Pregón y Banderas en Petrer
El pasado fin de semana nuestra vecina y querida población de Petrer celebró su esperado “Día de las Banderas” coincidiendo, como es tradicional desde siempre, con la Octava de Pascua, o como decimos popularmente por estos lares “el domingo anterior al día de San Vicente”. Previamente el sábado anterior se celebró el Pregón de la Fiesta, evento que ha cumplido ya su edición número cincuenta y cuatro y que además tiene como protagonistas absolutas a las diez abanderadas de la Fiesta de Petrer. Es emocionante como los festeros y pueblo de Petrer vitorean y aplauden a sus abanderadas en su desfile hacia y desde el teatro Cervantes en los instantes previos o posteriores al acto del Pregón. Este año, con mayor motivo, el aplauso fue más efusivo que nunca para así poder resarcir la falta de pasacalle previo debido a las inclemencias de un tiempo desapacible. Es digno de destacar como se volcó el pueblo petrerí a la llegada de las diez protagonistas a las puertas del teatro de un modo un tanto inusual: en los furgones de “Sense Barreres”. Esto indica que a pesar de todos los impedimentos que puedan aparecer por la adversa meteorología la Fiesta prevalece y el ambiente no se relaja, sino que, por el contrario, está más en alza que nunca.
El Pregón que anuncia la ya inminente Fiesta de Moros y Cristianos fue pronunciado este año por un destacado festero de la comparsa de Marinos afincado en Petrer, José Galera Botía, que hizo una lectura de su vida festera y su implicación en los resortes de la organización festera con un sentimiento y un cariño hacia Petrer y su Fiesta que provocaron numerosas interrupciones, debido a los calurosos y merecidos aplausos que le dedicó el público que abarrotaba el aforo del teatro Cervantes.
La celebración del “Día de las Banderas”, como acto de arranque del tiempo que lleva a la celebración de los días grandes en honor a San Bonifacio, viene a significar ante todo la exaltación de las banderas de las comparsas y sus protagonistas las abanderadas que con orgullo portan sus enseñas respectivas por primera vez en un acto que forma parte ya del organigrama festero de un intenso mes de mayo. Pero, a su vez, es el primer acto en el que los capitanes hacen ostentación de sus Rodelas en un intenso alardo de arcabucería que acaba con el saludo al Santo Bonifacio en su ermita. Los tres cargos que caracterizan la Fiesta de Petrer, abanderada, capitán y rodela, y que son símbolo de una tradición más que centenaria, protagonizan esta fecha tan señalada en el calendario festero de nuestra vecina villa que desde ese momento manifiesta que ya se está en fiestas, que la expresión tan repetida a lo largo de todo un año “¡San Bonifaci que fora!” ya es una palpable realidad.
Esta fecha del calendario festero de los Moros y Cristianos de Petrer está en parangón con otras celebraciones similares de pueblos con gran tradición festera. Así Alcoy celebra su tradicional “Gloria” el domingo de Pascua como auténtico Pregón de su Fiesta en honor a San Jorge, Cocentaina y Onteniente tiene su llamada “Publicació de Festes” -que en Muro denominan “Publicá”- algunas fechas antes de sus respectivas fiestas, o Villena, que una semana antes de sus septembrinas fiestas, celebra lo que llaman “Pasacalle” con derroche de pólvora en un ambiente plenamente festero. Quizás alguna de estas celebraciones en fechas previas a fiestas podemos echar en falta en nuestra Fiesta de Elda. Tenemos muy lejos la Media Fiesta -que equivaldría más bien a un medio año festero- y nuestro Pregón en la actualidad es como una víspera festera dentro casi de los días grandes de la Fiesta. La Gala de Junta Central, que se celebra en los primeros días del mes de mayo puede ser considerado un verdadero prolegómeno de las fechas de junio siguientes, pero solamente es eso, una gala o acto previo, en la que se presenta la revista, el cartel, el pregonero y sirve para homenajear a festeros y cabos de escuadra. Sin embargo pienso que esta Gala se podía complementar con algún evento de mayor enjundia festera, en la línea de lo que hacen en las poblaciones festeras antes citadas, que haga salir a la calle a todo el pueblo para celebrar el arranque de los días que nos transportan a la Fiesta grande de nuestros Moros y Cristianos.
Pero volviendo al “Día de las Banderas” de nuestro vecino pueblo, es ante todo una jornada de convivencia festera única: sin tener que acudir obligatoriamente a actos festeros, todo el mundo se reúne en sus cuartelillos para almorzar, para comer, para recibir a los amigos de otras filas que se visitan recíprocamente y las calles de Petrer se convierten en un reguero de festeros que disfrutan plenamente de la música de sus bandas y que demuestran a las claras la amistad, el sentimiento y la sana convivencia entre festeros de una y otra comparsa sin distinción alguna. Nada más que por eso ya es importante la existencia de esta jornada festera, sin olvidar lo tradicional: alardo de arcabucería, ostentación de sus Rodelas por los Capitanes y exaltación de las Abanderadas y sus simbólicas banderas dirigiéndose a la ermita de San Bonifacio para saludar a su imagen y homenajearle como Patrón y guía de todos los petrelenses.
Festero de la comparsa de Moros Musulmanes desde hace 50 años. He sido secretario, cronista y presidente de esta comparsa, presidente de la Comisión de Embajadas y Alardo y, finalmente, presidente de Junta Central desde 1995 a 2006. Actualmente ejerzo el cargo de cronista oficial de la Fiesta de Moros y Cristiano de Elda. Mi trayectoria, como puede verse, ha sido larga y yo diría que fructífera en los entresijos de la Fiesta y, además de trabajar por ella, he dedicado gran parte de mi vida a estudiar, investigar y opinar sobre los diversos aspectos de los Moros y Cristianos en infinidad de publicaciones especializadas, en diversos congresos sobre temas festeros y a participar en charlas, mesas redondas e incluso pregones en algunas poblaciones festeras de nuestro entorno. Por todo ello, pretendo compartir en este blog todas mis experiencias y estudios en este campo tan atractivo de la Fiesta con las personas que tengan alguna inquietud en este sentido y con los festeros en general, intentando inculcarles ese virus tan intenso que nos hace sentir y disfrutar esa gran representación festiva que es la Fiesta de Moros y Cristianos.