El valenciano vuelve al pleno de la mano de Elda Para Todas
El Ayuntamiento de Elda ha celebrado esta mañana el pleno ordinario del mes de abril en el que se ha hablado en valenciano tras casi una década, lo ha hecho la edil de Elda Para Todas, Cristina Rodríguez. La edil de Vox, Paqui Vicente, ha asegurado que "no ha entendido ni una palabra y que más de la mitad de los eldenses tampoco". También ha habido un debate sobre la memoria democrática y la eliminación de cursos en la Escuela Oficial de Idiomas, EOI. La moción de Vox sobre retirar del Ayuntamiento cualquier símbolo de la República ha sido retirada por el propio partido “para no remover más”.
La otra moción presentada por el PSOE “para mantener y reforzar la oferta formativa de la Escuela Oficial de Idiomas”, que perderá 700 plazas y siete profesores ha sido aprobada con los votos a favor del PSOE y Elda Para Todas y en contra del PP y Vox. La portavoz socialista, Silvia Ibáñez, ha defendido este punto y ha lamentado que “se pierda el 25% de los grupos lectivos, pues pasarán de 106 a 80, este recorte significa un recorte en todos los idiomas y perjudicará a los alumnos, pues tendrán que desplazarse a otras localidades”.
La edil de Elda para Todas, Cristina Rodríguez, en valenciano ha “recordado que esta comunidad tiene dos lenguas oficiales y que aprender idiomas ayuda a mejorar la ocupabilidad y mejora las oportunidades de trabajo. Además, mejora la cultura”. La edil de Vox “ha asegurado no entender ni una palabra de valenciano así como tampoco lo entiende más de la mitad de los eldenses” y que “esta ley no elimina plazas, sino que reorganiza vacíos”.
Desde el PP, Paco Sánchez ha dicho que “este es un cambio razonable porque había clases con cuatro alumnos, la situación sería dura si hubiese algún alumno de Elda que se vaya a apuntar a algún curso y no pueda, ahí sí me quejaré”.
La socialista Silvia Ibáñez ha dicho que “el PP se fue de la Generalitat Valenciana cerrando un colegio en Elda, el Seráfico, y vuelve haciendo un gran recorte en la EOI.
Por su parte, Elda Para Todas y su portavoz, Iñaki Pérez, han defendido que continúe la identificación en las fosas de los restos de asesinados tras la Guerra Civil, “solo queremos que se ponga en valor la democracia y los derechos humanos, que acabe este duelo que se alarga durante generaciones”. Así ha nombrado a los eldenses que siguen en fosas comunes y ha calificafo la nueva propuesta de ley de la Generalitat de “perezosa”, pues pasa de una ley de 70 páginas a una de ocho páginas. Ha nombrado uno a uno a cada uno de los eldenses fusilados tras la Guerra Civil.
Paqui Vicente ha señalado que “Franco ya no existe, no hay que remover heridas, fue una guerra fratricida y no hay que removerlo, tratan de manchar a las familias eldenses del bando contrario -franquista-”. Y ha asegurado que “el silencio es paz”.
Por su parte, el popular Paco Sánchez, tras decir que no quiere debatir sobre temas autonómicos ha señalado que “solo con más libros seremos más libres” y ha repartido a los grupos políticos el libro La República de Platón.
La edil socialista de Memoria Democrática, María Gisbert, cuyo bisabuelo es una de las personas que permanece en una fosa común, ha recalcado que “no se trata de ser agitadores ni revanchistas, esto es reconocer víctimas, darle a todos la dignidad que no existió en su momento. Esto va de que nunca más la democracia se vea amenazada”. También ha pedido que no se hable de “bandos, pues había un gobierno elegido democráticamente y tuvieron que luchar contra un ejército golpista, el periodo republicano fue democrático. La Ley de Concordia no abraza a todo el mundo porque nunca han escuchado a muchas familias que ni siquiera saben dónde están sus antepasados”.
Pérez ha concluido asegurando que no entiende “que haya quienes tengan a sus seres queridos en fosas. Se trata de ser demócrata, esto son derechos humanos”.
Además, el Ayuntamiento ha aprobado convenios con diferentes entidades de Elda: el de la Junta Central de Comparsas asciende a 105.000 euros; el de la AMCE Santa Cecilia, a 96.000 euros; el de la Junta Central de Fallas, es de 53.000 euros; y el de Mosaico es de 28.000 euros.