las riberas, castaos, nogales, chopos, fresnos, sauces, lamos negros y blancos, olmos, almeces, y otros rboles segn calidad y temperamento 21 de las tierras . de igual modo se divulg la real Ordenanza de Montes y Planto de 1748, o se emitan comentarios en contra de las talas excesivas Vendra el casso con humedad de tiempo, que los vecinos y naturales de esta dicha villa padeseran la ruina resultante de un total atalamiento y que carezcan de 22 los benecios de su termino . durante la segunda mitad del siglo XViii llegaron al ayuntamiento diferentes cdulas y cartas, bien solicitando informacin sobre el estado de los montes de la localidad, como la que envi el marqus de 23 Malespina, a quien se indic que en la localidad haba pinos carrascos , bien recomendando la planta- 24 cin de lamos negros y blancos y la siembra de nueces . en 1770 se public un bando con rdenes del alcalde, por el que se prohibi hacer lea de pino para vender y cortar pinos para madera y lea, bajo la 25 pena indicada en las Ordenanzas de Montes . de igual modo destaca la legislacin forestal de carlos iii, encaminada a la repoblacin. 26 en la segunda mitad del XiX se introducen nuevos paradigmas tericos relacionados con su gestin y a nales de ese siglo se recomendarn reas a reforestar, con motivo de la clasicacin de los montes sujetos o no al proceso de desamortizacin. As ocurri, en 1880, con el monte de los chaparrales, en 27 donde se recomendaba la repoblacin para disminuir la virulencia de las aguas torrenciales . en 1928 se declararon susceptibles de repoblacin forestal, con una cabida forestal de 173 hectreas, las Peas del Seor y las lomas del Palomaret, incautadas por el estado al haberse declarado en quiebra el compra- 18 AMP, 49/1, cOnSeJOS MUniciPAleS 1616-1648, f. 252. 19 Ace, nm 919, f. 457 v.-458 y 463 v., ao 1774. 20 AMP, 50/1. Cabildos desde el ao 1713 asta el de 1751 inclusive y diferentes reales proviciones. 30 de mayo de 1741, f. 95; 4 de agosto de 1741, f. 96. 21 AMP, 50/1. Cabildos desde el ao 1713 asta el de 1751 inclusive y diferentes reales proviciones. 30 de junio de 1716, ff. 381v.-384. 22 AMP, 50/1. Cabildos desde el ao 1713 asta el de 1751 inclusive y diferentes reales proviciones. 18 y 19 de abril de 1741, f. 92-94. 23 AMP, caja 48 (4-6), libro 48 (5). liBrO de OrdenAnZAS Y VeredAS. carta del Sr. Marqus de Malespina, 7 de marzo de 1752. 24 AMP, caja 48 (4-6), libro 48 (5). liBrO de OrdenAnZAS Y VeredAS. carta de Alicante, 23 de enero de 1756. 25 AMP, caja 37, 1 de febrero, 20 de marzo, 1 de abril, 10 de abril, 15 de abril de 1770. 26 J. GMeZ MendOZA, Ciencia y poltica de los montes espaoles (1848-1936). Madrid: icOnA, 1992. 27 Arxiu de Montes, StctH, caja 69, Montes chaparrales, p. 6. Alicante 10 de diciembre de 1880. 318 Consecuencias del abandono de los aterrazamientos 28 dor , as como tambin se aceptaron donaciones en la sierra del cid, como la de Amalia Franzes Poveda, con el n de que su tierra fuera repoblada. Adems, parte de los montes que se mantuvieron o pasaron a nombre del estado, segn un informe del ao 1953, se repoblaron, como fue el caso de zonas de las la- deras de los montes Silla del cid, chaparrales del cid, los Altos, Peas del Seor, Palomaret y esquena del Gos, e iban a ser sometidas a repoblacin Sierra del Cid y Clot del Llop, y nalmente La Chau, que en su mayora estaba cubierta de encinar, que se estaba regenerando por medio de cortes y el aprovecha- 29 miento consiguiente . en 1958, ramn Maestre solicit la repoblacin de la Pea de las Montesas con esparto, por medio de consorcio con el Patrimonio Forestal del estado (en total 394 hectreas, 22 reas, 30 64 centireas) y el monte llop fue repoblado de pino carrasco en 1965 . desde que se realiz la transferencia de los montes de titularidad estatal a la Generalitat Valenciana se ha invertido un total de 11.880,74 euros en la repoblacin de zonas desarboladas (concretamente en el conjunto del cid en 1993, 1995 y 1996), de un total de 648.292,87 euros que se han destinado a la recuperacin de este espacio forestal, entre los aos 1990 y 2006 (Figuras ii-2.18 a ii-2.25). las restan- tes actividades emprendidas han sido tratamientos selvcolas, selvicultura preventiva, conservacin de 31 caminos y mantenimiento y mejora de reas recreativas . Fig. II.2.18. repoblacin forestal en el rac de Xoli 28 Arxiu de Montes, STCTH, caja 69. Alicante, 29 de febrero de 1928; Madrid 17 de febrero de 1928. 29 Arxiu de Montes, StctH, caja 69. Alicante, 31 de diciembre de 1953. 30 Arxiu de Montes, StctH, caja 69. clot del llop. BOPA 12 de junio de 1965. 31 informacin facilitada por da. Pilar Ara, de la direccin General de Gestin del Medio natural. conselleria de territorio y Vivienda, Generalitat Valenciana. Sobre la reforestacin de espacios bien gestionados: K. BenJAMin, et al., Vegetation composition and succession of abandoned farmland: effects of ecological, historical and spatial factors. Landscape Ecology 20, 2005, pp. 627-647. Vase los efectos de algunas prcticas de repoblacin forestal mediante aterrazamientos en: J. cHAPArrO, M.A. eSteVe, evolucin geomorfolgica de laderas repobladas mediante aterrazamientos en ambientes semiridos (Murcia, Se de espaa). Cuaternario y Geomorfologa 9(1-2), 1995, pp. 39-49; A. ROMERO DAZ, F. BELMONTE SERRATO, Ero- sin en forestaciones aterrazadas en medios semiridos: regin de Murcia. Murcia: Universidad de Murcia, 2008. 319 Sabina Asins Velis Fig. II.2.19. conjunto de el cid Fig. II.2.20. conjunto de el cid 320 Consecuencias del abandono de los aterrazamientos Fig. II.2.21. Ventetes Fig. II.2.22. chaparrales 321 Sabina Asins Velis Fig. II.2.23. Ausencia de trabajos de desbrozado, ramoneo, etc. en la zona este del trmino Figs. II.2.24 y 2.25. Prcticas inadecuadas de reforestacin. els cotxinets 322 CONSIDERACIONES FINALES Consideraciones nales Si consideramos que la ocupacin de las tierras del Vinalop comenz en la primera mitad del V milenio a.c., la actividad dependiente del sector primario ha sido la dominante en este territorio durante unos 6.500 aos, prcticamente hasta mediados del siglo XX en que se implant la industria del calzado. du- rante este tiempo los agricultores ampliaron paulatinamente la extensin de las partidas en cultivo e in- trodujeron nuevas variedades y tcnicas de explotacin acordes con sus propias culturas y con las carac- tersticas fsicas del medio. Amparndonos en la premisa que formul el profesor tello sense conixer ni comprendre els canvis que els nostres avanpassats imprimiren al territori, com podrem ordenar-lo ara de forma sostenible , este estudio intenta sobre todo poner en valor la impronta de esa historia en la actual diversidad cultural, agrcola y ambiental de su paisaje, ya que es esa relacin, ese dilogo entre el hombre y el medio, el que en denitiva le ha conferido el actual carcter a su territorio. la concentracin de la poblacin en torno al valle del Vinalop y la prctica ausencia de modernas urbanizaciones en los parajes naturales han favorecido el mantenimiento de su paisaje agro-forestal, hasta el punto de que en la actualidad el 73% de su territorio est ocupado por bosques, matorral o pas- tos, proporcin muy superior a la media de la provincia de Alicante, de la comunidad Valenciana y a la media nacional, lo que le asigna al municipio un gran valor como pulmn verde. este porcentaje se eleva al 88% si incorporamos las reas de cultivo. el reto para esta localidad va a ser, precisamente, gestionar activamente esos espacios, que incluyen preciosas muestras de su patrimonio rural, y ms cuando la presin urbanstica e industrial amenaza a las poblaciones cercanas a la lnea de costa, pues no olvide- mos que Petrer est ubicado junto a la autova y a menos de 30 kilmetros del puerto, del aeropuerto y de las playas de Alicante. An as, las perspectivas son muy favorables, ya que unas 6.500 hectreas de las 10.420 con que cuenta el trmino se han visto beneciadas con la declaracin de Paisaje Protegido Serra del Maigm i Serra del Sit, aunque una gran parte de ellas ya lo estaban al tratarse de montes de titularidad pblica. en un paisaje dinmico como el de Petrer, en el que se han sucedido a lo largo de los siglos las activi- dades productivas relacionadas con el medio y la construccin de elementos asociados a esa explotacin, se debe considerar una labor prioritaria la recuperacin e integracin del paisaje agrario, entendiendo en este concepto tanto los elementos arquitectnicos como el saber acumulado de su gestin, que hoy po- demos considerar patrimonio histrico. no debemos olvidar que si exceptuamos el castillo, las iglesias y sus estas populares, el patrimonio material e inmaterial de Petrer est ligado a su tradicin agrcola: bancales de piedra seca, boqueras, minas, parats, balsas, valiosas casas de campo& Por ello, la oportunidad que se presenta a nivel municipal es la de integrar en conjunto el planea- miento urbano y el rural, de manera que formen un continuo en el territorio, vinculando a la poblacin e involucrndola en su gestin. este concepto de integracin Paisajstica lo recoge la legislacin vigente, que adems considera obligatorio el Plan de Participacin Pblica en cualquier actuacin de plani- 1 cacin que se realice . Pero esa corresponsabilidad que se desea por parte del ciudadano necesita de instrumentos que le permitan reconocer los elementos que le otorgan el carcter distintivo a su territorio y que le ayuden a elegir las distintas opciones de su gestin futura, contando siempre con informacin acerca de los escenarios que esa eleccin puede generar sobre los valores de su paisaje, sobre la biodi- versidad, etc. en este sentido, la legislacin contempla que las actuaciones que se vayan a realizar incluyan la ela- boracin previa de estudios de Paisaje, que demandan una importante participacin pluridisciplinar, ya que incorporan tanto los valores culturales, como ambientales, etc. es, precisamente en ese contexto, en el que se requiere la identicacin de los Recursos Paisajsticos que singularizan a cada territorio, y que comprenden los elementos lineales o puntuales singulares de un paisaje o grupo de stos que denen su 2 individualidad y que tienen un valor visual, ecolgico, cultural y/o histrico . de todos estos recursos, 1 GenerAlitAt VAlenciAnA, 2004a, ley 4/2004 de 30 de junio, de la Generalitat, de Ordenacin del territorio y Protec- cin del Paisaje. DOGV, nm. 4788, de 2 de julio de 2004; GENERALITAT VALENCIANA, 2006, Conselleria de Territorio y Vivienda. decreto 120/2006, de 11 de agosto, del consell, por el que se aprueba el reglamento de Paisaje de la comunitat Valenciana. dOGV, nm. 5325, de 16 de agosto de 2006. 2 Artculo 32-3. GenerAlitAt VAlenciAnA, 2006, conselleria de territorio y Vivienda. decreto 120/2006, de 11 de agosto, del consell, por el que se aprueba el reglamento de Paisaje de la comunitat Valenciana. dOGV, nm. 5325, de 16 de agosto de 2006. 325 Sabina Asins Velis de los que se sirvieron durante siglos los agricultores de Petrer, hemos intentado desarrollar a lo largo de estas pginas su secuencia histrica, los motivos que les llevaron a levantar bancales, a canalizar el agua comunitariamente, a regular la proteccin de las acequias,& , y, lo que es tambin importante, mostrar el actual estado de conservacin de ese patrimonio. todo ello con el objetivo de que los vecinos de Pe- trer puedan disponer de la informacin necesaria para poder valorar el signicado de cada uno de esos recursos, reconocer su peso histrico, el trabajo que sus antepasados invirtieron en cada actuacin,& y puedan participar consecuentemente en la gestin de su territorio, intentando a la vez colaborar con sus capacidades y su creatividad en esa tarea. esos son los valores que las actuales polticas territoriales demandan a la sociedad: que una vez reconocido el valor de su paisaje su gestin sea prudente y con un enfoque creativo, con la nalidad de 3 proporcionar instrumentos de desarrollo territorial y enriquecer la calidad de vida de los ciudadanos . con respecto a los paisajes agrarios aterrazados son muchas y variadas las aportaciones que en este sentido nos ofrecen otros grupos de trabajo, que consideramos de inters presentarles porque pueden servir de marco de referencia para evaluar las diversas alternativas de aplicacin en el municipio y en la comarca. entre las contribuciones ms novedosas, de aplicacin al patrimonio aterrazado, destacan las que unen proteccin cultural y desarrollo territorial, manteniendo el sector agro-silvo-pastoral en activo y 4 5 dinamizando el turismo educativo, como se est haciendo en el arco alpino o en cinque terre (italia) . este mismo propsito se plantean en la Provenza francesa y en Mallorca, en donde adems se invierten notables esfuerzos para formar a canteros locales en la tcnica de construccin de muros de mampostera 6 de piedra en seco . Por cuanto se reere a Catalua, se propone una visin holstica de la gestin rural a travs del denominado contrato Global de explotacin, puesto en marcha con el objetivo de fomen- tar la viabilidad de las explotaciones agrarias y alcanzar un desarrollo rural sostenible, en el cul se incluyen todos los servicios que la agricultura presta al ecosistema, contando desde luego con aqullos 7 que prestan las reas aterrazadas . 8 En otras zonas, como Canarias, se plantean clasicaciones de calidad de los paisajes aterrazados , y en el sur de Francia, al reconocimiento de esa calidad, se unen acciones encaminadas a preservar los 9 aterrazamientos por su importancia en la prevencin de riesgos naturales, sobre todo deslizamientos , o como en Portugal, Mallorca y los Pirineos por su funcin en la prevencin y lucha contra los incendios 10 forestales . en cuanto a actuaciones relacionadas con el mantenimiento y divulgacin activa del patri- 3 cOMiSin eUrOPeA, 1999, estrategia territorial europea: Hacia un desarrollo equilibrado y sostenible del territorio de la Unin Europea. 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Con relacin a la incorporacin de todos estos aspectos en el planeamiento, un ejemplo muy signi- cativo lo representa el Plan territorial insular de Menorca, de consulta obligada para las iniciativas que 12 se vayan a realizar en Petrer . tambin es interesante la propuesta de integracin ecolgica y socioeco- 13 nmica del Plan de Ordenacin de los recursos naturales y desarrollo Sostenible del Alto tajo , de utilidad para acciones que se acometan en el Paisaje Protegido Serra del Maigm i Serra del Sit. como vemos, las actuaciones que se estn realizando son muy variadas, y en todas ellas es necesaria la implicacin de la poblacin y una gran sensibilidad hacia el paisaje y su historia. dos caractersti- cas que, si lo pensamos, renen bien los habitantes de Petrer, pues han sido capaces de mantener gran parte de su territorio agrcola y natural alejado de la importante presin urbanstica que se ha ejercido en nuestros municipios principalmente durante la ltima dcada. esta posicin de privilegio tambin la comparten con municipios de su entorno, por lo que el planeamiento y la integracin paisajstica deberan incluso implementarse a escala intercomarcal, dando cohesin a ese territorio semirido en el que la gestin del suelo y del agua se ha asociado histricamente al trabajo de la colectividad. estas caractersticas comunes representan una fortaleza a nivel supramunicipal, y pueden dar continuidad al proyecto ya comenzado con la declaracin de Paisaje Protegido Serra del Maigm i Serra del Sit, que 14 incluye parte de los trminos de tibi, castalla, Sax, Agost y Petrer . el reconocimiento del valor de las laderas abancaladas y del patrimonio hidrulico requerira de la peticin, por parte de los Ayuntamientos de la zona, de la declaracin de Bien de inters cultural para este legado cultural, arquitectnico y medioambiental. calidad a los Paisajes Aterrazados y a los 15 denominados Paisajes del Agua les sobra, ricos en obras singulares . ello supondra, en primer lugar, conseguir que sobreviva el inmenso trabajo que hicieron sus antepasados por aprovechar los recursos adaptndolos a un medio semirido; en segundo lugar, acercar ese patrimonio a una parte de la poblacin que vive de espaldas al medio rural adyacente; y, adems, por qu no, el abrir el abanico de posibilida- des para solicitar subvenciones que ayuden a la costosa tarea de restaurar y mantener las construcciones, grcas dos rios Alva e Alvoco (Serras do Aor e da Estrela). Actas de las Jornadas sobre terrazas y prevencin de riesgo.. op. cit., pp. 203-211; G. ALOMAR, G. BARDI, Prevencin y lucha contra los incendios forestales. El uso de ganado en los campos abancalados de la Serra de tramuntana. Actas de las Jornadas sobre terrazas y prevencin de riesgo& op. cit., pp. 245-251; S.M. VICENTE-SERRANO, et al., Inuencia de la ganadera en la evolucin del riesgo de incendio en funcin de la vegetacin en un rea de montaa: el ejemplo del valle de Borau (Pirineo aragons). Geographicalia 38, 2000, pp. 33-58; M.P. erreA, et al., Aplicacin de SiG para seleccionar campos abandonados recuperables como reas de pastoreo en el Pirineo Aragons. en: c. conesa, Y. lvarez, J.B. Martnez Guevara (eds.), Medio Ambiente, Recursos y Riesgos Naturales. Anlisis mediante tecnologa SIG y Teledeteccin. Murcia: Universidad de Murcia, 2004, pp. 117-130; T. 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Petrer: centre d estudis locals del Vinalop, 2007. 327 Sabina Asins Velis tarea que en la actualidad recae prcticamente en los propietarios de los terrenos donde se ubican, cuan- do en realidad es la sociedad en su conjunto quien se benecia de su preservacin. A esa posibilidad aadiramos las que hemos ido desarrollando a lo largo de estas pginas y que nos gustara sistematizar entendindose que es una propuesta muy abierta a los ciudadanos de Petrer. As, a modo de resumen, entre las opciones a considerar en la gestin de los espacios aterrazados de la lo- calidad, y a las que se debern incorporar todos aqullos retos y oportunidades que se plantean para la sociedad del conocimiento del siglo XXi, destacaramos: a) Sociales: estimular en la ciudadana la necesidad de proteccin de los recursos locales y facilitarles su implicacin en la gestin. b) Ambientales: Proteger la riqueza de ora y fauna asociada a los campos de cultivo y difundir el inters de los contratos agroambientales. Fomentar la integracin entre el espacio urbano-agrario-forestal. c) culturales: Proteger el rico patrimonio cultural ligado a las actividades tradicionales. continuar con la importante tarea de difusin cultural que se est realizando a nivel munici- pal. d) econmicos: Apuesta de apoyo a la agricultura activa y a las prcticas sostenibles y respetuosas con el me- dio ambiente. incidir en el fomento de empleo rural y en la pluriactividad ligada al paisaje agrcola. e) Cientcos realizar anlisis rigurosos de la riqueza en diversidad ecolgica, para que sus resultados pue- dan ser incorporados a los distintos planes estratgicos y polticas sectoriales. destinar ms recursos a los estudios del impacto de la globalizacin, evaluando tanto los ries- gos como las oportunidades para el municipio. Profundizar en el estudio de los conocimientos tradicionales, de las fuentes escritas, la trans- misin oral y la cultura material de la poblacin. f) Polticos Acometer el planeamiento integral del territorio y no slo del espacio urbano, implicndose adems en las acciones que se puedan desarrollar de planicacin estratgica territorial (a escala supramunicipal). Ampliar las polticas de gnero y la atraccin de jvenes al sector agrcola. Facilitar las iniciativas que propongan la diversicacin econmica sostenible en el paisaje agrario. Atraer subvenciones de los organismos pblicos y de las entidades privadas para recuperar y mantener el paisaje aterrazado y las construcciones asociadas. Fomentar la preservacin de los conocimientos tradicionales y apoyar la investigacin cient- ca acerca de la caracterizacin histrica del paisaje. estas opciones, muy generales, requieren de su desarrollo en planes pormenorizados, pero todas ellas necesitan dos fortalezas: el ciudadano y el gestor poltico. Mantener vivos y dinmicos nuestros ricos paisajes aterrazados demanda nuestra implicacin y creatividad, y aunque a ello nos compromete la legislacin vigente, lo que ser determinante es nuestra unin, nuestra capacidad y voluntad. 328 BIBLIOGRAFA Bibliografa AA.VV. (2004). La Cultura dei Terrazzamenti per la Salvaguardia del Paesaggio. Tecniche, risorse, strumenti. Atti del convegno internazionale. Salerno, italia: edizione Menab. AA.VV. (2004). Atti del Convegno Internazionale LIFE 00 ENV/IT/000191. P.R.O.S.I.T. castello di riomaggiore, italia. 26 luglio 2004. AA.VV. (2007). Actes de les Jornades sobre Terrasses i Prevenci de Riscos Naturals. Mallorca: con- sell de Mallorca, departament de Medi Ambient. AGULL MARCOS, I.; PEIDRO BLANES, J. (2006). Los musulmanes en las tierras de Elda. II. Isla- mizacin del territorio. Historia de Elda, tomo i. elda: Ayuntamiento de elda, caja de Ahorros del Mediterrneo, pp. 128-139. 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Universistat de Valncia (la nave) BOe: Boletn Ocial del Estado BOPA: Boletn Ocial de la Provincia de Alicante dOGV/dOcV: Diari Ocial de la Generalitat Valenciana-Diari Ocial de la Comunitat Valenciana PAc: Poltica Agraria comunitaria

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