Escritos de José Capilla sobre Azorín y Miró. Introducción, selección y notas por Julio Capilla

CAPILLA BELTRN ESCRITOS DE JOS CAPILLA SOBRE AZORN Y MIR INTRODUCCIN, SELECCIN Y NOTAS POR JULIO CAPILLA 1998 Edita: Caja de Ahorros del Mediterrneo Composicin e impresin: Grficas Vidal-Leuka, S.L. Valencia, 5. San Vicente del Raspeig (Alicante) Depsito Legal: A-322-1999 RECONOCIMIENTO: Mi profunda gratitud a la Caja de Ahorros del Mediterrneo por su mecenazgo, sin el cual este libro, probablemente, no hubiese sido realidad. Agradezco, adems, a cuantas personas han rememorado con su pluma la vocacin literaria de mi padre y, en especial, hago patente mi reconocimiento a los que, con su ayuda, contribuyeron a la realizacin de esta tarea, para m tan compleja, de plasmar el libro. Cito, con afecto, a don Vicente Ramos, paciente y excepcional mentor y a mis entraables amigas, Rosa Mara Monz y Zoila Helbenso, de la Biblioteca Gabriel Mir, por su entraable contribucin en hacer posible mi deseo de ver publicado Escritos de Jos Capilla sobre Azorn y Mir. JULIO A. CAPILLA DEDICATORIA El empeo y la ilusin puestos en la confeccin del libro, lo dedico a mis hijos Julio y Gabriel. Ellos no conocieron a su abuelo Jos Capilla. J. A. CAPILLA NDICE INTRODUCCIN 11 JOS CAPILLA por Vicente Ramos 15 ., AZORN Y SU CUNA, MONVAR 19 d PARS Y AZORN 41 .. ALMA Y VERBO DE AZORN 45 AZORN Y SU OBRA LITERARIA 51 PERFIL LITERARIO DE AZORN 55 ELDA EN AZORN 61 AZORN, DE SU LEVANTE A CASTILLA 65 EL PAISAJE ALICANTINO EN LA OBRA LITERARIA DE GABRIEL MIR 73 - POESA Y PROSA DE GABRIEL MIR 81 DEL EPISTOLARIO 91 Jos Capilla - Azorn 91 Jos Capilla - ngel Cruz Rueda 113 Jos Capilla - Gabriel Mir 153 BIBLIOGRAFA 159 APNDICE 165 El martillito de Elda por J. Capilla 168 Seores de 1880 (cuartilla autgrafa) Gabriel Mir 173 Imperativos de amor a Gabriel Mir por J. Capilla 174 EPISTOLARIO 175 Clemencia Mir 175 Eduardo Zamacois 178 Luis Ruiz Contreras 179 INTRODUCCIN Jos Capilla Beltrn (1897-1963), mi padre, supo ver como pocos las constantes esttico -humanas de Jos Martnez Ruiz y Gabriel Mir Ferrer, conocimiento que des pert en su alma los ms encendidos fervores hacia ambos. Fruto de aquellas entusiastas lecturas, iluminadoras de su sensibilidad, son los artculos y ensayos que integran este libro. Algunos, inditos hasta hoy; otros slo mostraron su faz en modestas publicaciones, y el resto, con mejor fortuna, pudo ins talarse en pginas de mayor difusin. El periodo ms fecundo del escritor corresponde a los tiempos de la dictadura de Primo de Rivera y de la Segunda Repblica que acab entre las llamaradas de la gue rra civil. Durante aquellos aos consagr gran parte de su vida a desarrollar su vocacin literaria, a la vez que form una selecta biblioteca, en la que, adems de Azorn y Mir, estn representados los noventayochistas y posteriores tan ilustres como Jos Ortega y Gasset, Eugenio DOrs, Gregorio Maran, Ramn Gmez de la Serna, Federico Garca Lorca y tantos otros contemporneos. Fue por entonces cuando Jos Capilla, junto a un grupo de amigos, se lanz a dos aventuras periodsticas: el semanario IcIella (Elda, 1926-1930) y el anuario Albor (Elda, 1933-1935). La calidad literaria del semanario vivsima nostalgia en la memoria de mi padre no ha sido superada hasta la fecha. Desde otra perspectiva, /de/la y Albor supusieron la generacin de una correspondencia, hoy, segn creo, de gran inters para crticos e historiadores. Basta recordar algunos de los nombres que la suscriben: Azorn, Mir, Andrenio, Eduardo Zannacois, Altamira y Marcel ino Domingo. Lamentablemente, las cartas de Unannuno dirigidas a Jos Capilla fueron destruidas al finalizar la guerra civil por su contenido poltico. La guerra civil, con sus dolorosas y amargas secuelas, signific un punto y apar 1 Julio A Capilla Bellot te en el vivir de mi padre: triste amanecer de un largo va crucis, que si le proporcio n el gozo de la lectura, le impidi el de la escritura. Cumplida condena de prisin por delitos polticos, Jos Capilla logr la libertad condicional en junio de 1941, pero no pudo retomar la pluma hasta dos aos ms tarde, cuando inslitamente su ensayo Azorn y Monvar vio la luz 8 de enero de 1944 en El Espaol, subtitulado Semanario de la poltica y del espritu, impreso en Madrid y dirigido por Juan Aparicio, relevante jerarca falangista. Este trabajo empero sus amputaciones no slo cosech aplausos entre los azo rinianos, sino que lo privilegi la palabra del autor de Superrealismo: Querido Capilla: me tiene usted abrumado con su magnfico ensayo. No puede darse cosa ms fina y delicada... Bien se comprende que la opinin laudatoria de su admiradsimo maestro amn de otras Cruz Rueda, Ruiz Contreras, etc., actu a guisa de poderoso revulsivo en su nimo apagado, estimulndole a caminar de nuevo. Pero la alacridad no tard en mustiarse al pie de las puertas cerradas. Lo sucedido en El Espaol no pas de acci dental, acaso, de un descuido del censor, pues, ciertamente, el obstculo no pudo ser removido y Jos Capilla se vio arrojado al ostracismo ms riguroso por pensar con aire liberal, al tiempo que fue inhabilitado para el ejercicio de actividades profesio nales de ndole diversa. Tan lamentable situacin no vari jams, salvo en una y excepcional ocasin a iniciativa del poeta y escritor Dionisio Ridruejo, director de la publicacin literaria barcelonesa Revista. El poeta solicit a Jos Capilla su colabora cin para el nmero extraordinario del homenaje al maestro Azorn en sus 80 aos. Otra faceta de este libro la constituye el epistolario que mantuvo Jos Capilla con Azorn, Mir y ngel Cruz Rueda. El relativo a Sigiienza, corto, se circunscribe al mundo de ldella, cuyo definitivo silencio se adelant tan slo dos meses al del creador de Aos y Leguas. En cambio, las letras con Azorn y Cruz Rueda testimonian un curso que super los treinta aos. La primera carta del maestro a Jos Capilla data de 1917, y la motiv la funda cin del efmero semanario monoverense Los Pueblos, que, nacido para propiciar un homenaje ciudadano al gran prosista, lo dirigi mi padre, a la sazn con diecinueve aos de edad. La amistad con ngel Cruz Rueda se aliment de los sentimientos comunes de ambos respecto al autor de La Voluntad. Don ngel era persona que haca honor a su nombre; que, en 1930, recibi el 12 Escritos de Jos Capillo sobre Azorn y Mir Premio Nacional de Literatura; que no tard en alzarse como el bigrafo por antono masia de Azorn, y que, por aadidura, derramaba su cario hacia mi padre, califi cndolo de escritor de raro mrito. A lo largo de la extraordinaria labor que exigieron los volmenes de Obras selec tas y Obras completas, de Azorn, editadas respectivamente por Biblioteca Nueva y M. Aguilar, el compilador solicit en varias ocasiones el parecer y la ayuda de Jos Capilla. De lo que dej constancia en su carta de 16 de febrero de 1943; Ya tengo la bibl iografa completa. Al final, en nota, declaro con elogio lo que debo a Vd. Nunca me engalan con plumas ajenas. Del epistolario con Cruz Rueda mantenido hasta el bito de ste en 1961, dada la abundancia y extensin, se han transcrito nicamente algunos fragmentos signifi cativos que iluminan las etopeyas de ambos y la comn admiracin al maestro. En cuanto a mi padre, patente queda en el epistolario la desmoralizacin que sufra y que le incapacit para llevar a cabo su estudio Azorn, paso a paso, del que se conserva el ndice o guin. Son ya muchos los aos transcurridos desde el fallecimiento de mi padre en Barcelona, tan lejos del lugar elegido para su definitivo reposo. En 1977 se cumplan los cien aos de su nacimiento y de haber sido posible, entonces, la publicacin de Escritos de Jos capilla sobre Azorn y Mir, el libro hubiese adquirido la condicin de edicin -homenaje con motivo del centenario. Aun desperdiciada esa oportunidad conmemorativa, la intencin y finalidad del libro no ha variado en absoluto y, sta, no es otra que dar testimonio de la labor y vocacin literaria del escritor Jos Capilla, mi padre. J. A. C. Escritos de Jos Capilla sobre Azorn y Mir JOS CAPILLA BELTRN 1 POR VICENTE RAMOS JOS CAPILLA, ALGUNOS MESES ANTES DE SU FALLECIMIENTO (FOTOGRAFA ARCHIVO J. CAPILLA) ...CAPILLA VIBRABA CON EL ESPRITU DE ALICANTE, ES DECIR, CON EL DE SIGENZA Y AZORN. VICENTE RAMOS 1 Artculo publicado en el diario Informacin de Alicante el 30 de abril de 1954 y, posteriormente, con leves modificaciones, en el nmero 62 de la revista Idealidad, editada por la Caja de Ahorros del Sureste de Espaa (hoy, Caja de Ahorros del Mediterrneo), de Alicante abril 1963 como homenaje de su autor a la memoria de Jos Capilla, fallecido en Barcelona el 7 de marzo de 1963. Tambin fu publi cado en Alborada n 9, Elda, septiembre de 1963. 15 Escritos de Jos Capilla sobre Azorn y Mir El espritu informa y hasta configura la personalidad individual y colectiva. Es como el soplo entraable, hlito esencial que hace posible la realidad del ser y sus potencias, fundando los diversos grados axiolgicos. Acercamos con amor a estos supremos y permanentes valores y expresarlos, lue go, en cauce de sentimiento y palabra o, bien, con el silencio, es vivir plenamente la ms ntima y arraigada forma de existencia. A veces, un solo hombre consigue alum brar e incluso comunicar ese singular espritu, identificndose entonces y ya para siempre con el objeto revelado. Esto ocurre entre Alicante y Mir de tal modo que Alicante, con la bandera blanca y azul en su matrcula, es Gabriel Mir; Benidorm, Altea, Villajoyosa, toda la Marina es Gabriel Mir. La visin de la identidad es exac ta y certera. Pero este juicio de Azorn respecto a Mir, no puede tambin ser dicho de l, cambiando los nombres geogrficos Monvar, Elda, Petrel, Sax, Villena, la comarca del Vinalop, los campos que avizora la Pea del Cid, no es, todo ello, sus tancia misma, lrica esencia del gran escritor monovero Por Sigenza y Azorn habla toda la tierra alicantina. Hermanados, confundidos con el mismo amor y belleza, ellos revelaron el dormido misterio, hoy ya claro para nuestra gozosa contemplacin. Cultivando este huerto de acrisolada espiritualidad, veo ver siempre, sin dis tancias, a Jos Capilla. Soador del ms exquisito ensueo, habitante de ureo silen cio por l amorosamente cincelado, Capilla moraba en dulces eternidades estticas, inmerso en acabado mundo de ternura; su mbito era el de los escogidos y egregios: luminoso y jovial, riqusimo por dentro; dolorido por fuera, por la vertiente donde san gran las heridas. Vindose a s mismo, cuidando sus personales vivencias y anhelos, Capilla vibraba con el espritu de Alicante, es decir, con el de Sigenza y Azorn. Aqu resida su distintiva aristocracia, su fino aticismo espiritual, pues, como dijo Ortega y Gasset, hombre culto es el que ha tomado posesin de todo s mismo ya que cultu ra es actitud de religioso respeto hacia nuestra propia y personal vida. Jos Capilla resida en Elda, la gran ciudad que se extiende por el valle que domi na la Pea del Cid, en uno de los parajes ms hermosos de la provincia de Alicante, segn palabras del autor de Valencia. All soaba, vigilaba y escriba, unas veces, sobre Mir; otras acerca de Azorn y, siempre, sobre el alma de su tierra. Quien no recuerda aquellas pginas de ldella, encendidas del ms puro ardor alicantino Cuando se proyect un homenaje nacional al creador de Superrealismo; necesitare mos decir que, segn escribi Cruz Rueda, la bibliografa de Azorn ms completa que conocemos es la debida a su fervoroso lector don Jos Capilla Beltrn Deberemos hacer memoria, tambin, de aquel premio que, en 1930, le fue otorga do por su delicadsimo estudio El paisaje alicantino en la obra de Gabriel Mir, en 17 Julio A. Capilla Bellot cuya pgina inicial se dice con sencillez emocionante: quisiera que mi pluma enve jeciera escribiendo nombres y ms nombres de amigos de Gabriel Mir Alejado del estrpito publicitario, al margen del camino de la popularidad, por amantsimo celo de su espritu, Jos Capilla, desde Elda, contemplaba, registraba con pulso seguro e infatigable el cada vez ms crecido caudal de sus entraables admi raciones. Sensible por naturaleza y sensitivo por cultura, su nombre renace fragante da a da, sobre las brasas inextinguibles de aquel su generoso entusiasmo. Yo quisiera simplemente despertar en esta ocasin el justo elogio que merece su callado trabajo y fidelidad al espritu de nuestro pueblo para que, nunca, pueda ser refe rida a nosotros esta frase suya, escrita en el prlogo a un reciente libro sobre Azorn: No se nos conoce por lo que somos, sino por lo que de nosotros se entiende. A JOS CAPILLA BELTRN -CONOCEDOR MINUCIOSOS DE MIS LIBROS CORDIALMENTE AZORN MADRID MARZO 1942 18 Escritos de Jos Capilla sobre Azorn y Mir AZORN Y SU CUNA, MONVAR Ensayo publicado en el semanario madrileo El Espaol el 8 de enero de 1944 con el ttulo de Azorn y Monvar, con ciertas mutilaciones del original. Con breves y precisas palabras, nos ha dado Azorn una sntesis de su vida. Naci en Monvar, ciudad de la provincia de Alicante, el domingo 8 de junio de 1873, a las tres y media de la madrugada. Dice con sutil humorismo que no cree que conozca este detalle la gente que habla de Jos Martnez Ruz, Azorn. Verdaderamente, es frecuente ver en enciclopedias y notas biogrficas equivocados los datos del lugar y fecha de su nacimiento, tan a la mano, tratndose de un con tempraneo. El nombre de la ciudad de Monvar es de origen arbigo, segn Escolano, y sig nifica lugar de luz y claridad. La claridad de su cielo, la diafanidad de su ambiente son excepcionales. Esta luz de Monvar, al herir la retina de los azulados ojos de Azorn, diramos que le predisponen, desde su infancia, para percibir finamente el paisaje, el color, el matiz, con cualidades insuperables de pintor. En La Voluntad, libro tan socorrido cuando se habla de este escritor, abundan los paisajes. l mismo ha referido que para describir el panorama de Yecla se levant antes de amanecer tres semanas seguidas. Adems de mi lpiz y mi cuaderno, me acompaaba una lam parita, pues, naturalmente, no se vea. Y a su luz indecisa iba escribiendo, descri biendo los mil matices del paisaje, a medida que iba asomando el sol . Recordemos El paisaje de Espaa visto por los espaoles, sus observaciones sobre la evolucin del paisaje en las letras espaolas, sus frecuentes referencias a los maestros de la pintu ra espaola, sus observaciones sobre la evolucin del paisaje en las letras espaolas, el Greco, Ribera y sus artculos sobre las paletas de los contemporneos Zuloaga y Vzquez Daz. Siente Azorn con fruicin el color, percibe delicadamente el matiz, 19 Julio A. Copilla Bellot goza con la luz. Lo diremos, an a riesgo de escandalizar a algn lector: si admira ble es Azorn como literato, es de presumir que no lo fuera menos de haberse dado a la pintura. La luz de Monvar, de su cuna, ilumina las mejores pginas de su vasta obra literaria. Y as, Monvar, por su influencia luminosa, est presente en la pro duccin azoriniana. o Monvar, la patria chica de Azorn, est enclavada en la parte alta, montaosa, de la provincia de Alicante, el verdadero Alicante, el castizo. En su libro Espaa, hombres y paisajes, con el ttulo Una ciudad levantina, est descrita esta poblacin, cabeza del partido judicial que componen con Elda, Pinoso, Petrel, Salinas y La Alguea. La pequea ciudad es clara y alegre, as comienza a describir la ciudad en los primeros aos del siglo. La ciudad dista unos dos kilmetros del ferrocarril que le une con Madrid y Al icante. Gran parte de la ciudad est edificada en las laderas meridionales de dos colinas que se elevan a la derecha del Valle de Elda, valle con primor y cario des crito en el libro Superrealismo. Las calles de Monvar, empinadas, con escalones, rampas y rellanos, convergen en las cimas, donde una ermita, dedicada a Santa Brbara y los vestigios de un castillo rabe, caracterizan con sus perfiles la vista pano rmica de la ciudad. Al pie de las colinas, en la parte llana, la carretera, que se hace urbana con el nombre de calle Mayor, de la estacin frrea de Monvar a la ciudad, a Pinoso, a pueblos y ciudades de la provincia confinante, Murcia. Hay en la ciudad una iglesia grande, construda en el siglo XVIII, de gusto clsi co: a estas iglesias construidas en los pueblos recientemente suele faltarles una torre; hicieron una de las dos que haban de flanquear la fachada, y la otra, un poco can sados, la dejaron sin hacer. Aparte de la iglesia Mayor, en el pueblo existe otra de un convento de franciscanos; ya no viven los franciscanos en el convento; el convento ha sido convertido en escuelas y crcel; pero queda en la iglesia, ancha, silenciosa y cla ra, algo como un hlito, como un dejo, como un rastro de la paz y de la sencillez de estos humildes monjes.. . Los seores de la ciudad se renen en un casino rodeado de un diminuto y ame no jardn; los trabajadores de la tierra disponen de algunos cafetines, botilleras o alo jeras... 1 Actualmente Elda es lo cabeza de partido Escritos de Jos Capilla sobre Azorn y Mir Esta pequea ciudad es tranquila, pacfica, moran en ella artesanos, jornaleros y propietarios de tierras. Los propietarios, unos gozan de mucha hacienda; otros lo son en pequeo. As era la ciudad en 1900, que luego, en otra descripcin hecha en 1929, dir: La ciudad Monvar ha crecido considerablemente durante los treinta ltimos aos. Puede servir de ejemplo, singularsimo, asombroso, de evolucin de una ciudad. La industria ha sido implantada; hay aqu cuatro o seis grandes fbricas; se utiliza en ellas maquinaria perfecta, novsima. Se respira en la pequea y blanca y l impia ciu dad un ambiente gratsimo de bienestar material y moral. As es la pequea y blanca y limpia ciudad de Azorn. o Para rememorar la infancia de Azorn hay que acudir a su libro Las confesiones de un pequeo filsofo, libro impregnado de fino humorismo y de la agridulce nos talgia de los aos idos. Aprende a deletrear en una escuela que se levantaba a un lado del pueblo, a la vista de la huerta y de las redondas colinas que destacan suaves en el azul luminoso. El edificio haba sido convento de franciscanos. El maestro era un hombre seco, alto, huesudo, spero de condicin, brusco de palabras, con unos bigotes cerdosos y lacios, que senta raspear en sus mejillas cuando se inclinaba sobre el catn para adoctrinarle con ms ahnco, pues, por ser Azorn hijo del alcalde, reciba todos los das una leccin especial. Con un muchacho vecino, recogido y taciturno, jugaba a la lunita en las noches veraniegas. Cuando no va a la escuela, metido en casa, contem pla los grabados, los santos, de los libros ilustrados de la magnfica biblioteca de su padre. Es un nio modosito, ensimismado, con gran curiosidad, de delicada sensi bilidad. Yo me veo en casa, metido en un ancho cuarto, sentado sobre un arcaz de pino, calladito, con los pies colgando, mirando como mi madre va arreglando la ropa blan ca. Su madre, doa Luisa Ruiz, del vecino Petrel, en la que concurran todas las gra cias y virtudes, llevaba anotados en unos cuadernitos los datos trascendentales de los primeros pasos de sus hijos. Sabemos por estos cuadernitos que el 21 de octubre de 1878 fue cuando Azorn entr por vez primera en la escuela. De su madre here da Azorn el cuidado, la meticulosidad que se observa en citas, datos y pormenores bibliogrficos. Julio A. Copilla Bellot Cmo era Azorn de nio l mismo nos lo dir en el prlogo de Visin de Espaa, escrito en 1941 para esta antologa preparada por la profesora argentina Erly Danieri. Por lo interesante, transcribimos parte del mismo. Revolviendo viejos papeles, encuentro una antigua fotografa; la coloco en la mesa donde trabajo y estoy largo rato contemplndola; es un grupo escolar, grupo de nios tomado en 1881; entre esos nios me encuentro yo; pero no s, al pronto, quien soy. Tena yo entonces ocho aos, he tenido que volver la fotografa y leer en el reverso las precisiones, para saber quien de estos nios soy yo. Lo s ya; lo estoy contemplando atento y sonrien te; el nio que tengo ante m, que concentra mis miradas, aparece con el pelo hirsu to y revuelto; tiene arrugado el entrecejo y fruncida la boca; mira con los ojos entor nados, y mira cual lobezno recin cazado entre confiado y receloso; mira el lobez no, sin duda, a quien un poco desde lejos le est tendiendo la mano para acariciarlo; tal vez el falagero no se fa mucho de esta bestezuela y no est seguro de que al aproximar la mano, para pasrsela cariosamente por el cerro, no le hinque de pron to sus dientecillos. A los ocho aos, va a terminar las primeras letras y cursar la segunda ensean za en el Colegio de Padres Escolapios de Yecla. De Monvar a Yecla bamos en carro, caminando por barrancos y alcores; llevbamos como vitico una tortilla y chu letas y longanizas fritas. De Monvar a Yecla hay seis u ocho horas; salamos al rom per el alba; llegbamos a prima tarde. El carro iba dando tumbos por los hondos rele jes; a veces parbamos para almorzar bajo un olivo. Y yo tengo muy presente que, ya al promediar la caminata, se columbraban desde el alto de un puerto pedregoso, all en los confines de la inmensa llanura negruzca, los puntitos blancos del poblado y la gigantesca cpula de la Iglesia Nueva, que refulga. En Yecla, segn confesin de este pequeo filsofo, se ha formado su espritu. En un viejo convento, tambin de franciscanos, est el colegio de Calasanz. Desde el saln de estudio contempla la vega yeclana, lo que ha influido gratamente en su vida de artista. En La Voluntad est descrita la ciudad de Yecla con minuciosidad extrema. Por este libro se ha credo que Azorn fuera yeclano. Ocho aos de su infancia transcu rren en el colegio de Escolapios. En el refectorio oir la lectura de pginas del Quijote y de Julio Verne; se ver pasmado ante un libro que se titula Tablas de los logaritmos vulgares, que tiene hojas blancas y otras azules; tiene de ocultis un cuadernito en el que va pegando recortes de peridicos, inicio de su pasin bibliogrfica. Del escola pio P. Carlos Lasalde, sabio arquelogo, guardar siempre un recuerdo dulce y sua ve. Lo encontramos en La Voluntad y en la revista Escorial, a propsito de Leer y 22 Escritos de Jos Capilla sobre Azorn y Mir releer nos ha hablado con cario y admiracin del padre Lasalde. Y el grato recuer do de los aos en el colegio. Ocho aos de mi infancia los he pasado en un colegio de Escolapios. Los considero como los mejores de mi vida. Soy defensor acrrimo de los internados religiosos. Se adquieren con ellos, entre otras, tres virtudes fundamen tales en la persona: el amor al orden, la puntualidad y la limpieza. Mas tarde, lejos ya de los aos de la infancia, en pleno bregar de la vida litera ria en Madrid, visitar Yecla con su amigo Baroja. En Camino de Perfeccin dir el tremendo don Po que Yecla es un pueblo terrible. La firma J. Martnez Ruiz se ocul tar bajo nombre AZORN, apellido corriente en Yecla, que por lo eufnico y breve adoptar este escritor como seudnimo en su fecunda vida literaria. Es un recuerdo permanente de la ciudad de Yecla su nombre literario. o El futuro Azorn termina los estudios de bachillerato a los diecisis aos. Ha lle gado el momento de elegir carrera. Su padre, don Isidro Martnez, de Yecla, es abo gado. El mayor de sus hijos varones que va a emprender estudios facultativos estu diar tambin leyes. Y el pimpollo estudiante marcha a Valencia, en cuya Universidad Literaria, presidida por la imagen de Luis Vives, comenzar sus estudios de Derecho, estudios que no llegarn a feliz trmino jams. Este joven reconcentrado, observador, con espritu analtico, no se aviene con la pauta acadmica, con el hermetismo de las aulas, con los vagos y difusos libros de texto. Su afn de conocimientos se ve cons treido en la forma de los programas que ha de preparar segn un plan y un mto do de dudosa pedagoga. Ve en la enseanza oficial ltima dcada del siglo XIX el amaneramiento, la rutina, el frrago oratorio, el despego de la realidad, la carencia de concrecin. Por imperativo del deber se matricula, acude a las clases, sufre ex menes. Unas veces me matriculaba y otras estudiaba libremente. Examinbame unas veces y otras renunciaba al examen, dice en Madrid. Y es digno de anotar que quien ha de ser en el trancurso de unos aos el gran divulgador de nuestros clsicos, sea suspendido en el examen de Literatura, del preparativo de Derecho. Pero en Valencia estaban las tiendecillas de los libros de viejo; all la biblioteca universitaria, siempre desierta, solitaria, que escudria yendo y viniendo con una escalera de un lado a otro. Se entrega a la lectura de libros sobre las ms diversas materias: ciencias naturales, sociologa, arte, letras. Conocer todas las bibliotecas pbl icas y algunas particulares de Valencia. Leer cuantos libros caigan en sus manos, prestados unos, otros adquiridos con el sacrificio de los devaneos estudiantiles. Aprender el italiano leyendo a Leopardi y el francs en Baudelaire. Del estudio del 23 Julio A. Capilla Bellot francs, de sus traducciones, saldr el ostentoso yo que har expreso en la oracin castellana. Este mal estudiante de Derecho, que al ser preguntado en clase responde con fre cuencia no estoy preparado, se inicia en las tareas periodsticas en los diarios El Pueblo, El Mercantil Valenciano, Las Provincias. En el primero escribir artculos tre mebundos que causarn estupor en los lectores. Un da, a sus veinte aos, en la tribu na del Ateneo Literario, leer un discurso sobre La crtica literaria en Espaa, resea de los escritores que a la sazn cultivan la crtica: la Pardo Bazn, Leopoldo Alas, Antonio de Valbuena, Fray Candil, Menndez Pelayo, etc.... De Menndez Pelayo dir que puede contarse entre los ms activos y fecundos; aunque si mucho ha pro ducido como crtico de historia, no ha escrito tanto sobre asuntos de actualidad. Pasa diez aos en Valencia estudiando Derecho. Despus de cuarenta y tantos aos, en un precioso librito de memorias, Valencia, nos dar sus impresiones y andanzas por la ciudad del Turia. Dicho sea de paso, el libro es un lindo homenaje a la Valencia de las postrimeras del siglo decimonono; a la Valencia de Teodoro Llorente, del maestro Giner, de Blasco Ibez, el de La Barraca; a la Valencia ntima y castiza, con sus fematers y Pepito Villalonga; de las meriendas en el Grao, de la tartana, del Caf de Espaa. No se ha escrito nada tan perfecto, tan precioso, tan del icado, y con tanto amor, sobre aquella Valencia ingenua y pletrica, del carrer de Conills, de la Baix de San Francs... Arros y tartana, casaca a la moda y rode la bola a la valensiana! Las andanzas del estudiante de Derecho trascienden al pueblo, donde son ledos y comentados los trabajos que publica en la prensa valenciana. En las vacaciones escolares, al reintegrarse a Monvar, este joven escritor es mirado con respeto y extra eza a la par por sus paisanos. Su familia, especialmente su padre, no ve con bue nos ojos esta desviacin hacia el campo de las letras. Tiene la madre una hermosa fin ca en el Collado de Salinas, y el futuro Azorn, gran amante de la Naturaleza y de la soledad, all pasa casi por entero sus vacaciones estivales, con una bien nutrida biblio teca de los clsicos espaoles y franceses. All conversa con jornaleros, aparceros y arrendadores; con la mirada vaga contempla el paisaje inundado de luz; observa el misterioso mundo de los insectos y plantas. De estas conversaciones con la gente del campo y de tales observaciones saldrn sabrosos escritos del maestro Azorn, los caractersticos trabajos azorinescos, que elevan a categora de materia literaria cosas vulgares y corrientes que todos vemos sin percibir sus esencias. De cuando en cuando aparece por la ciudad este silencioso y solitario estudiante de Derecho. La familia vive en magnfica mansin situada en la calle Salamanca, en 24 Escritos de Jos Capilla sobre Azorn y M homenaje a este ilustre financiero y hombre de empresa que antao fuera nombrado alcalde mayor de Monvar. En la familia preside el orden ms riguroso. Cada hijo son ocho los que tiene la familia Martnez Ruiz tiene su habitacin, en la que hace su vida, con sus cosas y enseres. A toque de campana, acudirn todos al comedor. El respeto, la educacin bien cuidada y el orden rigen todos los actos hogareos. Y en esta casa, verdadera casa solariega, es donde Azorn va formando su bibl ioteca, distinta de la de su padre y la de sus hermanos, Amancio y Ramn, que cada uno tie ne la suya. Aqu, horas y horas de lecturas, de meditacin, de estudio, es donde se nutre la cultura de Azorn. Tambin, desde aqu, alguna correspondencia epistolar le va poniendo en relacin con preeminentes figuras de las letras, antes de su llegada a Madrid. -O Es la poca de los grandes seores de Cnovas y Sagasta, que dira Gabriel Mir. En Monvar existen entonces unos seores que se llaman don Jos Prez Bernabeu, don Leandro Limorti, don Calixto Verd, don Ciro Prez, don Antonio Alfonso, don Sixto Pina, unos mdicos, otros abogados, que forman un grupo inte lectual un tanto rebelde a la mansa y chata vida de fines del siglo precedente. En 1886 publican un semanario cientfico literario de intereses materiales, titulado El term metro. Estos seores son la elite cultural de la ciudad. Entre ellos, hay uno, don Jos Prez Bernabeu, que sentir viva simpata por el joven Martnez Ruiz, dada su inquie tud y rebelda expresas en sus primeros escritos y publicaciones. En Superrealismo, al hablar Azorn del Monvar de 1890, aludir a don Jos Prez Bernabeu, prestigio so federal, amigo de don Francisco Pi y Margall, mdico, certero clnico a quien, a pesar del ambiente de terrorfica incredulidad que le rodea llaman al punto en las casas burguesas. Este mdico, de origen modestsimo, que lleva a Azorn ms de una veintena de aos, ejerce una gran influencia en la formacin poltica del joven escri tor. Les unir una grande e ntima amistad, no obstante la diferencia de edades. Tambin, por aquellos aos, finales del XIX, se publica en Monvar un semanario pequeito que se llama El Pueblo. Lo dirige, edita e imprime uno de esos hombres de talento que se pierden en los pueblos, no sabemos si por abulia o por inadaptacin al medio del momento que viven. Con una modesta minerva, unos chibaletes faltos de cajas y unas cajas pobres de caracteres de imprenta, durante quince aos, semana por semana, vino apareciendo este semanario. Don Joaqun Amo Abat, que as se Ila 25 Julio A. Capilla Bellot maba este hroe de la prensa pueblerina, tambin de mayor edad que Azorn, fue uno de los monoveros que en aquel entonces entablaron franca amistad con este joven estudiante de Derecho que empezaba a escribir en los peridicos. Tras largas horas de encierro en su biblioteca, sala Azorn con algn amigo a orearse por los campos monoveros, o iba al casino a leer los diarios, o a la imprenta y redaccin -todo en una pieza- de El Pueblo, o, quizs a la rebotica de una farmacia que haba en la pla za de la Iglesia, centro informativo de la vida de la ciudad. Dondequiera que fuera, era el joven que apenas pronunciaba una palabra; en cambio, su curiosidad y obser vacin siempre estaban activas. En la farmacia, mientras los contertulios charlaban, el ira curioseando las etiquetas en latn de los potes colocados en las estanteras; en sus paseos, de pronto se detendr para examinar alguna hierbecilla adventicia o alguna alimaa; en la imprenta, hojear los peridicos de intercambio o algn libro abandonado y lleno de polvo que yace en un rincn. Su espritu est siempre des pierto para aprehender. As, otras veces visitar algn taller de carpintera, de herre ra, de guarnicionera, de alfarera y, en todos, inquirir los nombres de los mil uten silios y herramientas de estos oficios, sus detalles y particularidades. De este aprendi zaje saldrn bel las pginas dedicadas a la artesana, escritas con precisin, con minuciosidad y con un encanto inefable. Otro de los amigos de Azorn que queremos recordar en estas lneas es Sogorb. Hombre sencillo, que tena bastante de abogado de secano y que se pavoneaba por ser amigo de Azorn, o de Pepe, como l le llamaba con toda confianza. Tena una fabri quita de ans, donde, de cuando en cuando, los redactores de El Pueblo iban a libar alguna copilla. Este Sogorb, excelente persona, pero en extremo pedantesca, fue uno de los amigos monoveros de Azorn que ms correspondencia mantuvo con el mismo. Claro, que una correspondencia casi a medias. El bueno de Sogorb, ya en la poca del Azorn de Castilla, es decir, cuando ya es escritor consagrado, le escribe unas kilom tricas cartas, a Madrid o San Sebastin, ciudad esta ltima de sus descansos veranie gos. Azorn, que ha sido siempre parco en correspondencia y breve en sus misivas, le contestaba con unas palabras escritas con la angulosa letra azorinesca en una cuartilla a la que acompaaba un tarjetn en blanco, de los empleados en el Casino de San Sebastin para llevar el tanteo del juego. Sogorb, rechonchete y nervioso, iba al Casino de Monvar a comunicar a los amigos que haba tenido carta de Azorn, con el natu ral orgullo de quien se cartea con un prestigioso intelectual. He tenido carta de Pepe -deca-. Pero con la carta me manda una cartulina en blanco, no s por qu. Con la misma forma respondi Azorn a tres o cuatro epstolas de este buen amigo. Y se extra aba de los dichosos cartoncitos en blanco que siempre acompaaban a las breves res 26 OLliTE0 N Escritos de Jos Capilla sobre Azorn y Mir puestas azorinescas. Por fin, un amigo perspicaz y conocedor de la psicologa del minis tro, hubo de decirle: Amigo Sogorb, esos cartoncillos, tamao postal, que le manda Azorn son, sin duda, para que usted, en sus cartas se ajuste a la extensin de los mis mos. Es decir, que le pide brevedad en la correspondencia. Alguna que otra vez, Azorn pasa unos das en Petrel, el pueblo nativo de su madre, donde tiene un to, don Miguel Amat Maestre, abogado y poeta, que fue secretario de la Academia de Legislacin y Jurisprudencia de Valencia y vicepresi dente de la Diputacin de Alicante y que durante algunos aos ejerci la abogaca en Madrid. Es el Pascual Verd de la novela Antonio Azorn, libro muy estimado por don Francisco Navarro Ledesma. Y es en Petrel, tambin, donde est el simptico Sarrio, con el que recorrer los pueblos y ciudades de la provincia en franca camaradera. Sarrio tiene tres hijas esbeltas, plidas, de cabellera esplndida, Pepita, Lola, Carmen. Aos despus, desde Madrid, escribir unas graciosas cartas a Pepita Sarrio en las que, con simptico desenfado, se enjuicia la vida periodstica madrilea de aquellos tiempos. Ao tras ao va a Valencia a cursar Derecho. Cada vez con mayor desnimo para las disciplinas jurdicas a la par que crece su entusiasmo y ardor por las letras. Juntamente con sus trabajos periodsticos sobre temas sociales, literarios y de crtica teatral, empezar a publicar por su cuenta unos folletos que se titulan Moratn, Buscapis, Notas Sociales, Anarquistas Literarios, impresos en Valencia, en la impren ta de F. Vives Mora, si bien en sus cubiertas figura como editorial Librera de Fernando Fe, Carrera de San Jernimo, 2. Usa los seudnimos Cndido, en homenaje a Voltaire, y el terrible Ahrimn, de la mitologa persa. Como crtico teatral, frecuen ta los teatros valencianos. En ellos ve trabajar a los grandes actores Vico, Calvo y Novelli. Traduce La Intrusa, del belga Mauricio Maeterlinck, antecedente de sus preo cupaciones de innovacin teatral que bastantes aos despus producir trapatiestas en los teatros madrileos. Se le indigesta alguna asignatura de Dere , ho y para expulsarla traslada la matr cula a la Universidad de Granada. Tras brev , estancia, vuelve a la de Valencia. Pasa luego a la de Madrid. El esfuerzo de voluntel por satisfacer, sin duda, el deseo pater no, quiebra. Hay amonestaciones paternas disgustos familiares. Un da, contra vien to y marea, se va a Madrid, a formalizar , , is trabajos literarios, ya incoados en la ciu dad del ro blanco o sea el Guadalavie. 27 Julio A. Capilla Bellot Y en Madrid, en los comienzos de mi bregar literario, estando yo desgarrado de la familia era pudiente mi familia; vine desde Valencia sin su permiso; en Madrid, viviendo en un cuartito pobre, trabajando da y noche, he hecho durante veinte das esta comida, un panecillo de diez cntimos a medioda y otro panecillo de diez cn timos al anochecer. El propio Azorn en su Valencia nos cuenta este paso decisivo en la vida literaria de este mal estudiante de Derecho. Voluntad, tesn, trabajo, sacrifi cio, paradigmas de la biografa del ilustre escritor monovero. O Al abandonar sus estudios de Derecho, ha lanzado el novel escritor su aleo jac ta est. El 25 de noviembre de 1896 lleg a la Villa y Corte de Madrid, donde sien ta sus reales, llevando por todo equipaje una maleta con ms libros que ropas y una voluntad firme de triunfar en la espinosa carrera literaria. En su libro Madrid, medio siglo despus, con una fina sensibilidad, nos dar las impresiones de sus primeros pasos en el Madrid finisecular. En sus novelas La Voluntad y Antonio Azorn, publica das en 1902 y 1903, respectivamente, hallaremos buen acopio de sus andanzas, pre ocupaciones e inquietudes en aquellos aos. Po Baroja, el del fondo insobornable, en noviembre de 1913, con motivo de la fiesta que en honor de Azorn ya el artfice de Castilla se celebra en Aranjuez, en carta de adhesin se recordarn las publicaciones efmeras, Arte Joven, Juventud, etc, de su poca nmada y aventurera. Los diarios El Globo y el de Troyano, Espaa. La carta termina as: Hombre bueno, buen camarada, escritor admirable, merece Azorn como pocos el entusiasmo y el reconocimiento de la gente joven, la gente que suea con el resurgir del espritu y de la intelectualidad de la Patria. En este homenaje, en que la intelectualidad espaola reconoce los mritos del autor de Los Pueblos, est tambin presente Monvar. Un amigo de la infancia de Azorn 2 , persona culta y listsima, gran causeur, como diramos en galiparla, abogado, concu rre a la fiesta. Tambin, por carta o telegrama, se adhieren los monoveros don Dimas Bonmati, don Telesforo Cerda, don Saturnino Cerda, don Francisco Navarro, don Queremn Alfonso, don Vicente Quiles y don Juan Verd, de la industria y del comer cio de Monvar, contertulios de Azorn en sus breves estancias, por aquel entonces, en su pueblo natal. -O 2 Emiliano Prez Juan 28 Escritos de Jos Copilla sobre Azorn y Mir En la segunda dcada del siglo que corre hay en Monvar un grupo de jvenes inquietos, curiosos, con sana rebelda. Unos son estudiantes, modestos empleados otros. Recitan poesas de Fray Luis de Len, de San Juan de la Cruz; comentan lectu ras de clsicos castellanos y aquilatan a los modernistas Rubn Daro, Valle -Incln, los Machado, Juan Ramn Jimnez. Siguen al da la vida literaria de Espaa, y los libros de Unamuno, de Baroja y de Azorn pasan de unos a otros. Este grupo de jvenes cuya influencia en la vida cultural de Monvar algn da ser reconocido, est inte grado por los poetas Montoro, Peataro, Albert, y los estudiantes Garca, Verd y Capilla. Convive con ellos tambin don Silvestre Verd, compaero de estudios de Azorn en Valencia, de abundante erudicin de literatura clsica, as griega como lati na y espaola, pequeo hacendado y abogado que jams defendi un pleito. Estos jvenes publican un semanario que lleva el nombre de la ciudad, Monvar y que dirige el poeta Vicente Peataro. De la elevacin de este semanario pueblerino dar idea el hecho de que en 1915, con motivo del tricentenario de la publicacin de la segunda parte del Quijote, publicase en nmeros sucesivos veintitantos trabajos sobre la inmortal obra cervantina, todos escritos por monoveros. Azorn conmemo ra esta efemrides con la publicacin de su libro El Licenciado Vidriera. Es comenta do en el semanario y su director se lamenta de que Azorn no tenga en su ciudad una calle a l dedicada. El ilustre escritor, que en el curso de su vida l iteraria tiene la curio sidad de recibir, leer y coleccionar cuantos semanarios ven la luz en su cuna, al leer tal nmero de Monvar, interpreta que se pretenda reemplazar el nombre de Salamanca, que lleva la calle donde est situada su casa solariega, por el suyo, y escribe al director del semanario unas lneas: Sr. D. Vicente Peataro, Director de Monvar: nada de calles. Bien est San Pedro en Roma. Cordialmente. Azorn. Apenas deja de publicarse Monvar, surge otro semanario con el ttulo de la obra de Azorn, Los Pueblos. Funda este semanario don Silvino Navarro, industrial, don Jos Pina, abogado, y Jos Capilla, estudiante. Lo dirige este ltimo, ferviente segui dor de la obra literaria de Azorn, y no tiene otra pretensin que promover la dedi cacin de una calle a tal gloria monovera. Estamos en 1917, en plena conflagracin europea. El 11 de febrero de este ao aparece el primer nnero del semanario Los Pueblos con una fotografa de Azorn y las siguientes lneas expresamente escritas para este semanario literario de vida local. Transcribimos las palabras de hondo sen tido patritico y regenerador: Patria y Humanidad.- El ejemplo que nos ofrece la guerra presente es de un nacionalismo reflexivo y fecundo. Como los pueblos belige rantes se han recogido sobre s mismos y han hecho apelacin a todas sus energas, debe Espaa pensar en s misma, intensificar sus fuerzas, hacer que los grmenes cre Julio A. Capilla Bellot ados por la historia adquieran pleno desenvolvimiento. No odiemos al extranjero; no nos neguemos a la comunicacin con el mundo. Pero, tras largo abatimiento, comen cemos a ver lo que la tradicin, el arte, el suelo quieren que seamos. Trabajemos por que las caractersticas nacionales adquieran relieve y vigor. Amemos nuestra tierra, nuestro paisaje. No nos avergoncemos nunca de haber nacido donde hemos nacido. Siempre habr en nuestra Patria algo que no habr en las otras patrias. Y si sentimos ese amor a la patria nativa fundido en un amor a la humanidad habremos sido hombres y habremos cumplido nuestro deber de ciudadanos.- Azorn.- Madrid, 6 de febrero 1917. Tras sencillas gestiones llevadas a cabo por Jos Capilla, y para las que dio toda clase de facilidades el entonces secretario municipal, don Queremn Alfonso, perso na culta y amiga del maestro, el 19 de marzo del ao citado, da onomstico de don Jos Martnez Ruiz, a las cinco de la tarde, en acto sencillo que realzaban los jvenes exploradores en correcta formacin, que presidan las autoridades locales, director y redactores de Los Pueblos, y con la asistencia de la banda de msica de la localidad, eran descubiertos dos rtulos en mrmol blanco, con las letras en rel ieve del seudni mo Azorn, nombre literario de don Jos, y que desde entonces denomina la calle en cuyo nmero nueve naciera, en 1873, esta preeminente figura de las letras contem porneas de Espaa. Es este el primer homenaje oficial que tributa Monvar a su hijo. En 1924 ingresa en la Real Academia de la Lengua aquel mal estudiante que fue ra suspenso en Literatura del preparatorio de Derecho. La Corporacin Municipal de Monvar, en sesin solemne, acuerda felicitarle a la vez que nombrarlo hijo preclaro. Azorn al agradecer la distincin de que es objeto por parte de su pueblo, en carta dirigida al alcalde, reitera su amor a la tierra nativa: No olvido esa bella tierra en que he nacido ni se apartan de mi memoria los buenos y muchos amigos que en ella tengo y me honran con su afecto. Azorn, que ha tenido siempre el sino de promover escndalo con sus cosas, segn manifest a Ramn Gmez de la Serna, tena que producirlo con su labor tea tral . Aos de 1926, de 1927, de 1928... Singular expectacin en el mundillo de las bambalinas, en los cenculos literarios, en las redacciones de los peridicos ante el estreno de Old Spain. Gran alboroto con el de Brandy, mucho brandy. La pluma de Azorn vapuleando con sus artculos en ABC la ligereza, la inepcia, la frivolidad de algunos crticos teatrales. Escritos de Jos Capilla sobre Azorn y Mir En la cuna de Azorn se sigue con todo inters esta campaa teatral. Son comen tados los juicios que vienen en los papeles de Madrid, que, entonces, raro es el da que no traen algo sobre las andanzas teatrales de su ilustre y revoltoso hijo. No le embaraza la casaca acadmica en ese batallar. La Compaa Herrero-Porredn, que a la sazn va representando por esos pue blos levantinos, llega a Monvar y da a conocer Brandy, mucho brandy, el 30 de junio de 1927. Azorn, requerido por sus paisanos, ha llegado de Madrid el da anterior y ha sido recibido con todos los honores. Pronuncia una conferencia quin dijo que no hablaba este Azorn sobre los temas candentes de la reno vacin teatral . Se le da un banquete en el Casino, cuyo ofrecimiento es hecho por su ntimo amigo, el mdico don Antonio Alfonso, y al que asisten ms de cincuen ta amigos y admiradores. Sabedor Azorn de que Gabriel Mir se encontraba en el pueblecito de Polop, modesto veraneo del sencillo, noble y divino prosista Mir, le hizo venir en un coche enviado ex profeso, para que compartiera con l la admiracin y el homenaje. Y, as, durante unos das, vio Monvar transitar por sus calles y jardines a estas dos figuras cumbres de las letras patrias y paridas en tierra levantina. En 1929 publica Azorn su libro Superrealismo, ensayo completo del arte ms audaz y ms moderno, al decir de Antonio Espina. Con nuevas tcnicas Azorn, siempre inquieto y atento a toda innovacin, con visin cinematogrfica, nos mues tra los panoramas y pueblos del alto Alicante. Nueva descripcin de la ciudad nativa que de agrcola ha ido transformndose en industrial. Ambiente de Monvar. Delectacin en la observacin de sus caractersticas regionales. Elogio de las mono veras. La monovera limpia y diligente; su amor profundo a la limpieza; su apao para alhajar una casa; para condimentar un plato gustoso; para formar un ramo en que entre la albahaca; la albahaca que est en muchas ventanas, y de la cual los mozos suelen llevar los domingos una ramita en la boca. Una monovera que sonre con los ojos tan slo. Cocar; cocar los ojos; risa en los ojos en tanto que todo el con tinente de la persona y la palabra son graves. Y tambin la invocacin y el elogio a Gabriel Mir, tan amante de los pueblecitos de su comarca, la Marina de Alicante. Monvar supo responder a la ofrenda que le haca su hi jo con el l ibro Superrealismo. El da 2 de febrero de 1930 se celebr en los salones del Casino un 3 Julio A. Copilla Bellot acto cultural en que personal idades venidas de Alicante y otras de Monvar glosa ron la obra literaria de Azorn y fueron repartidos un millar de ejemplares del men cionado libro a las escuelas nacionales de la provincia. Entre los componentes de la comisin organizadora de este sencillo y culto acto, hemos de recordar a don Saturnino Cerda y al poeta Antonio Montoro, alcalde y presidente del Casino, res pectivamente. Azorn no pudo desplazarse de Madrid para recibir en persona este homenaje. Deseoso de conocer la cuna de Azorn y de asistir al acto, su editor, don Jos Ruiz Castillo, visit la ciudad de Monvar. A fines de 1929, Azorn estaba escribiendo una obra teatral con el deseo de que fuera estrenada en un corral de pueblo. Sus amigos y admiradores de Monvar, entre los que hemos de mencionar a don Francisco Navarro, a don Queremn Alfonso y al entonces notario de la ciudad, don Martn Perea, le pidieron el libreto, fue improvisado seguidamente un grupo de actores y con todo celo, entusiasmo y cario dieron comienzo los ensayos de Angelito, auto sacramental. Un grupo de amigos, todos cordiales, todos bondadosos ha querido representar Angelito. Obra de espiritualidad, haba de ser representada con amor y con efusin. Toda la ciu dad de Monvar se ha interesado en este empeo; a todos va mi ferviente gratitud. A la manera como en los antiguos autos sacramentales se funda el fervor de la muchedumbre con el fervor de los actores, se ha fundido la cordial idad de un pue blo con el entusiasmo de los intrpretes y con la vibracin del autor de su obra, dir Azorn en unas cuartillas prel iminares. El 10 de mayo de 1930, en el Teatro Principal de Monvar, tuvo lugar tan magno acontecimiento en la vida monovera. Los actores, no profesionales, entre los que hemos de mencionar a la seorita Adela Tortosa, que interpret maravillosamente el papel de Angelito, estuvieron todos acertadsimos en su justa adaptacin a los personajes crea dos por la fantasa del maestro. Azorn los calific de intrpretes admirables. Al da siguiente fue descubierto el sencillo monumento a Azorn, emplazado delante del edificio del Grupo Escolar, recientemente edificado. Sobre un simple basa mento de piedra de las canteras monoveras, el busto, en bronce, de Azorn, por el escultor valenciano J. Palacios. Un breve discurso de ofrecimiento del alcalde don Ramn Bel lot al que siguen unas palabras del hijo predilecto de Monvar. Recuerda que de niao iba a la escuela situada en el antiguo convento de franciscanos, y aca so fue para l una leccin el haber vivido el ambiente del Santo de la humildad. Luego en el colegio de los Padres Escolapios, donde los alumnos hacan frecuentes excur siones al campo, y all, observando, estudiando la vida de los insectos, se inici su espritu en la observacin de la realidad. Espera que los nios que vayan a las escue 3 2 Escritos de Jos Capilla sobre Azorn y Mir las dirijan alguna mirada al busto que all se halla y, pensando como se forj su vida, se educarn en una fina espiritualidad. Unas lneas ms como colofn. Hemos pergeado estos renglones en Monvar. En un sobrado, cmara o cambra; una mesita de pino sin pintar, esa mesita de pino sin pintar tan amada por el maestro, frente a una ventana por la que vislumbramos la campia monovera vides, olivos, almendros, circunscrita, en el horizonte, por las quebradas de los montes, con la gradacin de sus grises. En la mesita, el rimero de cuartillas, tan apetitosas para el escritor. Un simple tintero y una pluma. Y el afn de escribir. En unos estantes, a la mano, todos los libros de Azorn. Y con ellos, una fotogra fa. El maestro de la prosa castellana, a la luz de un cabo de vela, mantenido por broncneo veln, ante otra mesita tambin sencilla, monstica, sujeta con su mano izquierda las cuartillas, con deleite slo dado al escritor, mientras que su derecha mano lleva, cariosamente, la pluma que, en gruesos y amplios caracteres caligrfi cos va destilando el sentir fino y el pensar elevado de este egregio escritor. Hay en el semblante del escritor, inclinado ante la mesa, una expresin de serenidad, de sosie go, de tesn y fe en la labor. El escritor ha cumplido setenta aos. Durante cincuenta, no ha hecho ms que escribir y ms escribir. En las hojas volanderas, en los libros queda toda su labor. Una vida de escritor, de escritor puro, con el pensamiento y el alma dados a Espaa. En los tejuelos de sus libros leemos: El alma castellana, La ruta de Don Quijote, Lecturas espaolas, Castilla, El paisaje de Espaa, Una hora en Espaa, Sintiendo a Espaa.. . Es la declinacin de Espaa, como substancia viva, intrnseca, o como adjetivacin de la obra literaria. Cuarenta, cincuenta, sesenta volmenes. l mismo lo ha dicho, lo ha tenido que decir: No creo que tenga yo ni un solo libro ajeno a Espaa. Al pie de este retrato, unas letras autgrafas: Espaa y trabajo. Azorn Dos palabras, Espaa y trabajo, compendio de la obra y de la vida de este escritor, glo ria de las letras hispanas, hijo de la luminosa ciudad de Monvar. Julio A. Capilla Bellot (Fotografa Julio A. Capi lla) LAS CALLES DE MONVAR, EMPINADAS, CON ESCALONES, RAMPAS Y RELLANOS... 34 Escritos de Jos Capilla sobre Azorn y Mir (FOTOGRAFA JULIO A. CAPILLA) LA TORRE SEERA Y SOLITARIA. ENTRE LAS DOS COLINAS. LA TORRE DEL RELOJ QUE ESPARCE SUS CAMPANADAS POR LA CIUDAD. (DEL LIBRO SUPERREALISMO DE ZORN) 35 Julio A. Capilla Bellot A I woltoVARCIMNDISGTISMIRIebssa 1.11,11, elarammuctro - GIENTAINCeLltil~EINTLIMEA.MATEMA LEN. Irr1:12., 1 . .7 . -41=.. -,11%.2111.V.tizz . .= 1 11311711ftrIlf.z:..1z El Puebili ANO M - NUM. 107 SE PUBLICA LOS DOMINGOS 1111gRO SUELTO: 10 ADDAC2RA-1021WALION -1ALI.Ear S MAYO.,. aidsear Mell11110 MAI MONOVAR 15 NOVIEMBRE 19O3 MONO VA Director. VICENTE PEATARO h n o 27 de JUNIO d IBIS 2 2 ,1 flel 1111 1 1111. 1 L it min lateen LIC.C1000 OEICIEEDallEPEPWINIVEELIE -.. , 17. Semanario l iterario y de vida local . . OS PUEBLO { ARdMINt J. CAN. Illefivir 11111111 CABECERAS DE LOS SEMANARIOS MONOVEROS EL TERMMETRO, EL PUEBLO, MONVAR Y LOS PUEBLOS, CUYOS DIRECTORES FUERON DON JOS PREZ BERNABEU, DON JOAQUN AMO ABAD, VICENTE PEATARO Y JOS CAPILLA, RESPECTIVAMENTE. 36 Escritos de Jos Capilla sobre Azorn y Mir VARIAS PORTADAS DE LAS PRIMERAS EDICIONES DE LOS LIBROS DE JOS MARTNEZ RUIZ. 37 Julio A. Capilla Bellot J.:4 7 4;e .13.(14.: 4 4. r e. --,, ,1 4 , / ESCRITO DIRIGIDO AL ALCALDE CONSTITUCIONAL DE MONVAR, COMUNICNDOLE LA PUBLICACIN DEL SEMANARIO LOS PUEBLOS PRIMERA CARA DEL ESCRITO DIRIGIDO AL DIRECTOR DE LOS PUEBLOS CUYO TEXTO DICE: MI QUERIDO AMIGO: GRACIAS MIL POR SU INI CIATIVA Y POR TELEGRAMA DE FELICITACIN. A QUIEN VIVO AMOR PROFESA A SU TIERRA NATIVA HA DE HALAGARLE SOBREMANERA EL HONOR OTORGADO. GRACIAS POR TODO Y A TODOS. SUYO CORDIALMENTE: JOS MARTNEZ Ruiz MADRID, 20 MARZO 1917 38 Escritos de Jos Capilla sobre Azorn y Mir (FOTOGRAFA ARCHIVO J. CAPILLA) EL 19 DE MARZO DE 1917, EL PUEBLO DE MONVAR RENDA SU PRIMER HOMENAJE AL MAESTRO AZORN. LA FOTOGRA FA RECOGE EL ACTO DEL DESCUBRIMIENTO DEL RTULO, EN MRMOL BLANCO, CON EL SEUDNIMO DEL ESCRITOR, QUE DIO NOMBRE A LA CALLE DONDE NACI. Teatro Principal mo N OVA i,.. 0 a. i.0.s.I9 Herrero- Porredon 1. a...., ele. 9.a.M.01. put4 111 Id 29. 29 Y 301 Ole DE 19E7 d 144144 eceee nea ceeddr dade do le T40 44 . Ele 11110 DEE P011111111E111 dedne eleeedde EL NIO DESCONOCIDO am..9099.....p... a. outell eee . Brandy, mucho Brandy NOTA. dl aphodedeeta do Idee Idee.. medvede taledreme ~Me del Pe. 14444 Ueie (Aeode) elee dIee edeneade debe. 44 1 4 dededem . le eeeside *suele que declame mi pu. .0010 0001 .510 el 26..444 4. 4ge. peende pplareueleedu o.. 4,414443 44 mente. if.rdne3. Bu!. PROGRAMA DE MANO ANUNCIANDO LA REPRESENTACIN DE BRANDY, MUCHO BRANDY, EN EL TEATRO PRINCIPAL DE MONVAR. PROCIRAMA_:,..r AZORINI ANIGELATA C41J.0 II ******** I 000.0 PI OUEY ANGELIITA PROGRAMA DE LOS ACTOS EN HOMENAJE Al HIJO PREDILECTO DE MONVAR Y ESTRENO DE SU AUTO SACRAMENTAL ANGELITA. 39 Escritos de Jos Capilla sobre Azorn y Mir PARS Y AZORN En 1905, Azorn en Pars, cronista del viaje de un joven monarca, Alfonso XIII; en 1918, Azorn en Pars, corresponsal de guerra, en las postrimeras de la conflagra cin europea, cuando el can de largo alcance, a una distancia de ciento veinte kil metros, lanza sus proyectiles sobre la ciudad del Sena; de 1936 a 1939, Azorn en Pars, tres aos de exilio, ni forzoso ni voluntario, sino aconsejado por la prudencia. Tres fitas de la vida de Azorn en la ciudad que flucta, pero no perece. Y las tres con cordantes con tres pocas de la vida del escritor: 1905, Los Pueblos, el periodista pa tont, del monculo y del rostro bobo; en 1918 el parlamentario, si mudo en el esca o, agudo y sagaz en la crnica parlamentaria; en 1936 a 1939, rumia dolorosa por la eversin de Espaa. A los treinta, a los cuarenta y cinco, a los sesenta aos de su vida, Azorn en Pars. En la juventud, en la madurez, en el inicio de la senectud, Azorn en Pars. Mas, siempre, desde sus primeros escritos inquietudes literarias, artsticas, polti cas y sociales, llegadas a travs de Pars hasta el momento presente el de su pluma ingrvida, alada, escrutadora y sensitiva Pars efluvios de Pars en toda la produc cin de este escritor, con hondas races en Castilla y fronda en Lutecia. Muy castella no y muy parisiense este Azorn, que sabe amar a Francia sin mengua ni detrimento de su amor profundo a Espaa. Escrito en Elda en junio de 1945 con motivo de la publicacin del libro Pars de Azorn. Admitido por el semanario El Espaol, no lleg a publicarlo. Cuarenta aos ms tarde lo dio a conocer la publica cin Anales azorinianos en su nmero 2, editado por la Casa Museo Azorn de Monvar. 41 Julio A. Capilla Bellot En el prtico de su libro Pars, las palabras de Montaigne: Je ne suis francais que par cette grande cit. Acudimos a los Ensayos. En el libro tercero, que rezuma tam bin el dolor de guerras fratricidas, acotamos: Las guerras civiles tienen de peor que las dems, entre otras cosas, el obligar a cada cual a estar de centinela en su propia morada. Es grande apuro el encontrarse ahogado hasta en su hogar y reposo doms tico. He aqu, en la lejana de tres siglos y medio, las razones del exilio de Azorn, de 1936 a 1939, en Pars. Toda simpata acusa afinidad de carcter, de tempera mento. No lo hubo siempre entre el pequeo filsofo y Miguel de Montaigne Tan slo la que siente por otro Miguel, el alcalano, contemporneo del prigordano, la supera. Y as el suave escepticismo de Montaigne y la comprensin, tolerancia y humanidad de Cervantes convergen en Azorn. -O En las pginas del ao primero de ABC, encontramos las breves y acertadas infor maciones del cronista del primer viaje de Alfonso XIII al extranjero. Del viaje a Pars, en mayo de 1918, nos ha quedado un librito de corto nmero de pginas, unas ochenta, el Pars bombardeado (Bombas sobre Pars; el can que dispara desde ciento veinte kilmetros... Y que pequeo ya todo esto, hoy, despus de la guerra mun dial, cuando se ha logrado la bomba atmica). Abrimos este opsculo por la pgina 72 (Edicin Renacimiento, Madrid 1919) y encontramos este lirismo, raro en escritor que frena toda exaltacin: Divino Pars!, Divina Francia!, En mi corazn est la luz suave de tu cielo, el sutil razonar de tus filsofos y la sonrisa maravillosa de tus muje res. Que si el venero del arte literario de Azorn es Gonzalo de Berceo, Juan Ruiz, el Poema del Cid, la Celestina, los dos Luises, Gracin, Cervantes, Lope, Jovellanos, Larra, Clarn, paralelamente, lo es tambin Montaigne, Molire, Racine, Pascal, Descartes, Stendhal, Baudelaire, Taine, Flaubert, Mallarm, Barrs, Anatole France. De su ltima y ms larga estancia en la capital francesa, nos da Azorn el libro Pars, de memorias, limitadas en el tiempo, 1936 a 1939, y, en el espacio, a la ciu dad de Enrique IV. Qu hace Azorn en Pars, cules son sus pensamientos, sus sensaciones, sus preocupaciones Llega Azorn a Pars con el esces) numerario que se le ha permitido sacar de Espaa. El problema de afrontar la vida en Pars es salvado con toda delicadeza por el amparo de los generosos directores d La Prensa de Buenos Aires, en cuyo dia rio porteo colabora desde 1914. Salvada la preocupacin econmica, (-1 corretear, a callejear, a descubrir Pars. 42 Escritos de Jos Capilla sobre Azorn y Mir Y a trabajar intensamente, a escribir desde la madrugada hasta mediada la maana. En el corazn, con pudor, el dolor de Espaa, dolor que se percibe en sus libros Espaoles en Pars, Pensando en Espaa, Sintiendo a Espaa escritos en aquel enton ces. Un alma femenina, la escritora Mara Rosa Alonso, al comentar la produccin de Azorn posterior a 1936, nos dice con bellas imgenes que este hombre ha sido un instrumento al que ha estremecido una mano fuerte, brusca, que ha dejado las cuer das vibrando de dolor, de un dolor al parecer sereno, resignado, elegante, porque notas agudas ni gritos no los conoce el arte de Azorn. o Como a Montaigne, a nuestro Azorn le ha gustado siempre vagar, es decir calleje ar, corretear. De este vagar por pueblos y ciudades salieron pginas de fina y clara per cepcin del alma de Espaa. Andar, ver, escudriar es azorinear, neologismo que nos permitimos crear en honor y brindis al querido escritor. Andar, ver, escudriar azori near es la vida de Azorn durante sus tres aos en Pars y su remembranza es su libro Pars. En l rinde homenaje al maestro Montaigne ya ledo reiteradamente en los aos mozos de La Voluntad, Antonio Azorn y Las confesiones de un pequeo filsofo al tenerle por modelo perpetuo en estas memorias del agridulce exilio parisiense. Deambula por bulevares, plazas y callejitas balzacianas; pasea por parques y jar dines; frecuenta los museos, el Louvre, el Grevin, el Carnavalet; escudria en mercados y almacenes; dulces sedancias en iglesias, como la de San Julin el Pobre y la de San Sulpicio; curiosea en los talleres de remendones, de fontaneros, de sastres, de plancha doras; visitas a la Sorbona, al Palacio de Justicia, a la casa de Balzac, a la de Vctor Hugo; gratos remansos en los estudios de Sebastin Miranda y de Zuloaga; en el Colegio Espaol de la Ciudad Universitaria, cambia impresiones con su camarada Baroja ; y, en fin, la curiosidad y sed de libros, la fruicin de palparlos, de hojearlos, de mariposear por sus pginas, puede saciarlas en todo momento y en todo lugar, que en Pars hay libros por todas partes y a todas horas. Este delicioso vagar es el excitante del escritor. El tejuelo de una calle dedicada a Racine, la contemplacin de una estatua, des piertan posos de lejanas lecturas, de sensaciones dormidas, de desvados recuerdos. Halla la mente afinidades y antagonismos, asocia ideas, percibe diferencias y matices. El espritu no cesa en su laboreo. A la madrugada, en las albas cuartillas, la pluma del artista de precisiones y calidades nos dar el fruto del callejear, del azorinear del escri tor, cuyo espritu hallase siempre despierto, en tensin, en dulce gestacin. Dichoso vagar, feliz azorinear que nos da los primores de Pars. Julio A. Capilla Bellot (FOTOGRAFA JULIO A. CAPILLA) ...HE TENDIDO LA VISTA POR LA GRAN CIUDAD QUE SE EXTENDA AL FONDO; UNA LIGERA HUMAREDA VELABA EL URBANO PAISAJE (DEL LIBRO PARS DE AZORIN) (FOTOGRAFA JULIO A. CAPILLA) EL ESPECTCULO DEL MERCADO DE SAN ANTONIO ME REMEMORABA, EN CIERTO MODO, LOS MERCADOS DE LAS VIEJAS CIUDADES ESPAOLAS. (DEL LIBRO PARS DE AZORN) 44 Escritos de Jos Capillo sobre Azorn y Mir ALMA Y VERBO DE AZORN (DE LA LECTURA DE SALVADORA DE OLBENA) Hemos doblado, al cabo de lectura detenida y gozosa, la ltima hoja del libro de Azorn, Salvadora de Olbena, novela romntica, as calificada por su autor. Fruto de la misma son las observaciones, notas y acotaciones que nutren este ensayo, ajeno a toda pretensin crtica, pero propio del afn y estudio por la comprensin de tan sin gular figura literaria, ntegro escritor, de nuestro das. Un conato amoroso, tardo y lentamente paladeado por los protagonistas, consti tuye la leve trama novelesca. Otoo, melancola, olvido son los ingredientes del pro ceso psicolgico, adobado con ironas y brotes de humor, suaves, delicados, que tras cienden del supuesto momento romntico con eternidad y universalidad humanas. En sta, como en las anteriores obras novelescas de Azorn, apenas se esboza un argumento, se inicia una accin, se incuba una intriga. Ni en Don Juan, ni en Doa Ins se encuentra fabulacin amena y entretenida. Y no por falta de inventiva, que bien probada la tiene en cuentos nacidos de su fantasa lozana, sino por el propsi to deliberado de no urdir argumentos que enreden, embrollen y confundan la vida ntima de sus personajes. Diramos que no pasa nada en las novelas de Azorn, que estn quietas 1 Artculo indito escrito en Elda en abril de 1945 Julio A. Capilla Bellot Sin embargo, tal estatismo no es ms que externo, que toda criatura azorinesca est infundida de intensa actividad psicolgica. Su creador le transfunde su delicado caudal psquico, por lo que, los personajes de Azorn nos muestran ideas y sensacio nes de su progenitor. Y, as, el alma de Azorn se plasma en sus obras con el quietis mo del maestro, quietismo que oculta insospechada agitacin anmica. Ya hace aos en glosa dedicada a Doa Ins, deca el primer viga de nuestro campo intelectual, Eugenio DOrs: Castizo, apasionado, fogoso, enrgico, humilde, eficaz /artesano/ es, por dentro, ste que nos pudo parecer tan distanciado, tan extrao, tan enfermo, tan fro, criatura de excepcin escondida en el propio brillo lunar de su nimbo. . . Porque sospecho que tampoco se puede asegurar que todos los volcanes de la luna estn apagados. .. Apasionado, fogoso, enrgico, por dentro, este Azorn de rostro inmutable, reca tado. Alma de artista en trmolo constante, por todas las ideas y las sensaciones todas que registran las grficas de sus pginas impecables. Nos dice el mismo Azorn que todas las criaturas, en esta historia, son entes de razn. S, pero moldeadas con el barro de la realidad. Veamos la siguiente acota cin: El artista literario salta de la realidad, como en un trampoln, a lo ideal; la rea l idad, una u otra, es la hiptesis; podr haber saltado bien o mal, segn la realidad en que el artista se apoye; pero el apoyarse en la realidad es imprescindible. En efec to, de los estribos de la realidad vivida por el maestro salen muchos perfiles de sus criaturas. As, el doctor Casal, que como sucede a los mdicos escpticos, practica ba su arte a conciencia, nos recuerda a aquel mdico monovero, don Jos Prez Bertomeu, de tanta influencia en los aos mozos de Azorn. Y Paco Ardales, joven escritor, que no senta aprensiones por lo venidero; que estaba cierto de su futuro; que tena plena confianza en s mismo; con rebelda intuitiva, violenta, contra todo lo que supone aceptacin social o literaria, a la que asocia una fuerza reconcentrada que le hace escribir, con escrupulosidad, con observacin minuciosa horas y horas, este joven Ardales no estriba en aquel J. Martnez Ruiz, curioso, inquieto y revoltoso escritor de folletos como Buscapis y Anarquistas literarios En La Voluntad, en 1902, deca J. Martnez Ruiz por boca de Yuste: Comparar es evadir la dificultad, es algo primitivo, infantil, una superchera que no debe emplear ningn artista. En 1944, Paco Ardales, personaje de Salvadora de Olbena dice ...no es verdaderamente escri tor quien no sabe escribir secamente, escuetamente, sin una sola imagen. La imagen 46 Escritos de Jos Capilla sobre Azorn y Mir es lo que envejece en arte; la imagen es lo vulgar. Escribir con imgenes es hacer trampa en el juego. El poeta Silvestre que, infludo por los poetas lakistas, Wordsworth, Coleridge, Southey, abandona sus horas y horas de meditacin en el caf de Plateras y marcha a estudiar y sentir la Naturaleza, en una casa de campo prxima a una anchurosa laguna, a falta de lagos en Espaa, es trasunto parcial de quien escribiera Las confe siones de un pequeo filsofo en una finca del campo alicantino, del Alicante alto y castizo, en el Collado de Salinas. As, Salvadora de Olbena tiene reminiscencias del Azorn de La Voluntad, Antonio Azorn, y Las confesiones de un pequeo filsofo. Es Salvadora de Olbena uno de los libros de Azorn ms azorinescos. -O Despus del captulo Los Relojes, descripcin originalsima del sincronismo horario de los relojes de Olbena y del captulo Las Luces simultaneidad de esce narios especificados por la luz, introduccin cinegrfica de la novela, nos hace el autor una prevencin necesaria. No se detenga el lector dice, al ir recorriendo las pginas, ante ciertas extraezas; extraezas en el lenguaje y extraezas en la fabulacin. Si se detuviera, tendra que repudiar todo el antiguo teatro; teatro romn tico, en el cual son extraos irreales el lenguaje y la accin. Y, aqu, llegamos a una de las caractersticas ms notadas del estilo de Azorn: los vocablos olvidados, los vocablos enterrados, los vocablos inusitados. El Azorn perseguidor, cazador y capturador de voces en los clsicos, en las ciencias, en las artes, en los oficios; as en las academias como en los mercados, campos y talleres; de la parla del culto y de la del lego; el Azorn, en fin, insaciable goloso de vocablos. Sembradas estn las pginas de Salvadora de Olbena de trminos extraos, no ya para el lector vulgar, sino tambin, probablemente, para muchos ilustrados, como si Azorn hubiese derramado en ellas, a voleo, puados de voces de las logradas en sus innmeras lecturas y bsquedas. Achaque de los escritores romnticos fue el desen terrar arcasmos; creemos que para Azorn ha sido divertimento crear tal cmulo de voces incorrientes. Mostremos alguna: alcamonas, andrminas, bodijo, brincias, celepinos, cojijos, elacin, evagacin, hintero, liento, luee, martelo, nspido, opinati vo, orbayo, pestorejo, petrera, res tiir, roborar, saboneta, sibil, trufaldn, va gaza, vellera, zaque, etc. 47 julio A. Capilla Beilot Tratemos de explicarnos este afn constante de Azorn por la asimilacin de voces. Desde sus primeros escritos en la adolescencia hasta los que con tan maravi llosa fecundidad nos viene dando ya traspuesta la setentena de su vida, en todos hallamos reiteradas sus normas de escritor: sencillez, claridad, precisin. Poda la pro sa castel lana, ampulosa y parlera exageradamente en la ltima centuria, ese decir anquilosado, con hinchazones de artritis a las veces, de la sintaxis que pasa por cas tiza, segn Unamuno en su atrevido y descarado ensayo Sobre la lengua espaola. Al traste con los arrequives retricos, con las parrafadas, con las divagaciones. Con la acertada y feliz expresin del Conde de la Mortera, diremos que Azorn opone al estilo usual recamado de imgenes, tropos y dems pedrera retrica, la semidesnu dez helnica de la oracin primera de activa. Toma Azorn, en su formacin, del naturalismo el mtodo de la observacin y el rigorismo cientfico. Con asiduidad lee a Taine y a Flaubert, que fecundan las excep cionales facultades analticas de nuestro escritor, que aplica con fervor y tesn a per cibir el espritu de Espaa en los l ibros y en los lienzos y en los monumentos; en su deambular por pueblos, y ciudades de Castilla; en sus charlas con labriegos y menes trales. Sus trabajos de revisin, de visin directa, de observador sagaz y meticuloso inquiridor, exigen una expresin exacta, sin circunloquios, comparaciones e imge nes. El lxico ha de ser vasto y surtido, apto para la enumeracin, la descripcin, el detalle y el matiz. Y aos de afn, lucha y aprendizaje por conseguir la difcil facili dad de adaptar con precisin la voz a la idea. Diccionarios, lexicones de toda ndo le, l ibros de ciencia, de artes y de oficios son manoseados, anotados, escudriados incesantemente. Y acopio de modismos y refranes y sentencias que guardan gestos y saberes del pueblo espaol. Valga la aparente contradiccin, es Azorn el escritor que ha hecho menos literatura. Con la sencillez sintctica y la precisin lxica, lo que Azorn hace es ciencia. Oportuno recordar Alma castellana publicada en 1900, germen de esta ciencia de Azorn que se desarrolla en los noventa volmenes de su aportacin al conocimiento del alma de Espaa. Personalidad tan idnea como el doctor Maran ya dijo que el estilo cientfico, en Espaa, lo ha creado no un hombre de ciencia, sino un literato: Azorn. Aadamos por nuestra cuenta que la ciencia del alma espaola no la ha cre Escritos de Jos Capilla sobre Azorn y Mir ado un socilogo, ni un psiclogo, ni un historiador, sino un literato: Azorn. Que los ttulos de los libros todos de Azorn podran fundirse en ste: Alma de Espaa. Mas este hombre de ciencia, que es felizmente tambin un artista por su sensibi lidad exquisita, nos da sus teoras con sugestiva diafanidad. Matizada por su alma vemos el alma de Espaa, en el tiempo y en el espacio. Sin grandilocuencias, sin pom posidades, que el conocimiento slo se da a la sencillez y a la humildad. Y con el conocimiento el amor a Espaa. Y ved cmo, de Salvadora de Olbena, novela romntica de Azorn hemos llega do a este amor, el gran amor, de toda una vida!, el amor romntico de Azorn por Espaa. 49 Escritos de Jos Capilla sobre Azorn y Mir AZORN Y SU OBRA LITERARIA Otoo. Tarde del domingo. El sol, blanco mate, en declinacin. En los hogares, fruteros con paquetes de rubes que son las granadas, los carnosos membrillos, los higos, melosos y secos, de abolengo griego. Siemprevivas, crisantemos, blancos, amarillos, morados, la flor moco de pavo, que es alfombra hecha flor, en vasijas de cermica y alfarera levantinos. La poblacin, que ha transformado en actividad fabril el arte sutorio, en cafs y en bares, en el ftbol, hacia los cines. Es la expansin del productor, del empresario, del empleado, en el asueto semanal . Visito a mi amigo Z 2 , recoleto y fervoroso azorinista que reside en la ciudad del valle de Elda. Le he requerido previamente para charlar con l de Azorn y su obra l iteraria en esta tarde dominguera Me recibe en una estancia modesta y luminosa, desde cuyo balcn se colum bran las cimas de Boln, montes que en parte limitan el valle de Elda. Estantes col mados de libros y ms libros. En unos anaqueles todos los libros de Azorn, desde La crtica literaria en Espaa (1893), folleto desenterrado por este amigo, hasta el delicioso breviario de preceptiva literaria El Artista y el Estilo recientemente apare cido 2 ;. en otros, multitud de l ibros, de espaoles y extranjeros, en los que se habla de Azorn y su obra. Y carpetas repletas de recortes de revistas y diarios con infor maciones, crticas y comentarios, publicados a lo largo de treinta aos, colecciona dos con asiduidad y fidelidad extraordinarias. La imagen de Azorn de anteayer, de ayer y de hoy, en fotografas y caricaturas, junto a estas ringleras de volmenes de Azorn o sobre Azorn. 1 Trabajo indito, escrito en Elda en noviembre de 1947. 2 Z es el propio Jos Capilla. 3 En 1947 El Artista y el Estilo era su ltima obra publicada. Julio A. Capilla Bellot Con toda cordialidad, nos acoge el amigo Z. Su esposa,. monovera, paisana del maestro Azorn, nos sirve sendas tazas de caf, espeso y azucarado, nica golle ra del Azorn de antao. Y con unos cigarrillos a la mano, empezamos nuestra char la, que es gozo de lectores de Azorn, sin pretensin crtica ni de esttica dogmtica. Amigo Z, dediquemos nosotros esta tarde a Azorn y su obra l iteraria. Es un placer para m conversar amigablemente sobre tema tan grato. Hemos encendido nuestros cigarrillos. Tenues nubecillas azuladas expanden su perfu me en el mbito, como incienso de humildes oficiantes a la imagen de Azorn que nos preside. Cmo, amigo Z, definira usted la personalidad de Azorn Siempre fue difcil definir, y arriesgado. Sin embargo, le dir que Azorn es la consagracin plena de una vida, ntegra y austeramente, a las letras. Hasta la vida de esta gloria literaria es eso: una obra de Azorn, vivida por l mismo. Vida transparente, como un estilo; sencilla con su verbo; austera, como conci sa en su expresin. Todo artista persigue una finalidad con su obra: cul cree que es la de Azorn Por ser artista, la belleza, claro est. Con sus excepcionales dotes de observa dor, extras de nuestro tesoro literario y pictrico clsico y moderno, de la idio sincrasia de nuestro pueblo, de la variedad de paisajes, las esencias y caracte rsticas hispanas, y nos las muestra con su novsimo arte expresivo, llana y sen cillamente, destacando con emocin los perfiles de Espaa, en el tiempo y en el espacio. Y nos da el alma de Espaa, liberada de eruditos, historiadores e inves tigadores, con amor de poeta y honradez de sabio. Con observacin paciente y delicada sensibilidad, llega este levantino al meollo de Espaa, y ah est Castilla, la gentil y la brava la parda y la manchega. Y Alma castellana, La Voluntad, Los pueblos, Espaa, Un pueblecito, Una hora de Espaa, Toms Rueda, La ruta de Don Quijote.. . Curioseamos estos libros de Azorn, con acotaciones y notas marginales pues tas por Z. Hojeamos revistas y diarios con criticas y comentarios que son como una serie de diagramas de la vida literaria de Azorn. Se ha hablado mucho de la frase corta, asmtica, de Azorn. El maestro llega a las letras en momentos de empacho retrico, de ampulosi dad oratoria. El progreso cientfico, el nuevo ritmo de la vida, el despertar de Espaa, repercuten en el lenguaje. Cansados de oratoria, de prosa farragosa, la ciencia y la tcnica piden claridad, precisin, sencillez. Y es este escritor Escritos de Jos Capilla sobre Azorn y Mir quien se preocupa y afana pese a quienes le tildaran de galicista por des montar nuestra sintaxis, limpiarla de moho y pulir los vocablos. Limpiando y dndole expresin a la lengua, fue acadmico mucho antes de ingresar en la Academia. Qu obras de Azorn prefiere Dgase lo que se quiera, cuanto ha salido de la pluma de Azorn es un conjun to homogneo e indivisible. Los ttulos de us libros son meras referencias que no precisan ni acotan su contenido. Toda la obra azoriniana, noventa y tantos ttulos, millares de artculos que esperan ser recopilados, de ABC, Blanco y Negro, La Prensa, etc., tiene una denominacin comn, puesta por el mismo maestro: Espaa y trabajo. Aprehensin del contenido espiritual de Espaa y su proyeccin sobre el presente y el porvenir. Y, para terminar: quines han entendido mejor la obra de Azorn Sin autoridad, le dir los primeros que llegan a mi mente, un poeta, Antonio Machado; un filsofo, Ortega y Gasset; una escritora, Mara Rosa Alonso; un ensayista, ngel Cruz Rueda. Estudiarle, son muchos los que lo han hecho con competencia, y lo seguirn haciendo otros, que todava hay mucho que decir sobre este escritor. Recientemente, Martn Alonso, en su Ciencia del Lenguaje y Arte del Estilo, analiza paralelamente los estilos de Cervantes y Azorn. Y damos fin a esta charla. Evocamos en nuestra mente el espritu de Cervantes, tan simptico y querido por Azorn. Contemplamos, sobre la mesita de estu diante de Z, los retratos de Cervantes y Azorn, como hermanados por Z, este escritor de raro mrito, segn juicio amable de otro azorinista. 53 Escritos de Jos Capilla sobre Azorn y Mir PERFIL LITERARIO DE AZORN 1 El conocimiento del ser humano es uno de los problemas ms arduos. De antiguo est dicho que el hombre es la medida de las cosas, y sta es la tragedia del cono cimiento as ante el mundo fsico como ante el mundo del espritu. No hay conoci miento absoluto ms que en Dios. Lo que llamamos conocimientos adquiridos por el hombre no son sino pareceres. De aqu el riesgo que corre todo juicio, siempre rela tivo cuando el hombre es quien lo formula. No se nos conoce por lo que somos, sino por lo que de nosotros se entiende, resultante de la adecuacin de la medida con que se nos mide. El juicio es funcin de la medida que se nos aplique. Unamos a esta dificultad de conocer y juzgar al ser humano, la condicin anor mal de todo artista. Es el artista un ser de inteligencia excitada por extraordinaria sen sibilidad. Es lgico aplicar al artista los mdulos que rigen al ser y existir del hom bre de tipo corriente Evidentemente, no. El vulgo, y es sabido que hay vulgo en todas las capas sociales, ve en todo artista un loco o luntico, y no anda descaminado, como tampoco debe sorprender al hombre comn que, en su medio, el artista sea un inadaptado. Es decir, que el artista es un hombre raro. Y aqu llegamos al juicio este reotipado, reiterado, manoseado, de que Azorn es un hombre raro. Naturalmente, porque es un artista. No poda escribir las poticas pginas de Castilla un hombre corriente, normal y adocenado. 1 Este ensayo fue publicado incompleto como prlogo al libro de Antonio Montoro Cmo es Azorn Biblioteca Nueva. Madrid 1953 55 Julio A. Copilla Bellot En la azoriniana Memorias de X leemos que Azorn en su juventud fue inquie to y quiso singularizarse. Esta inquietud de J. Martnez Ruiz est reflejada en sus escri tos que van de 1893 a 1902. Dichosos folletos de J. Martnez Ruiz (Buscapis, Anarquistas literarios, Charivari, etc.) que todava, a travs de medio siglo, pesan sobre la etopeya de Azorn. De tal produccin de sus aos verdes se ha hecho un ale gato absurdo para conocer al Azorn de los aos maduros. Es como si un naturalista juzgara de la rana por el renacuajo, y viera contradiccin en la Naturaleza, y no evo lucin, entre la respiracin branquial del renacuajo y la pulmonar de la rana. Con branquias o con pulmones, este ser siempre respira aire y no otros gases. En la men cionada ana, dice Azorn: No importar que el pensamiento de hoy est en contra diccin con el de ayer; somos, en estos momentos, al pensar de distinto modo, fieles a nosotros mismos; no existe versatilidad, sino lealtad para con nosotros mismos. Puesto que el ambiente del mundo y la sensibilidad con que aprehendemos el mundo han variado, nosotros variamos. No seramos humanos si no lo hiciramos. Se pre tende que el artista sienta y piense en 1910, 1920, 1930 1940 como en mil ocho cientos noventa y tantos Pero note el lector, el lector de Azorn, que las caractersti cas temperamentales y las esencias ideolgicas persisten. Temperamento nervioso, apasionado, e ideologa liberal. Pero, cuidado, liberalismo tal como lo define Maran: Estar dispuesto a entenderse con el que piensa de otro modo y no admitir jams que el fin justifica los medios, sino que, por el contrario, son los medios los que justifican el fin. Y aade: El liberalismo es, pues, una conducta y, por lo tanto, es mucho ms que una poltica. Y sta fue siempre la conducta de J. Martnez Ruiz con Pi y Margal l o con Lerroux, como la de Azorn con Maura o con La Cierva. Y hemos de detenernos ms en este aspecto poltico de Azorn. All por el ao 1914, coment Un discurso de De La Cierva, famoso discurso de este poltico cuya influencia en la Espaa de aquella poca no se puede negar. Los comentarios de Azorn son nobles y elevados, los que nadie, pensando honradamente en Espaa, nadie puede rehusar, cualquiera que sea su ideal poltico. Con harta frecuencia se ha sealado este libro como prueba de rectificacin o versatil idad del pensar y sentir de Azorn. Que, como hombre, haya en Azorn desde su adolescencia, ideas polticas, no ha de llevarnos forzosamente a considerarle como poltico actuante o militante, a pesar de haber satisfecho reiteradamente el deseo que tuviera en la mocedad de sentarse en el Congreso y de haber desempeado en dos ocasiones la Subsecretara de Instruccin Pblica. Tales cargos, espordicos en la vida del escritor, no tuvieron otra Escritos de Jos Copilla sobre Azorn y Mir trascendencia que proporcionarle localidades de preferencia para asistir al espect culo de la poltica espaola en el primer tercio del siglo actual. Quien por condicin natural es esquivo, enseriado, al decir del poeta Amado Nervo no poda jams ser un poltico. Un espectador, un comentador, s; pero un actor de la poltica nunca poda serio. Frutos de este sagaz observador de la poltica contempornea son, adems del libro ya citado, El Poltico, las famosas Impresiones parlamentarias y El chirran de los polticos. En 1910 fue traducido al italiano, por Gilberto Beccari, El Poltico. El traductor puso al frente unas notas sobre el escritor espaol en las que, entre apreciaciones lite rarias, deca: Azorn, nella sua esperienza di governante... Y Azorn al leerlo, puso al margen, en lpiz tinta, con su letra grande y angulo sa, de fuerte pulsacin: No he gobernado nada. Adaptando al presente aquella tajante acotacin diremos que Azorn no ha gobernado nada, no ha sido poltico. La personalidad de Azorn es ntegramente artstica. Toda su vida est consagra da al cultivo de las letras con pasin y fruicin inslitas. A las letras van encaminados sus esfuerzos, preocupaciones, ansias e inquietudes. Desde sus primeros aos, su vida es un caminar continuo por la senda del arte. sin solucin de continuidad. Leer, medi tar, observar, escribir, es el vivir de Azorn. Y as hasta los momentos presentes, a los setenta y cinco aos de edad, y en los que sigan hasta llegar al final de su vida que ser el punto final de su ltima cuartilla. Este proceso de una vida literaria tan completa lo forman, sin fallas ni cortaduras, sus escritos todos, desde La crtica literaria en Espaa a Con permiso de los cervan tistas. Con los l ibros de Azorn a la mano, quien quiera, libre de prejuicios, con la sim pata que requiere todo conocimiento, puede estudiar la iniciacin, formacin y supe racin del literato, es decir, conocer plenamente el espritu del selecto artista de las letras. Cuenta la produccin de Azorn con un centenar de ttulos. Siguiendo el orden cronolgico, podramos establecer cuatro secciones correspondientes a otros tantos ciclos de su arte. Cada seccin la denominaramos con el ttulo de la obra tipo entre las producidas en el perodo concordante. As: Seccin de La Voluntad.- De 1893 a 1902.- La Voluntad compendia todos los folletos y libros que le precedieron. Con este libro termina el perodo de aprendizaje 57 Julio A. Capilla Bellor y orientacin del escritor, de revoltijo de lecturas y profusin de escritos de sociologa, poltica, moral, historia y literatura; de violencia en la crtica, de entradas y salidas en peridicos revolucionarios en los que se relaciona con figuras y figurones de la lla mada poltica avanzada. Seccin de Clsicos modernos (De 1902 a 1925).- En Antonio Azorn se suaviza el tono amargo de La Voluntad con fino humorismo y suave irona. Las confesiones de un pequeo filsofo y Los pueblos son sonrisas de literato convaleciente de pesimis mos y desilusiones. Recuerda J. Martnez Ruiz el consejo de Clarn y tiene presentes las palabras de Navarro Ledesma al comentar Antonio Azorn: De sus tanteos y pro baturas, alguno de los cuales ms le vala no haber publicado, sali lo que deba de salir: un artista serio, meditabundo, cachazudo, capaz de pedrselo todo a la reali dad y de arrancrselo todo a la lectura, un escritor que exprime el zumo de la obser vacin y arroja el bagazo cuando quiere. La singularidad de Azorn es ahora un gran monculo montado en el ojo derecho y un tremendo y desconcertante yo en las cuartillas. Observacin y subjetivismo. Pueblos, tipos raciales, paisajes de la tierra espaola y el espritu de nuestros clsicos. Con rebelda e independencia, indomable e insobornable. De las pedantescas historias y de las doctas ctedras salen los clsi cos a orearse en la volandera hoja periodstica, parva lectura de los pocos espaoles que leen. Nadie ha llevado a cabo semejante labor docente. Seccin Superrealismo (De 1925 a 1936).- En Doa Ins asoma ya una tcnica l iteraria que llega a su pleno desarrollo en las posteriores nuevas obras, esquemti cas, plsticas, cinemticas. Obedecen a la elipsis en el tiempo, el espacio y el esp ritu. Maravilla el rejuvenecimiento de este literato siempre inquieto y curioso. Los ensayos de renovacin teatral atraen a quien en sus comienzos tradujera La intrusa, de Maeterlinck (1896), y escribiera La fuerza del amor (1901 ), y, con denuedo, inu sitado en los medios teatrales, tan convencionales y falsos, sostiene la campaa ms dura e interesante que se ha dado en el teatro contemporneo. Seccin Memorias (Desde 1936) Transfiguracin de Azorn. Este intelectual sensi tivo ha sufrido el tremendo trallazo de una catstrofe: la eversin de su amada Espaa. El dolor que experimenta la sensibilidad tan delicada repercute en cuanto escribe desde entonces. Su temtica no ser ya ms que el mundo interior es tan amargo el exterior!, recuerdos, sensaciones y aspiracin asctica. La expresin directa, difana, condensada, es ahora tcnica literaria. Se agudiza la preocupacin que siempre tuvo por las voces olvidadas, juega con gramticas y diccionarios, y su rango literario, bien ganado, de clsico, le permite el fcil trato con Berceo, Teresa de Jess, Cervantes, etc., y, redivivos por la magia del artista, los vemos junto a nosotros, 58 Escritos de Jos Copilla sobre Azorn y Mir en la calle, en el hogar, en la estacin ferroviaria. Y, desparramadas en estos escritos de hoy, lecciones de esttica y tcnica literarias, precioso fruto de una experiencia lar ga, vasta y profunda, de quien dedic su vida total a lograr nuevas modalidades de belleza y vivificar la lengua espaola. -O Antes de darle fin, quisiramos, como sntesis de cuanto antecede, expresar con cretamente cmo es Azorn. No tenemos autoridad, adems de que correramos el riesgo de que fuera recusada, dado nuestro azorinismo. Saldremos del aprieto haciendo nuestra la opinin de un hombre insobornable, de sinceridad escandalo sa, que tiene razones fundadas para conocer a Azorn. Ya habr adivinado el lector que nos referimos a Po Baroja, nuestro gran novelista. Para el autor de Camino de perfeccin es as Azorn: Un gran especimen humano. Hombre bueno, buen cama rada y escritor admirable. As es, lector, Azorn. Quien no tiene pelos en la lengua ni en la pluma, quien no se casa con nadie ni por nada, lo dijo ha treinta y cinco aos, en carta dirigida a Ortega y Gasset, con motivo de la fiesta de Aranjuez en honor de quien tantos libros ha escrito pensando y sintiendo a Espaa. Hombre bueno, escritor admirable es Azorn. Repitmoslo como remate de este comento. Escritos de Jos Capillo sobre Azorn y Mir ELDA EN AZORN 1 Reiteradamente, Elda y su valle aparecen en la obra literaria del eminente escri tor don Jos Martnez Ruiz, Azorn, coterrneo nuestro. En sus aos verdes, transita por este valle de Elda. Desde Monvar, su pueblo natal y residencia familiar, a menu do se traslada a Petrel, donde tiene parientes por parte de su madre, nacida en el pue blo hermano. En estas idas y venidas de Monvar a Petrel, pasa por Elda cuyo vivir afanoso observa con sumo inters. En Antonio Azorn, una de las primeras novelas de Azorn, publicada en 1903, todo un captulo se refiere a la vida de Elda en aquel entonces. Elda es un pueblo activo. La agricultura no bastaba para su vida, ha naci do la industria. Y es una sola industria, que hace trabajar a todos los obreros en lo mismo, que los conforma con iguales aptitudes, que mueve toda la actividad del pue blo en una orientacin idntica. As queda sealada la causa originaria de la indus tria del calzado en Elda. De exaltacin de nuestra comarca es el libro que publica en 1929 con el ttulo de Superrealismo y posteriormente reeditado con el nombre de El libro de Levante. Con amor y magnificencia nos presenta el valle por el que discurre el Vinalop. ste es el libro en que Azorn llama a Elda, por antonomasia, la Industriosa. Obra autobiogrfica, como indica su nombre, es Memorias inmemoriales, dada en 1946. En el captulo La pea del Cid, simula estar obseso por escribir un libro sobre el Cid, Rodrigo Daz de Vivar. En busca del ambiente para llevar a cabo su deseo, viene a nuestro valle. Todo esto es precioso exclama Azorn; mi vida se des l iza en el valle de Elda, bajo la alta Pea del Cid, con una suavidad indecible; voy descubriendo poco a poco nuevos aspectos de la Naturaleza... 1 Artculo publ icado en la revista Alborada de Elda -septiembre de 1960-. Julio A. Capilla Bello! Otra descripcin hallamos en su novela El enfermo, novela que se desarrolla en Petrel. La Pea del Cid, el pueblecito de los alfares, la imagen de Jaime I el Conquistador que anduvo por estas tierras. Trascribimos: El valle de Elda reviste la forma del casco de un buque; podr tener diez quilometros de anchura por catorce de largo. El color que predomina es el gris suavemente azulado. A una banda se levanta una colina de yeso, y en la cumbre aparece Monvar; al otro lado, en las fal das de otro altozano, se ve Petrel . Y abajo, tocando las aguas del ro est Elda. En trabajos desperdigados y reunidos otros en volumen, vemos citados al pol grafo y hombre de foro Juan Sempere Guarinos, al abogado, autor dramtico y gran satrico Juan Rico Amat y, tambin, al popular poeta e ingenioso repentista Francisco Ganga Ager, conocido por El Serfico, los tres hijos de Elda. Al semanario Ic lella dio Azorn en 1 930 las siguientes lneas, breve y sencilla expresin del alma de Elda: Haca tiempo que no vea la vieta de /de/la la cabecera del semanario, dibujo de scar Porta; el horado negro del tnel, los paredones del castillo, la torre y la pal mera. Siempre que se posan mis ojos en ese dibujo, hago a Elda un viaje imaginario; rememoro los viajes de nio, cuando iba de Monvar a Petrel. Elda, con su ambien te especial, ambiente de inquietud y de poltica; un matiz pronunciado de gran ciu dad, costumbres de gran ciudad, que me atraan siendo adolescente. Se entraba en las frescas huertas, se atravesaba el Vinalop y, luego por el pueblo, las callejitas silenciosas y blancas. Durante un instante, haba respirado una atmsfera espiritual que no era lo de siempre. Ms tarde, en el recuerdo, Rico y Amat, Sempere y Guarinos, Castelar, el ambiente de inquietud y de poltica se justificaba. Sobre el case ro con su castillo, la preocupacin constante de otra cosa distinta de la vida agrco la: la iniciativa industrial, con todos sus azares, con todas sus innovaciones, que se consolidaba como una consecuencia de la inquietud intelectual antigua, Ahora, en este momento, veo el vallle todo, la Pea del Cid y el conjunto de los blancos muros dominados por la erguida palmera. Una palmera que existir o habr dejado de exis tir, pero que es idealmente el smbolo, sobre el poblado, mecindose al viento de las agitaciones de la industria y del intelecto. No cabe mayor precisin ni concisin mayor del ser y existir de Elda. El excelso escritor Azorn, a sus ochenta y siete aos, con maravillosa lucidez mental y finsima sensibilidad, nos ha dado en menos de un ao tres libros singulares en el vasto conjunto de su obra literaria. En estas pginas que son como caprichos literarios, confiesa una reviviscencia del amor a la tierra nativa. En el libro Agenda tenemos el captulo El camino de Elda, un viaje de Monvar a Elda a fines del siglo precedente, por el viejo camino vecinal y en tartana tirada por un caballo. Nos place 62 Escritos de Jos Capilla sobre Azorn y Mir entresacar de dicho captulo lo que sigue: En Elda se cultivaba el arte sutorio; cuen ta ahora ese arte con grandes y prestigiosas fbricas, en las que, a ms de la canti dad, se hacen primores. El recorrer las calles de Elda tena para m cierta emocin; de un pueblo orientado en la agricultura, pasaba a otro orientado en la industria; de una expresin lingstica a otra expresin. Y todo en un ambiente de amorosidad, La ilustre familia de los Coloma estaba vinculada en el valle de Elda; tena aqu un vas to palacio del cual quedan ruinas que imponen. Cervantes habla de un Coloma, poe ta, otro Coloma, Carlos, histori las guerras de Flandes. En este espigueo que hemos hecho en la obra azoriniana, quedan patentes el amor y preocupacin constantes del glorioso artfice de la lengua castellana por nues tra querida ciudad. El valle de Elda, la Pea del Cid, el Vinalop y Elda, la Industriosa con frecuente rememoracin de la pluma de Azorn. Siempre est pre sente ELDA EN AZORN, nuestro admirable y querido comprovinciano. (FOTOGRAFA JULIO A. CAPILLA) PANORMICA CON LA PEA DEL CID Y PETREL - AO 1950. 63 Julio A. Capilla Bellot (FOTOGRAFA ARCHIVO J. CAPILLA) EL RECORRER LAS CALLES DE ELDA TENA PARA M CIERTA EMOCIN... (DEL CAPTULO EL CAMINO DE ELDA, DEL LIBRO AGENDA DE AZORN) 64 Escritos de Jos Capilla sobre Azorn y Mir AZORN, DE SU LEVANTE A CASTILLA Desde La crtica literaria en Espaa, discurso pronunciado por el joven estudian te de Derecho, Jos Martnez Ruz, en el Ateneo Literario de Valencia, cuando toda va no ha cumplido los veinte aos, hasta el libro El cine y el momento, publicado a los ochenta aos de Azorn, toda la vasta produccin literaria del escritor levantino. En aquel folleto, una referencia al historiador don Rafael Altamira, ilustre hijo de Alicante; en este volumen ltimo, al hablar de las comidas en el cine, cita pasada, el plato cap i peus de la cocina levantina. En el Alicante alto, nace el escritor. Su cuna, Monvar, hoy ciudad, era tan solo villa en 1873. Monvar, del rabe, dice lugar luminoso o de la luz. Esta luminosidad levantina es la primera que impresiona la retina de los ojos nacidos para mirar y ver de Levante a Castilla, a Espaa, en el espacio y en el tiempo. Toda la vida de Azorn es su vida literaria, y sta es el producto artstico del incesante mirar y ver del inqui ridor de Espaa, en su esptu y en su tierra. De la ciudad nativa, marcha el nio Jos Martnez Ruz a Yecla, ciudad murciana, donde cursa la segunda enseanza. Estas dos ciudades, entre las cuales transcurren los aos verdes del futuro artista, determi nan, con su medio y ambiente, el cauce por el que ha de discurrir la labor literaria de Azorn. Por Yecla, se asomar a La Mancha y ascender a Castilla para vislumbrar el horizonte fsico e histrico de Espaa toda. As, la obra azoriniana tiene en Levante sus races, el tronco en Castilla y la fronda por toda Espaa. Todos los escritos de Azorn, desde su iniciacin, tienen adherencias de Levante. 1 Ensayo escrito en Julio de 1953 y publicado en el a 7 de la revista Azor mayo -junio de 1962, Barcelona. Julio A. Capilla Bellot Dos libros fundamentales en su labor literaria son La Voluntad y Antonio Azorn, novelas, en que la vida y andanzas de Antonio Azorn, sosia de Jos Martinez Ruiz, tienen por escenarios principales a Yecla y Monvar, con sus particularidades geo grficas, sociales, idiosincrticas. En estas novelas encontramos las impresiones que en el alma de Azorn ha dejado Levante, en los aos de infancia y mocedad. Con morosidad que no han sabido interpretar los crticos, se describe en la primera ciu dad de Yecla, con su vida austera, seria, es decir, la ciudad adusta; con fruicin y gozo en el detalle, en la segunda, la ciudad de Monvar, la ciudad apacible, es decir, suave, bonancible, agradable. Son, adems estos libros preciosos testimonio de las inquietudes y preocupaciones literarias, estticas, sociales, polticas, del escritor en su juventud, las que, con los aos, al limarse y purificarse, nos darn el perfil, nico y extraordinario, del excelso artista nacido en Levante. La escuela realista francesa tan posterior al realismo espaol de La Celestina, en boga en sus aos mozos, le lleva a la Naturaleza. Ejercita su capacidad observa dora ante el paisaje, hombres, plantas, insectos y hasta minerales de su tierra nativa. En La Voluntad y Antonio Azor -in, cuya gestacin son unos cuadernitos de apuntes tomados ante la Naturaleza, est la substancia esttica temtica de la literatura de Azorn. La descripcion de cuanto ve y observa requiere un vocabulario preciso para que la expresin no caiga en el comodn de la comparacin, en el cincunloquio, en el borrajear vago y confuso, parsitos que agobian a la prosa de aquel entonces. Claridad y diafanidad levantina dan a las cuartillas de Azorn precisin y detalle insu perables. Vase cmo el estilo de Azorn es producto de su tierra nativa. El joven Jos Martnez Ruiz es el lector insaciable: clsicos y modernos, espao les y extranjeros. De stos, preferentemente los franceses. Los Ensayos de Montaigne son su libro de cabecera. Ama a Montaigne porque es un filsofo de lo concreto, de lo menudo , de lo trivial, del detalle prosaico, de lo que vemos y palpamos todos los das en la casa y en la calle, segn nos dice el escritor de lo pequeo, de lo insignifi cante, de lo vulgar. Tenemos la tercera novela de personaje Azorn: Las confesiones de un pequei-io filsofo, en la cual Jos Martnez Ruz nos cuenta la infancia de Antonio Azorn en Monvar y Yecla. Delicioso librito escrito en una casa del campo alicantino castizo, en la parte alta de la provincia de Alicante, la montaosa, la que abarca los trminos y jurisdicciones de Villena, Biar, Petrel, Monvar, Pinoso. En esta casa, de una hacienda del patrimonio familiar, situada en el Collado de Salinas, des crita con toda minuciosidad en Antonio Azorn, fue escrito, entre lecturas y descansos bajo los pinos, este libro levantino en el cual la nostalgia y el fino humorismo se engar zan con primor azoriniano. 66 Escritos de Jos Capilla sobre Azorn y Mir La mayor parte de la obra literaria de Azorn publicse primeramente en diarios y revistas. Luego, el mismo autor, fu seleccionando los trabajos y agrupndolos bajo un ttulo genrico. De estos volmenes es el denominado Los Pueblos, ensayos sobre la vida provinciana, dedicado a muchachas, damas y caballeros que viven en la peque a y clara ciudad; un pueblo floreciente construdo en una ladera. Monvar Destaquemos de este libro el ensayo El grande hombre en el pueblo. Este grande hombre es Castelar, quien en Elda, Sax y Alicante pas aos de su infancia. En Sax, conoci el joven Martnez Ruz a Castelar, en el ocaso del gran tribuno, que, si nacido en Cdiz, conserv siempre, indelebles, sus gratos recuerdos de Levante. Describe Azorn el pueblo de Sax y nos da magistralmente la sensacin del grande hombre aca bado. El mismo autor, a poco de publicar su libro, en uno de sus trabajos periodsticos nos habla de l. Entresaquemos las siguientes palabras que tanto dicen, por ser dichas por el mismo escritor de LOS PUEBLOS, de su temtica literaria: Todo tiene valor est tico y psicolgico; los conciertos diminutos de las cosas son tan interesantes para el psi clogo y para el artista como las grandes sntesis universales. Hay una nueva belleza, un nuevo arte en lo pequeo, en los detalles insignificantes, en lo ordinario, en lo pro saico; los tpicos abstractos y picos que hasta ahora los poetas han llevado y trado ya no nos dicen nada; ya no se puede hablar con enfticas generalidades del campo, de la naturaleza, del mar, de los hombres; necesitamos hechos microscpicos que sean reveladores de la vida y que, ensamblados armnicamente, con simplicidad, con cla ridad, nos muestren la fuerza misteriosa del Universo, esta fuerza eterna, profunda, que se halla lo mismo en las populosas ciudades y en las Asambleas donde se deciden los destinos de los pueblos que en las ciudades oscuras y en las tertulias de un casino modesto, donde, don Joaqun nos cuenta su prosaico paseo de esta tarde. Cabe manifestacin ms clara y concluyente del arte literario de Azorn Otro libro, resultante tambin de escritos seleccionados por el autor, se llama Espaa. Algunos de sus ensayos breves, as los califica, son trozos de Levante: Una ciudad levantina, el Monvar de 1909, y en otro, titulado En la montaa, nos habla de las montaas finas de Levante, ligeras, cubiertas apenas de matujas, de lneas definidas, radiantes, estas montaas que parecen de porcelana y de cristal. . .. Durante una convalecencia en la tierra nativa escribe El Poltico, fechado as: Montaa alicantina, 1908. Llegamos al volumen El paisaje de Espaa visto por los espaoles, desde las dbi les pinceladas en el Poema del Cid hasta nuestros das. Entre la diversidad paisista que motiva el suelo ibrico, las tierras de Valencia, Alicante, Murcia y Mallorca en la literatura hispana, con toda fidelidad son acotadas por la pluma de Azorn. 67 Julio A. Capilla_Bellot En 1928, con Flix Vargas, ttulo que ms tarde ser reemplazado por El caba llero inactual, se inicia un grupo de obras nuevas que responden a una tcnica nov sima del artista siempre inquieto y curioso que es Azorn. Visin de cinegrafa, segn di jo un agudo crtico. Estas nuevas obras, al cabo de veinte aos, es ahora cuando empiezan a ser comprendidas. Coincide la publicacin de estas nuevas obras con el auge literario de una gloriosa figura alicantina, inolvidable, que dej en sus pginas ureas, con mimo y gracia angelicales, La Marina alicantina, el campo oriolano, el Mediterrneo: Gabriel Mir. En grata memoria del querido Mir, transcribimos la dedicatoria con que Azorn, en Blanco y Azul, rinde homenaje al cantor de Al icante: A Gabriel Mir. Pintor maravilloso singularmente en Aos y leguas de una de las ms finas tierras de Espaa: la de Alicante; la de los grises suaves, desledos, tenues; grises azulinos, grises rojizos, grises verdosos, grises morados, grises ureos; la tierra fina; finos los moradores; las mujeres limpias, pulidas y bellas. Su amigo, su admira dor, su conterrneo, Azorn . Con tan audaz tcnica, escribe Azorn Superrealismo o El libro de Levante, toda va inasequible para el lector corriente, como lo fueron antao los libros La Voluntad y Antonio Azorn, tan ledos despus. Podramos decir que, en parte, se da en Azorn el fenmeno estendhaliano, el de ser ledos y comprendidos sus libros con retraso. Nos da el artista no una novela, sino lo que es sta en el escritor antes de llegar a rea l izarse en forma concreta y definitiva. Y, en la gestacin, cuando la trama o argu mento est indeterminado, por perfilar los personajes, en la mente del autor se suce den, como en la pantalla cinematogrfica, paisajes, escenas, pueblos, costumbres, hombres y mujeres de Levante. Imgenes de Valencia, la del Cid, Villena, Sax, el valle de Elda, Petrel, Monvar, Novelda, Alicante, La Marina, el Mediterraneo. Y surge la figura de Gabriel Mir, que es como una montaa, como un ro, como un valle de la provincia de Alicante. Las montaas con su sinfona de grises, el cielo difano, ribazos que sustentan el olivo, el almendro; casitas blancas y limpias, viejos caminos blancos, y en los sedimentos histricos de los griegos y de los rabes. Sntesis: blan co en azul,claridad, idealidad, belleza: Levante. En la ltima etapa de la creacin azoriniana, la locucin, que, en Azorn, es bre vedad, precisin y claridad, consigue con la elipsis la mayor condensacin concep tual y expresiva. Diramos que Azorn, a travs de su exquisita sensibilidad, ha desti lado las esencias del idioma. As lo apreciamos en sus libros ltimos, de los cuales, dado el tema a que obedecen estas cuartillas, seguiremos ocupndonos solamente de aquellos que ataen al Levante espaol. Nos aventuramos a decir que Azorn, cuyo 68 Escritos de Jos Capilla sobre Azo Y M amor a su tierra nativa, Levante todo, es indiscutible e insuperable, ha tenido siempre una recndita y singular simpata por el pueblecito del Valle de Elda en que naci su madre: Petrel . As puede confirmarse con la lectura de El enfermo, novela que se desa rrolla por entero en ese pueblo del que ya nos dio a conocer en Antonio Azorn al simptico y campechano Sarri as como una sucinta biografa de Pascual Verd, nombre ficticio de don Miguel Amat y Maestre, ascendiente por lnea materna de Jos Martnez Ruz. Dicho pariente de Azorn, doctor en Derecho, diputado y vicepresi dente de la Diputacin de Alicante desde 1871 hasta 1876, poeta reiteradamente galardonado. El Valle de Elda tiene una nueva descripcin en El enfermo. El pueblo de Petrel, sus casas, su historia, los matices del verde en el olivo, en el almendro, en los alfafares, la Pea del Cid, las alfareras con sus penachos de humo hacia el lm pido azul . Tributo de Azorn a Petrel y por qu no decirlo, en el recuerdo, a su madre. Alrededor de sus quince aos, el joven Jos Martnez Ruiz comienza sus estudios de Derecho en la Universidad de Valencia. Simultneamente con los estudios acad micos, el incipiente escritor pblica folletos diversos y colabora en diarios de la capi tal del reino valenciano. De esta poca, fines del siglo XIX, son las evocaciones que en la senectud, prodigiosa senectud, contiene el libro Valencia. Nada tan fino, nada tan delicado, ni tan bello y exacto se ha escrito sobre la Valencia castiza. El espiritu valenciano, en su ambiente y en su historia, est aprisionado en las pginas de Valencia. Vemos la Valencia de hace medio siglo con sus calles denominadas por los gremios, sus tpicas fiestas, les falles, els miracles de Sant Vicent; omos la cha ramita, vemos el femater, es decir el aristcrata de la ancha, feraz y frtil vega valenciana. Exactas estampas del poeta valenciano Teodoro Llorente Olivares; el autor de La Barraca, Blasco Ibez, novelista que haba de alcanzar fama univer sal; el pintor de los blancos, Joaqun Sorolla, el escultor Mariano Benlliure y hasta tipos callejeros como don Pepito Villalonga. En la historia valenciana, San Vicente Ferrer, el filsofo Vives, el gramtico Salv. La huerta de Valencia, la de la baja y alta ribera del Jcar, con sus ros, canales y acequias, el verde charolado de los naranja les, es decir, el paisaje valenciano en su integridad pintado por la pluma de este artis ta que, con el color, da tambin al paisaje sensaciones de olor y movimiento. Paisaje en el espacio, paisaje en el tiempo, de la ciudad del Turia es el libro Valencia. Ya no es Jos Martnez Ruz, tampoco el famoso escritor Azorn, sino Equis, que no es nadie, quien en Memorias inmemoriales nos habla de Levante. Azorn, sagaz psiclogo, desdobla su yo para verse a s mismo, objetivamente, a travs del curso de su vida. El curso de su vida anmica desde que viera la luz de Monvar. Curiosos ensa 69 Julio A. Capilla Bellot yos de introspeccin con maestra de artista, con profundidad de psiclogo. De los escenarios de esta vida aparecen en primer trmino los de su infancia y adolescencia. La ciudad apacible y la ciudad adusta: Monvar y Yecla. Entre dos especies sensiti vas, ha fluctuado constantemente el espritu de Equis; las dos especies son: la sensa cin de la Ciudad levantina, casi mediterrnea, y la sensacin de la anchurosa ciu dad casi manchega, de antiqusima historia. Estas sensaciones caracterizan el arte literario de Azorn, que tiende a la plasticidad de Levante y a la espiritualidad de Castilla. Magia de poeta es instruirnos en el paisaje levantino para llegar a la inter pretacin del paisaje castellano, hasta saber ver el multiforme paisaje de Espaa. Y damos fin a este ligero esbozo de Levante en la obra literaria de Azorn tra yendo a colacin Un pedazo de Espaa, delicioso boceto de la tierra alicantina, sucinto trabajo periodstico, digno de figurar en las casas consistoriales de todos los municipios de la provincia de Alicante. Las lneas finales que damos a continuacin rezuman la cordialidad de Azorn a su tierra alicantina, este pedazo de Espaa: He nacido en esta tierra y mi mayor placer sera, despus de haber escrito tan to, estar sentado en un ribazo de piedras debajo de un olivo con sus ramas pndulas, viendo, entre el ramaje, pasar los blancos cmulos por el tenue azul. Ya no es maestra del eximio escritor, es la emocin del poeta Azorn ante el pai saje de su Levante. r-. Escritos de Jos Capilla sobre Azorn y Mir (FOTOGRAFA ARCHIVO J. CAPILLA) AZORN, CINCUENTN, EN LA POCA DE SUPERREALISMO Y DEL ESTRENO EN MONOVAR DE SU OBRA ANGELITA. 71 Julio A. Capilla Bellot (FOTOGRAFA ARCHIVO J. CAPILLA) JOS CAPILLA ANTE EL BUSTO DEL MAESTRO, OBRA DEL ESCULTOR J. PALACIOS, SITUADO FRENTE A LA FACHADA DEL GRUPO ESCOLAR DE MONOVAR. 72 Escritos de Jos Capilla sobre Azorn y Mir EL PAISAJE ALCANTINO EN LA OBRA LITERARIA DE GABRIEL MIR 1 (GLosA) A DON JOS CAPILLA, QUE TAN FERVOROSAMENTE LEY SIEMPRE A GABRIEL MIR; QUE TAN FIELMENTE LE RECUERDA. CLEMENCIA MIR, 1950 1 Trabajo galardonado en la Fiesta de la Poesa celebrada en Elda el 10 de septiembre de 1930. Opsculo -Tip. Moderna Elda 1930 73 Julio A. Capilla Bellot Levante! . .. Levante!... .. .Y comenz Sigenza una encendida alabanza de su Levante, de la maanas doradas y dulces como el panal, de estos crepsculos de misticismo y exaltacin. Y cuando esta serenidad y esta belleza hallan un alma levantina propicia a su gracia, entonces surge un artista maravilloso y elegido... (Libro de Sigenza). Nadie, mejor que Sigunza, ntimo testimonio y an la medida y la palabra de muchas emociones de la juventud de Gabriel Mir, como l mismo declara al frente del Libro de Sigenza, para afirmar el hallazgo de un alma levantina, de amor llena, acorde con la serenidad y belleza de Levante. Salve, Levante!: Tu cielo y tu mar, tus valles y tus montes, desde los campos de Tarragona hasta la vega del Segura, llenos estn de gracia y bendito es, entre todos los tuyos, ste tu hijo, Gabriel Mir, quien te canta con prosa amorosa e inmortal . Blasco Ibez, el titn de las grandes policromas levantinas; Azorn, que llega a tus rincones, tus pueblecitos, tus casitas rurales, tus labriegos, con su pulcro verbo y su lente analtica; Garca Sanchiz, que con rayos de sol levantino crea las mejores vite las impresionistas que lucen sus charlas: todos levantinos, artistas plsticos que troca ron la paleta por el verbo castellano, verbo que es mrmol y piedra en Castilla, color y luz en Levante, que es meloda en el Norte como es danza en el Sur. Todos estos hijos iniciados en el baptisterio de la Belleza, el Mediterrneo, que dej en sus ribe ras los sedimentos de Grecia, han tenido todos algo de hijos prdigos... Fiel a tu rega zo, viviendo en perenne dilogo de belleza, amndote en silencio como los grandes amadores, tan slo Gabriel Mir. Gabriel Mir: impresiones tctiles que sugieren las palabras de su prosa jugosa, lozana y sensual; Gabriel Mir: que palpa con deleite el relieve alicantino mientras su alma se expande toda en el paisaje. Levante! Levante!: Tu espritu es Mir. LA OBRA DE MIR Toda la obra de Mir, eminentemente descriptiva, saturada de lirismos con arro bos msticos, est inspirada en el paisaje alicantino, que es el mar y es montaa, como es huerta y es cielo, que en ese tringulo del suelo ibrico ha puesto la Naturaleza todos los elementos y las formas todas de la escenografa terrena. Hasta en Figuras de La Pasin del Seor, los paraje bblicos estn vistos a travs del levantino paisaje. 74 Escritos de Jos Capillo sobre Azorn y Miro Del vivir, La novela de mi amigo, Las cerezas del cementerio, El abuelo del Rey, Libro de Sigenza, El humo dormido, Nuestro padre San Daniel, El obispo leproso, Nio y grande, Aos y leguas. . . He aqu la obra literaria de Mir: Levante, aprisio nado, con todo cario, entre las pginas de un poeta, que , si nunca hizo versos, jams dej de hacer poesa. El lector de la obra de Mir quiere huir de la crtica, de la exgesis. .. Por qu cazar las emociones del artista, clasificarlas y cometer la crueldad de fijarlas con el alfiler del entomlogo Digna labor, cientfica y paciente labor; pero fra, pero cruel. Mariposa, alma, espritu! por qu no volar. .. Pongamos tan slo, al margen de la obra de Mir, esta nota: Mir tiene tres gran des pasiones a igual distancia de sus afectos, y son el mar, la sierra y la vega. Estos tres puntos determinan un centro: el acendrado alicantinismo de Mir. Estos tres pun tos, el Mediterrneo, Aitana y Orihuela, inscriben el tringulo alicantino en el hori zonte de la obra literaria de Mir, horizonte que tiene por cenit la Belleza, por nadir, el Amor. ALICANTE, EL MEDITERRNEO, LAS HUERTAS Mi ciudad est traspasada de Mediterrneo dice Mir. El olor de mar unge las piedras, las celosas, los manteles, las manos, los cabel los. Y el cielo de mar y el sol de mar glorifican las azoteas y las torres, las tapias y los rboles. Donde no se ve el mar se le adivina en la victoria de luz y en el aire que cruje como pao precioso. En mi ciudad, desde que nacemos, se nos llenan los ojos de azul de las aguas. (El ngel, el Molino, el Caracol del Faro). Mir canta el mar, el mare nostrum, con fervor de poseso. Puertos, muelles, pla yas, grutas y faros de la costa alicantina, desde Denia a Al icante, su ciudad, son motivos de sus prosas marineras. Y es Benidorm, sumergido entre azules perfectos mediterrneos, y es Calpe, pureza y quietud junto a la exaltacin de las rocas encarnadas, y es Altea la Nueva, encima de la costa, con un dulce sonrojo en su cal y en la piedra desnuda de su campanario, y es Altea la Vieja, que sale de los huertos del Algar, empinando su espadaa en un alcor de frutales, lo que jun to al mar perfila el poeta con prstinas imgenes. Y el pen de Ifach, ndice de la costa al icantina. Tambin las huertas de Alicante y Orihuela, llanuras de Denia y valles de Jijona y Alcoy, con sus variantes topogrficas, con su vegetacin varia son descritos con 7,5 Julio A. Capillo . Bellot golosa fruicin de sibarita, paladeando los frutos ptimos que dan vegas tan frtiles. Entre todas merece especial mencin, por su magnificiencia, la huerta de Orihuela, Oleza, ciudad donde el poeta,desde las ventanas de un colegio religioso siente las primeras tristezas estticas, en el despertar de su alma. Alma hipersensible que per cibir siempre el contraste entre las galas de la Naturaleza y los zarzales y malezas del paisaje del alma humana. Melancola de artista, esencia humana de los paisajes miran ia nos. Dos l ibros, que logran gran resonancia en el mbito literario, estn dedicados a Orihuela: Nuestro padre San Daniel y El obispo leproso. Orihuela, sus tradiciones, su empaque seorial, la fragancia de la vega del Segura... Cmo amaba Mir a Orihuela! Las mejores joyas de la prosa mironiana son ofrendadas a Orihuela. Y esta ofrenda sigue la negacin de los galadornes acadmicos. Rasguos, y no de rosales. Tambin la Belleza tiene sus mrtires.. . MI COMARCA Pero levantemos el nimo. Dice Mir mi comarca y el panorama de la Marina, con dinamismo cinematogrfico, proyctase en la pantalla de nuestra imaginacion. Y surge, como figura del paisaje, Mir, con humildad franciscana, montado en su jumento, recorriendo los campos de su comarca, meollo del panorama de los campos al icantinos, donde la majestad y orgullo de la serrana fraternizan con la sencillez y lozana de los valles y llanos. Campo mo!, voz interior de Sigenza, xtasis de Mir. Tierras de Denia, de Pego, de Callosa de Ensarri, de Villajoyosa. .. Libro de Sigenza y Mas y leguas: iti nerario sentimental y lrico de la Marina, la comarca, la querida comarca de Mir. Ojos de Mir, empapados de Mediterrneo, cigase aqu ante la lumnica sinfo na del paisaje. Laberintos de agrestes sierras cortadas por imponentes barrancos, puertos y desfiladeros. Pueblecitos bienamados de Mir, pueblecitos blancos sembra dos a voleo en los valles, en las laderas y algunos, atrevidos, como blancos caracoles de la sierra, trepando hasta las cimas de cerros y oteros. Castillos, castillitos de Levante. Pareja a la labor geolgica de los siglos, tierras que desde la meseta son arrastradas al mar, hay tambin como un aluvin de la Historia, y los sedimentos de Castilla, gestas y romances, aqu, en la ribera medite rrnea, son los castillitos, los sendos castillitos de la Marina. Es Castilla que se asoma al mar del brazo de Aragn. Y el encanto del valle de Guadalest, desde Confrides abocado al mar, aprisiona 71, Escritos de Jos Capillo sobre Azorin y Mir do por la sierra Aitana y Serrella, con sus fuentes, riachuelos y barrancos que dan categora fluvial al Guadalest, Algar o ro de la Salud. Pueblos, masas habla Mir, climas agrarios. Mientras Aitana se abre y se tiende sola en su universo, van pasando enfrente, desde el cuerno torcido y azul de Bernia, los rasos de Taberna, la comba de Ametlla, el Chord, de una calma sola nera, el Serrella con sus rbricas de oro sonrosado. Losas y sillares de comarcas asiticas. Moles lvidas y ardientes. Apariciones de castillo como obra de cantero en pea viva; castillos de fondos de Anunciaciones, de Nacimientos, de Epifanas, de primitivos. Y aqu, como expresiones de los climas agrarios, que dice Mir, el naranjo, flor de pureza, ureo fruto, sol de Levante condensado en rubicundas esferas; aqu, el antan y bblico y austero olivo; la vid, con variedades mltiples, moscateles que se abrasan al sol en los riuraus como almacenando sol para seguir gozndole en sus rutas por las brumas norteas; el almendro, nuncio de la primavera en Levante, con heraldos blancos y rosa; el pino, aqu gil, sin el reuma del Norte; las higueras, mojo nes vegetales de parcelas, huertos y heredades; y el algarrobo, rbol friolero que, aqu, en este rincn levantino, halla las mimosas caricias del clima... Y trigos, y mai zales, y huertas.. . Hasta fresa, Seor! El almendro, ndice de la flora alicantina, ha inspirado a Mir las siguientes pala bras que ocultan un alto sentido humano: Estos rboles impacientes, ligeros, frgiles, exquisitos, dejan una espiritualidad, una melancola sutil en el paisaje, y traen a nuestra alma la inquietud que inspiran algu nos nios delgaditos, de mirada honda y luminosa, que hacen temer ms la muerte. Por qu florecen estos rboles tan temprano No parece que voluntariamente se ofrezcan al sacrificio, que quieran consolar al hombre ensendole que han de quemarse y deshojarse muchas ansias antes de que cuaje la deliciosa fruta del alcan zado bien (Libro de Sigenza). Y entre estos pueblos y pueblecitos que se llaman Bolulla, Guadalest, Callosa de Ensarri, Trbena, Alfoz del P y los que dicen su evidencia rabe, los Benifat, Beniard, Benimantell, Benisa, engarzados por los relieves de Bernia, Aitana, Serrella, hay un pueblecito que guarda las ltimas estancias de Mir en su comarca, cuando un hambre de mar; una desnutricin sensitiva sin Mediterrneo, (Libro de Sigiienza), tras forzados cautiverios en la jaula burocrtica de la corte, llegaba Mir, con entusiasmo y alharaca de nio en vacaciones, a los campos de su comarca para recostarse en un ribazo, empinarse a los oteros que se asoman a la mar, correr las Julio A. Capilla Bellot montaas, brincar por las torrenteras, ponerse de bruces en una fuente (Aos y leguas); hay un pueblecito, decimos, que es ya lugar de peregrinacin para los fer vientes lectores de Mir. El pueblecito es Polop. Y Sigenza habla y siente por Mir: Le acoge la alegra de tener de verdad ese pueblo en que siempre se piensa cuando contamos un cuento ...Una vez, haba un pueblecito. .. Y en la mirada de las criaturas va pasando quietecitamente este pueblo. Es el hallazgo de nuestra palabra hecha realidad. Alegra de la revelacin y de la pronunciacin de la palabra pueblo... Todo el casero se arrebata por un otero, y sube triangularmente. Las cuencas de las ventanitas y de los desvanes; los labios de los postigos; todas las casas se fijan en Sigenza, y le preguntan, atnitas, fisgonas, durmindose; y los que tienen la som bra de un rincn de la ceja del dintel, porque en seguida les baja la visera pardal del tejado, otras tienen la calva huesuda y asctica del muro que prosigue. Arriba la parroquia, hastiales lisos, y, en medio, el campanario, con una faz quemada de sol y la otra en la umbra; un esquiln a cada lado de la nariz de la esquina; en lo alto, la cupulilla, con las graciosas asas de los contrafuertes chiquitines, como un cntaro dorado; el follaje de la veleta se embebe y se sumerge en el azul. Si terminase as el pueblo, resultara de una frmula de perfeccin, o de simula cin intelectualista. Pero, no: todava hay un derrocadero, crispado, rodo, de beln de corcho, con figuritas aldeanas tendiendo ropa; y en cada lienzo que ponen a secar se precipita una hoguera de sol . La cima, de escombros antiguos, est tapiada; un portalillo, y en la punta de la caperuza una cruz: el cementerio, sin un ciprs... Desde all se ver el mar. Viene su promesa con un viento ancho, calmoso, sal ino; palpita entre los almendros, y parece que se hinchen unas velas gloriosas, muy blancas. (Aos y leguas). En este cementerio desde donde se ver el mar, en este humilde cementerio que inspirara el galardonado Huerto de Cruces, debieran ser guardados los restos de Mir. En medio de los campos en que l hubiera querido morir. Muere el poeta en la meseta castellana, tan lejos de su mar, de su comarca y de su cielo. Y sentimos la angustia, por Mir, de esta lejana... Escritos de Jos Capilla sobre Azorn y Mir (FOTOGRAFA ARCHIVO J. CAPILLA) GABRIEL MIR Y SU HIJA CLEMENCIA EN POLOP DE LA MARINA EN JULIO DE 1927. 79 Escritos de Jos Capilla sobre Azorn y Mir POESA Y PROSA DE GABRIEL MIR INVOCACIN Seor, qu vida sta tan aturdida, tan premurosa. De la mazorca de nuestra exis tencia se van desgranando los das, encogidos y cortos, cargados de quehaceres y afanes materiales, sin un intervalo para expandir nuestra alma en el ensueo y la meditacin. No hay tregua ni remanso hay, en este vivir sin vida, para los ocios espi rituales, y la lectura, placer exquisito, coloquio con las almas idas y ausentes, ya es lujo inasequible, que hay que remar ms y ms, sin paz ni descanso, en la pesada galera del vivir de nuestros das. Y, sin embargo... Lleg la Primavera, siempre novia de los poetas, de los artistas, de los ensoadores, y el calendario nos trae la Semana Santa y los das geniales de Pascua de Resurreccin. Hagamos un alto en el cotidiano bregar. Meditacin. El sublime sacrificio de Jess, consuelo y esperanza en nuestras con gojas. Humildad del Todopoderoso, que toma forma y materia humanas para darnos su excelsa leccin de amor y sacrificio, camino espiritual amor y sacrificio son sus jalones que eleva y sublima al ser humano. Ensueo. Ver a Jess en su misin redentora por los campos y caminos de la jude ra. Aproximar nuestra lerda y torpe sensibilidad al intenso dolor del Nazareno; palpar sus vestiduras que afinen nuestro tacto; oir su palabra divina para cuidar la nuestra; recoger su mirada que nos de profundidad y comprensin de las acciones humanas. Divinas imagen de Cristo! Un poeta de mi Levante querido te ha visto y, genero so por artista, nos ha dejado unas estampas de maravilla en su Semana Santa, en sus Figuras de la Pasin del Seor. Trabajo indito, escrito en la primavera de 1946, con motivo del XVI aniversario de la muerte de Gabriel Mir, y que su autor no tuvo posibilidad de publicar. 81 Julio A. Capilla Bellot Gabriel Mir, alma grande y noble, espritu selecto, expresin joyante y abundo sa del verbo de Castilla, de monjes, guerreros y poetas, haznos la gracia de tu recuer do en estas pobres cuartillas de tu humo, de tus aos y leguas, en tu vivir y andar, cara a la belleza, por tu Levante, tu mar y tus montaas, que supiste recrear con el d co e n /2 que Dios te dio, leccin y solaz de cuantos caminan en pos de un ideal de belle za y amor. OBRA Y ESTILO La obra de Mir aparece en el siguiente orden: La mujer de Ojeda (1901), Hilvn de escenas (1902), Del vivir (1904), La novela de mi amigo y Nmada (1908), La pal ma rota, El Hijo santo y Amores de Antn Hernando (novelas cortas, 1909), Las cere zas del cementerio (1910), Del huerto provinciano y la novela corta La seora, los suyos y los otros (1912), Los amigos los amantes y la muerte (coleccin de cuentos, 1914), El abuelo del rey (1915), Figuras de la Pasin del Seor (tomo I) y Dentro del cercado (1916), Figuras de la Pasin del Seor (tomo II) y Libro de Sigenza (1917), El humo dormido (1919), El ngel, el Molino, el caracol del faro y Nuestro Padre San Daniel (1921), Nio y grande (1922), El obispo leproso (1926) y Aos y leguas (1928). Gabriel Mir, que fallece al filo de los cincuenta y un aos naci el 28 de julio de 1879, en Alicante, y muri el 27 de mayo del 930, en Madrid publica su primer libro a los veintidos aos, edad en que contrae matrimonio. Es curioso que el escritor, ya en sazn, repudiase sus dos primeras obras, La mujer de Ojeda e Hilvn de esce nas. Causas de tal repudio Reiteradamente se ha dicho que la obra, una vez publi cada adquiere plena autonoma. Adems, para el estudio de la produccin de un escritor y, en general, de todo artista, nada de su labor es desdeable. Ayuda a la comprensin de la obra perfecta, madura, acabada, el conocimiento de las primeras producciones, tanteos, ensayos, esbozos, donde hallaremos, claro que en estado lar vario, la manera, modo y estilo de aquella. Buen aprendizaje tuvo Mir. En Orihuela, en el Colegio de Santo Domingo, de padres jesuitas, estudi humanidades. Lee la Biblia, los clsicos, libros de Teologa, de la biblioteca de su padre, ingeniero de caminos, quien le aficiona a la msica y al campo. Oye de labios paternos historias de santos; su madre le cuenta muchas veces la Pasin del Seor; su to, el pintor Lorenzo Casanova, el pintor ms notable del rei no de Valencia, cuando l quera pintar juicio de un cronista conterrneo, le inicia en el dibujo. 8 2 Escritos de Jos Capillo sobre Azorn y Mir Podramos decir que con nuestro siglo comienza la carrera literaria de Mir: pri mer libro, primeras colaboraciones en peridicos, actividades que alterna preparan do unas oposiciones a la Judicatura. (Quin no ha sido opositor Afortunadamente para las letras, no tiene xito las dos veces que oposita). No escapa, en sus primeros escritos, a la influencia del naturalismo que sufren nuestras letras en la segunda mitad del siglo XIX y que persiste hasta bien corrido el actual: Galds, Pereda, Pardo Bazn, Clarn, etc. Y es en esas primeras obras desechadas por su progenitor donde cla ramente vemos la tendencia naturalista que de Francia nos llega con los Zola, los Maupassant y otros. El naturalismo, cosa sabida, es la reaccin contra el empalagoso romanticismo, copia servil de la Naturaleza, no llega en nuestras letras a los excesos zolescos. Diramos que se suaviza por mermarle virulencia el ingnito realismo de nuestra lite ratura desde La Celestina ac. Cierta delectacin morbosa que se halla en algunos escritores de tal escuela descripcion s de laceras, aberraciones fisiolgicas, bajos fondos sociales es en Mir la te tica de los leprosos, de los cementerios, de la podre y cadaverina. Hasta en su ra ya perfecta, magnfica y plena, nos topamos con un leproso, con una mitra y guantes, pervivencia de aquellos temas. De los primeros en estudiar la obra mironiana fue aquel crtico y ensayista, tan fecundo como inquieto, Andrs Gonzlez Blanco, muerto en plena juventud. En sus Apuntes para una historia de la literatura hispanoamericana a principios del siglo XX, que titula Los contemporneos, escritos en 1906, cuando Mir solamente ha dado La mujer de Ojeda, Hilvn de escenas y Del vivir, considera al autor como escri tor que sigue el mtodo naturalista: observacin y experimentacin. Y aqu tenemos un nuevo novelista que se ha afirmado como escritor robusto y como experimentador y observador. Entre los detalles biogrficos de Mir que se nos han dado, hay uno que quere mos destacar en este rastreo del arte mironiano, y es el de sus relaciones con el lrico cataln Juan Maragall, amante de la Naturaleza, que canta en lengua verncula los paisajes de Catalua y paladn de la teora de la palabra viva. El lrico del verso azul y la cancin profana, el musical Rubn Daro, trae a la lira castellana el modernismo galo, definido as por Blanco-Fombona: se caracteriza el modernismo por el pesimismo, el refinamiento verbal, la exaltacin de la sensibilidad, la rebelda y el culto a la belleza. Entre los discpulos de Rubn en la poca de su auge, viene a nuestra mente el nombre de Juan Ramn Jimnez con su delicioso Platero y yo. Por qu la lectura de este libro nos recuerda a Mir El modernismo, en cuanto es gus to y seduccin verbal, es otra de las influencias formativas de Gabriel Mir. 83 Julio A. Copilla Bellot A las influencias adventicias y de carcter intelectual se sobreponen las condicio nes naturales del artista y de la tierra en que naci y vivi gran parte de su vida, las que determinan su obra. Es Mir eminentemente sensitivo y sensual, polcroma es su tierra y, en ella, constante gozo el clima. El delicado sensorio de Mir despierta con el cielo, la tierra y el mar de Levante. Color, sonido , sabor, olor y relieve levantinos penetran por todos los rganos sensoriales de Mir para depositar en su multitud de sensaciones que, purgadas de toda ganga de impresin tropel y confusin queda rn a merced de su memoria sensitiva, tras un periodo, durante el cual, por fecundo proceso psicolgico, se asocian, fndese unas con otras, se casan. Y as, llegado el momento de creacin literaria que tiene todo dolor y gozo de maternidad el artis ta las recrea y las viste con las mejores galas verbales. El genuino arte de Mir est aqu, en la gracia para percibir semejanzas y afinidades que se traducen en las im genes y metforas de insuperable e inigualable belleza. En sus notas autobiogrficas, dadas en 1927, dice: Escribo cuando puedo; pocas veces con facilidad; sin notas; a distancia de lo que me impresion. Distancia, en el tiempo, que va de la impresin y consiguiente sensacin hasta la madurez de sta para la expresin literaria, met fora original y sustanciosa, rutilante, con sabor, olor y turgencia. Leer un libro de Mir es sentir el tremulante aleteo de una banda de mariposas, sedas y tornasoles, mari posas del lenguaje, numerosas y bellas en el vergel de la prosa mironiana. (Poetas, amados poetas, cread metforas. Qu sera del verbo sin las metforas). La palabra de Mir es seduccin, encanto y golosina. Cmo gusta, Mir, de las palabras! Ah! Pero las paladea, las palpa, las sopesa y hasta les hinca el diente cual avaro mercader que contrasta la moneda. No pasan fcilmente a su caudal verbal, no. Unas, por humildes y expresivas los pobrecitos arcasmos, otras, por lozanas y atrevidas los bullangueros neologismos y l, tambin, en su crisol, por buen odo, funde alguna que nuevecita y eufnica, nos la ofrece con delicadeza y elegancia. Y de su querida comarca La Marina, de los pueblecitos del Val) de Gallinera, de las tie rras de Parcent, donde, remansada, se halla la fontica de la dolsa parla valenciana, incorpora al habla de Castilla eufnicos vocablos que le dan insospechados matices y sonoridades. As, pollastre, rogle, antiguor, mantellina, golosa, etc. EL HOMBRE Y SIGENZA Conocimos personalmente a Gabriel Mir en la ltima dcada de su vida, trans puesta ya la cuarentena. Daba la impresin de un hombre de constitucin robusta. Su estatura era proporcionada, armnica la figura y su apostura noble. En su rostro lige ramente macilento, se insinuaban ya los surcos de los aos y leguas vividos, las cre 84 Escritos de Jos Capilla sobre Azorn y Mir adoras vigilias y la meditacin. Bajo ancha y despejada frente, unos ojos claros y grandes, algo rasgados, de mirar sereno y melanclico. La narz, perfilada; boca regular, de labios gruesos y sensuales. La tez se notaba curtida por las brisas yoda das y saladas de sus oreos por los valles, montaas y costas de su comarca marine ra. Abundantes y castaos los cabellos, peinados en discreta melena. Todas las fac ciones eran fiel expresin del hombre intelectual y emotivo. Se mostraba tal cual era, sin afeccin alguna, sin la menor reserva. Encantaba orle hablar. Acariciaba su voz aterciopelada, de timbre varonil. Se expresaba con pausa y dulzura, como escriba, y con el gustoso saboreo del vocablo que flua espon tneo. Con ademn preciso, sus manos abaciales, de dedos largos, aristocrticos, acompaaban y subrayaban su grata conversacin. Amaba la vida sencilla, no por humilde, sino por selecto, que nada acusa tanto de plebeyez del espritu como la inclinacin a pompa y vanidades, mixtificaciones y oropeles. En su libro Del huerto provinciano publicado en 1912, ttulo que desapare ce cuando ordena la primera edicin de sus obras completas, por haber incorporado al volumen Del vivir, Corpus y otros cuentos gran parte de aquel, leemos en la nota preliminar: Yo, ms quiero un mediano entendimiento y un corazn sencillo que mire las humildes hermosuras de la vida, que perciba sus menudas y escondidas sensacio nes, y que como yo se contente aspirando el olor de la lea quemada y de la sem bradura hmeda, y guste del silencio campesino, del vuelo de las palomas y de las gaviotas, de hollar las frescas tierras de los prados, del sueo de las nieblas de los ros, y estremecerse de santo deleite asomndose a la Creacin de soledad de una cumbre de serrana.. . Yo escribo para esas almas amigas. Fue siempre hombre hogareo, de clidos afectos familiares. Los suyos y las letras llenaban su vida, recatada sin mojigateras. Viva como un pequeo patriarca. No se permita ms vicio que el fumar, tal era la austeridad de sus costumbres. Tan sencilla era su vida, que lleg a decir en cierta ocasin que no tena biografa. Y es que su mundo era interior de meditacin, ensimismamiento y ensueo. En todos sus actos mostraba una delicadeza extrema, un seoro espontneo y natural. Uno de los que gozaron con su amistad, el escritor Julio Berncer, tambin alicantino, escriba a raz de la muerte de Mir: Parta las viandas con sosegado reposo, e introducalas en su boca con tan grave comedimiento, que pareca como si les pidiese perdn por tener que comerlas. El placer, descanso de la urbe, gozo de Mir eran el campo, sus pueblecitos, su Mediterrneo. Cmo se alborozaba Sigenza ante los panoramas de su comarca! Sigenza, hombre apartadizo que gusta del paisaje y de humildes caseros, cami 85 Julio A. Capilla Bellot naba por tierra levantina. As comienza su libro Del vivir, fruto de dos peregrinacio nes por tierras de Alicante, camino de Parcent, en los estos de 1902 a 1903. Sigenza es el alter ego en que se transfigura el lrico del paisaje que hay en Mir, la faceta ms grata del escritor, lo que revela el alma del poeta. No ve el paisaje en funcin de pintor, sino de creador y vivificador de cuantos ele mentos lo integran. Transfiere al paisaje su emocin y el paisaje siente y vive y habla por l. Sigenza da categora de personaje, de ser animado, a lo que en otros escri tores considerados como paisajistas es fondo escenogrfico, decoracin, cuadro o vitela. Sigenza infunde alma al paisaje. Poemas, cantos de la Naturaleza hecha carne por el soplo emotivo del poeta, son sus libros Del vivir, Libro de Sigenza, Aos y leguas. No digamos de sentido pantesta, que es concepto intelectual ajeno al sentimiento desnudo e ingenuo sublime ingenuidad con que Sigenza se despo sa con la Naturaleza. Nunca olvidaremos la visita que le hicimos en 1927, durante su veraneo en Polop, donde tena alquilada una casa de campo. Haba vuelto Sigenza a su comarca despus de ms de veinte aos sin ver, sin tocar, sin aspirar su paisaje. Desde que escribiera Del vivir que no haba vuelto por estas tierras de La Marina y del Guadalest, de Sierra Aitana y del barranco del Mascarat. Queramos contemplar a Sigenza en su comarca, y en una tarde estival nos desplazamos de la industriosa ciudad de Elda cuatro o cinco amigos de los que componamos la Redaccin del semanario !de/la que por aquel entonces publicbamos en esta localidad y en el que tuvimos el orgullo de publicar cuartillas debidas a la bondad innata de Mir. Nos acogi cor dialmente, en franca camaradera; nosotros con nuestra insignificancia literaria, l con su fama reverdecida por el xito de El obispo leproso. Nos obsequi con goller as de la comarca, frutas y pastas. Recorrimos, charlando, los alrededores de Polop, cuyo cementerio es el del galardonado trabajo Huerto de cruces. Del humo dormido viene a nuestra imaginacin su figura, su voz y sus palabras en aquella tarde de jocundidad plena. Como en la charla llegsemos a referirnos a nuestras respectivas y habituales ocupaciones exclam: Felices ustedes que escriben y, adems, saben hacer otra cosa. Yo no sirvo ms que para escribir. Y se crea intil en la vida, tal era su humildad, quien haba creado tanta belleza, el autor de Figuras de la Pasin, de El obispo leproso, de Aos y leguas, por no repe tir todo el rosario de sus libros. 86 Escritos de Jos Copilla sobre Azorn y Mir PASIN Y GLORIA Xenius, el de La ben plantada, desde su mirador de La Veu de Catalua, en el Glosan, proclama el gran valor de Gabriel Mir, cuando solamente ha publicado Del Vivir y La novela de mi amigo. Y lart de lescriptor alacant es aix; una plenitud. Desde sus primeras obras es estimado por la crtica el arte literario de Gabriel Mir. Eugenio dOrs anunciaba la aparicin de un gran escritor en Espaa. Sin embargo, de los quinientos ejemplares a que ascenda la edicin primera del libro Del vivir tan slo se vendieron cuarenta. Y es que le toc a Mir vivir unos aos de poca elevacin espiritual en la sociedad espaola. Escepticismo, caciquismo y bajo utilitarismo. He aqu la denun cia de Jos Ortega y Gasset, calificado espectador de la poca: La Espaa de 1916. En esta fecha en que escribo spanlo los investigadores del ao 2000 la palabra ms desprestigiada de cuantas suenan en la pennsula es la palabra intelectual. Conviene que sepan estas cosas esos futuros crticos e historiadores, para que estimen en lo que vale la obra de hombres como Azorn. (Azorn Primores de lo vulgar. El Espectador. Tomo II) Tal era el medio en que produca Mir sus primeras obras. Consideremos el sacrificio con que Mir salva la pureza de su arte. Tiene la res ponsabilidad de un hogar, calor y cario de su alma, y la pluma urea como lo es la suya no da para vivir. Hay que hacer oposiciones a las salidas de la carrera de abo gado, desempear cargos burocrticos en Ayuntamientos y Diputaciones, hacer tra ducciones. Y de Alicante se traslada a Barcelona y, luego, a Madrid. Y hasta aqu, Seor, fina su vida sin poder escapar de su jaula burocrtica. Y qu mecenazgos le deparas, Seor, al amado Gabriel Mir. Entre mis notas y recuerdos de Mir, con servo copia de cartas suyas escritas a un ntimo amigo, persona culta, educadsima, poeta que arrincon la lira para dedicarse a negocios en tierras americanas, donde estuvo algunos aos. No resistiremos la tentacin de transcribir de una de ella, fecha da en enero de 1910, lo que sigue: Querido XXX : La noticia de que te alejabas de Buenos Aires contuvo mi pluma, ya apercibida para contestar a tus cartas tan desea das. He padecido muchas calamidades, y la ltima ha sido mi cesanta del cargo de cronista. La prensa ha protestado, yo pens en emigrar; y al cabo, el Director General de Obras Pblicas, que resulta lector de mis trabajos, me ha concedido un destino de no s qu del Puerto, con veintids duros mensuales. Pero esta pensin vacila al un sono de nuestra pobre poltica. La plaza de cronista, con sueldo decente, como tienen todos los cronistas, era a mi parecer lo que mejor se compadeca con mis aficiones. Pero mis protectores, mis mecenas me creen intil, y me echan. Oh, si yo no tuviera XXX es Enrique Puigcerver Foglieti 87 Julio A. Capilla Bellot la dulcsima responsabilidad de padre! Acaso le pidiese un hueco en alguna de esas empresas que ministras. Sigo trabajando dificultosamente. En nueve das he tradu cido una novela, un tapiz al revs tan desdichado, que no quisiera que apareciese mi firma. Pronto comenzar otra; en abril enviar a la misma casa mi libro Las cere zas del Cementerio. Adems, debo escribir en este mes un cuento para el Semanal y otro para Los Contemporneos. En esas soledades que segn me dicen gozas, el tiempo se ensancha y engrandece; puedes escuchar tu espritu, y trazar un libro mara villoso. Pero no todo sea para tu deleite; sacrifcate y dedcame algunas lneas. Las espera tu invariable compaero que te abraza fraternalmente, Gabriel. En el primer concurso de novelas de El Cuento Semanal, publicacin fundada en 1907, en la que alternan las firmas de los ya consagrados Joaqun Dicenta, Benavente, Pardo Bazn, etc, con las de los nuevos Francs, Ramrez ngel, Rpide, etc. logra Mir su primer galardn por su novela Nmada. La alegra del triunfo la anubla el dolor de la orfandad. Con palabras saturadas de ternura nos cuenta que: el mismo da que se publicaba Nmada, el 6 de marzo de 1908, mi padre expira ba. En su agona serena, dulce, luminosa, de elegido y de sabio sencillo, acongojo se por m, porque me enlutaban mis primeros pasos artsticos. Su mano se fue enfrian do sobre mi frente Mi hermano y mi madre le pusieron en el costado del corazn el primer ejemplar que tuvimos de Nmada. As qued hecha desde entonces la pobre ofrenda, ungida de dolor y de orfandad. En 1916 se publica en Barcelona el primer tomo de Figuras de la Pasin del Seor cuyo xito trasciende al extranjero. La crtica de allende las fronteras fija su atencin en esta obra, la que es estimada como la obra maestra de Gabriel Mir. Es la que le hacer exclamar a Unamuno: Lstima que todo esto est en prosa. Esta creacin literaria, sin otras pretensiones que las puramente artsticas, motiva discusiones apa sionadas que le enturbian el triunfo. El diario ABC, en su nmero del 25 de marzo de 1925, publica el trabajo Huerto de cruces por el que le ha sido otorgado a Mir el Premio Mariano de Cavia 1924. Su hija Clemencia, celosa albacea del tesoro literario de su padre, fue quien selec cion el escrito que el mismo Mir llev al mencionado diario. Con las cinco mil pese tas del premio pudo cubrir anticipos de editores. Procedente del campo de las letras, un editor de fina percepcin, que con cultura y dignidad realz la actividad editorial, don Jos Ruiz Castillo, gran vidente entre los editores juicio de Gimnez Caballero emprende en 1926 la publicacin de las obras completas de Gabriel Mir. Comienza el ao 1927 con la aparicin de La Gaceta Literaria que funda y din 88 Escritos de Jos Capilla sobre Azorn y Mir ge un joven inquieto, dinmico, cargado de cultura, escritor de mltiples facetas, Ernesto Gimnez Caballero, que rene en una publicacin quincenal a un grupo de jvenes poetas, crticos y ensayistas, que podemos denominar la generacin de La Gaceta Literaria. Estos jvenes escritores pregonan el valor de la obra mironiana. A los Pedro Salinas, Juan Chabs, Juan Guerrero, Benjamn Jams, Juan Aparicio y otros, hemos de reconocerles que extendieron el fervor por la obra de Gabriel Mir. Tambin el xito de El obispo leproso tuvo sus espinas. La crtica de Ortega y Gasset en un folletn de El Sol, no obstante los mritos relevantes que aprecia en la prosa mironiana, fue dura con el novelista. Al da siguiente de publicada, Mir le envi un ejemplar de El obispo leproso con esta dedicatoria: A don Jos Ortega y Gasset, su cicatrizado amigo, Gabriel Mir. En Los Lunes de El Imparcial, Astrana Marn le acibar el xito. Y es curioso que lo que Astrana Marn censura, el estilo de prosa de Mir, con magnificiencia lo elogia Ortega y Gasset. La crtica es as. Otros hubo, como Ricardo Baeza y Gmez de Boquera, que reiteradamente concedieron a la obra de Mir valiosos elogios. Hasta la Academia de la Lengua, como aquellos mecenas de antao, de veintids duros le echa por intil, es decir le deniega el silln. Pero qu importa!, siempre ser una ejecutoria sin par, de acadmico, la propuesta firmada por Palacio Valds, Ricardo Len y Azorn. Vspera del da de la Ascensin fue su trnsito. Bajo la lacrimosa lluvia primave ral, familia, amigos y devotos lectores acompaaron al cadver de Gabriel Mir al cementerio de la Almudena. Y su recuerdo se hace perenne con mltiples y sucesivas ediciones de sus obras, traducciones diversas, estudios y comentarios continuos; el bronce y la piedra fijan su efigie placidez, bondad, ensoacin en jardines y glorietas; su nombre da eufona y espiritualidad al nomenclator urbano. Es la gloria, Seor, es la gloria! Y sobre el laurel de su tumba,e1 verso de Rubn Daro, sntesis y compendio de la biografa de Gabriel Mir: Melific toda acritud el arte. 89 Julio A. Capilla Bellot PANORMICA DE POLOP DE LA MARINA (FOTOGRAFA JULIO A. CAPILLA) TODO EL CASERO SE ARREBATA POR UN OTERO... (DEL LIBRO AOS Y LEGUAS - GABRIEL MIR) POLOP DE LA MARINA (FOTOGRAFA JULIO A. CAPILLA) ..ARRIBA, LA PARROQUIA, DE HASTIALES LISOS, Y EN MEDIO, EL CAMPANARIO. (DEL LIBRO AOS Y LEGUAS - GABRIEL MIR) 90 Escritos de Jos Capilla sobre Azorn y Mir DEL EPISTOLARIO JOS CAPILLA - AZORN Sr. D. Jos Capilla Mi distinguido amigo: le mando, con mucho gusto, la cuartilla pedida 1 . Y siento viv simamente no poder adelantar mi viaje para asistir al estreno. Gracias de todo corazn por sus mltiples bondades. A usted y a todos esos buenos amigos, un efusivo saludo. Le reitera su afecto Azorn Madrid, 21 junio 1927 Querido amigo Capilla: haca tiempo que no vea la vieta de ldella 2 ; el horado negro del tnel; los paredones del castillo; la torre y la palmera. Siempre que se posan mis ojos en ese dibujo, hago (rela un viaje imaginario; rememoro los viajes de nio, cuan do iba de Monvar a Petrel. Elda, con su ambiente especial; ambiente de inquietud y de poltica; una matiz pronunciado de gran ciudad; costumbres de gran ciudad, que me atra an siendo adolescente. Se entraba en las fescas huertas; se atravesaba el Vinalop, y lue go por el pueblo, las callejitas silenciosas y blancas. Durante un instante, haba respirado un atmsfera espiritual que no era la de siempre. Mas tarde, en el recuerdo, Rico Amat, Sempere y Guarinos, Castelar; el ambiente de inquietud y de poltica, se justificaba. Sobre el casero con su castillo, la preocupacin constante de otra cosa distinta de la vida agr cola: la iniciativa industrial, con todos sus azares, con todas sus innovaciones, que se con solidaba como una consecuencia de la inquietud intelectual antigua. Bajo el ttulo Unas palabras sobre Brandy, mucho bandy el escrito se public el 25 de junio de 1927 en el n. 72 del semanario del/a. 2 Dibujo efectuado por Oscar Porta para cabecera del semanario eldense Idella (1926-1930). 91 Julio A. Capilla Bellot Ahora en este momento, veo el valle todo; la Pea del Cid y el conjunto de los blan cos muros dominados por la erguida palernera. Una palmera, que existir o habr deja do de existir; pero que es idealmente el smbolo sobre el poblado, mecindose al viento de las agitaciones de la industria y del intelecto. Cordialmente suyo Azorn Madrid, 18 enero 1930 Querido Capilla: admirable ese nmero de Idella; 3 algunos detalles me han sorpren dido. Quin dice que fuera de la capital de Espaa no hay curiosidad intelectual y pri mor para hacer las cosas del espritu Ese nmero de Idella es una contestacin triunfan te a la pregunta. Agradecidsimo a todos ustedes, y un abrazo cordial de su amigo Azorn Madrid, 3 febrero 1930 Los dos tomos de Ramn no han salido todava. Est en prensa el Azorn de Werner Mulertt, el hispanista alemn, que va a publicar mi editor Ruiz Castillo. Querido amigo Capilla: conversaremos todo cuanto usted quiera; no s todava qu da de la prxima semana emprender el viaje. En Monvar no hay de Angelita, mas que los dos necesarios libretos para apunte y traspunte; puede ver a D. Martn Perea, 4 que es persona extremadamente amable, ensele esta carta, y con toda seguridad l le facilita r la tarea; acaso fuera conveniente que usted persenciara un ensayo. Creo que eso sera lo ms prctico. Con recuerdos a Maximiliano y dems amigos, le saluda con todo afecto Azorn Madrid, 3 mayo 1930 3 Se refiere Azorn al suplemento literario del n. 2 189 del semanario !del/a, dedicado ntegramente al maes tro, publicado el 1 de febrero de 1930. 4 El da 10 de mayo de 1930 se estren en el Teatro Principal de Monvar la obra de Azorn Angelito, inter pretada por un grupo de aficionados bajo la direccin artstica de Martn Perea Martnez. 92 Escritos de Jos Capilla sobre Azorn y Mir Querido amigo Capilla: muchas gracias por su amable telegrama. La aventura elec toral ha sido un advertimiento provechoso en alto grado; mi vida poltica en Alicante tan breve ha terminado definitiva y totalmente. No quise que si algn da se me reprochaba que no haba acudido al llamamiento de mis conterrneos, tuvieran razn los que formu laran el reproche; pero la prueba est hecha, y a otra cosa. No contest a ninguna de sus dos ltimas cartas, porque lo que tena que decirle no era grato para un compaero; ahora ya creo que puedo ser sincero. Su ensayo acerca de Mir es excelente; pero no se puede colocar al lado de una joya de pursimo oro la prosa de Mir otra de simple oropel 5 . La sola equiparacin, o sencillamente, empareja miento, es una impiedad, y no necesito puntualizar ms; usted me entiende. Siempre sinceramente querindole, Azorn Madrid, 2 julio 1931 Querido amigo Capilla: exacto. Soy amigo de Lerroux desde 1897; es decir, desde hace treinta y cinco aos, como quien no dice nada. Y ahora lo soy tambin poltico. Cordial saludo Azorn S. f. 1932 Mi buen amigo Capilla: por diversas circunstancias no he contestado a sus bondado sas cartas; usted sabr perdonarme. Los libros de que me habla, unos son imaginarios, y otros estn agotados. No poseo ejemplares de ninguno; ahora los editores dan al autor poqusimos ejemplares. Todos esos libros, los no imaginarios, son recopilaciones de art culos publicados en Argentina. Valencia si es enteramente indito, pero todava no se dis pone de papel para su publicacin. Tom yo nota de sus deseos a fin de usted fuera de las pocas personas que lo recibieran. Supongo que no tardar ya mucho su salida. Llevo una vida apartada de todo trfago; ni veo a nadie, ni asisto a ninguna tertulia o reunin de compaeros. Y no pienso salir por nada de este retraimiento. Ya no tengo edad de devaneos. Cordialmente le saludo Jos Martnez Ruiz Madrid, 9 junio 1941 5 La impiedad cometida por Jos Capilla en su ensayo El paisaje alicantino en la obra de Gabriel Mir, consisti en citar en dicho trabajo a Blasco Ibez simple oropel segn criterio de Azorn. 93 Julio A. Copilla Bellot Querido Azorn: Con mi ferviente deseo de que se encuentre V. bien de salud, comien zo estas letras. Hace ya bastantes das que voy detrs de escribirle para darle las gracias por el envo de su libro Madrid y por la cariosa dedicatoria con que me honra. Me caus verdadera sorpresa recibir Madrid, ya que esperaba Valencia, como me tena anunciado. Ya supondr, pues tanto conoce el placer del libro nuevo, con que fruicin habr le do ambos, Madrid y Valencia, ste adquirido en Alicante. Por ser nuevos, de usted y por el aglutinante biogrfico que tienen estos recuerdos de la Valencia y el Madrid literarios de fines del XIX. Y qu lejos ya, en tiempo como en sentires! Al fin, voy encontrando sus escritos en los peridicos de hoy. En los nmeros domin gueros de Arriba leo sus Cartas a Rusia y, recientemente, ayer, tuve otro hallazgo, en una revista nueva, Santo y Sea, que adquir por su trabajo, Cuento a medio hacer y en la que he ledo su prxima vuelta a la produccin teatral. Voy rehaciendo mi vida con la ayuda de Dios y de los hombres de buena voluntad. Trabajo en las oficinas de una importante fbrica de Elda, a donde voy todos los das por la maana y regreso por la noche, pues a mi esposa e hijos los tengo aqu, en Monvar. Trabajo y leo cuanto pue do. . . Con admiracin, respeto y cario, le abraza Jos Capilla Monvar, 13 de octubre de 1941 Querido Azorn: Gracias por haberme complacido con el envo de la fotografa suya que le tena supli cada. Protegida por marco y cristal, colocada junto a sus libros, me acompaa en mis ratos de fiesta, que son de lectura y meditacin, aislado no s si en cuarto de estudiante o en celda de recluso voluntario. Me enorgullece su dedicatoria, y me basta con que me considere conocedor minu cioso de sus libros, cuando tantos pretenciosos crticos de su obra, por conocerla a medias y sin continuidad, no salen del tpico y de la superficialidad gacetillero. He tenido el placer de leer y releer su libro El escritor. Lo adquir la vspera de Pascua de Resurreccin y l llen mis ocios de estos das moneros de Levante. Con todo entusias mo le felicito por la ininterrumpida superacin de sus libros. En tan pocas pginas sabe a poco hay todo un proceso psicolgico llevado con maestra de psiclogo moderno; atrevidos, por lo verdaderos, preceptos literarios, y muy oportunas, aunque veladas por 94 Escritos de Jos Capilla sobre Azorn y Mir la ficcin novelesca, notas autobiogrficas que pocos lectores sabrn ver y comprender. Y todo con el goce del vocablo y de la insuperable sencillez del periodo. (Estoy deseando ver lo que dicen los crticos y los comentaristas literarios. Aunque presiento que dirn poco). Y yo perdneme esta presuncin veo algo ms en su libro. Algo que solamente los prximos a V., a su espritu, llegados a su alma por la constante lectura de sus escri tos de todos sus escritos sabrn comprender: la defensa de una vida pulcra, consagra da con fervor no igualado en las letras contemporneas a amar a Espaa, que es apre hender sus esencias. He ah la ms noble ejecutoria. Pero, sin amor no hay comprensin. Y hay sequa en los corazones, querido Azorn, y todo parece hallarse supeditado a la fuerza fsica; razn, ideal, fines humanos. Ya espero su nuevo libro Cavilar y contar, que quiero adquirir estos das en memoria de Cervantes, para nosotros el querido Miguel que tanto supo de dolores humanos, los que mitig estribando en el ideal de la bel leza literaria. Imitmosle. Con todo respeto, admiracin y cario, le abraza, querido Azorn Jos Capilla Monvar, 23 de abril de 1942 Querido Azorn: Me ha producido gratsima sorpresa con su libro En torno a Jos Hernndez, de cuya publicacin no tena referencia alguna. Veo en el colofn que fu impreso en septiembre de 1939, lo que me hace suponer que fuera gestado, y tal vez escrito, en Pars. Es un deli cado tributo literario a la opulenta Repblica Argentina en el creador de Martn Fierro, poema elemental, sencillo y humano. (La Argentina, la pampa, el gaucho. Cmo se ensan chan los pulmones con estas imgenes). Excusado el decirle el placer experimentado con la lectura de este volumen, cuyo envo y dedicatoria le agradezco de todo corazn. Tambin poseo su Cavilar y contar, con cuya adquisicin celebr la fiesta del libro en el aniversario del trnsito de Cervantes. Acertadsima la dedicatoria a su sobrino Julio Rajal, al que me permito felicitar por su funcin de secretario de usted, an cuando no ten go el honor de conocerle. Y, ahora qu prepara o qu tiene dado a las prensas, querido Azorn Ya sabe V. con qu asiduidad e inters sigo su vida literaria. Tngame al corriente, se lo ruego. Que no amaine esa fecundidad asombrosa que en su sesentena Dios le ha concedido, es cuan to deseo. Julio A. Capilla Bellot Nada me ha dicho V. del guin que le mand sobre el libro que tengo en prepara cin, lo que lleva a suponer que no haya sido de su agrado. No es definitivo este guin. He de perfilarlo, modificar algunos captulos. He de rehacerlo varias veces. Hay tiempo. Con todo respeto, admiracin y afecto, le abraza Jos Capilla Monvar, 17 de mayo de 1942 Querido amigo Capilla: el libro Toms Rueda no es sino una reedicin del Licenciado Vidriera, con modificaciones. No ha llegado todava a Europa; se ha impreso en la Argentina; no s si me enviarn ejemplares. En caso afirmativo le enviar uno. La nueva edicin de las Confesiones est compuesta desde hace ms de tres aos; revis las prue bas en Pars. Pero por falta de papel no ha sido posible tirar todava el libro. Cruz Rueda est ya en Madrid: Zurbano, 57. Es director del Instituto Lope de Vega. Del ndice de su libro, qu he de decirle Lo tengo por cosa admirable. Circunstanciado y fino, como todo lo que usted hace. Cordialmente le saludo Azorn Madrid, 15 septiembre 1942 Querido Azorn: Gran satisfaccin me causaron sus letras tan cariosas del 15 del actual, bajo dimi nuto sobre. Ya estoy dispuesto a comenzar mi Azorn, cuyo ndice, ampliado y mejorado, le mando con estas letras. Estoy indeciso en el ttulo: Azorn, paso a paso o Ruta y obra de Azorn Siento el nerviosismo del comienzo de todo trabajo. Si Dios me da paz y nimos, escribir el libro, lo guardar y cuando l quiera ser publicado. Desde luego, cuando lo termine, le mandar a V. una copia del mismo. Yo bien s cun modestas y limitadas son mis facultades; pero nadie me gana en amor y entusiasmo por su obra. No ser una obra docta, pero s un comentario hecho con sim pata de lector fervoroso. Si no le violenta, dme las notas que le suplico en relacin que tambin le envo con la presente. Si alguna indagatoria palabra leguleya le parece impertinente, dla por no solicitada. Me interesara conocer algn estudio que se hubiere hecho de su obra en 96 Escritos de Jos Capilla sobre Azorn y Mir Francia o en Amrica. Poseo el de Jean Cassou solamente. Leo sus trabajos en el reapa recido Santo y Sea, que ya no es el de los primeros nmeros. Se ha hecho pequeo de cuerpoy alma. Tambin los que publica en Legiones y falanges. No se ha escrito en Italia nada sobre su obra literaria Le doy las gracias por la noticia que me da de ngel Cruz Rueda, con el que reanu d mi comunicacin hace unos meses. Es todo bondad. Cmo le admira y quiere a usted! Tendr V., en su proximidad, un buen admirador y, lo que es rara avis siempre y aho ra, un buen corazn. Y como se hace larga esta carta, corto. Hasta que V. quiera, un fuerte abrazo, con admiracin y cario. Jos Capilla Monvar, 29 de septiembre Querido Azorn: Por la prensa s de V, de su labor literaria. Celebro su fecundidad y el acierto que la inspira. Me duele que azorinistas de la ltima hornada, que hoy mueven su obra frvola y superficialmente, logren atenciones negadas a quienes seguimos con todo inters y amor sus escritos desde hace treinta aos. El 29 de septiembre del finado ao, le escrib. Sin duda, fu imprudente al pedirle algunas noticias para mi libro en preparacin, Ruta y obra de Azorn. Debi ser importuna mi carta cuando no he merecido contestacin. Si es as, que me sea perdonada la improcedencia en gracia al fervor que dictara mis letras. Pero este dolor, hijo de delicado sentir, no ciega la comprensin ni amaina el afecto y admiracin de este azorinista, innominado, s, pero fervoroso cual ninguno. Jos Capilla Monvar, 15 de enero de 1943 Querido amigo Capilla: una de las cosas peores que puede ocurrirle a un hombre inteligente y usted lo [es] consiste en juzgar por las apariencias. No se hace usted car go ni de mi situacin moral, ni de la material. Y no digo ms. Cordialmente le saludo Azorn Madrid, 17 enero 1943 Julio A. Capilla Bellot Querido Azorn: Porque no quiero que me crea V. disgustado, me permito dirigirle estas letras. Verdaderamente, estoy muy lejos de ser lo inteligente que V. me cree. Pero me hago cargo de su situacin moral y material. Y esto me duele ms, mucho ms. Otra cosa mere cen sus cincuenta aos de intensa labor por Espaa. S que los seores Cruz Rueda y Ruiz Castillo preparan la edicin de un volumen con obras suyas escogidas. Ser un acierto. Tambin, que tiene V. entre manos una novela. Espero con ansiedad su publicacin. Hoy he ledo en El Espaol, buen semanario, un trabajo suyo sobre Jovellanos. Con todo afecto Jos Capilla Monvar, 1 de febrero de 1943 Querido amigo Capilla: D. Jos Prez Bernabeu public antao una breve monogra fa de Monvar. Tena yo un ejemplar y se me perdi No sera posible encontrar otro La casa en que vivi Prez Bernabeu en la calle Mayor, de quin es al presente No deje de enviarme su direccin si se traslada usted a Elda. Cordial saludo Azorn Madrid, 21 mayo 1943 Querido Azorn: Efectivamente, al l por el ao 1 91 2 1 91 3 public don Jos Prez Bernabeu un folle to titulado, si no recuerdo mal, Apuntes de Geografa Mdica de la ciudad de Monvar. Ya habr V. visto en El espaol cmo el vidrioso don Luis Ruiz Contreras descubridor de los ingenios del 98, habla de lo que se le ha olvidado al tremendo don Po. En el lti mo nmero de la revista mensual Arte y Letras, sucesora de Santo y Sea, tambin se ocu pan de las Memorias del seor Baroja. Es curioso ver cmo, a pesar de mucha gente des cubridora de mediterrneos literarios, sigue el inters y atencin a cuanto dicen y hacen Vds., los terribles hombres del 98 (Por qu no dice V. algo de estas Memorias de Baroja) El prximo jueves, 27 del actual, se cumple otro aniversario de la muerte de aquel nio grande que nos dej, con el eco de su voz amable y el ademn de su mano tendida a la amistad pura, Aos y Leguas. Desde su trnsito, cuntos aos hemos vivido y cun 98 Escritos de Jos Capilla sobre Azonn y Mir tas leguas hemos recorrido en la ruta de nuestro espritu. Pero no tantos que se haya des vanecido la imagen fsica, moral y literaria de Gabriel Mir. (Para m tiene otro recuerdo, adems, esta fecha, pues en tal da, ha dos aos transpuse el umbral de la prisin donde quedaron dos aos largos y muertos de mi vida, por mis nefandos delitos de pensar en liberal y sentir en humano). Espero con ansiedad la aparicin de los libros que tiene V. en el telar, si bien quisie ra que no trabajase V. tanto y que se tomase un reposo por estos sus campos natales. Y nada ms. Veo que he escrito ms de la cuenta. Perdneme. Yo no s escribir cor to a las personas que estimo. Para m el laconismo es Esparta. Me quedo con Atenas. Con admiracin, respeto y cario, reciba un abrazo de Jos Capilla Monvar, 24 de mayo de 1943 Querido Azorn: Permtame que le d las gracias por su diminuta tarjetita con sus preciadas letras aut grafas. (De paso: ya ha sido confirmado en su silln de la Academia Es de celebrar, aunque no creo tenga importancia la recuperacin del silln. Es la Academia la que sale ganando con que V. lo ocupe). Si yo estuviera en Madrid, me satisfacera ofrecerle mis pobres servicios para relevarle de los trabajos ajenos a la pura creacin literaria, como transcripcin de originales, copias, organizacin, etc.; mas no quiere el destino que yo salga de aqu, donde he de ocuparme de trabajos de administracin mercantil, que, aunque dignos como todo tra bajo, no son los de mi natural inclinacin. Leo en los diarios comentarios elogiosos del retrato que le ha hecho el pintor Vzquez Diaz. Habra posibilidad de lograr una fotografa Por aqu nadie se ocupa de letras ni de arte. La fiebre de la especulacin y del estra perlo todo el mundo quiere hacerse rico todo lo invade. Y es segismundear ocuparse de cosas del espritu, por lo que hay que tener una fe y un tesn inauditos. Con fervorosa admiracin y sincero afecto, le abraza Jos Capilla Monvar, 22 de junio de 1943 Julio A. Capilla Bellot Querido amigo Capil la: un da de estos le enviar la fotografa del retrato. Necesito saber como se llama la calle de entrada en Petrel, conforme se va desde Elda. Si tiene nombre moderno, deseo tambin conocer el anterior. Cunto tendr, aproximadamente, el val le de Elda de largo y ancho Se podra saber como se l lama la rambla que se abre a uno de los costados de Petrel Supongo que en este pueblo siguen llamando cantereras a los alfares. No s si estoy trascordado. Cordialmente le saludo Azorn Madrid, 5 julio 1943 Querido Azorn: En nota anexa a la presente, van los datos que le interesan sobre el val le de Elda y Petrel. Contra mi voluntad, he tenido que demorar la contestacin hasta haberlos obteni do con el mayor celo posible. Celebrar que le satisfagan. Si precisa algn otro detalle, no tenga reparo alguno en decrmelo, pues es para m gran placer serle en algo til. No puede V. imaginarse qu alegra me produjo el recibir la fotografa del retrato que le ha hecho el genial Vzquez Daz. Tiene curiosos detalles que revelan el espritu del hombre de letras retratado. La posi cin de los dedos de la mano derecha que prenden el monculo, el diario Le Temps al lado del silln, es decir: exquisitez, sensibilidad, observacin, espritu analtico, obra literaria que casi en su totalidad fue dada a la Prensa, el espritu de la fina Francia, el tiempo, etc. Para m, que soy un Juan Prez en estas cosas de la pintura, como tantos crticos, seor!, es el mejor de los retratos que le han sido hechos. El de Zuloaga es magnfico, s, pero recuerda demasiado el que antao hiciera a Barres. Cordial abrazo de quien le quiere y admira con todo respeto. Jos Capil la Monvar, 12 de julio de 1943 1 00 Escritos de Jos Copilla sobre Azorn y Mir Querido Azorn: En todos los diarios he visto reproducido su artculo Castillo en Castilla, elegido entre los publicados en el pasado mes de septiembre. Para quien, como V., tantos mritos tiene reconocidos, esta distincin nada significa. Sin embargo, bueno es que en todo momento sea apreciado el sentido elevado de toda su obra. Lo dems, todo lo dems, es acciden te y ancdota. Hoy he ledo en ABC su trabajo La lmpara, preciosa leccin de literatura y de bon dad. Frente a la violencia, elevada a norma fraternidad, cordialidad, humanidad. Cun lejos vivimos de estos conceptos. Afortunadamente, todava hay hombres inteligentes, buenos, artistas y comprensivos en los que hallan eco las delicadezas de su arte y de su corazn. Y estos hombres son los que valen en una sociedad y en una poca de confu sin y primitivismo. Con ansia espero la publicacin de sus libros en prensa. Tardan mucho en salir. Ser un gran xito la aparicin del volumen Obras Selectas. Con admiracin y cario, le abraza Jos Capilla Monvar, 19 de octubre de 1943 Querido Azorn: En cuanto me enter de su aparicin, ped su reciente libro, El Enfermo, que he ledo con todo el inters con que sigo sus escritos, por cuanto me ensean como por cuanto me deleitan. Me precio de ser un buen receptor de su sensibilidad, y veo en el libro El Enfermo mucho de su vida interior, tan intensa siempre, pero nunca como ahora. Tomando por escenario a Petrel, le rinde V. un gran homenaje al pueblecito de su madre, doa Luisa, que Dios ha de tener entre sus elegidos. Y V. que tanto honor ha hecho a Monvar con su Superrealismo y, ahora, a Petrel con El Enfermo, cundo le va a conceder su pluma tal honor al gran pueblo de Elda No dudo que lo har V. el da menos pensado. Con toda admiracin y con todo respeto, reciba un afectuoso abrazo de Jos Capilla Monvar, 11 de diciembre de 1943 101 Julio A. Capilla Bellot Querido amigo Capilla: me tiene usted abrumado con su magnfico ensayol . No pue de darse cosa ms fina y delicada, al mismo tiempo que es ejemplar de generosidad. Contino trabajando, alentado por los buenos amigos como usted. Es una necesidad fisio lgica en m el trabajar. He ido reduciendo el campo de mis lecturas y las contraigo todas a lo estrictamente literario; creo que as puedo, con esta concentracin, remediar la des ventaja que los aos acarrean por la falta de fuerzas. nimos no me faltan. Y esto, en todos los rdenes, es lo esencial. He corregido ya las pruebas de La isla sin aurora. Cosa ms rara no la he escrito nun ca; veremos cmo lo toman los lectores. Con un abrazo cordial le reitero mi amistad Azorn Madrid 10 enero 1944, 4 de la madrugada. Querido Azorn: Por fin, sali su esperado Pars, que he ledo paulatinamente, prolongando el pala deo de esta golosina espiritual. No he ledo, hasta ahora, ningn comentario digno, y hay que esperarlo de alguna de las muchas plumas y plumones con que se adorna nuestra Prensa. Confo en que acceda V. a darnos la Preceptiva solicitada por Revista de Occidente. Dnos, con su arte, sus fecundas experiencias, que bien las necesitamos. Ha nacido un verbo: AZORINEAR. Lo he ofrecido a un grupo de asiduos lectores suyos, que tambin escriben, de sa. Espero que lo acojan con cario, que tenga luenga vida y sea, incorporado a la lengua de Castilla, sencillo, pero vivo y constante homenaje a quien, con pasin de artista, tanto la remoza, la siente y la vive. Y reciba, fundidos en un abrazo, la admiracin y cario de Jos Capilla Elda, 8 de agosto de 1945 1 Con el ttulo de Azorn y Monvar, se public en El Espaol, el 8 de enero de 1944, el ensayo de Jos Capilla. 102 Escritos de Jos Capilla sobre Azorn y Mir Querido Azorn: En vsperas de Reyes, que estar terminada, tendr el gusto de mandarle la revista de Moros y Cristianos. Ver en ella algo que le sorprender y espero que le agrade. Este cn sul ha cumplido lo mejor posible, ya lo ver . 2 Por Pascuas, los pequeos suelen felicitar a sus padres con unas estampas orladas. Con la pureza e ingenuidad infantiles, le mando yo ahora una hoja con unos garabatos mos, escritos ante una muestra suya. Dgame, se lo ruego, si vale la pena seguir con estos mis palotes o hara mejor en colgar la pluma. Y tambin, para que vea la vitalidad de este pueblo eldense le mando el Catlogo de la II Exposicin de pintura. Un abrazo tan grande como mi cario y admiracin. Jos Capilla Elda, 25 de diciembre de 1945 Querido amigo Capilla: muchas gracias por todo. La prosa del martillito es como pro sa de martillo, en el sentido de plata de martillo, o sea, plata labrada; o si usted lo pre fiera, maleable, puesto que en maleable, est insisto el martillo. Y qu prosa ser supe rior a la maleable, puesto que el oro lo es tambin, y en alto grado No pude enviarle lo que usted deseaba 3 ; estoy en periodo de recrudecimiento de mis achaques; apenas si puede cumplir con los compromisos ineludibles; veo que usted no se ha molestado, y eso me prueba que es buen amigo. Primorosas las copias de mis antiguas caricaturas; se las agradezco mucho. Con un cordialsimo saludo, y desendole muchas prosperidades en el prximo ao, le reitero mi amistad. Azorn Madrid, 27 diciembre 1945 2 En la revista Fiestas de Moros y Cristianos Elda 1946, se public el ensayo Martillito de Elda por Jos Capilla. 3 Jos Capilla haba solicitado a Azorn unas letras suyas para la revista de Moros y Cristianos de Elda. 103 Julio A. Copilla Bellot Querido Azorn: Que su estado espiritual y fsico sea inmejorable, desole de todo corazn. He tenido el placer de leer sus Memorias inmemoriales y Los clsicos redivivos, y espe ro recibir de un da a otro El Artista y el Estilo, que tengo pedido a Aguilar, y del cual ya conozco por separata el prlogo de ese hombre bondad y modestia que se l lama ngel espritu -Cruz -sacrificio -Rueda -trabajo. No voy a importunarle hablndole de sus libros. Solamente un ruego: que ese captulo La Pea del Cid no quede en ficcin literaria. Escriba ese libro sobre el valle de Elda. El Elda que V. conoci en sus aos mozos, las figu ras de Sempere Guarinos 4 , Juan Rico 5 , el popular Serfico 6 , la infancia de Castelar, el poltico que fu su amigo Jos Maestre y el Elda de hoy, ciudad moderna, industrial y en constante superacin. El libro ser maravilloso. Yo le mandar cuanta informacin precise de Elda que yo he vivido y vivo. Ser para m una gran satisfaccin servirle en estas tareas. Recibir V., en pliego aparte, unos trabajos mos sobre V. y el nunca olvidado Mir, publicados unos, otros inditos. Con el los voy a publicar un libro. No pretendo que V. los lea, sino, tan slo, que confirme su existencia. Quisiera que al frente de ellos fueran unas letras suyas, no para que los revaliden, que, como mos, son pobres literariamente, sino como gracia y galardn que los defienda al ver la luz. He cumplido medio siglo de existencia y voy a cumplir los veinticinco aos de matri monio. Y todo lo vivido, me parece un sueo fugaz. Hay todava en m entusiasmos y espe ranzas, que todava hay sol en las barbas. No le canso ms. Perdneme estas expansiones, tal vez ingenuas. Un gran abrazo que le lleve el cario y la admiracin de Jos Capilla Elda, 29 de enero de 1947 4 Hombre de leyes y escritor. Elda 1754-1830. 5 Abogado, poltico y escritor. Elda 1821 -Madrid, 1870. 6 Ser f co , seudnimo de Francisco Ganga Ager poeta popular (Elda 1812-18711 Escritos de Jos Capilla sobre Azorn y Mir 1 , Jericlo amigo Capilla: muchas gracias por todo; su libro es precioso. Pero siento no podar poner prlogo a estas delicadas pginas. Despus del prlogo a Baroja, me pro met no prologar ms a nadie. Me he negado a poner prlogos a tres o cuatro buenos amigp3. Los cuales, si ahora prologase la obra de usted, se creeran, con razn, desaira dos. Usted comprender esta decisin ma y sabr perdonarme. Le devolver el libro. Cordial saludo Azorn Madrid, 9 febrero 1947 Querido Azorn: Comprendo su propsito y lo respeto; pero quiero que sepa que con prlogo y sin prlogo mi admiracin, mi afecto y mi gratitud siguen constantes y en progresin. No tie ne ya aliciente para m la publicacin de esas pginas que dictara el fervor de mis lectu ras predilectas. Me entero de que se prepara la edicin de sus libros en serie de obras completas. Me precio de conocerlos, sentirlos y estimarlos como nadie. Si para algo puedo servirle en esa empresa, mndeme con toda libertad. Yo quisiera que esa edicin se hiciera con alma y vida, como la tienen sus pginas. Acepte un gran abrazo de Jos Capilla Elda, 28 de febrero de 1947 Querido Capilla: muchas gracias por su carta. He recibido carta del Alcalde de Burgos, en que me pregunta qu se podra hacer en lo de la Pea 7 ; yo no lo s; ignoro en qu forma, con motivo del centenario del Cid, podr entrar en comunicacin Burgos con los alcaldes cidianos de la provincia de Alicante. Con toda cordialidad le saludo Azorn Madrid, 12 julio 1949 7 La montaa Pea del Cid tiene la cumbre ms alta del Valle de Elda, tantas veces evocado por Azorn en sus libros. 105 Julio A. Capilla Bellot Querido Capi lla: Dmaso Alonso est escribiendo un libro sobre Antonio Machado; necesita papeles, libros, documentos sobre el 98. No s yo si algo relacionado con el tema quedar en mi casa de Monvar; usted podra rebuscar la biblioteca. Amancio me dijo que estaba todo harta revuelto. He escrito sobre el caso a Paco Navarro, que puediera enviarle a usted su automvil . No s lo que decidir. Lo que necesita Dmaso Alonso, sobre todo, son nmeros de las revistitas literarias que se publicaron por esa poca; en fin, todo lo que refe rencia a ese movimiento esttico. Cordial saludo Azorn Madrid, 15 febrero 1950 Querido don Jos: Como le promet, ayer estuve en Monvar, adonde fui en el auto de lnea. Me entrevist con don Paco Navarro, a quien ya haba anunciado que ira, y me l le v a la casa de V. en cuya biblioteca, y acompaado de este buen amigo, me pas la tarde dominguera buscando las revistas del 98. Verdaderamente, aquello, en cuanto a revistas y peridicos, est un poco revuelto, si bien persisten las huella del orden y minuciosidad azo rinescos. Encontr algunos nmeros de Revista Nueva muy pocos de Alma Espaola, etc., que don Paco se encarg de enviarle hoy por medio del ordinario de Madrid. Si, una vez los recibe, le interesa algo ms, ya sabe que para m es una satisfaccin muy grata poder servirle. Me acord, al entrar en su biblioteca, de la visita que antao V. hiciera a Clarn, y sen t que mi personalidad literaria fuera tan pequea para husmear en los legajos de revistas y paquetes de peridicos muy doblados recuerdos sedimentados de la vida y obra literarias del Azorn de la primera poca, que llegan hasta los primeros aos del siglo actual. Tengo la conviccin de que estos peridicos, con improntas, comentarios y juicios de su obra de entonces, para V., a la excelsa altura literaria en que se halla, por encima tanto de elogios como de crticas o censuras, no tienen inters alguno. Si V. me lo permitiera, me servira de ellos para completar el estudio de ese periodico tan curioso de su vida literaria. Palabras del poeta Rainer Mara Rilke: Las obras de arte viven en medio de una soledad infinita y por nada son tan poco accesibles como por la crtica; slo el amor alcanza a comprender las y hacerlas suyas, y slo l puede ser justo para con ellas. No soy universitario, ni fillo go, ni crtico; mas vengo siguiendo su obra con todo amor desde 1912 en que cay en mis manos su primer libro. Y, diariamente, gozo en mi afn por comprenderla. Ya el val le de Elda tiene sus almendros en flor. Un gran abrazo de Jos Capilla Elda, 20 de febrero de 1950 Escritos de Jos Capilla sobre Azorn y Mir Querido Capilla: muchas gracias: ayer lleg el paquete de los peridicos; puede usted utilizar cuanto quiera en la librera de Monvar. No s si quedar algn libro que sea til. Siempre querindole Azorn Madrid, 22 febrero 1950 Querido amigo Capilla: muchas gracias, he ledo la revista 8 con sumo gusto. Nada se opone a que la revista refleje la tierra nativa, con sus peculiaridades; eso es lo ms lite rario de todo. Las fotografas son bonitas; despus de tanto tiempo, contemplo con emo cin la Pea del Cid. Cordial saludo Azorn Madrid, 30 abril 1950 Querido Capilla: hace tiempo que no s de usted. Cmo le va, Cmo est el mara villoso y nunca olvidado valle de Elda Ya sabe usted que est bajo la advocacin leja na de un poeta. Abrazo cordial Azorn Madrid, 10 agosto 1954 Querido Azorn: Gracias por sus letras de 10 cte., tan pocas. Le escrib una postal el da de su santo y, por telegrama, le felicit en su cumpleaos. Seguramente, no llegaran a sus manos mis felicititaciones, si tanto tiempo hace que no sabe de este azorinista. Nada de particular en mi vida montona. Trabajo, leo cuanto puedo y, alguna vez, escribo. Desde luego, no hay en mi vida da sin Azorn: en la lectura, en las cuartillas o en la conversacin. Y, siempre, en busca de sus escritos, pues nunca cre en su retirada porque le conozco. Tanto no he credo, que espero leer nuevos libros de V., algunos de los cuales tal vez ya los tenga listos para la imprenta. 8 Dahellos, marzo 1950, revista eldense 107 Julio A. Capilla Bellot El val le de Elda, su valle, hermoso, como V. lo ha creado en sus descripciones. Sigo el curso de los homenajes, pequeos y grandes, que hoy se le tributan. No sabe cunto lo celebro. Por m esta carta sera ms larga; pero temo molestarle. S el horror que tiene a las cartas largas. Con todo cario le abraza quien tanto le admira Jos Capilla Elda, 14 de agosto de 1954 Querido Capilla: muchas gracias por su carta. El olvido de la sobretasa, en el fran queo, me ocasion algunos trastornos. No graves, afortunadamente. Le envo un paque te certificado con el libro de D. Antonio de Hoyos, Yecla en Azorn. Van tambin las ree diciones, en la Austral, de Salvadora de Olbena y de Espaa. Leo mucho, casi todo el da. Voy un rato largo al cine. Prefiero, no es preciso decir lo, el cine norteamericano. Sus actores son prodigiosos. Con toda cordialidad Azorn Madrid, 16 agosto 1954 Muchas gracias, querido Azorn, por sus libros Espaa y Salvadora de Olbena. Ya los tena, como todos los suyos. Ahora, bien, estos ejemplares, de nueva edicin, me tra en su cariosa dedicatoria autgrafa. Tambin, vino con ellos el ensayo Yecla en Azorn, de A. de Hoyos, que no conoca, magnficamente editado. Coincido con V. en la apre ciacin del cine norteamericano. Leo con delectacin sus comentarios sobre el cine, que, en recuadros publica ABC en la seccin correspondiente. Antes de la retirada apareca su firma en las primeras pginas de este diario, y ahora, en la inactividad de su pluma, en las primeras y en las ltimas. Maana, domingo, voy a pasar el da en Monvar. All todava hay silencio y quietud, aunque en riesgo de perderse, que ya no hay seores ni los del campo visten la blusa negra. Y en la Posada Nueva instalaron un bar americano, aun cuando los lunes, das de mercado, todava se ven en los corrales los carros que vienen de los caseros del trmino. Le he escrito demasiado Perdneme. Un gran abrazo Jos Capil la Elda, 8 de agosto de 1954 108 Escritos de Jos C , Magnfica pgina, querido Azorn, La picaza manchega. Maravil la tal lucidez men tal, sensibilidad tan fina y ardor esttico, en su gloriosa ancianidad, con inslita lozana espiritual. Gracias, como lector, y un gran abrazo de quien tanto gozo debe a sus escritos. Jos Capilla Elda, 19 octubre 1957 Perdn, que no he podido resistir el impulso de dirigirle estas letras al leerle hoy en ABC. Querido Capil la: muchas gracias por las postales, son preciosas Gran ciudad Elda! Estn imprimiendo Las Conversaciones (editorial Taurus) y Posdata (Biblioteca Nueva) librito hermano de Agenda. Abrazo cordial Azorn Madrid, 5 septiembre 1959 Querido Capil la: muchas gracias; le recuerdo siempre. Supongo que recibira usted, a primeros de ao, el retrato que le envi. Las Conversaciones estn a punto de salir. Le mandar un ejemplar. Abrazo cordial Azorn Madrid, 9 junio 1960 Querido don Jos, mi admirable Azorn: Le supongo con buena salud, como siempre le deseo, y tengo el gusto de comuni carle que dentro de unos das me voy a Barcelona, con mi esposa, a pasar el otoo y el invierno con mis hijos. Por tanto, durante una larga temporada estaremos ausentes de Elda. Si entre tanto apareciese su tan esperado libro Las conversaciones o tuviese algo que comunicarme, ya sabe donde me tiene, siempre a su disposicin y con ansia de leerle. Estos das he ledo en ABC su recuadro La prspera Elda. Bien merece la gratitud de los eldenses. Un abrazo de Jos Capil la Elda, 5 septiembre 1961 Julio A. Capilla Bello! Sra. D. Juliana Bellot viuda de Capilla Distinguida amiga Que tremenda impresin al recibir el recordatorio! Mi psame a usted, a todos. Qu carioso amigo! Qu discreto y qu fiel! Le escrib a raiz de publi car su bello ensayo en Azor. 9 Cordialsimamente Azorn Madrid, 16 marzo 1963 9 Azorn, de su Levante a Castilla por Jos Capilla Beltrn, Azor n. 7 -Revista literaria- Mayo -junio 1962 - Barcelona. Jos Capilla muri en Barcelona el 7 de marzo de 1963. 1 10 Escritos de Jos Capilla sobre Azorn y Mir UNA DE LAS PRIMERAS CARTAS AUTGRAFAS ENVIADAS POR AZORN A JOS CAPILLA , , c7 , a , 414- - 4 7 1 : /47 4 iy.1 7 A4RL. Transcripcin: Sr. D. Jos Capilla. Mi distinguido paisano! : nada de personalismos! Agradezco mucho el propsito; pero.... Busquen ustedes otro ttulo, lo habr referente a nues tra tierra. Eso sera lo mas acertado (a mi parecer). Que tengan por suya esta carta los dems firmantes de la suya. Sinceramente Azorn Madrid, 31 enero 1917 Carta de Azorn dirigida a los que a travs del sema nario Los Pueblos, iniciaron el homenaje al escritor dedicndole una calle de Monvar y logrando que el Ayuntamiento le nombrase Hijo Predilecto en 1 91 7. 1 Jos Capilla era setabense. Julio A. Capilla Bellot PENLTIMA DE LAS CARTAS AUTGRAFAS DIRIGIDAS POR AZORN A JOS CAPILLA /9s 9 (vA A,.1 1,4 c.*) . , Transcripcin: Madrid, 5 septiembre 1959 Querido Capilla: muchas gracias; las postales son preciosas Gran ciudad, Elda! Estn imprimindose las Conversaciones (editorial Taurus) y Posdata (Biblioteca Nueva) librito hermano de Agenda. Abrazo cordial Azorn Casi, con esta carta, se cierra el parntesis de una relacin epistolar iniciada haca ms de 40 aos. 1 1 2 Escritos de Jos Capillo sobre Azorn y Mir FRAGMENTOS DEL EPISTOLARIO DE DOS AZORINISTAS: JOS CAPILLA -NGEL CRUZ RUEDA (FOTO DE CARMEN CRUZ HESLES-ARCHIVO J. CAPILLA) NGEL CRUZ RUEDA EN El VERANO DE 1935 EN SU ESTUDIO DE LA QUINTERA MANCHEGA LA FLORIDA. 1 13 Julio A. Capilla Bellot Mi buen amigo don ngel. .. Me dice V. en su grata que ha escrito algunos artculos sobre los ltimos libros de Azorn y tendra sumo gusto en leerlos, en el supuesto de que poseyera V. duplicados del peridico o revista en que aparecieron. Yo estoy encantado de Valencia y Madrid. Es sor prendente la fina y delicada sensibilidad de este hombre. No creo que haya en las letras espaolas un caso semejante. Por el momento en que est escrito, resulta muy interesante El Escritor. Es una defensa digna, noble y bella, de toda una vida consagrada a conocer y a sentir a Espaa. Cavilar y contar, editado en Barcelona, es una recopilacin de cuen tos, sobre el azar, lo imprevisto y los misterios del alma humana. En torno a Jos Hernndez por el que V. me pregunta, ha sido editado en Buenos Aires, en 1939. Es un tomito muy bien editado, de algo ms de un centenar de pginas, en que vivifica la figu ra del poeta gaucho Martn Fierro. Y, a penas dados estos libros, ya se anuncian dos ms: uno ya publicado por la Coleccin Austral de Esposa Calpe, Toms Rueda, y el otro, cuyo editor ignoro, Sintiendo a Espaa, ttulo en extremo prometedor. Como V. ve, Azorn, al borde de la setentena, escribe ms que nunca, y, tambin se le combate ms que nunca. Debe sufrir mucho ante tanta incomprensin. Yo no escribo nada. Leo cuanto puedo. Mi estado de nimo no es propicio a esta tarea. Sin entusiasmo, sin ilusin no se puede hacer nada. Adems no creo que hoy me fuera fcil publicar nada. As es que me limito a preparar mi Azorn, paso a paso y a leer y releer. Jos Capilla Monvar, 14 de julio de 1942 Querido amigo don Jos Capilla Beltrn: Menos En torno a Jos Hernndez, conozco todo lo dems de lo publicado. Es admi rable y triste que trabaje tan bien y tanto. S debe sufrir ante tanta incomprensin; pero no olvide V. que ese ambiente le ha envuelto desde el comienzo. l labora por necesidad vital, aparte la econmica; y el hallarse a solas no ha de preocuparle. Pero l solo vale ms que todos estos jovenzuelos presuntuosos juntos. Debe V. terminar cuanto antes su Azorn, paso a paso. Como estar admirablemente y es tan atractivo el tema, no le ser difcil editarlo. El de Mulerit se est agotando y eso que es otra cosa... ngel Cruz Rueda Cabra, 17 de julio de 1942 14 Escritos de Jos Capilla sobre Azorn y Mir Mi buen amigo don ngel: Recib sus artculos sobre los libros Valencia y Madrid de nuestro querido Azorn. Los he ledo varias veces. Sntesis magnficas, escritas con naturalidad y cario, que muestran con su caracterstica modestia cunto sabe y conoce de la obra literaria del maestro. Se los devuelvo con la presente. Como quiero tener el gusto de poseerlos, he escrito al direc tor de El Popular de Cabra a ver si es posible conseguir estos ejemplares. Me dice V. que va a ordenar las Obras Literarias Completas de Azorn 9 que en uno o dos tomos quiere editar Ruiz Castillo, y que con este motivo tendr que visitar reitera damente a Azorn. Le felicito por tarea tan gustosa, que no dudo llevar V. a cabo con toda meticulosidad y acierto. Dgame como le encuentra fsica y psquicamente, qu libros tiene en preparacin. .. . Quiero saber del querido maestro que tanto me regatea sus letras. Crea que anso sus noticias. Hace algunos das, unos quince, escrib a Azorn. Le mand el guin de mi Azorn, paso a paso. Le suplicaba unos datos y unas noticias sobre su vida literaria. Todava no me ha contestado, lo que no me sorprende, pues conozco de antiguo cuanto rehuye hablar de sus libros y de pormenores con ellos relacionados. Nunca me he explicado la fortuna que en este aspecto tuvo RAMN (Gmez de la Serna), pues logr de labios de Azorn cuanto de interesante hay en su biografa, cuya poda, hecha de prisa y corriendo se nota a la legua, dicho sea de paso. . .. Jos Capilla Monvar, 20 de octubre de 1942 Querido amigo don Jos Capilla Beltrn: Ya he hablado tres veces con el maestro Azorn, en su casa, y por esto le contesto, con gusto, segn le promet el 23 de diciembre. Fsicamente est como en el retrato de Zuloaga, que apareci en Vrtice junio 1941, pero animoso y firme. No trasluce descontento alguno y confa en que el Caudil lo salvara de nue vo a Espaa, si fuera necesario. Estima a V. muchsimo aunque por excesivo trabajo y poco amigo de la correspondencia no le conteste, y yo le he dicho que era necesario publicar el Azorn, paso a paso que ser lo mejor que sobre su personalidad se escriba. ngel Cruz Rueda Madrid, 29 de enero de 1943 9 El ttulo definitivo fue el de Obras Selectos. Julio A. Capilla Bellot Mi buen amigo don ngel : Gracias por las noticias que me da del querido maestro Azorn. No he visto foto grafa alguna del retrato que le hizo Zuloaga. Indudablemente se ha de notar en su fsi co la proximidad a la setentena de la vida. Por contraste, su espritu me parece hoy ms joven que nunca, si son dones de la juventud la fe, la confianza y la laboriosidad. Me tiene dolido, no disgustado, por su silencio a una noticias y datos que le ped. S lo mucho que tiene que trabajar y lo poco que gusta de correspondencia; sin embargo, a mi juicio se prodiga con esceso en entrevistas e informaciones pueriles. Uno dice que Azorn dej de fumar hace treinta y cinco aos, otro que escribi La Voluntad a los vein tids aos, etc. Ya ve V. lo que tienen que decir estos azorinistas, sobre superficiales, mal informados. Mi Azorn, paso a paso, est empantanado. Me falta tranquilidad y reposo. Son muchas las preocupaciones que hoy pesan sobre m. He de rehacer mi vida y mi hogar Y no se me deja tranquilo! 10 . Venga lo que Dios quiera. No obstante mi distraccin, si alguna me es dada, es enfrascarme en esta tarea del libro del maestro Jos Capil la Monvar, 1 de febrero de 1943 Mi buen amigo don Jos Capilla: Estoy muy agradecido a V. por su grata, por el ndi ce de su futuro libro y por las curiossimas notas acerca de las publicaciones primeras de Azorn. Lo que aproveche ir con su correspondiente mencin; no porque V. la necesite, sino porque es un deber y as es mi gusto. Cunto siento que no se halle V. cerca! Le consultara ms detalles y le ira leyendo mi semblanza, ms para los reparos que para el elogio. Porque en definitiva, lo que importa es la verdad de la obra y, si es posible, tambin la belleza. Y me preocupa ese medio centenar de cuartillas que he de escribir. Ruiz Castillo 11 se inclina por lo anecdti co; y yo, sin pretender abrumar al lector ms aun en esta clase de lectores con la eru 10 Jos Capilla haba cumplido dos aos de prisin y, por aquellos das estaba, por reduccin de condena, en prisin atenuada ya la espera de sufrir nuevo juicio en Madrid ante el Tribunal Especial para la Represin de la Masonera y Comunismo. 1 1 Jos Ruiz Castillo, propietario y director de la editorial Biblioteca Nueva de Madrid. 1 6 Escritos de Jos Capilla sobre Azorn y Mir dicin, a un estudio ponderado, completo y sencillo, de la vida y de la obra; algo por el estilo de mi discurso en Crdoba 12 Qu es eso -en su Azorn, paso a paso- de primeras colaboraciones en la pren sa, Y definicin poltica en Monvar, Y el mdico monovero don Jos.. . Dnde apareci primeramente el Castelar, publicado en Albor (Elda septiembre de 1933). Perdn por la molestia y no se apresure en contestarme. Si no, temera insistir... ngel Cruz Rueda Madrid, 4 de febrero de 1943 Mi buen amigo don ngel: En el apartado Primeras colaboraciones en la prensa, del plan de mi libro, he de referirme a los primeros escritos de Azorn de muchacho, periodiquillos del pueblo. Definicin poltica en Monvar, es la primera declaracin poltica de J. Martnez Ruiz, de la que, con la presente, le mando copia. Es un magnfico documento para el estudio de la formacin del maestro. El mdico monovero de Jos Prez Bernabeu, fue un mdico que ejerci gran influencia en la juventud de Azorn al que llevaba lo menos veinte aos. Era ferviente republicano federal, tom parte en Madrid en La Gloriosa, fue ntimo amigo de Pi y Margall y relevante figura en el partido federal alicantino. Como mdico, un gran clnico. En Superrealismo alude a este mdico. En la serie de artculos que bajo la denominacin genrica Correo Espaol publi c Azorn en el diario de Madrid El Sol, apareci el de Castelar el 13 de enero de 1931 . Tambin con posterioridad en el diario Luz, el 15 de agosto de 1932, public otra semblanza de Castelar. Por el que V. pregunta es el primero. Ya sabe V. que en Los Pueblos y en el precioso Madrid hay tambin trabajos sobre Castelar. Y el estu dio literario De Granada a Castelar. Azorn tena cario a Pi y Margall, admira cin a Castelar y, todava no he podido explicarme por qu, tena adversin a Salmern. (En el terreno afectivo es bastante raro. Est por hacer el estudio psicol gico de este escritor Azorn). 12 Significacin de Azorn en la Literatura Contempornea. Trabajo publicado en el Boletn de la Real Academia de Ciencias, Tipografa Artstica San Alvaro 17 Crdoba. Julio A. Capilla Bellot Observe V. que no hay libro alguno de Azorn que, ms o menos expreso, no haya tema poltico. Algn da habr que reivindicar la actividad poltica de estos mrtires de las oligarquas ms o menos selectas. Y qu es la generacin del 98 ms que un grito poltico Renovacin, revisin de valores, regeneracin, nueva Espaa, etc., es su lengua je. Y en un principio fue el verbo.. . En toda la obra de Azorn hay un constante palpitar por Espaa: no es esto poltica Y de la verdadera, de la necesaria, de la que no se podr prescindir nunca. Se ha olvidado que el hombre es un animal poltico Y es evidente, no se puede negar, que no se puede gobernar sin poltica, como no se puede hacer cocido sin garbanzos, valga la vulgaridad. Claro que no trato de modificar, ni mucho menos, el plan que V. ha trazado para las Obras escogidas, y que, desde luego, es muy aceptable. Jos Capil la Monvar, 9 de febrero de 1943 Querido amigo Capil la Beltrn: Ya tengo la bibliografa completa. Al final, en nota, declaro con elogio lo que debo a V. Nunca me engalan con plumas ajenas. Lo de Daz Plaja est bien, pero incompleto: no es el primer Azorn, sino parte del primer Azorn 13 . El sbado habl con el maestro, en su casa. Le d sus recuerdos. El maestro le estima siempre; pero ha de trabajar mucho, no se disipa en correspondencia, aunque lo siente en algn caso, como este de V. Le pregunt si era V. de Monvar; de dijo que de Elda, aunque residente en su pueblo natal. 4 Empiezo la Semblanza de Azorn. Ser, al menos, sincera. No podr contentar a todos; unos echarn de menos la erudicin; a otros se les ocurrirn datos, o ms datos, y fechas y dejo correr la pluma. Lo de no recoger poltica en las Obras escogidas 15 se debe, sobre todo, a propsito editorial. Y Romero en el romeral, si va al fin, es lo ms pareci do a lo literario. ngel Cruz Rueda 16 de febrero de 1943 13 Trabajo publicado en el semanario Destino de Barcelona el 1 1-10-41 y el 22-1 1-41. 14 Jos Capilla era setabense. 15 El ttulo definitivo fue Obras Selectas de Azorn. Escritos de Jos Capilla sobre Azorn y Mir Mi querido amigo don ngel: Pues claro que la semblanza de Azorn por V. escrita tena que agradar al maestro, a Ruiz Castillo y a Astrana Marn. Tiene un excesivo lastre de modestia V., don Angel, para elevarse, como merece, en la carrera literaria. No se puede ser tan modesto en la vida literaria. (Y, entre parntesis, ese Astrana Marn, que tantas cosas sabe de Shakespeare, rebuscn sin arte erudito, fue malo con el inolvidable Mir. Trat de enti biarle el xito de El Obispo Leproso con aquellos artculos sobre el estilio leproso en El Imparcial. Para m es un crtico petulante peor que pedante con hipersecrecin biliar. En la Coleccin Austral se ha publicado un volumen con Artculos de costumbres de Larra, antologa dispuesta por Azorn. Tiene para nosotros la novedad de un prlogo y de una nota sincrnica de Larra, recientemente escritos por el querido maestro. La editora de Novelas y Cuentos, ha dado en uno de sus cuadernos Vieja Espaa (Old Spain)con una nota biogrfica escrita y firmada por el propio Azorn en mayo de 1943. Y, en fn, no quiero cansarle con la relacin de mis ltimas lecturas, el desmemorizado por antonoma sia, digo don Luis Ruiz Contreras, nos ha defraudado con las Memorias que viene publi cando en el semanario El Espaol, en cuanto se refiere a Azorn, pues no ha hecho ms que reproducir casi todo el Charivari, adems de lanzar la insidia de que Azorn lo mis mo moja su pluma en tinto roja que en tinta azul. (Qu esto lo escriba un octogenario que se precia de alturista y bondadoso!). Jos Capilla Monvar, 26 de agosto de 1943 Querido amigo don Jos Capilla: Las Memorias de Azorn a manera y complemento de Las confesiones son esperadas con inters; el maestro ha reclamado no lo s por l las 2000 pesetas que le ofreci Arriba por publicarlas en el suplemento S o en folletn. Tiene en prensa seis o siete libros, algu nos realmente inditos; otros, colecciones de artculos y otros reimpresiones; trabaja dema siado; su esposa, que es seora simpatiqusima, y yo tratamos de evitarlo; y a nuestras pala bras, las mas respetuosas y medio en broma, medio en serio siempre, Azorn sonre. La colaboracin, honrossima para m, con Clemencia es de Mir por Azorn y Azorn por Mir. No se hal la puntualizada an. Clemencia est bien de salud, trabaja demasia do y ahora descansa por tierras alicantinas. ngel Cruz Rueda Madrid, 15 de septiembre de 1943 Julio A. Capilla Bellot Mi buen amigo don ngel: La fantasa de Pensando en Espaa a que me refer en estimacin, durante mi grata entrevista con V. en Madrid, es Paloma del campo, pgina 125. Es de lo ms ligero y a la vez profundo que ha escrito nuestro querido Azorn. Es posible, Dios mediante, que en breve publique algo en la prensa de sa. Ya le avisar. Quisiera saber si han salido ya esos volmenes que estaba preparando Garca Mercadal. No podra V. facilitarme unas pruebas de las Memorias de Azorn. Sufro con mi impaciencia por conocerlas. Jos Capilla Monvar, 3 de noviembre de 1943 Mi querido y buen amigo don ngel: Le agradezco la noticia que me da de la aparicin de El Enfermo y de la marcha del volumen Obras Selectas del maestro. Tambin, celebro haya incluido Paloma del cam po. Gracias por tantas amabilidades. He escrito un trabajo periodstico que espero publique el semanario El Espaol 16 . Se titula Azorn y su cuna, Monvar; unas veinte cuartillas dobles escritas a mquina. Me satisfacera verlo publicado en vsperas de la aparicin del volumen Obras Selectas, como pobre ofrenda ma al querido maestro. Y hablemos de Azorn. Parece ser, por lo que he odo decir, que en Alicante se le pre para un homenaje. No s, hasta ahora, lo que haya de cierto. Yo aqu, donde nada soy y significo, estoy incitando a sus amigos para que hagan algo. He sugerido la colocacin de una lpida de bronce en la fachada de la casa donde naci y que se convoque un con curso en toda Espaa para premiar con cinco mil pesetas, por lo menos, una monografa sobre la obra literaria de Azorn. No tengo grandes confianzas en que se realice este plan; pero yo lo intento. Jos Capilla Monvar, 12 de noviembre de 1943 16 Con el ttulo de Azorn y Monvar, fue publicado en El Espaol el 8-01-44. 120 Escritos de Jos Copilla sobre Azorn y Mir Querido amigo don Jos Capilla: Por cierto, hace dos domingos, en casa del seor Ruiz Castillo, al darle a este seor recuerdos de V., me ense el retrato mo publicado en Idel/a 17 y el nmero de esta revis ta con la bibliografa del maestro. Quisiera V. indicarme ya que no lo quise preguntar el porqu del primero En cuanto lo segundo, con un ejemplar en la mano, dije: Esto es lo ms completo en su gnero. Que es en suma, lo que afirmo en la pgina 1504 (Obras Selectas de Azorn). Tambin va su nombre en la 1509, por iniciativa de Azorn. Y en la 29 del prlogo, si no en alguna ms. Imagine con qu gusto he de leer el artculo que me anuncia para El Espaol. Hace pocos das visit a Azorn. Est bien; trabaja muchsimo. Le di asimismo sus recuerdos. Parece que no hay nada del homenaje en Alicante. ngel Cruz Rueda Madrid, 20 de diciembre de 1943 Mi querido amigo don ngel: Me hago cargo de la intensa tarea por V. desarrollada hasta trmino y cima al volu men Obras Selectas de nuestro admirado y querido Azorn, volumen que con tanta impa ciencia he esperado. El da 29 lleg a mis manos el ejemplar cuyo envo me tena anun ciado el Sr. Ruiz Castillo dos das antes. En cuanto lo recib lo hoje una y otra vez, duran te largo rato, con verdadera fruicin, prometindome lectura reposada para ayer y hoy, das de asueto. Y as he celebrado el comienzo de este ao 1944 con la lectura de la Semblanza de Azorn y con la de las Memorias del maestro. Qu voy a decirle yo, falto de autoridad y competencia, de la Semblanza. Adems no corro el riesgo de que se tome por lisonja lo que dicta mi sinceridad y aprecio No obstante, prescindo de estos escrpulos. La semblanza que V. ha escrito de Azorn es acer tada, discreta y prudente. Presenta V. con exactitud el proceso de formacin y desarrollo literarios del maestro, desde su infancia hasta la setentena en que hoy se encuentra, con detalle de su labor en la prensa, en el libro, en el teatro. En el examen de la actividad pol tica de Azorn, tan mal vista como mal juzgada por las gentes superficiales, hace resaltar los principios de amor a Espaa que siempre guiaron al maestro. La imagen moral de Azorn, austeridad, comprensin, tolerancia y trabajo, rebela la dignidad del excelso 17 Se public en la revista Albor - Elda 1935 1 2 1 Julio A. Copilla Bellot escritor. Ha sabido V. destacar los elementos autobiogrficos dispersos en la vasta obra azoriniana y basar en el los, con fidelidad, su hermosa semblanza, escrita por V. con ing nita modestia, con lenguaje claro y sencillo y con gran afecto y comprensin al maestro y a su obra. Da V. remate a la Semblanza de Azorn con los Amigos de Azorn, fantasa que bien pudiera ser realidad. Tcitamente existe en Espaa una agrupacin de hombres, con ms o menos fortuna en las letras que siguen con fervor literario al literato ms puro de las letras contempraneas espaolas: Azorn. Jos Capilla Monvar, 3 de enero de 1944 Querido amigo don Jos Capilla: Me llamaba la atencin su silencio, cuando hace pocos das l leg su grata del 3 y hoy leo en El Espaol, la admirable plana dedicada por V. al estudio de Azorn en Monvar y Yecla, que habr cautivado al maestro como nos ha deleitado a sus dems lectores. Esto nos hace desear ms an que se ecriba completa mente y se publique el Azorn, paso a paso, que ser obra capital en estos estudios. Azorn me entreg anteayer las galeradas de su fantasa La isla sin aurora, escrita hace un ao, que publicar la Editorial Destino, de Barcelona: humorismo, imaginacin y observacin, en que es inimitable, de la realidad. Y hace pocos das le regal, para la imprenta, otra coleccin de artculos suyos publicados en el ABC, en 1905 a 1906. ngel Cruz Rueda Madrid, 9 de enero de 1944 Mi querido amigo don ngel: Recib sus gratas letras del 9 del actual, saturadas de su inagotable bondad. El nmero de El Espaol ha sido un xito que verdaderamente me ha sorprendido. A los corresponsales administrativos se les agotaron los nmeros en seguida, no solamente en Elda y sta, sino en la capital, Alicante. Tuvieron que repetir los paquetes. En Valencia tengo noticias de que tambin se agot. La pgina de Azorn y Monvar ha trado la atencin de estas gentes. Y no por los mritos que bien s que no los tiene mi trabajo, escrito sin pretensiones literarias, sino por el asunto, que hoy tanto la obra de Azorn como cuanto a el la se refiera interesa aun al lector del montn, sin preocupaciones ni ciencias literarias. Mi satisfaccin ha sido haber contribudo con este trabajo a mover la obra de Azorn, tan bien presentada hoy en ese volumen de Obras Selectas, en el que tanto esfuer zo y empeo ha puesto usted. 122 Escritos de Jos Capilla sobre Azorn y Mir He de advertirle a V. que en esa plana no est todo el original que yo envi.... El querido maestro me dirigi en seguida unas letras de loa y gratitud. Y sta ha sido mi mayor satisfaccin, ntima satisfaccin que no sabra expresar. Si a esto uno la cari osa felicitacin de V. que sabe que lo que he escrito nada tiene de particular y el agra do causado a Ruiz Castillo, he de considerarme colmadamente premiado, que nada es tan grato en la vida como ver nuestros hechos y obras, por modestos que sean, bien aco gidos por los amigos dilectos. Tambin el octogenario Luis Ruiz Contreras, que est escri biendo sus Memorias en El Espaol, me ha dirigido una carta muy cariosa, y, en fin feli citaciones sin cuento de amigos y conocidos. Jos Capilla Monvar, 24 de enero de 1944 Querido amigo don Jos Capilla: Azorn sigue bien y ms laborioso que cuando joven. La isla sin aurora es un primor. De haber sabido que no se la mandaba [Azorn] se la hubiera regalado yo.Las recopila ciones de Garca Mercadal y una novela estn en Zaragoza. Austral tiene otra prensa. Para esta coleccin se me han pedido y anteayer los entregu veintitrs artculos del ABC y una treintena seleccionada de sus libros, para un volumen que se titular Con Cervantes. Tardar en salir. ngel Cruz Rueda Madrid, 22 de junio de 1944 Mi querido amigo don ngel: Le su ltimo trabajo publicado en el nmero 84 de El Espaol y tambin el de la Estafeta Literaria sobre Valera, creyente. Y ya que hablo de estas publicaciones, le dir que, sin esperar a que se publicase mi Poesa y Prosa de Gabriel Mir, envi otro ensa yo, titulado Del feudo literario de Azorn que Dios y don Juan ApariciolB saben cuando se publicar. La verdad es que se cansa uno de esperar. Con verdadera fruicin ha ledo los tres volmenes ya aparecidos, Tiempos y cosas, Veraneo sentimental y Palabras al viento, recopilaciones de artculos de Azorn. La mayo ra de estos trabajos me eran desconocidos. Ahora bien: es una verdadera lstima que el 18 Juan Aparicio era el director de El Espaol. Ninguno de los dos trabajos fueron publicados. 123 113 A Capillo Bellct seor Garca Mercada no haya puesto ms amor y celo en la direccin de estas edicio nes. Estos trabajos de Azorn debieran ir precedidos de una nota que los situase en el tiempo, adems de llevar cada uno referencia de la publicacin y fecha en que vieron la luz. En cuanto a materialidad de la edicin, es mala, por no decir psima. Pobre presen tacin, mal papel, falta de gusto tipogrfico, descuidos garrafales en la correccin de pruebas , en fin, toda calamidad posible le ha sido dada. Y no se diga que el precio de doce pesetas, volmenes de 200 pginas escasamente, no permite hacer otra cosa, pues hay margen sobrada para hacer una edicin digna del texto. Verdaderamente, queda malparada la labor y bondad de los amigos de Azorn responsables de tal edicin. A buen seguro que V. tambien habr sufrido al ver tan desamparados libros. Jos Capilla Elda, 12 de octubre de 1 944 Querido amigo don Jos Capilla: No se impaciente V. porque tarden en publicarle en El Espaol sus trabajos; los mos salieron pronto; ms desde hace unos meses tengo all dos y ...quin sabe si perdieron la oportunidad, an estando admitidos. Azorn lo sabe por experiencia propia segn me dijo por esta sinrazn algunos no quieren colaborar en tal semanario. Los tres volmenes de obras pretritas, hay que agradecrselos con todos sus defec tos a Garca Mercadal, quien se pasa horas y horas en la hemeroteca copiando los art culos, le he proporcionado muchos, y, ltimamente, todos para que haga un ndice, poco a poco, componga nuevos volmenes. Les falta orden y mencin de fechas; pero an as, hay que agradecerle labor tan desinteresada. Dir a Azorn lo que desea, pero no es raro que no le escriba; tiene fiebre de traba jo. Tambin en privado le dir lo contrario pudiera indicar vanagloria que, ahora mis mo, le estoy poniendo en limpio, a mquina, sus memorias inditas Pars. No tiene prisa en que aparezca ngel Cruz Rueda Madrid, 16 de octubre de 1944 Querido amigo don ngel : Recib unas letras de nuestro querido Azorn de las que, para satisfaccin de V. trans cribo las siguientes: El Pars lo est copiando nuestro buen amigo, sin el cual no hubie ran salido las obras selectas ni saldra este libro. Le felicito por el placer que V. experi mentar al pasar e limpio las cuartillas inditas de quien tanto admiramos y queremos. 24 Escritos de Jos Capillo sobre Azarin y Mir He seguido en El Espaol las nimiedades de El Desmemoriado 9 sobre las Obras selectas de Azorn y la semblanzJar . V. hizo. No dice nada este seor, ya que estas cr ticas gramatiqueras son anacrnicas e intiles. En esto estoy con don Po. Por lo dems, lo importante, en la vida literaria, es que le nombren a uno. Supongo que habr ledo el librito Gabriel Mir y los de su tiempo. Verdaderamente, como confiesa el autor, es un desafuero. Este seor Lizn, para mi completamente des conocido, debe tener buenos amigos en los medios bullangueros hoy, ya que no veo dig nos motivos literarios para que tanto le nombren. Jos Capilla Elda, 22 de diciembre de 1944 Querido don ngel: Mi sincera felicitacin por la concesin de la Encomienda de Alfonso X, el sabio. Ms que por su dignidad de comentador por cuanto significa en el reconocimiento de sus afa nes por parte de sus colegas de Cabra. Estos das he ledo Mara Fontn. A mi modesto entender, el maestro est ahora en una fase de sutil humorismo. Ya, de vuelta de todas las experiencias literarias y quin sabe si de otras no literarias tambin de novedades y clasicismos, parece que juegue con la pluma. Para m, y perdone si desbarro son juguetes literarios estas ltimas produc ciones. Salvadora de Olbena la tengo pedida hace tiempo y, a pesar de mis reiteracio nes, todava no me la han enviado. Temo se haya agotado ya y espero con impaciencia Pars, que segn me dice el Sr. Ruiz Castillo, ya est en la imprenta. Y de las Obras Pretritas, no han salido ms volmenes que los tres primeros Me gusta mucho el tema del libro que me dice est escribiendo, Mujeres de Azorn. Interesante, ya que poco se ha dicho por crticos y comentaristas de las figuras femeninas creadas por el maestro. Facultades y nimos los tiene V. sobrados para escribirlo y no dudo del xito y de la aceptacin. Mi deseo de hacer las cosas lo mejor posible, dentro de mis pobres facultades y medios, me cohibe. Quiero escribir ya mi proyectado libro sobre Azorn, para publicarlo en el pr ximo otoo. S que lo difcil es empezar estas tareas. Si Dios quiere, no tardar ya. Jos Capilla Elda, 20 de enero de 1945 19 Se trata del escritor Luis Ruiz Contreras. 125 Julio A. Capilla Bellot Mi querido amigo don Jos Capilla: Ya leera V. mis semblanzas de Mara Fontn y Salvadora de Olbena, en El Espaol. En la Estafeta Literaria, del reciente da 15 aparece el artculo que me pidieron. Tambin me solicitaron una extensa gacetil la para un catlogo de Espasa-Calpe destinado al extranjero en especial; y amplio estudio del maestro con destino al nmero que van a con sagrarle los Cuadernos (de Literatura Contempornea). Respecto a stos cumpl la pro mesa hecha a V. Aunque Cardenal ya no es el secretario de Redaccin, indiqu por car ta la conveniencia de que se dirigieran a V. con peticin de original biogrfico o de otra clase. A Azorn le pareci muy bien. Ignoro si lo habrn hecho, a pesar de que les deca quin y cmo es V. y su ntima amistad con nuestro autor. No deje V. de trabajar en su libro, ser un xito. Maana ver al maestro, si est mejor, pues tena delicados los ojos. . . y no cesa de escribir. ngel Cruz Rueda Madrid, 18 de marzo de 1945 Mi querido amigo don ngel: Por fin, consegu Salvadora de Olbena. La le y la rele. Llen el libro de notas, aco taciones y sugerencias. No pude resistir la tentacin de escribir sobre esta novela y sali un trabajo que envi a El Espaol para que lo publiquen en las calendas griegas (a ver si se cumple eso de que un clavo saca a otro clavo, que ya deben de estar tomados de robn los dos que tengo all). Jos Capil la Elda, 23 de abril de 1945 Querido amigo Jos Capilla Beltrn: Hoy devolv, corregidas, las pruebas de Azorn prosista para los Cuadernos de Literatura Contempornea. Cunto siento que no le pidieran colaboracin, ya que lo tena recomendado. Mas carezco de confianza con los nuevos para haber insistido, porque Cardenal ya no es secretario de Redaccin. Al maestro, a quin visit estos das, le encuentro muy bien; no se inquiete porque no le escriba: trabaja demasiado y ya tiene 72 aos. La Coleccin Austral ha editado Los dos Luises, De Granada a Castelar y Las confesiones, ltimamente. No han llegado an Los Escritos de Jos Capillo sobre Azorn y Mir clsicos redivivos. Pars saldr de un da a otro en edicin de lujo, treinta y cinco pesetas ejemplar, segn catlogo (Ruiz Castillo est delicado de salud, no le he visto, pero le he escrito). A falta de papel tambin est La Farndula de libros Obras Pretritas; y en pre paracin, Ante Baraja. ngel Cruz Rueda Madrid, 21 de junio de 1945 Querido amigo don ngel : Ya tuve la alegra de recibir Pars 20 , que tanto he esperado. El libro est muy bien pre sentado, con discreta elegancia. Yo me permit indicar al seor Ruiz Castillo que pusiese al frente la fotografa del retrato de Azorn hecho por Vzquez Daz. Creo que hubiese ido mejor que esa fotografa de Sebastin Miranda en la que aparece el querido maestro con boina, cosa horrible para un mediterrneo. A Po Baroja le va bien tal tocado. Es ms, lo exige su naturaleza brumosa y hmeda. La boina es un apndice de don Po. Pero a Azorn no le cuadra tal caperuza de bel lota, que es levantino en cuerpo y alma. Y Levante es luz y alas y velas.. , o destocado como Mir, al goce de las brisas, o con el gris som brero de Rusiol, alas de sombrero, velas al empuje del espritu heleno. Y ya, despus del precedente desahogo, hablemos del libro. Lo estoy leyendo pausa damente y paulatinamente, alargando todo lo posible el placer de su lectura. Y no quisie ra terminarlo. De V. para m, creo que Azorn nos ha escatimado mucho de su Pars, vivi do con el alma dolorida. Tal vez por pudor, quizs por discrecin, quien sabe si por pru dencia. Y no digo ms. Y vamos a la mujer real que encarn Angelita. Deseoso de complacerle con el mayor celo y fidelidad, acabo de escribir a un buen amigo de Monvar pidindole detal les bio grficos que transmitir a V. en cuanto me los mande. Puedo adelantarle que cuando Adela Tortosa represent Angelito era soltera. Luego, no puedo precisar, contrajo matri monio con un forastero dedicado a negocios de transportes en Valencia, donde residen. Era Adela cuando yo la conoc una muchacha sencil la y bondadosa por naturaleza. Morena, alta, esbelta, con rasgos, en su fisonoma, aristocrticos, aun cuando su cuna no pudo ser ms modesta. Su padre fue un pobre carpintero, que supo elevarse hasta ser hoy una de las primeras firmas en la explotacin de canteras.. . . Ya sabe V. que en la edicin de Angelito, de la Biblioteca Nueva, ilustrada, hay una foto de Adela, y, en el prlogo se 20 libro dedicado por su autor. A Jos Copilla Beltrn, al pie de la Pea del Cid, donde yo quisiera estar (unos das) Azorn. Julio A. Capilla Bellot refiere tambin Azorn a su padre al de Adela, he aqu la anfibiologa del posesivo su, tan temida por Azorn digo que cita a Carlos Tortosa, cuyo primognito es hoy alcalde de Monvar, el hombre que ya no sierra tablones, sino que ahora taja montaas. No obstante estos ligeros detalles, espere V. que le mande otros ms extensos y preciosos. Ah, tambin RAMN en su Azorn habla de Adelita. Jos Capilla Elda, 25 de julio de 1945 Querido amigo don Jos Capilla: Para ellas (Mujeres de Azorn) eran los datos de la intrprete de Angelito; pero no necesito ms de ella. En cambio quera saber lo siguiente: al ir desde Madrid a Monvar, en tren, Villena est antes que Sax; y por carretera, en automvil, es lo mismo o al revs En los escritos de Azorn hay contradiccin; l no se acordaba, ayer, y ofreci acu dir a Micheln.. . Por anlogo motivo, sabe V. algo de las hermanas de don Jos: slo de doa Mercedes, doa Consuelo, doa Amparo y doa Pilar. .. l me indic algo; mas deseara saber edades aproximadas y un par de renglones acerca de cada una. Si V. pue de hacerme este favor, sin grave molestia, no tarde en escribirme. Conforme en lo de Pars; en que es un libro admirable, pero en el cual nos ha relata do sus impresiones. No nos sorprende: recuerde V. que en las Memorias confiesa que lo ntimo suyo permanece indito: en el armario donde guardaba su madre el libro verde. ngel Cruz Rueda Madrid, 26 de agosto de 1945 Gracias por su plano, que me sirvi para rectificar lneas mas y por las noticias de las hermanas de Azorn, con las cuales rectifiqu las del hermano, y, sobre todo me sir vieron para decir en mi original: Todas me comunica el delicado literato y perfecto azo rinista Jos Capil la Beltrn, son muy educadas. . . Porque el libro Mujeres de Azorn fue concluido y sus ciento cincuenta folios entregados al maestro, el cual me escribi lo siguen te; el da 8: he ledo bastante del libro. No hay que decir que me parece bellsimo. No encuentro nada que sea preciso modificar. Y acabo de escribir el prlogo: todo l es una semblanza de usted, escrita con el cario que es de suponer. Escriba V. hombre, escriba V., con el procedimiento que le dije, ese sin duda admi rable Azorn, paso a paso! Yo dediqu dos meses a sus Mujeres. Qu importa que V. tar Escritos de Jos Capilla sobre Azorn y Mir de ms No tard veintitantos aos en publicar mis Horizontes espirituales nimo y a las cuartillas! Media, una o dos diarias, y ya ver usted. .. Le digo poco del maestro porque, sabindole atareado y con frecuencia no se lo diga V., que se preocupa achacoso, con la vista, con el rin. .., le veo de tarde en tarde: me valgo, sobre todo, del telfono o del correo. Cuando hablo con l est expresivo no pue do quejarme: ms expresivo unas veces que otras, segn el estado de salud. Siempre que nos referimos a V., lo hace de manera cariosa. Slo que es as. Cuando charlamos de sus hermanas sigue la confidencia no saba.. . ni dnde se hallaban algunas! . . ngel Cruz Rueda Madrid, 17 de septiembre de 1945 Querido don ngel: Me hace V. otro honor inmerecido al citarme en sus Mujeres de Azorn. Mire, don ngel, que yo no significo nada, ni nada valgo. Y no lo tome V. a modestia, ni fingida ni sincera, sino a cabal conocimiento de mi pobre pluma. As, tomo tal fineza como una generosidad ms que debo a su bondad. Me alegra mucho que lo prologue Azorn, y ya me impacienta el deseo de tenerlo entre mis manos, saborear su lectura y apreciar esa semblanza. Que lo editen pronto! Yo escrib ya hace tiempo, cuando apareci el Pars al querido Azorn. Le brindaba el verbo azorinear, que quisiera ver patrocinado por todos sus admiradores, y le incitaba a que escribiera esa Preceptiva literaria que le pidiera la Revista de Occidente. No me ha escrito. Aun cuando conozco de tiempo y comprendo su parvedad comunicativa, me due le que tanto escatime sus letras. No se lo tomo en cuenta ni merma mi afecto, pero me duele, don ngel. No sabe cunto le quiero y admiro. Jos Capilla Elda, 27 de septiembre de 1945 Mi querido amigo don ngel: Hoy, he visto en la Galera de actualidad de ABC su figura, trazada por el lpiz humorstico de Fresno. Veo, pues, que ha pronunciado ya su conferencia sobre las Mujeres de Azorn en el Crculo Medina. No he tenido el placer de leer informacin alguna del acto, que no dudo sera un xito. Le felicito y le deseo que prosiga con tanto acierto su caminar literario. 9 Julio A._ Capilla Bellot Ya que le han dado a nuestro querido Azorn la Gran Cruz de la Orden de que es V. comendador 21 le felicit por esta cruz honorfica, que bien quisiera yo aliviara el peso de la otra, la real, que pesa sobre todo escritor ntegro. No cree V. mejor para el escritor un Estado Cirineo Ya, al maestro hay que aliviarle, en sus setenta y tres aos, el peso de la cruz del escritor. Tambin es sta una magnfica ocasin para rendirle el homenaje, nti mo y cordial, que le deben todos los escritores dignos de ser tales. Por qu nadie se mue ve en tal sentido Es una pena don Angel, una verdadera pena. J. Capilla Elda, 25 de febrero de 1 946 Querido amigo don Jos Capil la: S seor, mereca Azorn, ciertamente, un homenaje nacional, mas yo no dispongo de tribuna adecuada, ni de autoridad sin modestia bastante. Y l est ajeno a estas cosas. Un Estado -Cirineo, como V. dice muy bien, es lo que hara falta. Y, sin embargo, vea V. como ha de laborar sin tregua. ngel Cruz Rueda Madrid, 28 de febrero de 1946 Querido amigo don ngel : Vinieron sus gratas letras del 29 de marzo con el obsequio de su Azorn, prosista, cuya imprescindible dedicatoria se justifica ms por sus bondades que por mis mritos, si es que tengo alguno. Ya supondr con qu avidez he ledo su estudio de la produccin azoriniana. Es sen cil lo, claro y exacto. Una preciosa leccin, que confirma su capacidad docente, con minu cioso inventario y justa clasificacin temtica de los libros del querido y admirado Azorn. Muy oportuno el estmulo a los editores, como noble y franca la defensa de las dotes ima ginativas y sensitivas del excelso escritor. Solamente quien le viene siguiendo ao tras ao, como V. , sabe que Azorn es un fenmeno sin par ni semejanza en la literatura espao la. Es el San Juan Bautista de un arte literario que se inspira en experiencias psicolgicas 21 Gran Cruz de In Orden de Alfonso X. Escritos de Jos Capilla sobre Azorn y Mir y se plasma en precisin y gracia y gustos idiomticos. Y no digo ms, que es ms mucho ms, lo que V. sabe de esto que lo que yo podra decir con riesgo de pedantera. Jos Capilla Elda, 14 de abril de 1946 Mi querido amigo don Jos Capilla: Adems de las tareas de fin de curso, me atare recientemente el libro que he termi nado de ultimarle al maestro, El artista y el estilo as lo titul que me llev mucho tiem po; slo le faltan ya detalles leves; son unos setenta artculos, y algunos fragmentos de libros, distribuidos en secciones. Al pie lleva cada trabajo el ao en que se public; me faltan los de una decena; slo le dir, por si los supiera, dos del ABC: Flaubert o el obre ro de la idea, y La feria permanente de libros (la cual es una extensa nota annima, donde refiere la visita que Azorn y los libreros de viejo hicieron al Alcalde para conse guir aquel propsito). El libro acaso se publique en la Coleccin Crisol de M. Aguilar. Ha visto V. Ante Baroja, de la coleccin Obras Pretritas de Azorn No he querido sorprenderle yo con el Quin es quin final; he sido sorprendido por J. Garca Mercadal.. . gratamente. Entiendo y no por esto que es el volumen ms considerable de los publicados. Hace aos que no he visto a don Po. ngel Cruz Rueda Madrid, 15 de mayo de 1 946 Querido don ngel: Tambin tena yo pedidos los Cuadernos 1 6-1 7 22 dedicados a Azorn y los recib des pus de su separata. Si prescindimos de las cuartillas autobiogrficas y de su Azorn, pro sista que es mucho y bueno, nada queda de inters. El estudio de Daz-Plaja es ya sobra damente conocido, pues son varias las veces que lo ha reproducido. Hubiera sido muy oportuna una recopilacin de juicios y opiniones sobre Azorn desde Clarn hasta Garca Venero y tambin de escritores extranjeros. En el de Gabriel Mir pusieron ms cuidado y fervor los encargados de estas publicaciones. Es una lstima. 22 Cuadernos de Literatura Contempornea, Consejo Superior de Investigaciones Cientficas, Instituto Antonio de Nebrija 1945 Julio A. Capilla Bellot Qu poco o nada se han acordado de Gabriel Mir en este dcimosexto aniversa rio de su muerte! Hasta el diario de su cuna (Informacin) se ha dado por satisfecho con unos breves renglones. Yo tuve la pretensin, por ingenuo, de publicar mi trabajo Poesa y prosa de Gabriel Mir en esta efemride. Lo envi primero a Arriba y, lue go, al semanario Domingo. Y, calabazas, don ngel, calabazas me dieron en este mayo. Me contestaron con sendas cartas, muy atentas, s, con los manoseados tpicos que tienen en las Redacciones para rechazar originales. S cuan poco valen mis cuar tillas, que siempre me exig mucho en estas tareas, adems de ignorar, entre otras muchas cosas, el arte de hacerse valer. Pero, Seor, si uno est harto de leer en los peridicos facecias e insulseces! Jos Capilla Elda, 2 de junio de 1946 Mi querido amigo: Esperaba a que viniera el maestro con su simptica esposa, para contarle algo ms, no por otra cosa; les debamos visita y el 8, fecha de su cumpleaos, fu con mi mujer e hija Cirsula por quien Azorn tiene simpata, sin duda por su delicado estado de salud y haberla recomendado al Dr. Maran -dolores de cabeza y en una pierna, nada ms, y. . . ya es bastante-. Siempre estn afables, como es natural; pero en esta visita, ms an, si cabe: por el gesto, por la conversacin y hasta por el optimismo acerca de los asuntos de Espaa en el extranjero (Aunque no se lo diga a V. siempre, es raro que no salga a relucir el nom bre de V. y, sin excepcin, con manifiesto cario). Si ha leido V. ya Ante Baroja y La Farndula, le habrn agradado, aunque en uno y otro faltan artculos de la primera poca, acaso por la Censura en aquel y por no encon trarlos en ste. De todos modos, es meritoria la tarea de Garca Mercada, buena perso na, que ha de pasarse muchas horas en la mquina de escribir, para ir viviendo, por injus ticias que merecan sancin impuesta a los culpable, no al laborioso escritor, que en Coleccin Variorum, ha publicado un ameno tomo de viajes titulado Rincones de Espaa Demasiado hace! ngel Cruz Rueda Madrid, 29 de junio de 1946 Escritos de Jos Capilla sobre Azorn y Mir Querido amigo don Angel : Ya le Ante Baraja y La Farndula. Estn bien. Me hago cargo, por lo que V. me dice, que el seor Garca Mercadal no puede poner ms cuidado en estas recopilaciones de las Obras pretritas. Ya he visto que en los ltimos volmenes publicados, los trabajos reuni dos l levan la acotacin de la fecha en que fueron publicados. Esto interesa mucho en estos trabajos. Al querido Azorn hace tiempo que no le escribo. Pens hacerlo cuando le con cedieron la segunda cruz 23 ; pero tem rozar el sarcasmo. Para qu querr Azorn tantas cruces, Seor! Lo que necesita el maestro es la tranquilidad econmica. Y se lo digo por mi cuenta y con mi responsabilidad, que percibo su angustia en los escritos de esta po ca. Me dice V. que ha descubierto que lo leen hasta algunos hortelanos; pregnteles a los libreros y ya ver cuan pocos hortelanos hay en Espaa. Ni leo casi ni escribo nada. Estoy pasando una racha de depresin y desnimo enor mes. Hace unos das mand a ABCno me paro en chiquitas un trabajo que tena escri to hace dos meses. Puede que ste sea el ltimo si me lo devuelven. Jos Capilla Elda, 1 1 de septiembre de 1946 Querido amigo don Jos Capilla: Al maestro le habl por telfono el 1 1 y ayer le visit. Muy delgadito, abrigado con una gabardina hace calor se hallaba con dos jvenes que deben de ser de esas tierras, a juzgar por la conversacin; pero ignoro sus nombres. Su esposa, doa Julia, me l lam y l lev a una habitacin toda rodeada de libros. Ida la visita, Azorn se reuni con noso tros y me retuvieron una hora, hablando como buenos amigos. No fue con intencin por lo que no le di referencia a V. de la carta que me escribi, el 22 de mayo, el Secretario de Monvar, D. Carmelo Sanz Sainz, en nombre del seor Alcalde; que, en sesin del 10 de abril, le nombraron Hijo Ilustre y acordaron iniciar sus cripcin pblica para regalarle las insgneas de Alfonso X; se lo comunicaron el 1 5 el 18 de febrero le felicitaron por telgrafo y el 19 de febrero Azorn escribi en gratitud al Alcalde don Carlos Tortosa. ngel Cruz Rueda Madrid, 1 5 de septiembre de 1 946 23 Concesin de la Gran Cruz de Isabel la Catlica. 33 Julio A. Capilla Bellot Mi querido amigo: Ya supona yo que la informacin que le diera el Secretario del Ayuntamiento de Monvar no fuera completa. Tiene disculpa l, que desempea el cargo desde hace poco y no es monovero. Lo que me sorprende Qu amnesia don ngel, padecen los paisa nos del maestro! es que se les haya olvidado a los indgenas ediles que Azorn fue nom brado hijo predilecto de su pueblo en 1917. Hace treinta aos. Si lo sabr yo que andu ve los pasos y fund y dirig el semanario Los Pueblos con tal fin, adems de dedicarle la calle que hoy lleva su nombre literario! Esta curiosidad no le ha interesado al diario ABC, que por falta de papel y exceso de colaboracin me ha devuelto mi trabajo Reiteracin y sinonimia en honor de Azorn, del que tengo el gusto de enviar a V. una copia y pueda completar los datos que le diera el Secretario de Monvar. Jos Capilla Elda, 14 de octubre de 1946 Mi querido amigo Jos Capilla: Nada me debe V. porque le cite con justicia y cario 24 . Si no se hace con V. en lo que respecta a Azorn, quin entonces Del trabajo de Insula no poseo ms que un ejemplar. Si encontrara otro, se lo mandara. Ya habr visto asimismo El artista ye/ estilo y ver otro parejo cuando disponga de tiempo para coleccionarlo. Los que emprezarn a publicarse, ms o menos pronto, sern las Obras Completas del maestro, editadas por M. Aguilar. Ayer me ense Azorn el contrato, igual al de Benavente y Fernndez Flores; y, como la de estos ingenios, en la Coleccin Goya, de ocho a nueve tomos, los que sean... Quieren que la dirija yo y as me lo manifestaron: Aguilar en cartas y por el seor Sainz de Robles, que me visit el da 4. Slo queda el que aquel y yo concretemos el trabajo y la remuneracin. Probablemente se comenzar por La Voluntad, etc., en orden cronolgico. Al final, las obritas de los primeros tiempos. De estas me faltan algunas que nunca tuve o que las perd al prestarlas, y ayer convine con Azorn, a quien le la de V. y que me encomend sus afectos, por si usted pudiera pro porcionrnoslas para devolverlas aunque no de momento, pues no urgen; son las siguientes: Notas sociales, Anarquistas literarios, Literatura, La Intrusa (Traduccin), De la Patria (idem), Las Prisiones (idem), Bohemia, Pecuchet, demagogo, Los Hidalgos (aunque s que sta es la primera parte de Alma castellana). ngel Cruz Rueda Madrid, 16 de febrero de 1947 24 En el prlogo del libro de Azorn, El Artista y el Estilo, A. Cruz Rueda cita a Jos Capilla. 134 Escritos de Jos Capilla sobre Azorn y Mir Mi querido amigo: Ya tengo El Artista y el estilo, precioso breviario de preceptiva literaria, sin figuras retricas con denominacin griega. Me congratulo por la gratitud y aprecio con que a V. y a Garca Hortal les distingue el maestro en su Accin de gracias. Y que no se haga esperar el otro tomito de esencias azorinescas. Me ha producido gran alegra la noticia que me da sobre la edicin de las Obras Completas del maestro por la editorial Aguilar. Esta edicin puede ser algo magnfico en manos de V. y con los recursos de dicha edito rial. Y auguro un xito pleno, en todos los aspectos, si, en esta empresa se pone todo el celo, cuidado y amor de cuanto por V. no dudo Qu cosa tan magnfica se puede hacer! Jos Capil la Elda, 24 de febrero de 1947 Querido amigo Jos Capilla: Muy grato cuanto me dice V. en la suya del 24. Acepto, en prstamo, los folletos de Azorn titulados Notas sociales, Anarquistas literarios, De la Patria y Las Prisiones (ya ten go Bohemia). Los dos primeros se utilizarn, con todo cuidado, en las Obras Completas; los otros dos son para leerlos yo. S, se podra hacer algo magnfico, y se intentar; pero los imponderables son muchos y se le quitan a uno las ganas. Yo lo hago por Azorn, solamente por Azorn, y no es que haya surgido todava ningn tropiezo. Lstima grande que no se halle V. aqu! Acaso, o sin acaso, fuera el llamado a tan gran tarea. Puede V. indicarme los Clubs o sociedades literarias que presidi Azorn Para cote jar o completar mis notas. En El concepto contemporneo de Espaa, se le cita a V. en la bibliografa de Azorn o Mir, si no recuerdo ma1. 25 ngel Cruz Rueda Madrid, 8 de marzo de 1947 25 El concepto contemporneo de Espaa. Antologa de Ensayos (1895-1931), por Angel del Ro y M. J. Benardete. Publicaciones del Hispanic Institute in se United States. Buenos Aires, Losada; 1946. En la p. 705, con referencia a Gabriel Mir, dice: ESTUDIOS: J. Beltrn Capilla, El paisaje alicantino en la obra de Gabriel Mir Glosa Elda 1930. Julio A. Capilla Bello Querido amigo don ngel: Por este mismo correo, como impresos, certificado, le mando un paquetito que con tiene los cuatro folletos siguientes: De la Patria, Las prisiones, Anarquistas literarios y Notas sociales. Respecto a los clubs o sociedades literarias que en su vida presidiera el maestro, no tengo nada ms que del Pen Club y de Los amigos de Lope: Por qu no preguntrselo a X, que dicho sea de paso no es tan desmemoriado como parece Pues si ahora tene mos el documento vivo y quiera Dios que para muchos aos y hemos de andar con ave riguaciones ms o menos trabajosas, en cuanto lo perdamos va a ser tarea de egiptlo go averiguar detal les personales de este Azorn tan raro como maravilloso escritor. Jos Capilla Elda, 20 de marzo de 1947 Querido amigo don Jos Capilla: Ya puede V. suponer cuanto agradezco la amabilidad y prueba de confianza que supone el envo de V. y que no le he de olvidar. El tomo de estos escritos juveniles ser el primero, pero saldr despus que el segundo y acaso que el tercero, con unas impresio nes del autor y prlogo mo. As, al menos, es lo acordado. En cambio ya no se agrupa rn los libros por gneros: novela, cuentos, teatro, ensayos, periodismos, etc., sino que se ordenarn cronolgicamente. Vi como V. deseaba la habitacin donde trabaja: sencilla, con pocos cuadros y muebles de buen gusto, separada por una cortina de lo que debe ser el dormitario, y a la cual se entra por la puerta cercana al retrato de Zuloaga. Junto al balcn en el testero frontero, una mesa de despacho, con cajones laterales, grande; libros y un flexo. En el centro mesa de camil la, cuadrada y pequea, con ms libros y, de stos, diccionarios; un silln, pocas sillas, una tumbona; todo, repito, de buen gusto y sencil lo. Procurar verla otra vez. ngel Cruz Rueda Madrid, 24 de marzo de 1947 136 Escritos de Jos Capilla sobre Azorn y Mir Mi querido amigo don ngel : Varios das que voy detrs de escribirle, por su grata del 24 de marzo y por haber recibido los fol letos de Azorn que le tena prestados. Como ha tenido ocasin de apreciar, tales folletos, como todos los incluidos en el mea culpa de Azorn, resultan muy ingenuos e inocuos. Son una curiosidad bibliogrfica y nada ms. Pues todava se los echan en cara los zoilos y aristarcos. En algunas de las obras posteriores del maestro hay ideas y conceptos de mayor atrevimiento y trascenden cia que en los aludidos libelos, que, en cuanto sean recopilados y publicados, perdern la importancia y gravedad. Jos Capilla Elda, 4 de mayo de 1947 Querido amigo don Jos Capil la: La Censura ha aprobado lo de la publicacin de las Obras Completas; pero se halla examinando muchas de ellas; y as estamos, esperando.. . La biblioteca de Azorn don de se le hizo uno de los retratos que se obtuvieron para la propaganda, ya empezada en Amrica y en el Pregn literario de la Editorial, con motivo de la feria del libro la biblio teca es una habitacin grande con dos puertas y una ventana; tres grandes estanteras abiertas con libros de toda clase; antiguos y modernos, lujosos y humildes, encuaderna dos y en rstica. Cubre el suelo un tapiz; un silln o butacn junto a la ventana y poco ms. Me dice el maestro que no prepara ningn libro nuevo. Mas si se formar uno con los artculos cervantinos del ABC. ngel Cruz Rueda Madrid, 1 de julio de 1947 Muy querido amigo Jos Capilla Beltrn: Correg pruebas de las Obras Completas de Azorn. Est para salir el volumen pri mero y tengo entre manos las galeradas del segundo. Hubo que incorporar aquel, contra mi voluntad expresa, La Voluntad y Antonio Azorn. Ms. .. cedi el maestro y no habra de ser ms azoriniano que el mismsimo Azorn. Si me entregan separatas, como me lo prometieron, una de las primeras ser para usted. Le preparo, en estos das, Con permi Julio A. Capilla Bellot so de los cervantistas, son ms de cien trabajos, muchos inditos, que le editar Biblioteca Nueva, cuando haya papel . ngel Cruz Rueda Madrid, 9 de octubre de 1947 Querido amigo Jos Capilla: El 15 de noviembre se represent en el teatro de mi Instituto por aficionados que soli citaron este favor, la triloga Lo Invisible. Por la tarde de aquel sbado fue el ensayo gene ral, al que asisti el maestro, gil y afable con todos. Le acompa su sobrino Julio, y algu nos de la casa. Me dijeron que estuvo bien la funcin. Y, por ltimo, la sesin literaria de anteanoche en Radio -Madrid fue consagrada ntegra mente a Azorn. Primero, un actor del Espaol ley fragmentos escogidos, con fondos musi cales; despus intervine yo; luego, el doctor Maran. Aunque contribuye aquella al home naje de libreros y editores madrileos, nada tiene que ver con el concurso, al cual no concu rro. La Hemeroteca Municipal celebrar una Exposicin azoriniana, terminados los actos de ahora; para el lo me visitaron el Director, don Eulogio Varela y don Jos Garca Mercadal, quien, estos das, ha publicado otro tomo de Obras pretritas: Ante las candilejas. ngel Cruz Rueda Madrid, 8 de diciembre de 1947. Mi querido amigo don ngel: Me satisface grandemente que haga constar que hace treinta aos, un simple estu diante, que apenas contaba veinte aos de edad, consiguiera que se nombrase a Azorn hijo predilecto de Monvar y le fuera dedicada la calle que hoy lleva su nombre literario. La Corporacin, el Ayuntamiento, el Cabildo o como quiera denominarse el conjunto de cuantos administran al pueblo del maestro, ignoraban esto o, de ser malicioso, habra que pensar si pretendieron ocultar este honor que dignamente me enorgullece. En las memorias de X no hay tampoco recuerdo alguno para aquel estudiante que durante treinta y cinco aos le sigue con fidelidad y fervor, que ha librado batallas por hacer merecidos elogios de sus obras literarias y an justificar sus gestos polticos. Francamente, reconozco que no lo merezco; pero, caramba, menos lo merecen algunos seores que ah figuran. Jos Capilla Elda, 10 diciembre de 1947 138 Escritos de Jos Capilla sobre Azorn y Mir Mi querido amigo Jos Capilla: Acerca de sus quejas, no puedo, ni debo opinar; mas s que el maestro le quiere y siempre que charlamos de usted lo hace con deferencia. ngel Cruz Rueda Madrid, 1 1 de febrero de 1948 Querido amigo Jos Capilla: El 28 de abril me visit Ana Krause, profesora de espaol en Berkeley, devota de Azorn. Al anunciarme que se dispona a recorrer estas tierras, le escrib una tarjeta para usted. El maestro la recomend tambin a sus amigos de Elda y Monvar. El retrato de Azorn por Genaro Lahuerta, llama la atencin poderosamente en la actual Exposicin Nacional de Bel las Artes. ngel Cruz Rueda Madrid, 18 de mayo de 1948 Querido amigo don ngel: Hace un mes, tuve el gusto de conocer a la seorita o seora no le pregunt su esta do civil Ana Krause. Una tarde de lluvia, alrededor de las ocho, vino desde Monvar, acompaada de los dos hijos de don Francisco Navarro y en el coche de los mismos. Como no tena anunciada tal visita, me sorprend. Bajo la lluvia menuda, pero persisten te, le mostr el pueblo, charlamos mucho de usted y de Azorn y, al fin, fuimos a descan sar al Casino, pues la visita al Casino de sociedad , si lo hay, es un ritual para todo foras tero en los pueblos de Espaa. Ya, cerca de las diez de la noche regresaron a Monvar. Conservo una grata impresin de esta visita. Estos das he escrito un prlogo a instancias de un amigo 26 que va a publicar un libro titulado Cmo es Azorn Si consigue que se lo editen, ya tendr usted ocasin de conocerlo. Jos Capil la Elda, 16 de junio de 1948 26 Antonio Montoro, escritor paisano de Azorn 139 Julio A. Capilla Bellot Querido amigo Jos Capil la: La profesora Ana Krause, que me visit en despedida, vino encantada de usted, del seor Navarro y dems amigos. No es raro que se olvidara mi tarjeta, yendo con los hijos de don Francisco [Navarro]. Ya habr usted visto Con Cervantes (nmero 747 de la Coleccin Austral), desairado sin prlogo del autor, porque se perdieron dos que mand; y Con permiso de los cervan tistas, con mal papel y tinta maloliente. Acaso haya ledo usted tambin el nuevo tomo de las Memorias de Baraja, La intuicin y el estilo, menos ameno que los anteriores. ngel Cruz Rueda Madrid, 2 de julio de 1948 Mi querido amigo don ngel: He ledo algo: Con Cervantes y Con permiso de los cervantistas. Convengo con V. en cuanto a las deficiencias y descuidos editoriales de estos libros, los que no tienen discul pa. El segundo tiene el inters, adems del prlogo, las notas que V. le ha puesto y que, sin autoridad por mi parte, considero muy acertadas. Tambin he ledo La intuicin y el estilo de Baroja, siempre el mismo. Y quizs sea este su gran mrito en una poca de tanto guiol y versatilidad en el mundillo literario. Ha visto V. cuanto escritor consagrado por quin nos est descubriendo Informaciones, esa hoja de almanaque del periodismo de hoy Y con cunta pedantera dan consejos algunos de estos consagrados. Falta est haciendo un Clarn o quien escribiera un Charivari de estas cosas. Qu me dice del maestro Sabe si prepara algo nuevo Ya hace tiempo que no le he escrito. Me dicen que para ahorrarle energas y molestias, interviene ahora su esposa la correspondencia que se le dirige. Jos Capilla Elda, 24 de septiembre de 1948 Querido amigo don ngel: He tenido ocasin de examinar hasta el quinto tomo de las Obras Completas de Azorn y he ledo las notas prologales de V., as como los detalles bibliogrficos, trabajo el suyo muy meticuloso. No alcanzo por qu el maestro ha rebautizaclo algunos de sus libros, pues, a mi modesto entender, perdurar siempre el ttulo con que nacieron. Es natural, en esta baja lucha de la vida, que los eruditos le nieguen el agua y la sal 1 g.D Escritos de Jos Capillo sobre Azonn y Mir a Astrana Marn, ya que stos, con su presuncin de mximo sabedor de Shakespeare, Cervantes, Lope de Vega, etc., ha mostrado las fallas y camelos de prestigios consagra dos a la investigacin. Este Astrana Marn, seminarista recalentado, conserva resabio de dmino y da palmetazos a diestro y siniestro. Y ya sabe V. que es el de El estilo leproso y quien llam bobo a Azorn por proponer a Mir para la Academia. Jos Capilla Elda, 22 de diciembre de 1948 Querido amigo Jos Capilla: Al maestro no le visit desde hace unas semanas, porque est delicado de salud. Apenas sale y no le dejan levantarse a media noche. De vez en cuando le hablo por telfono y le doy referencias de V. Sus Obras Completas estn en espera de continuar se, a causa de las restricciones elctricas en las imprentas. Creo que le dije a V. que entregu el original completo del tomo IX y que he terminado el X, que entiendo ser el ltimo, por lo menos ahora. Wel que ha repasado V. con indulgencia para m los cinco primeros. Si echa V. [de] menos referencias a tales o cuales obras a El Clamor, por ejemplo no fu ma la culpa; no se trata de olvido mo, si no de deseo de Azorn, a quien leo todo antes de publicarse. As en otras cosas. El cambio de ttulos en los libros, fu su voluntad en Flix Vargas; y a propuesta ma en Superrealismo; que. .. no significa nada, salvo mejor opinin. ngel Cruz Rueda Madrid, 27 de diciembre de 1948 Querido amigo Jos Capilla: Manifest los recuerdos de V. a Azorn, por telfono por el que le hablo una o dos veces por semana y ayer personalmente. Haca tiempo que, por sus indisposiciones o las mas, no nos veamos. Ayer, digo, estuve una hora en su casa, hablando de mil cosas: est bien, dada su edad; no prepara libros, pues se cansa slo escribe iya es bastante! los artculos del ABC y los muy hermosos de La Prensa argentina, de los que poseo bastantes que me procur M. Aguilar, pues, al fin, se decide a editar el tomo IX de las Obras Completas que entregu en octubre y que hoy devolv ya para la imprenta, y segn dicen a fines de 1949 o primeros de 1950 el dcimo. Julio A. Capilla Bellot En cuanto a su pregunta confidencialmente que no. ste y otros extremos de la bio bibliografa los dejo a oscuras adrede lo cual no quiere decir que yo lo sepa todo; pero, s, hay muchas cosas que s y que, por voluntad propia o ruego ajeno, no he dicho (Ninguna, claro est, deshonrosa para el interesado). ngel Cruz Rueda Madrid, 18 de marzo de 1949 Querido amigo don ngel: Con admiracin, veo que V. va dando fin a las Obras Completas del maestro. Ser el dcimo el ltimo tomo Hay cierto paralelismo entre esta tarea editorial y la creadora, en cuanto a libros de Azorn, pues no es probable que salga libro alguno ms de su plu ma inmortal. Aunque es tan enigmtico este hombre.. . A la seorita Krause le escrib inci tndola a que vierta al espaol su libro sobre Azorn 27 . Creo que lo har. Ya habr ledo V. el libro reciente La esttica de Azorn por Manuel Granell. A m me ha gustado de veras este estudio, a pesar del filosofismo de su lxico. Tiene apreciaciones muy acertadas este azorinista a quien no tengo el gusto de conocer. Quisiera conocer la semblanza que de Azorn escribi Mariano de Cavia, la que motiv el artculo del primero, Conjuracin de seoras, La celebridad. Si no le cau sara a V. molestia prestarme el recorte, lo copiara y con toda diligencia se lo devolvera. Se ha destapado como novelista, ah, en Madrid, otro escritor de la ciudad apaci ble. Me refiero al poeta Antonio Montoro, de quien ha publicado Biblioteca Nueva la novela Agarista de Mantinea. Una hermosa novela, segn juicio privado de Azorn a su buen amigo Francisco Navarro. Jos Capi lla Elda, 8 de mayo de 1949 Querido amigo don ngel: Es doloroso que, al parecer, nuestro querido Azorn d por finalizada su labor litera ria. Yo creo que es ahora cuando, desasido de todo, podra darnos relevantes joyas de su pensar y sentir. Y no me resigno a creer que no lo haga. Con motivo de estas Pascuas, al felicitarle, le pido que nos d algn libro en 1950. 27 Azorn the lite philosopher by Anna Krause. 142 Escritos de Jos Capilla sobre Azorn y Mir Estos das me he visto sorprendido por la llegada de un ejemplar de la Revista Amrica que se publica en Bogot, correspondiente a septiembre ltimo, en la que repro ducen un trabajo mo sobre Mir que publiqu hace veinte aos 28 . No me lo explico como no sea obra de la buena voluntad de algn amigo mo que ande por aquellas tierras. Es curioso que un escrito tan ligero, haya motivado en ms de una ocasin que mi nombre figure en publicaciones americanas. Jos Capilla Elda, 29 de diciembre de 1949 Muy querido amigo Jos Capilla: Es V. un gran escritor, aunque no sea tan conocido como debiera; parte por las cir cunstancias que dificultan la publicidad, parte por su culpa, pereza o cosas de la vida. . . Con el maestro me comunico por telfono, ya que hace tiempo que no nos vemos: No le digo a V. . . . No ha querido leer en confidencia el libro de Jos Alfonso 29 que otros y yo le ofrecimos, y que no ha recibido, pues lo adquir y le escrib una postal al autor. El paisano de Azorn pudo darle ms atractivo; no est mal y, sin embargo, la intimidad es poca. ngel Cruz Rueda Madrid, 5 de abril de 1950 Mi querido amigo: Mis hijos vinieron encantados de la acogida que V. les dispens, un motivo ms que acrecienta mi gratitud hacia usted. No se atrevan a visitar a Azorn y si lo hicieron fue por que V. les anim. Segn me contaron, lo hallaron con aspecto de buena salud, cari oso y hasta locuaz. Conversaron sobre la vida y ambientes actuales de estos pueblos por l tan amados. Jos Capilla Elda, 10 de junio de 1950 28 El paisaje alicantino en la obra de Gabriel Mir. Elda, 1930. 29 Azorn ntimo, por Jos Alfonso. Coleccin La Nave, Madrid, 1950. Julio A. Capilla Bellot Querido amigo Jos Capi lla: Esta maana visit a Azorn y nos referimos afectuosamente a V. Est bien de salud y trabajador como siempre. Le llev un trabajo mo, extenso, acerca de El abuelo de Azorn, despus de haber ledo su libro de respuesta a Talleyrand y unas notas manuscri tas a cierto tomo de Historia por Robertson. Se publicar, si se publica, de aqu a ocho o diez meses. ngel Cruz Rueda Madrid, 7 de agosto de 1950 Querido amigo Jos Capil la: Al maestro lo visit hace poco lo hago de tarde en tarde, aunque doa Julia me pide lo contrario y siempre hablamos de V. Est bien de salud, si bien se le notan ya los aos, no slo en su delgadez. Se distrae con el cine y tiene publicados veintitantos artculos, por lo menos. V. Escrib public El escritor descubre el cine en Informaciones del 7, en con fidencia, no le agrad por la manera de decirlo. ngel Cruz Rueda Madrid, 20 de noviembre de 1950 Mi querido amigo don ngel: No consigo explicarme la preocupacin que el querido Azorn tiene ahora por el cine, hasta el extremo que me asombra, de saberse toda la retahila de estrellas que fulguran en ese firmamento de`calul6dede los Lumire, lo que considero ms engorroso que apren der la de los reyes godos de nuestra Historia. Tal vez, pueda explicarse por su insaciable curiosidad ante toda manifestacin artstica, la acusada tendencia a la plasticidad en su obra literaria y ese constante afn de transfundir esencias de lo clsico a lo moderno. Creo que pondera en extremo las calidades estticas del arte cinematogrfico, hijo del mecani cismo e industrialismo modernos ms que de Minerva y Apolo. Y es lstima que por el cine nos veamos privados sus lectores de nuevos tesoros de su sensibilidad exquisita. Habra mucho que hablar y escribir sobre este curioso fenmeno de la senectud del maes tro, y no quiero pecar de pedante, dada mi penuria intelectual y literaria para profundi zar en el mismo. Jos Capil la Elda, 18 de enero de 1951 Escritos de Jos Capilla sobre Azorin y Mir Muy querido amigo Jos Capilla: Al maestro le visito, de tarde en tarde; mas hablamos con frecuencia por telfono. Se obstina en l levarme al cine lo que en circunstancias normales sera para mi un orgullo 30 y yo terco en no ir, porque creo que lo sabe V. no voy a ninguna parte, salvo excep ciones. De Literatura, poco. El nmero 29 de la Revista Nacional de Educacin (ltimo de 1950) public en catorce pginas, mi estudio acerca de El abuelo de Azorn, con ttulo absurdo que yo no puse: Realidad y fantasa en los personajes de Azorn. A Azorn, que estuvo delicado unos meses, lo veo mejor. Como La Prensa de Buenos Aires no se publica desde enero, slo escribe lo del ABC. No quiere escribir libros; el ms reciente, en Austral, La cabeza de Castilla, o sea, el Burgos, oteado ue yo tena en el tomo IX (indito an) de las Obras Completas. ngel Cruz Rueda Madrid, 26 de marzo de 1951 Mi querido amigo Jos Capilla: El Crisolito de La Ruta de Don Ouijote 3 ] sali bien, y mal encuadernado. Correg las pruebas, etc. y me regalaron. . . un ejemplar! (Ay, si no fuese por Azorn). Por Azorn har un prologuito para Mara Fontn en Novelas y Cuentos; y en marzo se estrenar en el tea tro de mi Instituto 32 La Fiesta, paso de comedia mo inspirado en Los Pueblos. Ya ensayan una veintena de alumnas y un profesor, amn de un monlogo, tambin salido de estas manos pecadoras. No asistir. ngel Cruz Rueda Madrid, 27 de diciembre de 1951 Mi querido amigo don ngel: Qu habr V. pensado por mi falta de corresponden cia a sus ltimos escritos... Aunque nada grave en el curso de mi vida, una serie de con trariedades y azacaneos me han distrado del grato deber de contestar cartas de amigos tan estimados y queridos como V., sin duda por no transmitirles el bacilo que desde hace 30 Don ngel estaba muy deprimido desde el fallecimiento de su esposa, doa Mara Hesles Rodrguez, ocu rrido el 29 de junio de 1949. 31 Serie extra de Crisol dedicada por Agui lar S. A. como felicitacin de Navidad y Ao Nuevo. 32 ngel Cruz Rueda era Director del Instituto Lope de Vega de Madrid Julio A. Capilla Bellot algn tiempo tiene deprimido mi nimo y entibiado mi entusiasmo por las cosas literarias. Indudablemente, con los aos y los reveses que nos trae la experiencia, viene, a quien padecemos alguna sensibilidad, el desasimiento de todo, incluso la inapetencia de los goces espirituales como son los artsticos. En este juego que es la vida, me veo como un jugador perdidoso que no ha acertado ni una postura y con el caudal de posibilidades que son los aos casi agotados. Esta crisis espiritual le explicar y atenuar la falta que hoy pretendo reparar con estas letras que, si torpes e insulsas, sean constancia de mi afecto y aprecio al querido y buen amigo don ngel. Jos Capilla Elda, 5 de noviembre de 1952 Querido amigo don ngel : Aun cuando saba por V. que Azorn se halla delicado y cansado de escribir, me cau s verdadera sorpresa la noticia propalada por los diarios y la radio de su retirada de la actividad literaria. Ya habr ledo V. los muchos y variados comentarios suscitados. Yo, desde luego, no creo que deje de escribir. Tal vez, no publique en la prensa y sea ahora cuando nos d sus mejores libros. Aqu hay algo raro; como en todas las actitudes de este hombre, siempre tan hermtico y desconcertante. Jos Capilla Elda, 22 de diciembre de 1952 Mi querido amigo Jos Capilla: Excesivamente discreta mi informacin como el que apenas supo, al principio, por Azorn. As es que, muy en confidencia, parece que ABC se port mal; me visit, en nom bre de este diario, el Subdirector Luis Calvo; mas el maestro no acept homenaje ni el pri mer recibo no s de cuanto de jubilacin. La Prensa del Movimiento y en especial Arriba, quiere llevrselo: le entregan un cheque en blanco. Deseo que pase el tiempo: por que, si no, la que se va a armar. . . ! Ayer firm contrato editorial de Mujeres de Azorn, ya en la Censura. Me dijo Ruiz Castil lo (Miguel) que iba a publicar el libro de Montoro 33 con prlogo de V. y algo ao 33 Cmo es Azorn 1 /-6 Escritos de Jos Capilla sobre Azorn y Mir dido por Azorn. Llevar el libro fotografas; supongo que las treinta y tantas que, el 9 de enero le hizo en su casa un gran aficionado amigo de mi mdico el Dr. Dantn Gal lego. ngel Cruz Rueda Madrid, 7 de febrero de 1953 Mi querido amigo: Mi ms expresivas gracias por cuanto me comunicaba en su primera del proceso de la llamada retirada del maestro Azorn, cuyo desenlace o solucin espero con ver dadera curiosidad. A pesar de todo, Azorn debe mucho a ABC, aun cuando hoy un tanto despistado en colaboraciones de este peridico, no haya sabido retener al ms prestigioso de sus colaboradores. No considero probable que su firma aparezca en otros peridicos, lo que significara una equivocacin ms de Azorn. Creo que lo mejor sera que su pluma se diera por entero al libro, donde tanto bueno puede darnos, en actividad puramente literaria, lejos de toda aparente colaboracin poltica, que siem pre fueron en perjuicio de su elevada personalidad literaria. En fin, el tiempo creo que ya tarde nos dir a dnde va este nuestro querido Azorn que nos est resultando un meterruidos, a pesar de l mismo. Jos Capilla Elda, 27 de febrero de 1953 Mi querido amigo: Me ha causado una excelente impresin su libro, Mujeres de Azorn. Con cario y minucioso conocimiento de cuanto ha escrito Azorn, ha elaborado V. un censo amensi mo de las figuras femeninas en la vasta produccin literaria del querido y admirado maes tro, destacando con glosas y comentarios pulcros cada figura. Le felicito cordialmente por labor tan acertada y por el xito que aade a su ya fecundo azorinismo. En Alicante, la revista Sigenza 34 , que V. ya conoce por Mi hermano Pepito, gra ciosa ocurrencia de Amparo 35 est promoviendo un homenaje a Azorn, de Alicante y pueblos de su provincia. No s si habr llegado ya a conocimiento del maestro, de quien se dice que va a ir a Monvar a pasar una temporada, lo que no creo lleve a cabo. 34 Revista literaria mensual dirigida por don Vicente Ramos. 35 Amparo Martnez Ruiz, hermana de Azorn. 147 Julio A. Capilla Bello! Tiene V. toda la autoridad para amonestarme por no haber escrito todava mi pro yectado Azorn, paso a paso. Ya estara escrito de haber tenido un periodo de tran qui l idad, sin preocupaciones, en mi vida, para concretar toda mi atencin en esta tarea, que no podra realizar con suspensiones y quebrantos de nimo. No puedo escribir algo que merezca leerse sin polarizar mi mente, en tensin constante por el objeto de trabajo. Tendra que abandonar las perentorias obligaciones de cada da, las que se llevan todo mi tiempo, y aun es poco para cuanto exige esta ruta de galeote, ya que Dios no ha querido darme fortuna en mis empresas. Mas, no pierdo la esperanza en poder escribirlo. Jos Capil la Elda, 4 de mayo de 1953 Mi querido amigo Jos Capilla: El 27 visit al maestro, con quien suelo hablar hoy mismo por telfono. Est cal la do lo de su colaboracin de Prensa. Coincidido con V., por cario, en que fuera mejor no variar, aunque por la animadversin parece del joven Director estara justificado. Mas Azorn trabaja. En qu. . . Algo de glosas poticas con destino a la Radio y no s si en algn libro; pero trabajar, trabaja. Prueba, que ayer no ley en el ABC lo del homenaje de Yecla, porque no tuvo tiempo. Ms por La Voluntad (1902), debiera ser por Antonio Azorn (1903). ngel Cruz Rueda Madrid, 5 de abril de 1953 Querido amigo Jos Capilla: Le su prlogo al libro de Montoro Cmo es Azorn, a quien felicit por ste, con testndole, puntualmente, a sus reparos; me agrad su artculo reciente en Revista 36 , en donde nombro a V. justicieramente; y no he suprimido su nombre, ni mi gratitud en la Bibliografa de la Obras Selectas del maestro que estn acabando de imprimir (segun da edicin). ngel Cruz Rueda Madrid, 5 de agosto de 1953 36 Revista Semanario de informacin. artes y letras Barcelona 5-8-53 48 Escritos de Jos Capilla sobre Azorn y Mir Mi querido amigo don ngel: Ya leera los artculos de Amparo Martnez en ABC. Le publicaron cuatro o cinco y ya no le han querido admitir ms. El ltimo que mand se lo devolvieron porque en el archi vo de ABC ya no quedaban fotos de Azorn que publicar. Tiene gracia, verdad Jos Capilla Elda, 28 de abril de 1955 Mi querido amigo: Publicado en la coleccin Ms all de los Sucesores de Afrodisio Aguado selec cin por Mercadal de los primeros artculos azorinianos referentes al Cine El efmero cine, Ciertos clsicos no publicado an por Biblioteca Nueva en la mitad de otro libro que le form a don Jos y que el maestro deseaba. Ni uno ni otro, digo, son inditos. Y gracias por hacer adquirido V. los ocho tomos restantes (Obras Completas), creo que le regal el primero de las Obras Completas de Azorn. No son completas; pero no tengo la culpa: continuar formndolas, aunque sea para m. El IX era una joya, y lo estropearon con supresiones por completo. ngel Cruz Rueda Madrid, 1 de mayo de 1955 Mi querido amigo don ngel: Nada nuevo en mi vida ni en mi circunstancia. Solamente, que ya empieza uno a observar que la vida se acaba, lo que ya es envejecer. Menos entusiasmos y conceder poca importancia a lo que va pasando. Adquir Efmero cine y El Pasado, ttulo este ltimo que sin duda ha sustitudo al de Ciertos Clsicos que V. pusiera. Tambin por el ABC segu el accidente sufrido por el maestro, con plena confianza en que se repondra como ha sucedido. Tengo para m que llegar a centenario. Pero no me resigno a dar por acabado al escritor, como la generalidad de la gente de letras lo considera. Creo que en esta ltima etapa de su vida ha de sorprendernos con alguna joya literaria. No quedamos en que Azorn no pue 149 Julio A. Capilla Bellot de vivir sin escribir Luego, si vive, ha de ser porque escriba. Algo de esto ha de saber V., pero se calla. Ya habr visto V. el libro Azorn, pequeo filsofo, traduccin del escrito en ingls por Ana Krause, como tambin Vida y Obra de Gabriel Mir por el poeta alicantino Vicente Ramos. Jos Capilla Elda, 16 de diciembre de 1955 Mi querido amigo don Jos Capilla: Visit a Azorn hace unos das y lo encontr muy bien. Sentado como se hallaba, daba la impresin normal. Desde el accidente me inform a diario y, luego, casi a diario; pero no quise molestarle. Hablamos de V, como debe hablarse. Y es posible que acierte V. en lo de que nos sorprenda no por ahora con alguna joya literaria. ngel Cruz Rueda Madrid, 30 de diciembre de 1955 Mi querido amigo don Angel: De lecturas nuevas, nada. Durante esta convalecencia 37 he reledo algunos de los pri meros libros de Azorn, que tena casi olvidados. Qu, cundo el querido Azorn nos va a dar ese nuevo libro Presiento que esta primavera prxima. Qu dice V. de la traduccin al castellano de Azorn, pequeo filsofo de Ana Krause A mi modesto entender, creo que ha calado bastante en el espritu de Azorn. Lo que no veo claro:, no conozco al filsofo -es la analoga que pueda tener con Santayana. Desde luego es admirable que las gentes de fuera estudien a nuestro escritor con tanto fer vor y entusiasmo. Jos Capilla Elda, 31 de enero de 1956 37 Una grave afeccin bronquial afect a su salud. 150 Escritos de Jos Capillo sobre Azorn y Mir Muy querido amigo: Qu por qu no le escribo Esto es lo que pensaba yo: por qu no escribir Jose Capilla As que no s qu decirle. Acaso por la depresin de mi nimo, desde hace bas tante tiempo. . . o por la prdida de carta ma o de V.... No s, y por si es ma la culpa que puede serlo; yo pecador!... pero siempre querindole y recordndole. Y el maestro Demasiado bien para quien en 1957 puede cumplir ochenta y cuatro. Le suelo ver de mes en mes, y hablar por telfono para informarme de su salud casi todos los domingos. Sale poco y acompaado. Contina leyendo, pero no escribe; no se siente con fuerzas para ello. ngel Cruz Rueda Madrid, 18 de diciembre de 1956 151 bte_ e e -P--r g 7 / rz Die 6 e c/e , C, y 7 c e /v ce Escritos de Jos Capilla sobre Azorn y Mir DEL EPISTOLARIO Jos CAPILLA- GABRIEL MIRO GABRIEL PAIR6 A 10, 1, -. C417 1 ttd , A 4.. -V A-Jf l 4-47 . 4.1 , (k.ric-ca , 144L c ) C.,..X4 t y.t.,......r,9 2 A 7 - . 7 N )0 p...4 r *4 LAAA p..); E-1 , eLAA d tou.. 1 -1 , : 4 7 , 7 7 }-4 , I 1 . -0 ) fr id 4-.Z. ; 2 El n 5 49 del semanario Idella (15-1-1927) public un artculo de su director Jos Capilla, El obispo leproso y su autor, trabajo ilustrado con un dibujo del joven Oscar Porta. En l, la efigie de Gabriel Mir se proyecta sobre la sombra de una calavera. Es de supo ner que Porta le aclarase a Mir el enigma de su dibujo que, sin intencin, result pre monitorio, desgraciadamente. Transcripcin: A Vd. Sr Capilla, y a Oscar Porta y a toda la casa de !de/la muchas gracias por sus generosi dades. Les saluda cordialmente Gabriel Mir 17-1-27 No quise yo que mi Oleza fuese tan apacible ni que se me pudieran acomodar las palabras del xito; no entiendo el fondo del dibujo. Y djenme ustedes que teniendo ya un nieto, toda va me crea lejos de la fita de los cincuenta. Me quedan, si Dios quiere, para llegar, tres aos largos; es decir unos diez volmenes de la coleccin. Julio A. Capilla Bellot 01 111 ),V4,L, L,1 0~4d, ))411..... e n 1.1 5 .~ pe y, 7 ti d ,x4 ti.LE4.t.14 A (4....~ 1^ A1-1 , Cyjj21_, 44 2, (.414.4 , A , ..4 1,149,vi t. XXX. Ez , L 7 a.r . v v0., 4.&^ 4ZAL R 41-41 s CH+ Lka.421.117. 1 1- c , LV tt .1 4 ,, ,1~144s P 4-1 , 1.A. 51 t , 4.4 . 4... eh 4.,47 4Ly- v o..3.04,~ 3 -ss 70 A1 , 0 4 . ;4:1 rUIL4tii~4,ov A41. 47 . 44 s / 6 . c.,k,:uA4A,14,t; Transcripcin: Mis queridos amigos de de/la otra vez gracias por sus generosidades periodsticas para mi nombre y mi obra. No Ileg a tiempo de enviarles copia enmendada de un cuento acomo dado para Corpus, cuento muy conocido de XXX. Esa triple incgnita me parece que transpa renta a Enrique Puigcerver. Pronto pasar por esa estacin de Elda. No s con exactitud el da. Tampoco lo dir. La molestia ferroviaria es la unica que no puede ser perdonada. Yo no la infe rire a tan excelentes camaradas. Les abraza cordialmente Gabriel Mir 1 8 -VI -27 154 Escritos de Jos Capilla sobre Azorn y Mir TMRJETFS POSTFSL / 444-4/ CAN~CI / 4 .+4 p ,971 1. /1/.0 /1 ( 44 - (1 ,4L Y .! h 1 -41~. 4.4 71 . via . A 1474 -a) , LA 4 14 0.4 , V 1.4 j LA. j A.... (My al 7 / L.:/ f 4441 7 .41 114 M 4. Ci4 4 .t:t41444; ,05,10 c N .. . Transcripcin:: Polop 1-X1-27 Querido Capilla: les envi las cuartillas que ustedes me pidieron. No s si llegaron a tiempo. Les esper el domingo, 28. Ahora estoy en vsperas de un viaje a Madrid. No les digo el da de mi paso por Elda; quizs me marche con el expreso de Valencia pasando por Alcoy. Todo depende de mis enfermos. Saludos de su afecmo. Gabriel Mir Las cuartillas enviadas por Mir corresponden a la colaboracin que bajo el ttulo de Seores de 1800 public Idella el 3 de septiembre de 1927. Con ciertas modificaciones, form parte del libro de Miro Aos y Leguas con el ttulo de Grandes Seores, publicado en 1928 por Biblioteca Nueva -Madrid. 155 Julio A. Capilla Bellot Transcripcin: Paseo del Prado 20. Sr D. Jos Capilla Director de Idella MINISTERIO OS INSTRUCCION PUBLICA Y SELLAS ARTES CONCURSOS NCiONALS . 4. 9. Pjb4v ,L4 ).taz. , 1 ,, /4/ Cgla.M.A.... 5 + . 4+0.4 Ama...! 4 tic 1.A4.4 7 aft 1 Ifim c^. (-4 4.1 L4.. AnU 14. 7 ). 4(.41.40 1.44i S. 7 .1. tn.40.,.. 44 4RA A 1 .11.0 s4 p . 0.14 4#441,;. 4 -1.4 44 /fr Z1AA , As h s /NUM. 14 , rt e t r I ;^ 1.4 / . 11; iek Ltn4 4 7 4 In (41 444.4447 2. 012110. onor0 Querido amigo: muchas gracias por su carta. Mi mediacin en el concurso de Literatura ha sido ineficaz para nuestro amigo Montoroi y para otro escritor de la provincia que reside en Madrid. El jurado acord por unanimidad adjudicar los premios a Dmaso Alonso y Miguel Artigas. Ya he redactado mi informe, y el Ministro firmar de un momento a otro. Nada es posible, sino la confianza para otros concursos. Quiera Dios que pueda salir yo pronto de esta jaula. Ayer recib la coleccin de Oscar Porta 2 . Agradezco su recuerdo. Mis saludos a todos. Suyo cordialmente Gabriel Mir 16 -XII -27 1 Gabriel Mir era, por aquel entonces, Secretario de los Concursos Nacionales del Ministerio de Instruccin Pblica y Bellas Artes, cargo que desempe hasta su muerte. 2 Oscar Porta, dibujante, edit dos opsculos con dibujos y caricaturas suyas. Tip. Moderna Elda 1927. 156 Escritos de Jos Capilla sobre Azorn y Mir miNISTERIO DE INSTRUCCION PUBLICA Y BELLAS ARTES CorveuRSOS NAGIONALES ) ,ittitL 5 J+, t , / OZAI 14 , r ,1- Lti io Ad ,G A LA oJ 7 Fi t., rd , 1 ;17 c.., 7 yi M.o ,:, 7 LA AS2LAAj f rV 4 7 2, yja,..;JA ta , -(rA . 1- g.4AASA UAU A1 1 . 1 -( r e- , -. a, ci AS2 L, JA, 41 .1A, re-. 1 f. /fr . jiaj,#,G, y( 1-4 1i nAAAA , ..t Anp 1,_r 7 7 AAA 4 p 7 - , tu , Transcripcin: Sr. D. Jos Capilla Director de Idella Distinguido amigo: Dos aos de vida periodstica, sin servidumbre, en un lugar de Espaa, son ya dos aos de edad heroica que significan haber venido a este mundo con buena herencia de salud. Dios y los hombres se la conserven. Pocos das pasan sin nacer peri dicos y revistas que no pueden resistir el fro y el calor de la intemperie y en seguida acaban. De modo que el cli ma interior de ese pueblo le ha de ser magnfico. No cansa nada ms a los hom bres que el entusiasmo y, entre todos los entusiasmos, el ajeno. No se ago ta el de ustedes por Idella ni se fas tidia Elda por el de ustedes sino que lo acoge, se lo incorpora. Segundo mila gro de temperatura. Les felicito cordialmente desen doles que, viviendo mucho, no lleguen nunca a viejos. Gabriel Mir 19-1-28 Escrib a usted y a Porta y a Montoro y en mis cartas ya consigna ba mi nuevo domicilio: Paseo del Prado, 20. Es que no las han recibido uste des 157 Escritos de Jos Copilla sobre Azorin y Mir Jos Capilla BIBLIOGRAFA ESCRITOS SOBRE AZORIN PUBLICADOS: AZORN; LOS PUEBLOS -n 2 1 Monvar 11 de febrero de 1917 (L. Giaco -seudnimo uti li zado por J. Capi l la) CALLE DE AZORN; LOS PUEBLOS nP5 Monvar, 11 de marzo de 1917. MONVAR HONRA A SU ILUSTRE HIJO AZORN; LOS PUEBLOS N 6 Monvar, 1 8 de mar zo de 1917. HOMENAJE A AZORN Los Pueblos n 7 Monvar, 25 de marzo de 1917 PI Y MARGALL Y AZORN; EL LUCHADOR Alicante, 13 de noviembre de 1923. LA INQUIETUD DE AZORN; RENOVACIN n 2 105, Monvar, 12 de junio de 1927. EL PASADO HOMENAJE A AZORN Y EL ATENEO: IDELLA n 2 76 Elda, 23 de julio de 1927. AZORN, EN LA CRIPTA DE POMBO; IDELLA n 92 Elda, 19 de noviembre de 1927. AZORN EN EL TEATRO, ES DISCUTIDO, CENSURADO, APLAUDIDO. . LUEGO COMIENZA A TRIUNFAR; IDELLA n 9 4. Elda, 3 de diciembre de 1927. Suplemento literario de IDELLA dedicado a Azorn; IDELLA n 2 189 Elda, 1 de febrero de 1930. Direccin y notas de Jos Capilla. AZORN Y LA TIERRA ALICANTINA; IDELLA n 2 186. Elda 11 de febrero de 1930. ANCDOTA Y CATEGORA DE AZORN; EL LUCHADOR. Alicante, 4 de abril de 1932. UNA POSTAL DE AZORN; ALBOR n 2 Elda -septiembre de 1934 AZORN Y MONVAR; EL ESPAOL n 63. Madrid, 8 de enero de 1 944. ELDA Y AZORN glosa; DAHELLOS Elda, diciembre de 1950. HABLAN LOS LIBROS DE AZORN 1 ; SIGENZA n 2 4. Alicante, febrero -marzo 1953. HOMENAJE A AZORN, El escritor nos dice; Jos Capilla Beltrn SIGENZA n 2 5. Alicante, abril de 1953. 1 Publicado tambin en EL COLOMBIANO LITERARIO de Medelln (Colombia) el 4 de marzo de 1962. Julio A. Capilla Bellot LA TIERRA NATIVA DE AZORN; REVISTA, n 68 Nmero extraorDlnario de homenaje AZORN EN SUS 80 AOS Barcelona, julio agosto, 1953. ELDA Y AZORN; ALBORADA n 6 Elda, septiembre de 1960. MISCELNEA DEL VALLE DE ELDA Y PETREL; ALBORADA, n 7. Elda, septiembre de 1961 . AZORLN, DE SU LEVANTE A CASTILLA; AZOR, n 7. Barcelona, mayo -junio de 1962. ESCRITOS DE JOS CAPILLA SOBRE GABRIEL MIR: EL OBISPO LEPROSO Y SU AUTOR; IDELLA n 49. Elda, 15 de enero de 1927. EL PAISAJE ALICANTINO EN LA OBRA DE GABRIEL MIR; Tipografa Moderna. Elda, 1930. LA COMARCA DE GABRIEL MIR O LA MARINA; ALBOR, n 1 . Elda, septiembre de 1933. SIGENZA. Alicante, 27 de mayo de 1945. CONSTANCIA EN EL HOMENAJE A GABRIEL MIR (Biografa sinptica); ALBOR n 1 Elda, septiembre de 1934. EL PAISAJE NATAL EN LA OBRA DE GABRIEL MIR 2 ; REVISTA DE AMRICA, n 57. Bogot (Colombia), septiembre 1949. IMPERATIVOS DE AMOR A GABRIEL MIR; DAHELLOS. Elda, junio de 1950. CITAS Y REFERENCIAS SOBRE JOS CAPILLA EN PUBLICACIONES: ALFONSO VIDAL, Jos; AZOR1N (De su vida y de su obra). Cuadernos de Cultura -Valencia 1931 (pginas 4 y 15). ATENEO LITERARIO DE YECLA; CATLOGO DE LA EXPOSICIN AZORN Y YECLA Yecla 1990. B -Artculos de peridicos (pgina 28). 6 -Capilla Beltrn, Jos: AZORIN, Y MONVAR. Influencia de Yecla en la vida y obra del autor, en El Espaol, Madrid 8 de enero de1944. 7 -Capilla Beltrn, Jos: AZORLN, DE SU LEVANTE A CASTILLA en AZOR, Barcelona mayo -junio 1962. BAZN LPEZ, Jos Luis; TRES DIRECTORES Y UN PERIDICO, IDELLA. Revista Moros y Cristianos Elda, junio 1989. C. RAND, Marguerite; CASTILLA EN AZORN. Edit. por Revista Occidente Madrid,1956. (Pgina 742) Capilla Beltrn, Jos: AZORLN Y MONVAR - El Espaol, Madrid 8 de enero 1944. CAPILLA BELLOT, J. A,; RETAZOS DE LA HISTORIA DE UN PERIDICO PUEBLERINO: IDELLA. Revista ALBORADA n 32 - Elda 1985 CRUZ RUEDA, ngel; AZORLN OBRAS SELECTAS. Biblioteca Nueva Madrid, 1943 2 Se trata del mismo ensayo EL PAISAJE ALICANTINO EN LA OBRA DE GABRIEL MIR. Escritos de Jos Capilla sobre Azorn y Mir Semblanza de AZORN (pgina29) Bibliografa (pgina 1504) Estudios acerca de AZORN: Capilla Beltrn. Jos suplemento literario de IDELLA, semanario de Elda, 1 febrero 1 930 (pgina 1507). Coleccionistas: (pgina 1509). AZORN OBRAS COMPLETAS Tomo I. M. Aguilar, Editor -Madrid 1947. Introduccin, notas preliminares, bibliografa y ordenacin por NGEL CRUZ RUEDA, A Jos Capil la Beltrn, se le cita en las pginas XIX,CVI y CVI II. AZORN - EL ARTISTA Y EL ESTILO. M. Aguilar, Editor -Madrid 1946. Coleccin Crisol. Ensayos coleccionados, ordenados y precedidos de nuevo estudio acerca de la vida y obra de Azorn por NGEL CRUZ RUEDA. En Pequea biografa de Azorn cita a Jos Capilla en la pgina 36, referencia al primer homeneja de Monvar a Azorn. CRUZ RUEDA, ngel. AZORN Jos Martnez Ruiz por Werner Mulertt. Versin directa, adi ciones y correccin de los catedrticos espaoles Juan Carandell Pericay y ngel Cruz Rueda. Editorial Biblioteca Nueva - Madrid 1930. En APNDICE 1 2 (pgina 2401 hace referencia al suplemento literario dedicado a Azorn, por el semanario IDELLA, bajo la direccin y notas de Jos Capilla. GALINDO, Vicente; NOTICIAS DEL SEMANARIO PROA DE 1935. Semanario Valle de Elda - Elda 1981 . En el artculo se hace mencin del semanario IDELLA, apoltico, y a su direc tor Jos Capilla. GAMALLO FIERROS, D.; HACIA UNA BIBLIOGRAFA CRONOLGICA EN TORNO A LA LETRA Y EL ESPRITU DE AZORN. Direccin General de Archivos y Bibliotecas. (pgina 34)-1930-1 de febrero. Jos Capilla Beltrn: Bibliografa de Azorn, en el suplemento lite rario que, con abundancia de artculos, retratos y caricaturas del escritor, se public en el nmero 89 (ao V) del semanario IDELLA, de Elda. (pgina 45) -1944- Azorn y Monvar, en el n 2 63 de El Espaol, de Madrid. (pgina 61) -1953 - Jos Capilla Bertrn (sic). La tierra nativa de Azorn 3 . GARCA MERCADAL, Jos; AZORN - Biografa ilustrada. Ediciones Destino -Barcelona 1967. ndice cronolgico (pgina 146) ao 1917. Fundacin del semanario Los Pueblos en Monvar bajo la direccin de Jos Capilla y homenaje a Azorn. GRANJEL, Luis S.; RETRATO DE AZORN. Ediciones Guadarrama, Madrid 1958. Bibliografa crtica (pgina 3111. Capilla Beltrn, Jos: La tierra nativa de Azorn REVISTA, II, 68; Barcelona 1 953 H. ABBOT, James; AZORN Y FRANCIA. Seminarios y Ediciones - Madrid 1973. HORA H. (Pgina 103) Cita la catalogacin de los escritos de la primera poca de Azorn efectua da por Jos Capilla. 3 Artculo publicado en REVISTA -semanario de informacin, artes y letras- Semana del 30 de ulio al 5 de agosto de 1953 n 2 68, Barcelona- AZORN EN SU 80 AOS. - Nmero extraordinario de homenaje. 1 Julio A. Capilla Bello HEMEROTECA MUNICIPAL DE MADRID; AZORLN (1873-1947). Homenaje de la Hemeroteca Municipal de Madrid. ADDENDA - (pgina 62) Capilla J.: Azorn y Monvar. El Espaol, Madrid 1944, nm. 63. INTITUTO DE ESTUDIOS ALICANTINOS; I.E.A. Diputacin Provincial de Alicante. III Asamblea Comarcal de Escritores. HOMENAJE A AZORIN Ponencias y cumunicaciones - Monvar 1978 (Pgina 59) Miguel Martnez Mena hace referencia a Jos Capilla a relatar una ancdota sobre Sogorb, el amigo de Azorn. INMAN FOX, E.; AZORIN - GUIA DE LA OBRA COMPLETA. Editorial Castalia - Madrid 1 992 (pgina 294) Epistolario: orientacin. Jos Capil la Beltran. Elda y Azorn en ALBORADA, Elda; Ayuntamiento de Elda 1978 (se reproduce una carta de Azorn al autor. (pgina 295) se citan varias cartas. BIBLIOGRAFIA SOBRE LA VIDA Y OBRA DE AZORIN (pgina 297). Cita a Jos Capi l la entre los bibligrafos de Azorn. (pgina 338) Capil la Bertrn, Jos. Azorn y Monvar El Espaol (8 enero 1944). Bibliografa de Azorn - IDELLA suplemento literario, n 9 189 (1 de febrero 1930) (Contiene una abundancia (sic) de artculos, retratos y caricaturas). LOBOS PORTO, Nicolas R; AZORIN. Crdoba (Argentina) 1939 (pgina 52) Cita el orden cro nolgico que hizo de la obra de Azorn el periodista Jos Capilla en el nmero extraordi nario de IDELLA dedicado al escritor de Monvar. MARTINEZ CACHERO, Jos Mg; CINCUENTA REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS ESPAOLAS SOBRE AZORIN EN LA DECADA DE LOS CUARENTA. Anales Azorinianos N 2 1 . 1983 1984. Casa -Museo AZORIN - Monvar (pgina 32) Cita a Jos Capil la (pgina 40) Azorn-comentado (artculos). Entre las contribuciones a la biografa de Azorn, cita a Jos Capilla. AZORIN Y MONOVAR.. . (El Espaol) Madrid 8-1-44. MARTINEZ RUIZ, Amparo; SUGERENCIAS. Diario ABC, Madrid 12 de junio de 1954. La auto ra del artculo dedica unas frases resaltando el azorinismo de Jos Capilla. MONTORO SANCHIZ, Antonio; COMO ES AZORIN Biblioteca Nueva - Madrid, 1953. El autor cita a Jos Capilla en las pginas 106-152-157-160-238-290-291 y 296. MARTINEZ MENA, Miguel; ELDA DURANTE EL PRIMER TERCIO DEL SIGLO XX. Elda, en cua tro vuelos (pginas 79 y 81). Alusin a la actividad literaria de Jos Capilla. NAVARRO PASTOR, Alberto; PUBLICACIONES PERIODICAS ELDENSES IDELLA - Semanario independiente. Valle de Elda -Semanario eldense- En este esbozo de la historia de IDE LLA se habla de la vocacin literaria de su director Jos Capilla y su influencia en la pro yeccin del semanario. NAVARRO PASTOR, A., LA PRENSA PERIDICA EN ELDA (1866-1992). Editado por el Instituto de Cultura JUAN GIL-ALBERT Diputacin Provincial de Alicante 1997. Numerosas refe renias y citas relativas a las publicaciones de IDELLA y ALBOR y a su director Jos Capi lla. ELDA DURANTE EL PRIMER TERCIO DEL SIGLO XX. Edit. por Caja de Ahorros de Alicante 162 Escritos de Jos Capillo sobre Azorn y Mir y Murcia - Elda 1980. Elda, en tres dcadas. (Pginas 25, 43, 45 y 46) - Referencias varias a la actividad literaria y periodstica de Jos Capilla en Elda. HISTORIA DE ELDA - Tomo II Siglo XX (1900-1939) Citas y referencias diversas en las pgi nas 40, 99, 167, 232 y 233 relativas a la actividad literaria y periodsticas de Jos Capilla. PAYA BERNABE, Jos; RECUADROS MONOVEROS. EL VEINAT - Boletn de informacin municipal. Monvar 31 marzo 1984. En torno al homenaje a Azorn en el ao 1917 en Monvar y la iniciativa de Jos Capilla con tal fin PAYA BERNABE, Jos; RECUADROS MONOVEROS. El Veinat - Monvar, 2 de junio de 1984. Sntesis de la actividad literaria de Jos Capilla. PORPETTA ROMAN, Antonio.- EL MUNDO SONORO DE GABRIEL MIR.- Eitado por la CAM Fundacin Caja del Mediterrneo Alicante 1996 (pgina 31 1 - Bibliografa). Cita a Jos Capilla como autor del Paisaje alicantino en la obra de Gabriel Mir. RAMOS, Vicente; VIDA Y OBRA DE GABRIEL MIRO Coleccin el Grifn - Volumen XXIV - Planeta Madrid, 1 955 (pgina 9). EL MUNDO DE GABRIEL MIRO Biblioteca Romnica Hispnica. Editorial Grados - Madrid, 1964. (pgina 160) Cita y aposti lla: Capil la J. El paisaje alicantino en la obra de Gabriel Mir - Elda, 1930, Pg. 27. (pgina 454) Bibliografa: Capi l la J. Mir o la Marina, en Sigenza, Alicante, mayo 1945. GABRIEL MIRO Instituto de Estudios Alicantinos. Diputacin Provincial de Alicante. Serie 1 - Nmero 48 - Alicante 1979. Libros y fol letos sobre Gabriel Mir. (pgina 382) Capil la Beltrn J. - El paisaje alicantino en la obra de Gabriel Mir - Tip. Moderna - Elda, 1930. RAMOS, Vicente; VIDA DE GABRIEL MIR. Editado por Caja de Ahorros del Mediterrneo e Instituto de Cultura Juan Gil-Albert. Diputacin Provincial de Alicante, 1996. Citas y refe rencias diversas en pginas 596, 597, 617, 622 y 647. RIO, Angel del y M. J. BERNARDETE; EL CONCEPTO CONTEMPORNEO DE ESPAA. Antologa de ensayos (1895-1931). Editorial Losada -Buenos Aires- 1946. GABRIEL MIRO (pgina 705). ESTUDIOS: J. Beltrn Capilla (sic) El paisaje alicantino en la obra de Gabriel Mir -Glosa. Elda, 1930. GABRIEL MIRO (1879-1930). VIDA Y OBRA -BIBLIOGRAFIA- ANTOLOGIA de la Revista Hispnica Moderna - Tomo II, n 5 3. Instituto de las Espaas en los Estados Unidos - New York - 1936. (pgina 22) Bibliografa - Estudios: Capilla Bletrn J. -El paisaje alicantino en la obra de Gabriel Mir -Elda Tip. Moderna 1930. RIOPEREZ Y MILA, Santiago; AZORIN INTEGRO Biblioteca Nueva - Madrid 1979. Bibliografa general. (pgina 711). Ensayos bibliogrficos de las obras de Azorn y de los estudios sobre las mismas. Bibliografa de Azorn, de Jos Capilla Beltrn, publicado en el sema nario Idella, de Elda, 1930 (Suplemento literario, correspondiente al 1 de febrero de dicho ao). Julio A. Capilla Bellot SAMPER ALCZAR, Joaqun. ELDA A TRAVS DE LA HISTORIA. Comunidad humana y territo rio. Seccin de publicaciones del Ayuntamiento de Elda. EMIDESA, 1995.- (pgina 147). Breve resea sobre el semanario IDELLA, la revista ALBOR y su director Jos Capil la. SANCHEZ, Mara Salud; ALBOR, 1933-1935. Revista ALBORADA n 2 31 - Elda, 1985 (pgi nas 32-37) Resea de la revista dirigida por Jos Capilla en los tres aos que se edit. UNA BIOGRAFIA QUE NO FUE POSIBLE; AZORIN PASO A PASO. Por Capil la, Julio A. ADE LLUM rt 2 1 Elda, 1987 JOSE CAPILLA, UN INCONDICIONAL DE AZORIN, EN EL OLVIDO. Clemente, Jos. LA VER DAD Diario de Alicante, 1 de abril 1986. GARCA LLOBREGAT, Ernesto.- DIVAGACIONES EN TORNO A UN CENTENARIO (Jos Capilla Beltrn, 1897-1963) Revista anual FIESTAS MAYORES, Elda septiembre 1997. PALABRAS SOBRE UN RECUERDO. Por Molla Montesinos, Francisco. VALLE DE ELDA Semanario de Elda, 5 de junio de 1965. LOS QUE INJUSTAMENTE VAMOS OLVIDANDO. Por Molla Montesinos, Francisco. ALBO RADA n 2 26. Revista de Elda, septiembre de 1980. JOSE CAPILLA. Por Montoro Pina, Francisco. MONOVAR Revista cultural de la Asociacin de Estudios Monoveros n 9 -RECORDANDO A JOSE CAPILLA- Monvar, diciembre de 1988. RAMOS, Vicente: MEMORIA DE JOS CAPILLA.- Diario Informacin de Alicante, 18 de sep tiembre de 1997. TEORIA DE ALICANTE; Jos Capilla Beltrn. Ramos Prez, Vicente INFORMACION Diario de Alicante, 30 de abril de 1954. ESCRITORES DEL SUROESTE; Jos Capilla Beltrn. IDEALIDAD n 2 62. Alicante, abril de 1963. JOSE CAPILLA. ALBORADA rig- 9. Elda, septiembre de 1963. DEL LIBRO LITERATURA ALICANTINA TOMO 1 (1839-1939); Jos Capilla (pginas 176-178 179-180 y 181). Editorial ALFAGUARA - Madrid -Barcelona. HOMBRES -HECHOS E IDEAS. (Ensayo crtico y bio-bibliogrfico) Premio AZORIN de la Literatura de la Excma. Diputacin Provincial de Alicante - 1965. EN LA MUERTE DE JOSE CAPILLA Equipo de redactores del VALLE DE ELDA. Elda, 16 de mayo de 1963. 6Z. APENDICE Escritos de Jos Capilla sobre Azorn y Mir Los ppEBLos ItlIPPETE 4 -111 ti! 911R PORTADAS DE NMEROS HOMENAJE AL MAESTRO AZORIN: Los PUEBLOS DE MONQVAR Y SUPLEMENTO LITERARIO DE DELLA DE ELDA Y PORTADA DE LA REVISTA ALBOR EDITADA EN ELDA. PUBLICACIONES QUE FUERON DIRIGIDAS POR JOS CAPILLA. 167 Julio A. Capilla Bellot POR JOS CAPILLA De madrugada, junto ai balcn, nuestra mesa de trabajo, sobre la que reposa la mquina de es c ,-ibir; junto a ella unos libros, unas papeletas con notas estadsticas. Nuestro aposento se halla sumi do en el silencio, tan fecundo para la meditacin. La luz, aunque tenue, del amanecer hace que des taquen en la penumbra de la habitacin la bianca hoja de papel, dispuesta en el rodido de la mqui na, y los albos circulitos de las teclas que esperan nuestras pulsaciones digitales. De ja estancia contigua llega hasta nosotros el tic -tac de un reloj de pliduio. El persistente tic -tac nos trae la imagen de la oscilacin pendular, el vaivn de la lenteja. El tiempo, procesin de das, de aos, de siglos, que percibe el ser humano por la sucesin de bichos vulgares o extraordinarios, tristes, alegres, fracasos o triunfos, que fi ja en la Historia su gran ojo avizor. la Cronologa. Con el clarear del da, otro ruiciito, rtmico y montono. viene a conjugarse con en el tic -tac del reloj; del desvn de la casa frontera sale el tac -tac del martillo sobre la horma, que ha emprendido el obrero vecino su diaria tarea. Por el tac -tac vemos en nuestra imaginacin al obrero, hbil y afanoso, sentado ante su mesita, los pares de hormas a un lado, los cortes y plantillas a otro; sobre la mesita, un potecito con tachuelas que, a puaditoscomo anises en manos de nio golo so, llevar a su boca, de donde, con destreza Elda, 1946 Revista MOROS Y CRISTIANO y rapidez, las ir sacando una a una para embastar el corte, acoplado a la horma, con su plantilla. Contribuyen a esta operacin del montado del zapato la boca, las manos y el martillito cuyas percusiones producen el caracterstico tac -tac ta rea, trabajo, simultneo con el tic-tactiernpo, tesn. Cual si fuera efecto de resonancias, se levantan los martillitos de mi mquina de escribir, obe dientes al tecleteo de mis dedos, y es el picotear de los tipos un tac -tac -tac discursivo, en cifra de Morse, estimulado por el pndulo y el martillo, el tiempo y el trabajo, en la vida de Elda. Tiempo (t), trabajo (t), triunfo (t)... No ves, lector, el martillito, el martillito del zapatero que salta y se incrusta en el tiempo, en el trabajo y en ei triunfo de un pueblo que supo hacer de una modesta villa de ayer la ciudad industrial, inquieta y populosa que es hoy Elda El tc-tac del martillito es el aliento de Elda, da industriosas. El martillito de zapatero, talismn en manos del infatigable obrero eldense, me dice en su tac -tac ms, muchos ms, que estos datos que tengo a mano: 550 fbricas, 6.500 obreros, 20.000 pares de produccin diaria. Sin el afn, voluntad y trabajo que expresa el tac -tac del martillito no sera Elda la ciudad pujante y triunfal. Martillito de Elda, este humilde cronista te eleva al escudo de la ciudad! 168 Escritos de Jos Capilla sobre Azorn y Mir (FOTOGRAFA ARCHIVO J. CAPILLA) FOTOGRAFA TOMADA EN EL CASINO DE ELDA. DE IZQUIERDA A DERECHA, DE PIE: JOS FRANCS, MAXIMILIANO GARCA SORIANO Y EMILIANO VERA; SENTADOS: ANTONIO GONZLVEZ, JOS CAPILLA Y CNDIDO AMAT. TODOS ELLOS REDACTORES DEL SEMANARIO INDEPENDIENTE !DELLA. 169 Julio A. Capilla Bellot (FOTOGRAFA ARCHIVO J. CAPILLA) (DE VICENTE BERENGUER) EN LA REDACCIN DEL SEMANARIO IDELLA FEBRERO DE 1928 SENTADOS: EMILIANO VERA ANTE LA MQUINA DE ESCRIBIR Y MAXIMILIANO GARCA SORIANO CON LA PLU MA EN LA MANO Y, DE PIE, Jos CAPILLA. 170 Escritos de Jos Capilla sobre Azorn y Mir (FOTOGRAFA ARCHIVO J. CAPILLA) FOTOGRAFA HECHA EN JULIO DE 1927 EN POLOP DE LA MARINA. GABRIEL MIR POSA ANTE EL DIBUJANTE OSCAR PORTA Y EL REDACTOR DE IDELIA JOS FRANCS. 171 Julio A. Capilla Bellot GABRIEL MIR JUNTO CON JOS FRANCS, REDACTOR DEL SEMANARIO IDELIA, EN JULIO DE 1927, EN POLOP DE LA MARINA. 172 Escritos de Jos Capilla sobre Azorn y Mir . . . A ft.), . 11 / iy0.4.4k1 1-14.Z4,....11 44 1 -^ .*-, 0. P-104 s.. 44...,t...1.1.1 4.0 ra Aida - (ro. , /44 v..2 )41 5. 4. , .4 ! ,14vi por 7 ta..4~1, r .14 51,o I ro. o 4 Po:u,. wo... t.& y.too:400. ~Zoo .3 4 . h o-~o l..( J- 4..LIL.J. J. L .L., )4 I. O Ltto. 14. Zor eto:o. 6 4 1 . o ./ CL ^4~ o..1 d . 1 4 ad 54 l (1 ^ . 4/ , toe-s, -lo-, 94 01 2 t M. so , Ir 764 34Zi, 3-,ZA-U artino.444-s; ; 7 .go. to...Lot o ,141 144: 1 1. 0 .. Ftif, , o to -r-117-ewa , di,~ 0,(44 ) 7 ) . 14 7 IMAvi C, ,1* : 5:144./ . S v. /-e 1~1 1 914 i ..4.444 . 144 l fo.4414. ir 4 . 1 11 11 37 14( ta)&114,u, it tz 2 6. lo (vi...0 4 4 -vi .1^41.u . o: 4 ta. -v It.ta~g .1 41 7 NOTA. CUARTILLA AUTGRAFA DE SEORES DE 1800... PRIMERA DE LAS TRES QUE COMPRENDE ESTE TRABAJO DE GABRIEL MIR, PUBLICADO EN EL NMERO 82 DEL SEMANARIO /DELLA, ELDA, 3 DE SEPTIEMBRE DE 1927. 17 julio A. Capilla Bellot IMPERATIVOS DE AMOR A 1 C) EN EL VIGESIMO ANIVERSARIO DE SU TRANSITO por RIJO. 0.A PIO A las, alas anglicas, des plegad, y a Gabriel Mir nuestro mensaje do gloria llevad. Campanas, campanitas en las espadanas de los pueble citos marineros, por la ascensin de Gabriel Mir, sonad. Cielo, tierra y mar mediterrneos, la imagen de Gabriel Mir reflejad. Avecinas del cielo, abejas, lagar tijas, hasta los solitarios caracoles, rayos de sol a Gabriel Mir enviad Flora, del olivo, almendro, vid y laurel, olor y sabor de su Levante a Gabriel Mir dad. Velas, blancas velas al viento, por los confines del mar de Ulises, el nombre de Gabriel Mir lanzad. REVISTA DAHELLOS LETRAS ELDENSES JUNIO 1950 - ELDA. Mujeres, las humildes, las recata das, las laceradas, con pudor y pri mores por Gabriel Mir pintadas, por l, cantad. Hombres, los que le heristeis, los que le amasteis, con la obra de Ga briel Mir comulgad. Todos, humanos, bestias, elemen tos, a Gabriel Mir, otro santo de Asia, santo hermano llamad. Y por su ruta recoleta, de sacri ficio, en pos de la belleza, loas a Gabriel Mir elevad. 174 Escritos de Jos Capilla sobre Azorn y Mir VIUDA Or (3/1.1.11111. hope6 k.o. 5 e 4z ) nk, O1L tonZ, eta. to tm5 1 5 sk J.. LO 1 -4 oL 4.1.41; V - tn R.4%. 51 , 1a. 11.1.tM1t4. , L. S q Yi QAMLu t ; )1/U. Julio A. Capilla Bellot Jos , (arida -rd4 t;ei :z4 45-o 2 dos, )1 . fr L-: Ct. 0....v,( , I cit 41.; lju.e 1 le te ,..e, 4 c j & t....t 3 aa...e Pot s e. as a.olt ( Cc ij a 11,144 a.:: r e t.! 14 , Z hdl- L ,4 10 / -) Lit r rte cm -cc do , Juba -e (te .r `, t vt.-rcoi a t- an r4 4 p., t r la 1.4 A A: 34 . G.: e /..N.L. 31-0 -14-7 ., 7 La -p -.4 2 Vbarz kJ e di .$ L pa./ tvgrif,a,. Pi r JL .... 7 14 6.. 41.4 -C. a r -41 . e 9 11 C-. ; I ..Gue i-ne.... ..ii, r 1....4 V C 4. IL, r,,x, ..... A. 1 ci........4 G t.... n. 1 . 4.; 1 : j v e e./...., ci.. 17, ... rz o u A( ,...... ...... i_d.w.. f ,.., C e Lo, ,,, 1...L.7, ,..e...d.,, ,.., ,,,..... ,.., , e , Z, ,-... I .,,,, 1... .4 4 44~ 5,-. c r f r a.....--1 7 , , Ud 4......4-.. Lart. H 1.-4 : t 176 Escritos de Jos Capilla sobre Azorn y Mir 14 dA.1( ji ~1; Imj,..4 PU). h CA44.toev , ir 7Y 501; Cdttlitid -tre d 4 ARO I . 1V0 J Ref. _ _ t; M il fr . ti -te; i.j Amos 4 1 4. 4.LV,$I D kat, 1 GL.t tkp c. 1:4 41 jU. rut, 1.w aL 4, 4 h - h4T)r;14,.. raA. 14 , rb 10.1.: si L4.4. fi pe...44.t 14.444 ; YA . CO, v4 1 1; b : , ic.is I C A CLA I 14.~ 4 (3 IA.4.44.1 41Zir ( 4. t (4 1 4 cC: PM. la ) r tA 14- r 4. al. ; bio,..4^0q (LA 5114^i 24 ) tia 1.40. 1,4 . ~I 44-0 1 MAA.4.: Ccid. c* 4. . pi- ovr..... 1 a LA se de eirx. v 4 i&ILi4 CAk AA C,(14 IK-1:111( dt~id h ( - 4 ! 77 Julio A. Capilla Bellot EDUARDO ZAMACOIS r (0 -r E L t ra(( r _ r -r/ 47A EDUARDO ZAMACOIS, NOVELISTA, EVOCA EN ESTA CARTA, CON NOSTALGIA, SU POCA DE DIRECTOR DE EL CUENTO SEMANAL. EL 6 DE MARZO DE 1908 SE PUBLICO LA NOVELA DE GABRIEL MIRO NOMADA, PREMIADA EN EL CONCURSO QUE EL CUENTO SEMANAL CONVOCABA PARA NOVELAS CORTAS: EL PREMIO FU EL ESPALDARAZO QUE CONSAGR A MIR COMO ESCRITOR. ZAMACOIS COLABOR EN EL SEMANARIO !DELLA, AL IGUAL QUE D. RAFAEL ALTAMIRA, GMEZ DE BAQUERO Y OTROS. 178 Escritos de Jos Capilla sobre Azorn y Mir A calsre, Hoy domingo a 25 de novieabre del 942. Don 754 Cepilla Beltrn. en Monovar, calle Mayor 0. 14$. Amigo mo: Reolbi anteayer en atenta carta del IV, y me hered enterar me por ella de que un alicantino, oanterrineto de *Asarlas, reepordabe al REVI STA MUEVA, mis intervenoiones en los primeros pasos de los searitoree llama dos de la Osnerselon del 943, mi mAle, le airees!~ de mi *asa y harta mi viejo pesnbelmo TALMAD/M DE OLIVA!. per cuyes obres he ~tito verdadera adtiracion. Todo eso y maa lo *asocia Martnez Ruiz pero se ha vuelto fleco de memoria, de tal nodo, que no cita mi revista, al al tertulia, al mi nom bre, que tantas veces elogia con la pluma y en letra de impreata, en su inte resante y reciente librito MADRID. So lo dije de palabra un die qu me Iroll* oil con e/, y me afir.6 que lo habla emrito muy deprisa, y que ea otro estu dio literario de la ipoea enmendara su olvido: Por ahora no hubo lugar. Tengo de Marin el ooneepto que artistica y humanamente marees, y u na verdadera esti:sacian, desde que Peinero lo present me al casa, donde en traba y sella corrientemente a su conveniencia y a ad plasme. Yo no pude per aitirme otro tanto en la muy* porque, desde que la tuvo en regla no me la o frecib. Supe que se habla casado mucho tiempo despues de la boda. Eartiees Rulz cesado me nereci anomala o error, porque su earacter ers de solitario -como el nio-; pero tembien yo me cas, de modo que no pude asombrarme; y ade els que ea Deportaba si vivimos tan distanolados. Y aludo a esto, porque ..001110 a. parece que su leetrIa0 . 13) e roisementer~ ea 211 el mo , en al prOiNallt. Lamento no poder transferirle leformes y documentos que le fuerte titilee pera su propdsito; pero es el capo que publiqu ya ea SORI3MT2 (revista de lujo, malogaradoenando se convirti en semanario) tres eal4Sulos de un libro que rotul (y ocultan* redactando) LA LUXADA OMMIDACIOW DEL PD, donde aparece Esplines Ruiz con un *erector social inferior al de Unamuno y Meestu y muy por *mima del de Melle Ineln, Seroja y Denabente. Solo puedo brindarme a escribirle un prlogo -mi le plaes- o un epflo logo; cuando hays visto su obra. Muy atentamente le :peluda el an ciano t L LUIS RUIZ e Laivra. Ta. Pafr XLILID ~,..,~ Luis Ruiz CONTRERAS, LA NODRIZA DEL 98, EN ESTA CARTA SINTETIZA SU PECULIAR PERSONALIDAD. AL IGUAL QUE BAROJA, NO TIENE PELOS EN LA LENGUA A LA HORA DE DECIR LO QUE PIENSA. 1 79 Julio A. Capilla Bellot 30.42 CJ.PILLA Enna ~or o 143 IONOTA 8 (Alicante) .qrgrentmearie ***** =~:a %urea C Lap.q a R e f ,0 / 2 C c9,1 2 de Diciembre de 1942 SIR. D. 1,1113 RIJL1 COITURA3 Secritar. Lista. 713* pral. XADEID Bespetable galgo mos Creo poder oensiderarle amigo despus d honrarme con su& estimadas le tras de 22 del finado noviembre. Sebe que he experimentado une verdade ra Satisfaccin al leerlas. Aun en su avanzada edad,, es Y. un hermoao ejemplo de nobleza y generosidad, en contraste oca loa jvenes - as se conaideran- escritorel de hoy, que, en el terreno literario, son todo reserva y cllculo. Cun falta de almea amplias y oomprensivas, como la suya, 411 halla la sociedad literaria. Gracias, pues, don Luis, por en atencin& ad requerimiento. Permtame que me presente. No soy mi profesionsl de las letras, si por tal hemos de entender a quien viva de ellas. Cultivo las letras ajeno a todo profesionalismo y lucro. As he escrito cuando y como he qugri de. L1 medio de vida, modesto en eltremo, es el de empleado burocratioo en tartas meroantiles. En mi cuarentees de vida, he seguidc.00n todo de talle el desenvolvimiento enrquico y mezquino de las letras espaLolas en lo que va de este trgioo siglo. E* leid, con Insaciable curiosidad, cuento he podido, que es mucho dados ni &Basaos medios . Con harto sa crificio te renrido unos oientoe de volumenas que son mi solaz, mi con suelo y mi estfzulo espiritual. li e escrito poco, y este poco desperdi gado en diarios, semanarios y revistas de provincias * publicaciones de impuleo y ruta quijotescos. Y desde mi aislamiento, he tenido la satis faccin de tratar a distinguidas figuras de nuestras letras. Conozco gran parte de la labor literaria de V., como crtico y tambin oomo traduotor de contemporneos franceses, especialmente sus magnficas traducciones de las obres del inolvidable Anstole Franre. r4empre he vis to en V. un espritu inquieto, curioso y batallador, derramando genero sidades e iniciativas en el mezquino y esquiado mundo litgrario cepa Aol. Y me adzira - vea en m sinceridad, jamas adulaoin -, que en su venerable ancianidad, al iniciar ni trato con V., sea V. tal cual le te nla imaginado por mis lectura, siempre con la antorcha del entusiasmo encendidaden pos de toda unifestecin artistice. Es V. admirable. Se tambin de cuanto V. hizq por los escritorea del grupo del 98. No me sorprende el olvido de Azorir en 3D V1 , .IFID. Este levantido, hijo de es ta ciudad, ea tan interesante en su arte literario - su manera de hacer diramos eL b blicismo-, como inconsecuente e incomprensible en su con ducta social. Le conozco y le estimo grandemente como escritor; tengo mis reservas para las restantes facetas de su personalidad. Y hablando de ingratitudes % recuerdo las de Julio Casares y de Po Baro ja para con usted. Ha leido V. las recientes memorias de este ultimo 80 Escritos de Jos Capilla sobre Azorn y Mir (SB. p. LUIS RUIZ COSTURAS 2 - X11 - 42) - 2- nee nimo, vuelta del camino, publicadas en la revista Siltan No he ledo cosa mas anodina e incongruente. Es lamentable, mul lamentables ver o estos hombres de la generacin del 98 se achican y esfuman en el ocaso de su vide. No ceben cuan importante es en la escena de la vida sa ber desaparecer por el foro, con un digno mutis cuando nada se tiene que decir. En fin, no saben morir. Pqr este mismo oorreo y en pliego aparte, le mando unas pequeeces mas. Dgnese aceptar estos pobres trabajo mos, escritos en das de entusias mo y de menos afts, por los que podre formar Juicio de mis pobres dotes literarias. Have tiempo que no escribo nada. More se me ha ocurrido pre parar u# libro sobre la vida y la obre de asorin, escritor que he seguido con tadi inters desde ince bastantes aos. Poseo toda su produocion la reunida en volumenes y gran parte de la exparcida por diarios y revistas. De sus primeros folletos, no he podido lograr CEiaIVRI, LITERA TWIA ni =CUT, IFMA0000. Tengo verlas ca rpetas con notas, re cortes de prense, retratos, dibujos, etc., es devir,material para hacer algo int, resanteya que no docto, sobre tan eminente escritor, no ol.stente lo muoho que ya se ba escrito sobre l. Esoribir el libro y, cuando Dios quieras lo publicar. Me 4abla V. de la revista ECRI2OXTE, que no oonozoo, y crea que me intere Seria conocer los captulo por V. publicados sobre 14 LlVALa CEREFUCIOX DEL 98, si V. poseyera duplicados de tales nmeros. De paso, le dir que ba tiempo que vado buscando sus =nA: DE UN rr7mianwo, sin poderles lograr. Est agotada la edicin Con estas ilneas me permito mandarle un indice o culn de mi libro en pre paracin. Ragame V. la gracia de examinarlo y devolvrmele con sus obser vaciones, acotaciones, sugerencias, etc. 2 cuanto su larva experiencia y vasto saber de la vida literaria de antano le sugiera, pues ello habr de influir en el mejor acierto de mi libro. Quisiere, don Luis, yerre honrado con una fotografa suya para tenerla en mi modesta biblioteca, junto con los libros de Trance. Y ya es much aausar de su etencAn con esta lsr*3 cDrtE,. Ser pera mi gra to placer mantener alguna correeporfuncia con usted. Le deseo placlda lon gevidad, sslyd plena. Y quien hasta ahora fu edmrador suyo, en adelante tnealo ademas por tnooudicional amigo y servidor, A,PC1 , 1yoi Ref 42 C el ( 181 Julio A. Copilla Bellot Mo jue7es a 20 de enero ddl 344. A mi reolente ardro . man* ma ~u, owtm Don Yosg Capilla, de donover. Ve usted como no le hubieran servido pare nada los datos cue me pi di -eforentas a ml treto con el futuro Azorra He leido la pgina inser t en I. IZIWOL y cree oue me Interesa de verdad. 1.resenta usted al hom bre, objeto de su est:dio, y el ambiente qUe le rodeaba, con luz y colores propios de su -rovincia. Esto es lo que debieren hacer todos los cue preten den biogrofier a sus contemporgneos; pero son mes los que inventan, confun : mitifioen. Le felicito e usted por su acierto y su buena voluntad, rec=rensLda por el n4r1to de su obre. I-norc lo usted se propone el seguir su trabajo, porque le quedan abiertos dos cardnos: o husmear en la vida madr1leta de Azorin y en SUS O br.e flo sud l hiela= 7s. y pueden hacerlo muchos con mas elementos que os te ) , o ensanchar su estudio prOvinciano, con el desarrollo de los varios csr-es sue deben acusar les personas cuya existencia usted apunte de rssld sus tendrfsmos gusto en conocer. Como vienen a Medrid, en busca de Gloria, los sud slenten ansa de ella: parece oue no hay vida en las Adm ciudades porsue nadie cuide buenamente de revelarla, pero es absurdo supo ner sus todos los valores intelectuales se madriletizan. Entre los que por felto de ambicin o por inmediata conveniencia viven pueblerinamente habrg muchos de =gritos revelentes y serie de justicie darlos e conocer. No se lo que ocurrir en Alemania o en Inglaterra, pero desde luego en rancie la provincia no sufre la desconsiderecion que en Espata. Y le culpa inicial no provino de los verdaderamente cortesanos por mecidos en la Corte sino Ce los puebltrinos -u- venan a echar memoriales de todo genero. Con los co nocimientos que tiene usted podra escribir un libro de vida literaria lo cal, interesante como novela, con la Pinture de catecteres y situaciones que reflejasen un asnecto de humanidad. T sus conterreneos lo agradeceran. Le felicito y le saludo tunistoseuzente _ /Akm.,r it y d. Capi l la oh j f e /gC O LUIA Ruiz CONTRERA TS. PR. 111WDRID EN ESTA CARTA, DE FORMA ESPONTNEA Y GENEROSA, EL AUTOR DEL LIBRO MEMORIA DE UN DESMEMORIADO MANIFIESTA A JOS CAPILLA, EL JUICIO QUE LE HA MERECIDO SU RECIENTE ENSAYO Azorn y Monyar, PUBLICADO EN EL SEMANARIO EL ESPAOL EL 8 DE ENERO DE 1 944 Y LE FELICITA POR ELLO. 182 Escritos de Jos Capilla sobre Azorn y Mir Jos Capilla Vuyor, 143 KNOW !Alicante) 26 de Enero de 1944 SE. D. LUIS BUIL CONTEIRAS Escritor Lista, 78, pral. MADRID Mi respetable seor y amigo: Grullas, muchas gragas, por sus letras de 20 del aoturiNk He experimentado intima satisfsocion por La atincin y oonsidersoin lee le ha merecido mi pobre ensayo biogrfico 120BIN Y MOOVIR,publicado recien temente en el semanario EIESPANOL. Bien si que mi trabajo, escrito a la ligera, es superficial, falto de galas literarias, por lo que tomo sus valiosos juicios como expresin de su generosidad. Haba V. notado q9e estn trastocados algunos prraCce, que hay lagunas y falta de ilacion. De haber publicado mi trabajo integrament te, hul)iera ocupado media pina mas. Sin dJda, por acoplarlo en una sola psginz, suprim:eron alguitor parrafos, apartados y tambien alguna fotogra fa. He de hacer constar que nada haba que pudier mutilar la censura o el respeto a la vida privada; pero, en aras del ajuste, hubo que sacri ficar gran parte del texto. Pero, en fin, me doy por satisfecho, Ya que, as y todo, me ha proporcionado felicitaciones tan gratas y valiosas co mo la de V., escritor experto y sincero en las lides literarias. Esta trabajo est concluso, ya que, come indica su ttulo, aORIN Y VCNOVAR, se limita a las relaciones del mentado escritor con su cuna. Verdaderamente, de su vida madrilea, en aquellos aos que v. fundara REVIST;. NUEVA, pone datos tengo, si bien conozco las fuentes. Desde luego, es V. quien ras datos y notas ha de poseer. Por eso Ilcudi d V., reconozco que oon toda ingenuidad, sin pensar que su atencicn ha bra de distraerle de sus trabajos y tareas lietarios, que hoy deben de ser abrumadores para todo profesional de las letras. Yo, don Luis, no vivo de la pluma. Siempre tuve miedo a esta aventura, que aventura es en Espaa intentar vlvir de las letras. Cuando se le ve a V., con sus ochenta aos, y a Amorin, traspuesta la seten tena, afanarse intensamente en la labor literaria, cuando tan bien gana do tienen el dal. canso, que pensar de las letras. Solamente los desapren sivos, los salteadores de escenarios; los que del humor hallen gansada y de la novela burdo folletn, pueden vivir. Los dems el reconocimiento y la pequea gloria en circulo de corto radio. Se triste, pero es as. Vivo amarrado al pupitre mercantil. S9y un burcrata del va rios a varios. NO da esto pera vivir, bien lo se; pero no se estruja tanto el cerebro ni se quiebran los nervios. Mi amor a las letras lo sa cio ma leyendo que escribiendo. Estos son mis ocios. Se escrito) poco, muy poco, en diarios, semanarios revistas. Mace poco que trac el guin de un libro tlogrIflco y tibliografico sobre Asurin - gulon,que tuve el gusto de someter a y.-, libro en proyecto que Dios sabe cuando tendr1 tiempo y sosiego para llevarlo a cabo. Se ha complicado mucho a vida, don Lula, y apenas queda margen para el excelso goce espiritual. Y, lu cima, se tiene por loco a quien anda con libros y papelee. Y, algo mas _ --- ---- - - _ _ _ ------- -s G u E_ - 183 Julio A. Capilla Bellot ( Don Luis Ruiz Contreras - Yadrid - 26 -1- 44 - 2 -- - - - - - - - - - - -- -- duro, se le consilcra como ser intil. El Arte ex ge martirio, tanto o mas que la Religin. Y no se puede aoeptar el martirio cuando se Lic. nen una esposa y unos hijos que atender. Por estas latitudes, desde Cervantes a Valle -Incln, literatura es hambre y miseria. _Sigo con todo inters las EEMOBIIS que V. viene publicando en EL EWAY.CL y que me interesan, especialmente, en cuanto se refieren los escritores llamados- del 98. Presumo qu sella V. muchas cosas. Ya sabr V. que se ba publicado be poco un lujoso volumen de CEBAS SELECTAS de morn, del que me matarla conocer mus impresio nes. Tambin han aparecido dos 1112ros inditos de Azorin: XL WEB YO, uno, ypel otro, CARRIZO. Seria muy de oeLebrar que Y.hablase de estas obras. Perdname la extempln dada a esta carta que le dirijo oon todo afe9to y consideracin. Seria para mi grato placer mantener oo municacion oon V., que tanto puede enseMerne; pero, comprendo que es to es mucho pedir. Le reitero ml gratitud por su oerta,asi como mis respetos y consideraciones,; le ruego me tenc,z1 por su argo y servidor ARCHIVO] J Capsilek Re A 2( C EN ESTA CARTA, JOS CAPILLA, EXPONE EN POCAS LINEAS, LA AGONA DE SU VOCACIN LITERARIA, ANTE UNA REALIDAD FALTA DE ESTMULOS Y UN AMBIENTE POCO PROPICIO PARA EL CULTIVO DE SU PARCELA DE ESCRITOR. 184

Escritos de José Capilla sobre Azorín y Miró. Introducción, selección y notas por Julio Capilla

Más documentos

Cordabarras y Sherpajoëlettes

Elda durante el primer tercio del siglo XX

40 relatos para no olvidar

Manuel Serrano. Memoria autobiográfica

64 poemas de ajedrez

Cien años de presencia carmelita

Memorias de un presidente. Historia del Centro Excursionista Eldense 1956-1981. Tomo II

Antología poética

Bloqueador de anuncios detectado