Hace 57 años se constituyó la Cooperativa Industrial del Calzado C.I.C.
Uno de los grandes logros del año 1960, junto con la creación de la I Feria Nacional del Calzado, fue la puesta en marcha de la "Cooperativa Industrial del Calzado" conocida por las siglas C.I.C., en el mes de enero. Los industriales eldenses consideraban, en aquel año, que la feria recién creada y con carácter nacional, no era suficiente motor para impulsar las aperturas de los mercados exteriores y por lo tanto era necesario arropar aquella gesta con otras acciones que complementaran la venta del calzado de forma sensible, ya que los mercados interiores, en aquel año de 1960, seguían saturados y las expectativas de nuestras industrias eran escasas. "Había que mostrar el potencial interior", la destrucción de empresas de fabricación de calzado en la última década, había alcanzado cotas alarmantes, los "parones" en la fabricación entre temporadas eran una lacra que arrastraba la industria del calzado en general, pero especialmente a las de Elda y Petrel. Con esos horizontes y ante esa realidad se creó una comisión organizadora para dar luz verde a la Cooperativa del Calzado, o lo que sería igual a "Elda Exportadora"; con estas palabras se dirigieron a la opinión pública:
“…Si en algún momento de la historia de nuestro pueblo se hizo necesario el esfuerzo aunado de todos para salvarlo, ese es el nuestro"...
Para nadie es un secreto que estamos atravesando un momento de crítica gravedad. Ya no es a un número determinado de ciudadanos a los que afecta directamente la crisis de trabajo, es a la totalidad de la población; por consiguiente, el problema es general, y como tal estamos tratando de resolverlo.
Que los egoísmos, tan humanos siempre, dejen paso libre a un inteligente espíritu de colaboración y cristalice en realidad la Cooperativa de la Industria del Calzado.
Podemos tener criterios personales en cuanto al planteamiento o enfoque de un determinado problema, pero nos une un denominador común: conseguir que Elda trabaje, que todos los eldenses tengan su problema económico resuelto, que desaparezca para siempre el fantasma de la crisis de trabajo en nuestra industria. Es necesario, por consiguiente, que con plausible reiteración y con irrebatibles datos, vaya tomando cuerpo la idea de que algo muy importante se está realizando en la estructura industrial y económica de Elda. Algo que cambiará profundamente el principio económico y social de todos los eldenses.
Una industria cuya economía partió de cero y consiguió en pocos años transformarla, hasta el extremo de lograr ponerla a la cabeza del país, no puede de ninguna forma fracasar en su deseo de salvar una etapa que, aún siendo difícil, puede ser magníficamente superada.
Estas palabras pronunciadas y escritas hace más de medio siglo vuelven a sonar con fuerza. Nuestro sector zapatero, en el momento actual, languidece ante un conformismo que por sí solo no será capaz de cambiar su trayectoria. Elda ha perdido representatividad y fortaleza ante las instituciones sectoriales. En Elda ya no se deciden soluciones, ni futuro, ni propuestas. Es necesario dar un golpe de timón con fuerza, decisión y valentía, porque de lo contrario a nuestras jóvenes se les cierra el futuro.
José María Amat Amer, es un apasionado del calzado. Como ingeniero técnico, el destino lo encaminó hacia la industria de su ciudad. Como profesor de Tecnología del Calzado, llego a conocer investigando, la industria del calzado. Publicando algunos libros sobre tecnología, artesanía y desarrollo social; siempre con el calzado como única premisa. El Museo del Calzado fue una de las realizaciones que le llevó a pasar de técnico a un apasionado del zapato. Con la mejor de las intenciones, y siempre con la pretensión de prestigiar la industria y el calzado de la ciudad de Elda, colabora en este blog para crear más amigos con inquietudes similares.