Blanca Portillo dejó mudo a Petrer con "Silencio"
El dramaturgo, filósofo y matemático Juan Mayorga ocupó el sillón M de la Real Academia Española en 2019. La obra de ayer fue su discurso de ingreso en la RAE, ya que él lo imaginó interpretado por un actor, cosa que Blanca Portillo hizo ayer bajo el título de Silencio en el Teatro Cervantes de Petrer.
La obra, un monólogo metateatral, consiguió sobrecoger, hacer reír y atrapar la atención del público. Blanca Portillo ofreció una lección magistral de interpretación, demostrando por qué ha sido tan laureada a lo largo de su carrera profesional. La actriz repasó personajes inmortales como Creonte y Hemón, de la tragedia de Sófocles Antígona; Rosaura, de la obra paradigmática de Calderón de la Barca La vida es sueño; y Lopajin y Varia, de El jardín de los cerezos, de Chéjov. Entre las escenas breves del tramo final también hubo guiños a La casa de Bernarda Alba, Woyzeck, El gran inquisidor y Tres hermanas, para cerrar con Hamlet y su célebre frase final "el resto es silencio".
Además, durante la obra, la actriz se fue despojando del traje que vestía para encarnar a los diferentes personajes, apoyada en el atrezzo del escenario.
Portillo recreó el discurso del dramaturgo, donde el silencio es el gran protagonista. Sus oyentes en la obra eran otros dramaturgos, pero también quienes habían acudido a escuchar su discurso de ingreso en la RAE como sus familiares, amigos, colegas, autoridades y también, desconocidos.
El público se puso en pie para aplaudir el trabajo de la actriz.