Sancionan hasta con 6.000 euros a los grafiteros que ensucian Elda con mensajes radicales
“Fuera nazis de nuestro barrio”, "El enemigo viaja en yate, no en patera", "Refugiados, no bienvenidos", “No a los inmigrantes”, "Fuera símbolos fascistas de Elda-Petrer" o “A todo nazi llega su Stalingrado” son algunos de los mensajes que se pueden leer a lo largo y ancho de la ciudad desde hace algunos meses. Mensajes de signo radical, tanto de derecha como de izquierda, que proliferan cada vez más, a modo de batalla verbal, algunos con dobles mensajes.
La Policía Local ha identificado ya a algunos de los infractores a quienes sanciona con multas de entre 600 y 6.000 euros. El edil de Seguridad, Enrique Quílez, ha explicado que hoy mismo ha hablado con la Policía Local de este asunto y sabe que ya hay varias sanciones en curso. Los infractores son detectados gracias a la vigilancia policial o mediante la denuncia de algún ciudadano, “cuando los grafitis los hacen en edificios públicos pasamos el asunto al departamento correspondiente para que los limpien, pero si las hacen en edificios privados no podemos hacer nada al respecto”.
La mayoría de los infractores son jóvenes radicales, cuyas pintadas ensucian y estropean el mobiliario urbano como bancos o fachadas como la del Centro Cívicio, otras cerca del instituto La Melva, también en el barrio de San Francisco, e incluso en los transformadores de luz del parque Miguel Mateo Pastor, detrás de la iglesia San Pascual, en la avenida de Ronda, así como en el muro de la Estación de Renfe a gran tamaño, y puede verse una bandera republicana grafiteada donde estaba la antigua Cruz de los Caídos. También han hecho pintadas para tapar los bancos a favor del colectivo LGTBI.
El concejal de IU, Javier Rivera, ha manifestado que, “desde nuestro punto de vista toda la ciudadanía debe hacer un esfuerzo por mantener una buena imagen de la ciudad”. Además, consideran que “la mayoría de los eldenses hacen un esfuerzo para pagar sus impuestos y los desperfectos en el mobiliario urbano son un coste importante que podríamos evitar y dedicar ese dinero público, por ejemplo, a realizar campañas de concienciación contra el racismo, la homofobia y la intolerancia o a resignificar la cruz del Parque Adolfo Suárez, conocido como el de la Concordia". Añade que les preocupa mucho que “las actitudes antidemocráticas de corte neonazi y fascista se extiendan por la ciudad y pensamos que deben erradicarse de raíz, es decir, desde la educación y la concienciación cívica”.
