Petrer revitalizará su casco histórico implantando 25 medidas a diez años
El casco histórico de Petrer necesita una revitalización, tanto comercial como social. Esta es la conclusión del estudio realizado por la Universidad de Alicante que ha coordinado el catedrático de Urbanismo Pablo Martí y que da 25 medidas para revitalizar social y comercialmente esta zona conocida como primer ensanche, que abarca hasta la zona de Luvi. El estudio fija en diez años el horizonte para que se pongan en marcha todas ellas.
Estas medidas están agrupadas en cinco grandes bloques y cuenta con la opinión de comerciantes y ciudadanía de la zona, ediles de los grupos municipales y personal de diferentes concejalías.
“Durante las últimas dos décadas el centro histórico ha perdido tejido comercial y población y lo que pretendemos con estas actuaciones es reactivarlo y hacer una zona atractiva tanto para vivir como para implantar nuevos negocios”, ha señalado el edil de Urbanismo, Fernando Portillo.
El primer bloque pone el foco en el tráfico rodado, por esto algunas calles cambiarán de sentido, como por ejemplo Leopoldo Pardines, que será de subida en lugar de bajada: “Los expertos han detectado que la configuración actual está más pensada para facilitar la salida que la entrada al centro histórico y es algo que vamos a cambiar”, en palabras de Portillo.
Otro de los ejes es la mejora de la accesibilidad para peatones y en este sentido el Ayuntamiento está ultimando el proyecto para hacer plataforma única la calle Gabriel Paya y Cánovas del Castillo (conocida popularmente como Derrocat) y también se apunta la necesidad de mejorar la zona del paseo de la Explanada.
Para fomentar la actividad económica, la zona de Luvi en la que una empresa privada va a construir un área comercial, residencial, zonas verdes y aparcamiento, va a servir de tractor para la parte del centro histórico. En este sentido, el Ayuntamiento también va a estudiar incentivos fiscales para instalar comercios y negocios en la zona, y se plantea un posible cambio de ubicación del mercadillo y ampliarlo a otro día más a la semana. “El mercadillo en la calle La Huerta obstaculiza el acceso a los dos parkings del centro histórico, lo que es una dificultad añadida, de ahí que se están estudiando otras calles que sean más adecuadas”, ha señalado el edil.
El cuarto eje del estudio es el fomento de la población residente. Una de las estrategias para lograr este objetivo es facilitar el cambio de uso para transformar locales comerciales en viviendas en planta baja, la ampliación de alturas de edificabilidad y fomentar la compra y rehabilitación de viviendas en el casco antiguo.
Por último, el quinto eje del estudio de la Universidad es la mejora de la imagen urbana creando un catálogo del mobiliario urbano para homogeneizarlo en toda la población e incrementar el arbolado y la instalación de maceteros en las calles de la zona alta.