Un joven ebrio se cuela en la casa de Las Beltranas durante la procesión para "explorarla"
Las Fiestas Mayores de Elda se han desarrollado sin incidentes graves, salvo cuatro accidentes de tráfico, un atropello, algunos avisos por molestias a causa de los ruidos y por un caso de intoxicación etílica de un joven y otras dos de adultos. Precisamente, fue el caso del joven ebrio el más sonado, debido a que generó cierto revuelo al paso de las imágenes en la tarde de ayer, a la altura de la conocida casa de Las Beltranas, ubicada en la calle Ortega y Gasset. La emblemática casa estaba con las puertas abiertas de par en par y, aprovechando el descuido de su propietaria que estaba haciendo una foto con el móvil, el joven se introdujo en la vivienda.
Al ver los portones abiertos el joven entró en la vivienda, pese a las llamadas de alerta de la mujer que le advertía que se trataba de una casa particular. El joven ebrio hizo caso omiso a estas llamadas y guiado por su curiosidad se dedicó a recorrer algunas estancias hasta llegar a la segunda planta.
Mientras tanto, en el exterior algunos de los eldenses que iban iluminando en la procesión se pararon al percatarse de la situación, uno de ellos fue Miguel Ángel Rubio y otras dos personas, quienes decidieron entrar en la vivienda para buscar al presunto allanador de la morada. Rubio indica que al principio no lo veían hasta que subieron las escaleras. Al verse sorprendido les dijo que "estaba explorando" y les animó a acompañarle, pero sus perseguidores le respondieron que "era una casa particular y no un museo". Sin apenas resistencia, el joven se dejó llevar al exterior donde acababa de llegar un agente de la Policía Local de Elda, y se lo llevó para su posterior identificación. Tras ello las personas que lo encontraron regresaron con sus velas a la procesión.
La propietaria de la vivienda tras el susto lamentó que las puertas solo las abría para el paso de las procesiones de las Fiestas Mayores, acto que le ilusiona ver, y con tristeza dijo que ayer se perdió el paso histórico de los dos Santos Patronos juntos por el incidente.
Este individuo también provocó malestar en plena procesión, en la calle Pedrito Rico, cuando a menos de 30 metros de de las imágenes cruzó por el recorrido, "bebiendo una litrona y tirándose al suelo en varias ocasiones", además, trató de quitarle la vela a la edil no adscrita Reme Soler. La edil iba dentro del protocolo y tras un leve forcejeo y dialogar con el chico, consiguió que la dejase continuar con su vela. Soler detalla que en ningún momento este joven fue agresivo, sino que le dijo que quería llevarse la vela.
Un incidente que no enturbió ni ensombreció el hito histórico que vivió ayer la ciudad con la procesión de la Virgen de la Salud y el Cristo del Buen Suceso juntos por las calles de Elda.