Colores, música, lágrimas y emoción para cerrar el Fin de Semana Festero
Al igual que pasó ayer, aunque haya chispeado, la lluvia ha dado tregua a la fiesta, dejando que las calles se vuelvan a llenar de colores, música, alegría y lágrimas de emoción para celebrar, tras casi dos años de pandemia, el regreso de las fiestas de Moros y Cristianos. El desfile extraordinario ha transcurrido por el recorrido habitual, y ha contado con novedades que lo han hecho más especial si cabe, como la participación por primera vez de los niños, el desfile de festeros intercalados al inicio o la presencia de más escuadras, para celebrar el regreso de la fiestas. La unión de la ciudad con esta fiesta ha quedado plasmada en las miles de personas que han visto el desfile acompañando a los comparsistas, en lo que ha significado el inicio de la cuenta atrás para el primer fin de semana de junio.
El desfile ha arrancado una vez más con la AMCE Santa Cecilia, la banda de la ciudad, que celebra sus 200 años. Tras ellos, ha llegado el boato, liderado a caballo por los embajadores moro y cristiano acompañados de un bloque compuesto por 108 festeros vestidos con los trajes oficiales, alternando comparsas y bandos en las escuadras, como una prueba de que no existen bandos sino que todos los corazones laten por la fiesta, sin importar el bando o la comparsa a la que se pertenezca. Los más pequeños han hecho lo mismo, han formado otro bloque para plasmar que el futuro de la fiesta está asegurado. A lo largo de este boato se han portado banderas con las palabras como “ilusión”, “pólvora”, “futuro”, entre otras, y, además, se han mostrado los corazones festeros con el nombre de cada comparsa, esos que mantuvieron la fiesta viva durante la pandemia y que decoraron balcones en toda la ciudad.
El bando cristiano ha arrancado de la mano de los Zíngaros con sus características panderetas y cascabeles llenando de alegría a todos los presentes. Les han seguido los Contrabandistas con sus flores, pistolas y lunares; Cristianos con sus espadas, casacas, y una pequeña representación del pelotón, que han dado paso a los Piratas con su amarillo característico y sus calaveras, que han hecho que el público no dejara de aplaudir; los Estudiantes han cerrado el bando cristiano con sus lápices al aire, repartiendo la emoción que desprendían.
Las Huestes del Cadí ha sido la comparsa encargada de abrir el bando moro con su media luna y su verde tan característico. Uno de los momentos más emocionantes del desfile ha sido el paso de los Musulmanes cantando su himno a pleno pulmón. Al paso de está comparsa en diferentes puntos del recorrido se han tirado confetis. Tras ellos han llegado los Marroquíes con su rojo y dorado, desprendiendo elegancia. Los Realistas han sido los encargados de cerrar el bando moro con paso solemne y cantando también su himno.
Cada comparsa ha estado compuesta por ocho escuadras que podían elegir ir con el traje oficial de gala o el especial, mientras que las capitanías han desfilado con el traje oficial. El público ha aplaudido con jubilo al paso de las capitanías.
El desfile ha concluido con representantes de la Junta Central portando dos banderas en las que se podía leer “1 solo corazón” y “Moros y Cristianos de Elda”.
Con este acto el Fin de Semana Festero ha llegado a su fin, dejando con ganas e ilusión a toda la población en lo que ya es la cuenta atrás para las fiestas de Moros y Cristianos de Elda que se celebrarán del 2 al 6 de junio.