Convocan una concentración contra "la imposición" del valenciano en Elda
La Plataforma Ciudadanos por Elda se suma a la concentración que ha convocado la Asociación Hablamos Español el sábado 18 de enero, a las 11 horas, en la calle Padre Manjón, para protestar "contra la Ley del Timolingüismo de Marzá", un acto reivindicativo "para que la ciudadanía pueda elegir libremente una de las dos lenguas oficiales existentes en la Comunidad Valenciana" ha explicado la coordinadora de la citada asociación, Asun Núñez.
Esta concentración se llevará a cabo paralelamente en otras poblaciones como Elche, Villena, Alicante, Villajoyosa, Orihuela, Mislata, Castellón y Valencia. Núñez ha comentado que se trata de que los padres puedan elegir libremente la lengua en que estudien sus hijos, lo cual "no significa que dejen de aprender valenciano como patrimonio cultural". Es decir, piden es que se mantenga la libertad de elección en las zonas castellano hablantes, "un problema que afecta a muchas personas y por ello luchamos por la liberación de la lengua", ha indicado el secretario de la Plataforma, Juan Vidal Martínez. La ley actual obliga a Primaria, Secundaria y Bachillerato a estudiar "hasta un 60 por ciento de las asignaturas en valenciano y siempre las materias importantes, en inglés un 25 por ciento y en español el resto para asignaturas como religión y gimnasia", afirman. Además, dejan claro que no es cosa de partidos, pues tampoco les gusta la "idea del PP de reducir el valenciano obligatorio en el 33% de materias", señala Vidal.
Peatonalización de Colón
Por otro lado, la Plataforma Ciudadanos por Elda va a solicitar al Ayuntamiento información acerca de la actuación que pretenden llevar a cabo en las calles Colón y Nueva con el objetivo de peatonalizarlas. Piden que se les explique en qué consistirá el proyecto y su presupuesto ya que desde la plataforma consideran que no se ha dicho claramente qué se hará en esta área urbanística de la ciudad. Para ello se remiten a un manifiesto que se elaboró hace más de treinta años en el que los comerciantes pedían la apertura de estas dos calles que estuvieron cerradas al tránsito por espacio de dos años, debido a que "no funcionó y los comerciantes les bajaron las ventas". Por ello, piden que "no se peatonalicen estas calles y se solucionen los problemas reales del barrio como los imbornales, pues en definitiva se trata de evitar obras faraónicas donde realmente no se necesitan", ha apuntado Juan Vidal Martínez, uno de los miembros de la plataforma.