“Blablacoche” de Pablo Carbonell realizó en el Teatro Castelar un viaje sobre la sociedad española
El Teatro Castelar acogió ayer Blablacoche, una comedia de Eduardo Galán y protagonizada por Pablo Carbonell, Soledad Mallol, Ania Hernández y Víctor Ullate, en la que se satiriza sobre el viaje compartido entre cuatro desconocidos en coche en una clara referencia a la aplicación Bla Bla Car, con la que un conductor ofrece las plazas de su coche para un viaje.
Las risas del público, unas 100 personas, fueron constantes a lo largo de toda la obra de teatro, que resultó muy actual y trazó una caricatura de la sociedad española hecha comedia, tratando temas como la polarización política y la falta de entendimiento entre ambas partes, así como la diferencia entre las generaciones jóvenes y mayores.
Todo lo plasmaron a través de divertidas conversaciones entre los cuatro personajes que comienzan a conocerse al montar al coche. Fluyeron las charlas y los baches por las diferencias ideológicas con bromas ácidas sobre el lenguaje inclusivo o por tildar de “facha” a alguien de derechas. Así, a lo largo de la obra, que tuvo toques de drama y thriller, se van desmontando ciertos aspectos de la sociedad y demostrando que no se es solo feminista, gay, mayor o patriota y que no hay por qué ser enemigos por tener ideas diferentes.
Al entrar al Teatro Castelar el público se encontró un vehículo como único atrezo de la obra, el quinto actor, pues juega un papel fundamental. Además, el juego de luces, la sensación de movimiento y el techo plegable del vehículo, hicieron que el público se metiese totalmente en la historia, que consiguió activar la creatividad del espectador.
Pese al final, algo utópico, esta comedia ayuda a reflexionar sobre la sociedad actual.