Emoción y silencio ante el Cristo y la Soledad
El silencio volvió a imponerse en Elda durante la noche más sobrecogedora de la Semana Santa de Elda. El Cristo del Buen Amor y Nuestra Señora de la Soledad procesionaron en la noche oscura de Elda iluminados solo por la blanca luz de la luna y la anaranjada de numeroso cirios. Las imágenes recorrieron las calles de la ciudad acompañadas por miles de personas que mantuvieron un absoluto silencio, solo roto por el sonido de tambores y el de un saxofón, que precedía a la Virgen. Por primera vez la procesión cambió su itinerario y no pasó por las calles Iglesia, Colón y Nueva a causa del cambio de palio de la Soledad, pues se temía que no cupiese por la angosta calle de la Iglesia.
La emoción y los nervios previos eran palpables en la iglesia de Santa Ana, los costaleros y cofrades rodeaban a las imágenes y se preparaban para participar en la Procesión del Silencio, la más solemne de Elda. Con el toque de las campanas del templo que anunció las 23 horas y la apertura de las puertas de la iglesia, el silencio se hizo de inmediato entre los cientos de personas que se reunieron en torno a la iglesia para disfrutar de esta noche de recogimiento.
Entonces el redoble de un solitario tambor dio comienzo a la procesión en la que participaron cientos de personas, que iluminaban el camino de la Soledad y el Cristo del Buen Amor con la luz de sus velas. Este año el Cristo tenía su rostro iluminado por una blanquecina luz. También acompañaron a las cofradías del Calvario y de Nuestra Señora de la Soledad el resto de cofradías de Elda.
Así este año el recorrido fue San Francisco, Ortega y Gasset, Jardines, Barberán y Collar, Pedrito Rico y de nuevo San Francisco. Hoy está previsto que la Procesión General, en la que participan todas las imágenes de la Semana Santa, sí transcurra por su recorrido habitual, es decir, que comience en la calle La Iglesia, si bien todavía se desconoce si la Virgen de la Soledad podrá participar en la misma o no.
Vía Crucis
Tras la procesión continuó un acto muy solemne en Elda, el Vía Crucis. Un recorrido desde el templo de Santa Ana hasta el de la Inmaculada para recordar con sus oraciones el calvario de Cristo antes de su muerte. Como indica la tradición, la primera estación se leyó en la iglesia de Santa Ana, dando inicio al Vía Crucis, hasta finalizar en la parroquia de la Inmaculada. Un destacado número de devotos participaron en este acto.
La Procesión del Silencio en imágenes
{phocagallery view=category|categoryid=286|limitstart=0|limitcount=0}