Carlson, historia viva del periodismo gráfico en Elda
El fotógrafo Alberto Navarro Sanes, más conocido como Carlson, ha sido testigo de excepción de todos los acontecimientos que se han vivido en la ciudad de Elda desde la década de los cincuenta hasta nuestros días, buena muestra de ello permanece guardada en un archivo que posee con más de un millón de negativos en los que se puede seguir la actualidad local en todas sus dimensiones, cultural, social y política. De hecho, Carlson es el único fotógrafo de Elda que cuenta con este volumen de material sobre todo lo que ha sucedido en la ciudad. Cuando comenzó a trabajar utilizaba negativos en blanco y negro y para conservarlos lavaba bien la película y le ponía unas gotas de ácido acético, de esta manera ha conseguido salvar miles de imágenes que se habrían perdido con el paso del tiempo.
Carlson nació en 1929 en Yecla (Murcia), pero a los trece años se trasladó a Elda con su familia. Su afición a la fotografía comenzó mientras realizaba en Tetúan (Marruecos) el servicio militar, donde adquirió su primera cámara fotográfica, una Boy. Pero fue en 1954 cuando comenzó a trabajar como fotógrafo con su primera cámara profesional, una Retina, que le costó 2.500 pesetas. Los primeros encargos se los hacía Penalva al que siempre ha considerado su maestro.
Ese año inició su colaboración con los periódicos la Hoja del Lunes, donde le pagaban cada fotografía a 50 pesetas. Después colaboró con la agencia Cifra, Primera Página, Marcador, Información y La Verdad.
En 1955 se casó con Dora Hidalgo, con la que tuvo cuatro hijas. Un año más tarde, cuando comenzó a editarse el periódico Valle de Elda se inició una colaboración que duraría hasta nuestros días. En estos años ha cubierto innumerables noticias, de forma que ante su cámara han posado artistas de prestigio como Julio Iglesias, Monserrat Caballé, Carmen Sevilla, Rocío Dúrcal, Lola Flores, Juanito Valderrama, Pedrito Rico, Marujita Díaz y Antonio Gades, entre otros, o políticos como José Luis Rodríguez Zapatero, al futbolista Zarra del Atleti de Bilbao, o a la Infanta Elena cuando inauguró el Museo del Calzado de Elda. De ellos siempre buscaba sacar "la foto más original, el gesto o la expresión fuera de lo normal pues es lo que pedía el periódico".
También ha captado imágenes de todos los alcaldes que ha tenido la ciudad, desde Antonio Porta, durante cuyo mandato comenzaron a celebrarse los festivales de ópera en Elda, como vemos en las fotografías que Carlson hizo a la cantante Monserrat Caballé junto al empresario de Kurhapies, Juan Navarro.
Más tarde Carlson vivió junto al nuevo alcalde Francisco Sogorb la época de la Transición, y por ejemplo, fue testigo de la visita de los Reyes de España en 1976, fotografía que envió a Sus Majestades, y por la que le fue felicitado mediante un telegrama.
Con el alcalde socialista Roberto García Blanes, Carlson se convirtió en uno de los pocos fotógrafos que estaba presente en todos los actos, de hecho Blanes en 1994 le dedicó una placa en homenaje a su dilatada trayectoria profesional. Este no fue el único reconocimiento a su trabajo, pues antes, en 1972 recibió el premio de Moros y Cristianos de la Junta Central de Comparsas, en 1995 fue homenajeado por los Contrabandistas, en 2002 por los Rotarios y en 2003 por el Club Deportivo Eldense. Con los alcaldes Juan Pascual Azorín y Camilo Valor siguió trabajando para la prensa local hasta su jubilación, que disfruta junto a sus hijas, sus tres nietos y dos biznietos.
Durante todos estos años ha sido habitual ver a Carlson cargado de cámaras fotográficas. Actualmente tiene 86 años y sigue haciendo fotos sencillamente porque no puede dejar de hacerlo, de hecho siempre sale de su casa con la cámara a cuestas. Su trayectoria está repleta de anécdotas, como cuando se guardaba los negativos en los bolsillos y los sustituía por otros sin usar para evitar que se los requisaran en las situaciones más comprometidas. También recuerda que en los primeros años de profesión, en los que seguía al CD Eldense, a la UD Elda y al Pizarro, salía corriendo al finalizar los partidos para enviar los negativos a las redacción.
