Gerardo Esteve sorprenderá con su último trabajo donde su humor apela a la inteligencia del espectador
El actor eldense Gerardo Esteve presenta junto a Miguel Ángel Montilla, un actor de Villena, la obra Ligeros de lenguaje, el próximo 19 de octubre, a las 21:30 horas, en el Teatro Castelar de Elda. Gerardo Esteve también ha escrito y dirigido este nuevo proyecto, del que comenta, con su habitual humor, que "es fruto del encuentro de dos pájaros de cuidado que gracias a una casual casualidad decidieron que debían coincidir en el mismo escenario y navegar juntos por una única laguna cerebral".
Esta es la primera vez que trabaja con Miguel Ángel Montilla: "Él conocía mis trabajos anteriores y yo lo vi actuar en Valencia con otra compañía y me puse en contacto con él. Le pareció bien la idea y dependiendo de cómo vaya veremos si seguimos colaborando".
Con Ligeros de lenguaje está en el ánimo de Esteve sorprender una vez más al público y, aunque trabaja la faceta humorística, no lo hace simplemente para hacer reír sin más, ya que, como dice, "no soy esclavo del patrón de la risa. En mis obras hay un humor latente que puede despertar la hilaridad pero no a modo de sketch, también interviene cierta poética. El humor aflora en función de la actitud del espectador".
Gerardo Esteve indaga una vez más en el lenguaje, su obra es un viaje en el que "el lenguaje, el humor, la poética y el juego han sido su velero", explica. La sinopsis ayuda a entender este nuevo trabajo que él define como "un artefacto teatral sin pies pero con mucha cabeza. Se pasa de una situación a otra como quien respira y todas juntas forman un microcosmos con su propia lógica interna, externa y mediopensionista. El público se preguntará que es lo que sucederá a continuación ya que lo anterior no le dará ninguna pista sobre lo siguiente. Sólo el humor les hará saber dónde está el 'luego'".
Es decir, que no existe una historia convencional con principio, nudo y desenlace, pero cree que su trabajo interesa al público porque "lo hago a conciencia, no se habla del mundo actual, pero ahí está la gracia, pues me interesa el lenguaje en sí mismo y generar teatralidad a través de giros coloquiales", indica.
En este sentido, se puede decir que al igual que los artistas que pintan siempre el mismo cuadro, "yo también retomo escenas que funcionaron bien y las reciclo porque vienen al hilo de lo que quería contar e incorporo escena nuevas. Doy vueltas sobre mi propio estilo. Es más fácil coger el periódico y hacer bromas de los políticos, pero ese es un humor vampírico. Yo eso no lo utilizo. El mío es un trabajo amable que apela a la inteligencia del espectador. Los elementos se reducen, pero es mi forma de trabajar".
Gerardo Esteve consigue de esta forma disfrutar en el escenario y a la vez divertir al público, de lo contrario no tendría sentido para él. Los ensayos de Ligeros de lenguaje comenzaron el pasado mes de agosto y ya tiene previsto llevar la obra en enero del próximo año a Valencia.