Antonio Poveda deja la dirección del Museo Arqueológico
El eldense Antonio Poveda ha tomado la decisión de dejar la dirección del Museo Arqueológico de la ciudad después 31 años al frente del mismo. Admite que lo hace tras más de una década en la que se ha sentido “infrautilizado, sin reconocimiento ni apoyos". Así ha decidido aceptar un puesto como docente en la Universidad de Alcalá de Henares, donde empezará en septiembre y por ello se va con una excedencia voluntaria.
Explica que no se va “a malas ni de mala manera”, pero sí “dolido”, pese a ello explica que seguirá a disposición total de Elda: “Siempre estaré a disposición del patrimonio arqueológico de Elda, no le volveré la cara, seguiré investigando y publicando siempre que pueda”. Poveda admite que llevaba un tiempo meditando esta decisión, "esperaba que la situación respecto al Museo Arqueológico de la ciudad mejorase, porque no puede seguir así. En la última década desde el museo se han hecho cosas que han trascendido a nivel nacional e internacional y no he sentido apoyo, ni reconocimiento y no hemos podido hacer ninguna excavación".
"El museo fue pionero y ahora está a la cola. Si el problema es Antonio Poveda, por eso doy un paso atrás. Es una pena, porque con un Museo Arqueológico con un personal compuesto por dos personas, el director y un conserje, poco se puede hacer, sin el apoyo del gobierno poco puedo hacer, si bien estoy muy agradecido con el apoyo de la edil de Museos, Rosa Vidal", señala. Continúa explicando que "los museos de alrededor son más dignos, el claro ejemplo es Petrer. Se le dota de protagonismo y actividades, no se entiende que la arqueología del municipio la lleve otra concejalía, la de Patrimonio Histórico, y no el propio Museo Arqueológico de Elda, al que no se le reconocen competencias recogidas en la legislación valenciana".
Poveda admite que el problema comenzó en 2010, fecha hasta la que el museo gestionó la arqueología de Elda, pero cuando dio un paso adelante en política afirma que todo cambio: "Entonces al equipo de gobierno no le sentó bien y se le quitaron las competencias al museo, con el cambio de gobierno creí que esta situación volvería a la normalidad pero no ha sido así. Creo que es una situación antidemocrática y una falta de respeto profesional, además, si me anulan a mí, anulan al museo. He tenido paciencia pero me quedan tres años para jubilarme y me gusta hacer más".
Poveda ha sido el arqueólogo que más ha trabajado en el yacimiento El Monastil, además ha realizado actuaciones en el Castillo y en los solares del casco antiguo, lo que le ha permitido hallar descubrimientos importantes para el patrimonio local.
Pese a marcharse con un mal sabor de boca, recalca que no es un adiós, sino que siempre estará dispuesto a colaborar con la ciudad por el bien del patrimonio arqueológico de Elda.